You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
16:15-19, era Cristo quien dijo: “Bienaventurado eres, Simón, hijo de Jonás, porque no te lo
reveló carne ni sangre, sino mi Padre que está en los cielos”. Cristo en ese tiempo tenía un cuerpo
de carne y sangre, y Él dijo a Pedro que carne y sangre no se lo había revelado, sino el Padre
Celestial. En respuesta a Juan 14:5-9, Cristo explicó que Él y su Padre, estaban separados, en el
versículo 12, cuando Él declaró: “De cierto, de cierto os digo: El que en mí cree, las obras que yo
hago, él las hará también; y aún mayores hará, porque yo voy al Padre”. Ahora, ¿Porqué iría Él a
su Padre, si él era el Padre? Esta enseñanza es abominable. Esto habría sido algo sin sentido para
Cristo, en el capítulo 26 de Mateo, orar al Padre y pedirle que retirara la amarga copa, si Él era el
Padre. Que burla habría sido orarse a sí mismo en Getsemaní, siendo Él mismo el Padre. 2
Después de su resurrección, Él dijo a María Magdalena, “No me toques porque aún no he subido
a mi Padre.” (Juan 20:17.) También Jesús dijo que solo su Padre en el cielo sabía cuando Él
regresaría. Ahora, si Jesús realmente era el Padre, ¿Porqué Él no sabía cuando iba a regresar?
Además, cuando Cristo fue bautizado una voz de los cielos dijo: “Este es mi Hijo Amado, en
quien tengo complacencia.” (Mateo 3:17.) El ejemplo del Padre y del Hijo como dos personajes
separados es tan obvio y tan claro que queda fuera de toda discusión. El credo del cual nació esa
doctrina de la Trinidad fue creado por un grupo de hombres no inspirados que vivieron en el siglo
III d.C. los cuales se reunieron en Nicea al mando de Constantino, un adorador pagano. Este
credo del cual nació esta doctrina fue después revisado para añadirle por “un santo canonizado”
del Catolicismo Romano, San Atanasio, quien puedo admitir es considerado “inspirado” por la
acusación en general. Me gustaría poner el credo a prueba esta tarde, después de contestar estas
supuestas contradicciones del Libro de Mormón. Estableceremos más allá de toda duda que
Jesucristo y Dios son dos personajes separados y distintos, y ahora explicaremos lo que se quiso
decir en el Libro de Mormón, y lo que quisieron decir los Tres Testigos. ¿Sabía usted que la
Biblia se refiere a Cristo como “El Padre Eterno, el Dios Todopoderoso?” Isaías 9:6 nos dice:
“Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su
nombre Admirable, Consejero, DIOS FUERTE, PADRE ETERNO, Príncipe de Paz.” Ahora,
¿Cómo era Cristo el Dios Fuerte? Colosenses 1:16 nos enseña: “Porque en él (Cristo) fueron
creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que hay en la tierra, visibles e invisibles;
sean tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo fue creado por medio de él y
para él.” Por lo tanto Él es el Padre Eterno de esta tierra, y un Dios Fuerte ya que Él es el creador.
Cristo estaba con Dios el día de la creación, por eso se lee: “Hagamos al hombre a nuestra
imagen.” Lea Génesis 1:26-27 y esto está indicado en Efesios 3:9. Ahora, lo que tenían los Tres
Testigos en mente cuando ellos dijeron que el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo eran un Dios, era
la misma cosa que Cristo tenía en mente en Juan 17:20-21, UNO EN PROPÓSITO. Cristo es el
camino, la verdad y la vida, y “aprendió todas las cosas de su Padre.” Así que véanlo, realmente
no fue una contradicción después de todo, sino una verdad revelada. Y ahora presentamos ante
ustedes una copia del “Credo de Atanasio” aceptado por la mayoría de la acusación, para probar y
producir evidencia de las Santas Escrituras, de las cuales muchas partes claras y preciosas acerca
de la Divinidad del Señor han sido destruidas, y que ellos sacaron su propia identidad de la
Trinidad.
2 Y esta enseñanza también es abominable.
9