VOZ DEL PUEBLO 4

otra de pescado, otra de plátano y
otra de pescado y comían solo 2
veces por día.
Cuando venimos Limón, lo hicimos
a lomo de caballo, se hacía 3
días. En el zapote hacíamos la primera
parada, allí había un rancho
de don Nelson Rodas, allí había
una cocina con fogón grande para
que la gente haga secar la ropa que
venía mojadita, en la candela.
Al segundo día se llegaba al Plan de
Milagro, no se llegaba más y al tercer
día llegamos a Limón. Había
mucha gente yendo y volviendo,
con un camino terrible, era solo
una pica de roca, no se como los
caballos andaban, solo en roca y
en bajada.
Se traía las cosas en alforjas y
poníamos en funditas plásticas,
poníamos víveres como maíz, frejol,
arroz, azúcar, traímos el fiambre,
el primer día comíamos papas
con cuy, el cuy era la principal comida,
también carne asada, carne
de chancho, traímos envuelto en
mantelito y nunca se dañó nada.
Parada militar, década de los 60s. Al fondo, la casa de los oficiales. hoy, Hotel
por mi hijo enfermo y regreso, encuentro
que ya están hechas nuevas
paredes y tumbados por don
Carlitos Izquierdo.
Empezamos a poner camas y a alistar
todo. Pusimos de nombre de
primerito de María Eugenia (nombre
de su primera hija), después de
residencial Limón y finalmente se
quedó como Hostal Limón.
la construcción del hostal.
También trabajó en el ejército con
grado de soldado, debía ir a entregar
los víveres a los destacamentos,
era ocho días entre ida y vuelta
con mal temporal, eso no me
gustaba y le decía pensemos en
otra cosa, el debía viajar en canoa
a Coangos y eso me asustaba, no
sabía donde era. Por eso, le propuse
poner una tienda, después del
Había un rancho de los Pauta,
de familia de la Alicia Pauta, allí
vendían comida, no se hospedaba
nada, llegamos al Plan donde Pancho
Córdoba y allí dormimos antes
de llegar acá (Limón).
En Limón pasaba don Isak Orellana
y doña Lola Galarza, la mamá
de los Helgueros, acá también estaba
don Belisario Cárdenas, él tenía
una tiendita de telas y víveres una
tiendita chiquita pero bien surtidita.
Donde hoy es el hotel de la
Lola Merchán era de Luis Orellana
y la Victorita Peralta, acá donde
está Fanny Punin era casino de los
oficiales del ejército y de la Lola
Merchán más abajo era el batallón
militar (Hospital Nuevo).
Mi esposo fue de la idea de traer
unas camas de fierro, dos por cuarto.
Cuando me fui a Gualaceo por
El hotel era lleno de gente. Los
huéspedes eran respetuosos, nunca
se perdió nada, más bien ahora
se pierden las cosas. De aquí a
Méndez se hacía dos días de camino,
apenas ancho para las patas de
caballo. Entonces mi esposo cogió
contrato para empedrar el aeropuerto
de Méndez, tenía que llevar
gente para sacar piedra del río para
empedrar, con esa plata seguíamos
hotel. Recordando también de un
abuelito que decía: “la tienda da
hacienda la hacienda no da nada”.
Ya cuando la trocha se abrió a
Méndez, venia tanta de gente con
ganado para vender de aquí afuera
(sierra, costa) y hasta el corredor
del hotel se llenaba de gente.
Ponían zapatos al ganado que
hacían con cuero y tiras y hací los