II Facolta Di Architettura - Universidad de Belgrano

Montserrat e San Nicolás
“Buenos Aires è una città tanto sconfinata che
nessuno la può conoscere davvero”.
Jorge Luis Borges
l
’epicentro si trova in Plaza de Mayo, antica Piazza Maggiore della
città, che dal 1580 è lo spazio simbolico della città e della Nazione.
E’ il sito di incontro delle manifestazioni del paese, testimone di gran
parte delle situazioni importanti che coinvolsero la storia dell’Argentina.
Anche oggi il popolo continua ad esprimersi in questo luogo per le più
diverse questioni.
Attorno alla piazza si trovano le più importanti sedi del governo centrale
della città, nonché le maggiori istituzioni finanziarie del paese e le
più importanti sedi episcopali.
Sul lato ovest della piazza si trova il Cabildo, antico municipio spagnolo
in epoca coloniale. Nel tempo ha subito diverse trasformazioni, dovute
soprattutto ai cambi di funzione. Oggi è sede della Commissione Nazionale
dei Musei, Monumenti e Luoghi Storici nonché Museo Storico
Nazionale del Cabildo e della Rivoluzione di Maggio. Nella memoria
degli argentini, il Cabildo si consolidò come uno dei simboli nazionali
relazionati con l’Indipendenza.
Opposta al Cabildo, nel lato orientale della piazza, si trova la Casa del
Governo o Casa Rosada, chiamata così per il suo colore. In questo
edificio coesistono diverse influenze come le mansarde francesi,
le logge e finestre concepite da architetti nordici, e lo stile classicista
dell’architetto italiano Francesco Tamburini. Il valore storico di questo
edificio è molto grande, è infatti il centro di potere dell’epoca indipendente
e per questo fu dichiarato Monumento Storico Nazionale.
Nel lato nord della piazza incontriamo la Chiesa della Santissima Trinità.
Il gran portico neoclassico disegnato nel 1822 da Prospero Catelin è
la facciata di un tempio più antico, che sicuramente subì molte modifiche.
La pianta definitiva fu disegnata dall’architetto Antonio Masella
nel 1754. Tra le importanti opere d’arte che si trovano al suo interno, si
distinguono l’altare maggiore, opera di Isidoro de Lorea, la selleria del
presbiterio e le immagini religiose della Vergine de los Dolores e del
Santo Cristo di Buenos Aires. Nella zona che si trova a nord
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“Buenos Aires es una ciudad tan infinita
que nadie puede conocerla realmente”.
Jorge Luis Borges
El epicentro se encuentra en Plaza de Mayo, antigua Plaza Mayor
de la ciudad, que desde el 1580 es el espacio simbólico de la ciudad
y de la nación.Es el sitio de encuentro de las manifestaciones en
el país, fue testigo de las situaciones más importantes que implicó la
historia de la Argentina. Hoy en día la gente sigue encontrandose en
ese lugar para los temas más diferentes.
Alrededor de la plaza se encuentran las más importantes sedes del
gobierno central de la ciudad, las mayores instituciones financieras en
el país, y las s más importantes sedes episcopales.
En el lado oeste de la plaza hay el Cabildo, antiguo municipio español
en el período colonial. Con el tiempo ha sufrido varias transformaciones,
debidas principalmente a cambios en la función. Hoy es sede
de la Comisión Nacional de Museos, Monumentos y Lugares Históricos,
Museo Histórico Nacional del Cabildo y de la Revolución de Mayo. En
memoria de los argentinos, el Cabildo se ha consolidado como uno
de los símbolos nacionales relacionados con la Independencia.
Frente al Cabildo, en el lado oriental de la plaza se encuentra la Casa
de Gobierno o Casa Rosada, llamada así por su color. En este edificio
coexisten diferentes influencias como áticos franceses, galerías y ventanas
diseñadas por arquitectos de los países nórdicos y el estilo clásico
del arquitecto italiano Francesco Tamburini. El valor histórico de
este edificio es muy grande, es de hecho el centro de poder durante
el período de independencia y fue declarado Monumento Histórico
Nacional.
En el lado norte de la plaza encontramos la Iglesia de la Santísima
Trinidad. El gran pórtico neoclásico diseñado en 1822 por Prospero
Catelin es la fachada de un templo más antiguo, lo que sin dudas sufrió
de muchos cambios. El plano final fue diseñado por el arquitecto
Antonio Masella en 1754.
Entre las importantes obras de arte que están dentro de él, se distinguen
el altar mayor, obra de Isidoro de Lorea, la talabartería de la