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anuario | Ed. 120 | enero 2011
Ed. 94, Junio 28, 2010 PACTO CON EL DIABLO
Primero, el alcalde Mauricio Fernández
rotagoniza un acalorado debate con
su cabildo, al que amonesta en público
por haber autorizado un aumento en
las densidades para la construcción en
Valle Oriente. Manotea la mesa de la sesión
y fustiga a los regidores. Los acusa
de ignorantes y de comprometer el futuro
del municipio, ante el riesgo de una
sobredemanda de su infraesturctura y
servicios. Pero una investigación muestra
que el alcalde firmó el documento
que eleva las densidades. Fernández había dicho estar contra la
medida, pero surgen dudas sobre si la discusión fue una cortina
de humo para no aparecer como el responsable, especialmente
cuando entre sus promesas de campaña estaba “blindar” el municipio
en materia de desarrollo urbano.
El empresario Eudelio Garza Lozano, mejor conocido como “El
Diablo”, será el principal beneficiario, pues posee tres cuartas parte
de las zonas que aún faltan por desarrollarse en Valle Oriente,
una de las áreas de mayor plusvalía en todo México.
Al aprobarse el aumento, en mayo pasado, el empresario coloca
decenas de autorizaciones en el municipio, sabiendo que aun si
la ley era revertida, las autorizaciones estaban garantizadas pues
entraron cuando el Reglamento de Zonificación del municipio ya
se había reformado.
Ante ello, Semanario Info7 se pregunta si hubo o no un pacto
entre el alcalde y “El Diablo”.
Ed. 95, Julio 5, 2010 Nuevo León, unido en la reconstrucción
Nuevo León es sacudido fuertemente
por el peor huracán de las últimas
décadas. Miles de familias reviven los
amargos recuerdos de Gilberto (1988).
Pero con Alex, que golpea el último día
de junio y el primero de julio, las precipitaciones
son por
más del doble.
Más de 7,000
familias son desplazadas
por las inundaciones,
la infraestructura de todo el
estado se colapsa. Monterrey y su área metropolitana sufren daño
profundo y más de la mitad de las personas no pueden ir a sus trabajos
debido a la destrucción de calles y avenidas.
Es la peor tragedia de la ciudad en décadas. Alex también
deja una lección importante: los organismos de protección civil
El embate del Huracán
Alex despierta, otra vez, la
unión y solidaridad regias
en el estado están mejor preparados y ayudan a que la cuota de
muertes sea reducida.
Se confirma la utilidad de grandes obras de infraestructura
como la presa Rompepicos, que resultó clave para atenuar el impacto
de las inundaciones.
Además, el huracán Alex logra, una vez más, extraer lo mejor
del pueblo regiomontano, su solidaridad,
únión y pujanza para hacer que el estado se
vuelva a poner de pie.
La reacción de autoridades y sociedad
fue rápida y firme, permitiendo desbloquear
accesos a diversas comunidades, ayudar a los damnificados e
iniciar la reconstrucción.
A la postre, el proceso le permitiría a Nuevo León acceder a
fondos federales extraordinarios para la reconstrucción, lo que
imprimiría un dinamismo adicional a la economía estatal, que ya
de por sí avanzaba en su recuperación.
Ed. 96, Julio 12, 2010 La obra del siglo
El huracán Alex puso a prueba una obra
muy poco publicitada, la presa Rompepicos,
construida durante el sexenio de
Fernando Canales Clariond. Especialistas
concluyen que el muro, lleno hasta
tres cuartas partes de su capacidad
durante las lluvias, fue
fundamental para evitar
una devastación mayor.
Los regiomonanos
habían presenciado la
destrucción causada
por el desbordamiento del Río Santa Catarina y
las dos avenidas que lo flanquean en su cruce
por Monterrey (Morones y Constitución). Pero la presa había impedido
que el desastre alcanzara proporciones aún mayores.
Los especialistas urgen a entender la lección: a Nuevo León
La Rompepicos fue
un proyecto salvador;
la devastación por
las lluvias pudo
ser mucho mayor
le hacen falta más obras con visión de estado; grandes proyectos
de infraestructura que cumplan su utilidad con beneficios directos
para el bienestar y la seguridad de la población, aunque no
sean del todo visibles ni políticamente capitalizables.
La presa Rompepicos, de $511 millones de pesos, había sido
un proyecto salvador que en su momento apenas obtuvo unas
cuantas líneas en los periódicos. Ahora, consagraba
la categoría de estadista del exgobernador
Canales Clariond, quien encargó el proyecto a su
titular de Obras Públicas, Óscar Bulnes Valero.
Sólo durante los dos días de lluvias, Nuevo
León recibió el equivalente de agua de un año
completo. Todas las presas se llenaron a su máxima
capacidad y los destrozos ascendían a más
de $20,000 millones de pesos. Ahora, los expertos preguntaban,
¿cuánto pudo evitarse si los otros gobiernos hubieran invertido
en grandes obras? El cuestionamiento aún está vigente.
Óscar Bulnes Valero, secretario
de Obras Públicas de Nuevo León
durante el sexenio de Canales
Clariond, fue el instrumentador
del proyecto de la Rompepicos
Oscar Bulnes Valero
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