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Presentación<br />
Los textos periodísticos tienen como virtud ser un espacio vital<br />
para la denuncia y la resolución de conflictos; los textos literarios,<br />
en cambio, además de ser una tribuna para la denuncia de los<br />
conflictos representados, incorporan la voluntad del autor quien<br />
aporta, según sea el caso, la solución que considera más ética y<br />
moralmente necesaria, todo gracias a la ficción, que puede ser<br />
un estandarte verosímil de lucha social. Este carácter nivelador y<br />
reivindicativo de la narrativa, sujeta a la intencionalidad del autor,<br />
la hace refugio de no pocos escritores y lectores por el compromiso<br />
político y social que asumen los primeros, y por el carácter<br />
moral con el que se identifican los segundos. Al reflexionar en<br />
las competencias necesarias para recorrer esos dos territorios<br />
discursivos, reconocemos en <strong>Miguel</strong> <strong>Otero</strong> <strong>Silva</strong> a uno de los<br />
periodistas y narradores más importantes del siglo xx venezolano.<br />
7<strong>Miguel</strong> <strong>Otero</strong> <strong>Silva</strong><br />
Cuando <strong>Miguel</strong> <strong>Otero</strong> <strong>Silva</strong> se inició como escritor la dictadura<br />
de Juan Vicente Gómez sometía a Venezuela al asedio de<br />
las transnacionales del petróleo, filiales del imperialismo<br />
norteamericano. En ese entonces, pasábamos de ser una cultura<br />
agraria a una minera, rentista, y empezaba a transformarse la psique<br />
del venezolano arrastrando no pocos resabios. Tuvo la necesidad<br />
temprana de escribir y lo hizo con animoso color local, con un<br />
lenguaje directo que notamos en sus diálogos y descripciones,<br />
siempre justos, hermosos, pertinentes, impregnados con frecuencia<br />
de un picaresco sentido del humor.<br />
<strong>Miguel</strong> <strong>Otero</strong> <strong>Silva</strong> plasmó las angustias de un pueblo sometido<br />
a los negocios de la familia Gómez, la oligarquía terrateniente<br />
y los extranjeros que manejaban la tecnología del petróleo. Sin<br />
embargo, los cambios empezarían a generarse gracias a un grupo