INFORME DE LA VERDAD SOBRE EL DESASTRE AMBIENTAL EN CHOROPAMPA

LOS ACONTECIMIENTOS DE CHOROPAMPA
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38 años, es casada, con una menor hija, la niña Estefany Abanto Arribasplata de 6 años de edad.
La Sra. Luisa y su niña han sido las personas más afectadas por la intoxicación mercurial.
Las fuentes 2, 5 y 7 refieren que, la Sra. Verónica Ruiz Portilla, residente de Choropampa,
quien alquila la casa a la Sra. Luisa II. Arribasplata OBSERVACIONES Mestanza, Obstetriz del Puesto de Salud de
Choropampa, ha referido que en su testimonio a la Fiscal de Turno Dra. María Fernández, que la
Sra. Luisa Arribasplata tuvo en una botella de plástico, una cantidad de mercurio mezclada con
1. tierra, Hubieron y procedió fallas a estructurales echarle agua en para las normas separar de el mercurio seguridad de la misma, empresa luego minera vertió Yanacocha: el agua en el
piso a) de En tierra la planta de su se habitación. envasó mal Otro los balones factor que contenían habría contribuido mercurio; a su intoxicación es que el
mayor b) derrame En el trailer de mercurio se cargaron ocurrió mal delante los de balones, su casa (según (1.50 mts.). el Ing. (Fuentes Gavidia, 6, 7 Gerente y 10) de Minera
Yanacocha, los balones fueron puestos en la cola de la carreta del trailer en donde hay mayor
vibración y movimiento).
c) Cuando el chofer de RANSA se percató del derrame de mercurio no actuó como debía: dar
cuenta del hecho a la Policía de Magdalena y los puestos de salud de la zona para que
procedieran a declarar inmediatamente la situación de emergencia (o no sabía de la toxicidad
de la sustancia o quiso ocultar el hecho).
d) El supervisor de RANSA actuó con negligencia al no poner en aviso a las autoridades del
lugar del grave peligro que corría la población.
e) Es importante que se identifique al “gringo” que al día siguiente del derrame fue a pagar S/.
15.oo por recoger el mercurio con escobas, y que luego regaló las escobas a los jóvenes que
hicieron esa tarea. Hay aquí una responsabilidad penal ineludible.
2. Minera Yanacocha actuó tarde y mal. No tenía un plan de contingencia o quiso ocultar la
gravedad de los hechos minimizando deliberadamente los acontecimientos.
a) Los Sres. Marcos Valdez, Peter Orams y Arturo… de Minera Yanacocha, informados del
accidente, no advirtieron de la gravedad del hecho a la población ni a las autoridades locales,
y por el contrario, expusieron gravemente a la población al ofrecer públicamente comprar el
mercurio. O se interesaron más por recuperar el mercurio que por la salud de la población; o
acudiendo al empleo de la población para recoger el mercurio quisieron evitarse los gastos
que demandaría hacerlo técnicamente; o quisieron ocultar rápidamente las huellas del
desastre sin percatarse del grave riesgo al que exponían a la población y a la grave
responsabilidad penal que conducían a su empresa.
b) Desde un inicio, y rubricados por opiniones médicas vinculadas laboralmente a la propia
empresa, se minimizó las quejas de salud de la población y las preocupaciones del propio
personal de salud de la zona, sin proceder inmediatamente a tratar el tema de la intoxicación
mercurial aguda (si creían que se trataba de una enfermedad viral coincidente, lo menos que
les tocaba hacer era confirmarla o descartarla vía análisis clínicos) con lo cual expusieron
criminalmente a la población, más grave aún tratándose de una población afectada que en su
mayoría era infantil.
c) No procedieron a evacuar a la población mientras duraba el peligro de intoxicación mercurial
porque eso costaba mucho; porque pensaban que todo estaba bajo control al amparo de sus
diagnósticos médicos equivocados; o porque ese era un precio demasiado alto para su imagen
institucional (“la mina que no contamina”).
3. Durante todos los días en que Minera Yanacocha actuó con negligencia en el recojo del mercurio
(aproximadamente 10 días: del 02 de junio al 12 de junio), hubo lluvias en la zona lo que junto al
tema de la temperatura abrigada de la zona, agravó el fenómeno de la vaporización del mercurio.
Por más de una semana, importantes cantidades de mercurio (más de 150 kgrs.) en forma de
llamativas “bolitas brillantes” aún quedaban esparcidas por la vía principal que atraviesa el
pueblo de Choropampa. Los pobladores refieren que por espacio de más de una semana, las
“bolitas de mercurio” eran infinitamente fraccionadas por los vehículos que a diario circulan
intensamente en la zona lo que provocó un mayor esparcimiento y fijación de la sustancia tóxica
en el lugar. Es claro que ni la empresa Minera Yanacocha, ni el Ministerio de Salud actuaron
rápidamente para prevenir la intoxicación masiva de la población.
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30/07/2005