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mensapiens - Mensa Argentina

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- tesoros ocultos


- 2 - <strong>Mensa</strong>piens


MENSAPIENS<br />

Revista Ofi cial de <strong>Mensa</strong> <strong>Argentina</strong><br />

Año 4 — Número 16<br />

Marzo / Abril 2003<br />

Edición:<br />

Diego A. Zanandrea<br />

Colaborador Permanente:<br />

Rodrigo Pablo Escudero<br />

Colaboran en este número:<br />

Robert Abbott (<strong>Mensa</strong> U.S.A.)<br />

Carlos Allende<br />

Facundo Cancelo<br />

Miguel Angel Croci<br />

Andrea De Gennaro<br />

Ariel Griglio<br />

Robustiano Garrido<br />

Yamila Gomez<br />

Ernesto Molina Aguirre<br />

Federico Pacheco<br />

Verónica Rocchi<br />

Héctor Roldán<br />

Diego Zanandrea<br />

Colaboración Especial:<br />

Gustavo Campotrondi<br />

Francisco Rejon<br />

Comentarios, sugerencias y<br />

colaboraciones a:<br />

editor@<strong>mensapiens</strong>.com.ar<br />

En la Tapa:<br />

En la tapa, "Mapa del Caos", de Ernesto Molina Aguirre<br />

Editorial<br />

Nos encontramos una vez más. Ante todo, en este número tenemos<br />

el resultado del concurso de Arte Digital y felicitamos a los<br />

ganadores: Pablo de la Cruz Martín y Karina Sacco.<br />

También, aprovechando que este es el quinto número consecutivo<br />

de la revista que se edita en forma pública, incluimos una encuesta<br />

abierta para saber que opinan de la revista y que podemos hacer para<br />

mejorarla. Y como agradecimiento pr su participación, sortearemos<br />

entre todos un libro sobre los tests de inteligencia.<br />

Entre otras cosas tenemos una nota sobre los videojuegos escrita<br />

por un gran inventor de juegos de cartas y tablero, un cuento acerca<br />

de Malvinas, juegos del Campeonato Mundial de Juegos de Ingenio de<br />

1999, más sobre estilos musicales, una continuación de la polémica<br />

sobre la actividad física, poesía, y hasta la posibilidad de encontrar un<br />

tesoro escondido...<br />

Indice<br />

Editorial ............................................ 3<br />

<strong>Mensa</strong>piens News................................. 4<br />

Notas ............................................... 6<br />

Las Cifras Indescifrables............................ 6<br />

El Genio y sus Necesidades......................... 9<br />

Sobre Estilos Musicales (II) ........................10<br />

Libertad de Pensar Diferente......................12<br />

Personajes ........................................12<br />

Los Videojuegos son Increiblemente Estúpidos ....13<br />

De Transgénicos y Política.........................15<br />

Bien de Familia ...................................16<br />

Lorem Ipsum ......................................17<br />

Movimientos simultáneos .........................17<br />

Reviews ...........................................18<br />

Escritos............................................20<br />

‘El fantasma de Canterville’ ......................20<br />

‘Este no es’ .......................................23<br />

‘El Ascensor’ ......................................23<br />

‘Antecedente de Guerra’ ..........................24<br />

‘Experimentar’....................................25<br />

‘Lamento Final’ ...................................25<br />

‘Los Ojos Verdes’..................................26<br />

Preguntas y Propuestas ........................28<br />

Soluciones ........................................28<br />

Juegos.............................................29<br />

The End ...........................................32<br />

<strong>Mensa</strong>piens<br />

Diego<br />

- 3 -


<strong>Mensa</strong>piens News<br />

Exámenes de Ingreso<br />

Los exámenes masivos<br />

para el ingreso a <strong>Mensa</strong><br />

<strong>Argentina</strong> continúan. Los datos<br />

del próximo a realizarse son los<br />

siguientes:<br />

- Lugar: Club Argentino de Ajedrez<br />

- Fecha: 09/05/03<br />

- Hora: 19:00 Hs.<br />

- Dirección: Paraguay 1858 1º<br />

piso (Confi tería)<br />

- Valor: $30<br />

Encuesta<br />

Llegamos al quinto número<br />

consecutivo de edición<br />

abierta al público, y por ello<br />

queremos realizar una encuesta<br />

entre todos nuestros lectores<br />

para saber que opinan de la<br />

revista.<br />

Esta encuesta la encontrarán<br />

en la columna siguiente y<br />

pueden enviarla por e-mail a<br />

encuesta@<strong>mensapiens</strong>.com.ar, o<br />

bien completar el formulario on-line en<br />

www.<strong>mensapiens</strong>.com.ar/encuesta.<br />

Como agradecimiento por responder<br />

la encuesta, entre todos<br />

aquellos que participen con su<br />

opinion, se sorteará un ejemplar<br />

del libro “Los Tests de Inteligencia”,<br />

de E. Butler y M.Pirie (Ed.<br />

Deusto).<br />

- 4 - <strong>Mensa</strong>piens<br />

ENCUESTA ABIERTA MENSAPIENS<br />

Contestar las siguientes preguntas con una puntuación de 1 a 5 (1=peor / 5=mejor)<br />

1. Valoración general de la revista: ___<br />

2. Contenido: ___<br />

3. Diseño: ___<br />

Asigne su valoración de 1 a 5 a las siguientes secciones:<br />

4. News: __ / Notas: __ / Reviews: __ / Escritos: __ / Juegos: __<br />

Responda las siguientes preguntas según su opinión personal:<br />

5. ¿Qué sección es la que más le gusta de la revista? ¿Porqué?<br />

6. ¿Que sección es la que menos le gusta de la revista? ¿Porqué?<br />

7. ¿Que le falta a <strong>Mensa</strong>piens?<br />

8. ¿Que le sobra?<br />

9. ¿Le sirvió algún review publicado?<br />

10. ¿Que se podría hacer para mejorar la revista?<br />

11. ¿Podría mencionar algún artículo (nota, cuento, etc.) que le haya<br />

resultado particularmente interesante o entretenido?<br />

12. ¿Que piensa de los concursos?<br />

13. ¿Le gustaría participar en la revista de alguna manera?<br />

14. ¿Algún otro comentario que quisiera realizar?<br />

Las siguientes preguntas son para conocer el perfi l de nuestros lectores:<br />

15. Edad: ___<br />

16. Sexo: ___<br />

17. Ocupación: ___<br />

18. Cantidad de números que leyó de <strong>Mensa</strong>piens: ___<br />

19. ¿Cómo conoció nuestra revista?<br />

Muchas gracias por participar y... ¡Suerte en el sorteo!


RESULTADOS DEL CONCURSO ABIERTO DE ARTE DIGITAL<br />

<strong>Mensa</strong>piens News<br />

La selección del ganador se realizó mediante un jurado de 4 integrantes que recibieron todas las obras sin identifi -<br />

cación del autor y procedieron a asignar a cada una un puntaje entre 1 y 10 según su opinión acerca de la obra. Se<br />

promediaron los puntajes de cada trabajo y los más altos fueron designados ganadores en cada categoría.<br />

Los ganadores se hicieron acreedores a un ejemplar cada uno del libro “<strong>Argentina</strong> para todo el mundo”, un recorrido<br />

fotográfi co por todo el país. Se les comunicará por e-mail o por teléfono cómo retirar su premio.<br />

Categoría A:<br />

Ganador: Pablo de la Cruz Martín (<strong>Argentina</strong>)<br />

Título: Flores 3D<br />

Herramienta: 3D Studio Max<br />

Categoría B:<br />

Ganador: Karina Sacco (<strong>Argentina</strong>)<br />

Título: Sin título.<br />

Herramienta: Photoshop 6<br />

En www.<strong>mensapiens</strong>.com.ar/galeria podrán encontrar las versiones en tamaño completo de los trabajos, así como<br />

los trabajos correspondientes al segundo y tercer puesto de cada categoría.<br />

Muchas felicitaciones a los ganadores.<br />

<strong>Mensa</strong>piens<br />

- 5 -


Notas<br />

Las cifras indescifrables<br />

Miguel Angel Croci<br />

En todas las épocas, los reyes, reinas,<br />

gobernantes y generales han dependido<br />

de la comunicación efi ciente para<br />

gobernar sus países y ordenar a sus ejércitos.<br />

También, todos ellos han sido conscientes de<br />

las consecuencias que se producirían si sus<br />

mensajes cayeran en las manos equivocadas,<br />

revelando valiosos secretos a naciones<br />

rivales y divulgando información vital a las<br />

fuerzas contrarias. La amenaza de que el<br />

enemigo interceptara los mensajes motivó<br />

el desarrollo de códigos y cifras: técnicas<br />

para disfrazar un mensaje de forma que sólo<br />

pueda leerlo el receptor a quien va dirigido.<br />

El deseo de mantener secretos ha provocado<br />

que las naciones hayan puesto en funcionamiento<br />

departamentos encargados de<br />

crear códigos, sobre los que recae la responsabilidad<br />

de la seguridad de las comunicaciones<br />

mediante la invención y la puesta en<br />

práctica de los mejores códigos posibles. Al<br />

mismo tiempo, los descifradores de códigos<br />

enemigos han tratado de desentrañar estos<br />

códigos y robar secretos. Los descifradores<br />

de códigos son alquimistas lingüísticos, una<br />

tribu mística que trata de hacer aparecer<br />

palabras inteligibles de símbolos sin sentido.<br />

La historia de los códigos y las cifras es la<br />

historia de siglos de batalla entre los creadores<br />

de códigos y los descifradores, una<br />

carrera de armamentos intelectuales que ha<br />

tenido un impacto enorme en el curso de la<br />

Historia.<br />

La Historia está llena de códigos. Ellos<br />

han decidido el desenlace de batallas, han<br />

protagonizado innumerables intrigas políticas<br />

y han llevado a la muerte a reyes y<br />

reinas. Su historia es tan desmesuradamente<br />

rica que presenta relatos fascinantes y no<br />

pocos misterios, uno de los cuales deseo<br />

presentar aquí.<br />

La información se ha convertido en una<br />

mercancía cada vez más valiosa, y según<br />

la revolución de las comunicaciones fue<br />

cambiando la sociedad, el proceso de cifrar<br />

mensajes, conocido como codifi cación, desempeñó<br />

un papel cada vez más importante<br />

en la vida cotidiana.<br />

El tesoro Beale. El relato de un misterio<br />

La historia comienza en el hotel Washington<br />

de Lynchburg, Virginia, en enero de<br />

1820; un extraño llamado Thomas J. Beale<br />

entró a caballo en Lynchburg y se registró<br />

en el hotel. Su dueño, Robert Morriss, recordaba<br />

que “en persona, medía unos seis pies,<br />

tenía los ojos negros como el azabache y<br />

- 6 - <strong>Mensa</strong>piens<br />

el pelo del mismo color, y lo llevaba más<br />

largo de cómo lo dictaba la moda en aquella<br />

época. Su fi gura era simétrica y daba prueba<br />

de una fuerza y una actividad excepcionales;<br />

pero su rasgo distintivo era su tez oscura,<br />

como si haber estado expuesto tanto al sol lo<br />

hubiera bronceado y descolorido completamente;<br />

esto, sin embargo, no restaba valor a<br />

su apariencia...” Aunque Beale pasó el resto<br />

del invierno con Morriss y era “extremadamente<br />

popular con todos, sobre todo con<br />

las damas”, nunca habló de su pasado, su<br />

familia o el propósito de su visita. Luego, a<br />

fi nales de marzo, se fue tan repentinamente<br />

como había llegado.<br />

Portada de “The Beale Papers”, el folleto que contenía<br />

todo lo que sabemos acerca del misterio del tesoro Beale.<br />

Dos años después, en enero de 1822,<br />

Beale regresó al hotel Washington, “más<br />

moreno y oscuro que nunca”. Una vez más<br />

pasó el resto del invierno en Lynchburg y<br />

desapareció en primavera, pero no sin antes<br />

haber confi ado a Morriss una caja de hierro<br />

cerrada con llave, que, según le dijo, contenía<br />

“papeles de mucho valor e importancia”.<br />

Morriss puso la caja en una caja fuerte y no<br />

volvió a pensar en ella y su contenido hasta<br />

que recibió una carta de Beale, con fecha<br />

del 9 de mayo de 1822 y enviada desde San<br />

Luis. Tras varias frases de cortesía y un<br />

párrafo sobre el plan de viajar a las llanuras<br />

“para cazar búfalos y encontrar osos pardos<br />

salvajes”, la carta de Beale revelaba la<br />

importancia de la caja:<br />

Contiene papeles que afectan vitalmente<br />

a mi propia fortuna y la de otras<br />

personas que tienen negocios conmigo, y<br />

en caso de que yo muera, su pérdida sería<br />

irreparable. Por tanto. Comprenderá usted<br />

la necesidad de guardarla con vigilancia y<br />

cuidados para evitar semejante catástrofe.<br />

Si ninguno de nosotros vuelve, por favor<br />

guarde la caja con cuidado durante diez años<br />

a partir de la fecha de esta carta, y si ni<br />

yo, ni alguien con mi autorización, pedimos<br />

su devolución durante ese tiempo, ábrala,<br />

lo que podrá hacer quitando la cerradura.<br />

Encontrará, además de los papeles dirigidos<br />

a usted, otros papeles que serán incomprensibles<br />

sin la ayuda de una clave. Esa clave<br />

la he dejado en manos de un amigo en esta<br />

localidad, sellada y dirigida a usted, y con<br />

instrucciones de que no se entregue hasta<br />

junio de 1832. Con ella comprenderá totalmente<br />

lo que tendrá que hacer.<br />

Morriss continuó guardando la caja como<br />

se le había indicado, esperando que Beale<br />

la recogería, pero el misterioso hombre de<br />

tez morena nunca volvió a Lynchburg. Desapareció<br />

sin ninguna explicación y nunca se<br />

le volvió a ver. Diez años después, Morriss<br />

podría haber seguido las instrucciones de<br />

la carta y haber abierto la caja, pero parece<br />

que se sentía reacio a romper la cerradura.<br />

La carta de Beale había mencionado que se<br />

enviaría una nota a Morriss en junio de 1832,<br />

que supuestamente explicaría como descifrar<br />

el contenido de la caja. Sin embargo, la nota<br />

nunca llegó y quizá Morriss sintió que no<br />

merecía la pena abrir la caja si no podía descifrar<br />

lo que había dentro de ella. Finalmente,<br />

en 1845, la curiosidad de Morriss pudo más<br />

que él y forzó la cerradura. La caja contenía<br />

tres hojas de caracteres codifi cados y una<br />

nota escrita por Beale en inglés normal.<br />

La fascinante nota revelaba la verdad<br />

sobre Beale, la caja y las claves. Explicaba<br />

que en abril de 1817, casi tres años antes<br />

de su primer encuentro con Morriss, Beale<br />

y otros 29 habían emprendido un viaje por<br />

los Estados Unidos. Después de viajar por<br />

los ricos territorios de caza de las llanuras<br />

occidentales llegaron a Santa Fe, y<br />

pasaron el invierno en la “pequeña ciudad<br />

mexicana”. En marzo se dirigieron hacia<br />

el norte y comenzaron a seguir la pista de<br />

una “inmensa manada de búfalos”, matando<br />

todos los que podían por el camino. Luego,<br />

según Beale, les sonrió la buena suerte:<br />

“Un día, mientras los seguíamos, el grupo<br />

acampó en un pequeño barranco, a una 250<br />

o 300 millas al norte de Santa Fe, y, con<br />

los caballos atados, se estaban preparando<br />

para la cena, cuando uno de los hombres<br />

descubrió en una grieta de las rocas algo<br />

que parecía oro. Al enseñarlo a los demás,<br />

se declaró que era oro, y el entusiasmo fue<br />

la consecuencia natural.”


La carta continuaba explicando que<br />

Beale y sus hombres, con la ayuda de una<br />

tribu local, minaron el lugar durante los<br />

dieciocho meses siguientes, para cuando ya<br />

habían acumulado una gran cantidad de oro,<br />

además de algo de plata que se encontró<br />

cerca de allí. A su debido tiempo acordaron<br />

que su recién encontrada riqueza debía ser<br />

trasladada a un lugar seguro y decidieron<br />

llevarla de vuelta a casa, a Virginia, donde<br />

la ocultarían en un emplazamiento secreto.<br />

En 1820, Beale viajó a Lynchburg con el oro<br />

y la plata, encontró una ubicación apropiada<br />

y lo enterró. Fue en aquella ocasión cuando<br />

se hospedó por primera vez en el hotel Washington<br />

y conoció a Morriss. Cuando Beale se<br />

fue al fi nalizar el invierno se reunió de nuevo<br />

con sus hombres, que habían continuado trabajando<br />

en la mina durante su ausencia.<br />

Después de otros dieciocho meses,<br />

Beale volvió a visitar Lynchburg con todavía<br />

más para añadir a su colección oculta. Esta<br />

vez tenía una razón adicional para su viaje:<br />

“Antes de dejar a mis compañeros en<br />

las llanuras se sugirió que, en caso de que<br />

sufriésemos algún accidente, el tesoro<br />

escondido se perdería, no pudiendo llegar<br />

a nuestros familiares a no ser que se tomasen<br />

precauciones contra tal eventualidad.<br />

Por consiguiente, me pidieron que eligiera<br />

alguna persona completamente de fi ar, si<br />

es que se podía encontrar alguna, a la que<br />

debería confi arse, si el grupo lo consideraba<br />

aceptable, que llevase a cabo los deseos de<br />

sus integrantes en relación con sus partes<br />

respectivas de lo encontrado.”<br />

Beale creía que Morriss era un hombre íntegro,<br />

por lo que le confi ó la caja que contenía las<br />

tres hojas codifi cadas, las denominadas cifras<br />

Beale. Cada hoja codifi cada contenía una selección<br />

de números (reproducidos aquí en las fi guras<br />

1, 2 y 3) y el desciframiento de los números<br />

revelaría todos los detalles relevantes. La<br />

primera hoja describía la ubicación del tesoro,<br />

la segunda esbozaba su contenido y la tercera<br />

enumeraba los familiares de los hombres que<br />

debían recibir una parte del tesoro. Cuando<br />

Morriss leyó todo esto habían pasado unos<br />

veintitrés años desde que había visto a Thomas<br />

Beale por última vez. Dando por sentado que<br />

Beale y sus hombres habían muerto, Morriss se<br />

sintió obligado a encontrar el oro y distribuirlo<br />

entre los familiares señalados. Sin embargo, sin<br />

la clave prometida estaba forzado a descifrar<br />

las cifras partiendo de cero, una tarea que le<br />

preocupó durante los siguientes veinte años y<br />

que terminó en fracaso.<br />

La primera cifra Beale<br />

La segunda cifra Beale<br />

La tercera cifra Beale<br />

Notas<br />

En 1862, a la edad de 84 años, Morriss<br />

sabía que se aproximaba el fi n de su vida y<br />

que tenía que compartir el secreto de las<br />

cifras Beale, de otra forma cualquier esperanza<br />

de cumplir los deseos de Beale moriría<br />

con él. Morriss se confi ó a un amigo, pero por<br />

desgracia la identidad de esa persona sigue<br />

siendo un misterio. Lo único que sabemos<br />

sobre esta persona es que fue él quien escribió<br />

el folleto de 1885 que dio publicidad al<br />

caso (fi gura 4). Allí explicaba las razones de<br />

su anonimato:<br />

“Preveo que estos papeles tendrán una<br />

gran difusión y, para evitar la multitud de<br />

cartas con las que me asaltarían desde todos<br />

los rincones de la Unión, planteando todo<br />

tipo de preguntas, y exigiendo respuestas<br />

que, si tratara de responder, absorberían<br />

todo mi tiempo y alterarían la naturaleza de<br />

mi trabajo, he decidido retirar mi nombre<br />

de la publicación, tras asegurar a todos los<br />

interesados que he ofrecido todo lo que se<br />

sobre este asunto, y que no puedo añadir ni<br />

una sola palabra a las declaraciones aquí<br />

contenidas.”<br />

Para proteger su identidad, el autor<br />

pidió a James B. Ward, un respetado miembro<br />

de la comunidad local y el topógrafo de<br />

las carreteras del condado, que actuase<br />

como su agente y editor.<br />

Además, el autor es también el responsable<br />

del desciframiento certero de la<br />

segunda cifra Beale. Como la primera y la<br />

tercera cifras, la segunda consta de una<br />

página de números, y el autor asumió que<br />

cada número representaba una letra. Sin<br />

embargo, la gama de números sobrepasa<br />

con mucho el número de letras del alfabeto,<br />

de manera que el autor se dio cuenta de que<br />

se enfrentaba a una cifra que utiliza varios<br />

números para representar la misma letra.<br />

Una cifra que satisface ese criterio es la<br />

denominada cifra libro, en la que un libro, o<br />

cualquier otra pieza de texto, es en sí mismo<br />

la clave.<br />

La clave en el texto de un libro.<br />

Primero, el criptógrafo numera consecutivamente<br />

cada palabra del texto-clave.<br />

Después de eso, cada número actúa como<br />

sustituto de la letra inicial de su palabra<br />

asociada.<br />

1Por 2ejemplo, 3si 4el 5emisor 6y 7el 8receptor<br />

9acordaron 10que 11esta 12frase 13sería 14el 15textoclave,<br />

16cada 17palabra 18tendría 19una 20etiqueta<br />

21numérica, 22y 23cada 24número 25proporcionaría<br />

26la 27base 28para 29la 30codifi cación.<br />

<strong>Mensa</strong>piens<br />

- 7 -


Notas<br />

A continuación se haría una lista uniendo<br />

cada número a la letra inicial de su palabra<br />

asociada:<br />

1=p / 11=e / 21=n / 2=e / 12=f / 22=y / 3=s<br />

/ 13=s / 23=c / 4=e / 14=e / 24=n / 5=e / 15=t /<br />

25=p / 6=y / 16=c / 26=l / 7=e / 17=p / 27=b /<br />

8=r / 18=t / 28=p / 9=a / 19=u / 29=l / 10=q /<br />

20=e / 30=c<br />

Ahora podemos codifi car un mensaje sustituyendo<br />

las letras del texto llano por números<br />

según la lista. En esta lista, la letra p del texto<br />

llano se podría sustituir por 4, 17, 25 ó 28; la<br />

letra e del texto llano se podría sustituir por<br />

2, 4, 5, 7, 11 ó 20; y así sucesivamente. Como<br />

nuestro texto clave es una frase tan corta, no<br />

tenemos números que reemplazarían a letras<br />

infrecuentes como la x y la z, pero tenemos<br />

sufi cientes sustitutos para codifi car la palabra<br />

Beale, que podría ser 27-2-9-29-4. Si el<br />

receptor a quien va dirigido tiene una copia<br />

del texto-clave, entonces descifrar el mensaje<br />

codifi cado resulta insignifi cante. Sin embargo,<br />

si una tercera persona intercepta sólo el texto<br />

cifrado, el criptoanálisis depende de poder<br />

identifi car de alguna manera el texto-clave. El<br />

autor del folleto escribió: “Con esta idea, se<br />

hizo una prueba con todo libro que pude conseguir,<br />

numerando sus letras y comparando los<br />

números con los del manuscrito; todo ello fue<br />

en vano, sin embargo, hasta que la Declaración<br />

de la Independencia proporcionó la pista<br />

para uno de los papeles, y reavivó todas mis<br />

esperanzas.”<br />

La Declaración de la Independencia<br />

norteamericana resultó ser el texto-clave<br />

para la segunda cifra Beale, y numerando<br />

las palabras de la Declaración es posible<br />

desenmarañarla. La fi gura 5 muestra el<br />

comienzo de la declaración de la Independencia;<br />

numerando cada décima palabra<br />

para ayudar a que el lector vea cómo funciona<br />

el desciframiento. La fi gura 2 muestra<br />

el texto cifrado: el primer número es 115 y<br />

la 115° palabra de la Declaración es “instituted”,<br />

de manera que el primer número<br />

representa a la i. El segundo número del<br />

texto cifrado es 73, y la 73° palabra de la<br />

declaración es “hold”, de manera que el<br />

segundo número representa a la h. Aquí está<br />

el desciframiento entero, tal como aparecía<br />

en el folleto:<br />

“He depositado en el condado de Bedford, a<br />

unas cuatro millas de Buford’s, en una excavación<br />

o cámara subterránea, seis pies bajo la superfi cie<br />

del terreno los siguientes artículos, que pertenecen<br />

conjuntamente a las personas cuyos nombres<br />

aparecen en el papel número 3, adjunto:<br />

- 8 - <strong>Mensa</strong>piens<br />

“El primer depósito consistió en mil catorce<br />

libras de oro, y tres mil ochocientas doce libras<br />

de plata, depositadas en noviembre de 1819. El<br />

segundo se realizó en diciembre de 1821, y consistía<br />

en mil novecientas siete libras de oro, y mil<br />

doscientas ochenta y ocho libras de plata; también<br />

joyas, obtenidas en San Luis a cambio de plata<br />

para facilitar el transporte, y valoradas en 13.000<br />

dólares.<br />

“Todo lo mencionado está embalado de manera<br />

segura en ollas de hierro, con tapas de hierro. La<br />

excavación está más o menos bordeada de piedras,<br />

y las vasijas descansan sobre roca sólida, y están<br />

cubiertas con otras. El papel número 1 describe<br />

la ubicación exacta de la excavación, para que no<br />

haya ninguna difi cultad para encontrarla.”<br />

Merece la pena destacar que hay<br />

algunos errores en el desciframiento. Por<br />

ejemplo, el desciframiento incluye las<br />

palabras “four miles”, basándose en que<br />

la 95° palabra de la Declaración comienza<br />

con la letra u. Sin embargo, la palabra<br />

95° es “inalienable”. Esto podría ser el<br />

resultado de la codifi cación descuidada<br />

de Beale, o podría ser que Beale tenía<br />

una copia de la declaración en la que la<br />

95° palabra era “unalienable”, lo que sí<br />

aparece en algunas versiones que datan<br />

del principio del siglo XIX. En cualquier<br />

caso, el desciframiento certero indica claramente<br />

el valor del tesoro, al menos 20<br />

millones de dólares, según los precios de<br />

los lingotes de hoy día.<br />

No es de extrañar que, una vez que el<br />

autor conoció el valor del tesoro, dedicase<br />

más y más tiempo a analizar las otras dos<br />

hojas de cifras, sobre todo la primera cifra<br />

Beale, que describe la ubicación del tesoro.<br />

A pesar de sus esfuerzos extenuantes, fracasó,<br />

y lo único que obtuvo de las cifras fue<br />

pesares:<br />

“Como consecuencia del tiempo perdido<br />

en la mencionada investigación, me he<br />

visto reducido de una relativa riqueza a<br />

la más absoluta miseria, acarreando sufrimiento<br />

a quienes era mi deber proteger, y<br />

esto, también, a pesar de sus amonestaciones.<br />

Mis ojos se abrieron por fi n a su<br />

situación y decidí romper de inmediato, y<br />

para siempre, toda conexión con el asunto,<br />

y reparar, en lo posible, mis errores. Para<br />

hacerlo, como mejor medio para evitar<br />

exponerme a la tentación, he decidido<br />

hacer público todo el asunto, y pasar la<br />

responsabilidad que recae sobre mis hombros<br />

al señor Morriss.”<br />

A la caza del tesoro.<br />

La publicación de 1885 causó un gran<br />

revuelo y, aunque un incendio en un almacén<br />

destruyó la mayoría de los folletos, los<br />

que sobrevivieron atrajeron el interés de<br />

los más ardientes cazadores de tesoros. Los<br />

hermanos Hart, George y Clayton se pasaron<br />

años estudiando las dos cifras que quedaban,<br />

intentando diversas formas de ataque<br />

criptoanalítico, y a veces engañándose a<br />

sí mismos creyendo que tenían la solución.<br />

Una falsa línea de ataque, a veces genera<br />

una pocas palabras tentadoras en medio de<br />

un galimatías, lo que anima al criptoanalista<br />

a inventar una serie de disculpas para justifi -<br />

car el galimatías. Aunque Clayton Hart desistió<br />

en 1912, George continuó hasta 1952. Un<br />

fanático de las cifras aún más persistente ha<br />

sido Hiram Herbert, hijo, que se interesó<br />

en ellas en 1923, y cuya obsesión continuó<br />

hasta la década de los setenta. Tampoco a él<br />

le ha reportado su trabajo ningún benefi cio.<br />

Varios criptoanalistas profesionales<br />

se han lanzado también a seguir la pista<br />

del tesoro Beale. Herbert O. Yardley, que<br />

fundó el U.S. Cipher Bureau (Ofi cina de<br />

Cifras de Estados Unidos) -conocida como<br />

la Cámara Negra Americana- al fi nal de la<br />

primera guerra mundial, se sintió intrigado<br />

por las cifra Beale, así como el coronel<br />

William Friedman, la fi gura dominante del<br />

criptoanálisis norteamericano durante la<br />

primera mitad del siglo XX. Mientras era el<br />

responsable del Signal Intelligence Service<br />

convirtió a las cifra Beale en parte del programa<br />

de adiestramiento, presumiblemente<br />

porque, como dijo una vez su esposa, creía<br />

que las cifras poseían un “ingenio infernal,<br />

diseñado específi camente para seducir al<br />

lector incauto”. El archivo Friedman, establecido<br />

tras su muerte en 1969 en el Centro<br />

de Investigación George C. Marshall, es<br />

frecuentemente consultado por los historiadores<br />

militares, pero la gran mayoría de<br />

los visitantes son ansiosos adeptos de Beale,<br />

que confían seguir algunas de las pistas del<br />

gran hombre. Más recientemente, una de las<br />

mayores fi guras a la caza del tesoro Beale<br />

ha sido Carl Hammer, el director retirado de<br />

un servicio de ordenadores de Sperry Univac<br />

y uno de los pioneros del criptoanálisis por<br />

computadora. Según Hammer, “las cifras<br />

Beale han ocupado al menos al 10% de las<br />

mejores mentes criptoanalíticas del país. Y<br />

ni un céntimo de este esfuerzo debería ser<br />

escatimado. El trabajo -incluso las líneas<br />

que han conducido a callejones sin salida- ha<br />

compensado con creces haciendo avanzar y


perfeccionando la investigación de los ordenadores”.<br />

Hammer ha sido un miembro destacado<br />

de la Asociación de la Cifra y el Tesoro<br />

Beale, fundada en los años sesenta para<br />

fomentar el interés en el misterio Beale.<br />

A pesar de los esfuerzos combinados<br />

de la Asociación, los cazadores de tesoros<br />

afi cionados y los criptoanalistas profesionales,<br />

la primera y la tercera cifras Beale han<br />

seguido siendo un misterio durante más de<br />

un siglo y el oro, la plata y las joyas aún no<br />

han sido encontrados.<br />

Sin embargo, los entusiastas de Beale con<br />

predilección por las teorías conspiratorias han<br />

sugerido que la NSA (National Security Agenciy)<br />

ya ha encontrado el tesoro. La ofi cina de claves<br />

del gobierno central norteamericano tiene<br />

acceso a los ordenadores más potentes y a<br />

algunas de las mentes más brillantes del mundo<br />

y puede que haya descubierto algo sobre las<br />

cifras que se le ha escapado a los demás.<br />

Finalmente, no podemos excluir la posibilidad<br />

de que las cifras Beale sean un elaborado<br />

engaño y que Beale nunca existió. Los<br />

escépticos han sugerido que el desconocido<br />

autor, inspirado en El escarabajo de oro de Poe,<br />

inventó toda la historia y publicó el folleto para<br />

aprovecharse de la avaricia de los demás.<br />

Uno de los principales incrédulos es el<br />

criptógrafo Louis Kruh, que afi rma haber<br />

encontrado pruebas de que el autor del<br />

folleto escribió también las cartas de<br />

Beale. Kruh realizó un análisis textual de las<br />

palabras atribuidas al autor y las atribuidas<br />

a Beale para ver si presentaban características<br />

similares. Comparó aspectos tales<br />

como el porcentaje de frases que comienzan<br />

con “El”, “Si” e “Y”, el promedio de comas<br />

y puntos y comas por frase, y el estilo de<br />

escribir: el uso de negativos, pasivas negativas,<br />

infi nitivos, frases compuestas, etc. El<br />

análisis incluyó, también escritos de otros<br />

tres virginianos del siglo XIX. De los cinco<br />

casos de escritura, el de Beale y el del<br />

autor del folleto mostraron el parecido más<br />

cercano, sugiriendo que podrían haber sido<br />

escritos por la misma persona.<br />

Evidencia a favor de la probidad de las<br />

cifras la ofrecen algunos análisis realizados por<br />

James Gillogly, presidente de la American Cryptogram<br />

Association, y la investigación histórica.<br />

Peter Viemeister, un historiador local, ha<br />

reunido gran parte de la investigación en su<br />

libro El tesoro Beale - Historia de un misterio.<br />

Viemeister comenzó preguntando si había<br />

pruebas si había pruebas de que Thomas Beale<br />

existió realmente. Usando el censo de 1790 y<br />

otros documentos, Viemeister ha identifi cado<br />

varios Thomas Beale que nacieron en Virginia<br />

y cuyos orígenes encajan con los pocos detalles<br />

conocidos. Viemeister ha tratado también<br />

de corroborar los otros detalles del folleto,<br />

como el viaje de Beale a Santa Fe y su descubrimiento<br />

de oro. Por ejemplo, hay una<br />

leyenda cheyenne que se remonta hacia 1820<br />

que trata de oro y plata que se tomaron del<br />

Oeste para ser enterrados en las montañas del<br />

Este. También la lista de correos de San Luis<br />

de 1820 contiene a un “Thomas Beall”, lo que<br />

encaja con lo que afi rma el folleto respecto<br />

a que Beale pasó por la ciudad en 1820 en su<br />

viaje hacia el Oeste tras dejar Lynchburg. El<br />

folleto también dice que Beale envió una carta<br />

desde San Luis en 1822.<br />

Así que la historia de las cifras Beale parece<br />

tener base y, por consiguiente, continúa cautivando<br />

a criptoanalistas y cazadores de tesoros.<br />

Algunos han abandonado la esperanza<br />

de resolver las dos hojas que quedan por<br />

descifrar y en vez de ello se han concentrado<br />

en extraer pistas de la cifra que ha<br />

sido descifrada. Cada verano, la región de<br />

Buford atrae a muchos aspirantes esperanzados<br />

en detectar metales entre las piedras<br />

y cavando hoyos gigantes.<br />

La advertencia fi nal del autor.<br />

Después de leer la historia de las cifras<br />

Beale, puede que usted se anime a tomas el<br />

desafío. El aliciente de una cifra del siglo XIX<br />

aún sin descifrar, junto a un tesoro valorado<br />

en 20 millones de dólares puede resultar<br />

irresistible. Sin embargo, antes de ponerse<br />

a seguir el rastro del tesoro, preste atención<br />

al consejo ofrecido por el autor del folleto:<br />

“Antes de entregar los papeles al público,<br />

me gustaría decir una palabras a los que<br />

pueden interesarse en ellos y darles un<br />

pequeño consejo, adquirido por amarga<br />

experiencia. Es que dediquen a la tarea sólo<br />

el tiempo que les reste de sus ocupaciones<br />

legítimas, y si no les queda nada de tiempo,<br />

que se olviden del asunto... De nuevo, nunca<br />

sacrifi que, como he hecho yo, sus propios<br />

intereses y los de su familia por lo que<br />

podría resultar ser una ilusión: pero como ya<br />

he dicho, cuando ya haya hecho su trabajo<br />

del día y esté cómodamente sentado junto a<br />

un buen fuego, un poco de tiempo dedicado<br />

al tema no hará daño a nadie y puede verse<br />

bien recompensado.”<br />

<br />

Nota: Podrán encontrar copias en tamaño completo<br />

de las páginas en www.<strong>mensapiens</strong>.com.ar/cifras<br />

Notas<br />

Acerca del Genio y sus Necesidades<br />

Lic. Carlos Allende<br />

Muchas veces nosotros, los miembros<br />

de <strong>Mensa</strong>, nos hemos preguntado que<br />

es la genialidad. Esta abstracción, esta<br />

idea que aparece, nos corresponde con<br />

muchas actitudes que se nos han presentado;<br />

algunas las vivimos cotidianamente,<br />

otras las hemos escuchado, y muchas las<br />

hemos sentido en nuestras tristezas y<br />

ocultas profundidades del pensamiento.<br />

Pero... ¿que seria un genio? Desde<br />

la perspectiva del sentido común, el<br />

genio tiene características propias: es<br />

fulgurante, intuitivo y espontáneo; en<br />

algunos casos puede ser tranquilo y perseverante,<br />

y por último, profundamente<br />

asocial en el marco de un modo de vida<br />

que a menudo confi na al aislamiento, a<br />

la ascesis y a la marginalidad.<br />

Porque para todos, el genio es un<br />

ser curioso, excéntrico, peleador de sus<br />

puntos de vista... o sea un “loco”. En<br />

nuestra sociedad diriamos “un loquito”.<br />

Varios literatos lo han descripto, y<br />

he seleccionado algunos comentarios:<br />

Paul Claudel en sus Obras Completas<br />

de Rimbaud, plantea que el genio “es<br />

un manantial perdido que brota de un<br />

suelo saturado...” y dice de Rimbaud<br />

que lo clasifi caria como “poeta maldito”<br />

inspirado por la Gracia Divina.<br />

¿Que se podria decir entonces de<br />

la personalidad del genio? Dice Proust<br />

que los genios son los que “han fundado<br />

las religiones y compuesto las obras<br />

maestras”, o la presencia de “demonios<br />

creadores” al decir de Stendhal.<br />

La psiquiatria ha abordado también<br />

el tema, tan amplio y anárquico en<br />

su “resolución”. Se podria resumir, de<br />

manera absolutamente arbitraria, que<br />

es la idea obsesiva la que concetra<br />

dinamicamente toda la energia de la<br />

personalidad en el punto mas preciso<br />

del trabajo creativo; idea ridicula,<br />

descabellada o grandiosa, con el peligro<br />

latente del deslizamiento hacia<br />

la depresión. Se podria decir que la<br />

depresión es el nucleo constitutivo de la<br />

personalidad del genio. La depresión se<br />

halla presente en el desequilibrio y las<br />

heridas del narcisismo, como condición,<br />

siempre, del proceso creador. Victor<br />

Hugo dijo al respecto: “para descubrir<br />

mas alla de los horizontes las alturas<br />

absolutas, es preciso que uno mismo<br />

este sobre una altura”<br />

Asi vemos que el creador, el inventor<br />

o el ser genial, es desgraciado, y con<br />

frecuencia se siente decepcionado de la<br />

imagen que habia formado de si mismo.<br />

Este golpe a la integridad,esta<br />

perdida de la ilusion de omnipotencia,<br />

constutuye una herida del narcisismo y<br />

en muchos casos el motor creativo.<br />

En el próximo número, continuaré<br />

con esta explicación mediante algunos<br />

ejemplos adicionales.<br />

<strong>Mensa</strong>piens<br />

- 9 -


Notas<br />

Sobre Estilos Musicales (II)<br />

Diego Zanandrea<br />

En este número continuamos con la serie<br />

de artículos comenzada en la edición<br />

anterior referida a la defi nición de diferentes<br />

estilos musicales. En aquella primera nota,<br />

defi nmos “Rock”. Hoy continuamos con su<br />

evolución natural: El Rock Moderno.<br />

MODERN ROCK<br />

El Modern Rock o Rock Moderno es justamente<br />

eso: Música moderna de rock. Más<br />

especifi camente, este término se refi ere a<br />

los géneros derivados de los estilos de rock<br />

clásicos que fueron infl uenciados por la llegada<br />

del punk. De aquí surge una serie de<br />

ramas que pasamos a detallar:<br />

Alternative Rock<br />

“Rock alternativo” es una defi nición amplia y<br />

vaga. Originalmente se referia a casi toda la<br />

música post-punk alejada de lo masivo, desde<br />

REM hasta Pixies, pero a principios de los ‘90,<br />

con el éxito de bandas como Nirvana o Red<br />

Hot Chili Peppers, la división entre alternativo<br />

y comercial comenzó a desdibujarse: Bandas<br />

completamente comerciales comenzaron a<br />

adoptar elementos “alternativos”, mientras<br />

que bandas alternativas comenzaron a ser<br />

promocionadas para un público más masivo.<br />

Hoy en dia grupos tan dispares como Soundgarden<br />

y Smashmouth pueden ser clasifi cadas<br />

como alternativas, por lo que recurrimos a<br />

una nueva sub-clasifi cación:<br />

Adult Alternative<br />

Nace a mediados de los ‘90, cuando estilos<br />

como el grunge y el alternativo tienen tanta<br />

popularidad que logran sufi ciente aceptación<br />

como para que su infl uencia comience a<br />

notarse en bandas de sonido menos aventurado.<br />

El suceso de Counting Crows, considerados<br />

como la primera banda de Alternativo<br />

Adulto, abrió el camino a otros grupos como<br />

Hootie and the Blowfi sh y Gin Blossoms.<br />

Brit Pop<br />

Este género nace a fi nales de los ‘80s y<br />

principios de los ‘90s con grupos como Stone<br />

Roses, Charlatans UK y otros, pero alcanza<br />

su apogeo recien a mediados de los ‘90<br />

con el suceso de bandas como Blur, Oasis y<br />

Pulp. Si bien en general el Brit pop tiene en<br />

general una base de guitarras, el estilo varía<br />

mucho de una banda a otra; actualmente el<br />

Brit Pop por la actitud de “rock star” que<br />

por un sonido particular. Ademas de los<br />

mencionados, puede nombrarse éxitos más<br />

recientes como Travis y Coldplay.<br />

- 10 - <strong>Mensa</strong>piens<br />

Grunge<br />

El Grunge Rock comienza a fi nales de los<br />

‘80 combinando el sonido de los primeros<br />

Black Sabbath con una actitud típicamente<br />

Punk, buenas letras y una estética simplista.<br />

Soundgarden fue uno de los pioneros,<br />

aunque la repercusión masiva llegó con Nirvana<br />

y el llamado “Sonido de Seattle”. Otras<br />

bandas grunge incluyen a Stone Temple<br />

Pilots y Bush, entre otros.<br />

Alterlatin<br />

Esta denominación incluye bandas alternativas<br />

de todo tipo desde Mexico hasta <strong>Argentina</strong>,<br />

que cantan mayormente en español y<br />

tocan diferentes estilos de rock moderno, a<br />

veces con algún toque típico de su lugar de<br />

origen. Podemos contar, entre otros, a Molotov,<br />

ANIMAL, Cafe Tacuba, etc.<br />

Rock Experimental<br />

Se utiliza para defi nir el sonido, las texturas<br />

y la prodcción, pero sin salir de los límites de<br />

lo tradicionalmente llamado “rock”. Si bien<br />

muchas bandas conocidas han sido “experimentales”<br />

en algún momento de su carrera<br />

(Beatles con “Sgt. Pepper”, por ejemplo),<br />

este termino se reserva a quienes lo hacen<br />

de manera habitual y como base de su trabajo.<br />

Aquí no se puede dejar de mencionar a<br />

Frank Zappa y a Captain Beefheart.<br />

Indie Rock<br />

Esta defi nición no es estrictamente musical<br />

(a pesar de que en general representa grupos<br />

basados en guitarras), sino que en general<br />

engloba a diferentes bandas alternativas que<br />

aun permanecen en el circuito under y editan<br />

sus discos a traves de sellos independientes.<br />

MODERN ROCK<br />

Indie Pop<br />

Parte de las bases del pop tradicional y lo<br />

mezcla con la lírica y la actitud del Indie Rock,<br />

dando un resultado mucho más acabado, inteligente,<br />

sensible y experimental que el típico<br />

pop masivo de radio. Podemos mencionar a<br />

Belle and Sebastian y Stereolab como algunos<br />

de sus exponentes más conocidos (claro que<br />

estos es relativo al género, ya que en realidad<br />

no son precisamente masivos...).<br />

Chamber Pop<br />

El “Pop de Cámara” aplica los principios de la<br />

música de cámara al Indie Pop, dando un resultado<br />

cuidadosamente orquestado y que incluye<br />

instrumentos poco usados en la música alternativa,<br />

como secciones de cuerdas y vientos,<br />

fl autas, órganos, etc. En este género se pueden<br />

encontrar infl uencias de cantautores de los<br />

‘70 como Nick Drake o Scott Walker. Podemos<br />

mencionar nuevamente a Belle and sebastian<br />

e incluso incluir algunos de los últimos trabajos<br />

de Nick Cave dentro de esta categoria.<br />

Indie Folk<br />

Muchos artistas independentes tocan folk,<br />

pero su música es tan diferente de lo que<br />

habitualmente se conoce como “folk” (artistas<br />

como Joan Baez, por ejemplo) que se<br />

utiliza este término para diferenciarlos. El<br />

Indie Folk tiene a ser más complicado y<br />

experimental (y muchas veces más crudo)<br />

que el folk tradicional.<br />

Indie Garage<br />

A mediados de los ‘80 surgió este revival del<br />

Garage Rock, principalmente canalizado a través<br />

de sellos independientes. Actualmente se ve un<br />

resurgimiento identifi cado como “Nü Garage”<br />

Adult Alternative<br />

Brit Pop<br />

Alternative<br />

Grunge<br />

Alterlatin<br />

Experimental<br />

Indie Pop<br />

Chamber Pop<br />

Indie Folk<br />

Indie Garage<br />

Jangle Pop<br />

Indie Rock<br />

Lo Fi<br />

New Psychedelia<br />

Noise Rock<br />

Post-Rock<br />

Space rock<br />

Goth<br />

New Wave<br />

Synth Pop<br />

Post Punk<br />

Power Pop A.O.R.<br />

Nü Garage<br />

Urban Rock


Jangle Pop<br />

Es una especie de híbrido de folk-rock y pop<br />

de los ‘60, realizado en un ambiente under<br />

e independiente. La banda de Jangle Pop<br />

por excelencia fue R.E.M., antes de sali del<br />

ambiente independiente y fi rmar con Warner<br />

Brothers.<br />

Lo Fi<br />

Lo Fi o Baja Fidelidad es un término que se<br />

refi ere al Indie Rock grabado en equipos de<br />

cuatro tracks u otros equipos amateur con<br />

el fi n de obtener un sonido áspero y espontáneo,<br />

muy lejano a las superproducciones<br />

actuales, en un intent de recrear la estética<br />

de las viejas grabaciones de blues. El resultado<br />

es a menudo ruidoso y algo caótico,<br />

pero lleno de melodias simples y bonitas.<br />

New Psychedelia<br />

A fi nes de los ‘90 surgió un renovado interes<br />

en el circuito Indie por las bandas de Rock<br />

Psicodélico de los ‘60, sumado al uso de instrumentos<br />

raros y equipo analógico. Uno de los<br />

ejemplos más “conocidos” es Flaming Lips.<br />

Noise Rock<br />

Basado en sonidos de feedback y cacofonías,<br />

sus orígenes pueden rastrearse hasta fi nes<br />

de los ‘60, de mano de la Velvet Underground<br />

y, más cerca en el tiempo, la No-<br />

Wave de Pixies.<br />

Post Rock<br />

Es una forma experimental de Indie Rock,<br />

que combina elementos de Noise, free jazz y<br />

música electrónica.<br />

Space Rock<br />

Una especie de psicodelia post-punk, hipnótica<br />

y narcótica. Banda destacable: Spiritualized.<br />

New Wave<br />

La New Wave es música Pop que combina la<br />

energía del punk con cierta estética glam, todo<br />

generalmente acompañado de sintetizadores.<br />

Muchas bandas de fi nes de los ‘70 y principios<br />

de los ‘80 se enmarcan en esta defi nición,<br />

como The Police, Culture Club y Gary Numan.<br />

Synth Pop<br />

Es música Pop que fusiona las innovaciones en<br />

sintetizadores de grupos como Kraftwerk con<br />

las armonias pop comerciales de la New Wave.<br />

Duran Duran, Depeche Mode, A-Ha y muchos<br />

otros se incluyen en esta categorización.<br />

Goth Rock<br />

En sus inicios, la música Goth o Gótica nace<br />

de bandas post-punk como Joy Division<br />

que adoptan elementos de la New Wave<br />

y toma su forma en bandas como Bauhaus<br />

y Christian Death (y mas tarde The Cure).<br />

Básicamente se trata de melodias densas y<br />

muchas veces depresivas, con letras llenas<br />

de imágenes de muerte, desesperación y<br />

angustia, y una estética oscura, basada en<br />

elementos clásicos de la literatura gótica<br />

como Poe, Mary Shelley y Lord Byron,<br />

además de la literatura clásica de vampiros.<br />

Actualmente es casi una subcultura o<br />

un estilo de vida que involucra una gran<br />

cantidad de sub-géneros como Romantic,<br />

Medieval, Industrial, Metal, Pop, Ambient,<br />

Victorian, etc. y bandas tan dispares como<br />

Dead Can Dance, Mephisto Waltz, Siouxsie<br />

& The Banshees, Alien Sex Fiend, The Creatures,<br />

Marilyn Manson, etc.<br />

Post Punk<br />

Las bandas Post Punk como Echo and Bunnymen<br />

y los primeros U2 llevaron la experimentación<br />

musical del punk a otro nivel al<br />

abandonar la instrumentación tradicional<br />

del rock y su estructura. Se dejó de lado<br />

la raiz blusera del rock y se adoptaron los<br />

sintetizadores y nuevos estilos de guitarra.<br />

El principal ejemplo de banda post-punk<br />

es Joy Division. Este estilo evolucionó<br />

en diferentes líneas para desembocar en<br />

la New Wave, el goth, el avant-funk de<br />

Public Image Ltd. y, en última instancia,<br />

el movimiento de rock alternativo de fi nes<br />

de los ‘80.<br />

R.E.M.<br />

“Murmur”<br />

Duran Duran<br />

“Rio”<br />

Bauhaus<br />

“Volume One”<br />

Joy Division<br />

“Substance”<br />

Pulp<br />

“We love life”<br />

Molotov<br />

“¿Donde jugaran las niñas?”<br />

Notas<br />

Power Pop<br />

El Power Pop toma las guitarras del Hard<br />

Rock y las envuelve en armonias pop. Grandes<br />

bandas de los ‘70, como Cheap Trick, se<br />

enmarcan en esta categoría.<br />

A.O.R.<br />

El “Adult Oriented Rock” o “Rock orientado<br />

a adultos” toma, sobre fi nes de los ‘70 y<br />

principios de los ‘80, elementos de rock clasico<br />

y de hard rock y los “pasteuriza” para<br />

hacerlos aptos a los oidos no sólo de los adolescentes<br />

sino también de muchos padres.<br />

Las letras hablan principalmente de amor y<br />

no tienen rastros de rebeldía, mientras que<br />

la música agrega elementos más melódicos<br />

y accesibles de forma similar al Power Pop.<br />

Ejemplos típicos de AOR son Chicago, Toto,<br />

Survivor, Starship y otros.<br />

Urban Rock<br />

Es básicamente rock tradicional con una<br />

temática centrada en las grandes ciudades y<br />

su vida. Los primeros antecedentes se pueden<br />

ubicar en los trabajos de Velvet Underground<br />

a fi nes de los ‘60 y principios de los ‘70 y<br />

en el posterior trabajo solista de Lou Reed,<br />

llegando a su apogeo en los ‘80 de mano de<br />

Bruce Springteen & the E Street Band.<br />

Nü Garage<br />

El actual resurgimiento del Garage Rock a<br />

través de medios más masivo que el los ‘80<br />

se dió en llamar “Nuevo Garage” o la vuelta<br />

de las “THE Bands”, bandas cuyos nombres<br />

empiezan con la palabra “The” (The Hives,<br />

The White Stripes, The Corals, etc.).<br />

The Hives<br />

“Veni, Vidi, Vicious”<br />

Nirvana<br />

“Nevermind”<br />

The Police<br />

“regatta de Blanc”<br />

<strong>Mensa</strong>piens<br />

Belle and Sebastian<br />

“Tigermilk”<br />

The Flaming Lips<br />

“Yoshimi battles pink robbots”<br />

Toto<br />

“Past to present”<br />

- 11 -


Notas<br />

Libertad de Pensar Diferente<br />

Gustavo Campotrondi<br />

Habiendo seguido de cerca la<br />

polémica entre “gimnastas”<br />

y “haraganes” me subo a la<br />

misma sin tomar partido pero si para<br />

marcarles un par de puntos a nuestros<br />

amigos columnistas.<br />

Para empezar veo en los argumentos<br />

Ariel un detalle que no puedo dejar<br />

pasar, y es que busca justifi car ese comportamiento<br />

(la actividad física) como<br />

si fuese algo malo o algo de que avergonzarse<br />

cuando en realidad no es así,<br />

ya que se trata de una actividad más<br />

en nuestras vidas, como ir de compras,<br />

estudiar o trabajar. Con ese error fundamental,<br />

que es base de su discurso,<br />

se cae toda su argumentación, pero<br />

seguiré un poco más con esta revisión.<br />

Ahora con respecto a la respuesta<br />

de Federico, me limitaré a hacer una<br />

pequeña observación: no todos necesitan<br />

ir al gimnasio para tener una vida<br />

sana, ni tienen que ser físicamente<br />

atractivos para tener una oportunidad<br />

en la vida. O acaso nunca se preguntaron<br />

como nuestros abuelos llegan<br />

“enteros” a la vejez cuando en su juventud<br />

no existían ni la “propaganda progimnasia”<br />

(como Ariel la defi ne), ni las<br />

comidas macrobióticas ni lo light; es la<br />

vida de trabajo lo que te puede mantener<br />

saludable. Ni hablar de la fragilidad<br />

de nuestro concepto de belleza. Por<br />

que si bien Federico lo plantea como un<br />

triste hecho de la vida, debería saber<br />

que es algo que sostiene (consiente o<br />

inconscientemente) con su analogía<br />

de la biblioteca y la encuadernación.<br />

Ahora bien, no creo que Federico haya<br />

tenido como intención fomentar la discriminación<br />

por las apariencias, ni que<br />

Ariel tenga como intención ser un paladín<br />

de la justicia defensor de aquellos<br />

que se creen feos (por que el origen de<br />

- 12 - <strong>Mensa</strong>piens<br />

toda diferencia es el sentirse diferente)<br />

porque seguramente él es igual de prejuicioso<br />

que cualquiera de nosotros.<br />

Lo importante es aprender de una<br />

buena vez por todas que las personas<br />

tienen libertad para hacer de su vida<br />

lo que ellas mismas dispongan y que la<br />

decisión que tomen no debe apartarlos<br />

de tener una mente abierta para ver<br />

el mundo de otra forma distinta a la<br />

suya, y no cerrarse en defi nir “bueno” y<br />

“malo” con su propia varilla. Porque si<br />

Ariel critica el ejercicio físico es tal vez<br />

porque a él no le sirve, y con ese juicio<br />

en mente juzga al resto de la sociedad<br />

que ejerce su derecho a ejercitarse o<br />

no. Así mismo como Federico defi ende<br />

su postura pensando que su defi nición<br />

de vida sana lo ampara.<br />

En fi n si vamos al gimnasio para<br />

sentirnos mejor con nosotros mismos,<br />

para ser más lindos, para hacer amigos,<br />

por diversión o por masoquismo, no<br />

es asunto de nadie más que uno, y<br />

no es importante tener un motivo ni<br />

una razón, porque es claro que en la<br />

vida miles de cosas ocurren sin razón<br />

escapándose tal vez a los principios de<br />

Newton.<br />

No me extenderé mas con mi “critica<br />

a la critica a la critica al ejercicio<br />

físico”, pero si expresaré con agrado la<br />

llegada de un lugar para desarrollar el<br />

intercambio de opiniones e ideas, ya<br />

que nos obligará a aprender a respetar<br />

la palabra de terceros y a crecer un<br />

poco como persona y como sociedad.<br />

Y eso es algo que hace tiempo que los<br />

argentinos necesitamos.<br />

<br />

PD: por si alguno se lo pregunta, empece<br />

a ir al gimnasio una par de días antes a la<br />

conclusión de este texto.<br />

Personajes<br />

Carlos Allende<br />

F<br />

edor Mikailovitch Dostoievski, nace<br />

en Moscú el 30 de Octubre de 1821.<br />

Considerado uno de los padres de la<br />

literatura rusa prerevolucionaria expone,<br />

entre muchísmas obras, las cinco que se<br />

constituirán en el paradigma de la novela<br />

moderna y del realismo fantastico.<br />

La serie de estas cinco obras, compuestas<br />

durante los ultimos quince años de su vida y<br />

que hacen de él un maestro de la novelistica,<br />

se inicia en 1866 con Crimen y Castigo. Ubicado<br />

en la corriente de la gran literatura rusa,<br />

junto a Tolstoi y Turghenev, que alcanzan la<br />

mas alta cima del estilo nacional realista,<br />

Dostoievski se distingue fundamentalmente<br />

de ellos por su modo de acercarse a los hechos<br />

de la realidad y por sus predilecciones.<br />

“Tengo una opinion particular sobre la<br />

realidad (en arte): Lo que la mayoria de<br />

la gente defi ne como excepcional y casi<br />

fantástico, a veces representa para mi la<br />

sustancia misma de lo real. El hecho que<br />

las cosas se repitan cotidianamente y se<br />

dejen registrar administrativamente no es<br />

realismo. En mi opinion, al contrario...”<br />

Ya Gogol habia percibido el lado fantástico<br />

de la burocracia, pero para Dostoievski<br />

se trata mas que de lo fantástico, de lo<br />

espiritual: “Tengo de la realidad y del realismo<br />

una opinión totalmente diversa de la<br />

de nuestros realistas y críticos. Mi idealismo<br />

es mas real que su realismo...”<br />

Dostoievski coloca a sus personajes en<br />

situaciones extremas, frente a elecciones<br />

decisivas, desgarradoras, de vida o de<br />

muerte. Hace de ellos criminales por la<br />

intención o de hecho, porque dice: “toda<br />

acción concluye hoy en el delito”.<br />

Efectivamente, en muchas de sus novelas<br />

encontramos delitos o, por lo menos, tentivas<br />

de delito. La acción es condensada en poco<br />

tiempo y espacio, concentrada en escenas<br />

llenas de dramaticidad. Esta fragmentación<br />

de los episodios en escenas que parecen compuestas<br />

menos para ser leidas que representadas<br />

y que hacen (aparentemente) tan fácil<br />

la adaptacion escénica de dichas novelas,<br />

han hecho que se defi nieran sus obras como<br />

“novelas-tragedias”. Ahora bien, la esencia de<br />

la tragedia consiste en que se desarrolla en<br />

dos planos, el de los acontecimientos reales<br />

y un segundo plano más elevado y a la vez<br />

más profundo. Lo que más importa a los<br />

heroes de Dostoievski es comprender el mas<br />

alla, se trate del infi erno o del paraiso. Aún<br />

desplazándose en una dimensión cotidiana,<br />

participan de aquello que la excede.<br />

Por último podríamos decir que estas<br />

cinco últimas obras son: Memorias del Subterraneo,<br />

Crimen y Castigo, El Idiota, Los<br />

Demonios y El Adolescente,<br />

sin desmerecer<br />

otras anteriores como<br />

El Jugador, por ejemplo.<br />

En las proximas<br />

entregas de la revista<br />

me referire a estas<br />

obras en particular.


Los Videojuegos son<br />

Increiblemente Estúpidos<br />

Robert Abbott<br />

an visto video juegos ultimamente?<br />

¿HLos gráfi cos son grandiosos, la música<br />

es impresionante, y son tan reales que casi<br />

parece estar viendo una película. ¿Pero que<br />

pasa? Bien, la mayor parte del tiempo uno<br />

ve a su héroe por detrás. Se sigue al héroe<br />

mientras atraviesa un pasillo, mira por la<br />

esquina, atraviesa otro pasillo y le dispara<br />

a algo. ¡Y eso es todo! Eso es todo, una y<br />

otra vez. Por supuesto que está tan realísticamente<br />

dibujado que uno casi siente que<br />

está allí. ¿Y que?<br />

En otro tipo de juegos, uno vuelve a<br />

estar por detrás del héroe, que en este caso<br />

monta un skate o viaja en auto y recorre un<br />

circuito. Entonces vuelve a recorrer el circuito.<br />

Y luego otra vez. Hay otros personajes<br />

que también recorren el circuito y tratan<br />

de ganarle al héroe. ¡Wow! Muy excitante,<br />

mientras uno no tenga más de cinco años...<br />

Estos dos formatos resumen la mayor<br />

parte de los juegos de video actuales. Hay<br />

algunos juegos mas (en su mayoría disponibles<br />

para computadora y no para consola)<br />

que utilizan otros formatos diferentes. Algunos<br />

de estos juegos realmente prometen,<br />

pero no me voy a molestar por un par de<br />

excepciones.<br />

Lo que es realmente deprimente acerca<br />

de los videojuegos es que solían ser realmente<br />

buenos. Espero que algún lector<br />

recuerde los juegos de fi nes de los ‘70 y de<br />

los ‘80, tales como Berserk, Q-Bert, Pac Man,<br />

Donkey Kong, Tetris y el brillante Chip’s Challenge.<br />

La mayoría de estos juegos daban una<br />

vista aérea o lateral del “campo de juego”.<br />

Los gráfi cos eran mínimos. El personaje que<br />

representaba al jugador era normalmente<br />

apenas un muñequito o una pequeña carita.<br />

La mayoría de estos juegos se basaban en la<br />

velocidad de respuesta, pero el jugador de<br />

hecho podía aplicar su razonamiento. Comparando<br />

con la actualidad, se podría decir<br />

que los ‘70s y ‘80s fueron la época de oro de<br />

los videojuegos.<br />

¿Que ocurrió? ¿Cómo terminaron los<br />

geniales guegos de aquella época de oro<br />

degradados en los aburridos e increiblemente<br />

estúpidos juegos de hoy en día?<br />

Yo encuentro cuatro causas que paso a<br />

detallar.<br />

1. Los jugadores de hoy son increiblemente estúpidos<br />

En los ‘70s y ‘80s, gente de todas las<br />

edades jugaban videojuegos. Los jugadores<br />

de hoy son casi exclusivamente adolescentes<br />

varones y niños pequeños. No voy<br />

a atacar a los niños porque ellos siempre<br />

han sido los más serios acerca de todo tipo<br />

de juegos. De modo que me concentraré<br />

en los adolescente que están ·metidos”<br />

en los juegos de rápida respuesta. Una<br />

compañía de videojuegos no editará un<br />

juego a menos que sea atractivo para esta<br />

audiencia principal. Cada tanto algún ejecutivo<br />

de una compañis de juegos aparece<br />

diciendo algo así como que “Queremos<br />

crear juegos que atraigan también a las<br />

chicas adolescentes”. Nunca se les ocurre<br />

pensar que tal vez esas chicas no sean sufi -<br />

cientemente estúpidas como para jugar<br />

esos juegos.<br />

Notas<br />

2. Los críticos son increiblemente estúpidos<br />

Existen muchas revistas dedicadas a<br />

los videojuegos, pero dichas revistas son<br />

tan tontas como los juegos acerca de los<br />

que escriben. Casi todo lo que tienen estas<br />

revistas son consejos sobre como ganar en<br />

los juegos. Explican “Cheats” (“Trampas”)<br />

para pasar al nivel siguiente sin tener que<br />

realmente terminar el nivel actual. Y los<br />

programadores incluyen estos “Cheats” en<br />

sus juegos para que las revistas escriban<br />

acerca de sus juegos.<br />

Si usted se es tan desafortunado como<br />

para tener por cable algún programa sobre<br />

videojuegos, probablemente alguna vez ha<br />

visto a los críticos. Generalmente son un<br />

par de post-adolescentes sobreexcitados<br />

que nos dicen que grandiosos son los juegos.<br />

Sus comentarios habitualmente contienen la<br />

siguiente frase o similar: “La acción es tan<br />

suave, los gráfi cos tan atrapantes y la música<br />

tan excitante que uno realmente siente que<br />

está matando a los monstruos.”. También<br />

suelen decir frecuentemente que la próxima<br />

generación del sistema de juegos del que<br />

estén hablando “será tan tecnológicamente<br />

avanzado , tan realista, que los hará saltar<br />

de sus sillas....”.<br />

Estos críticos y, desafortunadamente, la<br />

mayoría de los jugadores, parten de un concepto<br />

errado acerca de la naturaleza de los<br />

juegos. Creen que el propósito de un juego es<br />

imitar algo ede la vida real. Entonces, piensan<br />

que a mayor realismo, cuanto más cerca esté<br />

de la realidad, mejor será el juego. Sensillamente,<br />

se equivocan. No jugamos juegos para<br />

sustituir la realidad. De hecho, nadie sabe en<br />

realidad porque jugamos, pero seguro que el<br />

realismo no tiene nada que ver.<br />

Otras formas de arte también han sido<br />

atacadas por esta idea de que el arte debe<br />

imitar la realidad. Los ignorantes siempre<br />

han sostenido que una pintura debe parecerse<br />

a algo, y que cuanto mas realista<br />

es esa pintura, mejor es. Estas personas<br />

consideran al arte moderno como una aberración.<br />

Afortunadamente existen buenos<br />

críticos, y de hecho toda una escuela académica<br />

al respecto, que han demostrado<br />

que una pintura puede ser mucho mas que<br />

una representación de algo. Por supuesto,<br />

los ignorantes seguirán pensando que una<br />

pintura debe verse igual a algo, aunque<br />

incluso la fotografía, el más realista de los<br />

artes, ha estado intentando mastrar algo<br />

más que imágenes realistas.<br />

<strong>Mensa</strong>piens<br />

- 13 -


Notas<br />

Permitanme hablar de un juego particularmente<br />

estúpido que ilustra perfectamente<br />

como la noción de que se debe imitar la realidad<br />

termina arruinando todo. Este juego al<br />

que me refi ero se llama “Battle Chess”. Ya el<br />

ajedrez en si mismo está envuelto en cierta<br />

confusión. El ajedrez en sí es un juego completamente<br />

abstracto al que se le ha aplicado<br />

un “tema”; esto es que sus piezas han<br />

sido llamadas como personajes de una corte<br />

medieval. Sin embargo hay gente que piensa<br />

que el ajedrez fue diseñado para enseñar el<br />

arte de la guerra y que es una especie de<br />

simulación cruda de la realidad. Esta idea es<br />

completamente errónea, como cualquiera<br />

que sepa algo acerca de juegos puede confi<br />

rmar. Sin embargo, esta idea del “arte de la<br />

guerra” se ha repetido una y otra vez.<br />

Ahora bien, como piensan que el<br />

ajedrez es un juego de simulación, naturalmente<br />

piensan también que agregando<br />

realismo al juego lo van a mejorar. Entonces<br />

aparecieron con “Battle Chess”. En<br />

este juego, si por ejemplo envias a tu<br />

caballo a capturar a determinado peón,<br />

tu caballero montado tomará vida y atacará<br />

al peón, representado como un campesino,<br />

y le cortará la cabeza. “¡Wow!<br />

¡Eso sí que hace al ajedrez mucho más<br />

realista!” dijeron los críticos. De hecho<br />

dijeron que este juego cumplía una gran<br />

función: Acercar a los adolescentes al ajedrez<br />

(supongo yo que apelando a su innata<br />

sed de sangre...).<br />

3: Los diseñadores son increiblemente estupidos<br />

No sólo eso, sino que ni siquiera son<br />

diseñadores de juegos. Son simplemente<br />

programadores de computadoras y artistas<br />

gráfi cos. Las compañías de videojuegos ni<br />

siquiera comprenden el concepto de un<br />

diseñador de juegos. Para ellas, un juego o<br />

un puzzle no tienen consecuencias.<br />

- 14 - <strong>Mensa</strong>piens<br />

Estos “diseñadores” no tienen creatividad.<br />

Todo lo que saben hacer es tomar<br />

un viejo juego o puzzle (en lo posible de<br />

dominio público o si no directamente roban<br />

uno nuevo), le agregan mejores gráfi cos,<br />

música y efectos de sonido y ya tienen<br />

listo su videojuego. Y se quedan pensando<br />

que realizaron un trabajo brillante porque<br />

“le agregaron realismo al juego”. Ellos son,<br />

obviamente, fervientes creyentes de la idea<br />

de que el realismo es el único criterio para<br />

juzgar un juego.<br />

4. La tecnología ha mejorado mucho desde 1990<br />

Hasta ahora he repetido varias veces<br />

mi punto que es (para repetirlo una<br />

vez mas): “Agregar realismo no siempre<br />

implica mejorar un juego”. Pero es un<br />

concepto tramposo: A veces, el agregar<br />

realismo hace a un juego PEOR. Esto no<br />

debería sorprender, ya que es algo que<br />

también ocurre en otras formas de arte.<br />

Por ejemplo, en los años ‘20 exstian comedias<br />

mudas que mantenian a la audiencia<br />

riendose tan fuerte que sacudian sus<br />

asientos y pateaban el piso. Luego, en los<br />

‘30s, llegaron las comedias sonoras y luego<br />

se fueron perfeccionando hasta que ya no<br />

hubo comedias mudas. Desafortunadamente,<br />

las comedias sonoras nunca fueron<br />

tan divertidas como las mudas. Pero una<br />

vez que la gente vió el realismo de las películas<br />

sonoras, ya nadie quiso ver películas<br />

mudas (con excepción de “Silent movie”,<br />

de Mel Brooks). Sin embargo, en contraste,<br />

existian dramas mudos que en general<br />

eran bastante malos, que comenzaron a<br />

mejorar con la llegada del cine sonoro y<br />

que siguen mejorando hasta hoy en dia.<br />

Lo que ocurrió con la era de oro de las<br />

comedias ocurrió también con la de los<br />

videojuegos. Fue acabada por los avances<br />

de la tecnología. Las computadoras<br />

evolucionaron tan rápido que los programadores<br />

vieron que podian ir más allá de<br />

un muñequito o pequeñas caritas. Ahora<br />

podian dibujar a sus héroes y monstruos<br />

como personajes completamente tridimensionales.<br />

La mejor forma de ver a estos monstruos<br />

tridimensionales es con una vista frontal,<br />

mientras que la mejor forma de ver a nuestro<br />

héroe es desde atrás. No se los puede<br />

ver de costado o desde arriva, como en los<br />

viejos juegos.<br />

De modo que la vista aérea desapareció<br />

con la llegada de los gráfi cos 3D. Esto<br />

podría sonar como una gran mejora, sobre<br />

todo en aquellos juegos que involucran<br />

mapas o laberintos. Si alguna vez se estuvo<br />

en un laberinto real, se sabe que es mas<br />

interesante que mirar una vista superior<br />

del mismo. De modo que estos juegos deberían<br />

ser superiores a los antiguos pero,por<br />

supuesto, no lo son.<br />

Pienso que una de las principales razones<br />

de lo malo de los nuevos videojuegos es<br />

el paso de la vista aérea a la vista 3D. La<br />

vista aérea simplemente da mas información:<br />

Se puede ver donde están todos los<br />

monstruos, el camino que hay que recorrer,<br />

donde estan las barreras, etc. Y uno puede<br />

hacer un plan.<br />

En los juegos de vista 3D uno ve sólo lo<br />

que tiene adelante. Y lo único que hay que<br />

hacer es disparar a lo que se ve.<br />

¿Y que pasa con el laberinto? Bien, en<br />

un laberinto real si uno va por un corredor<br />

y da vuelta en una esquina, uno realmente<br />

sabe que acaba de girar y que ahora tiene<br />

una orientación difeente. Y gracias a<br />

esto puede ir armando un mapa mental.<br />

En cambio, si uno tiene un laberinto en<br />

3D en la pantalla y gira en una esquina,<br />

uno no siente realmente que a cambiado<br />

de orientación. Falta cierta información


cognitiva. En lugar de sentir que uno ha<br />

cambiado de dirección, simplemente se<br />

ve girar el laberinto alrededor de uno.<br />

Esto hace imposible crear un mapa mental<br />

del laberinto.<br />

Entonces, si esta vista en 3D es tan<br />

mala, ¿Porqué los diseñadores no vuelven<br />

a la vista aérea? Bueno, es por la misma<br />

razón que nadie hace una comedia muda<br />

hoy en día. Una vez que la gente se acostumbró<br />

a la vista 3D, siente que falta algo<br />

si se le presenta un juego de vista aérea.<br />

Si hoy en día se publicara un juego de este<br />

tipo, los críticos pensarían “Es evidente<br />

la falta de realismo, así que no puede ser<br />

bueno”.<br />

Acerca del autor:<br />

Robert Abbott es miembro de <strong>Mensa</strong> U.S.A. y es diseñador<br />

de juegos de cartas y de tablero. Algunos de sus juegos<br />

son “Eleusis”, “Babel”, “Metamorphosis”. “Epaminondas”<br />

y “Ultima” entre otros. También diseña juegos de<br />

laberintos lógicos y tiene un sitio web acerca del tema:<br />

www.logicmazes.com. En esta misma página pueden<br />

encontrar la nota original que se reproduce en esta revista<br />

y una sección para dejar comentarios al respecto. También<br />

publicó numerosos artículos sobre laberintos lógicos en las<br />

publicaciones de <strong>Mensa</strong> U.S.A. y gentilmente nos cedió<br />

este ensayo para su publicación en <strong>Mensa</strong>piens.<br />

De transgénicos y política<br />

Ariel Griglio<br />

En los últimos tiempos el discurso<br />

ecologista se enfocó en el tema de<br />

los productos transgénicos, motivados<br />

quizás por lo marketinero del mensaje,<br />

lo que les redunda en publicidad y apoyo<br />

económico y alentados disimuladamente por<br />

los gobiernos europeos que ven en los trangénicos<br />

una posibilidad de imponer barreras<br />

para-arancelarias más creíbles y disminuir<br />

así los subsidios que deben realizar a sus<br />

propias producciones agropecuarias.<br />

Estos movimientos hacen hincapié en<br />

dos aspectos del tema. Primero, que no está<br />

demostrada la inocuidad de estos productos y en<br />

segundo lugar, a manera de reaseguro, exigen la<br />

rotulación de todos los productos que contengan<br />

transgénicos. El primer punto es fácilmente<br />

rebatible, aunque el segundo requiere de fundamentaciones<br />

un tanto incómodas.<br />

Respecto a la inocuidad de los transgénicos,<br />

esta es indemostrable, ya que como<br />

conocen los abogados penalistas, los hechos<br />

negativos, los que no ocurren, no pueden ser<br />

demostrados. Veamos en ejemplo sencillo,<br />

demostrar la inocuidad de un vaso de agua. El<br />

encargado de esa demostración podrá realizar<br />

todos los ensayos conocidos, con la tecnología<br />

más avanzada y al no encontrar otra sustancia<br />

presente se vería tentado a afi rmar que el<br />

vaso de agua no puede generar ningún daño<br />

a la salud. Sin embargo debería contemplar la<br />

posibilidad de que existan en el vaso sustancias<br />

químicas aún desconocidas (y por lo tanto<br />

no analizadas) o incluso que pudiera haber sustancias<br />

en concentraciones tan pequeñas que<br />

fueran indetectables pero que igual fueran<br />

peligrosas. Contemplando esto, solo podría<br />

afi rmar estrictamente que no tiene motivos<br />

para afi rmar que el vaso de agua sea peligroso.<br />

Lo mismo ocurre con los transgénicos. Se<br />

evalúa exhaustivamente aquellas cuestiones<br />

donde hay riesgo de salud (básicamente alergias,<br />

debido a la liberación de nuevas proteínas)<br />

o de impacto negativo sobre el ambiente.<br />

Solo son liberados cuando se establece que no<br />

hay motivo para asegurar que sean riesgosos<br />

aun cuando nadie pueda asegurar su inocuidad,<br />

ya que no podrá afi rmarlo nunca. Lo mismo<br />

ocurre con los teléfonos celulares, los hornos<br />

microondas, los conservantes químicos, etc.<br />

Son los ecologístas denunciantes, entonces,<br />

los encargados de demostrar cual es el daño<br />

que pueden causar los transgénicos, lo que<br />

todavía no han hecho. En una próxima nota se<br />

intentará una explicación técnica acerca de<br />

en que consisten estas sustancias y por que,<br />

en primera instancia no implican riesgos.<br />

Notas<br />

El segundo punto, sobre el que más<br />

presionan estos movimientos, conociendo la<br />

debilidad del primero, es la exigencia de la<br />

rotulación. Este punto solo puede ser rebatido<br />

desde una posición paternalista que sostiene<br />

que la gente no está preparada como<br />

para no caer en una psicosis de rechazo<br />

irracional a los transgénicos. Nuevamente<br />

un ejemplo puede simplifi car el punto. Imagínese<br />

el lector consumidor que se acerca a<br />

una góndola de supermercado y lee, en la etiqueta<br />

de un alimento la siguiente advertencia:<br />

“Este producto, durante su elaboración,<br />

estuvo en contacto a altas temperaturas<br />

con solvente químico derivado del petróleo,<br />

con soda caústica, con ácido fosfórico y con<br />

tierras de blanqueo. Todos estos productos<br />

fueros eliminados antes del envasado de<br />

este producto”. Difícilmente se decida a<br />

comprar el producto, aunque en realidad<br />

esa leyenda se aplica perfectamente a todos<br />

los aceites vegetales (excepto el de oliva).<br />

Ergo, la exigencia de esa leyenda, que es<br />

correcta, solo benefi ciaría a los productores<br />

del producto más caro (aceite de oliva) y a<br />

los productores inescrupulosos que no cumplirían<br />

con la legislación. Lo mismo ocurriría<br />

con los transgénicos. Sólo benefi ciaría, y sin<br />

razón valedera, a los que producirían un producto<br />

más caro (los transgénicos abaratan la<br />

producción) o a las pequeñas empresas<br />

inescrupulosas que no temerían arriesgar<br />

su escaso capital en manejos ilegales, sobre<br />

todo en países subdesarrollados, donde los<br />

controles son excesivamente laxos.<br />

La ciencia no es infalible, pero es lo más<br />

confi able que tenemos. Sino, quedaremos a la<br />

merced de manipulaciones políticas sustentadas<br />

en intereses tan diversos como ajenos al tema.<br />

Un tema de tamaña importancia desde el<br />

punto de vista económico, que puede infl uir<br />

decididamente en las producción de alimento<br />

de las próximas décadas no debería quedar<br />

sujeto a poder de lobby de las multinacionales<br />

productores de estas semillas o de los ecologistas<br />

y países subsidiadores de su agricultura.<br />

La posición más racional radica en analizar el<br />

punto con objetividad y dejar que sea la ciencia<br />

la que determine la última palabra.<br />

<strong>Mensa</strong>piens<br />

- 15 -


Notas<br />

Bien de Familia<br />

Veronica Rocchi<br />

Puede resultar difícil despertar el<br />

interés por las fi guras técnicas<br />

de una especialidad en quienes<br />

no han elegido esa especialidad como<br />

medio de vida, pero así como la medicina,<br />

sin entrar en tecnicismos, procura<br />

alertar sobre la prevención de ciertas<br />

enfermedades, creo que vale la pena<br />

intentar acercar a la generalidad un instituto<br />

legal que, sin llegar al extremo de<br />

salvar vidas, pude evitar uno de los problemas<br />

más serios a los que un padre<br />

o madre de familia se pueda enfrentar:<br />

perder el techo.<br />

Concepto y utilidad del bien de familia o la<br />

“Teoría de la Campana de Sandwiches”.<br />

El bien de familia es una herramienta<br />

de derecho que permite evitar<br />

que los acreedores de una persona,<br />

embargen y rematen su vivienda o<br />

comercio. Se evita así la desprotección<br />

en que pudiera quedar la familia de ese<br />

deudor que, si bien obviamente seguirá<br />

endeudado y podrá tener que responder<br />

con otros bienes, al menos dejará a<br />

salvo el techo familiar.<br />

Pero ojo, no es una solución mágica<br />

para evitar el embargo y remate de los<br />

acreedores que me están rondando, la<br />

constititución de bien de familia sólo<br />

protege a futuro; o para ser más gráfi cos:<br />

Imagínese un plato con sandwiches al que<br />

ponemos una campana de esas que usan<br />

en los bares para evitar a las moscas. Si<br />

había moscas sobre los sandwiches, la<br />

campana no va a impedir que sigan atacando<br />

la comida. La campana solo va a<br />

servir para protección de las moscas que<br />

no se habían acercado aún al plato. Del<br />

mismo modo, el bien de familia solo va<br />

a proteger al inmueble de los acreedores<br />

que aparezcan después de la constititución.<br />

Si abro una cuenta bancaria, afecto<br />

mi propiedad a bien de familia y luego<br />

hago un desastre con la tarjeta de crédito<br />

ligada a esa cuenta, la afectación no<br />

me protege aunque el endeudamiento<br />

sea posterior, porque tiene origen en esa<br />

cuenta que antecede a la constititución<br />

de bien de familia. Ahora, si hago la<br />

afectación, y contraigo una deuda que<br />

no me es posible cancelar luego, el bien<br />

de familia protege al inmueble como un<br />

escudo en que las pretensiones de mis<br />

acreedores rebotan (sin perjuicio de que<br />

puedan cobrarse sobre otros bienes).<br />

- 16 - <strong>Mensa</strong>piens<br />

El planteamiento que muchos hacen<br />

es: cuál es la necesidad de constituir el<br />

inmueble en bien de familia para una<br />

persona que normalmente no desarrolla<br />

una actividad comercial y que paga sus<br />

deudas como Dios manda. La respuesta<br />

es obvia: los imponderables. No sería la<br />

primera vez que, por ejemplo, alguien<br />

con el auto mata accidentalmente a<br />

un peatón en la calle y la compañía de<br />

seguros se declara en quiebra dejando<br />

al asegurado desprotegido y en la obligación<br />

de pagar decenas de miles de pesos<br />

de la nada, por citar un caso común.<br />

Si consideramos que el bien de familia<br />

puede constituirse mediante un trámite<br />

sencillísimo que a nivel nacional es ABSO-<br />

LUTAMENTE GRATIS, entonces no hay excusa<br />

posible para no hacer la afectación, de la<br />

misma forma que no dejaríamos de vacunar<br />

a un chico solo porque consideramos<br />

poco probable que se enferme.<br />

Bienes que puedo afectar a este régimen.<br />

Puede constituirse sobre un único<br />

bien, pero este puede ser mi vivienda o<br />

el comercio que sustenta a mi familia.<br />

¿Quién puede hacer la afectación?<br />

Inexistencia de efectos colaterales.<br />

La afectación puede hacerla sólo el<br />

o los propietarios del inmueble simpre y<br />

cuando, de ser varios, éstos tengan un<br />

vínculo que los una.<br />

Para hacer la constitución es necesario<br />

tener benefi ciarios que podamos<br />

declarar como nuestra familia. Puede<br />

ser el cónyuge, un hijo, padres, abuelos<br />

aunque no vivan con nosotros, o si el propietario<br />

no tuviera vínculos tan cercanos,<br />

podrán ser colaterales hasta el tercer<br />

grado: hermanos, tíos, sobrinos (primos<br />

abstenerse), aunque en este caso deberemos<br />

declarar que viven con nosotros.<br />

Que alguien sea nuestro benefi ciario<br />

no le da derechos sobre nuestra propiedad,<br />

simplemente se trata de demostrar<br />

que tenemos familia, que es a quien la<br />

ley trata de proteger. Uno sigue siendo<br />

el dueño y puede vender, regalar, hipotecar<br />

sin darle explicaciones a nadie,<br />

levantando el bien de familia antes o en<br />

la misma escritura de venta. Unicamente<br />

se requerirá el consentimiento conyugal<br />

para desafectar cuando el propietario<br />

fuera casado, aunque no se exige este<br />

consentimiento para hacer la afectación.<br />

¿Cómo es el trámite?<br />

En todos los casos el propietario<br />

tiene que presentar su título de propiedad<br />

(original), su D.N.I. y la documentación<br />

que en su caso acredite el vínculo<br />

con la persona que declare benefi ciario:<br />

si se trata del cónyuge presentará<br />

la partida de matrimonio, si se trata de<br />

hijos o padres, la partida de nacimiento.<br />

Pero en cuanto al procedimiento existen<br />

tres opciones:<br />

a)Mediante testamento. Esto solo<br />

surte efectos para después de nuestra<br />

muerte, así que si son de los que<br />

piensan “después de mí la innundación”,<br />

olvídense.<br />

b)Por escritura pública. Este es el<br />

sistema más cómodo y rápido porque<br />

solo tienen que llevarle las cosas a<br />

un escribano y hacer cita para ir a<br />

fi rmar, pero tiene la desventaja de<br />

que van a tener que pagarle al profesional<br />

interviniente (que es notario<br />

pero no otario). Sin embargo conviene<br />

tenerlo muy en cuenta cuando<br />

estamos comprando la vivienda,<br />

porque en la misma escritura de<br />

compra, se puede dejar afectado el<br />

inmueble y ahí sí, normalmente los<br />

escribanos no cobran nada o chauchas<br />

por el trámite.<br />

c)Por acta ante el Registro de la Propiedad<br />

Inmueble que corresponda al<br />

lugar en que se encuentre el inmueble.<br />

Este es el procedimiento que,<br />

como dije, es por completo gratuito<br />

y, aunque es menos cómodo que ir<br />

a una escribanía, el trámite es realmente<br />

sencillo y no les damanda más<br />

que un par de horas. Pongo como<br />

ejemplo la constitución del bien de<br />

familia para inmuebles de la Capital<br />

Federal: Tiene que ir el propietario<br />

con la documentación pertinente en<br />

original y fotocopia a la sede del<br />

Registro en Av. Belgrano 1130 por la<br />

mañana. Verifi cada la documentación<br />

les devuelven los originales y les<br />

dan un turno para ir a fi rmar. Van el<br />

día estipulado (que suele ser un par<br />

de meses después) y los atieden en<br />

no más de quince minutos, transcurridos<br />

los cuales ya salen con su bien<br />

de familia hecho.


Lorem Ipsum<br />

Rodrigo Pablo Escudero<br />

Al crear un documento nuevo, al<br />

comenzar una página web, al previsualizar<br />

plantillas, una y otra<br />

vez un párrafo en latín que comienza<br />

con estas dos palabras nos llena de<br />

intriga, más de uno se habrá preguntado<br />

qué signifi ca y alguno con más<br />

tiempo se habrá puesto a traducirlo,<br />

y en fl or de lío se metió, el asunto es<br />

que el famoso pasaje comenzado con<br />

Lorem Ipsum se encuentra en muchas<br />

de nuestras aplicaciones. Pero... ¿Qué<br />

es Lorem Ipsum?<br />

El párrafo es simplemente texto<br />

de muestra utilizado en la industria<br />

de la imprenta y la linotipia, y ha sido<br />

empleado como texto estándar en esta<br />

industria desde casi sus comienzos allá<br />

por el siglo XVI, cuando un imprentero<br />

anónimo tomo una serie de tipos, y los<br />

mezcló para hacer un libro de muestra.<br />

Esta serie de tipos no solo sobrevivió<br />

durante varios siglos como modelo, sino<br />

que también ha llegado a nuestros días en<br />

su versión electrónica, permaneciendo<br />

casi inalterada. Su popularidad hizo auge<br />

en los años 60’s con el lanzamiento de<br />

las famosas “Letraset” que contenían un<br />

párrafo del “Lorem Ipsum” como modelo<br />

en la muestra de tipografías y luego<br />

siendo empleada por varios editores de<br />

todo tipo (texto, páginas web, etc.) que<br />

contenían versiones del párrafo.<br />

Al contrario de lo que se cree, el<br />

“lorem Ipsum” no es un simple texto<br />

azaroso, tiene sus bases en la literatura<br />

clásica (en latín) del año 45AC.<br />

Richard McClintock, un profesor de<br />

latín del instituto Hampden-Sydney<br />

en Virginia (EE.UU.), observó una<br />

palabra muy característica, consectetur,<br />

en el párrafo del lorem y<br />

siendo esta una palabra poco usada<br />

comenzó la búsqueda de su origen<br />

hasta dar con la indudable fuente.<br />

El pasaje del lorem Ipsum había sido<br />

extraído de las secciones 1.10.32 y<br />

1.10.33 del clásico de la literatura<br />

antigua “Los extremos del bien y<br />

del mal” ( de Finibus bonorum et<br />

malorum) de Cicero, escrita en el<br />

año 45AC. Este libro es un tratado<br />

teórico sobre la ética que fue muy<br />

popular durante la época renacentista.<br />

La primera línea del lorem<br />

Ipsum puede leerse en la sección<br />

1.10.32 que se reproduce más abajo.<br />

Pero ¿Por qué se sigue usando?, bueno<br />

es un hecho establecido que el lector<br />

tiende a distraerse con el contenido de la<br />

plantilla que está observando, y el lorem<br />

Ipsum tiene una distribución de letras<br />

más o menos normal y preferible a un<br />

parrafo completo de “texto texto texto...”,<br />

haciendo parecer a la muestra más real.<br />

Un detalle interesante sobre este<br />

pasaje, es que al ser utilizado por<br />

tantos editores como texto de muestra,<br />

y en especial editores web, si hacemos<br />

una búsqueda en el en cualquier motor,<br />

el Yahoo! por ejemplo, nos devolverá<br />

una cantidad increíble de páginas y<br />

documentos de los cuales sus autores<br />

olvidaron remover el lorem.<br />

Hoy existen variaciones al párrafo<br />

original de la muestra, muchas con<br />

toques de humor, y en Internet hay<br />

sitios donde se puede obtener un buen<br />

párrafo cargado de palabras en latín y<br />

sin el más mínimo sentido.<br />

Párrafo estándar utilizado desde el 1500<br />

“Lorem ipsum dolor sit amet, consectetur<br />

adipisicing elit, sed do<br />

eiusmod tempor incididunt ut labore<br />

et dolore magna aliqua. Ut enim ad<br />

minim veniam, quis nostrud exercitation<br />

ullamco laboris nisi ut aliquip<br />

ex ea commodo consequat. Duis<br />

aute irure dolor in reprehenderit in<br />

voluptate velit esse cillum dolore eu<br />

fugiat nulla pariatur. Excepteur sint<br />

occaecat cupidatat non proident,<br />

sunt in culpa qui offi cia deserunt<br />

mollit anim id est laborum.”<br />

Sección 1.10.32 “de Finibus Bonorum et Malorum”<br />

“Sed ut perspiciatis unde omnis iste<br />

natus error sit voluptatem accusantium<br />

doloremque laudantium, totam<br />

rem aperiam, eaque ipsa quae ab illo<br />

inventore veritatis et quasi architecto<br />

beatae vitae dicta sunt explicabo.<br />

Nemo enim ipsam voluptatem quia<br />

voluptas sit aspernatur aut odit aut<br />

fugit, sed quia consequuntur magni<br />

dolores eos qui ratione voluptatem<br />

sequi nesciunt. Neque porro quisquam<br />

est, qui dolorem ipsum quia<br />

dolor sit amet, consectetur, adipisci<br />

velit, sed quia non numquam eius<br />

modi tempora incidunt ut labore<br />

et dolore magnam aliquam quaerat<br />

voluptatem. Ut enim ad minima<br />

veniam, quis nostrum exercitationem<br />

ullam corporis suscipit laboriosam,<br />

nisi ut aliquid ex ea commodi consequatur?<br />

Quis autem vel eum iure<br />

reprehenderit qui in ea voluptate<br />

velit esse quam nihil molestiae consequatur,<br />

vel illum qui dolorem eum<br />

fugiat quo voluptas nulla pariatur?”<br />

Movimientos Simultáneos<br />

Diego Zanandrea<br />

Notas<br />

Hace unos meses hubo un concurso<br />

internacional donde el objetivo era<br />

inventar un juego para dos o más<br />

participantes con una condición: Las jugadas<br />

de todos los participantes debían ser<br />

simultáneas. La segunda condición era que<br />

los elementos a utilizar sólo podian incluir<br />

papel y lápiz o fi chitas simples (que podían<br />

ser piedritas, monedas, papelitos, etc.).<br />

Se me ocurrió una pequeña idea de<br />

juego, pero quedó archivada por un tiempo<br />

y lamentablemente se me pasó la fecha de<br />

cierre del concurso, así que la presentó aquí.<br />

Cualquier comentario o sugerencia, por<br />

favor enviar a editor@<strong>mensapiens</strong>.com.ar.<br />

El Juego<br />

Se trata de un juego para dos o más<br />

participantes y requiere una cantidad n de<br />

fi chitas (como ya dije, papelitos, porotos,<br />

piedritas, lo que sea). Son necesarias alrededor<br />

de 20 fi chitas por participante.<br />

Las fi chas se reparten en cantidades<br />

iguales entre todos los participantes.<br />

En cada ronda, todos los participantes<br />

seleccionan una cantidad x de sus fi chas (sin<br />

que los demás las vean). Una vez que todos<br />

seleccionaron sus fi chas, todos los participantes<br />

las muestran al mismo tiempo. El<br />

participante que apuesta el mayor número<br />

de fi chas, se las lleva todas.<br />

Claro que existen restricciones:<br />

- Si la apuesta mayor es superior<br />

al doble de la apuesta menor, la<br />

apuesta no se considera y gana la<br />

siguiente.<br />

- Si todas las apuestas son superiores<br />

al doble de la menor, la ronda se<br />

anula. Las apuestas quedan en el<br />

pozo y se las llevará quien gane la<br />

siguiente ronda.<br />

Cuando un jugador se queda sin fi chas,<br />

se termina el juego. El jugador con mayor<br />

cantidad de fi chas es el ganador.<br />

<strong>Mensa</strong>piens<br />

- 17 -


Reviews<br />

Diario de la Guerra del Cerdo<br />

Adolfo Bioy Casares<br />

Durante una semana se lleva a cabo en Buenos Aires una<br />

especie de guerra secreta (un secreto a voces) muy<br />

particular. Una guerra contra los viejos.<br />

A traves de la historia de Isidro Vidal, un hombre maduro,<br />

que defi nitivamente no es joven pero que aún no llega<br />

a ser considerado “viejo”, y su grupo de amigos, vamos<br />

siguiendo los sucesos de esa trágica y extraña semana<br />

cuyos motivos podemos intuir, pero que jamás llegamos a<br />

comprender del todo.<br />

Bioy, que cuenta que concibió esta novela en un momento<br />

de su vida en que se sintió envejecer, presenta un grupo de<br />

personajes brillantes, grandes situaciones y diálogos y, por<br />

sobre todo, una historia atrapante.<br />

Breve Historia de los Argentinos<br />

Félix Luna<br />

Breve es defi nitivamente la palabra clave. En apenas 273<br />

páginas, Luna recorre la historia de la <strong>Argentina</strong> desde<br />

la segunda fundación de Buenos Aires por Juan de Garay<br />

hasta la Revolución Libertadora.<br />

El libro no se concentra directamente en los hechos, que<br />

en muchos casos da por sabidos (la revolución de mayo, las<br />

invasiones inglesas, etc.), sino que se concentra especialmente<br />

en las causas y los efectos de tales hechos.<br />

El libro está escrito con un estilo ameno, casi de conversación,<br />

que no cansa. Lo único criticable es que en algunas<br />

partes se hecha de menos un detalle más profundo en ciertos<br />

hechos, sobre todo en el caso de lectores no argentinos,<br />

teniendo en cuenta que el libro se editó en otros países.<br />

- 18 - <strong>Mensa</strong>piens<br />

Al vuelo: “De la penumbra surgían a la<br />

claridad blancuzca, saltarines y ululantes<br />

muchachones armados de palos y hierros,<br />

que descargaban un castigo frenético<br />

sobre un bulto yacente en medio de los<br />

tachos y montones de basura. Vidal entrevió<br />

caras furiosas, notablemente jóvenes,<br />

como enajenadas por el alcohol de la arrogancia.<br />

Arévalo dijo por lo bajo ‘El bulto<br />

ése es el diariero, don Manuel’.”<br />

D.Z.<br />

Al vuelo: “Cuando digo que ‘selecciono’,<br />

es porque estoy usando<br />

ese fascinante poder que tiene el<br />

historiador al afi rmar ‘La historia<br />

es como yo la cuento’. Es decir que<br />

hago uso de esa facultad que tiene<br />

el que hace historia de establecer<br />

que ciertos hechos son relevantes y<br />

otros no.”<br />

D.Z.<br />

Gimnasia Cerebral<br />

Marilym Vos Savant<br />

La mujer con mayor coefi ciente intelectual del mundo<br />

despliega todo su conocimiento en el entrenamiento<br />

de la mente humana. El libro consta de decenas de<br />

consejos desarrollados a traves de un plan de tiempo<br />

que tiene como objetivo fortalecer y ayudar al cerebro<br />

a superarse dia tras dia. De alguna manera se busca<br />

aumentar la inteligencia, apelando a la capacidad no<br />

utilizada del cerebro, que requiere un entrenamiento<br />

como si fuera un músculo más del cuerpo, y el mas<br />

importante para muchas cosas. Un metodo efectivo y<br />

ameno, para todo público.<br />

Operación Masacre<br />

Rodolfo Walsh<br />

Al vuelo: “La mente es una cosa<br />

misteriosa que contiene no sólo la<br />

inteligencia y la memoria, sino también<br />

la percepción y las emociones.<br />

Pero es la inteligencia la que nos dá<br />

la capacidad de razonar, de hacer<br />

preguntas, de sumar dos mas dos, de<br />

separar genes, de transmitir a través<br />

de satélites y de enviar al Voyager<br />

más allá de Saturno.”<br />

F.P.<br />

Normalmente se suele mencionar “A sangre fría” (1965),<br />

de Truman Capote, como la primera novela de no-fi cción<br />

de la historia. Sin embargo, muchos consideran “Operación<br />

Masacre” (1957) como un antecedente directo.<br />

Esta mezcla de novela e investigación periodística relata<br />

los hechos de la masacre de Jose Leon Suarez, donde se<br />

intentó fusilar a un grupo de hombres sospechosos de<br />

formar parte del golpe del 9 de junio de 1956. Cuenta<br />

como Walsh se entera del tema y de la posible existencia<br />

de un sobreviviente, que luego resultan ser siete, los testimonios<br />

de ellos y la documentación correspondiente.<br />

El libro incluye, a modo de apéndices, diferentes prólogos<br />

y epílogos de diferentes ediciones, así como la “Carta<br />

abierta a la Junta Militar”.<br />

Al vuelo: “La primera noticia sobre los<br />

fusilamientos clandestinos de junio de<br />

1956 me llegó de forma casual, a fi nes<br />

de ese año, en un café de La Plata donde<br />

se jugaba ajedrez, se hablaba más de<br />

Keres o Nimzovitch que de Aramburo y<br />

Rojas, y la única maniobra militar que<br />

gozaba de algún renombre era el ataque<br />

a la bayoneta de Schlechter en la apertura<br />

siciliana.”<br />

D.Z.


Buffet Freud<br />

Rudy<br />

Saliendo del Jumbo, en las gondolitas para compulsivos<br />

(esas en las cajas) encontré este libro de Rudy al increíble<br />

precio de 6 $ y ya le dí un buen saque.<br />

El libro es un poco viejo y estos libros son de los que<br />

pasan de moda bastante rápido, pero es muy bueno. Es<br />

todo humor alrededor del psicoanálisis, parecido al humor<br />

de Fontanarrosa, aunque menos desopilante.<br />

Rudy maneja información y el lenguaje y expresiones<br />

tan particular del psicoanálisis.<br />

Es un libro recomendable, como dije, a los afectos al<br />

humor de Fontanarrosa y especialmente a los que para<br />

bien o para mal, están interesados en el psicoanálisis.<br />

Rudy fue psicoanalista y junto a Daniel Paz hacen el<br />

chiste de la tapa de Página 12.<br />

A.G.<br />

We’re a Happy Family - A Tribute to Ramones<br />

Varios<br />

El mundo de los discos-homenaje está compuesto casi exclusivamente<br />

de productos mediocres, en los que participan solamente<br />

uno o dos artistas medianamente conocidos. Defi nitivamente, este<br />

tributo a la mayor banda punk del mundo no es el caso.<br />

Producido por Rob Zombie y Johnny Ramone, este álbum reune<br />

diecisiete artistas de primer nivel interpretando magnífi cas versiones<br />

de clásicos de los Ramones. Y no sólo de grupos “obvios”<br />

como Green Day, Offspring o Rancid, sino también bandas y<br />

solistas tan dispares como Pretenders, Kiss, Eddie Vedder, Garbage,<br />

Peter Yorn o Metallica.<br />

Las perlas del disco son “Havana Affaire”, interpretado en su<br />

mejor estilo por Red Hot Chili Peppers, “Beat on the brat”, a la<br />

cual U2 le baja un par de velocidades y la sobrecogedora version<br />

de “The KKK took my baby away” por Marilyn Manson.<br />

Finalmente, Tom Waits<br />

les devuelve la gentileza<br />

a los Ramones por<br />

su cover de “I don’t<br />

wanna grow up” con<br />

una espléndida versión<br />

de “The return of Jackie<br />

and Judy”, lo mejor del<br />

disco.<br />

Un merecido homenaje.<br />

D.Z.<br />

Retro<br />

Varios<br />

Reviews<br />

Desde el mes de marzo la señal de cable Uniseries profundizó los<br />

cambios de programación que venian asomando desde hacia un<br />

tiempo y cambió de nombre: ahora es “Retro”.<br />

A la pila de series clásicas que se proyectan (Bonanza, Los Intocables,<br />

Combate, Jim West, Misión Imposible, etc.), se suman varios ciclos de<br />

películas donde pueden verse grandes clásicos de todos los tiempos.<br />

Cinemateca: Clásicos del cine de todos los géneros. Se pudo ver Los<br />

siete magnífi cos, Doce hombres en pugna y La noche del cazador, entre<br />

otras. Este mes podrán verse Toro salvaje y Heredaras el viento.<br />

Vade Retro: Cine bizarro y de terror. Desde producciones de la<br />

Universal (Bride of Frankenstein) hasta Hammer (Blood of Dracula),<br />

desde Roger Corman (El entierro prematuro) hasta George<br />

Romero (Night of the Living Dead). Este mes es imperdible “El<br />

Abominable Dr. Phibes”, con Vincent Price.<br />

Matine: La reencarnación de Sabados de Superacción, con tres películas<br />

por semana que incluyen westerns, peplums, guerra, acción, etc.<br />

Shhh: Un ciclo de cine mudo, con clásicos como Nosferatu, Metropolis<br />

y El Gabinete del Dr. Caligari.<br />

Especiales: Todos los meses un mismo tema ocupa las noches de los lunes.<br />

El mes pasado fueron fi lms futuristas (Rollerball, Pánico en el año cero) y<br />

este mes es Blaxploitation (películas de negros de los años ‘70).<br />

We’re Only in it for the Money<br />

Frank Zappa & The Mothers of Invention<br />

<strong>Mensa</strong>piens<br />

D.Z.<br />

El tercer álbum de Frank Zappa llegó en pleno “Verano del<br />

amor”, y lo hizo con un disco conceptual que fue la más dura<br />

cachetada que recibiría la cultura hippie ya desde la tapa, una<br />

monumental parodia de la de “Sgt. Pepper’s...”, de los Beatles.<br />

Canciones como “Who needs the peace corps?” o “Are you hang<br />

up?” golpean directamente contra los hippies y su cultura de paz,<br />

amor libre, música y drogas (“Flower Punk” culmina con la explosión<br />

de la cabeza del protagonista a causa de una dosis de STP).<br />

Pero los hippies no son las únicas víctimas de la ácida crítica de<br />

Zappa. “Concentration Moon” y “Mom & Dad” cargan contra el<br />

gobierno y temas como “What’s the ugliest part of your body?” toma<br />

la crítica contra los padres, como la ya mencionada “Mom & Dad”.<br />

Lo que originalmente era el lado B del disco era más personal, sin perder<br />

la línea crítica. “Let’s make the water turn black” cuenta la historia de<br />

dos personajes muy peculiares,<br />

mientras que “Nasal retentive<br />

calliope music” y “Chrome<br />

plated megaphone of destiny”,<br />

con su caos sonoro y experimentos<br />

electrónicos son un adelanto<br />

de su álbum “Lumpy Gravy”.<br />

Dentro del top 5 de los mejores<br />

discos de Zappa.<br />

D.Z.<br />

- 19 -


Escritos<br />

El Fantasma de Canterville<br />

Oscar Wilde<br />

Capítulo IV<br />

Al día siguiente el fantasma se sintió<br />

muy débil, muy cansado.<br />

Las terribles emociones de las cuatro<br />

últimas semanas empezaban a producir su<br />

efecto.<br />

Tenía el sistema nervioso completamente<br />

alterado, y temblaba al más ligero<br />

ruido.<br />

No salió de su habitación en cinco días,<br />

y concluyó por hacer una concesión en lo<br />

relativo a la mancha de sangre del “parquet”<br />

de la biblioteca. Puesto que la familia Otis<br />

no quería verla, era indudablemente que no<br />

la merecía. Aquella gente estaba colocada<br />

a ojos vistas en un plano inferior de vida<br />

material y era incapaz de apreciar el valor<br />

simbólico de los fenómenos sensibles.<br />

La cuestión de las apariciones de fantasmas<br />

y el desenvolvimiento de los cuerpos<br />

astrales era realmente para ellos cosa<br />

desconocida e indiscutiblemente fuera de<br />

su alcance.<br />

Pero, por lo menos, constituía para él un<br />

deber ineludible mostrarse en el corredor<br />

una vez a la semana y farfullar por la gran<br />

ventana ojival el primero y el tercer miércoles<br />

de cada mes. No veía ningún medio digno<br />

de sustraerse a aquella obligación.<br />

Verdad es que su vida fue muy criminal;<br />

pero, quitado eso, era hombre muy concienzudo<br />

en todo cuanto se relacionaba con lo<br />

sobrenatural.<br />

Así, pues, los tres sábados siguientes<br />

atravesó, como de costumbre, el corredor<br />

entre doce de la noche y tres de la madrugada,<br />

tomando todas las precauciones posibles<br />

para no ser visto ni oído.<br />

Se quitaba las botas, pisaba lo más ligeramente<br />

que podía sobre las viejas maderas<br />

carcomidas, envolvíase en una gran capa<br />

de terciopelo negro, y no dejaba de usar<br />

el engrasador “Sol-Levante” para engrasar<br />

sus cadenas. Me veo precisado a reconocer<br />

que sólo después de muchas vacilaciones<br />

se decidió a adoptar este último medio de<br />

protección. Pero, al fi n, una noche, mientras<br />

cenaba la familia, se deslizó en el dormitorio<br />

de mistress Otis y se llevó el frasquito.<br />

Al principio se sintió un poco humillado,<br />

pero después fue sufi cientemente razonable<br />

para comprender que aquel invento merecía<br />

grandes elogios y cooperaba, en cierto<br />

modo, a la realización de sus proyectos.<br />

A pesar de todo, no se vio a cubierto de<br />

matracas.<br />

No dejaban nunca de tenderle cuerdas<br />

- 20 - <strong>Mensa</strong>piens<br />

de lado a lado del corredor para hacer<br />

tropezar en la oscuridad, y una vez que se<br />

había disfrazado para el papel de «Isaac el<br />

Negro o el cazador del bosque de Hogsley»,<br />

cayó cuan largo era al poner el pie sobre una<br />

pista de maderas enjabonadas que habían<br />

colocado los gemelos desde el umbral del<br />

salón de Tapices hasta la parte alta de la<br />

escalera de roble.<br />

Esta última afrenta le dio tal rabia, que<br />

decidió hacer un esfuerzo para imponer su<br />

dignidad y consolidar su posición social, y<br />

formó el proyecto de visitar a la noche<br />

siguiente a los insolentes chicos de Eton, en<br />

su célebre papel de «Ruperto el Temerario o<br />

el conde sin cabeza».<br />

No se había mostrado con aquel disfraz<br />

desde hacía sesenta años, es decir, desde<br />

que causó con él tal pavor a la bella lady<br />

Bárbara Modish, que ésta retiró su consentimiento<br />

al abuelo de actual lord Canterville<br />

y se fugó a Gretna Green con el arrogante<br />

Jach Castletown, jurando que por nada<br />

del mundo consentiría en emparentar con<br />

una familia que toleraba los paseos de un<br />

fantasma tan horrible por la terraza, al<br />

atardecer.<br />

El pobre Jack fue al poco tiempo muerto<br />

en duelo por lord Canterville en la pradera<br />

de Wandsworth, y lady Bárbara murió de<br />

pena en Tumbridge Wells antes de terminar<br />

el año; así es que fue un gran éxito por todos<br />

conceptos.<br />

Sin embargo, era, permitiéndome<br />

emplear un término de argot teatral para<br />

aplicarlo a uno de los mayores misterios<br />

del mundo sobrenatural (o en lenguaje más<br />

científi co), «del mundo superior a la Naturaleza»,<br />

era, repito, una creación de las más<br />

difíciles, y necesitó sus tres buenas horas<br />

para terminar los preparativos.<br />

Por fi n, todo estuvo listo, y él contentísimo<br />

de su disfraz.<br />

Las grandes botas de montar, que hacían<br />

juego con el traje, eran, eso sí, un poco holgadas<br />

para él, y no pudo encontrar más que<br />

una de las dos pistolas del arzón; pero, en<br />

general, quedó satisfechísimo, y a la una<br />

y cuarto pasó a través del estuco y bajó a<br />

corredor.<br />

Cuando estuvo cerca de la habitación<br />

ocupada por los gemelos, a la que llamaré el<br />

dormitorio azul, por el color de sus cortinajes,<br />

se encontró con la puerta entreabierta.<br />

A fi n de hacer una entrada sensacional,<br />

la empujó con violencia, pero se le vino<br />

encima una jarra de agua que le empapó<br />

hasta los huesos, no dándole en el hombro<br />

por unos milímetros.<br />

Al mismo tiempo oyó unas risas sofoca-<br />

das que partían de la doble cama con dosel.<br />

Su sistema nervioso sufrió tal conmoción,<br />

que regresó a sus habitaciones a todo<br />

escape, y al día siguiente tuvo que permanecer<br />

en la cama con un fuerte reúma.<br />

El único consuelo que tuvo fue el de no<br />

haber llevado su cabeza sobre los hombros,<br />

pues sin esto las consecuencias hubieran<br />

podido ser más graves.<br />

Desde entonces renunció para siempre a<br />

espantar a aquella recia familia de americanos,<br />

y se limitó a vagar por el corredor, con<br />

zapatillas de orillo, envuelto el cuello en una<br />

gruesa bufanda, por temor a las corrientes<br />

de aire, y provisto de un pequeño arcabuz,<br />

para el caso en que fuese atacado por los<br />

gemelos.<br />

Hacia el 19 de septiembre fue cuando<br />

recibió el golpe de gracia.<br />

Había bajado por la escalera hasta el<br />

espacioso “hall”, seguro de que en aquel<br />

sitio por lo menos estaba a cubierto de jugarretas,<br />

y se entretenía en hacer observaciones<br />

satíricas sobre las grandes fotografías<br />

del ministro de los Estados Unidos y de su<br />

mujer, hechas en casa de Sarow.<br />

Iba vestido sencilla, pero decentemente,<br />

con un largo sudario salpicado de moho de<br />

cementerio. Habíase atado la quijada con<br />

una tira de tela y llevaba una linternita y<br />

una azadón de sepulturero.<br />

En una palabra, iba disfrazado de «Jonás<br />

el Desenterrador, o el ladrón de cadáveres<br />

de Cherstey Barn».<br />

Era una de sus creaciones más notables<br />

y de las que guardaban recuerdo, con más<br />

motivo, los Canterville, ya que fue la verdadera<br />

causa de su riña con lord Rufford,<br />

vecino suyo.<br />

Serían próximamente las dos y cuarto<br />

de la madrugada, y, a su juicio, no se movía<br />

nadie en la casa. Pero cuando se dirigía tranquilamente<br />

en dirección a la biblioteca, para<br />

ver lo que quedaba de la mancha de sangre,<br />

se abalanzaron hacia él, desde un rincón<br />

sombrío, dos siluetas, agitando locamente<br />

sus brazos sobre sus cabezas, mientras gritaban<br />

a su oído:<br />

-¡Uú! ¡Uú! ¡Uú!<br />

Lleno de pánico, cosa muy natural en<br />

aquellas circunstancias, se precipitó hacia la<br />

escalera, pero entonces se encontró frente<br />

a Washington Otis, que le esperaba armado<br />

con la regadera del jardín; de tal modo, que,<br />

cercado por sus enemigos, casi acorralado,<br />

tuvo que evaporarse en la gran estufa de<br />

hierro colado, que, afortunadamente para<br />

él, no estaba encendida, y abrirse paso<br />

hasta sus habitaciones por entre tubos y<br />

chimeneas, llegando a su refugio en el tre-


mendo estado en que lo pusieron la agitación,<br />

el hollín y la desesperación.<br />

Desde aquella noche no volvió a vérsele<br />

nunca de expedición nocturna.<br />

Los gemelos se quedaron muchas veces<br />

en acecho para sorprenderle, sembrando<br />

de cáscara de nuez los corredores todas las<br />

noche, con gran molestia de sus padres y<br />

criados. Pero fue inútil.<br />

Su amor propio estaba profundamente<br />

herido, sin duda, y no quería mostrarse.<br />

En vista de ello, míster Otis se puso a<br />

trabajar en su gran obra sobre la historia del<br />

partido demócrata, obra que había empezado<br />

tres años antes.<br />

Mistress Otis organizó un “clam-bake”<br />

extraordinario, del que se habló en toda la<br />

comarca.<br />

Los niños se dedicaron a jugar a la barra,<br />

al ecarté, al “poker” y a otras diversiones<br />

nacionales de América.<br />

Virginia dio paseos a caballo por las<br />

carreteras, en compañía del duquesito de<br />

Cheshire, que se hallaba en Canterville<br />

pasando su última semana de vacaciones.<br />

Todo el mundo se fi guraba que el fantasma<br />

había desaparecido, hasta el punto<br />

de que míster Otis escribió una carta a lord<br />

Canterville para comunicárselo, y recibió en<br />

contestación otra carta en la que éste le testimoniaba<br />

el placer que le producía la noticia<br />

y enviaba sus más sinceras felicitaciones<br />

a la digna esposa del ministro.<br />

Pero los Otis se equivocaban.<br />

El fantasma seguía en la casa, y, aunque<br />

se hallaba muy delicado, no estaba dispuesto<br />

a retirarse, sobre todo después de saber que<br />

fi guraba entre los invitados el duquesito<br />

de Cheshire, cuyo tío, lord Francis Stilton,<br />

apostó una vez con el coronel Carbury a<br />

que jugaría a los dados con el fantasma de<br />

Canterville.<br />

A la mañana siguiente se encontraron a<br />

lord Stilton tendido sobre el suelo del salón<br />

de juego en un estado de parálisis tal que, a<br />

pesar de la edad avanzada que alcanzó, no<br />

pudo ya nunca pronunciar más palabras que<br />

éstas:<br />

-¡Seis doble!<br />

Esta historia era muy conocida en un<br />

tiempo, aunque, en atención a los sentimientos<br />

de dos familias nobles, se hiciera<br />

todo lo posible por ocultarla, y existe un<br />

relato detallado de todo lo referente a ella<br />

en el tomo tercero de las “Memorias de<br />

lord Tattle sobre el Príncipe Regente y sus<br />

amigos”.<br />

Desde entonces, el fantasma deseaba<br />

vivamente probar que no había perdido<br />

su infl uencia sobre los Stilton, con los que<br />

además estaba emparentado por matrimonio,<br />

pues una prima suya se casó en segundas<br />

nupcias con el señor Bulkeley, del que<br />

descienden en línea directa, como todo el<br />

mundo sabe, los duques de Cheshire.<br />

Por consiguiente, hizo sus preparativo<br />

para mostrarse al pequeño enamorado de<br />

Virginia en su famoso papel de «Fraile vampiro,<br />

o el benedictino desangrado».<br />

Era un espectáculo espantoso, que<br />

cuando la vieja lady Starbury se lo vio representar,<br />

es decir en víspera del Año Nuevo<br />

de 1764, empezó a lanzar chillidos agudos,<br />

que tuvieron por resultado un fuerte ataque<br />

de apoplejía y su fallecimiento al cabo de<br />

tres días, no sin que desheredara antes a<br />

los Canterville y legase todo su dinero a su<br />

farmacéutico en Londres.<br />

Pero, a última hora, el terror que le<br />

inspiraban los gemelos le retuvo en su habitación,<br />

y el duquesito durmió tranquilo en el<br />

gran lecho con dosel coronado de plumas del<br />

dormitorio real, soñando con Virginia.<br />

Capitulo V<br />

Virginia y su adorador de cabello rizado<br />

dieron, unos días después, un paseo a caballo<br />

por los prados de Brockley, paseo en el<br />

que ella desgarró su vestido de amazona al<br />

saltar un seto, de tal manera que, de vuelta<br />

a su casa, entró por la escalera de detrás<br />

para que no la viesen.<br />

Al pasar corriendo por delante de la<br />

puerta del salón de Tapices, que estaba<br />

abierta de par en par, le pareció ver a<br />

alguien dentro.<br />

Pensó que sería la doncella de su madre,<br />

que iba con frecuencia a trabajar a esa<br />

habitación.<br />

Asomó la cabeza para encargarle que le<br />

cosiese el vestido.<br />

¡Pero, con gran sorpresa suya, quien<br />

allí estaba era el fantasma de Canterville<br />

en persona!<br />

Habíase acomodado ante la ventana,<br />

contemplando el oro llameante de los<br />

árboles amarillentos que revoloteaban por<br />

el aire, las hojas enrojecidas que bailaban<br />

locamente a lo largo de la gran avenida.<br />

Tenía la cabeza apoyada en una mano, y<br />

toda su actitud revelaba el desaliento más<br />

profundo.<br />

Realmente presentaba un aspecto tan<br />

abrumado, tan abatido, que la pequeña Virginia,<br />

en vez de ceder a su primer impulso,<br />

que fue echar a correr a encerrarse en su<br />

cuarto, se sintió llena de compasión y tomó<br />

el partido de ir a consolarle.<br />

Tenía la muchacha un paso tan ligero y<br />

él una melancolía tan honda, que no se dio<br />

Escritos<br />

cuenta de su presencia hasta que le habló.<br />

-Lo he sentido mucho por usted -dijo-,<br />

pero mis hermanos regresan mañana a Eton,<br />

y entonces, si se porta usted bien nadie le<br />

atormentará.<br />

-Es inconcebible pedirme que me porte<br />

bien -le respondió, contemplando estupefacto<br />

a la jovencita que tenía la audacia<br />

de dirigirle la palabra-. Perfectamente<br />

inconcebible. Es necesario que yo sacuda<br />

mis cadenas, que gruña por los agujeros de<br />

las cerraduras y que corretee de noche. ¿Eso<br />

es lo que usted llama portarse mal? No tengo<br />

otra razón de ser.<br />

-Eso no es una razón de ser. En sus<br />

tiempos fue usted muy malo ¿sabe? Mistress<br />

Umney nos dijo el día que llegamos que<br />

usted mató a su esposa.<br />

-Sí, lo reconozco -respondió incautamente<br />

el fantasma-. Pero era un asunto de<br />

familia y nadie tenía que meterse.<br />

-Está muy mal matar a nadie -dijo Virginia,<br />

que a veces adoptaba un bonito gesto de<br />

gravedad puritana, heredado quizás de algún<br />

antepasado venido de Nueva Inglaterra.<br />

-¡Oh, no puedo sufrir la severidad barata<br />

de la moral abstracta! Mi mujer era feísima.<br />

No almidonaba nunca lo bastante mis puños<br />

y no sabía nada de cocina. Mire usted: un<br />

día había yo cazado un soberbio ciervo en<br />

los bosques de Hogsley, un hermoso macho<br />

de dos años. ¡Pues no puede usted fi gurarse<br />

cómo me lo sirvió! Pero, en fi n, dejemos eso.<br />

Es asunto liquidado, y no encuentro nada<br />

bien que sus hermanos me dejasen morir de<br />

hambre, aunque yo la matase.<br />

-¡Que lo dejaran morir de hambre! ¡Oh<br />

señor fantasma...! Don Simón, quiero decir,<br />

¿es que tiene usted hambre? Hay un “sandwich”<br />

en mi costurero. ¿Le gustaría?<br />

-No, gracias, ahora ya no como; pero, de<br />

todos modos, lo encuentro amabilísimo por<br />

su parte. ¡Es usted bastante más atenta que<br />

el resto de su horrible, arisca, ordinaria y<br />

ladrona familia!<br />

-¡Basta! -exclamó Virginia, dando con<br />

el pie en el suelo-. El arisco, el horrible y<br />

el ordinario lo es usted. En cuanto a lo de<br />

ladrón, bien sabe usted que me ha robado<br />

mis colores de la caja de pinturas para restaurar<br />

esa ridícula mancha de sangre en la<br />

biblioteca. Empezó usted por coger todos<br />

mis rojos, incluso el bermellón, imposibili-<br />

<strong>Mensa</strong>piens<br />

- 21 -


Escritos<br />

tándome para pintar puestas de sol. Después<br />

agarró usted el verde esmeralda y el amarillo<br />

cromo. Y, fi nalmente, sólo me queda el<br />

añil y el blanco. Así es que ahora no puedo<br />

hacer más que claros de luna, que da grima<br />

ver, e incomodísimos, además, de colorear.<br />

Y no le he acusado, aún estando fastidiada<br />

y a pesar de que todas esa cosas son completamente<br />

ridículas. ¿Se ha visto alguna vez<br />

sangre color verde esmeralda...?<br />

-Vamos a ver -dijo el fantasma, con cierta<br />

dulzura-: ¿y qué iba yo a hacer? Es difi cilísimo<br />

en los tiempos actuales agenciarse sangre de<br />

verdad, y ya que su hermano empezó con su<br />

quitamanchas incomparable, no veo por qué<br />

no iba yo a emplear los colores de usted<br />

para resistir. En cuanto al tono, es cuestión<br />

de gusto. Así, por ejemplo, los Canterville<br />

tienen sangre azul, la sangre más azul que<br />

existe en Inglaterra... Aunque ya sé que<br />

ustedes los americanos no hacen el menor<br />

caso de esas cosas.<br />

-No sabe usted nada, y lo mejor que<br />

puede hacer es emigrar, y así se formará<br />

idea de algo. Mi padre tendrá un verdadero<br />

gusto en proporcionarle un pasaje gratuito,<br />

y aunque haya derechos de puertas elevadísimos<br />

sobre toda clase de cosas, no no le<br />

pondrán difi cultades en la Aduana. Y una vez<br />

en Nueva York, puede usted contar con un<br />

gran éxito. Conozco infi nidad de personas<br />

que darían cien mil dólares por tener antepasados<br />

y que sacrifi carían mayor cantidad<br />

aún por tener un fantasma de «familia».<br />

-Creo que no me divertiría mucho en<br />

América.<br />

-Quizás se deba a que allí no tenemos ni<br />

ruinas ni curiosidades -dijo burlonamente<br />

Virginia.<br />

-¡Qué curiosidades ni qué ruinas! -contestó<br />

el fantasma-. Tienen ustedes su Marina<br />

y sus modales.<br />

-Buenas noches; voy a pedir a papá que<br />

conceda a los gemelos una semana más de<br />

vacaciones.<br />

-¡No se vaya, miss Virginia, se lo suplico!<br />

-exclamó el fantasma-. Estoy tan solo y soy<br />

tan desgraciado, que no sé que hacer. Quisiera<br />

ir a acostarme y no puedo.<br />

-Pues es inconcebible: no tiene usted<br />

- 22 - <strong>Mensa</strong>piens<br />

más que meterse en la cama y apagar la luz.<br />

Algunas veces es difi cilísimo permanecer<br />

despierto, sobre todo en una iglesia, pero,<br />

en cambio, dormir es muy sencillo. Ya ve<br />

usted: los gemelos saben dormir admirablemente,<br />

y no son de los más listos.<br />

-Hace trescientos años que no duermo<br />

-dijo el anciano tristemente, haciendo que<br />

Virginia abriese mucho sus hermosos ojos<br />

azules, llenos de asombro-. Hace ya trescientos<br />

años que no duermo, así es que me<br />

siento cansadísimo.<br />

Virginia adoptó un grave continente, y<br />

sus fi nos labios se movieron como pétalos<br />

de rosa.<br />

Se acercó y arrodillándose al lado del<br />

fantasma, contempló su rostro envejecido<br />

y arrugado.<br />

-Pobrecito fantasma -profi rió a media voz<br />

-, ¿y no hay ningún sitio donde pueda usted<br />

dormir?<br />

-Allá lejos, pasando el pinar -respondió<br />

él en voz baja y soñadora -, hay un jardincito.<br />

La hierba crece en él alta y espesa; allí<br />

pueden verse las grandes estrellas blancas<br />

de la cicuta, allí el ruiseñor canta toda la<br />

noche. Canta toda la noche, y la luna de<br />

cristal helado deja caer su mirada y el tejo<br />

extiende sus brazos de gigante sobre los<br />

durmientes.<br />

Los ojos de Virginia se empañaron de<br />

lágrimas y sepultó la cara entre sus manos.<br />

-Se refi ere usted al jardín de la Muerte<br />

-murmuró -.<br />

-¡Sí, de la muerte; ¡que debe ser<br />

hermosa! ¡Descansar en la blanda tierra<br />

oscura, mientras las hierbas se balancean<br />

encima de nuestra cabeza, y escuchar<br />

el silencio! No tener ni ayer ni mañana.<br />

Olvidarse del tiempo y de la vida; morar<br />

en paz. Usted puede ayudarme; usted<br />

puede abrirme de par en par las puertas<br />

de la muerte, porque el amor le acompaña<br />

a usted siempre, y el amor es más fuerte<br />

que la muerte.<br />

Virginia tembló. Un estremecimiento<br />

helado recorrió todo su ser, y durante unos<br />

instantes hubo un gran silencio.<br />

Parecíale vivir un sueño terrible.<br />

Entonces el fantasma habló de nuevo<br />

con una voz que resonaba como los suspiros<br />

del viento:<br />

-¿Ha leído usted alguna vez la antigua<br />

profecía que hay sobre las vidrieras de la<br />

biblioteca?<br />

-¡Oh, muchas veces! -exclamó la muchacha<br />

levantando los ojos -. La conozco muy<br />

bien. Está pintada con unas curiosas letras<br />

doradas y se lee con difi cultad. No tiene más<br />

que éstos seis versos:<br />

Cuando una joven rubia logre hacer brotar<br />

una oración de los labios del pecador,<br />

cuando el almendro estéril dé fruto<br />

y una niña deje correr su llanto,<br />

entonces, toda la casa recobrará la tranquilidad<br />

y volverá la paz a Canterville.<br />

Pero no sé lo que signifi can.<br />

-Signifi can que tiene usted que llorar conmigo<br />

mis pecados, porque no tengo lágrimas, y<br />

que tiene usted que rezar conmigo por mi alma,<br />

porque no tengo fe, y entonces, si ha sido usted<br />

siempre dulce, buena y cariñosa, el ángel de la<br />

muerte se apoderará de mí. Verá usted seres<br />

terribles en las tinieblas y voces funestas murmurarán<br />

en sus oídos, pero no podrán hacerle<br />

ningún daño, porque contra la pureza de una<br />

niña no pueden nada las potencias infernales.<br />

Virginia no contestó, y el fantasma retorcíase<br />

las manos en la violencia de su desesperación,<br />

sin dejar de mirar la rubia cabeza inclinada.<br />

De pronto se irguió la joven, muy pálida,<br />

con un fulgor en los ojos.<br />

-No tengo miedo -dijo con voz fi rme - y<br />

rogaré al ángel que se apiade de usted.<br />

Levantóse el fantasma de su asiento lanzando<br />

un débil grito de alegría, cogió la blonda<br />

cabeza entre sus manos, con una gentileza que<br />

recordaba los tiempos pasados, y la besó.<br />

Sus dedos estaban fríos como hielo y sus<br />

labios abrasaban como el fuego, pero Virginia no<br />

fl aqueó; después la hizo atravesar la estancia sombría.<br />

Sobre el tapiz, de un verde apagado, estaban<br />

bordados unos pequeños cazadores. Soplaban en<br />

sus cuerpos adornados de fl ecos y con sus lindas<br />

manos hacíanle gestos de que retrocediese.<br />

-Vuelve sobre tus pasos, Virginia. ¡Vete,<br />

vete! -gritaban.<br />

Pero el fantasma le apretaba en aquel<br />

momento la mano con más fuerza, y ella<br />

cerró los ojos para no verlos.<br />

Horribles animales de colas de lagarto<br />

y de ojazos saltones parpadearon maliciosamente<br />

en las esquinas de la chimenea,<br />

mientras le decían en voz baja:<br />

-Ten cuidado, Virginia, ten cuidado.<br />

Podríamos no volver a verte.<br />

Pero el fantasma apresuró el paso y Virginia<br />

no oyó nada.<br />

Cuando llegaron al extremo de la estancia,<br />

el viejo se detuvo, murmurando unas<br />

palabras que ella no comprendió. Volvió Virginia<br />

a abrir los ojos y voy disiparse el muro<br />

lentamente, como una neblina, y abrirse<br />

ante ella una negra caverna.<br />

Un áspero y helado viento les azotó, sintiendo<br />

la muchacha que la tiraban del vestido.<br />

-De prisa, de prisa -gritó el fantasma -, o<br />

será demasiado tarde.<br />

Y en el mismo momento, el muro se<br />

cerró de nuevo detrás de ellos y el salón de<br />

Tapices quedó desierto.


Este no es...<br />

Este no es un poema:<br />

Es mi cobijo de palabras;<br />

palabras que se vieron<br />

desoladas - como yo -<br />

y vinieron a mi encuentro.<br />

Yo...<br />

no tenía nada<br />

y las ordené en una<br />

cuidada estrategia de insinuación.<br />

No esperaba hallar secretas geometrías,<br />

solo deseaba formar una oración;<br />

encontrar esa armonía visceral<br />

que se adueña de todas las cosas.<br />

Y tu...<br />

sencillamente,<br />

eras feliz con tu ración<br />

Hoy...<br />

Ya no estoy buscando respuestas,<br />

mis dudas, herían con dolor.<br />

He detenido el péndulo,<br />

apostando a la razón;<br />

razón que somete a las horas<br />

y me dio nueva prisión.<br />

......................................<br />

Afortunadamente...<br />

Mis palabras,<br />

han venido acompañando,<br />

a mi basta soledad.<br />

HAR, 08/00<br />

El Ascensor<br />

Robustiano Garrido<br />

Las lucecillas indicadoras marcaban el piso<br />

23 cuando el ascensor, bruscamente, se detuvo.<br />

Edgar Vinaglia, un lúcido presbítero<br />

luterano, apuntó que a su juicio, estaban<br />

varados entre los pisos 23 y 24 de la lujosa<br />

torre de convenciones.<br />

Había atrapadas en el traicionero ascensor,<br />

doce representantes de las más diversas<br />

e importantes religiones del planeta.<br />

Doce personas que se dirigían al coqueto<br />

salón del nivel 48. En cuestión de minutos<br />

comenzaría allí, en el centro de conferencias<br />

“Nemiberto Ambrosi” un trascendental<br />

debate religioso.<br />

Se discutiría sobre el espinoso asunto de<br />

la existencia de dios.<br />

Era tal el caudal de gente, participantes<br />

y meros curiosos, que habían concurrido<br />

al edifi cio, que el personal de seguridad y<br />

vigilancia fue desbordado en su capacidad;<br />

y nadie se percató de que uno de los treinta<br />

ascensores se hallaba detenido en las siniestras<br />

entrañas del complejo.<br />

Dentro de el elevador, reinaba una<br />

calma aparente. Los religiosos permanecían<br />

quietos, exhibiendo cierta rebuscada<br />

tranquilidad. Estaban seguros de que en<br />

cuestión de instantes, el ascensor retomaría<br />

su marcha normal, y los llevaría a su destino,<br />

unos veinticinco pisos más arriba.<br />

Simultáneamente, en el salón “Nemiberto<br />

Ambrosi”, la conferencia-debate daba<br />

comienzo. A pesar de la ausencia de doce<br />

de los trescientos oradores, nadie se hizo<br />

ningún problema.<br />

Habrían transcurrido ya treinta minutos, y<br />

la temperatura interna del atiborrado ascensor<br />

empezaba a elevarse ostensiblemente.<br />

Gruesas y brillantes gotas de transpiración<br />

comenzaban a brotar de los rostros de<br />

los involuntarios prisioneros.<br />

Y fue en ese momento cuando se encendió<br />

la peligrosa mecha de la discordia.<br />

Uno de los pasajeros, el rabino León<br />

Waisbein, hizo pública una particular creencia.<br />

Dijo en voz alta: “No debemos preocuparnos,<br />

mi dios nos salvará a todos!”.<br />

Bastó este pequeño pero signifi cativo<br />

comentario, para que Toshiro Kami (un<br />

encendido defensor de las doctrinas de<br />

Buda) reaccionara airadamente espetándole<br />

que cómo podía asegurar tan temerariamente<br />

que sería precisamente su dios, y no<br />

el Buda, quien los sacaría de aquella incómoda<br />

situación.<br />

Entonces, con una risa nerviosa e histérica,<br />

intervino Mohamed Razullbah, que<br />

Escritos<br />

expresó:”Queridos amigos, dejad de hablar<br />

sandeces e improperios, como todos seguramente<br />

sabéis, en estos casos de detención<br />

imprevista de ascensores, es el mismo Alá<br />

quien nos trae las soluciones.”<br />

Fue ahí que Cotapec Huamoc, acérrimo<br />

defensor de la teología maya, fuera de si, le<br />

lanzó un terrible golpe de puño que partió la<br />

débil mandíbula del sorprendido musulmán.<br />

El caos se adueño del singular universo<br />

religioso que poblaba en ascensor.<br />

Comenzaron a escucharse gritos e insultos<br />

de grueso calibre en los más disparatados<br />

idiomas, lenguajes y dialectos.<br />

Todos peleaban descontroladamente,<br />

buscando demostrar a los otros once que<br />

era su dios, exclusivamente su dios quien los<br />

sacaría de ese aprieto.<br />

El normalmente calmo Padre Rodriguez,<br />

anciano cura español, la emprendió a salvajes<br />

puntapiés contra el rostro consternado<br />

de la sacerdotisa egipcia Anubis Micerino,<br />

quien yacía en el piso, empapada en sangre.<br />

Estaban en el clímax de la batalla,<br />

cuando de repente el ascensor comenzó,<br />

lentamente, a salir de su quietud.<br />

La máquina empezó a ganar velocidad.<br />

La inicial mueca de alivio en los rostros<br />

de los contendientes, dio paso rápidamente<br />

al pánico al percatarse de que el movimiento<br />

del ascensor se debía, no al normal funcionamiento<br />

del mismo, sino a que el cable se<br />

había cortado.<br />

Un segundo antes de estrellarse contra<br />

el frío cemento del décimo subsuelo, los<br />

gritos de terror en el interior del elevador<br />

alcanzaron decibeles sorprendentes.<br />

Después, el impacto y la consecuente<br />

explosión (ya que uno de los pasajeros era<br />

miembro de una destructiva secta, y portaba<br />

dos cartuchos de dinamita dentro de un<br />

texto sagrado apócrifo).<br />

En instantes, la belicosa imagen del<br />

grupo de creyentes dio paso a la espantosa<br />

visión de una sangrienta mescolanza de<br />

cadáveres destrozados.<br />

Mientras tanto dios, el verdadero y único<br />

dios, se mataba de risa.<br />

<strong>Mensa</strong>piens<br />

- 23 -


Escritos<br />

Antecedente de Guerra<br />

Rojo<br />

Esta historia se basa en la falta de<br />

advertencia. No lo digo tan sólo<br />

en el sentido de anticipar lo que<br />

vendrá. No, es mucho más. Advertir<br />

es también darse cuenta, observar y<br />

considerar lo obvio y lo no tan obvio de<br />

mil maneras distintas. Advertir, lo que<br />

se dice advertir, es no menospreciar ni<br />

pasar por alto nada: ni a los hombres,<br />

ni a sus derechos, ni a sus sentimientos,<br />

ni a sus naciones, ni a sus intereses.<br />

Todo debe ser advertido, todo debe ser<br />

tomado en cuenta: lo bueno, lo no tan<br />

bueno, lo despreciable, lo pasado, lo<br />

presente y lo futuro. No advertir es ser<br />

ciego, y ser ciego teniendo la capacidad<br />

de ver es engañarse, feliz o infelizmente,<br />

pero es engañarse al fi n.<br />

Lo primero en pasar aparentemente<br />

inadvertido fue el punto inicial del confl<br />

icto, ocurrido hacía casi ciento cincuenta<br />

años: en 1833 las Islas Georgias<br />

de Sur habían sido ocupadas por Inglaterra.<br />

El reloj ya había dado millones de<br />

vueltas desde este hecho, por lo que<br />

quizás debería decirse que la cuenta<br />

estaba cerrada por culpa del tiempo y<br />

del olvido, por gloria de las relaciones<br />

diplomáticas, o por un nuevo avance en<br />

la hermandad entre naciones... Pero<br />

cualquiera haya sido el motivo para<br />

zanjar las diferencias, tanto el gobierno<br />

de <strong>Argentina</strong> como el británico lograron<br />

acordar y aceptar el desembarco de ciudadanos<br />

argentinos en un territorio que<br />

ambos países se disputaban desde hacía<br />

casi un siglo y medio.<br />

El acuerdo se basaba en algo muy<br />

simple: la empresa Georgias del Sur.<br />

S.A. había contratado a treinta y nueve<br />

hombres argentinos para que desmantelaran<br />

una empresa ballenera que había<br />

quedado en desuso. Y por ser simple<br />

este trabajo, ninguno de los dos gobiernos<br />

lo objetó. Después de todo qué<br />

mal podría causar que unos argentinos<br />

navegaran hasta la Isla de San Pedro, la<br />

más grande de las Islas Malvinas, para<br />

desarmar el esqueleto de algo que ya<br />

había muerto. Sin objeciones, pues se<br />

trataba de algo sencillo. No era una<br />

misión política ni diplomática ni bélica,<br />

sólo debían desarmar grúas oxidadas y<br />

galpones abandonados en medio de un<br />

viento helado y constante. El objetivo<br />

era simple e inofensivo, y fue así como<br />

los trabajadores viajaron en el Buque<br />

- 24 - <strong>Mensa</strong>piens<br />

de la Marina de Guerra Ara Bahía Buen<br />

Suceso. Buen suceso, misión simple,<br />

suceso simple... o no tanto.<br />

Fue en la mañana del 19 de Marzo<br />

de 1982 cuando los treinta y nueve<br />

argentinos desembarcaron en el Puerto<br />

Leith de la Isla San Pedro. Soledad, frío,<br />

extrañamiento, confusión... realmente<br />

habían viajado a otro país o ese pedacito<br />

de tierra les pertenecía? Era esa isla<br />

tan argentina como ellos? Los treinta y<br />

nueve hombres descendieron del barco<br />

silenciosamente, con mil sensaciones en<br />

el cuerpo y en el alma, sensaciones que<br />

el frío intenso y cruel no lograba disipar.<br />

Caminaron en soledad con sus bolsos, sus<br />

alimentos y los elementos necesarios e<br />

indispensables para su fácil misión de<br />

desmantelar. Sin embargo uno de ellos,<br />

Antonio, desmantelaría algo más que<br />

una empresa ballenera, desmantelaría<br />

una serie de jugadas y acuerdos diplomáticos<br />

entre dos países alejados.<br />

Antonio era el director de la obra,<br />

pero sin querer se convirtió en el jefe<br />

de una misión más patriótica... Inocentemente<br />

bajó del buque con una caja<br />

de madera y vidrio. Sólo quería hacer<br />

un breve acto, una corta acción que<br />

atemperara la vorágine de sentimientos<br />

confusos, contradictorios, oprimidos y<br />

pasionales que transitaban su cuerpo<br />

y el de sus compañeros. Antonio caminaba<br />

lentamente con el cuerpo tembloroso<br />

por el frío y por la emoción. El<br />

viento helado le cortaba los labios pero<br />

no la voz... Sacó de esa misteriosa y<br />

pequeña caja, cuya existencia nadie<br />

conocía, una Bandera <strong>Argentina</strong>, la izó<br />

en un viejo mástil, y no conforme con<br />

ésto comenzó a cantar, con los labios<br />

morados y partidos por el frío, el Himno<br />

Nacional Argentino. Sus compañeros lo<br />

siguieron, y pronto los treinta y nueve<br />

trabajadores hacían salir de sus bocas<br />

palabras patrias junto con el humo<br />

helado del aliento, la tristeza y la<br />

bronca. El panorama era desolador...<br />

unos pocos argentinos entonando el<br />

Himno frente a una bandera fl ameante<br />

en un mástil vencido por el frío y quizás<br />

por la Historia. Para ellos se trataba de<br />

un pequeño y simple acto de orgullo y<br />

patriotismo. Mal pensado. Su misión de<br />

desarmar un montón de aparatos oxidados,<br />

viejos e inútiles había perdido su<br />

sentido y su veracidad...<br />

El sonido del Himno y el refl ejo<br />

celeste y blanco llegaron hasta los rincones<br />

del cuartel de marines británico de<br />

Grytviken. Quizás el sonido y el refl ejo<br />

viajaron hacia donde su sangre los llamaba,<br />

pues en ese cuartel había existido<br />

hasta 1944 una estación meteorológica<br />

argentina. Y Antonio seguía cantando<br />

el Himno, y el sonido se disipaba por<br />

la isla. Los trabajadores pensaban que<br />

se trataba de un breve acto de pasión<br />

argentina y nada más, luego empezarían<br />

a luchar contra fi erros vencidos y paredes<br />

endebles. Mal pensado. Mal pensado<br />

todo desde un comienzo, porque los<br />

trabajadores argentinos eran argentinos<br />

antes que trabajadores. Mal pensado<br />

porque la vida les deparó a estos hombres<br />

una misión más trascendente que la<br />

de desmantelar una máquina oxidada en<br />

medio de un frío infernal. Mal pensado<br />

porque los marines de Grytviken alertaron<br />

sobre lo ocurrido al Gobernador británico<br />

de las Islas. Mal pensado porque<br />

éste imaginó que se trataba de una invasión<br />

y envió al instante un buque hacia<br />

el lugar donde un puñado de hombres<br />

supuestamente invadían la isla y proclamaban<br />

su nación. Mal pensado todo. Mal<br />

pensado subestimar a los hombres. Mal<br />

pensado olvidar que se representa a un<br />

país. Mal pensado el invitar a quien se<br />

echó para que vea lo que se pierde. Mal<br />

pensado pensar que se trataba de una<br />

invasión. Mal pensado enviar un buque<br />

al instante. Mal pensada cada una de<br />

estas suposiciones, porque desataron un<br />

incidente diplomático entre dos países<br />

por un territorio que se disputaban<br />

hacía casi ciento cincuenta años. Mal<br />

pensado todo, o no pensado. Inadvertido.<br />

No pensado nada y olvidado todo.<br />

Olvidado lo principal: no hace falta tener<br />

fama ni poder desmedidos para hacer la<br />

Historia, porque la Historia la hacen los<br />

hombres. Como estos simples treinta y<br />

nueve trabajadores argentinos, que sin<br />

siquiera sospecharlo, en una mañana<br />

helada y con una breve acción, dejaron<br />

en la Historia su huella: el antecedente<br />

de la Guerra de Malvinas.


Experimentar<br />

Apolo<br />

N<br />

unca has llorado lagrimas secas, nunca<br />

se te ha enturbiado el paladar.<br />

Nunca te has ahogado respirando, nunca<br />

has sentido el vacío de una gota en tu mejilla.<br />

Y aun con los ojos abiertos, ves una<br />

blancura que te hace desvanecer, ¿nunca lo<br />

has visto?. Has tenido alguna vez el pecho<br />

oprimido, por una lanza de lagrimas que se<br />

te clava en el interior del pecho y que no<br />

quieren sangrar con forma de lagrima.<br />

¿Para que sirve llorar? , si el daño ya esta<br />

hecho. Por que te preguntas en silencio, por<br />

que miras en la oscuridad, no hay nada que<br />

más me guste que experimentar.<br />

Por que no convencer a mi cabeza, para que<br />

sienta tus manos cuando otras me tocan, por<br />

que no convencerme de que tus palabras rezuman<br />

en mi , cuando son otros los que hablan. Por<br />

que termino por creerme mis historias.<br />

Por que cierro los ojos y veo gotas de<br />

agua, que se humillan tocando mi rostro, y<br />

veo como se persiguen, pero nunca se tocan,<br />

y se superponen , en el mar de mi piel .<br />

Alguna vez has visto un cuadro y te has<br />

fi jado en una esquina. Alguna vez has visto<br />

un rostro y has refl exionado en su nuca, ¿Has<br />

traspasado tu alma sobre lo físico, tu alma<br />

sobre un cuerpo?. Alguna vez te has sentido<br />

sordo ante tanto ruido , ¿tú eres capaz?.<br />

Has paseado sin saber andar, alguna vez<br />

has corrido intentando volar. Te has preocupado<br />

por algo tan pequeño que no tenia importancia,<br />

el tiempo que invirtieses en ello;<br />

Has escrito alguna vez en sueños, haz<br />

rozado las nubes con la mente, has caido<br />

alguna vez a drede, para ver que tu no te has<br />

movido que son los demás quienes se mueven.<br />

Te has inspirado a ti mismo contemplándote<br />

en un espejo y te has odiado tanto<br />

que has empezado a quererte. Has vencido<br />

el miedo cuando más cobarde eras. Te has<br />

visto besando desde fuera;<br />

Has mirado sin contemplar. Has hablado<br />

sin decir palabra. Te has convencido de que<br />

no eres nada mas que una suave y fi na pincelada<br />

del refl ejo de tu alma. Has querido<br />

tanto que el corazón se te para.<br />

Te has enamorado al mirar a alguien<br />

por la ventana. Has leído un nombre tantas<br />

veces que hacia que tu piel se quemara.<br />

¿Has deseado?, Has visto la belleza de mi<br />

hada, ¿la has visto?....<br />

Alguna vez pensaste que tus dioses vertieron<br />

gotitas de belleza para que se derramaran<br />

en tu mundo, para que pincelaran tu paisaje.<br />

Te has sentido alguna vez el alma, lo has visto<br />

tan cerca que lo traspasabas con la mirada, te<br />

has sentado con la mente, mientras te salían<br />

alas. ¿Has volado entre sabanas?.<br />

Te has preguntado por que sientes<br />

cuando no tienes ganas de nada, Por que<br />

ahogas tu mente en cosas que solo son<br />

espurias de una mar ahogada de salientes de<br />

lodo y almas, que son confusiones, con gotas<br />

embarradas y enclavadas de miradas que se<br />

confunden y están entrelazadas.<br />

Has corrido tanto, que pareciera que tu<br />

pluma tiene alas, te ha estorbado el cuerpo<br />

intentando plasmar tus ganas.<br />

¿Sientes cuando no tienes nada?. Por que<br />

tus lagrimas son saladas, pero a la vez son tan<br />

dulces cuando rebajan el pesar de tu alma.<br />

Por que lo negro es mas blanco cuando<br />

todo se acaba. La muerte es otra fase del<br />

alma: ¿Dios mío, que le pasa a mi amada?.<br />

Te has ahogado en tus lagrimas, las has<br />

tocado, has visto pasar tus pensamientos<br />

tocando tus entrañas. Por que te castigas si<br />

en realidad no necesitas nada. Por que cuando<br />

mejor lo intentas mas te resbalas. Ojala tuviera<br />

alas. Quiero volar... volar alto y no sentir nada,<br />

solo el viento rozándome en la cara.<br />

Y olvidar que respiro, para tocar mi<br />

alma. Por que la siento, y aun esas lanzas se<br />

me clavan, pero tengo ganas.<br />

Quiero rozar las notas de mi vida...<br />

¿Has sentido que tu vida es una melodía<br />

que a veces suena descompasada?, Notas<br />

que suenan en un pequeño espacio entre tu<br />

cara y mi cara.<br />

¿Por que el tiempo hace las cosas vanas?.<br />

Por que no puedo querer a quien me ama, y<br />

si lo complicado es lo más fácil pero visto<br />

al revés y por unos ojos que no quieren ver.<br />

¿Por qué te confundes?, No pienses, siente.<br />

Y ahora por que escribo, si no tengo nada<br />

mas que decir, por que mis palabras están mojadas,<br />

por qué mis lagrimas no resbalan, porque<br />

trago mis gotitas saladas,¿por qué mi alma<br />

merece ser castigada, y no ser consolada?.<br />

Por eso no lloro, para no darme lastima,<br />

por eso no me miro a la cara, por que soy<br />

él más valiente de los cobardes ¿Por qué no<br />

me puedo quitar esta lanza?, Por que no<br />

entiendes cuando no te digo nada, por que<br />

es el momento en el que más cosas te puedo<br />

decir. Por que no suena mi corazón en tu<br />

mente cuando estoy en silencio ¿Por qué no<br />

entiendes? ,<br />

¿Por qué no ves que si no me leyeras,<br />

ahora mismo mi pena y mi presente tal vez<br />

se entrelazaran?.<br />

Quiero ver el color de las tinieblas de<br />

Poe, quiero crear desde mi celda haciendo<br />

sonar poesías con tu nombre. ¿Porqué mi<br />

salud me hace estar enfermo de amor. Por<br />

que amo tanto las letras que un día odie. Por<br />

que pregunto si no quiero una respuesta?.<br />

Quizá estoy aprendiendo a conformarme.<br />

Quizás..<br />

¿Es verdad que te preocupas?, Mírate,<br />

¿Ahora que haces?, Por que entonas tu vida,<br />

coge tus notas y hazlas melodía.<br />

A veces un silencio suena mas que un<br />

sostenido, es verdad que no escuchas. Es<br />

vedad que aun no has sentido ese viento,<br />

esas ganas de tajar por el cielo, lo haces en<br />

tierra. ¿Te confundo?. No es normal ser igual<br />

a los demás , ¿por que te ocultas?. Quizás...<br />

Exclama tu vida al funesto sonido de tu<br />

pensar, siente hambre que te arraigue en pensamientos;<br />

descubre el calor del frío, no es<br />

tan difícil ya tu corazón late igual que el mío.<br />

Corres en el vacío, imagina tu mundo<br />

sin colores, te falta el aire, respira de tus<br />

pensamientos.<br />

Acomoda tus conocimientos, no obligues a<br />

tu mente, fi nge si eso te hace pensar mejor.<br />

¿Te apetece volar?, te has visto ahora.<br />

Ya puedes abrir los ojos, los tenias cerrados<br />

¿y como lees?, con el alma.<br />

Y si mi mejor música es mi mejor arma,<br />

y la defensa no me gusta, por que el ataque<br />

es de cobardes.<br />

Escritos<br />

Te ves ya las alas, sientes el lomo de tu<br />

calma, ¿cabalgas?<br />

Acaricia las miradas, respira de la gente<br />

con tez cansada, empápate y siente como tu<br />

aire embriaga, ¿Notas tus lagrimas saladas?,<br />

Ves tu alma.<br />

Estas refl ejándote en cuerpos opacos, sin<br />

refl exión ni alma, siente a través de las cosas<br />

que sin luz son mas que ondas en la nada.<br />

Te ríes, pero sé que callas. Quizás soy<br />

el esperpento de tu mirada, ¿quizás?, ¿Te<br />

gustan tus alas?, Por que no experimentar<br />

con tus ganas.<br />

Has estado enfermo viendo, como todas<br />

las cosas pasan. Por que te acabas en un<br />

mañana de pensamientos en alza.<br />

Usa efl uvios de relinchantes mandíbulas<br />

azucaradas, has visto como detrás de esto<br />

no hay nada. Solo tu alma. Cierra los ojos y<br />

cuando no hables, ¡calla! , Abre tus ojos y deja<br />

de mirar , ¡nada!, Escucha el ruido de las palabras.<br />

Ensordécete de este aire que embriaga.<br />

Haz un ejercicio de pasión, concédele<br />

tres segundos a tu alma. ¿Te has preguntado<br />

si estas sentado o sentada?, ¿Has visto<br />

lo elegante de tus alas?, Has volado, y no<br />

has sentido la calma, lo siento yo no puedo<br />

hacer nada, eres tu quien marca el tamaño<br />

de tus palabras ¡gracias!.<br />

Necesito descansar, todo esto me empalaga.<br />

Lamento fi nal<br />

Llorando aunque no lo crean<br />

pues no soy tan fuerte al fi n,<br />

si los cielos me verán morir<br />

y los mares con sus mareas<br />

pudieran llevar de veras<br />

mi oración a San Agustín.<br />

Mas ya no podré leer<br />

Pues con otros ojos leo<br />

y ahora que no los tengo<br />

no puedo pensar en ello<br />

cual asteroide perdido<br />

en el inmenso universo.<br />

Si demás debo pensar<br />

no tendré motivo alguno<br />

para dejarlo pasar<br />

hasta que el mundo sea uno<br />

y llegar a razonar<br />

que ya no habrá mas que dos<br />

Aunque tenga que pasar<br />

por el infi erno feroz<br />

que a tantos hace temblar<br />

pero a mi ni me despierta<br />

como naturaleza muerta<br />

que alguno pueda pintar.<br />

Federico pacheco<br />

<strong>Mensa</strong>piens<br />

- 25 -


Escritos<br />

Los Ojos Verdes<br />

Gustavo Adolfo Bécquer<br />

Hace mucho tiempo que tenía ganas de escribir<br />

cualquier cosa con este título. Hoy, que<br />

se me ha presentado ocasión, lo he puesto<br />

con letras grandes en la primera cuartilla de papel, y<br />

luego he dejado a capricho volar la pluma.<br />

Yo creo que he visto unos ojos como los<br />

que he pintado en esta leyenda. No sé si en<br />

sueños, pero yo los he visto. De seguro no los<br />

podré describir tal cuales ellos eran: luminosos,<br />

transparentes como las gotas de la lluvia<br />

que se resbalan sobre las hojas de los árboles<br />

después de una tempestad de verano. De<br />

todos modos, cuento con la imaginación de<br />

mis lectores para hacerme comprender en<br />

este que pudiéramos llamar boceto de un<br />

cuadro que pintaré algún día.<br />

I<br />

-Herido va el ciervo..., herido va... no<br />

hay duda. Se ve el rastro de la sangre entre<br />

las zarzas del monte, y al saltar uno de esos<br />

lentiscos han fl aqueado sus piernas... Nuestro<br />

joven señor comienza por donde otros acaban...<br />

En cuarenta años de montero no he visto mejor<br />

golpe... Pero, ¡por San Saturio, patrón de Soria!,<br />

cortadle el paso por esas carrascas, azuzad los<br />

perros, soplad en esas trompas hasta echar los<br />

hígados, y hundid a los corceles una cuarta de<br />

hierro en los ijares: ¿no veis que se dirige hacia<br />

la fuente de los Alamos y si la salva antes de<br />

morir podemos darlo por perdido?<br />

Las cuencas del Moncayo repitieron de<br />

eco en eco el bramido de las trompas, el latir<br />

de la jauría desencadenada, y las voces de los<br />

pajes resonaron con nueva furia, y el confuso<br />

tropel de hombres, caballos y perros, se dirigió<br />

al punto que Iñigo, el montero mayor de los<br />

marqueses de Almenar, señalara como el más<br />

a propósito para cortarle el paso a la res.<br />

Pero todo fue inútil. Cuando el más ágil<br />

de los lebreles llegó a las carrascas, jadeante<br />

y cubiertas las fauces de espuma, ya el ciervo,<br />

rápido como una saeta, las había salvado de un<br />

solo brinco, perdiéndose entre los matorrales<br />

de una trocha que conducía a la fuente.<br />

-¡Alto!... ¡Alto todo el mundo! -gritó Iñigo<br />

entonces-. Estaba de Dios que había de marcharse.<br />

Y la cabalgata se detuvo, y enmudecieron<br />

las trompas, y los lebreles dejaron refunfuñando<br />

la pista a la voz de los cazadores.<br />

En aquel momento, se reunía a la comitiva<br />

el héroe de la fi esta, Fernando de Argensola,<br />

el primogénito de Almenar.<br />

-¿Qué haces? -exclamó, dirigiéndose a su<br />

montero, y en tanto, ya se pintaba el asombro<br />

en sus facciones, ya ardía la cólera en sus<br />

ojos-. ¿Qué haces, imbécil? Ves que la pieza<br />

- 26 - <strong>Mensa</strong>piens<br />

está herida, que es la primera que cae por mi<br />

mano, y abandonas el rastro y la dejas perder<br />

para que vaya a morir en el fondo del bosque.<br />

¿Crees acaso que he venido a matar ciervos<br />

para festines de lobos?<br />

-Señor -murmuró Iñigo entre dientes-, es<br />

imposible pasar de este punto.<br />

-¡Imposible! ¿Y por qué?<br />

-Porque esa trocha -prosiguió el monteroconduce<br />

a la fuente de los Alamos: la fuente<br />

de los Alamos, en cuyas aguas habita un espíritu<br />

del mal. El que osa enturbiar su corriente paga<br />

caro su atrevimiento. Ya la res, habrá salvado<br />

sus márgenes. ¿Cómo la salvaréis vos sin atraer<br />

sobre vuestra cabeza alguna calamidad horrible?<br />

Los cazadores somos reyes del Moncayo, pero<br />

reyes que pagan un tributo. Fiera que se refugia<br />

en esta fuente misteriosa, pieza perdida.<br />

-¡Pieza perdida! Primero perderé yo el señorío<br />

de mis padres, y primero perderé el ánima en<br />

manos de Satanás, que permitir que se me escape<br />

ese ciervo, el único que ha herido mi venablo, la<br />

primicia de mis excursiones de cazador... ¿Lo ves?...<br />

¿Lo ves?... Aún se distingue a intervalos desde aquí;<br />

las piernas le fallan, su carrera se acorta; déjame...,<br />

déjame; suelta esa brida o te revuelvo en el polvo...<br />

¿Quién sabe si no le daré lugar para que llegue a la<br />

fuente? Y si llegase, al diablo ella, su limpidez y sus<br />

habitadores. ¡Sus, Relámpago!; ¡sus, caballo mío!<br />

Si lo alcanzas, mando engarzar los diamantes de mi<br />

joyel en tu serreta de oro.<br />

Caballo y jinete partieron como un huracán.<br />

Iñigo los siguió con la vista hasta que se<br />

perdieron en la maleza; después volvió los<br />

ojos en derredor suyo; todos, como él, permanecían<br />

inmóviles y consternados.<br />

El montero exclamó al fi n:<br />

-Señores, vosotros lo habéis visto; me he<br />

expuesto a morir entre los pies de su caballo por<br />

detenerlo. Yo he cumplido con mi deber. Con el<br />

diablo no sirven valentías. Hasta aquí llega el<br />

montero con su ballesta; de aquí en adelante,<br />

que pruebe a pasar el capellán con su hisopo.<br />

II<br />

-Tenéis la color quebrada; andáis mustio y<br />

sombrío. ¿Qué os sucede? Desde el día, que yo<br />

siempre tendré por funesto, en que llegasteis<br />

a la fuente de los Alamos, en pos de la res<br />

herida, diríase que una mala bruja os ha encanijado<br />

con sus hechizos. Ya no vais a los montes<br />

precedido de la ruidosa jauría, ni el clamor de<br />

vuestras trompas despierta sus ecos. Sólo con<br />

esas cavilaciones que os persiguen, todas las<br />

mañanas tomáis la ballesta para enderezaros<br />

a la espesura y permanecer en ella hasta que<br />

el sol se esconde. Y cuando la noche oscurece<br />

y volvéis pálido y fatigado al castillo, en valde<br />

busco en la bandolera los despojos de la caza.<br />

¿Qué os ocupa tan largas horas lejos de los que<br />

más os quieren?<br />

Mientras Iñigo hablaba, Fernando, absorto<br />

en sus ideas, sacaba maquinalmente astillas de<br />

su escaño de ébano con un cuchillo de monte.<br />

Después de un largo silencio, que sólo interrumpía<br />

el chirrido de la hoja al resbalar sobre<br />

la pulimentada madera, el joven exclamó,<br />

dirigiéndose a su servidor, como si no hubiera<br />

escuchado una sola de sus palabras:<br />

-Iñigo, tú que eres viejo, tú que conoces las<br />

guaridas del Moncayo, que has vivido en sus<br />

faldas persiguiendo a las fi eras, y en tus errantes<br />

excursiones de cazador subiste más de una<br />

vez a su cumbre, dime: ¿has encontrado, por<br />

acaso, una mujer que vive entre sus rocas?<br />

-¡Una mujer! -exclamó el montero con<br />

asombro y mirándole de hito en hito.<br />

-Sí -dijo el joven-, es una cosa extraña lo<br />

que me sucede, muy extraña... Creí poder<br />

guardar ese secreto eternamente, pero ya no<br />

es posible; rebosa en mi corazón y asoma a<br />

mi semblante. Voy, pues, a revelártelo... Tú<br />

me ayudarás a desvanecer el misterio que<br />

envuelve a esa criatura que, al parecer, sólo<br />

para mí existe, pues nadie la conoce, ni la ha<br />

visto, ni puede dame razón de ella.<br />

El montero, sin despegar los labios,<br />

arrastró su banquillo hasta colocarse junto al<br />

escaño de su señor, del que no apartaba un<br />

punto los espantados ojos... Este, después de<br />

coordinar sus ideas, prosiguió así:<br />

-Desde el día en que, a pesar de sus funestas<br />

predicciones, llegué a la fuente de los Alamos,<br />

y, atravesando sus aguas, recobré el ciervo que<br />

vuestra superstición hubiera dejado huir, se<br />

llenó mi alma del deseo de soledad.<br />

Tú no conoces aquel sitio. Mira: la fuente<br />

brota escondida en el seno de una peña, y cae,<br />

resbalándose gota a gota, por entre las verdes<br />

y fl otantes hojas de las plantas que crecen<br />

al borde de su cuna. Aquellas gotas, que al<br />

desprenderse brillan como puntos de oro y<br />

suenan como las notas de un instrumento,<br />

se reúnen entre los céspedes y, susurrando,<br />

susurrando, con un ruido semejante al de las<br />

abejas que zumban en torno a las fl ores, se<br />

alejan por entre las arenas y forman un cauce,<br />

y luchan con los obstáculos que se oponen a su<br />

camino, y se repliegan sobre sí mismas, saltan,<br />

y huyen, y corren, unas veces, con risas; otras,<br />

con suspiros, hasta caer en un lago. En el lago<br />

caen con un rumor indescriptible. Lamentos,<br />

palabras, nombres, cantares, yo no sé lo que<br />

he oído en aquel rumor cuando me he sentado


solo y febril sobre el peñasco a cuyos pies<br />

saltan las aguas de la fuente misteriosa, Para<br />

estancarse en una balsa profunda cuya inmóvil<br />

superfi cie apenas riza el viento de la tarde.<br />

Todo allí es grande. La soledad, con sus mil<br />

rumores desconocidos, vive en aquellos lugares<br />

y embriaga el espíritu en su inefable melancolía.<br />

En las plateadas hojas de los álamos, en<br />

los huecos de las peñas, en las ondas del agua,<br />

parece que nos hablan los invisibles espíritus<br />

de la Naturaleza, que reconocen un hermano<br />

en el inmortal espíritu del hombre.<br />

Cuando al despuntar la mañana me veías<br />

tomar la ballesta y dirigirme al monte, no fue<br />

nunca para perderme entre sus matorrales en<br />

pos de la caza, no; iba a sentarme al borde de la<br />

fuente, a buscar en sus ondas... no sé qué, ¡una<br />

locura! El día en que saltó sobre ella mi Relámpago,<br />

creí haber visto brillar en su fondo una cosa<br />

extraña.., muy extraña..: los ojos de una mujer.<br />

Tal vez sería un rayo de sol que serpenteó<br />

fugitivo entre su espuma; tal vez sería una de<br />

esas fl ores que fl otan entre las algas de su<br />

seno y cuyos cálices parecen esmeraldas...;<br />

no sé; yo creí ver una mirada que se clavó en<br />

la mía, una mirada que encendió en mi pecho<br />

un deseo absurdo, irrealizable: el de encontrar<br />

una persona con unos ojos como aquellos. En<br />

su busca fui un día y otro a aquel sitio.<br />

Por último, una tarde... yo me creí juguete<br />

de un sueño...; pero no, es verdad; le he<br />

hablado ya muchas veces como te hablo a ti<br />

ahora...; una tarde encontré sentada en mi<br />

puesto, vestida con unas ropas que llegaban<br />

hasta las aguas y fl otaban sobre su haz, una<br />

mujer hermosa sobre toda ponderación. Sus<br />

cabellos eran como el oro; sus pestañas brillaban<br />

como hilos de luz, y entre las pestañas<br />

volteaban inquietas unas pupilas que yo había<br />

visto..., sí, porque los ojos de aquella mujer<br />

eran los ojos que yo tenía clavados en la mente,<br />

unos ojos de un color imposible, unos ojos...<br />

-¡Verdes! -exclamó Iñigo con un acento de<br />

profundo terror e incorporándose de un golpe<br />

en su asiento.<br />

Fernando lo miró a su vez como asombrado<br />

de que concluyese lo que iba a decir, y le preguntó<br />

con una mezcla de ansiedad y de alegría:<br />

-¿La conoces?<br />

-¡Oh, no! -dijo el montero-. ¡Líbreme Dios de<br />

conocerla! Pero mis padres, al prohibirme llegar<br />

hasta estos lugares, me dijeron mil veces que el<br />

espíritu, trasgo, demonio o mujer que habita<br />

en sus aguas tiene los ojos de ese color. Yo os<br />

conjuro por lo que más améis en la tierra a no<br />

volver a la fuente de los álamos. Un día u otro os<br />

alcanzará su venganza y expiaréis, muriendo, el<br />

delito de haber encenagado sus ondas.<br />

-¡Por lo que más amo! -murmuró el joven<br />

con una triste sonrisa.<br />

-Sí -prosiguió el anciano-; por vuestros<br />

padres, por vuestros deudos, por las lágrimas<br />

de la que el Cielo destina para vuestra esposa,<br />

por las de un servidor, que os ha visto nacer.<br />

-¿Sabes tú lo que más amo en el mundo?<br />

¿Sabes tú por qué daría yo el amor de mi<br />

padre, los besos de la que me dio la vida y<br />

todo el cariño que pueden atesorar todas las<br />

mujeres de la tierra? Por una mirada, por una<br />

sola mirada de esos ojos... ¡Mira cómo podré<br />

dejar yo de buscarlos!<br />

Dijo Fernando estas palabras con tal acento,<br />

que la lágrima que temblaba en los párpados de<br />

Iñigo se resbaló silenciosa por su mejilla, mientras<br />

exclamó con acento sombrío:<br />

-¡Cúmplase la voluntad del Cielo!<br />

III<br />

-¿Quién eres tú? ¿Cuál es tu patria? ¿En dónde<br />

habitas? Yo vengo un día y otro en tu busca, y<br />

ni veo el corcel que te trae a estos lugares ni a<br />

los servidores que conducen tu litera. Rompe<br />

de una vez el misterioso velo en que te envuelves<br />

como en una noche profunda. Yo te amo, y,<br />

noble o villana, seré tuyo, tuyo siempre.<br />

El sol había traspuesto la cumbre del<br />

monte; las sombras bajaban a grandes pasos<br />

por su falda; la brisa gemía entre los álamos<br />

de la fuente, y la niebla, elevándose poco a<br />

poco de la superfi cie del lago, comenzaba a<br />

envolver las rocas de su margen.<br />

Sobre una de estas rocas, sobre la que<br />

parecía próxima a desplomarse en el fondo de<br />

las aguas, en cuya superfi cie se retrataba, temblando,<br />

el primogénito Almenar, de rodillas a<br />

los pies de su misteriosa amante, procuraba en<br />

vano arrancarle el secreto de su existencia.<br />

Ella era hermosa, hermosa y pálida como<br />

una estatua de alabastro. Y uno de sus rizos<br />

caía sobre sus hombros, deslizándose entre los<br />

pliegues del velo como un rayo de sol que atraviesa<br />

las nubes, y en el cerco de sus pestañas<br />

rubias brillaban sus pupilas como dos esmeraldas<br />

sujetas en una joya de oro.<br />

Cuando el joven acabó de hablarle, sus<br />

labios se removieron como para pronunciar<br />

algunas palabras; pero exhalaron un suspiro, un<br />

suspiro débil, doliente, como el de la ligera onda<br />

que empuja una brisa al morir entre los juncos.<br />

-¡No me respondes! -exclamó Fernando al<br />

ver burlada su esperanza-. ¿Querrás que dé<br />

crédito a lo que de ti me han dicho? ¡Oh, no!...<br />

Háblame; yo quiero saber si me amas; yo quiero<br />

saber si puedo amarte, si eres una mujer...<br />

Escritos<br />

-O un demonio... ¿Y si lo fuese?<br />

El joven vaciló un instante; un sudor frío<br />

corrió por sus miembros; sus pupilas se dilataron<br />

al fi jarse con más intensidad en las de<br />

aquella mujer, y fascinado por su brillo fosfórico,<br />

demente casi, exclamó en un arrebato de amor:<br />

-Si lo fueses.:., te amaría..., te amaría<br />

como te amo ahora, como es mi destino<br />

amarte, hasta más allá de esta vida, si hay<br />

algo más de ella.<br />

-Fernando -dijo la hermosa entonces con<br />

una voz semejante a una música-, yo te amo<br />

más aún que tú me amas; yo, que desciendo<br />

hasta un mortal siendo un espíritu puro. No soy<br />

una mujer como las que existen en la Tierra;<br />

soy una mujer digna de ti, que eres superior<br />

a los demás hombres. Yo vivo en el fondo de<br />

estas aguas, incorpórea como ellas, fugaz y<br />

transparente: hablo con sus rumores y ondulo<br />

con sus pliegues. Yo no castigo al que osa turbar<br />

la fuente donde moro; antes lo premio con mi<br />

amor, como a un mortal superior a las supersticiones<br />

del vulgo, como a un amante capaz de<br />

comprender mi caso extraño y misterioso.<br />

Mientras ella hablaba así, el joven absorto<br />

en la contemplación de su fantástica hermosura,<br />

atraído como por una fuerza desconocida,<br />

se aproximaba más y más al borde de la roca.<br />

La mujer de los ojos verdes prosiguió así:<br />

-¿Ves, ves el límpido fondo de este lago?<br />

¿Ves esas plantas de largas y verdes hojas que<br />

se agitan en su fondo?... Ellas nos darán un<br />

lecho de esmeraldas y corales..., y yo..., yo<br />

te daré una felicidad sin nombre, esa felicidad<br />

que has soñado en tus horas de delirio y que no<br />

puede ofrecerte nadie... Ven; la niebla del lago<br />

fl ota sobre nuestras frentes como un pabellón<br />

de lino...; las ondas nos llaman con sus voces<br />

incomprensibles; el viento empieza entre los<br />

álamos sus himnos de amor; ven..., ven.<br />

La noche comenzaba a extender sus sombras;<br />

la luna rielaba en la superfi cie del lago; la niebla<br />

se arremolinaba al soplo del aire, y los ojos verdes<br />

brillaban en la oscuridad como los fuegos fatuos que<br />

corren sobre el haz de las aguas infectas... Ven, ven...<br />

Estas palabras zumbaban en los oídos de Fernando<br />

como un conjuro. Ven... y la mujer misteriosa lo llamaba<br />

al borde del abismo donde estaba suspendida,<br />

y parecía ofrecerle un beso..., un beso...<br />

Fernando dio un paso hacía ella..., otro..., y<br />

sintió unos brazos delgados y fl exibles que se liaban<br />

a su cuello, y una sensación fría en sus labios ardorosos,<br />

un beso de nieve..., y vaciló..., y perdió pie, y<br />

cayó al agua con un rumor sordo y lúgubre.<br />

Las aguas saltaron en chispas de luz y se cerraron<br />

sobre su cuerpo, y sus círculos de plata fueron ensanchándose,<br />

ensanchándose hasta expirar en las orillas.<br />

<strong>Mensa</strong>piens<br />

- 27 -


Preguntas y Propuestas / Soluciones<br />

La Cucharita y la Botella<br />

Facundo Cancelo<br />

Hace unos números, Pablo San<br />

Martín se preguntaba porque<br />

colocando una cucharita en el pico de<br />

una botella de cerveza o gaseosa, ésta<br />

no perdía el gas. Facundo nos manda la<br />

siguiente teoría:<br />

Lei en un sitio de internet lo siguiente<br />

respecto a lo que podria ocurrir con las<br />

burbujas de una gaseosa cuando se le<br />

pone un elemento metalico:<br />

Cuando una botella está cerrada el<br />

gas que escapa del líquido aumenta su<br />

presión hasta el punto de igualarse la<br />

tasa de evaporación (molèculas de gas<br />

que escapan por agitación térmica) a<br />

la de licuación (moléculas que vuelven<br />

al líquido). Si destapamos la botella,<br />

escapan del líquido más moléculas de<br />

las que vuelven. Además, las moléculas<br />

que escapan son, por termino<br />

medio, más energéticas que las que<br />

permanenecen en el líquido, dicho de<br />

otro modo, están más calientes. ¿Qué<br />

efecto puede tener la cucharilla? Mi<br />

hipótesis es: la cucharilla, por ser<br />

metálica, es buena conductora del<br />

calor; el mango de la cucharilla queda<br />

dentro de la botella, presentando<br />

sus dos caras planas a las moléculas.<br />

Cuando una molécula choca con el<br />

mango, la energía térmica que llevaba<br />

se entrega a las moléculas de<br />

la cucharilla, con lo cual la molécula<br />

de gas, enfriada, tiene mas probabilidades<br />

de volver al gas que de escapar<br />

de la botella: la cucharilla actua como<br />

un licuador, extrayendo el calor e<br />

irradiándolo a través del mango hasta<br />

fuera de la botella, donde se pierde al<br />

exterior. Como vemos, no tiene importancia<br />

que la cucharilla tape más o<br />

menos el agujero de la botella.<br />

Nota: ¿Y que pasa si la cucharita<br />

no está sumergida en el líquido?<br />

Supuestamente el método es igualmente<br />

útil, pero no queda explicado<br />

por esta hipótesis... (DZ)<br />

- 28 - <strong>Mensa</strong>piens<br />

Razón de Peso<br />

Alejandro Kwiatkowski<br />

Alejandro nos envía un link<br />

donde se explica que el signo<br />

“$” surge de la vieja abreviatura de la<br />

palabra “pesos” que era “PS”, con la<br />

“S” ligeramente superpuesta a la “P”.<br />

Con el tiempo la superposición se hizo<br />

mayor y se terminó simplifi cando con<br />

el actual signo “$”.<br />

El link enviado por Alejandro es:<br />

www.straightdope.com/classics/a3_178.html<br />

Algunos Pendientes<br />

Varios<br />

Acá les presento un resumen de<br />

algunas de las preguntas pendientes<br />

de números anteriores:<br />

- ¿Porque el monumento a Las Heras<br />

en la Catedral de Buenos Aires dice<br />

‘Jeneral’ y no ‘General’?<br />

- ¿Porqué el martillito para romper<br />

el vidrio en caso de emergencia en<br />

el colectivo está asegurado con tornillitos?<br />

- ¿Cuál es el origen de frases como<br />

‘El que como y no convida tiene un sapo<br />

en la barriga’, ‘Chupate esa mandarina’<br />

o ‘Chocolate por la noticia’?<br />

- ¿Porque algunos paises identifi<br />

can el nivel del piso de un edifi cio<br />

como ‘primer piso’ y el siguiente como<br />

‘segundo piso’ mientras que otros (como<br />

<strong>Argentina</strong>) lo identifi can como ‘Planta<br />

baja’ y el siguiente como ‘Primer piso’?<br />

¿Cual resulta más correcto?<br />

A ver si alguien se prende con estas<br />

preguntas...<br />

Errata<br />

En el número anterior se deslizó<br />

un error en las soluciones del<br />

concurso: La respuesta de la estrella de<br />

números no correspondía al problema.<br />

Aquí va la correcta:<br />

Cuestión de Principios<br />

En el número anterior se planteaban los<br />

principios de veinte novelas famosas y<br />

se pedía descubrir a cuales correspondían.<br />

El único que respondió correctamente<br />

las 20 novelas fue Hector Roldán, seguido<br />

por Andrea De Gennaro, que mencionó sólo<br />

16. Las respuestas correctas:<br />

1. Cien años de soledad<br />

Gabriel García Marquez<br />

2. El largo adiós<br />

Raymond Chandler<br />

3. Papillon<br />

Henri Charriere<br />

4. Sobre héroes y tumbas<br />

Ernesto Sábato<br />

5. El viejo y el mar<br />

Ernest Hemmingway<br />

6. La metamorfosis<br />

Franz Kafka<br />

7. Rayuela<br />

Julio Cortazar<br />

8. La invención de Morel<br />

Adolfo Bioy Casares<br />

9. El padrino<br />

Mario Puzo<br />

10. A sangre fría<br />

Truman Capote<br />

11. Moby Dick<br />

Herman Melville<br />

12. Viaje al centro de la tierra<br />

Julio Verne<br />

13. Tom Sawyer<br />

Mark Twain<br />

14. Un mundo feliz<br />

Aldpus Huxley<br />

15. Dracula<br />

Bram Stocker<br />

16. Cartero<br />

Charles Bukowski<br />

17. David Copperfi eld<br />

Charles Dickens<br />

18. El hobbit<br />

J.R.R.Tolkien<br />

19. Miedo y asco en Las Vegas<br />

Hunter S. Thompson<br />

20. Fundación<br />

Isaac Asimov


Cuadrado Mágico<br />

Juegos<br />

Colocá las fi chas dentro de la grilla de modo que queden idénticas fi las y columnas dentro del cuadrado. No podés rotar las fi chas.<br />

Dominó<br />

Ejemplo<br />

Se colocó un juego completo de Dominó (28 piezas)en el diagrama, sin embargo las líneas de los lados de las fi chas fueron<br />

borrados y los puntos reemplazados por números. ¿Se animan a dibujar las líneas de las fi chas de modo que el dominó quede<br />

completo dentro del diagrama?<br />

Se incluyen las fi chas para poder irlas tachando a medida que se las ubica y un pequeño ejemplo con seis fi chas:<br />

Ejemplo<br />

<strong>Mensa</strong>piens<br />

- 29 -


Juegos<br />

Math Bot<br />

Encuentra la mejor forma de ubicar al robot (formado por 25 cuadros) de forma tal que los números que queden dentro<br />

del robot sumen el máximo posible. El robot puede ser rotado pero su cuerpo debe quedar dentro de la grilla. Los cuadros que<br />

forman al robot no pueden solaparse con los cuadros negros, pero ¡atención! El robot tiene un cuadro vacío en su interior que<br />

puede encajar con un cuadro negro.<br />

En el ejemplo la solución suma 138.<br />

- 30 - <strong>Mensa</strong>piens<br />

Robot<br />

Ejemplo


Nombres<br />

Juegos<br />

Colocar los nombres dentro de la grilla de modo que los cuadros alrededor del nombre queden en blanco (incluidas las diagonales).<br />

Los números fuera de la grulla indican la cantidad de letras hay en esa fi la o columna. Algunas letras están indicadas,<br />

estas deben aparecer al menos una vez en la fi la o columna.<br />

Nombres: Ann, Liz, Sue, Lucy, Kate,<br />

Mary, Emily y Nancy.<br />

Nombres: Anne, Liz, Lil y Eve<br />

Aros Mágicos<br />

Ejemplo<br />

Todos los juengos anteriores corresponden al Campeonato Mundial de Juegos de Ingenio, Hungría, 1999.<br />

Completar los circulitos del siguiente esquema con los<br />

números del 1 al 12, de manera que los seis circulitos<br />

unidos por cada uno de los 4 círculos principales sumen<br />

lo mismo.<br />

Aros Mágicos<br />

Completar los circulitos del siguiente esquema con los<br />

números del 1 al 19, de manera que los tres circulitos<br />

unidos por cada uno de los 12 segmentos del hexágono<br />

(los seis del perímetro y los seis que parten del centro)<br />

sumen 22. Luego hacer lo mismo pero de manera que<br />

la suma sea 23.<br />

<strong>Mensa</strong>piens<br />

- 31 -


Mas Aforismos<br />

Ariel Griglio<br />

-No es la belleza de la rosa la que la protege de<br />

sus enemigos, sino las espinas. De igual manera,<br />

un revólver es más efectivo que una sonrisa.<br />

-Las flores florecen para todos. Pero el que las<br />

vende no piensa lo mismo.<br />

-La televisión es a la radio, lo que las revistas a<br />

los libros sin dibujitos.<br />

-No es el pasado lo que me agobia, sino la posibilidad<br />

que alguien se entere de lo que hice.<br />

-La belleza de una hermana es muy perturbadora.<br />

-Nuestros hijos nos dan la oportunidad de ser los<br />

padres que hubieramos querido tener. Y nuestros<br />

padres son los hijos de nuestros abuelos.<br />

-¡Cuánto equilibrio se requiere para castigar a un<br />

niño! ¡Y cuanta agilidad!<br />

Excusas para no colaborar en <strong>Mensa</strong>piens<br />

M.A.E.<br />

1. Estoy en contra de la deforestación, inclusive de árboles binarios.<br />

2. Saqué la mano por la ventana y me la afanaron.<br />

3. Respondí en broma a un test, el psiquiatra laboral lo tomó en serio y<br />

me encerraron.Como me enojé, me hicieron una lobotomía.<br />

4. Me acosté sobre el brazo, y la falta de irrigación me lo hizo de hule.<br />

5. Le puse un pararrayos al monitor, a ver qué pasaba.<br />

6. Mi mano es una asesina serial y no le voy a estar dando nada con punta.<br />

7. El chupacabras me sacó todos los huesos.<br />

8. Las ideas se me traban en la birome. Me crecieron los pómulos y no veo.<br />

9. Un tal Stephen King me hackea la compu desde Yankilandia. “Carrie”<br />

la escribí yo.<br />

10. Tengo un contrato exclusivo con Piñón Fijo.<br />

11. No evolucioné bien, no tengo el pulgar opuesto para agarrar el lápiz.<br />

12. Sólo escribo en arameo en mi vientre cuando me posesiona Víctor Sueiro.<br />

13. Confundí un Shimmy con un Danonino y me creció tanto la mano que<br />

no la puedo levantar.<br />

14. Hoy es SANNOESCRIBO y yo respeto las religiones.<br />

15. Un Rotweiler me comió la cabeza, y ahora no pienso.<br />

16. Me agarró lepra y se me cayeron los dedos; me los pegué con una<br />

Gotita comprada en Retiro, pero se me despegaron otra vez y una<br />

vecina los puso de velita en una torta.<br />

17. Tengo tanta fuerza que con cada dedazo rompo el teclado.<br />

18. Nací sin manos y sin pies, y mi psicólogo me dijo que yo no servía ni<br />

para hacer la “O” con el culo.<br />

19. Mi codo está embarazado y necesita reposo.<br />

20. Debo un crédito a una sociedad caníbal y estoy atrasado en tres cuotas.<br />

21. Me regalaron un teclado faquir, y me ensarto mal.<br />

22. Soy piquetero, y prendí una goma para que nadie llegue a la hoja.<br />

El búho del mes<br />

Amazonas<br />

Andrea De Gennaro<br />

The End<br />

Durante mucho tiempo se creyó en la existencia de<br />

simple como distinta.<br />

ras: Amazonas.<br />

Estampillas<br />

Seguimos con las estampillas del mundo dedicadas a<br />

famosos matemáticos.<br />

Hoy presentamos esta estampilla editada en la Unión<br />

Soviética para conmemorar el 250º aniversario del nacimiento<br />

de Leonard Euler.<br />

Sobre las colaboraciones<br />

C<br />

omo siempre, todos los lectores de <strong>Mensa</strong>piens, sean o no<br />

miembros de <strong>Mensa</strong>, están invitados a colaborar con la<br />

revista, enviando notas, cuentos, juegos, poesías, dibujos,<br />

fotos, comentarios, chistes, frases, o simplemente enviando su opinión<br />

acerca de la revista. Y por supuesto están invitados a participar en el<br />

concurso de arte digital!<br />

Ante algunas consultas acerca del formato preferido para el envio de<br />

material, les cuento: Lo ideal es que todo el texto que deseen enviar se<br />

encuentre en un archivo de texto plano, un simple archivo .TXT sin ningun<br />

tipo de formato. Si el artículo debe ir acompañado de gráfi cos o fotos,<br />

adjuntarlas en formato JPG o TIFF, pero no incluirlas dentro del texto. Si<br />

es necesario hacer alguna aclaración en el texto sobre la ubicación de las<br />

imágenes, que sea sea del tipo “[insertar imagen xxx aquí]”.<br />

Por supuesto no olviden incluir sus datos personales (nombre, email<br />

y, si lo desean, el nombre con el que quieren aparecer fi rmando,<br />

en caso de preferir no hacerlo con el propio.<br />

La dirección para enviar material es colaboraciones@<strong>mensapiens</strong>.com.ar.<br />

¡Los esperamos!<br />

<strong>Mensa</strong>piens<br />

- 32 -


MENSAPIENS 16 - Marzo / Abril de 2003

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