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48 CÓMO <strong>LEER</strong> <strong>EL</strong> <strong>CUERPO</strong><br />
Las tres zonas de la cara: zona superior, entre la línea del pelo y las cejas; zona media,<br />
entre las cejas y la base de la nariz; zona inferior, bajo la nariz.<br />
Hace dos millones de años apareció otro antepasado nuestro llamado<br />
Homo habilis, con un cerebro algo más grande y los primeros signos de<br />
frente. Quinientos mil años después, al Homo habilis le siguió el Homo<br />
erectus, que tenía más desarrollados el cerebro y el cráneo, con una frente<br />
más pronunciada. Finalmente, hace quinientos mil años aparecimos<br />
en escena nosotros, el Homo sapiens. Evidentemente, nosotros tenemos el<br />
cerebro considerablemente desarrollado (a pesar de las pruebas que<br />
apuntan en contra) y una frente muy recta. En comparación con la de<br />
nuestros primeros antepasados, la región media de nuestra cara es más<br />
refinada y más pronunciada. Nuestras mandíbulas se han ido reduciendo;<br />
ya no somos todo ojos y mandíbulas, como lo eran nuestros antepasados<br />
prehistóricos.<br />
Los precursores de los seres humanos eran cazadores-recolectores<br />
cuya primera misión en la vida era la supervivencia. No eran la astrofísica,<br />
la literatura ni la medicina lo que dominaba la vida de nuestros antepasados:<br />
era comer y luchar contra el entorno hostil. Dado que comer<br />
acaparaba tanta energía y atención, no es sorprendente que sus caras estuvieran<br />
dominadas por la boca y las mandíbulas.<br />
La supervivencia sigue siendo una misión importante en el mundo<br />
moderno, pero también tenemos otras necesidades, más complejas: necesidades<br />
emocionales, psicológicas y espirituales, insospechadas para<br />
nuestros primeros antepasados.