2. PUBLICACIONES DE JAVIER TAMAYO JARAMILLO (Libros ...

c) DERECHOS DE LA CONCUBINA
Durante mucho tiempo se negó a la compañera extramatrimonial el derecho a
reclamar indemnización por la pérdida de su compañero. La jurisprudencia
Colombiana en uno que otro caso le dio a la compañera el derecho a la
indemnización, pero sin una fundamentación conceptual sólida. En la página 438
del tomo 2 de mi obra propongo criterios jurídicos distintos para ser sólida la
legitimación de la compañera para reclamar reparación de su daño. Anexo los
argumentos por mí esgrimidos. (438 a 469 Tomo 2 TRC)
Esta teoría como argumento general ha sido acogida por la doctrina y jurisprudencia
nacionales, aunque el problema perdió importancia debido a la ley que crea la
denominada sociedad conyugal de hecho.
d) PRINCIPIOS SOBRE ACCIONES POPULARES Y DE GRUPO.
En 1986, cuando publique el segundo tomo del tratado de Responsabilidad Civil
propuse por primera vez la tesis según la cual en el artículo 2359 de Código civil se
consagraba una acción popular que podía interponer cualquier persona (De la
Responsabilidad Civil tomo 2 Temis, página 80 y 81) para que el demandado
realizara las medidas necesarias para evitar un daño contingente o potencial. Mi
propuesta tuvo gran acogida en la doctrina y fue adoptada (no tengo en mi poder la
copia del fallo) en un fallo sobre contaminación ambiental, por demanda
interpuesta por el doctor Sarmiento, ya fallecido, y en la que se condenó a una
empresa a trasladarse a otro lugar para evitar la contaminación A raíz de ese fallo y
de los propuesto por mí, la Constitución incluyó las Acciones Populares y de Grupo
en el artículo 86 y siguientes. Desarrollados posteriormente por la ley 472 de 1998,
sobre la cual tengo una obra publicada.
e) Finalmente, desde 1986 sostengo la tesis de que la víctima tiene derecho a acumular
las indemnizaciones pagadas por los seguros o la seguridad social y el responsable
del daño, mientras no haya una norma especial que consagre la subrrogación a
favor de la entidad que pagó el seguro o la pensión. Esta tesis es hoy en día pacífica
y el cambio comenzó con un fallo de la Corte Suprema de Justicia de 1996. (copiar
de la 639 a la 652 del tomo 2 TRC)
Sin pretensiones y arrogancia alguna puedo afirmar que son múltiples las sentencias
las que aún la Corte Constitucional se apoya en mis obras para fundamentar sus
sentencias.