Acta02 - Municipalidad de Santa Ana

Posteriormente, y tomando como base dicho costo de tratamiento conjuntamente con la estructura de los
costos totales del servicio, identificada por la Municipalidad, se estima el costo aproximado que se le
podría cobrar a cada categoría de usuario.
Cuadro Nº 2
PROMEDIO DE KILOS DE BASURA POR MES, POR CATEGORÍAS DE USUARIO, COSTO DE
TRATAMIENTO Y COSTO TOTAL
CATEGORIA KILOS COSTO
TRATAMIENTO
COSTO TOTAL
CATEGORIA 1 75.22 ¢ 570.50 ¢ 1.728.75
CATEGORIA 2 97.20 737.20 2.233.90
CATEGORIA 3 353.78 2.683.05 8.130.45
CATEGORA 4 1.035.06 7.849.90 23.787.65
CATEGORIA 5 2.491.37 18.894.60 57.256.30
CATEGORIA 6
FUENTE: CICAP
4.010.66 30.416.85 92.172.32
De conformidad con el objetivo del estudio y los resultados de los datos de pesaje de basura, se
evidencia los siguientes aspectos:
La concentración del cobro de la tarifa de la categoría comercial e industrial en prácticamente un solo
nivel, a saber, “usuario comercial e industrial 1”, no refleja la realidad del campo demostrada en el
presente estudio, por lo que se debe hacer una recalificación de los usuarios en las distintas categorías.
Los niveles de cada categoría, que actualmente es de ocho y que creemos que se podría reagrupar a seis
o cinco niveles, no es una inconsistencia significativa, lo que si se considera que se debe revisar, es el
criterio que genera cada categoría, que actualmente se habla de estañones, que si bien, en otros países
se utiliza la unidad de medida de barriles para tasar la tarifa, este concepto, por lo menos en el ambiente
de la Municipalidad, no se tiene bien claro, según nos lo manifestó distintos funcionarios a los cuales se
les consultó. Una medida que se podría considerar para definir las distintas categorías sería los kilos
generados, y en los casos que lo amerite, considerar el volumen.
En el estudio tarifario del 2001, dentro de sus conclusiones y recomendaciones, específicamente en la 6.3
establecía, “La Municipalidad debe de revisar las tasas en el mes de octubre para determinar si se están
cumpliendo con las expectativas propuestas y además realizar una nueva recalificación con el fin de que
las nuevas tasas entren en vigencia en enero del 2002”.
Lo anterior permite entrever que el horizonte de proyección de dicho estudio era de aproximadamente un
año, ya que el informe del mismo es de mayo del 2001, y las tarifas se publicaron en La Gaceta en
diciembre del mismo año, prácticamente cuando recomendaba realizar la revisión de las tasas.
De conformidad con los datos del cuadro de costos, se tiene que en general hay un rezago en la tarifa de
todas las categorías, así se tiene que por ejemplo, la categoría residencial, que actualmente se cobra
¢1.200 por mes, de conformidad con el cuadro, dicho monto debería estar entre ¢1.730 y ¢2.235
aproximadamente, la categoría comercial e industrial 1, que actualmente se cobra ¢1.800 por mes, sólo
el costo de tratamiento se estima en ¢2.683.05 y el costo total, de conformidad con la estructura
indicada oscila en los ¢8.130, lógicamente este costo total no considera una distribución equitativa de los
costos fijos. De conformidad con la situación descrita, la categoría residencial es la única categoría que
está contribuyendo a la cobertura de los costos de operación, en este sentido, dicho estrato está
subsidiando los otros niveles tarifarios.
El problema de tener una estructura de costos variables que supere el monto cobrado por el servicio, es
que conforme se tenga más usuarios en dicha condición, el déficit se incrementa. La situación anterior
parece ser el de las categorías comercial e industrial, no tanto así el de la categoría residencial, ya que el
monto que se cobra actualmente es superior al costo de tratamiento, lo que deja margen para cubrir
parte de los otros costos de operación.
Los costos de operación han crecido ligeramente superior al aumento de los costos de tratamiento, donde
el costo de tratamiento en los últimos cinco años aumentaron un 95%, dando un incremento anual
promedio del 19%, muy superior al costo por inflación.
RECOMENDACION
1. Con el objeto de mejorar la recaudación en forma inmediata, en aproximadamente sesenta millones
anuales, se debe incluir los usuarios a los que no se les está cobrando el servicio de recolección, así
como aquellas patentes que no se estén facturando.
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