356 además es poco atacado por plagas, es escasamente conocida por los productores ganaderos, los cuales no la emplean para alimentar sus animales. En Cuba existen pocos antecedentes sobre la fabricación y el empleo de heno de leguminosas, y aunque está normada la utilización de heno de gramíneas para los terneros, las cantidades y la calidad están muy lejos de satisfacer las necesidades. La escasez de información en las condiciones cubanas sobre el efecto del heno de leguminosas y las posibilidades reales de disponer de este recurso, refuerzan la necesidad de abordar esta temática, máxime en la actual coyuntura económica en que cada vez están más limitadas las posibilidades de adquirir concentrados proteicos en el mercado. El objetivo del presente trabajo fue realizar una evaluación inicial de las potencialidades de C. ensiformis para henificar en condiciones de bajos insumos en dos etapas fenológicas del ciclo del cultivo. Materiales y Métodos El presente trabajo se realizó en el área experimental del Instituto de Investigaciones de Pastos y Forrajes, ubicado en el municipio Bauta, sobre un suelo Ferralítico Rojo típico (Hernández et al., 1999), en condiciones de secano, con una temperatura promedio de 24,6ºC y una precipitación de 1 514 mm. En el experimento de campo se utilizó un diseño experimental de bloques al azar con tres réplicas y arreglo factorial. Las réplicas se establecieron en parcelas de 19,2 m2 (8 x 2,4 m), con un área cosechable de 18,4 m2 ; se utilizó un marco de siembra de 0,75 x 0,25 m y una dosis de 50 kg/ha. Los resultados se evaluaron estadísticamente con el programa ESTADISTICA versión 2.0 (ICA, 1998). Se evaluó la henificación en dos etapas fenológicas del cultivo y a dos alturas de corte, en un análisis estadístico con arreglo factorial. El corte de las parcelas se realizó a las 10:00 a.m. de forma manual. Pastos y Forrajes, Vol. 27, No. 4, 2004 Las variables medidas fueron: rendimiento de forraje fresco, rendimiento de heno, rendimiento de hojas secas, comportamiento de la abscisión foliar y mortalidad después del primer corte. Se midió, además, el comportamiento del secado cada 24 horas por tres días, partiendo de un 25% de materia seca con día soleado, en todos los casos a las 12:00 m. Los tratamientos en estudio fueron los siguientes: IF-10. Inicio de la fructificación (90 días) con corte a 10 cm del suelo FF-10. Final de la fructificación (120 días) con corte a 10 cm del suelo IF-20. Inicio de la fructificación (90 días) con corte a 20 cm del suelo FF-20. Final de la fructificación (120 días) con corte a 20 cm del suelo La calidad del heno se midió según el procedimiento propuesto por Espinosa y Ríos (1983), aunque solo se evaluó la etapa fenológica de inicio de la fructificación, debido a que fue evidente la peor calidad del heno cortado con la mayor edad. Resultados y Discusión No se encontró efecto de la edad o la altura de corte en el rendimiento de forraje fresco y de heno, ni entre sus interacciones (tabla 1), y los valores fueron altos en las dos etapas. Similares resultados fueron reportados por Pound et al. (citados por Santana, Cáceres, Rivero y Delgado, 1991 y Cáceres, González y Delgado, 1995), quienes lograron una mayor producción de forraje al cosechar a partir de los 3 meses de edad. Sin embargo, en el rendimiento de hojas secas se encontraron diferencias significativas (P
Pastos y Forrajes, Vol. 27, No. 4, 2004 357 Tabla 1. Comportamiento productivo de Canavalia ensiformis. - 1 Rendimi ento ( t/ ha ) Tratami ento Forraje fresco Heno Hojas secas IF-10 13, 31 5, 92 a 2, 90 FF-10 14, 97 6, 72 b 1, 81 IF-2011, 37 5, 11 a 2, 34 FF-2012, 05 5, 41 b 2, 05 ES± 1, 59 0 , 71 0, 26* a,b Medias con letras diferentes difieren significativamente a P