Número 6 - Año 2.009 - Colegio Reinado Corazón de Jesús

salidas y excursiones
Viaje a Roma
El día 28 de marzo partimos para Roma,
¡por fin llego el día! Después de un súper
madrugón llegamos al aeropuerto, facturamos
las maletas y nos despedimos de los
papas con alguna que otra lagrimilla.
Llegamos a Roma y de camino al hotel nos
dimos cuenta de donde estábamos, ¡es una de
las ciudades más antiguas del mundo!
Una vez en el hotel, dejamos las maletas, como
llegamos demasiado pronto, el recepcionista del
hotel, que tampoco estaba muy despierto, nos
metió a todos en una habitación para dejar las
maletas hasta que tuvieran preparadas el resto
de las habitaciones. Y Cristina, la profe de historia,
tuvo la maravillosa idea de cambiarse las
botas, cuando iba a bajarse la cremallera se le
quedó enganchada y necesito la fuerza de un
súper hombre para bajarla, para ello apareció el
primo AP. Pero como dice el dicho “mas vale
maña que fuerza” porque Alex no consiguió bajar
la cremallera y con la paciencia de Beatriz Sánchez
y Beatriz Villar, la cremallera bajó.
Después de todo esto aprovechamos la buena
mañana que hacía, y nos fuimos a conocer esa
sorprendente ciudad. El primer día visitamos,
entre otras reliquias, el Palacio de Barberni y la
tan esperada Fontana de Trevi. Fue fantástico
Amistad
06-
ver como disfrutamos en ese monumento tan increíble.
Esa tarde dedicamos nuestro recorrido
a visitar iglesias, entre otras, la Iglesia de Santa
María de la VItoria, donde los chicos disfrutaron,
a pesar de su cansancio, del Éxtasis de Santa
Teresa, escultura muy famosa de Bernini. El
tema de la escultura provocó una gran risa entre
nosotros que hizo que el vigilante nos mirara un
poco mal. Cuando nos dirigíamos a cenar al restaurante,
que nos pillaba a dos minutos de donde
estábamos, Cristina se despistó, y tomó la Vía
del Corso en dirección contraria, lo que provoco
que recorriéramos la calle de arriba y abajo en
dos ocasiones. Esa noche, como habíamos madrugado
mucho, no salimos y nos fuimos a descansar
al hotel, no sin antes tener unas risas por
las habitaciones a las que también nos incluimos
las profesoras.
En nuestro segundo día en Roma, el buen
tiempo nos seguía acompañando, y visitamos la
Villa Borghese, la Plaza del Pópolo y acabamos
en la Plaza de España calados hasta los huesos
por una inesperada tormenta. Terminamos la
tarde escuchando misa en la Iglesia de San Ignacio
de Loyola, para contemplar el magnifico
fresco del padre Andrea del Pozo. La misa estuvo
acompañada de la música de un órgano del
siglo XVII, que causó gran impresión entre los
alumnos.
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