PROGRAMA INTENSIVO DE FORMACIÓN PARA NEGOCIADORES ...

esfuerzos es el importante aumento de las corrientes de inversión
extranjera hacia países en desarrollo, que hoy se elevan a un 27,9 por
ciento de los flujos mundiales.
Sin embargo, como lo sugiere el Informe sobre las Inversiones en el
Mundo, el año 2001 ha marcado un punto de inflexión en la tendencia
ascendente que la IED venía experimentado a lo largo de la década
pasada. Tendencia que se mantendrá para el año 2002. Los factores que
hicieron caer los flujos mundiales de inversión a casi la mitad de los
volúmenes del 2000 repercutieron inevitablemente en la región, aunque
ya un año antes hubo factores específicos, tales como la crisis política y
económica de algunos de nuestros países, que tuvieron una incidencia
negativa a este respecto. Esto hace más necesario aun el tomar medidas
tendientes a aumentar los beneficios para el desarrollo que pueden
obtenerse de la IED.
En el caso latinoamericano, la década pasada se caracterizó por un
cambio cualitativo en las políticas sobre IED. Cambio especialmente
fundamental si se tiene en cuenta la actitud de cautela y más bien crítica
del pasado respecto al papel de la IED en el desarrollo económico. Este
giro de actitudes y políticas tuvo una expresión concreta en los estatutos
de promoción y estímulo a la IED, en la suscripción de acuerdos
bilaterales sobre protección y doble tributación y en iniciativas
regionales.
La mayoría de los países en desarrollo están participando activamente en
la negociación de acuerdos sobre inversiones a todos los niveles con la
convicción de que la estabilidad jurídica, el carácter predicible y la
transparencia implícita en estos acuerdos aumentarán su atractivo para las
empresas transnacionales de los países firmantes.
La UNCTAD, tiene la responsabilidad y la vocación de asistir a los países
en desarrollo en esta materia. Como otros cursos realizados,
respectivamente, para el África francoparlante (junio del 2001), Asia y el
Pacífico (noviembre del 2001) y el África angloparlante (marzo del 2002),
la sesión que comienza hoy sirve este objetivo y en particular, el de
proporcionar los conocimientos necesarios para la negociación de
acuerdos internacionales sobre inversiones. Esto habrá de contribuir, estoy
seguro, a negociaciones más equitativas que resguarden los intereses y
objetivos del país recipiente de IED.
No puedo terminar sin expresar una vez más mi profunda gratitud a la
Universidad de Lima, a ProInversión y al Gobierno del Perú por acoger
este curso. Deseo igualmente formular votos por un fructífero intercambio
de opiniones durante el curso que comienza hoy en esta bella cuidad.
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