EL RINCÓN de - Cannabis Magazine
EL RINCÓN de - Cannabis Magazine
EL RINCÓN de - Cannabis Magazine
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
88<br />
<strong>EL</strong> <strong>RINCÓN</strong> <strong>de</strong><br />
JAVIER<br />
aquí"-or<strong>de</strong>né más que pedir. "¿Dón<strong>de</strong> ?"- me<br />
respondió mi amiga. "Por ahí".<br />
Echamos a andar por una carretera semiabandonada<br />
ignorando las advertencias <strong>de</strong> los reporteros<br />
canadienses, obsesionados en seguir<br />
las reglas. "¡qué cojones! en los conflictos no<br />
hay reglas"- me dije a mí mismo. Llevábamos<br />
2 kilómetros escasos <strong>de</strong> marcha cuando<br />
topamos con un guerrero que se acercaba a<br />
nosotros en su moto a gran velocidad. Cuando<br />
llegó a nuestra altura se puso a increparnos<br />
por estar allí. Nos increpaba para que volviésemos<br />
con los <strong>de</strong>más. En esta ocasión el mono<br />
<strong>de</strong>cidió echarme una mano. Me subió en<br />
escasos segundos poniéndome <strong>de</strong> muy mal<br />
humor. Dejé mi pesada bolsa <strong>de</strong> fotografía en<br />
el suelo y me encaré a él. " Escúchame atentamente,<br />
por favor"- comencé- "Hemos venido<br />
<strong>de</strong>s<strong>de</strong> Europa para ayudar en este conflicto.<br />
No te imaginas cuánto podría ayudaros el que<br />
ésta noticia se conociese en los países<br />
europeos. Tan sólo he visto a reporteros canadienses"-<br />
concluí. El guerrero <strong>de</strong>smontó <strong>de</strong> su<br />
moto y me tendió su mano. " Gracias por venir<br />
<strong>de</strong>s<strong>de</strong> tan lejos. Vamos, os llevaré dón<strong>de</strong><br />
queráis"<br />
Montamos los tres en la moto y pocos kilómetros<br />
<strong>de</strong>spués nos hallábamos en un campamento<br />
lleno <strong>de</strong> guerreros prestos para la<br />
lucha. Casi todos estaban agotados por las<br />
horas <strong>de</strong> vigilia. Fuimos presentados a un jefe<br />
tribal quién dispuso todo lo necesario para que<br />
en un jeep pudiésemos meternos en el horno<br />
<strong>de</strong>l conflicto- " No es necesario que vengas "le<br />
dije a mi amiga. "Si crees que me voy a<br />
per<strong>de</strong>r un western a finales <strong>de</strong>l siglo XX estás<br />
muy equivocado"- me respondió mientras<br />
saltaba al jeep.<br />
Poco <strong>de</strong>spués llegábamos a la zona caliente.<br />
Grupúsculos guerrilleros estaban diseminados<br />
por todos y cada uno <strong>de</strong> los rincones <strong>de</strong>l<br />
bosque. Sólo los indios saben moverse en<br />
absoluto silencio en estas zonas. Sus tácticas<br />
<strong>de</strong> guerrilla son inmejorables.<br />
Asistimos a una escaramuza que fue respondida<br />
<strong>de</strong> inmediato por la guardia nacional y la<br />
policía. El fuego cruzado no amedrentaba a los<br />
guerreros quienes por el contrario acompañaban<br />
sus salvas <strong>de</strong> proyectiles <strong>de</strong> aterradores<br />
bramidos <strong>de</strong> guerra. El combate duró poco y<br />
no hubo bajas en nuestra parte. Ignoro lo que<br />
sucedió en la otra parte aunque sé que<br />
algunos policías resultaron heridos. Yo estaba<br />
pletórico y mi mono se había ido a dormir. Me<br />
imaginaba a los <strong>de</strong>más reporteros esperando<br />
pacientemente jugando al frisbi o a la pelota y<br />
me doblaba <strong>de</strong> risa. A<strong>de</strong>más, tenía la<br />
exclusiva. Nadie había conseguido hasta la<br />
fecha imágenes <strong>de</strong>l conflicto. Cuando por fin<br />
regresamos al campamento base mi amiga y<br />
yo <strong>de</strong>cidimos fumar la pipa <strong>de</strong> la paz. En<br />
aquella ocasión ni siquiera intentamos ser<br />
discretos. Esta vez se nos unieron dos<br />
guerreros que también querían dar gracias a<br />
su Dios, Manitou, con unas buenas bocanadas<br />
<strong>de</strong> la planta divina. Hablamos largo y tendido<br />
sobre el conflicto. Alguna hora <strong>de</strong>spués y tras<br />
varias pipas <strong>de</strong> la paz <strong>de</strong>cidimos ponernos en<br />
marcha hacia "la civilización". Los mismos<br />
guerreros nos acompañaron (sin pagar 10<br />
dólares ) y pronto nos encontramos en nuestro<br />
coche <strong>de</strong> vuelta a casa. Realmente fue una<br />
historia muy corta en el tiempo pero muy pero<br />
muy larga en cuanto a aprendizaje <strong>de</strong> la vida<br />
se refiere. Fue tan intensa que consiguió que<br />
me olvidara <strong>de</strong> mi mono por completo. No<br />
siempre he podido <strong>de</strong>cir lo mismo.<br />
Tomamos el primer avión para Madrid.<br />
Durante el vuelo hasta Madrid no podía parar<br />
<strong>de</strong> pensar en lo que había vivido. En mi<br />
walkman Bruce Springteen sonaba a todo<br />
volumen: "Como soldados en la más triste <strong>de</strong><br />
las noches con un voto a <strong>de</strong>fen<strong>de</strong>r. No hay<br />
retirada, no hay rendición". Me hubiera<br />
gustado quedarme mucho más tiempo y<br />
disfrutar <strong>de</strong> mi estancia con aquellos guerreros<br />
Mohawks que siguen diciéndonos que no les<br />
gusta nuestra manera <strong>de</strong> vida aunque no<br />
podamos enten<strong>de</strong>rlo. Pero había mucho dinero<br />
en juego. Sabía que tenía un material <strong>de</strong><br />
primera y no podía <strong>de</strong>jarlo escapar. ¡ siempre<br />
he sido free-lance !<br />
Tan pronto llegué a Madrid y revelé mis rollos,<br />
hice varias copias <strong>de</strong> las mejores tomas. Al día<br />
siguiente lo vendía en España por una bonita<br />
suma. Le pregunté a mi amiga si quería<br />
pasarse una semana por toda Europa a todo<br />
trapo. No creo que tenga que <strong>de</strong>ciros su<br />
respuesta ante tal propuesta. Resumiendo;<br />
nos pasamos 10 días por las principales<br />
capitales europeas vendiendo el reportaje. Sin<br />
duda alguna ha sido uno <strong>de</strong> los trabajos que<br />
mejores momentos me ha hecho vivir. Y como<br />
creo que ya he dicho anteriormente...¡ no<br />
siempre ha sido así !<br />
TEXTO Y FOTOS: JAVIER MARIN