8ª División

Declaración de Domingo Fernández Carrera.- En Vigo a 12 de septiembre de 1936. Ante S.S. y
mi secretario compareció el que al margen se expresa, a quien el Sr. Juez advirtió que iba a
prestar declaración y le hizo saber la obligación que tiene de decir verdad en todo lo que supiere
y fuere preguntado, lo cual prometió el declarante, y habiéndolo sido por las generales de la ley,
dijo ser y llamarse Domingo Fernández Carrera, mayor de edad, casado, dueño de una panadería
en Gondomar, de donde es vecino, y que no tiene interés directo ni indirecto en esta causa.
Leída que le fue su manifestación ante la Guardia Civil de Gondomar, obrante al folio 1 de estas
actuaciones, y
Preguntado.-
Si en su contenido se afirma y ratifica; dijo: que sí.
A preguntas del Juzgado por vía de ampliación declara: Que a eso de las 8 de la tarde del día 20
de Julio último, se presentaron en su establecimiento Salustiano Cortegoso Iglesias, Santos
Pérez, el presidente del sindicato llamado Míguez y otros que no sabe sus nombres, los cuales
armados con escopetas, excepto un apodado “El Dientes” que llevaba una pistola, diciendo que
se había declarado la huelga general y que no se trabajase, en vista de lo cual y teniendo en
cuenta que al mismo tiempo les conminaron con que, de trabajar, les saltarían la tapa de los
sesos, el declarante les dijo a sus tres obreros allí empleados, que si querían podían dejar de
trabajar, como así lo han hecho, pero el declarante en unión de su esposa y de un hijo,
fabricaron el pan aquella noche: Que a eso de las 4 y media de la mañana del día 21 volvieron a
presentarse en la panadería Salustiano Cortegoso, Santos Pérez y otros a quienes no conoce,
armados igualmente como en la visita anterior, y procedieron al recuento del pan que había
fabricado el declarante, y una vez terminada esta operación le dijeron que ese pan debía de
mandarlo al sindicato donde había de ser vendido; pero el declarante les dijo que el no entregaba
el pan sin un vale de una entidad o persona solvente, en vista de lo cual desistieron de su
pretensión y en cambio le dijeron que las personas que viniesen a comprar pan a la panadería lo
harían con vales del sindicato, como así ocurrió efectivamente, pero pagando el pan que extraía:
Que la noche del 21 a eso de las 9 volvieron a aparecer los mismos individuos antes citados, que
venían también armados, diciendo que continuaba la huelga y que no se trabajase, igual
prometió el declarante, pero como la noche anterior fabricó algún pan en unión de sus
familiares: Que el 22 por la noche vinieron igualmente los mismos individuos manifestando el
Cortegoso y los otros que le acompañaban y que no conoce, que no se trabajase y que de hacerlo
tenían que enviar el
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