REAL ACADEMIA DE BUENAS LETRAS DE BARCELONA

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necesidad, en los albores de su vida. En efecto nuestro
amigo vino al rilundo el 11 de Dic,iembre dc 1818, y
salió de e1 para volar a otro mejoi* cl 25 de Febrero de 1848,
ó sea, el día siguie.nte al en quc cumplía cuatro aiios de in-
greso en i~uest~u Academia, y antes de llegar a los lreinta de
su edad. Perrnitidme pues, que con motivo de ese doble ani-
versario, de grato recuerdo el uno, de tristísima inemoria el
otro, venga á ofrecer en vuestro rioiilbre un tributo, doi~le
tambikn, de alabanzas y dc lagriinas, 5 quien, por adverso
caso, por dcn& raro cri los modestos andes de nuestra
Academia, ésta que jamás se ha mostrado avara en ofrecer
aquel tributo a los más preclaros niieml~ros que le son
arrebat,ados por la muerte, dejó dc pagarlo al que, apesar
de los pocos años que llevaba de contarse en el niimero
de ellos, era tenido ya por de los primeros por sus superiores
dotes como escritor, y por las originales y superiores con-
diciones de su ingenio.
Porque, triste es tener que recordarlo; nuestra Academia:
ora iuese porque se viesc obligada a aplazar por tierripn iildc-
terminado y por circunstancias, por los quc vivimos hoy des-
conocidas, cl que hubo de ser sin duda uno de sus m: ds cons -
tantes propósitos, 6 sea el de dedica,r una solemne sesión
necrológica á la niemoAa del joven so&, por quicn podia esperar
*e se reflejaví'an en ella los iulgoies, cGmo de astro
de primera magnitud, con que debía. brillar en el cielo de las
lelras patrias el que t,an vivos los despedía en edad tan temprana:
ora fuesc-y esto es para mi lo más probable,-que
esperasc que alguno de los amigos de PiIerrer; cl que se creyese
mis obligado IL-ello, ó por ser rnás estrechos los vínculos
de amistad que ti él le,uniesen, ó mayores las deridas de agra.
decimiento á quc con el mismo se hallasc atado, se ofreciera
voluntariaineiite á t,ejcr para nuestro malogi7ado amigo, ,en
nornii?? (le sus demis con~paiieros, la corona de tristes re-