pasión - Hermandad de la Pasión de Córdoba

La candelería del palio se inspiraba en la de los palios antiguos
El Señor reina humildemente en su barrio
Foto José Gabriel Zurera Foto F. Gómez Sanmiguel
PASIÓN
PASIÓN
Casi sin darnos cuenta, llegó la mañana
del tan esperado Miércoles Santo. En los
días previos numerosos hermanos habían
preparado los pasos que ya se encontraban
dispuestos en el interior del templo aguardando
la salida. En la capilla del Tránsito,
Nuestro Padre Jesús de la Pasión aguardaba
sobre un bello calvario de iris morado que
confería un caracter sobrio al conjunto, en
una acertada composición que se viene repitiendo
desde hace varios años.
Por su parte, en la nave central del
templo, el paso de palio de María Santísima
del Amor presentaba un variado exorno floral
a base de flor blanca y rosa. De nuevo,
llamaba la atención de cuantos se acercaban
a verlo su abundante candelería si bien este
año, José Gallardo, con la colaboración de
Álvaro Doctor y José Cosano habían buscado
su fuente de inspiración en los palios
antiguos, colocando cera más fina, en una
valiente apuesta que nos devolvía estampas
clásicas de nuestra Semana Mayor.
Las miradas al cielo no faltaron durante
toda la mañana y aunque a la hora de la
salida de nuestra hermandad se presentaba
cubierto, no hubo dudas y puntualmente,
nuestra hermandad inició su estación de
penitencia poniendo su cruz de guía a las
cinco y cuarto en la plaza de San Basilio.
Un año más, el momento del Miércoles
Santo en que se abren las puertas de la
parroquia de San Basilio concentra la expectación
de toda la ciudad, que se suma a
la fiesta de todo un barrio en su día grande.
Es una devoción antigua y popular la que
atesora Nuestro Padre Jesús de la Pasión,
fuertemente arraigada en un barrio donde
el Señor reina humildemente y es centro
de plegarias y ruegos. Devoción intima, de
puertas para adentro, de hogares en los que
no falta una imagen del Señor. Devoción
también arraigada hacia María Santísima
Vida de Hermandad 11