Perlas del Alma 2009- Rev. Francisco Aular.pdf - Webnode

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Pues bien, en el relato de Marcos, alguien se acerca en medio de la tormenta y camina
sobre el mar agitado para socorrerlos. Ellos se habían olvidado de JESÚS pero ahora al
verlo caminar sobre las aguas, tienen miedo y gritan: ¡Un fantasma! Se habían olvidado
también que en otra ocasión similar JESÚS había calmado la tempestad. Igualmente, se
olvidaron del milagro de la multiplicación de los cinco panes y dos pescaditos para
alimentar a unas diez mil personas… ¿Qué olvidadizos somos? Los discípulos espantados,
claman a voces en la oscuridad de aquella noche. JESÚS pasa al lado de ellos para probar
la fe de sus discípulos y darles una gran enseñanza. ¿Seguirá de largo hasta la otra orilla,
dejándolos abandonado en medios de su angustia? No. JESÚS es especialista en ayudar en
medio de las peores crisis de la vida y de las tormentas que nos amenazan. No los
reprende por no haberles reconocido y los tranquiliza diciendo con esa voz inconfundible
de Pastor amante: "Yo soy". Entonces, sube a la barca con ellos y se calma la tempestad.
¡Los discípulos enmudecen, y viéndolo allí con ellos en la barca saben que están seguros!
He vivido lo suficiente y he descubierto vez tras vez que Aquel que va en la barca de mi
vida, es nada más y nada menos que el "YO SOY" Aquel que era, que es y que será va con
nosotros. Cuando JESÚS, está presente en nuestra barca la tormenta se convierte en
calma, la guerra deja paso a Su paz, lo imposible es posible, lo insoportable se soporta, la
tristeza se convierte en gozo y aún en medio de lo noche oscura nuestra alma canta y se
eleva para honrar y glorificar al SEÑOR. Sí, Dios tiene un propósito para templar nuestro
carácter detrás de cada problema que se nos presente. En realidad JESÚS quiere
maravillarnos al darnos la solución a cada uno de ellos. Invitémoslo a nuestra barca, y
seremos con Él: "Más que vencedores". ¿Quién está en tu barca?
Oración:
¡Bendito y alabo seas Padre Celestial! Te doy gracias por llegar a mi vida y permitirme ser
lo que soy: Tu hijo. Tú, vas conmigo en esta barca de mi vida, y hoy nada ni nadie podrá
detener nuestro triunfo. ¡Líbrame del miedo ante las tempestades y peligros que tenga que
enfrentar! ¡Hoy me monto sobre la escalera de mis dificultades porque Tú vas conmigo
como lo has prometido hasta el fin del mundo! En el nombre de JESÚS, amén.
Perla de hoy:
No importa el tamaño de la tormenta, lo que sí importa es el tamaño del "YO SOY".
El poder salvador de Dios
Aunque te laves con lejía, y te frotes con mucho jabón,
ante mí seguirá presente la mancha de tu iniquidad
—afirma el SEÑOR omnipotente—.Jeremías 2:22(NVI) Jesucristo…Nos amó, y nos lavó de
nuestros pecados con su sangre. Apocalipsis 1:5 (RV60)
A una hora de nuestra casa se encuentra una de las bellezas naturales más atractivas del
mundo: Las Cataratas del Niágara. He ido muchas veces delante de esta maravilla de la
creación y siempre enmudezco. Están formadas por la caída del río Niágara que le da su
nombre. Si un ser humano cae al río, su muerte al llegar a la caída de la corriente es
inevitable. A menos que alguien le saque del río, no podrá salvarse, porque es incapaz de
salvarse a sí mismo.