Testimonios del Grito de Independencia - Bicentenario

Testimonios del Grito de
Independencia

d.bf
+5..
% S4 t• .kC tfl'l Vti!
r s ,T
I t-
•;•• ,r1:..s'7t....
1 1:
"v-..- I
- •.fra'a.'ra-;tcs
id?': rc L'
ill.
' ;'3 z'tn3 "r
.a.. . 4 pó.----- • & I
I- /.--4
-
_i-I-'.
k

Que se solemnice el 16 de septiembre
"Que igualmente se solemnice ci dia 16 de septiembre todos los años, como ci dia
aniversario en que se levantO Ia voz de la Independencia y nuestra santa libertad co-
menzó. pues en ese dia fue en el que se abricron los labios de la Nación para rcela-
mar sus derechos y empuAO Ia espada para ser olda; recordando siempre el mérito
del gran Woe, el señor don Miguel Hidalgo y su compañero don Ignacio Allende."
JOSE MARIA MORELOS
Chilpancingo, 14 de septiembre de 1813.
—S
- - -'
a
21

Primera proclama formal de don
Miguel Hidalgo en la que transmiten
las ideas polIticas, sociales y
econômicas que el caudillo debió
pronunciar en el atrio de la parroquia
de Dolores, el 16 de septiembre de
1810 *
Amados compatriotas rciigiosos, hijos de esta America: El sonoro ciarin de la libertad
politica ha sonado en nuesiros oidos; no Ia confundäis con ci ruido que hizo ci
de la libertad moral, quc pretendian haber escuchado Ins inicuos franceses. crcyendo
quc podrian hacer todo aqueltos que se OpOrW a Dios y al prójimo y dar larga rienda
a sus apetitos y pasiones. dehiendo quedarse impunes ann clespuCs de haher cometido
los mayorcs crimenes. Lejos de vosotros semejante pensaniiento en todo opuesto
a la santisima Icy de Jesucristo que profesamos, par to mismo detestable y ahorrecible
hasca to sumo.
La libertad politica de que as hablamos, es aquella que consi.stc en quc cada mdividuo
sea ci Unico ducño del trabajo de sus manos y ci quc deba lograr lo que ilcitamente
adquicra para asistir a ]as neccsdadcs temporales de su casa y farnilia: la misma
quc hace que sus hienes estén seguros de Las rapaces manos de los dCspotas, que
hasta ahora os han oprimido esquilrnándonoshastaiamisma substancia con gravámenes.
usuras y gabelas continuadas. La misma que ordena el quc circule en vuestras
manos Ia sangre que anima y vivilica ]as riquisinias venas del vasto cuerpo del
Continente Americano: es decir, esas masas enormes de piata y oro de que a costa
de mil afanes y con peligro de vuestras vidas preciosas, estáis sacando hace trcs sigios,
para saciar Ia codicia de vuestros opresores, y'esto sin poderlo conseguir. Aqucllo,
pues, quc dispone cI que con gran gusto y desahogo cultivCis aquclia ciencia que es
el alma del mundo politico mercantil, y el muclle o resorte que pone en movimiento
Ia gran máquina de nuestro gloho, cual Cs Ia agricultura, sin ci penoso alan de pagar
]as insoportables rentas que de mttcho favor se os han exigido; porque. decid, habãis
hasta ahora disfrutado por una sola ye, Ins placeres del campo sin Ia zozobra
de esperar at que viene a cobrarlos las rentas de las tierras que trabajáis? j.Habéis
tornado cI gusto at sabroso licor que expriruis de las mamilas de vuestras v2cas. sin
el azahar de que el comerciante ultramarino que os fiô cuatro andrajos podrá venir
a echaros un embargo sobre esas mismas reses quc a costa de sudores habCis criado
y cuidado a fueria de desveloccontinuados? ;,No es verdad que muchos de vosotros
ignoráis to dulce quc es at paladar la miel que fabrican las abejas? Los gusanos de
seda, ni los conocCis; tampoco habCis trahajado en los piantios de [as arboledas. tan
Utiles a los grandes pobiados, por la lena que praducen con bundancia y surninistra-
• En tcmounc. E:t,c'jzo, 'l.a rcvoluciôn de indcpcndcncia" cii historic tie Mexico. Sléxico. Salvai, 1978.
VI, p. 42.
22

dOn cuantiosa de sus niaderas. Los emparrados, los olivos, las moreras, cuya miiidad
ignoráis y aün nos cstán prohibidas: la utilidad de un sinnUnnero de fabricas que
podian aiiviar vuestra vida afanada. ni sabéls cuáics SOU, ni cuántas son de [as que
podiais lograr para desterrar ci ocio y la holgazaneria en que as hallãis .sumergido
La cducaciön, las virtudes morales de que sois susceptibics, ci cultivo de vuestros
talentos para ser Litlics a vosotros mismos y vuestros semejante5. aün se hallan
ci caos de la posihilidad.
Reflexionad un pace sabre asia y hallarois ci gran bien que cc Os prepara. si Con
vuestras manos los unos y con vuestras oraciones los otros, acudis a ayudarnos a
continuar y conseguir Ia grande einpresa de porter a los gachupines en su niadre patria,
porquc clIo Son los quc con sit codicia, avarida, y urania se oponen a vucs-
Era felicidad temporal y espiritual. Porquc, cOino podrán obrar bier] para con Dios
y con elios, un sirviente mal pagado, tin criado desatendido, ni tin artcsano, quc a
pesar de haber apurado sus tales para satisiacerles un desenfrenado lujo, Sc YC trial
corrcpoiidido? ci dobiez de sus tratos yventajosos proyccios de todogénero, ha hecho
quc el engaño, ci dolor y la mentira ande en la boca de todos, y quc La verdad
casi haya desaparecido de nuestro sueLo. No penséis por esto que nuestra intcnción
es niatarios; no. porque esto se opone diametralmente a la Ley santa clue prolesamac.
Ella nos prohibe 'v la hurnanidad se estreineceria de Un proyecto tai' horroroso,
al ver que unos cristianos, cuales somos nosotros, quisiéscmos manchar nuestras manos
con la sangre humana. A elios les toca, segün ci plan de nuestra empresa, no
resistir a una cosa en que nose les hace mac agravio quc restituirlos a su suelo paine
y nosotros delendernos con nuestras ammas en caso de forzosa defensa.
Aliento, pucs, criolios honrados, alienro, Ia empresa ya esiá comenzada, coritinuëmosla
confiando en quc ci brazo poderoso de nuestro Dios y señor nos ayudará
coma ha.sta ahora y no dudemes tin momenta del huen ixito. No déis aidos a [as
horrorisiiiias voces dc los que Iran pretendido espantaros y arrnaros contra nosotros,
diciendo clue venmmos dcsuruvciido nuestra sagrada religiOn catOiica. ZNo véis que
en ci primer pueblo que conquistanios nos hubieran despedazado y consumido? Es
una falsedad sacnilega; preguntad a Zeiaya, Saii Miguel, Yrapuato, etcetera, donde
nos han recibido de paz, y interrogad a Guanajuato, quc Cs La tinica ciudad donde
eneontramos resistencia y donde operarnos no con todos los rigores de la guerra que
nos presentaron, £,que imágenes destruimos y qué cuito alteramos? Los templos Iran
sido venerados, las virgenes respetadas, los gobiernos relornnados, no causando mäs
novedad (3UC Ia extraccidn de los curopeos. A Csuos si quc los podiamos acusar dc
impios e irreligiosos; digalo Mexico, Puebla y Valladolid, y aun cI nlismo Guanajuato.
donde ci lujo y la inoda a Ia frances, arrancô de las paredes dc sus salas (y los
mismo hubicran hecho en los tenipios si huhicran podido), las sagradas imagenes
de Dios, de Maria .Saniisiina y sus sanuos, colocando en su lugar par moda de buen
gusto. estaluas obscenas, para tener Ia inicua coniplacencia de ver en lugar de modelos
piadosos, inidlaulvos de Ia lascivia impurçza. ObsCrvese en qué traje Sc presentaban
ya en los teinplos dc los divinos olicios; ya eiirizados, ya pelones con pechos
postizos los afcniinados, silbando en lugar de rezar, cortejando a las prostitutas ann
en La presencia real de nuesuro Dios, con escándaio de Los pohrccitos en quien se encuenura
la verdadera piedad y religiOn. El vilipcndio y desprecio a los sacerdoics.
quiCn Ia ha practicado, sine dIes? La vindicacion de su conducta. con deshonor
23

de su estado eclesiástico; ci despotismo que sabre esto ejercian y ejercen, es tan noterio
que ya no to duda ni el más estupido. También nos dirian que somos traidores
al rev y ala parria, pero vivid seguros de que Fernando Stptimo ocupa ci mejor lugar
en nuestros corazones, y que daremos pruebas del contrarlo, convenciéndolos a ellos
de intrigantes y traidores. Par conservarle a nuestro rev estos preciosos dominios y
ci que par ellos fueran entregados a una naciOn abominable, hemos levantado la bandera
de la salvaciOn de la patria, poniendo en ella a nuestra universal patrona, la
siempre Virger Maria de Guadalupe. Ella nos ha de sostener y ayudar en este gran
proyecto, dará csfuerzo a los débites, esperanza a los timidos y valor a los pusitánimes;
disipará de ]as cabezas de muchos los angustiados pensamientos que Ic atormentan
ci alma considerando la arduidad de la empresa, y facilitará su ejecución.
l3uen ánimo, crioltos cristianisimos! Alentaos con saber que ci Dios de los Ejércilos
nos protege. Nuestro änimo no es derramar, SI CS posible, una gala de sangre
de nuestros hermanos, ni aun de los clue par ahora consideramos par nuestros enemigos
politicos. Unámonos a sostener una causa a nuestro parecer justa y santa, como
lo es mantener iiesa nuestra santa religiOn. la obediencia a nuestro romano pontitice
Y a nuestro rev y seAor natural, a quien liemos jurado ohedecer, respetar su
nombre y Ieyes, cuidar de sus incereses y perseguir a cuantos se opongan a ello.
Aquel clue as dijere que somos emisarios de Napoiãon, tented mucho ci que sea verdad;
Ia contrario, csto es, que éi, ese mismo que Ia Ilegue a decir, to sea en realidad
y mucho más si es europeo Iresulta rnás factiblej, porque nosotros Ins crioltas jamãs
hemos fattado ni somos capaces de tener conexiOn con ese tirano emperador.
;Viva la religion catolica! ;Viva Fernando VII! ;Viva Ia Patria! y Viva y reine
par siempre en este Continente Amcricano nucstra sagrada patrona. Ia Santisima Virgen
de Guadalupe! iMucra ci mal gobierno! Esto es In que oiréis decir de nuestra
boca y Ia que vosotros deberóis repetir.
24

L
c
-
_
I
It
: c
F t
.. .,
4
I,
.4
1

Declaración de 1811 ante el tribunal
militar sobre el suceso del 15 al 16 de
septiembre de 1810 en el pueblo de
Dolores *
(fragmento)
MIGUEl. HlLrnLGoy COSTILLA
Preguntado: Que por to quc tiene dectarado Sc Vcfle en conocimiento de que sabe
y tiene noticia de la Ilamada insurrecciOn que a mediados del mes de Setienibre prOximo
pasado, se susciiO en ci pueblo de Dolores, y orros del distrito dci Virreinato
de Nueva-Espana, diga qulén o quienes fueron los primeros y principales motores
de ella. con quiéncs O con qué medios contaron Antes y después de promovida, asi
de dentro como de lucia del Reino; quiencs Los han fomentado, con dincro. consejos,
arbitrios, esperanzas ode cuaiquiera otra mancra; las concxioncs y relaciones
pot escrito, de palabra O por interpuestas personas clue haya tenido con tales sugetos
de dentro y fucra del Reino, y en dOnde paran las conscancias que acreditan todo
to relerido, dijo: Que en efecto sabe y tienc noticia de to quc la pregunta inquiere.
y que la expresada insurreccion tuvo principio en ci exprcsado pueblo ci dia 16 de
Seriemhrc prOximo pasado, como a ]as cinco de la mañana; que los principales mototes
de ella fucron ci que declara , y de D. Ignacio Allende en ci modo y forma
que a expresar: Que Cs cierto que ci deciarante habia tenido con anticipaciOn varias
conversaciones con D. Ignacio Allende acerca dc la lndcpcndcncia. sin otro objeto
por sit clue ci de puro discurso, pues sin embargo de clue estaba persuadido
de que la independencia seria Util at Reino, nunca pcnsO encrar en proyccto algono,
A diferencia de D. Ignacio Allende, que siempre cstaba propuesto hacerto, y ci deciatame
campoco to disuadia, pues to mas que ilcgó a decirle en alguna ocasiOn, foe
quc los autores de semejantes empresas no gozaban ci fruto de ellas; que asi se foe
pasando el liempo hasta principios del mes de Scciembrc referido. quc Allende hizo
tin viaje a la ciudad de Querétaro, desde donde enviO a Ilamar at deciarante quc pasase
allá, por medio de una carta en quc Ic decia quc iniportaba mocha, y con estreelms
encargos at mensajero de que Ic instase al efecto. Que habiendo accedido a sus
inscancias y estado en Queretaro Ic presencó Allende dos ó ties sugetos de poco caracier,
y que el declarante no conoce y solo sabe que uno se Ilamaba D. Epigmenio.
los cuales se prcstaban a sus ideas y decian tcncr a so devociôn mas dc doscientos
dc la plebe. visto lo cual Ic parcciO at deelarantc que aquello no tenia forma y Sc
to hizo presente a Allende rctirándose a su cuarco, aunque Allende Ic significO quc:
tambien por las haciendas de campo de aqueltas inmediaciones contaba con mâs genie:
Quc Allende se quedO alli yd poco tiempo volviô a cscribir at declarantc, que efectivamente
aquello no valia nada. a to quc Ic contcstó que no contase con CI para cosa
alguna: Quc scguidamente Allende se volviO a San Miguel ci Grande y a cscribir at
declarante que ya las cosas habian variado y quc se Ic habia preseniado mocha genie.
• In Otozco y Bcrra, Manuel, Primer olmonoque historko de to Independencia Para 1872: a ía memona
del benem&ito euro de Dolores D. Miguel Hidalgo y Costillo. Mexico, Imprenta dcl Gobicrno on Palacio.
1871. pp 37-38.
26

asi en Querétaro eomo en [as haciendas, despues de la áltirna que Ia habia escrito,
con lo cual ya se redujo el declarante a entrar por ci partido de la insurrecciOn, y
en consecuencia empezé a dar algunos pasos hacia la ejccucion, mandando hacer
como unas veinticinco ianzas que se fabricaron en ci mismo pueblo de Dolores y hacienda
de Santa Barbara, pertenecientes a los Gutierrez, que eran sabedores de lo
qua se trataba, encargando a estos que hiciesen gente citandolos para ci dia que los
Ilamase, tratando con ci tambor mayor del batailon de Guanajuato, lianiado Gaindo,
el cual quedo en hablar a la tropa, y no sabe Ia qua practice en razon del caso:
Que en esto, como tres o cuatro dias Antes de diez y seis, tuvo ci deciaranic noticias,
aunque vagas, de qua Allende estaba delantado, por lo qua In Itamo a Dolores para
var lo qua éi resolvia; pew nada resolvieron en La noche del catorce que llegO A su
casa, ni en todo ci dia quince que se mantuvo alli; hasta qua a las dos de la mañana
del dia dicz y seis vino D. Juan Aldama, diciéndole qua en Querétaro habian aprehendido
a sus confidantes, en cuya vista en ci mismo ado acoradron los tres dar el
grito, Ilamando para alto el deciaranta coma a diez de SUS dependientes, dando soitura
a los presos qua habia en la cared, obligando al carcelero con una pistola a Iranquaar
las puertas de ella, y entOnces las previno a unos y otros qua las habian de
ayudar a aprehender a los europeos, lo qua se verilicO a las cinco de la mañana del
misnio dia, sin otra novedad qua las de unos cintarazos qua se le dieron a D. José
Antonio LarrinUa ponquc Sc iba huyendo: Qua puestos en la c5rcel Ins europeos, Cerradas
las tiendas de unos, dejadas otras a cargo dc los cajeros criollos ode sus famihas,
y viniendo a su partido los indios y rancheros, qua por ser domingo habian ocurrido
a misa, trataron de ancaminarsc a San Miguel ci Grande en prosecucion de su
proyacto: Quc como ci declarante solo tratO con Allende este negocio en los términos
que deja expresados, y la prision de los confidantes de Querétaro lo pracipitO,
no tuvo dentro ni fuera del Reino conaxionas ni ralaciones algunas par escrito ni dc
palabra, ni por interpuestas personas Antes ni despucs de la insurrccciOn, ni sabe qua
Antes ni daspues las haya tenido Allende y los dcmas qua sucasivamente se fueron
agregando en calidad de principales cabos de dicha insurrecciOn, ni sabe otra cosa
que In qua resulta de lo que Ileva declarado en csta suposiciOn respecto de si y de
Allende...
,: )
K. a''
141
27

Un testigo presencial: Pedro José
Sotelo*
A poco tiempo de casado on ci mismo año de 1809 un dia me llanio ci Señor Cura
reservadamente, ya yo habia visto quo Ia mismo habia hecho con los dcmas oficiales.
llamándolos aparte y hablando on vat baja y coil nasoiros Ins acribijimos
a reprehensiOn 0 regaflo, y mas cuando cstos Señores no decian absoitnaniente
nada de Ia quo les decia: un dia como die antes, me llamO y me dUo: "hombre,
si yo to coniunicara un ncgocio muy importante y al mismo tiempo de mucho secreto.
Lme descubririas?" y yo Ic contesté. nO, Señor: "pues bien, me dijo, guarda ci
secreto y aye: No conviene clue. siendo mejicanos, dueños dc un pats tan hermoso
y rico, continuemos por mas tienipo baja ci gobierno de los gachupines, estos nos
extarcionan, nos tienen baja tin yugo que no es posible soporlar su peso por más
tiempo: nos tratan coma si fuOramos sus esciavos, no somos dueños aun de hablar
con libertad; no disfrutamos de los frutos de nuestro suelo, porquc ellos son los dueños
dc (ado; pagamos tributo por vivir on 10 quo es de nosotros, y par qie UU. los
casadas vivan con sus esposas, por ñltimo, estarnos baja la màs tiranica opresiOn.
tNa to parece que esto es una injusticia?" Si. Señor. Ic coil' esiâ."l'ues bien, se Irata
cit quitarnos esre yugo hacléndonos indcpcndicntes, quitamos al virrcv, Ic negamos
la obediencia al rey de Espana. y serenias libres; pero para esto es necesaria clue nos
unamos todos y no prestemos con toda voluntad, hemos de tomar las arnias para
carrer a los gachupines y no consentir en nuestro reina zi ningun extrarijero. i.QlltS
dices, tonias las armas y me acampañas para verificar esta empresa? I)as la Vida
Si fucre necesario por libertar a in patria? îü estás joven, cres ya casado, lucgo tendrás
hijos. y no to parece quc ellas gocen dc la libertad quo tU les des, haciéndolcs
independientes, y quc gocen con sat isfacciOn de Ins irutos de su macire Patria?'' Y
yo Ic contcsté. si . Señor, y confieso ingentiamente quo al air hablar de tal negocia
al Señor Cura, sentia oil corazOn una emocion de jtibilo clue me animaba y tarde
so me hacia dar ml respuesta al Señor Cura. Me dijo luego. "pues guarde lid. ci secreto,
nose lo camuniquá a nadic. ni a sus campaAeros aunquc to pregunten ...Despues
de un rato de silencio. inc dijo: "no has . remcdio, cc prcciso resolvcrnos
A verilicar nuestra empresa. vaya U. y silencio.''
Corria ci tiempo y las casas segulan avanzando baja secreto.
El señor Cura, cmpeAoso coma siempre oil t'ãbricas de seda y bias, ocupando
genie para ci corte de la hoja de moral para ci aliinento de los gusanos de seda. y
oil alfareria hacienda experimentos can compOSiCR)fle' de metales para liacer cobres
y vidrios, y discurriendo nuevas liguras on las piezas de barro, tanto de rueda
coma de molde.
Esta canstante ocupaciOn del Señor Cura no daba lugar a que Sc trascendiese ci
prayecto quc tenia formado.
Nosatros coil dcs&banios quo liegara ci dia oil
debiamos dar la
vat de Independencia y Libenad.
• tin Iiernándc, y I)á'.alos. Juan E.. ('ok'nvdn (le docuinenlo para hi lisslonu dela Guerra de Independenna
dc' iROS a 1821. Mexko.Jose Maria Silndo'aI. jS7-t882. '01. 2. doe. 178. pp. 321-330.
28

Llego por fin ci deseado ciia: y aunque no fué Cl que se habia etegido, ci dia 29
dc Setiembre ci nombrado para la grande empresa, pero dia IS de dicho mcs a las
diez de la noche, llego ci Señor Allende y aigunos compafteros, to cuaics no pudieron
habiar con ci Señor Cura porque tenia visitas, y en la esquina de dos Olivos esperaron
que se desocupara. No tard6 en quedar solo ci Señor Cura. inmediatamente se
prcsenaron ci señor Allende y los (tue Ic acompañaban, y con semblante sério y grande
agitacion comunicaron at Señor Ctira que ci ncgocioestaba para Iracasar, y en un
memento perderse todo to quc tenian intentado. ",Ustcd dirá qué hacenios?" dijeron.
y el Señor ('nra respondiO: "En ci acio se hace mdc, no ha y que perdcr ciempo:
en ci acm misnic vcrán U.U. romper y radar per ci such y ci Yugo opresor. SatiO
vioientamentc a la calic y dijo at mozo: "Liámame a Los serenos." Estos cran dos
ünicancntc: se tiamaba Jose ci Reyeño y Vicente Lobe. Vinieron en et acm, y ci Señor
('nra les cornunicô ci negocio. eiios se somelicron a susOrdenes y se resoivieron
a hacer cuanro ics dispusiera. Les ordenó que fucran inmediatamenie a tiamar a los
oficiales allareros, y sederos, y inientras estos venial), decia ci Señor Cura a D. Ignacio
Allende: "No hay quc pensar. ahora misrno dames la voz de liheriad". Liegaron
algunos aifareros y sederos, y cuando estuvicroll reunidos como quince 6 diez y scis
honlbres, ailareros, sederos, serenos, algunos del pueblo que no pertenccian ala casa
tic! Señor ('nra. pero que at rumor de la novedad se habian ievantado de sus camas
y otros que los niismos artesanos habian convidado at pasar per sus easas, en-
IODCCS die orden ci Señor Cura a los aifareros para que fueran a Ia alfareria y trajeran
las armas que aili estaban ocuitas, que eran machetes. ianzas y hondas. Todo
es(o era hecito en tin moniento, porque ci Señor ('nra es muy aetivo en todos MiS
negocios; y conic Ins oficialcs conocian hien su caracter, corrian apresurados a cornpiir
sus Ordcncs. Cuando ya estuvieron alli las arnias, las reparrid ci Senor ('nra par
so propia mane a los quc estahan prcsentes ]as quc pedian, diciendoics: "Si, hijos
mios, his que gusten. para que nos ayudemos a defender y libertar a nuestra Pat na
de estos tiranos."
Mando itainar at Presbitcro D. Ignacio Vallcia, en ci acto vino este Señor y to
nonibro ide de una comision para que aprehendiera at Padre Bustamante, quc era
españot y Sacristan ma yor de esta Parroquia: me ci printer paso que se dio; en segnida
arengO ci Señor Corn en pocas paiabras per Ia ventana tIc su asistencia a los quc
se habian reunido, anirnándotos para cemenzar vigorosamente la empresa de nuestra
Independencia, y levantado la voz eon mucho valor. dijo: "Viva Nuestra Señor
(IC Guadalupe. viva la lndcpendencia." V aconipañado del SCñOT Allende y los deinns,
salimos a hacer la aprehcnsion dc los Gachupines, para cuyo efecto se nombraron
comisiones que sorprendieran en sus casas a cada uno de eltos. Pusimos en libertad
la prision que habia en la cared, y esta se unio con nosotros para aytidarnos a
poner presos a los españoies. FuC aqucllo una voceria cerible, victoreando at Senor
Cora y gritando, mucran los gachupines.
En csco nos ocupamos la noche del IS de Setiembre de 1810: amaneclO ci dia 16,
dia Domingo, memorable y giorioso para nuesira postcridad.
Como fuë dia tIc coneurrencia per ci corncrcio, Sd nos reunicron muchos individuos
de la jurisdicciOn y vecinos de la poblaeiOn. En la mañana de ese dia se Ic mando
un recado at Señor D. Mariano Abasolo, invitãndoio para Ia enipresa, C inmediatamente
resolviO sin vacilar que estaba anuente y a Ia Ordenes del señor cura, que
29

con mucho gusto tomaba las armas para acompanarlo, y a pocos momentos se
presento.
Don Juan Lecanda, españal, Administrador de la Hacienda de Rincon (de Abaselo)
ignorando to clue pasaba en la poblacion, vino a misa, pero entrando a La casa
del Senor Abasolo. Ic digeron lo que habian hecho con los espanotes, é inmediatamente
se volviO A salir sin apearse del caballo y se Fué para Guanajuato.
El Señor Gina con mocha actividad no cesaba de disponer y ordenar la gence que
se habia reunido, y mirando quc ya se contaba con un numero considerable de gente
adicta, resolvio organizarla en forma de tropa y encomendO esta comisión a D. Ignacio
Allende; pot que esic Scher era instruido en la disciplina militar, y pot quc conocia
a varios Señores que podian servir de oficiales Para la organizacion de Ia tropa
aunque improvisamente. Para este efecto fucron nombrados Jos Señores Rivascacho,
D. Miguel, y su herniano D. Cresencic, Dionicio Rodriguez, Julian Zamudio,
ci sargenco Moctezuma (alias ci gate) Ii José Aguirre profesor de medicina, José
Antonio Zapata y Nicolas Licca etc., etc.
Se armaron estas compañias con ci resto de armas Clue habian quedado en la alfarena
y a los indigenas se les habilito de hondas y algunas Ianzas. Las armas clue se
les recogieron a los espanoles tambien se repartieron, y cuando ya no hobo armas
dió Ia orden ci Señor Cura quc con Palos o con In que tuvieran en sus casas Sc armaran,
to quc Sc verifico en ci ado.
Cuando ya estuvieron ordenadas [as compañias del mejor modo clue se pudo, se
les diO sueldo sin tasacidn ni distinciôn, a como les tocaba pot suerte. Este dincro
se tomô de los fondos de la Aduana. Estanco. Administracion de correos y pane
de los caudales que tenian los gachupines aresorados.
Don Nicolas Rincon que era el Subdelegado en ese tiempo, at cxigirle que cnlregara
ci dincro Oc ]as oficinas referidas, se rcsisriO resuelcaniente, par to quc se incomodaron
con él, ci señor Cura y D. Ignacio Allende, tuvicron una ct::s ion muy acalorada,
resultando de ella que dcspojaran del emplco a dicho Rincon y lo destcrraran
en ci acto.
SustituyO a este Senor en ci cargo de autoridad civil ci Señor D. Ramos Montenia.
yor, yen lo Eclesiásiico fuô nombrado cura encargado per ci Señor Hidalgo, ci Presbitero
D. José Maria Gonzalez. Arreglado este paso dió órdcri el Señor Cura para
la marcha de [a fuerza Para San Miguel, lievando at rnismo liempo a Los espanoles
que teniamos presos en la cárcel, los cuales fucron: I). Torihio CacielLes, ci padre
sacristan Ilamado Francisco Bustamante, D. José l3uenavuentura, Gil kevoleno, D.
Francisco Santilcce.s, quc se aprehendi(5 ci dia 16 pot la mañana, pot clue la noclic
anterior se escondiO y no to consiguieron, D. Alejandro Malanco, I). Manuel Odeza,
oiro y D. José Antonio LarrinUa; este Señor al prcscntarse la coinision para hacenlo
prcso la noche del IS hizo resistencia, y uno de los comisionados. Casiano Exiga,
que tenia un agravio con dicho LarrinUa, pot negocios de comercio. Ic dió un
golpe en la cabeza con on machete y lo hirio, pot cuyo molivo no caminO en la prision,
se Icconcedlo clue se quedara curando, pero en calidad de preso bajo la responsabilidad
del Señor Moncemayor: D. Luis Mann. españoi, par so ancianidad y pot
ci carActer quc tcnia sumamente pacifico y clue con nadie se metia, se Ic concediO
QUC se quedar a en so casa en plena libertad.

Dc escos espanoles y otros clue ya no me acuerdo de su nombre, fué ci cuerpo de
prisioncros que caminaron para San Miguel ci Grande. cuya salida fué enure doce
y una de la tardc, porquc para todos se daban los Señores mucha prisa.
Al disponer ci Señor Cura su marcha para San Miguel, nombrO una comisiOn para
ci arreglo dc la alfareria y sederia cuya comision recayó en D. Francisco Barreto,
Manuel Morales y yo, con Orden quc, arreglado que fuera todo, y recogido ci dinero
que debian algunos marchantes de loza que habian sacado fiada y estaban para liegar
de viage, cntregando ci dinero a Vicenjina, hermana del Sr. Cura. y arregiadas
las las herramientas y aLlies de la alfareria, encerrando toda en las piezas mas seguras,
nos fuéramos a aicanzarlo donde estuviera. Con la mayor eficacia y prontitud
desempcñamos nuestra comisiOn y luego nos fuinios para Guanajuato que era donde
estaba la fuerza. Nos presentamos con ci Señor Cura, dando cuenta de nuestra contision,
y nos ordeno este Señor, quc nos pusléramos a [as órdenes del Señor D. Mariano
Hidalgo, hermano del Señor Cura y nos dijo: "nose separen, lodos anden reunidos
los quc son de mi casa, alfareros y scdcros, ya tiene orden Mariano para quc
se empleen (LU." Nos presentamos con ci Señor D. Mariano, y éste Señor nos dijo:
ci Señor Cura me ha dicho que codos U.U. me han de ayudar a cuidar ci tesoro y
cquipagcs de los Señores Generates; por quc los dcmás del ejército no Ic inspiran
confianza para este encargo. Cuando Ilegamos a Guanajuato ya habia sucedido la
guerra del Castillo de Granaditas, nosotros no nos haliamos en ella por el motivo
clue he dicho antes, de La comision que nos dio ci Señor Cura para ci arrcgio de la
allareria.
Al emprendcr ml marcha para Guanajuato dejé abandonados a ml querida madre,
a ml cara esposa y a ml hijo tiernecito fruto primogénito de nil matrimonlo,
sin mas auxiiio ni recurso clue la Prosidencia Divina, impuisado por ci desco quc
tube siempre, de ayudar en cuanto fuera posible por ml pane a hacer la Independencia
de ml cara patria, y cimplir la promesa que soleninemence hue at Señor Cura,
dc dar la vida si lucre neccsario para Ilevar a efecto Ia libertad de todo nuestro pals.
Confieso quc no era otro ci interés quc yo tenia...
31

Pedro Garcia: otro testigo '
El acontecimiento tuvo lugar Ia noche del IS dc septiembra cIt 1810. El siguiente Wa
Domingo, que la gente del campo tiene por costumbre llegar a la poblaciOn rnuv a
la madrugada para aprovechar la misa primsa, se empesaron a formar grupos con
ci fin cIa esperarla; y como pasara tin gran rato sin liamarla, enipesaron muchas a
notarlo, sin acertar, por entonces, con ci motivo de aquelia tardanza. No faith quien
empezara a inforinarlos, de que pudera ser no hubiera misa, porque ci Sr. Hidalgo
habia en Ia noche anterior inandado aprehender a todos los gachupines y iodos se
haliaban en la cared: sernejante informe fué recibido por algunos con sorpresa aunque
mezcia con algo cIa alegria. (tal motivo daba aquella situaciOn formada pot los
procadimientos despoticos y tiránicos qua observaban los cspanoIes con toda clase
cia mejicanos). En este astado de insertidumbre se lueron acarcando al frame de la
casa del Sr. Hidalgo. Aunientó ci nümero: viendo quc por momantos crecia, parecia
a aquel párroeo respetabie, qua era tiempo ya de dirigirie la palabra a aquelia multitud
para inforrnarlc de los motivos qua habia tcnIdo para un movimiento tan nuevo
y desconocido. SaIiO al Sahuán y Ic csplicO cia la mancra siugicnte: "Mis amigos y
conipatriotas; no existe y para nostros. Ni ci Rey. ni los tributos: esra gabela vergonzosa,
qua solo conviene a los esciavos. la hamos sobrelievado hace tres sigios como
signo cia la tirania y servidumbre: terrible mancha que sabemos lavar con nuastros
esfucrzos. Llegó ci momenta de nuestra crnancipacion: ha sonado la hora cia nuestra
libertad; y si conoeàis su gran valor. me ayudareis a defenderla de la garra anibiciosa
de los tiranos. Pocas horas me faltan para qua me véis marchar a la cabaza cia los
hombres que se precian de ser libres. Os invito a cumplir con este debar. Dc suerte
clue sin pairia. ni libertad. cstaremos siempre a mucha distancia de la verdadera fellcidad.
Preciso ha sido dar ci paso que ya sabéis; y eomenzar por aigo ha sido nacesario:
la causa as Santa y Dios la protegcrá. Los negocios se atropelian: y no tendré
por lo mismo, Ia satisfacciOn de habiar más tiempo ante vosotros. ;Viva. pues. la
Virgen dc Guadalupe! iViva Ia America, por Ia cual vamos a combatir!" A esto respondió
Ia niultititd en igual santido y bastanic animada. Sc ratiró ci Sr. Hidalgo y
comenzaron los preparativos cia martha y todos se adelantaban entre si para acornpaflarlo:
aqual espiritu dc libertad se difundio en aquelta reunion con la violencia
del rayo: cada individno se preparaha con un garrote, honda, lanza ó machete; asi
esperaban las detcrminacioncs cIa su Párroco.
• En bocumcnlos de la Guerra de Independenesa. Mexico. Secretaria de Educaciôn PUblica, Bibiloicca
cnciclopidica-(amiliar. nUm, 74 (encuadernado con Romances de to Guests, tie lndependencIa). 1945. pp.
16-17.
32

Descripción de un historiador
insurgente * C\RIos NIARI .\ 1)1 I3I:s1\XIAN II:
El cura de Dolores, aunquc viô qua la primera tentativa de independencia se habia
frustado en Valladolid, no descsperO dc ilevar adelante la empresa de la emancipadon
en cuyo proyceto tuyo por primer asociado al capilan del regimiento de la Reina
D. Ignacio Allende. Su cjecución demandaba inucho trabajo, muchas conexiones.
mucho dincro, y to qua as mas, mucho sigilo, imposible de guardar entra muchos
y gente poco acoscumbrada a la reserva y disimulo. El carácter mexicano as franco,
y mucho mas cuando a nuestra juventud no se Ic habia ensenado como los severos
espartanos a sus hijos a guardar y conocer ci gran menlo del secrero. I)iOse por las
circunstancias del momento ci grito terrible quc se propagó como Ia luz del creptlisculo
por toda la America, grito qua sobre set de 6dio fuC impolitico, y tanto rnas,
cuarno que se obra sin programa ó plan formado anticipadamcntc y qua InC causa
de robos y asesinatos.
Ocioso es qua por ahora me datenga en refarir con particularidad ci nümero de
sugetos a quienes comunicaron entrambos caudillos sit y mucho mas la
vergonzosa delacion qua de ellos hizo tin ecicsiástico de QuerCtaro, y pot ci que liegaron
las primeras nolicias a oidos del gobierno de Mexico depositado enconces a
la audiencia de la Nueva-España, con agravio del Sr. Arzobispo L.izana. El hacho
se hizo al fin demasiado publico. y lanlo, quc ci jueves 13 dc septiambre de 1810
diO noticia de a al intendente de Guanajuato D. Juan Antonio Riafto, D. Francisco
Bustamante. capitan del batallon de aqucila ciudad. Dijole qua al Cura Hidalgo, Allende.
U. Juan Aldama y U. Ignacio Abasolo, pretendian sorprendar la noche del I"
de octubre a todos los curopeos avecinados en Guanajuato, apoderansode de sus caudales,
a cuyo intento se habian coligado con los sargentos del batailon Juan Morales..
Fernando Rosas C Ignacio Dominguez. y con ci tambor mayor José Maria Garrido,
encargados de seducir a Ia Iropa qua estaba de guardia, para que ayudase a Ia
empresa.
El intendente, hombre canto y adornado con todas Las bellas partes de un excelenic
magistrado. se rcsislió a creer .semejanre denuncia; pero lo convenciO de Sn verdad
Bustamante presentandole documentos clue justificaban su ascrto, y ademas Garridose
delatO voluntariamente, manifastando setenta pesos que habia recibido en parcc
de rccornpcnsa.
Satisfecho Riaño de la verdad del easo, mandO a Garrido que fuese al pueblo de
Dolores y Ic crajese una noticia individual de las disposiciones de aquel cura, conminândolo
con pena dc mueric si no desempeOaba ci encargo. Entre tanco que esto Sc
verificaba, comisionO al sargento mayor D. Diego Berzabal para la prision de los
sargentos cômplices, la cual se verifico en la madrugada del 14 de septiembre sip percibir
ci pUblico la causa de ella. Examinados por ci comisionado, confesaron lianamenle
ci hecho. Garrido ragresO de su expedicion, y asegurO quc el cura Hidalgo
tornaba con aficacia sus medidas para verificar ci proyecto en ci dia citado; por tanto
1L0 ('nadro h:cioneo tie Ia Revolw.iOn Mexicana. Mexico. Insiltuto Nacionat dc Esiutlios Histórico
tic la RevoluciOn Mcxicana. 1960. c. I. p. 22.
33

34
CARL0S MARIA DE BUSTAMANTE
or
S

mandO ci intendente se Ic pusiese en arresto para que nadie sospechase de su deladOn.
t.ibrO por su pane órden al subdelegado de S. Miguel ci Grande para que pretendiese
a los capitanes Allende y Aidama, y quc eon la posibic ecteridad pasase at
pueblo de Dolores a ejecutar to mismo con ci cura Hidalgo y Abasolo. Finalmente,
encargó a D. Francisco iniarte. clue acaso iba a Ia villa de S. Felipe, inniediata at
pueblo de Dolores, que ohsvervase los moimicntos de dicho cura Hidalgo, y Ic these
pane de la más ligera novedad.
El manes IS de septiembre a las once y media de la mañana avisO Inane par un
expreso. clue habiendo intcrceptado Allende la Orden en que ci intendente prevenia
su anresto at subedelegado de S. Miguel ci Grande, se fué a Dolores, a donde liegO
a las doce de la noehe, y conferenciando con ci cura Hidalgo sobre ci part ido clue
cii tan agustiadas circunstandias deherian tomar. acordaron dar muy luego la voz
de alarma como ejecucivamente lo hicienon con cinco hombres voluntarios y cinco
fonzados. ('on este corto nümero prendieron a siete europeos de Dolores, inciuso
ci Padre sacristan, cuyos bienes repartieron. Otto tanto hicienon en la villa de S. Felipe
ci dia 16, y to mismo en S. Miguel, para donde se encaminaron sin demora. Entie
lanto cc les reunicron gentes de todas clases con las clue desde luego meditO marchar
sobre Guanajuato.
35

Inicios de la insurrecciOn *
El cura de Dolores D. Miguel Ilidalgo I Costilla, nuts ilustrado que el de Carácuaro.
Sc sentia no ménos impaciente per aliviazr los males del agobiado pueblo. Veia sus
Icligreses reduzidos a la miseria, por esiarles proibida la elahoracion del vino a benehew
del de Cataluna, cuya esportacion fomentaba ci gobierno espanol. AcudiO de
pronto a este mat estableziendo en su curato fábricas tie lo,.a I tejidos, varias industrias
para el cultivo de la seda, I otros prirneros ensayos, por medio tie los cuales
se prometia resultados svmcjantes a los que el benéfico Lascasas idcO para la Costa
firme. Animado de tan liberates sentimiencos, no odia desechar ninguno tie los meduos
quc se Ic ofreziesen para inejorar la suerte de sus compatriotas; i al fin, de los
desaogos que sobre eso tenia con sus amigos, i tie las confereucias habidas con ci
capitan D. Ignacio de Allende. resulto que tino I otro se decidiesen a conquistar Ia
libertad de su patria. Transpiraron sus nuevos proycctos, I por delacion tic un eclesiastico
de Querétaro, ilegaron a noticia del gohierno tie Méjico, depositado entonces
en Ia audiencia. Poco dcspués. en 13 tic setiembre tie 1810, ci capitan I). Francisco
l3ustarnanie duO cuenta al intcndente tie Guanajuato D. Juan Antonio Rhino, tie
que los conspiradores, dirijidos por Hidalgo, Allende, D. Juan Aldama, I D. Ignacio
Abasolo, trataban de sorprender en la noche del primero tie octubre, a todos los europeos
tie Guanajuato, I clue al efecco estaban tie intelijencia con tres sarjcntos del hatallon,
I con el tainbor ma yor Garrido, encargados tic sedu,ir a la tropa. El miendente,
majistratio cuerdo I juizioso, tiesecho al promo Ia tienuncia; Pero tuvo que
rendirse a Ia evitiencia de docuntcntos I aseveraciones irrefragables del misrno cornplice
Garrido, quien Sc convirciO en delator. I se presentO a pasar al pueblo tie Dolores
con cI objeto tic vijilar Ins disposiciones del eura Hidalgo. ProcedlO el intendence
a La prision tie los otros tres sarjencos apalabrados, quicncs paladinamente confesaron
cuanlo subian. Vuelto Garrido con nuevas noticias tic los progresos quc hazia
1-lidalgo en sus preparativos, quedó convencionairnente arrcstado para disiniular su
delegaciOn. DiOse Orden tie prision contra Allende I Aldama. conietida al subedelegado
dc S. Miguel el Grande, encargántiole clue Sc ascgurasc en seguida tic Hidalgo
I Abasolo, I quc entretanlo Iuescn observados los pasos del primero por I). Francisco
inane desde San Felipe, villa inniediata at pueblo tie Dolores. Süpose por aviso
tie este conhdenre Ia interpretaciOn por Allende tic In olden tie arresto contra los proncipales
conjurados, I cômo en su vista se aprcsurO a Ilegar a Dolores a las doce tie
Ia noche del 16 tie septiembre. Fit despues tie urns breve conicrencia con Hidalgo
en cstc pueblo, acordaron ambos dar inniediataunente el gnito del aizainicuto,
e hiziéronlo asi con solos cinco hombres voluntarios I otros cinco foriados, de quitnes
se valicron para prender a siete curopeos de Dolores, i en seguida sin la menor
demora a otros de san Felipe I san Miguel. La cckridad i ci acierto tie estos primeros
golpes les atrajeron huen ntimcro tie jentes tie todas clases. I asi engrosados determinaron
sobre Guanajuato.
• En Mcndibil, Pablo de, Resu,nen histOrict, dc/u kewluclOn de los &tados Unidos Mcxi canus. sacado
del cuudru hIslóru-o que cfl fo'na.c de ca,tu tccnhu) Carlos H,&stamanfr en 4 tomes. OrdenO Pablo de
Pvfendibi/. Londres, R.A. Ackcr,naHn, 1828, pp. 8-9.
36

A La voz del cura de un pueblo*
Ii)R}\/() 1)1; ZAVALA
Dos cosas conirihuycron a que 110 SC ahogase en su nacimiento esta revolucion: la
lentitud con que obrO ci corregidor Dominguez, que cc puede muy bien airibuir a
su simpatia pot los patriotas y por su causa, yet aviso oportuno que for via extraor-
(linaria dio la esposa del corregidor at cura Hidalgo y a don Miguel Allende. Dc manera
que mientras ci corregidor de Querécaro extendia sus órdenes, practicaba diiigencias,
y se disponia a obrar, ci cura y sus cornpaAeros dieron ci grito en la noche
del 16 de septienibre de 1810.
Toda La Nueva España se conmoviO a la voz del cura de un pueblo y de un coronet
del regimiento de la reina; un rayo de luz briiló repencinalnente en la vasca extensiOn
de un lerritorio inmenso. Hidalgo vole a Guanajuato, ciLidad de 80 mil habitantes
entonecs y Guanajuato abriC sus puertas at libercador de los mexicanos. Todo era
confusiOn y desorden: ntas de cuarenta mil hombres armados de picas, de palos, de
mazas, de coas. de machetes y otros intrumentos de mineria y labranza formaban
ci ejército del nuevo jefe. Todos Los hijos del pals unieron sus voWs y sus brazos
it los de este caudillo; pero los españoics y su jefc. don Juan Riaio, Sc encerraron
en sus casas y en la aihondiga, edificio merLe para resistir pot aigunos dias si hubiesen
tenido prevenciones de defensa; mas la poblaciOn en masa corriô a destruir ci
edilicio y a acabar con los espanoles. Esta fue Ia senal de matanza que despus etihriO
de sangre et suelo de la nación mcxicana. Los españoies se defendicron conlo
hombres que no tenian que esperar entre Ia victoria o la muerte, y vendieron caras
sits vidas, hahiendo sido cacrilicados todos pot uti pueblo ensangrencado. iS'! usrun
los gachupines, fue entonces ci grito general. y La reacción file tina consecuencia may
natural. Los indios tomaron twa pane tan activa en la revolución, ctianra tes permihan
sits facuitades morales y su incapacidad de discurrir por ci escado de degradacioti
en que estaban. Formaban ci grueso del ejOrcito de Hidalgo y arroscraban con
frente seèena todos los riesgos, siendo tan indiferentes a ta muerte como a la vida.
Acthnbaro. Celaya y Valladolid, fueron ocLipados tuego pot los insurgentes, y al gohierno
de Mexico Ic tenian en una especie dc escupor los rápidos progresos de los
I itdepcndicntes.
• En If! lnsforwdor I' ci rcpresc'nlanrr. popular. Ensayn triiwo ut' las rrvulswsones dr ,fëx,co ulesule 1808
flasia 1830. Nkxico. Porrüa. 3969. p. 46.
37

Paradoja de an liberal *
(fragmento)
La revoluciOn que cstailO en septiembre de 1810 ha sido Ian necesaria Para la consecución
de la independencia, come perniciosas y destructora del pals. Los errores;
que ella propagO, las personas que loniaron pane o la dirigieron, su larga duraciOn
y los medios de que se echo mano Para obtener ci criunfo, todo ha contribuldo a
la destruccion de un pals que en tantos años, como desde cntonccs hall pasado, no
ha podido aCm reponerse de las inmensas pérdidas que sufriO. Come la Iuerza de
un gobierno establecido y los hábitos de sumisiOn y obediencia, fortificadas per centenares
de años, no podian hacerse desaparecer sine oponiendo at poder el nüinero,
era indispensable interesar en la revoluciOn a Las clases populares, lo cual en Mexico
no podia conseguirse per ci simple anuncio de bienes remocos y poco concidos, ni
de ideas abstracias sabre la justicia, utilidad y necesidad de la independencia. De
aqul es quc ftC indispensable halagar las preocupaciones de la multitud y enardecer
las pasiones populares, Para obtener su cooperaciOn. La clase de los indigenas era
muy numerosa en aquella Cpoca, y esto bastaba Para que se solicitase hacerla del
partido de la revoluciOn. y el mode de conseguirlo estaba muy a Ia vista Para que
a nadie pudiese ocultarse. [•.• I
Ell a su actividad y resoluciOn se debiO que la revoluciOn no fuese enteramente
sofocada en su cuna, pues sin perder memento se dirigiO a la entrada de la
noche del 15 de septiembre al pueblo de Dolores, y comunicO a Hidalge cuanto pasaha
y ci riesgo de clue se haliaban amenazados si no se tomaba ejecutivamente algun
partido. Este hombre recibiO la noticia con la sangre fria que Ic era caracteristica,
y sin dar la menor muesra de temor ni de sorpresa, duo a Allende y a Abasolo que
estaba tambiCn presente, que ]a sicuaciOn en clue se hallaba no era Para conferendas
prolongadas sino Para acciones decisivas, ünicas capaces de salvarlos de pronto y
de asegurar más tarde ci Cxito de la revoluciOn. La dificultad consistia en que en aquella
hera que era la media noche y en aquel lugar. no habia medios ningunos de acciOn,
ni fuerza alguna con qué contar y a la qué poder seducir: Pero Hidalgo insistiO en
clue era necesario hacerlo y no salir del pueblo sin dejarlo ya conmovido y pronundade
contra el gobierno y los espanoles. Con diez hombres pues, de los cuales cinco
eran forazados, se procedio a prender los espaftoles del lugar, come med ida preparatoria,
y dade este caso, del que se saiio sin dificultad se convocó a son tIe campana
a los indios y demãs clases del pueblo a quienes se anunció que la religiOn corria riesgo
por parte del gobierno y los espanoles, que se conspiraba contra ella, y que era
necesario salvarla a toda costa.
Tal Ilamamiento, hecho PCI un cura de reputaciOn bicn sentada entre sus feligreses
supersticiosos. en todas circunstancias habria producido el efecto que se deseaba;
Pero este luC mucho mayor en aquellos, per que los animos habian recibido un impulso
lucite a la devociOn en ciertos ejercicios espirituales, concidos con el nombre
tIe desagravios que se acostumbraban hacer en septiembre, en muchas parroquias
tIc Los pueblos de Mexico. Cuando oyeron pucs a su cura las genies sencillas de Dolo-
• En Mora, José Maria I. Mexico y sin revciluciones, MExico. PorrUa, 1950. pp. 15-31.
38

IGNACI() Alt.ENDl
res clue la religiOn corria riesgo, no hubo unoquc no estuviese pronto a caminaral martirio
y auxiliar a su párroco en tan gloriosa cruzada destinada a desiruir ci gobierno
y los hombres enemigos de su euRo, y al romper ci dia se haliaban todos en masa
y a disposiciôn de Hidalgo, dispuestos a obedecer ciegamenle cuanco quisiese prescribirles.
Este no se descuido en aprovechar su entusiasmo, y en aquclia inisma mañana
saliO para San Miguel, acompañado de cerca de cuatro mil hombres, después
de haber dado las Ordcnes para que fuesen sorprendidos y arrestados los españoles
de los pueblos inmediatos. y prevenido que se les ocupasen sus bienes...
39

El 16 de septiembre visto por Alamân *
Aldama, clue saliO dc S. Miguel apresuradamenie luego clue recibio of aviso quo la
correjidora de Queretaro mandaba a Allende con Ignacio Perez, llego a Dolores a
las 2 de la mañana del dia 16 y se fué on dcrecluira a casa de Hidalgo: este se habia
recojido. pero habicndo hablado Aldama con Allende, entraron ambos a su recamara
a insiruirle de to quo pasaba. El cura se ineorporO, mandá se sirviese chocolate
a Aldama, y oyendo mieniras se vesija la relacion quo esle Ic hizo, at calzarse las
medias to interrumpiO diciendo: "caballeros", somos perdidos, aqui no hay mas re-
curso quo ii a cojcr gachupines." Horrorizado Aldaina con tal idea to rcplico; "Sonor,
Lqtjé %'a V. a tracer? ...por amor de Dios quo ye a to quo hace,'' y se to repitiO
dos veces: pero la resoluciOn de Hidalgo estaba tomada, y dt acuerdo con su herrnazio
D. Mariano y D. José Santos Villa a quicncs hizo Ilamar, saliO de sit con estos,
con Allende y Aldarna y die, hombres armados quo lenia on su casa, sc dirijio zi la
cñrcel é hizo poner en libertad a los reos, amenazando con una pistola at alcaide quo
to resistia, con to quo se reunieron hasca ochenca hombres, clue se armaron eon [as
espadas de las compaflias del regirniento de Ia Reina, cuyo cuartel franqueO el sar-
gento Martinez reuniendo los soldados clue pudo: Allende y Aldama fueron a easa
dcl suhedelegado Rincon y haciéndola abrir, to prendieron: pasaron on seguida a la
habicacion quo oil misma casa ocupaba Cortina con su niuger, eniraron en Ia recamara
on quo dorinian y despertando Cortina con sobresalto, to intiniO Allende quc
se these preso a la nacion, mas queriendo aquel tomar sus pistolas, Rineon, a quien
llevahan maniatado, to dijo que roda resisccncia era intuit y quo con ella no haria
mas clue perderse: entraron inmediatamente ala pieza de doiide Hidalgo habia sacado
los 200 pesos clue pidio a Cortina y tornaron todo to quo habia, y lagenreque
aconpaOaba a Allende saqucO tan completaniente In habitaciOn de Cortina, clue no
to dejaron a éI y -a su esposa mas quo la ropa clue tenian puesta. El cura hizo locar
mas temprano ck to regular A twa misa quo so decia on aquel pueblo on (a madrugada
de los Was de fiesta; pat a qtie siendo domingo. la genie comenzase a reunirse. El
I'. sacristan ma yor dc Ia parroquia I). Francisco liuscamanie, español, quo ignoran-
Ic de to quo pasaha iba a decir la misa, fu aprehendido por of padre D. Mariano
l3aileza que era \icario. quien to quitO [as vestiduras sagradas (pie liabia empezados
A ponerse y lo llevO it cared. El pueblo. puesto ya on comocion, corria a saqucar
las casas de los espanoles y a conducirlos a la crcel, y unos hombres quo pocas horas
âmes habian estado oil misma sala de diversion con su cura, a quien tratahan
con wtimidad y con quien muehos tcniasii las relaciones (IC compadraigo. Lan comunes
en los pueblos con el párroco; se veian por Orden este este privados tie su liberlad,
despojados de stis bicncs, y arrancados del seno de sus lamilias, para ser conducidos
it prisiOn de donde acabahan de salir los crinilnales. El cura mandá entOnees
juntar d los prineipales vecinos y estando reunidos les dijo. "Va vds. hahrán Visto
este movimienro: pues sepan quo no Liene mas objeto quo quitar of mando a los europeos,
porque estos,como vds. sabra, se han enrrcgado a los franceses y quieren quo
corramos la niisma suerte. to coal no hemos de consentir jamas, y vds. como buenos
patriolas, dehen defender este pueblo hasta nuestra vuelta que no scra rnuy dilatada,
para organizar of gobierno.'' Los vecinos se rctiraron sin Jar respuesta alguna.
En Amman, Lucas, !J&vzoria de Mtj:co. Mexico, his, 1942. pp 346-349.

Diez y seis de septiembre*
lie. alt; cgrcias anirnas. quac sanguine nobis
hanc patriarn perpere sun, decorate supremis
muncrihus.. -
Renueva ioh musa! ci victorjoso alierno
con que, [let de la patria at amor santo,
ci tin glorioso de su acerbo ilanto
audaz predije en inspirado acento:
cuando más orgulioso
y con mentidos triunfos más ufano,
ci ibero saftoso
tanto ay! en Ia opresiOn cargo la mano,
Que at Anáhuac vencido
contO por siempre a su coyunda unido.
'Al miserable esciavo (cruel decia)
que independencia ciego apeilido,
de rebel iOn ci pabeiiOn nefando
alzO una vez en algazara impia,
de nuevo en las cadenas
con más rigor a su cerviz atadas,
atimentemos las penas
que a su ültima progenie prolongadas,
en digno eautivcrio
por siglos aseguren nuestro imperio."
''LQUé sirviO en los Dolores vii corlijo,
quc ci ales' pastor ci grito diera
de libertad, que dócil rcpitiera
la insana chusma con afán prolijo?
Su valor inexperto
de sacrilega audacia estimulado
a nuesira vista yerto
en ci campo quedO s' escarmentado; su criminal caudillo
rindió ya ci cuello at vengador cuchillo."
ANDRLS QUINTANA Root
(Virgillo Eneidu. /.. XI.)
I-kroc dc la insurgcncia. Andrec Quincana Roe (1787-185 I), u 1 cambith pocla, dcdico ci presence potma
ewrilo en 181 o los he-dies acacCidos in madrugada del 16 de Scpiiembrc dc 1810. Cs ci primer poema
CI' co iii side r C1FOJUC id en casi I otIis las .s ntokigias tIc poesia mcs 'cana c hispanoamer icana
Id. dic:.i 1.1, ciucci.i iIina qicc n 'anpre nos bar' tI;,do esia p.iIr,a adornad Con los tncjorcs
rci,:ih ' -
41

"Cual al romper las pkyadcs iluviosas,
ci seno de las nuhes encendidas,
del mar las olas antes adorniidas
sUbito ci austro aitera tempestuosas;
de la caterva osada
asi los resins nuestra voz espanta,
clue resuena indignada
y recuerda, si altiva se levanta,
ci respeto prolundo
quc inspirO de Vcspucio at rico mundo."
";Ay del quc hoy mãs los sediosos labios
de libertad al nomhrc lisonjero,
abriese, pretextado noveicro
mentidos, males, [tithes agravios!
del cadaiso oprobioso
veto, dcscendcrá a la tumba [na,
y ejempiar proveehoso
al rebeide será. que en su porlia
dcsconocicrc ci vugo
quc at invicto cspaftoI echarie piugo."
Asi los hijos de Vandalia rtuda
ficros ciamaron cuarido ci hcroc augusta
cediô de la fortuna al golpe injusto;
y ci brazo fuerte que Ia empresa escuda,
faitando i sus campconcs.
del terror y la mucrie prcccdidos.
feroces cscuadroncs
talan impunes campos fiorecidos,
y al desierto sombrio
consagnan dc la paz ci nombre plo.
No scrá empero que ci benigno cieio,
cOniplice iácii dc oprcsiOn sangrienta.
nieguc a Ia patria en tan cruel tormenta
una tierna rn I rada de consueio.
Ante ci i rono cicmentc
sin cesar suhc ci cnccndido ruego,
ci quejido doliente
de aquci prciado, que infiamado en fucgo
dc caridad divina.
Ia America indefensa pacrocina:
'Padre amoroso, dice. quc a tit hechura,
coma ci don más sublime concedisic.
42

la noble lihenad con que quisiste
de itt doria enzalzara hasca la altura.
LO vez a tin orhe entero
gemir. privado de excelencia tanta,
baja ci dominia hero
del execrable pueblo c;uc decanca,
asesinado at hombre,
dar honor a tu exceiso y ditlee nombreT'
;Cuánto ;ay! en sit maldad ya Sc gozara
cuando por premision inexerutahie
de w justo decreto y adorable.
de sangre en la conquista se banara,
sacrilego arbolando
la cnseña de tu crui en burla impia,
cuando más profanando
sit religiOn con negra hipocrecia,
para gloria del cielo
cubriO de excesas el indiana suelo!"
"De ernonces sit poder cOnit, ha pesado
sabre ci inerrne pueblo! iQut de horrores,
creciendo sienipre en crimenes rnayores.
ci primero a iti vista ha aumeniado!
la astucia seduciora
en auxilio Iran unido a su violencia:
moral corrompedora
predican con su barbara insolencia,
N , por divunas leycs
proclannin los caprichosos reves."
"Alit cc e con asombroso espanlo
cual traicicin cascigado ci 1)8(1101 Rum,
en dciii 0 erigido ci heroismo
clue al hornbre eleva y engrandece tanto.
j.Quë was? En duda horrenda
se cormuira en oraculo sugrado
pot saber si Ia prenda
de la rajón al india se ha owrgado,
v. mientras Ronia calla.
enire Las bestia eonfundido se halla."
"Y qué. cuando liegado se crela
dc redención ci suspirado instante,
pernutes. justo Dios. que ufana came
nueos triunfos la osada urania?
El adaiid primero.
43

I
El gencroso Hidalgo, ha perecido;
ci término postrero
ver no Ic fué de la obra concedido;
mas 01 ros cam peones
suscita quc redimian las naciones."
Duo. y Morclos siente cuardecido
ci noble pecho en belicoso aliento;
la Victoria Cfl sit enseña toma asiento
y su ejemplo dc mu Sc VC seguido.
la sangre difunditla
de los heroes su riulmero reerece,
como tal vez herida
de la seguir. la encima reverdece,
y con ms vigor recibe,
y con mäs poinpa y más verdor revive.
Más jquicii de Ia alabanza ci prcmio cligno
con litulos supremos arrehata,
Y ci laurel más glorioso a sit sien ata.
Guerrero in view, vencedor henigno?
El que en Iguala dijo:
Libre ki pal via sea. y F wHo luego
jtic Cl estrago prolijo
atajO, y de la guerra ci voraz fuego,
y con duke clemencia
en ci Irono ascntó la independencia!
;Himnos sin fin a sit indeleble gloria!
Honor demo a los varones clams
que Cl caniino supieron prcparaos
Oh iturbide inmortal! a Ia Victoria.
Sits nombres antes fueron
cuhiertos dc Itii puma, esplcndorosa;
inas nuestros ojos vieron
briliar ci tuyo cotno en noche hermosa,
cut rc cst rcllas silt cucitI o
a la luna en ci alto firmamento.
;Sombras ilustres, que con ertuento riego
de Ii bert ad la pla iii a fee tin cIa sr cis
y sus frutos dulcisinios legasicis
al suelo patrio, ardienic en sacro fuego!
Redhid bo y . henignas,
dc su fiel gratitud prendas sinceras
cmi aiahan,as dignas.
44

mäs qiie ci rnärmol ci bronce y duraderas,
con que Ytlestra mernoria
coloca en al aicázar de Ia gloria.
ANurtEs Qt:INJANA Roo
45

En sepuicral sikncio se encontraba
ci pueblo mexicano sumergido.
;Fatal silcncio solo interrumpido
por Ia dura cadena que arrascraba!
Como crimen atroz se castigaba
del trisle esclavo ci miscro gemido.
o de los opresores at oldo.
cual müsica de triunlo resonaba.
A Hidalgo*
Grita Hidalgo. por fin, con voz divina:
'';México libre para siempre sea!"
Y at tirano español guerra fuirnina.
;Onde años dura la mortal peica.
ci Irono se desploma, y en su rina.
de liberia ci esiandarte ondea!
Ft }tcANoo CAIDER0N
1837.
• Pocia dc la Independencia. cscrihsô c,tc wnco a ;xxo' ant" del griu tic Iitxri.,d tic la inticric del eiudullo
46

So nianlo sabre la cicrra
Fiene extendido la noche
\ duermen todos Lranquilos
[in ci pueblo de Dolores.
Allende y Aldarna, en tanto
Que otros deseansan, disponen
Del gran Hidalgo it en busca.
Para quc no se inalogren
Los planes que han concebido
Del aizar guerreros pendones.
IX Queretaro ha liegado
Nota a Los conspiradores.
De que ci plan se ha descubierto
Por los fieros espanoles.
El buen anciano dormia
('tuando a su puerta o yo golpes.
LE irnaginando un suceso.
En su lecho uncorporôse.
Allende y Aidaina Ilegan
Ante ci noble sacerdote.
V Ic dicen con acento
Quc revcla sus tcrnores:
--La fuga solo nos rcsta.
Señor cura... descubriOse
La conspiraciOn: podcnms
Salsarnos de las prisiones.
V a6n acaso de la muerte
Que en sus instinios feroces
El cspañol nos dana,
V nuestros planes cntonce'..
Por la frentc del anciano
One escuchaba aquellas voecs,
Cruzaron mil pensamientos
HèrOicos. dignos y nobles.
Parecia que escuchaba
Dc Mexico los clamores,
V ci ruido de sus cadenas,
V del aiim los a.otcs.
Minaha a los extranjeros
1-lurnillar al indio pobre,
V las hogucras miraba
El Grito de Dolores
FRANCISCO SosA
47

Dc crucks inquisidores.
InS al rico encomendeno
Entre luces y artesones.
En tanto que su miseria
Lioraha ci pueblo. "No Ilores"
Entre site duo Hidalgo;
Y a sus tiranos: "no gocen."
RasgO ci porvenir los velos
Con clue sus glorias esconde,
Y ante la vista de Hidalgo,
Entre vivos resplandores.
Estaba Mexico lihrc
A Pa faz de la naciones.
—Señor. Ic repite Allende
Al ver que callaba; tome
Una senda y marcharemos.
Y quc no nos aprisionen.
—Caltad, Ic dice ci anciano
Que aquellas palabras oye;
Por tibertar a la patria.
CuãI de sus hijos no expone
Su sangre, su vida misma?
Corred. subid a Ia torre,
Y quc toquen ]as camapanas
A misa; asi se convoquc
A todos mis t'eligreses,
CV hoy en soidàdos se tornen.
Antes de huir dc la oscura
Soledad de las prisiones.
Hagamos libre a la patria;
Animo, puts, à la torre!"
Del astro hermoso del dia
Los primeros resplandores
No brillaban en Oriente,?
Ni cantaban en los robles
Su amor a las rosas bellas
Los peregrinos zcnzoncles,
Y estaban los feligreses
Ya en d templo de Dolores;
Quc al Ilamarles la campana,
Dc Dios escuchan las voces,
Y también Pa de su Cura,
A quien por padre conocen.
48

Ilidalgo se les preserua
Erguida la frente noble,
Reflejando en la rnirada
Puro, indelinible goce.
• 'Sabed. les dice, hijos mios,
Que sj ci cielo nos socorre,
La libertad a la patria
Vamos a dar; los albores
Del diet y scis de Septiembre
Brillaran cuando los hombres
Que en nuestro pecho sentimos
Quc sangre de Iibrcs corre.
Habremos codos jurado
Dc tiranos cspafloles
Ilacer a la paula libre
A la faz de todo ci orbe.
Y ya no habrá encomenderos,
Ricos, marqucscs y condes.
Flumiliando a los clue han side
Dc esta tierra los señores.
Iremos a las ciudades
V cruzaremos los bosqucs,
Llevando per donde quiera
Dc la pat na los pendones.
Hijos mios, en este suelo
Que para siempre se borre
Del esclavo ci nombre odioso,
V dcl libre Ileve el nombre.
V no harán al mexicano
Que 'itinta senda tome,
Ni ci temor de Ins cadalsos
Ni ci fragor de los cañoncs."
Al escuchar las palabras
Dc su pastor. icvantOse
Entre Ia grey libre grito
Que repitieron Ins montes.
•0
t3cndita aurora risuefla!
LD0 csá tu fulgor? Len dOnde?
LPor qué tarda y no ilumina
A los herOes de Dolores?
El santo amOr de la paula
Abrigan sus corazones,
V durará más su gloria
Que los niármolcs y bronces,
49

n
I:
F
If i
! !
U
S
g
,-.I fl
11
g
I
1
ii
N