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Testimonios
Centro
Capullos
Se me ha dado la oportunidad de conocer, convivir, jugar, reír, llorar, y amar a mis niños y
niñas que voy a visitar al DIF Capullos, y por esto, quiero agradecer infinitamente a Usted,
Señora Gretta Salinas de Medina.
Hace aproximadamente un año, mis dos hijos Gabriela, José Antonio y yo llegamos ilusionados
y emocionados a las instalaciones del DIF Capullos con la intención de contribuir, de generar
en los niños amor, alegría, paz, sueños, y afortunadamente las puertas se abrieron para
nosotros. A lo largo de estos meses, me he dado cuenta que ha sido al contrario, mis pequeños
del DIF Capullos nos han llenado de alegría, me han llenado mi corazón con sus sonrisas, con
sus palabras, y sus abrazos, es maravilloso escuchar sus logros en la escuela, sus sueños y
sus objetivos de vida, es increíble sentir como poco a poco me fueron entregando su corazón
sin pedir nada a cambio, sólo AMOR, sólo un abrazo honesto, un abrazo que sin palabras
exprese lo que se está sintiendo. Mis niños quieren miradas, miradas que volteen hacia ellos
y crean en sus virtudes, en sus capacidades, en sus sueños, en sus anhelos de ser hombres y
mujeres que sólo dediquen su vida al bien de la sociedad.
Es cierto, han existido momentos en los que me encuentro con alguna carita triste, con unas
lágrimas rodando por alguno de sus rostros, con algún sentimiento de enojo, de frustración;
sin embargo, ellos son capaces de abrir su corazón, de superar esas amarguras y de dar vuelta
a la página y de VIVIR, es por eso que la persona que más cosas ha aprendido de estos niños
SOY YO. Es grandiosa la experiencia de escuchar que gritan mi nombre desde lejos cuando
me ven llegar, y es cuando llega la reflexión y me doy cuenta que vale la pena, que si un solo
niño o niña recuerda en el futuro, en algún momento de su vida algún abrazo mío, alguna
sonrisa, algún juego, algunas palabras, y el recordar eso lo hace feliz, estoy satisfecha,
porque entonces estaré orgullosa de haber entregado mi amor a esos niños sin medida.
Si, cuando se entrega el amor sin medida se pagan precios, se paga el precio del dolor, de la
tristeza, del sufrimiento, cada vez que llego a verlos y alguno de mis niños ya no está, pero al
mismo tiempo se siente una sensación de felicidad porque sé que ha encontrado un hogar, en
el que le darán cariño, ternura, amor, comunicación, confianza y educación.
De nuevo GRACIAS, gracias por permitirme dar un poco de lo que yo recibo de la vida, gracias
por abrirme las puertas, por las atenciones de cada una de las personas que a lo largo de
este año de contribución han estado a mi lado y me han extendido la mano amiga en el DIF
CAPULLOS, y desde el fondo de mi corazón todo mi reconocimiento para Usted Señora Gretta,
porque nos enseña a amar y a entregarnos a esos angelitos que viven en DIF CAPULLOS.
La medida del amor es amar sin medida. (San Agustín)
De todo corazón.
Gabriela Garza García.
Mis pequeños del DIF Capullos nos han llenado de
alegría, me han llenado mi corazón con sus sonrisas,
con sus palabras, y sus abrazos, es maravilloso
escuchar sus logros en la escuela, sus sueños y sus
objetivos de vida, es increíble sentir como poco a poco
me fueron entregando su corazón sin pedir nada a
cambio, sólo AMOR.