revista cultural
revista cultural
revista cultural
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
editorial<br />
nuevos tiempos, nuevos formatos<br />
Silvia Oviaño<br />
Empecemos con una declaración<br />
(solemne, pero sencilla) de principios;<br />
nos gustan las bibliotecas. Y mucho.<br />
Reconozco que cuando entro en una<br />
siento el mismo cosquilleo goloso<br />
en el estómago que noto frente al<br />
escaparate de una pastelería; la boca<br />
se me hace agua, imposible fijar la<br />
mirada en un punto, y a menos que<br />
vaya a por algo en concreto, durante<br />
minutos me bloqueo, incapaz de elegir<br />
qué pastel, perdonen el lapsus, qué<br />
libro, escoger. Y siempre salgo con la<br />
sensación de que mi tiempo dentro me<br />
ha sabido a poco. Por eso hacemos<br />
esta <strong>revista</strong>, para sumergirnos en el<br />
fantástico mundo de las bibliotecas<br />
y hablar no solo de sus libros, sino<br />
de todo lo que encierran, música,<br />
películas, juegos, encuentros… en<br />
definitiva de cultura. Esa cultura que,<br />
como ya reinvidicaba Lorca hace 80<br />
años en un discurso que recuperamos<br />
en este número, hoy más que nunca es<br />
necesaria e imprescindible.<br />
En Infobibliotecas hablaremos también de<br />
los bibliotecarios, superhéroes capaces<br />
de recordar si tienen el último libro de<br />
un autor de ensayos búlgaro y señalarte<br />
en qué estantería está. Todo ello en<br />
treinta segundos. Pocas profesiones han<br />
sabido adaptarse a los nuevos tiempos<br />
como ésta. Las bibliotecas -hasta hace<br />
poco lugares de silencio monacal aptos<br />
solo para intelectuales y opositores,<br />
son en la actualidad centros abiertos<br />
para todos. Las nuevas generaciones<br />
de bibliotecarios -modernos, sorientes,<br />
y amables en su mayoría y muy lejos<br />
de la antigua imagen de gobernanta<br />
implacable con los que susurraban en la<br />
sala o les pedían un libro equivocado-<br />
han sabido derribar las barreras entre el<br />
lector y los libros al permitir el método<br />
del ensayo y error; cojo un libro, no me<br />
gusta, cojo otro… Con ello han logrado<br />
que las bibliotecas sean lugares con<br />
encanto en los que conviven el erudito, los<br />
niños, los jubilados, las amas de casa, los<br />
estudiantes de instituto y los bebés, donde<br />
ya no solo hay papel encuadernado, sino<br />
otros múltiples formatos, cds musicales,<br />
dvds con películas, series de televisión,<br />
videojuegos y donde la sala de lectura<br />
se abre a nuevos espacios, mediateca,<br />
bebeteca (¡esos mullidos cojines de colores<br />
que te despiertan el deseo de volver a<br />
ser infante!), sala de trabajo en grupo,<br />
de estudio individual… En este número<br />
ent<strong>revista</strong>mos a Carme Fenoll, bibliotecaria<br />
de vocación, auténtico referente de este<br />
colectivo, actual jefa del Servicio de<br />
Bibliotecas de la Generalitat de Catalunya<br />
e impulsora de la figura del bibliotecario<br />
como guerrillero <strong>cultural</strong>.<br />
Nos gustan los libros en todos sus<br />
formatos, tapa dura, blanda, papel<br />
reciclado, digital.. pero la crisis (no<br />
se asusten, solo le vamos a dedicar<br />
un párrafo y volvemos a lo nuestro)<br />
también ha llegado a este mundo tan<br />
especial. Este año los presupuestos<br />
generales del estado destinarán cero<br />
euros (escrito en letra para que nadie<br />
crea que hay un error de imprenta)<br />
a la adquisición de obras. Muchas<br />
bibliotecas tendrán que echar mano<br />
de la imaginación para suprimir<br />
la falta de novedades. Y muchas<br />
editoriales, no hay mal que por bien no<br />
venga, comienzan a centrar mayores<br />
esfuerzos en el libro digital, que ahorra<br />
costes de producción. En los últimos<br />
años ha aumentado la venta de ebooks<br />
y tabletas. Ya no podemos llamarlo<br />
futuro, el libro digital ya es un presente<br />
muy presente. Y muchas bibliotecas se<br />
han lanzado al préstamo digital, impensable<br />
hace pocos años, y auténtica alternativa<br />
legal a la descarga pirata de libros. Por ello<br />
hemos ent<strong>revista</strong>do a Arantza Larrauri,<br />
directora de Libranda, plataforma de<br />
distribución de libros digitales que entre otras<br />
cosas, nos hablará de su servicio Ibiblio.<br />
Algunos pensarán que con el préstamo<br />
virtual se pierde la magia de ir al centro y<br />
escoger el libro, pero a buen seguro que<br />
esta iniciativa atraerá a nuevos usuarios a<br />
las bibliotecas; los auténticos apasionados<br />
de los dispositivos electrónicos, pero<br />
también a aquellos lectores que tengan<br />
poca movilidad, vivan lejos del centro<br />
o tengan unos horarios de trabajo<br />
imposibles. Y no, no se pierde la ilusión<br />
de rebuscar entre las estanterías; cuando<br />
con el carnet de socio uno se conecta<br />
a este nuevo servicio, se encuentra con<br />
unas baldas repletas de libros; con solo<br />
un click el volumen elegido estará en<br />
nuestro dispositivo. Eso sí, recuerden que<br />
a las bibliotecas también se puede ir, y es<br />
altamente recomendable, a que te lean un<br />
cuento, a participar en un club de lectura,<br />
a escuchar un concierto o a dejar que<br />
nuestros niños se pierdan entre miles de<br />
libros. Santi Balmes, músico, compositor,<br />
cantante de Love of Lesbian y escritor, que<br />
inaugura nuestra nueva sección, Ratón<br />
de biblioteca, lo resume en una frase; el<br />
contacto con los libros es apasionante.<br />
Lo dicho,<br />
nos gustan las<br />
bibliotecas y<br />
vamos a hablar<br />
mucho de ellas.<br />
4 5