Los Tres Cochinitos : Un Cuento Financiero

Necesitaba tiempo para pensar, y entonces dijo: “Disculpe, Sr.
Cochinito. Dejé su escritura en mi automóvil. Debo ir a buscarla.
Mi automóvil no está lejos".
Mientras el lobo se dirigía hacia su
automóvil, el Cochinito Tacaño tomó
su bolsa de oro y una pala. “Esta es
mi oportunidad, mientras no hay nadie
alrededor, de enterrar mi oro bien
profundamente en el suelo. Yo debo
cuidar lo que tengo. Gastaré mi oro
solamente en mí”.
“Si hago creer al lobo que estoy
arruinado, me dejará tranquilo
cuando me dé mi escritura y podré
construir mi casa de ladrillo".
El cochinito, sonriendo nerviosamente,
cubrió el agujero y regresó para
encontrarse con el Sr. Wolfe. Pero
el Cochinito Tacaño no sabía que el
Sr. Wolfe lo estaba vigilando detrás de
un árbol y vio dónde enterraba su oro.
"Este cochinito está decidido a enterrar su oro; por eso tendré que
descubrir su fortuna yo mismo.” El Sr. Wolfe destapó el agujero,
tomó la bolsa de oro y se apresuró hacia el bosque.
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