Romances históricos - Biblioteca Virtual Universal

More documents

Recommendations

Info

y con gran despejo hablando, refirió a los circunstantes las misas y los rosarios que por los reyes Borbones el monasterio ha aplicado;410 y las predicciones cuenta de varias santas y santos, que aseguran el dominio de Italia en Felipe y Carlos, por ser de la madre Iglesia415 hijos predilectos ambos. Y luego las monjas todas, ora en tiple, ora en contralto mil sandeces refirieron, mil tontunas preguntaron,420 que con rubor escuchaban los clérigos y el vicario, retozándoles la risa a los otros en los labios. * La que no habló una palabra,425 indiferencia afectando, fue la hermosa, que el extremo ocupaba de un escaño. Si era pasmoso su rostro, su talle era tan gallardo430 que ni las ropas monjiles lograban desfigurarlo, bien que aún en ellas había ya negligencia, ya ornato, una y otro disonantes435 con la austeridad del claustro. Y también su alta belleza demostraba a veces algo como descompuesto, inquieto, incomprensible y extraño,440 ya retorciendo de pronto como convulsos los brazos, ya revolviendo sus ojos como bizcos y encontrados, ya frunciendo el entrecejo,445 ya mordiéndose los labios; pero todo pasajero, rapidísimo, instantáneo, haciendo el desagradable efecto que en un buen cuadro450 la cabeza de una santa de Murillo o de Ticiano que al resplandor de una vela se está de noche mirando,
si a un soplo de viento oscila455 la luz, y todos los rasgos, sombras, perfiles y toques, se pierden, haciendo acaso instantáneamente un monstruo del más prodigioso encanto.460 * Un exquisito refresco de almíbares delicados, de sorbetes y bizcochos, sirvióse con aparato, en su vajilla de plata,465 y sutilísimos vasos de fábrica de Venecia con cifras de oro y con ramos. Del locutorio ambas partes fáciles comunicaron470 dos tornos, que revolvían veloces a todos lados. Dentro servían las legas, demandaderos y hermanos afuera, obedientes todos,475 a la prelada y vicario. * Mediada estaba la tarde, bajaba el sol al ocaso, y ser la hora de la lista los tambores avisaron.480 El coronel levantóse como militar exacto, obedeciendo al momento de las cajas el mandato. Y con palabras corteses,485 demostrándose obligado al convento y a las monjas por su afecto y agasajo, se despide y les ofrece la protección del muy alto490 infante, que de las tropas coligadas tiene el mando. La prelada entonces dice, muy obsequiosa: «Anhelamos, yo y mis hijas, que un recuerdo495 militares tan cristianos »lleven, ¡oh señor!, consigo y que pueda ser, acaso, como impenetrable escudo, bueno en batallas y asaltos.»500 Y volviéndose a la linda con noble desembarazo:
Page 1 and 2:
Índice Una antigualla de Sevilla R
Page 3 and 4:
Romance Tercero El caballero La vic
Page 5 and 6:
Con blancas sobrepellices Cual de s
Page 7 and 8:
Una mano y brazo asoman,25 que sost
Page 9 and 10:
que entonces reedificaban tal cual
Page 11 and 12:
y bajando a los jardines por un pos
Page 13 and 14:
Otro, asiéndole los brazos con una
Page 15 and 16:
cien monedas de oro, y dice: «Toma
Page 17 and 18:
con el son de las campanas que en l
Page 19 and 20:
ornatos de miniatura, y de oro y ma
Page 21 and 22:
para que la evite el hombre, a una
Page 23 and 24:
de su peregrino rostro355 y de su c
Page 25 and 26:
Así que volver la espalda le vio l
Page 27 and 28:
hija por quien el rey tiene el más
Page 29 and 30:
donde más os venga en pro. »Socor
Page 31 and 32:
del huracán al impulso. Del hurac
Page 33 and 34:
Romance Tercero El dormido Anuncia
Page 35 and 36:
Hasta Bermejo se acerca... ¡Moro i
Page 37 and 38:
la desnuda daga, como arde el rayo
Page 39 and 40:
* Aunque con buen apetito, mustios
Page 41 and 42:
En ella relampaguean reflejos de ac
Page 43 and 44:
don Álvaro, que engañado juzgó,
Page 45 and 46:
feroz le escarnece y burla, de la c
Page 47 and 48:
en la cámara, cual una aparición,
Page 49 and 50:
o que casas y palacios495 su basa h
Page 51 and 52:
Recuerdos de un grande hombre A mi
Page 53 and 54:
inmóvil, clavada, fija. Y ya al ci
Page 55 and 56:
toma un sorbo de agua fresca, y con
Page 57 and 58:
sus proyectos manifiesta. Recurre a
Page 59 and 60:
al genovés, y aquel nombre375 pron
Page 61 and 62:
y con sus huestes gallardas; allí
Page 63 and 64:
el genovés navegante,565 que a la
Page 65 and 66:
y de modestia tan grande, y de nobl
Page 67 and 68:
Insiste en ver a los reyes y renuev
Page 69 and 70:
jueces inflexibles fueron, y le tra
Page 71 and 72:
de Málaga en el asedio,950 en otra
Page 73 and 74:
y todos sus planes nuevos, el genov
Page 75 and 76:
el más claro entendimiento, la vir
Page 77 and 78:
o almirante de las Indias, duque y
Page 79 and 80:
por sus designios ocultos.» «Muer
Page 81 and 82:
oban, destruyen y matan. Así cumpl
Page 83 and 84:
de los Católicos Reyes el noble em
Page 85 and 86:
Y en una desierta calle, donde sus
Page 87 and 88:
a ofrecerle ser su esposa y a jurar
Page 89 and 90:
a diez pasos, dando un grito: «Ret
Page 91 and 92:
que del devoto concurso295 tiene la
Page 93 and 94:
el que deslumbró su vista: cubiert
Page 95 and 96:
un momento la examina,490 y ora las
Page 97 and 98:
Este Hernando, este mancebo585 era
Page 99 and 100:
tan lamentable suceso, la sangrient
Page 101 and 102:
(después de dar a las llamas y de
Page 103 and 104:
de frugalidad modelo: y que de venc
Page 105 and 106:
miran hacia el campamento, donde, c
Page 107 and 108:
y para hombre bien nacido el honor
Page 109 and 110:
sordo haciéndose a la befa de lice
Page 111 and 112:
vuelto al marqués de Pescara,515 d
Page 113 and 114:
lazos, borlas y cordones. En el alt
Page 115 and 116:
allí donde más feroces los enemig
Page 117 and 118:
Herido su rostro noble, pasado el b
Page 119 and 120:
y los de Borbón soberbio, y entre
Page 121 and 122:
Respóndele el derribado: «Soy el
Page 123 and 124:
«Guardaréle, que colgarle de mi e
Page 125 and 126:
como el marqués contestase: «Señ
Page 127 and 128:
que se arrasaban los ojos735 de cua
Page 129 and 130:
del alto esfuerzo español. Y cauti
Page 131 and 132:
al lado de una gran mesa45 que cubr
Page 133 and 134:
Sostenido por sus pajes desciende d
Page 135 and 136:
Dijo el conde, la real mano besó,
Page 137 and 138:
en la mesa, en el despacho, en la v
Page 139 and 140:
de pajes y de escuderos. Mas la pen
Page 141 and 142:
triunfó la fuerza, y el Cielo mir
Page 143 and 144:
en las selvas do arrancaron no meno
Page 145 and 146:
en el alma y el vestido tornó, ¡i
Page 147 and 148:
sus comparsas y libreas, joyas, arm
Page 149 and 150: fervorosas rogativas y públicas pe
Page 151 and 152: del palacio en los balcones la vist
Page 153 and 154: de las inclinadas picas, y negros l
Page 155 and 156: alicatadas cornisas, Ayuntamiento y
Page 157 and 158: En la soberbia capilla985 donde las
Page 159 and 160: en que expresión nunca vista de af
Page 161 and 162: van a cumplirse tres siglos5 que su
Page 163 and 164: no se qué sus ademanes de una finu
Page 165 and 166: vestido de negro un hombre, que en
Page 167 and 168: las luces de dos bujías en candele
Page 169 and 170: illa la persona ilustre375 de doña
Page 171 and 172: la voz: «Nada ha sido -dice-, el r
Page 173 and 174: de tapices y brocados. En los otros
Page 175 and 176: y un gran tropel de lacayos, los qu
Page 177 and 178: exceso del amor propio, cuyos esfue
Page 179 and 180: forman estruendo confuso en que ya
Page 181 and 182: gran favor con el monarca, a disgus
Page 183 and 184: parecen mágicos soles; mas pronto
Page 185 and 186: un adepto de alto nombre ve en tan
Page 187 and 188: adornada de arabescos y follajes pr
Page 189 and 190: «Veréis que uno y otro al punto p
Page 191 and 192: una daga de gran precio con tal fur
Page 193 and 194: las águilas imperiales van ahuyent
Page 195 and 196: Romance Segundo El alojamiento En s
Page 197 and 198: no vocación fervorosa, sino viles
Page 199: después de muy breve rato, y la co
Page 203 and 204: oprimida, desdichada, contra su gus
Page 205 and 206: seguido de su asistente, a quien ma
Page 207 and 208: de su esbelto y noble talle,735 de
Page 209 and 210: «De Chipre es, y es excelente -dic
Page 211 and 212: de esta asoladora guerra abrigo en
Page 213 and 214: con vivas chispas relumbra. * Que s
Page 215 and 216: andar por ella procura.1120 Tardame
Page 217 and 218: pesos, báculos y varas, y hasta ab
Page 219 and 220: que era poderosa ayuda, sin poder s
Page 221 and 222: y, de polo a polo su brazo tan sól
Page 223 and 224: donde el dedo del Eterno escribe:
Page 225 and 226: dos huellas no interrumpidas; forma
Page 227 and 228: a la oscura noche el día y a la bo
Page 229 and 230: de un blanco paño cubierto, con un
Page 231 and 232: Romance Primero La tarde Entre Este
Page 233 and 234: cúmpleme, pues, tus palabras; no t
Page 235 and 236: clavada está. Los destellos de la
Page 237 and 238: más hinchada, más soberbia. Ve en
Page 239: Súmese como voluntario o donante ,
show all

Romances históricos - Biblioteca Virtual Universal

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

Delete template?

Save as template?