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OPINIÓN POLÍTICA
Escuchar. Ésta, y no otra, debe
ser la principal ocupación de
quienes nos dedicamos a la
política y tenemos responsabilidades
en la gestión pública. La
sociedad demanda ser escuchada
y atendida y es que, sólo así,
quienes tenemos la responsabilidad
de tomar decisiones y
buscar soluciones podremos
adoptar las se adaptan a las
necesidades actuales o sobrevenidas
de la ciudadanía.
Asumir el gobierno de una
administración significa gestionar
los recursos públicos de los
que se dispone con el máximo
rigor y garantizar los servicios
públicos que, en nuestro caso,
son competencia municipal.
Pero no es sólo eso, asumir la
responsabilidad que conlleva el
Dispuestos
siempre a escuchar
gobierno de una administración
es también la capacidad de
adaptarnos a las demandas de
los vecinos y vecinas en cada
momento, más todavía en esta
coyuntura tan difícil por la que
todavía hoy estamos pasando.
Nadie mejor que nuestros vecinos
conocen sus necesidades y la
obligación del equipo de gobierno
del Ayuntamiento de Arganda
del Rey es escuchar, poner la
máxima atención a las demandas
de los argandeños y argandeñas,
y ello nos ha llevado a adoptar en
los últimos meses toda una serie
de medidas como resultado de
diferentes encuentros, reuniones
y conversaciones con diferentes
sectores de la ciudadanía.
Precisamente, el interés de
mejorar la calidad de vida
y el bienestar de nuestros
ciudadanos nos ha llevado a
implantar medidas que, si bien
no teníamos contempladas en
el programa electoral, hemos
considerado imprescindibles
para paliar en la medida de lo
posible la situación económica
por la que atraviesan muchas de
las familias de nuestra ciudad.
Escuchar a los ciudadanos y
ciudadanas de Arganda, atender
a sus requerimientos nos ha
llevado a asumir una responsabilidad
social que se ha traducido
en el Plan Municipal de Apoyo
a las Familias, el Plan Municipal
de Empleo, las Medidas Sociales
Extraordinarias para el pago del
IBI o la Comisión de Apoyo a las
Familias en proceso de Desahucio.
Todas estas acciones son
Arganda del Rey
fruto del compromiso social del
Equipo de Gobierno y ninguna
de ellas hubiese sido efectivas
si no hubiésemos escuchado
y dialogado con la ciudadanía:
profesores, padres y madres,
directores de colegios, institutos
y escuelas infantiles, miembros
del Consejo de Desarrollo Local,
empresarios, autónomos, asociaciones…
en definitiva, con todos
los ciudadanos y ciudadanas de
Arganda.
La democracia puede tener
muchas definiciones, pero desde
luego no es sólo votar cada
cuatro años.
@prsardinero
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DECIDIMOS
NUESTRO FUTURO
ARGANDAMARCA • REVISTA MUNICIPAL
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Las elecciones europeas
del próximo 25 de mayo nos
afectan mucho más de lo que
algunos quieren hacernos creer.
Resulta sorprendente que los
mismos que se escudan en que
es “Europa” quien nos impone
decisiones dolorosas de austeridad
y recorte de derechos,
distraigan ahora con bailes de
candidatos que alimentan la
desmovilización y el desinterés
de la mayoría, en lugar de explicar
lo decisivas que serán para
todos nosotros.
Es verdad, Europa nos ha
impuesto muchas cosas. Una
Europa en la que menos de
la mitad de los europeos con
derecho a voto eligieron una
mayoría conservadora. La baja
participación no deslegitima el
resultado; la creciente presencia
en el Parlamento de radicales
antieuropeístas tampoco ha
ayudado a que prosperen las
propuestas de la izquierda de la
Cámara.
Las de mayo serán las primeras
elecciones europeas, tras las
reformas del Tratado de Lisboa,
en las que la mayoría parlamentaria
será decisiva en la elección
del Presidente de la Comisión
Europea, el “Presidente de
Europa”. Seguirá siendo propuesto
por los Gobiernos de los
estados miembros pero ahora,
tendrá que ser refrendado por
el voto de los eurodiputados en
el Parlamento Europeo.
No es la única consecuencia
del Tratado de Lisboa en el que
los líderes y tecnócratas europeos
reconocieron que la falta
de democracia en la toma de
decisiones en la Unión Europea
alimenta un euroescepticismo
y un desapego de los ciudadanos
que puede suponer el
fin del proyecto. Por eso este
nuevo Parlamento tendrá más
capacidad de decisión sobre el
Gobierno, por fin actuará como
un poder legislativo y podrá
legislar y dictar normas de
obligado cumplimiento para la
propia Comisión Europea y para
los estados miembros.
Podrá legislar sobre los
paraísos fiscales en Europa
y poner fin a ese sinsentido.
Legislará en materia de política
fiscal y financiera, en modelo
económico y social. ¿Vamos a
dejar esa decisión en manos de
la derecha ultraliberal? ¿De los
que apuestan por la regulación
impuesta los mercados evaporando
la política?
Este Parlamento Europeo,
por fin, va a poder imponer la
voluntad y la opinión de los europeos
que acudan a votar el 25
de mayo. No podemos caer en
la trampa de los enemigos del
progreso y la democracia quedándonos
en casa con nuestro
enfado y nuestra frustración:
Europa debe tener una mayoría
parlamentaria de izquierdas y
progresista que enderece el
camino emprendido y defienda
el modelo de vida europeo y el
estado de derechos y bienestar
que tanto esfuerzo, sudor y sangre
nos ha costado conquistar.