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ente de Esclavo 44 45 El Esclavo Es Un Mediocre En Lo Que Hace
El IIder entonces, daba permiso para que los hermanos
comiencen aorar. Doña Parata era siempre la primera, decla:
«Padre, ayüdameeeeee, salvameeeee, ven pronto
Senorcito mloooooo, lIévame a tu presenciaaaaaa:t...
Desde el cielo. el apóstol Pedro le rogaba al Padre:
«Senor, por favor no traigas todavfa a esta vieja que nos
va amargar el cielo!.• Me imagino a Jesüs diciendo: «¿Qué?
Ni loco, ya amargó a muchos en la tierra no me va a contaminar
el cielo. Cuando cambie de actitud la oiré•.
Terminada la oración de doña Porota, se levantaba a
orar el hermano Pedro, quien comenz9ba a orar, a ora~. ya
orar en una extensa verborragia sin sentido. Los hermanos,
sentados en sus sillas, a los diez minutos comenzaban a
mirar sus relojes, bostezar. conversar con el hermanos de
al lado. Otros mas atrevidos sacaban su agenda y comenzaban
a hacer las anotaciones de lo que deblan hacer al
otro dla en sus trabajos; eso era «para ganar tiempo•.
Luego de veinte minutos. el hermano'Pedro terminaba su
oración. y remataba diciendo con fe:
«Señor, gracias porque no se me pinchó la goma de la
bicicleta cuando fui a comprar los dos kilos de papas a la
feria. Te pido que cuides mi bicicleta de todo vidrio, clavo
oxidado y elemento satanico que el enemigo ponga en mi
camino. Amén.•
Ahora era el turno del hermano Roberto, quien decla:
«Señor, gracias porque me prosperaste y de dos mil
dólares de sueldo me ascendieron a cuatro mil quinientos
dólares por mes, gracias por prosperarme con mi coche
cero kiIÓmetro...:t
Inmediatamente detras de esa oración se levantaba el
hermano Alejandro, quien desde hacia varios meses no
podra «tragarse. al hermano Roberto. y entonces orando
dec!a:
«Señor, gracias porque lo importante no es lo material
porque el dinero va y viene y se lo comen los gusanos, pero
lo importante es la fe, el amor y la esperanza.•
Casi sin terminar la oración. se levantaba a orar el superamigo
de Roberto. quien retrucaba:
«Señor. el diablo se ha metido en nuestra iglesia. te pido
que lo arranques y se vaya al abismo. quita a los falsos de
en medio nuestro.»
y por fin, cerraba el pastor con una oración poderosa:
«Señor, hemos sentido tu presencia en medio nuestro.
Gracias por tu amor y porque estamos juntos en unidad.
Amén.•
¿Y qué podemos decir de las reuniones de jóvenes de
esclavos que pareclan de marcianos mas que de gente nor·
mal? Jóver¡es con una gran formalidad que no es propio en
ellos, tenlan reuniones tales que. al venir uno nuevo salla
corriendo diciendo: «socorroooooo, marcianos a mi vistaa·
aaaaa». El joven inconverso que asistla a esas reuniones
vela con sus propios ojos hecho realidad lo que siempre
habla visto en su video con las pelfculas de «Expediente X:t,
es decir. los marcianos ya estC:1n entre nosotros.
El esclavo, al imitar. deja de ser él mismo: se pierde, se
falsifica, se copia en otros, se llena de hipocresla y, ante su
falta de autenticidad, pone el piloto automatico, se robotiza.