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EDITORIAL<br />
Con ocasión de la 94° Jornada Mundial del Migrante, el Papa Benedicto XVI ha<br />
enviado a toda la Iglesia su mensaje, reflexionando sobre la realidad de las personas<br />
jóvenes en el mundo de las migraciones. El Papa recuerda que en el contexto de la<br />
globalización, muchos jóvenes se ven obligados a dejar su patria para buscar en otros<br />
lugares mejores perspectivas de futuro.<br />
Hay que ocuparse de este tema con serio cuidado. Los jóvenes migrantes se exponen<br />
con mayor facilidad a situaciones de engaño y vulnerabilidad; y muchas veces se<br />
encuentran en situaciones de explotación y de miseria que comprometen sus sueños<br />
y realización profesional.<br />
Hay que reflexionar sobre la situación de los derechos de los jóvenes migrantes.<br />
Generalmente, lejos de su familia, de su comunidad, de su escuela, de sus amigos, de<br />
su trabajo, se confrontan con diferentes visiones de tolerancia, solidaridad, integración<br />
cultural, racismo y libertad. Muchas veces experimentan soledad y abandono, y no<br />
encuentran fácilmente oportunidades para compartir sus problemas y angustias. Y<br />
eso suele alejarlos también de su fe y confianza en Dios y en los hombres.<br />
En el Continente Latinoamericano el perfil de las migraciones por edad sitúa a las<br />
personas entre los 20 y 30 años, mayoritariamente de sexo femenino y económicamente<br />
pobres.<br />
Recordando la juventud migrante, la Iglesia se propone ser como puente entre<br />
su expectativa y la sociedad de llegada. Quiere facilitar el diálogo con las nuevas<br />
situaciones de su vida e indicarle caminos de oportunidades e integración; y a la vez<br />
acogida humana y pastoral.<br />
En algunas ciudades de Chile no es difícil encontrar a los jóvenes migrantes; ya<br />
son muchos. En los hogares domésticos, en la construcción civil u otros lugares<br />
encontramos con facilidad rostros jóvenes, llenos de vida y perspectivas, migrantes<br />
que a través de su trabajo dignifican la vida de sus familias y el futuro de nuestro<br />
país.<br />
Los trabajadores jóvenes y migrantes juegan un papel determinante en la vida de los<br />
países que los reciben. Un programa acertado en la acogida facilita su integración e<br />
inserción armónica en la sociedad y en el mundo del trabajo.<br />
Por tanto será de gran beneficio para nuestra sociedad la buena acogida de los<br />
jóvenes migrantes y de las nuevas migraciones.<br />
A los organismos públicos les corresponde especialmente el desafío de una política<br />
migratoria, social, educativa y de integración. Para la Iglesia, los jóvenes migrantes y<br />
las nuevas migraciones son una oportunidad para realizar una pastoral que considere<br />
sus especiales características, posibilidades y necesidades.<br />
Hay que recordar que un joven migrante no busca solamente un trabajo en el país de<br />
destino, sino también un hogar, una comunidad, una oportunidad que la Iglesia puede<br />
y debe ayudarle a encontrar. Ahí estará la mano providente del Padre Dios para sus<br />
hijos en cualquier parte del mundo.<br />
Mons. En ri que Tron co so Tron co so<br />
O bi spo de Me li pil la<br />
Pre si den te de IN CA MI<br />
MIGRANTES<br />
3
JÓVENES MIGRANTES<br />
MENSAJE DEL SANTO PADRE BENEDICTO XVI PARA LA JORNADA<br />
MUNDIAL DEL EMIGRANTE Y EL REFUGIADO (2008)<br />
Queridos hermanos y hermanas:<br />
El tema de la Jornada Mundial del Emigrante y el<br />
Refugiado invita este año a reflexionar en particular<br />
sobre los jóvenes migrantes. En efecto, las crónicas<br />
diarias hablan con frecuencia de ellos. El amplio<br />
proceso de globalización del mundo lleva consigo<br />
una necesidad de movilidad que impulsa también<br />
a muchos jóvenes a emigrar y a vivir lejos de sus<br />
familias y de sus propios países. Como consecuencia<br />
de esto, la juventud dotada de los mejores recursos<br />
intelectuales abandona a menudo los países de<br />
origen, mientras en los países que reciben a los<br />
migrantes rigen normas que dificultan su efectiva<br />
integración. De hecho, el fenómeno de la emigración<br />
va aumentando siempre más y abarca un gran número<br />
de personas de todas las condiciones sociales. Por<br />
consiguiente, con razón, las instituciones públicas,<br />
las organizaciones humanitarias y también la Iglesia<br />
Católica dedican muchos de sus recursos para<br />
atender a estas personas en dificultad.<br />
Los jóvenes migrantes son particularmente sensibles<br />
a la problemática constituida por la denominada<br />
“dificultad de la doble pertenencia”: por un lado,<br />
sienten vivamente la necesidad de no perder la<br />
cultura de origen, mientras, por el otro, surge en ellos<br />
el comprensible deseo de insertarse orgánicamente<br />
en la sociedad que los acoge, sin que esto, no<br />
obstante, implique una completa asimilación y la<br />
consiguiente pérdida de las tradiciones ancestrales.<br />
Entre esa juventud están las jóvenes más fácilmente<br />
víctimas de la explotación, de chantajes morales e<br />
incluso de toda clase de abusos. ¿Qué decir de los<br />
adolescentes, de los menores no acompañados, que<br />
constituyen una categoría en peligro entre los que<br />
solicitan asilo? Estos chicos y chicas terminan con<br />
frecuencia en la calle, abandonados a sí mismos y<br />
víctimas de explotadores sin escrúpulos que, más de<br />
una vez, los transforman en objeto de violencia física,<br />
moral y sexual.<br />
Si observamos más de cerca el sector de los migrantes<br />
forzosos, de los refugiados, de los prófugos y de las<br />
víctimas del tráfico de seres humanos, encontramos,<br />
desafortunadamente, muchos niños y adolescentes.<br />
A este respecto, es imposible callar ante las imágenes<br />
desgarradoras de los grandes campos de prófugos<br />
y de refugiados, presentes en distintas partes del<br />
mundo. ¿Cómo no pensar que esos pequeños seres<br />
han llegado al mundo con las mismas, legítimas<br />
esperanzas de felicidad que los otros? Y, al mismo<br />
tiempo, ¿cómo no recordar que la infancia y la<br />
adolescencia son fases de fundamental importancia<br />
para el desarrollo del hombre y de la mujer, y requieren<br />
estabilidad, serenidad y seguridad? Estos niños y<br />
adolescentes han tenido como única experiencia de<br />
vida los “campos” de permanencia obligatoria, donde<br />
se hallan segregados, lejos de los centros habitados<br />
y sin la posibilidad de ir normalmente a la escuela.<br />
¿Cómo pueden mirar con confianza hacia su propio<br />
4<br />
MIGRANTES
futuro? Es cierto que se está haciendo mucho por<br />
ellos, pero es verdad también que es necesario<br />
dedicarse aún más a ayudarles, mediante la creación<br />
de estructuras idóneas de acogida y de formación.<br />
Desde esta perspectiva, precisamente, se plantea<br />
la siguiente pregunta: ¿cómo responder a las<br />
expectativas de los jóvenes migrantes? ¿Qué hacer<br />
para satisfacerlas? Desde luego, hay que contar,<br />
en primer lugar, con el apoyo de la familia y de la<br />
escuela. Pero, ¡cuán complejas son las situaciones,<br />
y numerosas las dificultades que encuentran estos<br />
jóvenes en sus contextos familiares y escolares! En<br />
las familias se han olvidado los papeles tradicionales<br />
que existían en los países de origen y se asiste con<br />
frecuencia a un choque entre los padres, que han<br />
permanecido anclados a la propia cultura, y los hijos,<br />
aculturados con gran rapidez en los nuevos contextos<br />
sociales. No hay que descuidar, sin embargo, el<br />
esfuerzo que los jóvenes deben realizar para insertarse<br />
en los itinerarios educativos vigentes en los países<br />
que los acogen. El mismo sistema escolar, por tanto,<br />
debería tener en cuenta su situación y prever, para los<br />
jóvenes inmigrados, caminos específicos formativos<br />
de integración, apropiados a sus necesidades. Será<br />
muy importante, también, tratar de crear en las<br />
aulas un clima de respeto recíproco y diálogo entre<br />
todos los alumnos, sobre la base de los principios<br />
y valores universales que son comunes a todas la<br />
culturas. El empeño de todos docentes, familias y<br />
estudiantes contribuirá, ciertamente, a ayudar a los<br />
jóvenes migrantes a afrontar del mejor modo posible<br />
el desafío de la integración y les dará la posibilidad de<br />
adquirir todo aquello que puede ser provechoso para<br />
su formación humana, cultural y profesional. Esto vale<br />
aún más para los jóvenes refugiados, para los que<br />
habrá que preparar programas adecuados, tanto en<br />
el ámbito escolar como en el del trabajo, con el objeto<br />
de garantizarles una preparación, proporcionándoles<br />
las bases necesarias para una correcta integración<br />
en el nuevo mundo social, cultural y profesional.<br />
La Iglesia considera con especial atención el mundo<br />
de los migrantes y pide a los que han recibido en<br />
sus países de origen una formación cristiana que<br />
hagan fructificar ese patrimonio de fe y de valores<br />
evangélicos para que se pueda dar un testimonio<br />
coherente en los distintos contextos existenciales.<br />
Por esto, precisamente, invito a las comunidades<br />
eclesiales de llegada a que acojan cordialmente a los<br />
jóvenes y a los pequeños con sus padres, tratando<br />
de comprender sus vicisitudes y de favorecer su<br />
integración.<br />
Existe, además, entre los migrantes, como ya lo<br />
escribí en el Mensaje del año pasado, una categoría<br />
que se ha de tener especialmente en cuenta, a<br />
saber, la de los estudiantes de otros países que, por<br />
motivos de estudio se encuentran lejos de casa. Su<br />
número aumenta continuamente; son jóvenes que<br />
necesitan una pastoral específica porque no sólo<br />
son estudiantes, como todos, sino también migrantes<br />
temporales. A menudo se sienten solos, bajo la presión<br />
del estudio, y a veces oprimidos por las dificultades<br />
económicas. La Iglesia, con materna solicitud, los<br />
mira con afecto y procura realizar intervenciones<br />
específicas, pastorales y sociales, que tengan en<br />
cuenta los grandes recursos de su juventud. Es<br />
preciso, igualmente, ayudarles a abrirse al dinamismo<br />
de la dimensión intercultural, enriqueciéndose al<br />
estar en contacto con otros estudiantes de culturas y<br />
religiones distintas. Para los jóvenes cristianos, esta<br />
experiencia de estudio y de formación puede ser un<br />
campo útil para madurar su fe, estimulada a abrirse a<br />
ese universalismo que es elemento constitutivo de la<br />
Iglesia católica.<br />
Queridos jóvenes migrantes: preparaos a construir,<br />
con vuestros coetáneos, una sociedad más justa<br />
y fraterna, cumpliendo escrupulosamente y con<br />
seriedad vuestros deberes con vuestras familias y<br />
con el Estado. Respetad las leyes y no os dejéis llevar<br />
nunca por el odio y la violencia. Procurad, más bien,<br />
ser protagonistas, desde ahora, de un mundo donde<br />
reinen la comprensión y la solidaridad, la justicia y la<br />
paz. En particular a vosotros, jóvenes creyentes, os<br />
pido que aprovechéis el tiempo de vuestros estudios<br />
para crecer en el conocimiento y en el amor a Cristo.<br />
Jesús quiere que seáis verdaderos amigos suyos y<br />
por esto es necesario que cultivéis constantemente<br />
una íntima relación con Él en la oración y en la dócil<br />
escucha de su Palabra. Él quiere que seáis sus<br />
testigos y por eso es preciso que os comprometáis a<br />
vivir con valor el Evangelio, traduciéndolo en gestos<br />
concretos de amor a Dios y de servicio generoso<br />
a los hermanos. La Iglesia también os necesita y<br />
cuenta con vuestra aportación. Podéis desarrollar<br />
una función providencial en el actual contexto de la<br />
evangelización. Originarios de culturas distintas, pero<br />
unidos todos por la pertenencia a la única Iglesia de<br />
Cristo, podéis mostrar que el Evangelio está vivo y<br />
es apropiado para cada situación; es un mensaje<br />
antiguo y siempre nuevo; Palabra de esperanza y<br />
de salvación para los hombres de todas las razas y<br />
culturas, de todas las edades y de todas las épocas.<br />
A María, Madre de toda la humanidad, y a José,<br />
su castísimo esposo, ambos prófugos con Jesús<br />
en Egipto, les encomiendo cada uno de vosotros,<br />
vuestras familias, los que trabajan, de distintos<br />
modos, en vuestro amplio mundo de jóvenes<br />
migrantes, los voluntarios y los agentes de pastoral<br />
que os acompañan con su disponibilidad y su apoyo<br />
de amigos.<br />
Que el Señor esté siempre cerca de vosotros y de<br />
vuestras familias, para que, juntos, podáis superar los<br />
obstáculos y las dificultades materiales y espirituales<br />
que encontráis en vuestro camino. Acompaño estos<br />
votos con una especial Bendición Apostólica para<br />
cada uno de vosotros y para las personas que os<br />
rodean.<br />
S.S. Benedicto XVI<br />
MIGRANTES 5
JUVENTUD Y MIGRACIÓN: REALIDAD Y<br />
PERSPECTIVAS<br />
Por: P. Algacir Munhak – Vicepresidente del Instituto<br />
Católico Chileno de Migración (<strong>INCAMI</strong>)<br />
P. Algacir Munhak c.s<br />
No es por casualidad que el Santo Padre<br />
Benedicto XVI propuso, en el marco de las<br />
celebraciones de la 94° Jornada Mundial del<br />
Emigrante y del Refugiado, el tema Juventud y<br />
Migración. En el mundo actual se estima que hay<br />
cerca de 200 millones de inmigrantes, de los cuales<br />
una gran cantidad son jóvenes: el 20%.<br />
Esta cifra de jóvenes migrantes representa enormes<br />
dificultades para los países expulsores que se ven<br />
incapaces de asegurar condiciones mínimas de<br />
trabajo y dignidad para quienes ingresan al mundo<br />
laboral, ya que terminan perdiendo su capital humano<br />
joven.<br />
Con este tema, la Iglesia quiere dar visibilidad<br />
al particular fenómeno de la juventud migrante y<br />
proponer prácticas pastorales que respondan a sus<br />
necesidades fundamentales.<br />
1. Jóvenes migrantes<br />
El Papa Benedicto XVI, en su mensaje para la<br />
Jornada Mundial del Emigrante y del Refugiado de<br />
este año, relaciona el tema de la globalización con la<br />
necesidad de movilidad que impulsa muchos jóvenes<br />
a emigrar. El fenómeno de la juventud migrante está<br />
compuesto por personas entre los 15 y los 29 años,<br />
la gran mayoría mujeres, de pertenencia étnica y<br />
racial específicas, que viven en su país de origen<br />
situaciones de pobreza y de conflictos socio-políticos<br />
explícitos.<br />
oportunidades. La natural cercanía con el Perú,<br />
Bolivia y Argentina ha favorecido la llegada de<br />
esta categoría de inmigrantes. A éstos se fueron<br />
sumando los ecuatorianos, los colombianos, los<br />
cubanos, caracterizando la inmigración al país como<br />
preponderantemente limítrofe e hispana. De por sí<br />
este fenómeno no es nuevo, tratándose de América<br />
Latina, pues otros países también experimentan<br />
de manera continua el flujo limítrofe de personas<br />
migrantes. Basta considerar el caso de los países<br />
centro-americanos. Lo que puede ser nuevo en esta<br />
región es la manera de enfrentar esta realidad.<br />
Como sabemos, la migración es fruto de la conjunción<br />
entre el factor de expulsión y de atracción. En el<br />
proceso de origen de las migraciones se encuentran<br />
las desigualdades sociales, la precariedad de<br />
empleos, los conflictos políticos, las crisis económicas,<br />
los problemas ambientales y otros (1). La contraparte<br />
aparece como lugar de destino de las migraciones,<br />
generalmente necesitada de mano de obra barata,<br />
pero lugar con mejor perspectiva de empleo e<br />
ingresos.<br />
Entre los años 1999 y 2002 el fenómeno de las<br />
inmigraciones hacia Chile aumentó un 75%.<br />
Actualmente los extranjeros que viven regularmente<br />
en el país suman el 1,6% de la población total (2),<br />
con tendencias a aumentar en los próximos años.<br />
Este número aún no significa que Chile esté viviendo<br />
una oleada de migrantes. En términos de números<br />
relativos, estamos atrás de Argentina (4%), Costa Rica<br />
(8%), Estados Unidos e Unión Europea (10%).(3)<br />
De hecho, son los jóvenes los que más dispuestos<br />
están a migrar. Tienen la fuerza de los ideales y<br />
no temen las dificultades reales, con tal de cumplir<br />
con sus objetivos. Inician el proceso emigratorio<br />
buscando trabajo, oportunidades de estudio y mejores<br />
condiciones de vida para sus familias. Dependiendo<br />
del tiempo de permanencia en el lugar de destino,<br />
inician su propio núcleo familiar, alterando por<br />
completo las perspectivas originarias que motivaran<br />
su migración.<br />
2. Chile y las nuevas migraciones<br />
Desde hace unos años, los jóvenes migrantes<br />
descubrieron a Chile como una nación de<br />
Día del Migrante Santiago 2.007<br />
6<br />
MIGRANTES
En relación a las colectividades, los peruanos son<br />
el grupo más representativo actualmente en el país,<br />
superando a los argentinos. Entre los peruanos<br />
un 65% son mujeres. El grupo de los colombianos<br />
está en ascenso, juntamente con los bolivianos.<br />
Estos últimos, motivados principalmente por las<br />
restricciones impuestas para su ingreso en España,<br />
optan por venir a Chile. La colectividad ecuatoriana se<br />
caracteriza por una fuerte presencia de profesionales<br />
del área de la salud y otros profesionales liberales, ya<br />
que se benefician de un acuerdo bilateral existente<br />
entre Chile y Ecuador.<br />
Considerando los últimos datos del Departamento<br />
de Extranjería del Ministerio del Interior de Chile,<br />
actualmente viven en el país un poco más de 290.000<br />
extranjeros. Tomando en cuenta el recién terminado<br />
proceso de Regularización Migratoria, creemos que<br />
el número de personas que no tienen sus papeles<br />
al día haya bajado significativamente en este año de<br />
2008. Lo que sí advertimos es el continuado ingreso<br />
de personas por pasos fronterizos no habilitados, lo<br />
que vuelve a generar los viejos problemas relativos al<br />
estatus de presencia irregular en el país.<br />
Presento algunos datos que nos fueron facilitados<br />
por el Departamento de Extranjería del Ministerio<br />
del Interior en un cuadro indicativo de las principales<br />
colectividades extranjeras presentes en Chile, a<br />
marzo de 2008:<br />
Total Nacional aproximado: 290.901<br />
Perú: 83.352<br />
Argentina: 59.711<br />
Bolivia: 20.214<br />
Ecuador: 14.688<br />
España: 10.838<br />
Estados Unidos: 10.162<br />
Colombia: 9.162<br />
Brasil: 8.853<br />
Alemania: 6.478<br />
Venezuela: 5.443<br />
Fuente: Departamento de Extranjería y Migración – 2.008<br />
Las migraciones son un fenómeno global que afecta directamente<br />
a los jóvenes. Algunos de ellos optaron por vivir en Chile. <strong>INCAMI</strong><br />
nacional registró un incremento considerable de jóvenes inmigrantes<br />
que solicitaron los servicios ofrecidos por nuestra Fundación durante<br />
el año de 2007. La gran mayoría fueron mujeres jóvenes, 94% peruanas:<br />
58% solteras, 70% con secundaria completa, 8% sin papeles al<br />
día. El 70% de ellas ingresaron a Chile entre los meses de junio y julio;<br />
55% trabajan como asesoras de hogar.<br />
Por medio de la Resolución Ex. N° 36339, del<br />
21.10.07 de la Subsecretaria del Ministerio del<br />
Interior, muchos extranjeros que vivían en Chile en<br />
situación irregular se beneficiaron con esta medida.<br />
Nos sentimos reconocidos por el Gobierno en nuestra<br />
labor y agradecemos por considerar a <strong>INCAMI</strong> como<br />
parte del proceso que ayudó a tantos hermanos<br />
extranjeros a salir de la clandestinidad y la vulneración<br />
de sus derechos. Con el permiso del Departamento<br />
de Extranjería, reportamos otros datos interesantes<br />
sobre los resultados del proceso de regularización<br />
migratoria, alcanzados hasta fines del mes de marzo<br />
de 2008.<br />
PAIS Nº<br />
Perú 34.462<br />
Bolivia 6.028<br />
Colombia 1.957<br />
Ecuador 1.936<br />
Argentina 603<br />
Uruguay 463<br />
Brasil 371<br />
Paraguay 307<br />
Rep. Dominicana 150<br />
Cuba 144<br />
México 122<br />
Venezuela 97<br />
El Salvador 26<br />
Haití 22<br />
Panamá 21<br />
Costa Rica 16<br />
Nicaragua 14<br />
Honduras 13<br />
Guatemala 7<br />
Apátrida 6<br />
Totales 46.765<br />
En este cuadro reportamos los números de personas<br />
que acogieron a la Regularización Migratoria, en algunas<br />
Regiones del País.<br />
Santiago 30.173<br />
Iquique 5.586<br />
El Loa 2.411<br />
Arica 2.108<br />
Antofagasta 2.056<br />
Valparaíso 505<br />
Cordillera 407<br />
Chacabuco 397<br />
Tamarugal 347<br />
Copiapó 340<br />
Maipo 323<br />
Elqui 316<br />
Las primeras seis Regiones corresponden al 91% del<br />
total de personas beneficiadas por el Decreto de Regularización.<br />
Entodas ellas está operativa la Pastoral del Migrante.<br />
MIGRANTES 7
Sobre la inmigración peruana podemos hacer<br />
algunos comentarios, por ser la colectividad más<br />
representativa de extranjeros en el país. Aunque Chile<br />
no sea la primera opción para los peruanos como país<br />
de destino de su emigración, se vuelve más atractivo<br />
por la cercanía y facilidad de ingreso. Muchos de<br />
los que aquí llegan fueron invitados por amigos o<br />
parientes. La mayoría son mujeres, de edad entre<br />
los 15 y los 44 años, con poca presencia de niños.<br />
Tienen mucha dificultad para el arriendo y los que no<br />
trabajan puertas adentro viven hacinados, muchas<br />
veces poniendo en riesgo su salud. Desconocen<br />
casi totalmente el sistema de salud de Chile y sufren<br />
algún tipo de discriminación, principalmente cuando<br />
no están documentados.<br />
4. La juventud migrante y sus<br />
problemas<br />
A nivel mundial hay enormes dificultades de<br />
consensos para la regularización de los flujos<br />
migratorios. Por un lado está la libre circulación de<br />
bienes y capitales y por otro las políticas restrictivas<br />
respecto a la libre circulación de las personas. Varios<br />
países de origen de las migraciones son beneficiados<br />
por las importantes remesas económicas que envían<br />
regularmente los migrantes, pero poco hacen en<br />
relación a la orientación sobre los derechos humanos<br />
de sus migrantes. El tráfico ilícito y la trata de personas<br />
son la peor llaga que afecta en la actualidad los<br />
movimientos migratorios no regulares. La juventud<br />
migrante es la que más se encuentra expuesta a<br />
estos tipos de violación. Con facilidad caen en las<br />
redes internacionales que promueven el trabajo<br />
sexual ilegal y otras formas de esclavitud humana.<br />
Además de estos riesgos que acompañan el proceso<br />
migratorio, en los países receptores la juventud<br />
enfrenta también problemas de adaptación y de<br />
discriminación. La ilegalidad en el ingreso expone a<br />
estas personas a situaciones de explotación laboral<br />
mediante subcontratos. Lejos de sus familias, de su<br />
comunidad y de sus amigos, se confrontan con el<br />
flagelo de la intolerancia, la xenofobia, la soledad y<br />
el racismo.<br />
Joven Peruana tomando curso de Capacitación<br />
en la Casa de Acogida de Santiago.<br />
3. La joven mujer migrante<br />
La feminización de la migración mundial ya no es<br />
más una novedad. Tratándose de Chile, esta realidad<br />
se vuelve aún más visible, por la presencia de tantas<br />
jóvenes mujeres que buscan trabajo, principalmente<br />
como asesoras de hogar. En la casa del Migrante de<br />
Santiago, entre los meses de marzo de 2007 y enero<br />
de 2008 fueron inscritas 4.146 mujeres solicitantes de<br />
trabajo, de las cuales 3.386 consiguieron un contrato.<br />
Las empleadoras registradas en este mismo periodo<br />
fueron 3.490. En relación a las mujeres migrantes,<br />
casi todas tienen una profesión o desarrollaron algún<br />
oficio específico en el país de origen como enfermeras,<br />
cosmetólogas, técnicas en computación, contadoras,<br />
costureras, comerciantes, profesoras, abogadas,<br />
amas de casa y asesoras de hogar. El promedio de<br />
edad de estas mujeres es de 34 años, lo que concreta<br />
el perfil de la mujer migrante joven que llega a Chile.<br />
Más de la mitad de ellas piensa regresar a su país de<br />
origen después de un periodo de trabajo que puede<br />
variar entre los tres y cinco años. En relación a la<br />
nacionalidad, la mayoría son peruanas, seguidas en<br />
menor cantidad por las ecuatorianas, bolivianas y<br />
colombianas. Con sorpresa hemos encontrado en<br />
nuestra base de datos un significativo número de<br />
mujeres chilenas, principalmente venidas desde el<br />
sur hacia la ciudad de Santiago.<br />
5. Jóvenes migrantes y política<br />
migratoria<br />
La formulación de políticas públicas encaminadas<br />
a la gestión de los movimientos migratorios es<br />
una importante tarea del Estado. La Convención<br />
Iberoamericana de Derechos de la Juventud es un<br />
instrumento jurídico de real importancia en este<br />
sentido. Según la Organización Iberoamericana de<br />
la Juventud, la convención es el primer documento<br />
de carácter internacional que dará un soporte jurídico<br />
al conjunto de los gobiernos iberoamericanos para<br />
el desarrollo de políticas públicas dirigidas a la<br />
promoción y al fortalecimiento de las potencialidades<br />
de la juventud de la región.<br />
Los jóvenes migran en busca de mejores condiciones de vida.<br />
8<br />
MIGRANTES
El texto fue firmado por dieciocho de los veintidós<br />
países participantes de la cumbre realizada en la<br />
ciudad española de Badajoz el 11 de octubre del 2007.<br />
Hasta el momento, República Dominicana, Ecuador,<br />
Costa Rica, Honduras y España han ratificado la<br />
Convención. En proceso de ratificación están Bolivia,<br />
Cuba, Guatemala, México, Nicaragua, Panamá,<br />
Paraguay, Perú, Portugal, Uruguay y Venezuela.<br />
Los países que aún no han firmado la Convención<br />
son Argentina, Colombia, El Salvador, Chile y Brasil<br />
(Fuente: OIJ).<br />
La Convención Iberoamericana de Derechos de los<br />
Jóvenes es un acuerdo vinculante que establece el<br />
compromiso de implementar en los Estados miembros<br />
las decisiones de la Convención. El documento<br />
reconoce a los jóvenes como actores del desarrollo<br />
de sus países. Es un soporte jurídico que ayuda a<br />
educar para la interculturalidad y en lo que se refiere<br />
a los derechos de los jóvenes migrantes, es también<br />
una fuente para la definición de una política migratoria<br />
de acuerdo a los tiempos actuales.<br />
En relación al fenómeno de las nuevas migraciones,<br />
es insuficiente restringir los permisos de ingresos o<br />
cerrar las fronteras. La gente va a continuar migrando.<br />
Es un hecho humano. A través de una legislación<br />
consonante a los acuerdos internacionales, la gestión<br />
de los flujos migratorios hará que el fenómeno no se<br />
torne un problema en el futuro; al contrario, traerá<br />
beneficios concretos en términos de capital humano<br />
y económico, necesarios al país. Según fuentes del<br />
propio gobierno, se prospecta para Chile para el año<br />
2040 un descenso poblacional por las bajas tasas<br />
de natalidad. Esta tendencia afectará en este siglo<br />
a muchos otros países que ya están aumentando su<br />
capital humano a través de las jóvenes migraciones.<br />
Es el caso del Canadá. (4)<br />
6. La juventud migrante y la Iglesia<br />
La Iglesia ha siempre acompañado los movimientos<br />
humanos en la historia, con una atención particular<br />
a las necesidades espirituales y sociales de los<br />
migrantes. A través de su Magisterio, invita a los<br />
creyentes, instituciones civiles y de gobierno y a<br />
las personas de buena voluntad a dar respuestas<br />
adecuadas a los desafíos de este fenómeno. Como<br />
signo e instrumento de la unidad del género humano,<br />
la Iglesia se interroga sobre las exigencias de su<br />
presencia en este mundo nuevo en el cual se refleja,<br />
en cierto sentido, su rostro de peregrina en la tierra<br />
(Pastoralis Migratorum Cura).<br />
La V Conferencia General del Episcopado<br />
Latinoamericano y el Caribe realizada en Aparecida,<br />
Brasil, ha impulsado a la Iglesia en dirección a una<br />
nueva acción evangelizadora, llamada a hacer<br />
de todos sus miembros verdaderos discípulos y<br />
misioneros de Jesucristo (Ap. n° 1). Contemplando<br />
los rostros de los que más sufren, la Iglesia identifica<br />
una nueva clase de pobres y excluidos (Ap. n° 65),<br />
destinatarios del amor misericordioso del Padre.<br />
Entre ellos están los migrantes.<br />
Grupo de Estudiantes Internacionales<br />
La presencia visible de jóvenes migrantes en nuestras<br />
celebraciones, demuestra la fuerza renovadora del<br />
Evangelio presente en la cultura y en la vida de estas<br />
personas. Son discípulos de Jesucristo testimoniando<br />
su fe más allá de las fronteras territoriales de su país<br />
de origen, pero haciendo parte de una misma Iglesia<br />
que no conoce fronteras. Exactamente por este<br />
motivo, son también misioneros, anunciadores de la<br />
fe católica a través de sus devociones, fiestas y bailes<br />
religiosos, celebraciones culturales que traen como<br />
motivo la persona de Cristo, la vida de los Santos, las<br />
tradiciones de la Iglesia.<br />
7. Discípulos migrantes y jóvenes<br />
misioneros de Jesucristo<br />
En su mensaje para la 94° Jornada Mundial del<br />
Migrante y el Refugiado, el Santo Padre pide a la<br />
Iglesia que considere con especial atención el mundo<br />
de los migrantes. A los migrantes que han recibido en<br />
sus países de origen una formación cristiana, solicita<br />
que la hagan fructificar pues son portadores de un<br />
largo patrimonio de fe y de valores evangélicos que<br />
deben manifestarse en las comunidades eclesiales a<br />
las que llegan.<br />
El Papa termina su mensaje invitando a los jóvenes<br />
migrantes para que se empeñen concretamente en<br />
el contexto actual de evangelización de la Iglesia. La<br />
Conferencia de Aparecida invita a la Iglesia a vivir<br />
de manera permanente su misión evangelizadora.<br />
Los jóvenes migrantes, en las palabras del Papa,<br />
originarios de culturas distintas, pero unidos todos<br />
por la pertenencia a la única Iglesia de Cristo, pueden<br />
mostrar que el Evangelio está vivo y es apropiado<br />
para cada situación; es un mensaje antiguo y siempre<br />
nuevo; Palabra de esperanza y de salvación para los<br />
hombres de todas las razas y culturas, de todas las<br />
edades y de todas las épocas. La misión continental<br />
de la Iglesia es una oportunidad única para que<br />
los jóvenes migrantes demuestren su auténtico<br />
discipulado y la fuerza misionera de personas que<br />
están realmente comprometidas con la causa de<br />
Jesucristo.<br />
P. Algacir Munhak, cs<br />
Misionero Scalabriniano Vicepresidente de <strong>INCAMI</strong><br />
1) Stefoni Carolina. Migración en Chile. Colección Ideas. Año 6. N° 59.<br />
2.005. p. 4, 2) El Mercurio. 25 de febrero de 2.007, 3) El Mercurio. 23 de<br />
marzo de 2.008, 4) El Mercurio. 25 de febrero de 2.008.<br />
MIGRANTES 9
MISIÓN SCALABRINIANA EN LA<br />
TRIPLE FRONTERA DE BOLIVIA,<br />
CHILE Y PERÚ<br />
Por: P. Ildo Griz c.s.<br />
Padre Ildo Griz c.s.<br />
Hace años los movimientos migratorios<br />
fronterizos, por sus particulares características y<br />
desafíos que representan, han despertado la atención<br />
de la Congregación de los Misioneros de San Carlos<br />
–Scalabrinianos–, convirtiéndose en prioridad<br />
estratégica para su acción pastoral en América Latina.<br />
Sin restar importancia a las situaciones conflictivas<br />
que puedan existir entre países fronterizos, la acción<br />
pastoral de la congregación debe, necesariamente,<br />
enfocarse hacia los inmigrantes, refugiados y<br />
personas en situación de solicitantes de refugio.<br />
Precisamente, por entender que son las personas las<br />
que más sufren el impacto de situaciones políticas<br />
y económicas conflictivas, es que la Pastoral de<br />
Migraciones necesita estar en las fronteras, como<br />
signo e instrumento de integración social entre las<br />
poblaciones vecinas. El deseo es colaborar con<br />
otras instituciones para disminuir el nivel de estos<br />
eventuales conflictos.<br />
Se impone entonces, la necesidad de trabajar en<br />
el desarrollo de un modelo Pastoral de Movilidad<br />
Humana que considere los movimientos migratorios<br />
en las zonas de frontera, desde sus comunidades<br />
de origen, en el tránsito por los complejos fronterizos<br />
y en las comunidades de destino, coordinando sus<br />
acciones entre las distintas realidades.<br />
En esta perspectiva, queremos informar y compartir<br />
con los lectores de la revista “<strong>Migrantes</strong>”, algunos<br />
aspectos importantes de la misión que está realizando<br />
la Iglesia entre las personas en situación de movilidad<br />
humana en la triple frontera de Bolivia, Chile y el<br />
Perú.<br />
pedido, dirigida a los tres superiores provinciales de<br />
la congregación en Sudamérica, especificaba también<br />
otros tres aspectos importantes de la misión:<br />
1) En cuanto al alcance de la misión, la misma debería<br />
desarrollarse en las Tres Fronteras, de Bolivia, Chile y<br />
el Perú. 2) En relación al tiempo de nuestra presencia<br />
en esta región, la carta-solicitud era clara al indicar<br />
que serían tres años. 3) Respecto a los objetivos,<br />
también eran claros y específicos:<br />
• Acompañar a los inmigrantes desde sus<br />
comunidades de origen, en el tránsito y<br />
destino. Acoger y asistir, a su llegada, a las<br />
personas en sus necesidades básicas y<br />
acompañarlas también, en su proceso de<br />
integración a la Iglesia y sociedad local.<br />
• Colaborar con las diócesis de la región en la<br />
formación de equipos diocesanos de pastoral<br />
migratoria y capacitación de sus agentes,<br />
con el fin de dar respuestas concretas a los<br />
desafíos que presentan los movimientos<br />
migratorios fronterizos.<br />
• Aportar en la elaboración de políticas<br />
migratorias tendientes a promover entre los<br />
inmigrantes la regularización de su situación<br />
migratoria y su integración a las comunidades<br />
locales.<br />
A estos objetivos, luego de nuestra llegada, se fueron<br />
agregando otros tres más:<br />
RESPUESTA PASTORAL<br />
10<br />
En el año 2004, con un encuentro de Obispos<br />
bolivianos, chilenos y peruanos cuyas diócesis<br />
comparten los mismos espacios fronterizos, se dio<br />
partida oficial al trabajo pastoral de los Misioneros de<br />
San Carlos en la zona. En ese encuentro participaron<br />
también los tres directores nacionales de Pastoral de<br />
la Movilidad Humana (PMH), quienes con anterioridad<br />
a la fecha ya realizaban visitas a la las diócesis.<br />
Pero, fue en ese año cuando los Obispos decidieron<br />
solicitar la presencia de los Scalabrinianos, a fin de<br />
consolidar el trabajo pastoral con las colectividades<br />
de inmigrantes residentes en esta zona. La carta-<br />
Obispos de los tres países participaron en el encuentro<br />
MIGRANTES
• Atender, siempre que fuera posible, a las<br />
necesidades pastorales de la Iglesia y<br />
comunidades locales.<br />
• Garantizar a la población en situación de<br />
solicitud de asilo en la región, su acceso al<br />
sistema de refugio y protección, actualmente<br />
vigente en Chile y países de la región.<br />
• Monitorear la situación de los derechos<br />
humanos de los inmigrantes en la región,<br />
elevando informes periódicos a las autoridades<br />
e instituciones competentes.<br />
Respecto a la parte operativa de la misión, la<br />
Congregación Scalabriniana dispuso de tres<br />
religiosos, total y plenamente comprometidos con los<br />
objetivos propuestos. Asimismo, contó con el apoyo<br />
incondicional de <strong>INCAMI</strong> –en representación de Chiley<br />
de los directores de las Comisiones Episcopales<br />
de Pastoral de la Movilidad Humana de Bolivia y<br />
Perú. A la labor se sumaron también el ACNHUR,<br />
la Organización Internacional para las Migraciones<br />
(OIM) y la Vicaría de Pastoral Social del Arzobispado<br />
de Santiago, además de otros organismos nacionales<br />
e internacionales.<br />
MOVIMIENTOS MIGRATORIOS<br />
FRONTERIZOS<br />
El movimiento migratorio hacia Chile en esta zona de<br />
fronteras, fundamentalmente tiene su origen en las<br />
diócesis de Arequipa y Puno, en las altas cordilleras.<br />
Los peruanos ingresan por los complejos fronterizos<br />
de Santa Rosa de Lima y Chacalluta, de Tacna y Arica<br />
respectivamente, para finalmente ubicarse, como<br />
lugares de destino, en las diócesis chilenas de Iquique<br />
y Calama y en la arquidiócesis de Antofagasta. Éstas,<br />
además, reciben inmigrantes cuyas comunidades<br />
de origen se ubican en las diócesis del altiplano<br />
boliviano.<br />
LOS INMIGRANTES<br />
Los inmigrantes peruanos son el grupo más numeroso<br />
y está integrado mayoritariamente por mujeres que<br />
emigran solas o antes que sus esposos e hijos. A los<br />
peruanos, les siguen los bolivianos como el segundo<br />
grupo más numeroso entre los recién llegados.<br />
El tercer grupo de inmigrantes provenientes de<br />
países vecinos, está conformado por profesionales<br />
ecuatorianos.<br />
Como un grupo en ascenso, se encuentran los<br />
colombianos, gran parte de ellos en situación de<br />
solicitantes de refugio, lo que guarda estrecha relación<br />
con las situaciones de conflictos armados que vive su<br />
nación.<br />
Por otro lado, esta inmigración viene a suplir algunos<br />
“vacíos” existentes, actualmente, en el mercado laboral<br />
chileno, en el sector de los servicios principalmente,<br />
el cual absorbe, con una cierta facilidad la mano de<br />
obra femenina.<br />
En el caso de los bolivianos, esta mano de obra se<br />
emplea en los terrenos fértiles de El Loa o en los valles<br />
y quebradas del norte, para el cultivo de hortalizas.<br />
En cuanto al volumen, estas corrientes migratorias<br />
no llegan a ser importantes. Se mantiene, más bien,<br />
en sus niveles históricos, como podemos ver en el<br />
nº de Visas Temporarias otorgadas por el Proceso de<br />
Regularización Migratoria, a través de la Resolución<br />
Ex. nº 36339, del 21 de diciembre de 2007. Según<br />
el Departamento de Extranjería del Ministerio del<br />
Interior, los resultados obtenidos en las cuatro<br />
gobernaciones del norte chileno son las siguientes:<br />
Iquique: 5.586 visas, El Loa: 2.411 visas, Arica: 2.108<br />
visas, Antofagasta: 2.056 visas. En su total, 12.161<br />
visas, para una población de aproximadamente 1<br />
millón de chilenos. En este caso, los inmigrantes<br />
estarían representado solo el 1.1 % del total de<br />
chilenos, aproximadamente.<br />
REFUGIADOS<br />
Los primeros casos de solicitantes de refugio en el<br />
norte chileno se dieron a partir del año 2005, gracias<br />
a la importante decisión tomada por el Ministerio del<br />
Interior, en el sentido de descentralizar el sistema<br />
de refugio chileno, anteriormente concentrado en la<br />
capital, Santiago.<br />
La integración entre los diversos países se hace cada vez más necesaria<br />
en el mundo globalizado.<br />
A partir de ese año, con el apoyo del Alto Comisionado<br />
de las Naciones Unidas para los Refugiados<br />
(ACNHUR) y la Vicaría de Pastoral Social del<br />
Arzobispado de Santiago, a los solicitantes de refugio<br />
que buscan protección en Chile, no solo se les permite<br />
tramitar su solicitud en los mismos pasos fronterizos,<br />
sino que también se les posibilita vivir en las ciudades<br />
fronterizas del norte chileno.<br />
MIGRANTES 11
Actualmente, la población solicitante, refugiada y<br />
reasentada en el norte chileno es de aproximadamente<br />
198 personas, distribuidas entre las ciudades de Arica<br />
(50), Iquique (130), Calama (12) y Antofagasta (6).<br />
Estos datos ayudan a desvelar el mito de encontrarnos<br />
frente a una “ola de inmigrantes”. Realmente, la<br />
incidencia de las inmigraciones sobre la población<br />
local no es motivo para mayores preocupaciones.<br />
Lo que sí es preocupante es la situación que viven<br />
los inmigrantes que llegan, permanecen o salen de<br />
esta zona de fronteras. Estas situaciones, en las que<br />
se hallan involucrados los inmigrantes en fronteras,<br />
casi siempre están relacionadas con el ingreso al<br />
país en forma clandestina, el abandono sistemático<br />
de personas, el tráfico infame de hombres y mujeres<br />
migrantes, la desintegración y la disgregación de las<br />
familias, pérdida de identidad y de valores culturales,<br />
los abusos y la explotación laboral, el tráfico de drogas<br />
y, por ende, los hombres y mujeres encarcelados<br />
y privados de su libertad, el hacinamiento en<br />
viviendas precarias, la explotación sexual, la<br />
discriminación, los prejuicios y la marginación.<br />
Logros<br />
Luego de tres años de trabajo, destacamos en forma general, nuestra fidelidad a la misión que nos fue<br />
confiada: “Lo que habíamos oído lo hemos visto en la ciudad de los ejércitos, en la ciudad de nuestro<br />
Dios” (SL 47). Como Scalabrinianos, muchas veces, hemos vivido la experiencia de ser y sentirnos<br />
migrantes con los inmigrantes. En esto también se destaca la capacidad de movilidad de los religiosos.<br />
Nos sentimos acogidos y apoyados por la Iglesia local, ya que hubo también buena aceptación de nuestro<br />
carisma y de la metodología de trabajo utilizada. En fin, nos sentimos Iglesia, una Iglesia Madre y Sin<br />
Fronteras, y estuvimos a su servicio.<br />
Se ha logrado la conformación de una red de atención a los inmigrantes, solicitantes de asilo y refugiados<br />
desde sus diócesis de origen, en tránsito y en las diócesis de destino. Asimismo, hemos trabajado en el<br />
sentido de ampliar y conformar nuevos equipos diocesanos de esta pastoral, con agentes capacitados<br />
para responder a las distintas necesidades.<br />
Creemos, en fin, haber colaborado en la instalación del tema inmigrantes y refugiados, en diversos<br />
organismos de la Iglesia, Gobiernos e instituciones de la Sociedad Civil, como una preocupación a ser<br />
considerada por los mismos, en el momento de elaborar y/o definir políticas públicas de integración<br />
social.<br />
Desafíos<br />
Creemos que como desafíos a ser enfrentados, todavía queda la necesidad de ampliar aún más la pastoral<br />
en las siguientes situaciones de movilidad presentes en el norte, particularmente, en las siguientes áreas:<br />
marinos, camioneros, circenses, aeroportuarios y migrantes internos. Estamos concientes también de<br />
que entre las diócesis fronterizas de Bolivia habría que marcar una presencia más significativa, para<br />
consolidar en forma definitiva, la pastoral con los inmigrantes en esas iglesias particulares. En todo caso,<br />
estamos contentos por haber iniciado este proceso, el cual implica necesariamente el desarrollo de una<br />
mentalidad y una espiritualidad al servicio de los hermanos en situación de movilidad”. Esta parece ser la<br />
clave para una actitud más apropiada ante los inmigrantes, como orientan los Obispos de América Latina<br />
y el Caribe en la V Conferencia General del Episcopado Latinoamericano y del Caribe – Aparecida:<br />
“La Iglesia, como Madre, debe sentirse a sí misma como Iglesia sin fronteras, Iglesia familiar, atenta al<br />
fenómeno creciente de la movilidad humana en su diversos sectores”.<br />
Taller de tejidos en Pozo Almonte<br />
Bajo el nombre “Manos dignas” se conformó un taller<br />
laboral y de microemprendimiento para mujeres<br />
migrantes en la parroquia San José Obrero del poblado<br />
de Pozo Almonte, Diócesis de Iquique.<br />
Con la colaboración de <strong>INCAMI</strong> y de la OIM, y el<br />
apoyo permanente de las Misioneras Eucarísticas de<br />
María Inmaculada, un grupo de mujeres bolivianas,<br />
peruanas y argentinas están tiñendo lanas y tejiendo<br />
chales y telas para la confección de artículos que luego<br />
comercializan.<br />
Según explicó la hermana Noemí Luna, el proyecto<br />
procura trascender la perspectiva asistencialista y<br />
Las mujeres desarrollan en el taller una actividad conocida para ellas, el tejido<br />
construir capacidades de emprendimiento laboral, a través de actividades que son conocidas por las migrantes.<br />
Paralelamente a estas labores, se fomenta el desarrollo integral de las personas participantes, con trabajos de<br />
formación en las áreas espiritual, derechos humanos y laborales, género, familia y sexualidad, etc.<br />
12<br />
MIGRANTES
FAMILIA MIGRANTE<br />
“PONTIFICIO CONSEJO PARA LA PASTORAL DE LOS<br />
EMIGRANTES E ITINERANTES”<br />
El futuro de la humanidad se fragua en la<br />
familia (Familiaris consortio, 86). Por este motivo, el<br />
compromiso de la Iglesia en favor de las personas<br />
migrantes e itinerantes incluye la familia, “lugar y<br />
recurso de la cultura de la vida y del verdadero amor,<br />
y factor de integración de los valores” (cf. Benedicto<br />
XVI, Mensaje para la Jornada del Migrante y el<br />
Refugiado, 2007).<br />
La familia es “la unión de vida y de amor, basada en el<br />
matrimonio entre un hombre y una mujer” y representa<br />
“un bien insustituible para toda la sociedad, que no se<br />
debe confundir ni equiparar a otros tipos de unión”<br />
(Benedicto XVI a los participantes en el Forum de<br />
las Asociaciones de Familias, 16 de mayo, 2008).<br />
La familia es el camino de la Iglesia, y la pastoral que<br />
se dirige a las familias de los migrantes e itinerantes<br />
se propone su integración (que no es asimilación)<br />
y/o cohesión. A veces, mantener unida la familia, o<br />
reunificarla, es un objetivo fundamental, pues sus<br />
miembros podrían llegar a separarse debido a la<br />
distancia o a la desintegración de la familia.<br />
Atención pastoral a las familias<br />
migrantes<br />
Durante la XVIII Sesión Plenaria desarrollada<br />
en Roma entre el 13 y el 15 de mayo de 2008 se<br />
examinaron los elementos necesarios para realizar<br />
un programa eficaz de atención pastoral a la familia<br />
en el contexto de la migración y la itinerancia, y se<br />
afirmó que la última Instrucción de la Santa Sede<br />
sobre la Migración, Erga migrantes caritas Christi<br />
(EMCC), constituye un claro impulso para esta misión<br />
pastoral. Nuestro ministerio debería permitirnos estar<br />
en comunión, ejercer la misión y, lo más importante,<br />
ser pueblo y familia de Dios.<br />
una separación temporal corta o larga, según las<br />
circunstancias. Cuando una persona migrante o<br />
itinerante se encuentra lejos de su patria, y el cónyuge<br />
debe afrontar solo la atención y la educación de los<br />
hijos, esto la lleva, en cierto modo, a descargar en el<br />
otro las responsabilidades de los dos. Esta situación<br />
puede causar tensión en la familia. Y podría también<br />
producirse una ruptura permanente, si el que ha<br />
dejado el hogar establece relaciones esporádicas<br />
con otras personas o una sola relación permanente.<br />
Esto puede menoscabar las relaciones con la familia<br />
que ha permanecido en el país de origen. Se trata,<br />
pues, de un reto para las familias mismas, y también<br />
para los que les prestan asistencia pastoral.<br />
Una espiritualidad de comunión, de unión y de<br />
solidaridad ayudará, decididamente, a los cónyuges<br />
y a la familia, a afrontar mejor los dolores y las penas<br />
de una separación temporal: si esa espiritualidad se<br />
mantiene viva mediante la oración y la comunicación,<br />
ayudará a superar las tentaciones de una separación<br />
permanente.<br />
Muchas familias, o una o más personas de una misma<br />
familia, emigran porque no pueden vivir con dignidad<br />
en su propio país y sociedad. Buscan un trabajo que<br />
los hace desplazar para mantenerse y mantener a sus<br />
familias. En especial, los migrantes indocumentados<br />
e irregulares abandonan su país dejando la propia<br />
familia, con la intención de enviar dinero a casa.<br />
Puesto que todas esas personas constituyen un<br />
recurso para las sociedades donde trabajan, a pesar<br />
de su situación jurídica, es justo que se busque una<br />
solución para su problema de separación temporal o<br />
prolongada de la familia.<br />
Esto se puede hacer, en primer lugar, estimulando la<br />
reunificación de las familias en los países receptores.<br />
La familia de los emigrantes e<br />
itinerantes<br />
Al seguir las directrices para la pastoral contenidas<br />
en el Documento arriba mencionado del Pontificio<br />
Consejo para la Pastoral de los Emigrantes e<br />
Itinerantes, aprobado por el Papa Juan Pablo II el 1º<br />
de mayo, 2004, debemos prestar una mayor atención<br />
a las familias de los migrantes e itinerantes que,<br />
por definición, experimentan con mayor frecuencia<br />
Los migrantes llevan también su fe y sus devociones a los países de destino.<br />
MIGRANTES 13
14<br />
Sin embargo, dichos países están limitando siempre<br />
más este proceso, y la separación de las familias<br />
tendrá consecuencias a largo plazo. Se sugiere,<br />
por tanto, realizar un estudio para ver cuáles son<br />
las consecuencias psico-sociales y calcular si<br />
llegan a contrarrestar los beneficios económicos.<br />
Con este objeto, los participantes en esta Sesión<br />
Plenaria apoyan a las Conferencias Episcopales<br />
que, cumpliendo su función profética, llaman la<br />
atención de los respectivos gobiernos para que<br />
examinen detalladamente y corrijan sus políticas de<br />
inmigración.<br />
La visión, por parte de la opinión pública, de la<br />
integración o la no integración de los migrantes, tiene<br />
un papel importante en la elaboración de las políticas<br />
de migración, especialmente por lo que se refiere a<br />
la posibilidad de recibir o rechazar a los miembros<br />
de las familias. A este respecto, sería importante dar<br />
a conocer los programas de la Iglesia de acogida a<br />
los migrantes, en especial la atención espiritual y<br />
social que presta, así como su trabajo de abogacía<br />
y mediación, especialmente en los principales países<br />
de destino.<br />
Es necesario, igualmente, estudiar y desarrollar<br />
marcos jurídicos mejores - tanto a nivel internacional<br />
como nacional - con el objeto de que las sociedades<br />
puedan ofrecer auténticas posibilidades de integración<br />
(lo que no quiere decir asimilación), de rehabilitación<br />
para los que regresan y de estabilidad social y<br />
cohesión, tanto para los ciudadanos de los países<br />
receptores, como para los itinerantes y migrantes<br />
y sus familias. A este respecto, es necesario crear<br />
una conciencia y recordar que la integración no es un<br />
proceso que va en una sola dirección.<br />
La cuestión de la separación de los miembros de<br />
la familia se podría abordar también, examinando<br />
la raíz misma de las causas de la migración y de la<br />
itinerancia, y el papel que tiene el desarrollo para<br />
encontrar las soluciones. Si las personas no emigran,<br />
o regresan para estar con sus familias, porque<br />
ha aumentado el nivel del desarrollo en el país de<br />
origen, se podría evitar la separación de las familias y<br />
la reunificación podría realizarse en el país de origen.<br />
La Iglesia hace un llamamiento claro y constante, a<br />
nivel nacional e internacional, sobre la necesidad de<br />
examinar las causas fundamentales de la migración,<br />
y el papel que puede desempeñar el desarrollo. En<br />
efecto, las personas deben tener derecho de no<br />
verse obligadas a emigrar para lograr su completo<br />
bienestar. La ayuda para el desarrollo legítimo es, por<br />
tanto, fundamental para lograr la armonía y la paz en<br />
la arena internacional.<br />
La Iglesia tiene un papel importante en la defensa del<br />
“derecho a vivir en una familia unida y en un ambiente<br />
moral favorable al desarrollo de la personalidad<br />
del niño” (Centesimus annus, 47), así como en la<br />
promoción de los numerosos derechos sociales<br />
relacionados con la situación de la familia de los<br />
migrantes y los itinerantes.<br />
Problemas relacionados con la<br />
migración<br />
Existen dos métodos fundamentales que se deben<br />
utilizar en la cura pastoral de las familias migrantes.<br />
El primero consiste en prestar asistencia a la familia<br />
para que mantenga la cohesión, y el segundo, en<br />
hallar las maneras de ayudarle en el proceso de<br />
inculturación (encarnación en las distintas culturas),<br />
que está estrechamente vinculado a la integración.<br />
Esto implica un diálogo que lleve a comprenderse<br />
mutuamente. El diálogo intercultural se realiza entre<br />
los pueblos de diferentes nacionalidades, religiones,<br />
denominaciones o incluso “ritos”.<br />
Aún más, se podrían producir tensiones entre los<br />
cónyuges, o entre los padres y los hijos que parecen<br />
captar la inculturación con mayor rapidez que sus<br />
padres. En general, un método pastoral para ayudar<br />
a la cohesión familiar podría consistir en crear grupos<br />
de apoyo para los padres en las familias donde<br />
no se sabe bien la lengua del país receptor. Esto<br />
garantizaría la comunicación entre padres e hijos y<br />
con otras personas, por ejemplo con los maestros y<br />
asistentes sociales, así como con los agentes de la<br />
pastoral que prestan asistencia a las familias de los<br />
migrantes. De este modo, se facilitaría también su<br />
integración social.<br />
La creciente feminización de la migración<br />
El proceso de inculturación incluye, desde luego,<br />
programas en los que se facilita el aprendizaje del<br />
idioma del país receptor y, al mismo tiempo, se<br />
ayuda a que los hijos del migrante no olviden la<br />
lengua materna. Los programas de los consultorios<br />
matrimoniales en el idioma de origen pueden ayudar<br />
también a la cohesión familiar cuando la tensión es<br />
una amenaza para la estabilidad del núcleo familiar.<br />
Los conflictos entre las generaciones son frecuentes,<br />
especialmente cuando se trata de los usos y<br />
costumbres del país que recibe. Otra fuente de<br />
dificultades es la educación católica de los hijos de los<br />
inmigrantes en los países de acogida, pues implica<br />
gastos para la instrucción que los migrantes ignoran.<br />
MIGRANTES
Todo lo que se haga para ayudar a los migrantes en<br />
el campo de la educación es un válido instrumento<br />
pastoral.<br />
A las mujeres se les debería dar la oportunidad, en<br />
todo caso, de educar a sus hijos personalmente y,<br />
por tanto, la posibilidad de no trabajar si lo desean,<br />
sin sentirse obligadas a buscar un trabajo para aliviar<br />
la situación económica de la familia.<br />
Tráfico humano y migrantes<br />
indocumentados<br />
El tráfico de mujeres y niños, especialmente, y la<br />
situación de inmigrante indocumentado o irregular,<br />
son otros desafíos pastorales a los que la Iglesia<br />
debe responder. Ella puede sostener programas<br />
de protección para las víctimas del tráfico humano,<br />
eventualmente con miras a reintegrarlas en sus<br />
familias, así como proyectos de asistencia para<br />
regularizar las situaciones ilegales de los migrantes.<br />
No podemos dejar de insistir en que los migrantes<br />
son personas que tienen una dignidad humana, sea<br />
cual fuere su nacionalidad, cultura o situación jurídica.<br />
Sus derechos humanos han de ser protegidos.<br />
La integración de los migrantes en el mercado del<br />
trabajo local requiere por lo general un proceso<br />
lento, si no están especializados. Con frecuencia,<br />
los inmigrantes se ven obligados a aceptar toda<br />
clase de trabajos, a veces dejando a sus hijos solos,<br />
u ocupados en un trabajo de menores. La atención<br />
a las condiciones de los recién inmigrados, los<br />
programas de asistencia económica y, especialmente,<br />
los servicios de ayuda para encontrar trabajo, son<br />
también instrumentos poderosos para la pastoral, sin<br />
olvidar lo que es específicamente pastoral.<br />
Durante todo el ciclo de la vida<br />
Las familias, incluso las de los migrantes e<br />
itinerantes, son particularmente sensibles respecto<br />
a dos acontecimientos en el ciclo de la vida: el<br />
nacimiento, y el fin de ésta, la muerte. El matrimonio<br />
está estrechamente relacionado con el primero. Las<br />
nuevas mentalidades y conceptos referentes a la<br />
religión, al matrimonio y a la familia, vinculadas al<br />
relativismo y al subjetivismo, circulan actualmente<br />
y condicionan también el comportamiento de los<br />
migrantes y los itinerantes. Es importante que la<br />
Iglesia dé una respuesta válida a las nuevas ideas,<br />
incluso para proteger las culturas de origen de esas<br />
personas.<br />
Ella debe pronunciarse sin temor, y con un lenguaje<br />
expresivo e imágenes claras, contra todo aquello<br />
que puede suceder en los varios países; explicar con<br />
precisión su postura respecto a las cuestiones de<br />
ética que bombardean a las familias, hoy, y utilizar<br />
palabras acertadas al dirigirse a los medios de<br />
comunicación y a los gobiernos.<br />
Nacimientos<br />
Los estudios sobre las tasas de nacimiento de las<br />
familias migrantes en los países receptores han<br />
mostrado que, aunque en un principio son superiores<br />
a las de la población local, con el tiempo tienden a<br />
adaptarse a las del país de acogida, con la utilización<br />
de los métodos que allí se practican. Así pues, aunque<br />
en algunos países receptores se acostumbren la<br />
contracepción y el aborto, se debería responder a<br />
esto, entre los migrantes e itinerantes, mediante<br />
programas que promuevan la planificación familiar<br />
natural y un reexamen de importantes documentos<br />
conciliares y pontificios como Gaudium et spes y<br />
Humanae vitae.<br />
La pastoral de los hijos que han nacido en un<br />
país distinto al de sus padres está, desde luego,<br />
estrechamente vinculada a la administración del<br />
Sacramento del Bautismo y a la preparación de<br />
las familias. Conocer las costumbres de los países<br />
de origen debe ser algo imprescindible para los<br />
ministros de la pastoral en su asistencia a las familias<br />
de los migrantes e itinerantes. Es bien sabido que la<br />
Iglesia proporciona una cura pastoral específica a<br />
la primera y a la segunda generación de migrantes,<br />
mediante la presencia, si es posible, de capellanes<br />
y agentes de pastoral del mismo idioma y cultura de<br />
los migrantes.<br />
Matrimonio<br />
El respeto por las costumbres del matrimonio<br />
de los recién inmigrados, la asistencia para su<br />
preparación y la ayuda para facilitarles el matrimonio<br />
sacramental, así como el respeto a este Sacramento,<br />
entre los itinerantes, constituye un método pastoral<br />
importante.<br />
Existe una relación intrínseca entre el matrimonio,<br />
la familia y la Eucaristía. El vínculo fiel, exclusivo<br />
e indisoluble que une a Cristo con la Iglesia, y que<br />
tiene su expresión sacramental en la Eucaristía,<br />
corresponde al dato antropológico fundamental<br />
Celebración de Matrimonio de <strong>Migrantes</strong><br />
MIGRANTES 15
según el cual el hombre debe estar unido de modo<br />
definitivo a una sola mujer y viceversa (Sacramentum<br />
caritatis, 28; cf. Benedicto XVI a los participantes en<br />
esta Sesión Plenaria, 15 de mayo, 2008).<br />
La religión, la tradición y la cultura son aspectos<br />
importantes que se han de considerar en los<br />
matrimonios entre personas de distintas religiones y<br />
denominaciones cristianas y de distintos ritos católicos.<br />
Respecto a estas varias formas de matrimonio, Erga<br />
migrantes caritas Christi da directrices precisas.<br />
Es urgente, igualmente, hacer hincapié - en la<br />
catequesis y en la formación teológica - sobre la<br />
necesidad de preparar a los católicos a afrontar los<br />
desafíos que se presentan a las familias implicadas<br />
en la movilidad humana, especialmente en los<br />
matrimonios interreligiosos. Habría que despertar en<br />
las personas una profunda conciencia de su identidad<br />
religiosa, y formarlas en la extraordinaria riqueza y<br />
belleza del concepto de la Iglesia sobre el matrimonio<br />
y la familia.<br />
Las mujeres católicas casadas con no cristianos,<br />
especialmente con musulmanes, deben recibir apoyo<br />
por parte de la comunidad cristiana local, por difícil<br />
que sea, mediante encuentros de grupos de mujeres<br />
casadas, o de algún otro modo, por ejemplo, a través<br />
de contactos con los movimientos eclesiales y las<br />
asociaciones católicas de laicos. El apoyo comunitario<br />
es cada vez más importante en la sociedad actual.<br />
Los migrantes y los itinerantes deben estar preparados<br />
para dar testimonio y proclamar la Buena Nueva, así<br />
como para dar buen ejemplo en ambientes “hostiles”<br />
a la familia. Los jóvenes han de ser formados para<br />
que sean capaces de tomar decisiones a largo plazo<br />
y para toda la vida, como la de formar una familia. Es<br />
preciso, en efecto, prestar una especial atención a la<br />
juventud, porque es el futuro de nuestras familias.<br />
Muerte<br />
En el otro extremo del ciclo de la vida, la experiencia<br />
de la muerte, para las familias de los migrantes,<br />
es siempre difícil. Puede tratarse de la muerte de<br />
seres queridos en el país de origen, o, con menor<br />
frecuencia, de la muerte de algún miembro de la<br />
familia en circunstancias poco comunes. La atención<br />
pastoral tendrá que consistir en consolar en el dolor y<br />
en ayudar a comenzar una nueva etapa de vida a las<br />
viudas o viudos.<br />
los migrantes. La Iglesia puede constituir para ellos<br />
una poderosa protección, siendo su abogada en la<br />
sociedad receptora. Es necesario, sin embargo,<br />
subrayar que la actividad pastoral no debe limitarse<br />
a prestar un servicio social o terapéutico, sino que ha<br />
de asumir una dimensión trascendental, católica.<br />
La cultura de acogida debe comenzar en el punto<br />
de contacto más frecuente, a saber, la parroquia<br />
local, teniendo en cuenta, desde luego, la cura<br />
pastoral específica que prevé el Magisterio y que<br />
está confirmada en la Instrucción Erga migrantes<br />
caritas Christi. Es muy importante la buena acogida<br />
y aceptación de la población local a los migrantes.<br />
Esta actitud ayuda a la pastoral familiar. Teniendo en<br />
cuenta la situación de división familiar, temporal o<br />
permanente, posible o real, y muchos otros problemas<br />
de orden social, cultural, religioso, económico y<br />
jurídico, es un imperativo establecer una pastoral<br />
familiar en las Iglesias de origen y de destino.<br />
Dicha pastoral familiar tiene que realizar un diálogo<br />
con los migrantes e itinerantes para conocerlos y<br />
saber cuál es la vida que llevan y cuáles son sus<br />
condiciones de trabajo. Dicho diálogo revelará su<br />
verdadera situación en el ámbito de la pastoral, sus<br />
necesidades prioritarias y las maneras de dar una<br />
respuesta eficaz a su situación. A través de este<br />
mismo diálogo, será posible elaborar una auténtica<br />
pastoral familiar. Sin él, la respuesta pastoral podría<br />
ser mal dirigida e irrelevante.<br />
El diálogo para reconocer y practicar la reciprocidad<br />
en el campo de la libertad religiosa (véase EMCC<br />
64) es una tarea que exige respeto mutuo, apertura,<br />
persistencia y determinación. Promover y garantizar<br />
esta reciprocidad es una responsabilidad primordial de<br />
las personas que toman las decisiones a nivel nacional<br />
e internacional. Con tal objeto, es indispensable el<br />
diálogo, la solidaridad y la colaboración entre los<br />
Estados. Sería necesario que las Naciones Unidas<br />
actuaran con determinación respecto a este problema,<br />
de acuerdo con la Declaración Universal de Derechos<br />
Humanos.<br />
Métodos pastorales<br />
16<br />
Un programa de pastoral de acogida es quizás el<br />
mejor instrumento que la Iglesia puede utilizar para<br />
las familias en el contexto de la migración. En una<br />
sociedad nueva todo es distinto: el idioma, la cultura y<br />
las costumbres. Sin embargo, hay algo que permanece<br />
constante: la Iglesia, y esto es importante en medio<br />
de los enormes cambios a los que se ven sometidos<br />
Los nacimientos aportan vitalidad a los países de destino<br />
MIGRANTES
El diálogo entre las Iglesias de países/regiones<br />
de origen y destino, que tradicionalmente tienen<br />
“relaciones” - con la participación del Pontificio Consejo<br />
para la Pastoral de los Emigrantes e Itinerantes cuando<br />
es necesario - debería fortalecerse y facilitarse. No<br />
hay que olvidar que cuando los derechos humanos<br />
y laborales de la persona migrante o itinerante son<br />
salvaguardados, esto tiene repercusiones positivas<br />
también en su vida familiar.<br />
Tanto la Iglesia de origen, como la de destino, tienen<br />
que trabajar en comunión y en solidaridad para dar la<br />
posibilidad a los migrantes e itinerantes de ser ellos<br />
mismos evangelizadores. Así, en las Iglesias de los<br />
países de acogida, ellos podrían seguir un programa<br />
especial de catequesis y recibir una formación en la<br />
fe y bíblica. Pero, con relación a este mismo tema,<br />
es importante la formación de agentes de pastoral:<br />
sacerdotes, religiosos/as y laicos, que puedan seguir<br />
efectivamente la vida de los migrantes e itinerantes y<br />
de sus familias. La formación, en este campo debería<br />
estar incluida también en el programa de estudios<br />
de los seminarios mayores y en el de las casas de<br />
formación de las congregaciones religiosas.<br />
Los movimientos eclesiales, los grupos de fieles<br />
laicos y las asociaciones de familias católicas pueden<br />
ser un buen punto de apoyo para las familias de los<br />
migrantes e itinerantes, y asistirlos individualmente<br />
para que mantengan y profundicen su fe, fortaleciendo,<br />
al mismo tiempo, los vínculos familiares.<br />
intervenciones en favor de los padres deben<br />
incluir a los hijos y viceversa. La familia se debe<br />
considerar como una unidad dinámica de intercambio<br />
de comunicación. Este dinamismo requiere<br />
constantemente un cambio de los sistemas de apoyo<br />
a las familias de los migrantes e itinerantes, a medida<br />
que van madurando en el nuevo ambiente que las<br />
rodea.<br />
Aunque la situación de los migrantes e itinerantes sea<br />
distinta según los países, algunos de los elementos<br />
comunes que se describen arriba requieren una acción<br />
para que una verdadera cura pastoral y la acogida<br />
a las familias de los migrantes y de los itinerantes<br />
sea el sello auténtico de la actitud y la praxis de la<br />
Iglesia en favor de las personas implicadas en la<br />
movilidad. “De hecho, al presentar distintos métodos<br />
y propuestas, es necesario que no se pierda la<br />
directriz fundamental común, que es la realización<br />
del plan de Dios, que quiso que el hombre y la mujer<br />
se unieran en una misma carne (cf. Mt. 19,6) en el<br />
matrimonio, y que la familia sea un signo del inmenso<br />
misterio de la relación entre Cristo y la Iglesia (cf. Ef<br />
5,32)” (Mensaje de Juan Pablo II con ocasión de la<br />
Jornada de los <strong>Migrantes</strong> y Refugiados, 1987, n. 6).<br />
La Iglesia católica posee una hermosa enseñanza<br />
sobre el matrimonio y la familia que debemos tratar<br />
de transmitir, siempre más, y de infundir en la vida<br />
de las personas, peregrinos en este mundo nuestro<br />
de hoy.<br />
Por lo que se refiere a los migrantes, se mencionaron<br />
tres situaciones particulares en el mundo: el Oriente<br />
Medio, África y Rumania. En este contexto, se<br />
afirmó que las Conferencias Episcopales Nacionales<br />
podrían elaborar sus propios “Directorios” nacionales,<br />
fundados en la ya mencionada Instrucción EMCC,<br />
publicada por este Pontificio Consejo.<br />
Proposiciones<br />
• que el Pontificio Consejo para la Pastoral de los<br />
Emigrantes e Itinerantes celebre una Sesión Plenaria,<br />
o por lo menos un Simposio, sobre los “matrimonios<br />
mixtos” entre los migrantes y entre los itinerantes;<br />
• que el PCPMI realice periódicamente un<br />
encuentro de los “Consejos” Continentales y<br />
Regionales de las Conferencias Episcopales,<br />
con el objeto de discutir uno o más temas<br />
relacionados con la migración y la itinerancia;<br />
• que se organice, quizás conjuntamente con otros<br />
Dicasterios de la Curia Romana, un Encuentro<br />
sobre las Familias implicadas en la movilidad.<br />
Conclusión<br />
En general, el método pastoral para las familias<br />
implicadas en la movilidad requiere flexibilidad y<br />
atención respecto a todo el núcleo familiar. Las<br />
Muchas de las migrantes llegan solas y dejan sus familias en el país de<br />
origen.<br />
MIGRANTES 17
PASTORAL LA DE MOVILIDAD<br />
HUMANA<br />
Iquique, 18 – 20 de abril de 2008.<br />
18<br />
Al celebrarse el tercer aniversario de presencia<br />
scalabriniana en la triple frontera de Bolivia, Chile y el<br />
Perú, en la diócesis de Iquique se realizó del 18 al 20<br />
de abril de 2008, el Encuentro de Obispos, Directores<br />
Nacionales y Agentes de Pastoral de Movilidad<br />
Humana (PMH) de esta región.<br />
El objetivo de la cita fue evaluar el trabajo realizado<br />
y proyectar nuevas acciones de atención pastoral<br />
a las personas en situación de movilidad por los<br />
pasos fronterizos de la Provincia Eclesiástica del<br />
norte grande chileno y Diócesis limítrofes de Bolivia<br />
y Perú.<br />
El encuentro contó con la participación de Mons.<br />
Marco Antonio Cortez Jara, Obispo de Tacna; Mons.<br />
Cristóbal Bialasik, Obispo de Oruro; y Mons. Marco<br />
Antonio Órdenes Fernández, Obispo de Iquique;<br />
y los superiores provinciales de las provincias<br />
scalabrinianas en Sudamérica: P. Adilson Pedro<br />
Bassin, San Pedro; P. Francisco José Bernardi, San<br />
José; y P. Alfredo José Gonçalves, de la provincia<br />
San Pablo. Así mismo estuvieron presentes el P.<br />
Algacir Munhak, vicepresidente de <strong>INCAMI</strong>, y el<br />
P. Isaldo Antonio Bettin, delegado de PMH de la<br />
Arquidiócesis de Santiago. En representación de los<br />
equipos diocesanos de pastoral, participaron agentes<br />
de Tacna, Oruro, Potosí, Arica, Iquique, Calama y<br />
Antofagasta.<br />
Con un saludo de bienvenida a los participantes, Mons.<br />
Marco Antonio Órdenes remarcó los fundamentos<br />
de la acción pastoral scalabriniana. “Nuestro trabajo<br />
Participantes del Encuentro en la Ciudad de Iquique<br />
adquiere mucho más sentido si nos proponemos<br />
encontrar en el rostro del hermano que sufre, el rostro<br />
mismo del Cristo Sufriente”, dijo.<br />
En seguida y antes de dar inicio al tratamiento de<br />
los temas propuestos, se recordó a los participantes<br />
que el encuentro se realizaba en el marco del<br />
tercer aniversario de la misión asumida por los<br />
Scalabrinianos, la cual estaba concluyendo ya que el<br />
encargo de compromiso y presencia en la zona era<br />
por tres años.<br />
Siguiendo el programa, se procedió a la Evaluación y<br />
Proyección del Trabajo Pastoral con los Inmigrantes<br />
realizado durante el último trienio. Hablaron los<br />
Obispos presentes, los superiores provinciales, el<br />
vicepresidente de <strong>INCAMI</strong> y representantes de las<br />
pastorales diocesanas. Luego de sus exposiciones,<br />
se realizó un trabajo de grupos con la consigna de<br />
remarcar algunos aspectos significativos de la misión,<br />
vividos hasta el momento, como así también, aportar<br />
sugerencias para un trabajo de continuidad, más allá<br />
de la posibilidad de que los Scalabrinianos sigan o<br />
no colaborando con la pastoral de movilidad humana<br />
en esta zona de triple fronteras. Como resultado del<br />
diálogo, se destacó lo siguiente:<br />
1. EN CUANTO AL TRABAJO<br />
REALIZADO SE RESCATA:<br />
• Se ha tratado de responder a los desafíos<br />
y objetivos fundacionales de la misión. De<br />
alguna manera se ha logrado instalar el<br />
tema en instituciones de la Iglesia, sociedad<br />
civil y gobiernos, como una preocupación<br />
más a ser considerada en el momento de<br />
definir programas o políticas de inclusión e<br />
integración local.<br />
• Chile fue favorecido con la presencia y el<br />
acompañamiento en el trabajo de la Pastoral<br />
de Movilidad Humana de Tres Fronteras.<br />
Se fueron creando instancias de acogida,<br />
acompañamiento, asesoría y capacitación.<br />
• Con la presencia de los Misioneros<br />
Scalabrinianos, el trabajo social que ya se<br />
venía haciendo se complementó con la parte<br />
bíblica-espiritual (misiones, celebración de la<br />
eucaristía y catequesis sacramental, talleres<br />
de capacitación).<br />
MIGRANTES
• La presencia, acompañamiento y apoyo de<br />
los obispos es importante para el desarrollo<br />
y crecimiento del trabajo pastoral con los<br />
inmigrantes.<br />
• No se concluyó con la formación de agentes<br />
de pastoral.<br />
• No se desarrolló el acercamiento del<br />
Secretario Nacional de las Iglesias de<br />
origen.<br />
• Ante la propuesta de integración de las tres<br />
fronteras, hubo poca respuesta de acciones,<br />
al cumplimiento de este objetivo para una<br />
pastoral orgánica.<br />
• Con la llegada de los Misioneros<br />
Scalabrinianos se fortaleció una credibilidad<br />
y solidez de la Pastoral de Movilidad Humana<br />
ante los estamentos de gobierno.<br />
• En Perú hubo una comunicación mas fluida<br />
con los responsables del Proyecto Tres<br />
Fronteras.<br />
2. EN CUANTO A LAS<br />
PROYECCIONES SE PROPONE:<br />
• Continuar y ampliar los espacios formativos<br />
para los agentes de pastoral e inmigrantes.<br />
• Seguir realizando las misiones en los distintos<br />
países por lo menos una vez por año<br />
comprometiendo a los agentes de pastoral<br />
de cada Diócesis de Frontera.<br />
• Confeccionar folletos de orientación para las<br />
comunidades de los distintos países,<br />
• Dar una atención especial en los colegios,<br />
universidades, sobre el fenómeno<br />
migratorio.<br />
• Sistematizar el trabajo pastoral en las<br />
fronteras, elaborando una guía que sirva de<br />
referencia para los trabajos posteriores en<br />
las diferentes Diócesis.<br />
• La presencia y compromiso de un sacerdote,<br />
en cada Diócesis, para conformar el Equipo<br />
Regional de Migraciones.<br />
• Solicitar a los obispos de las Diócesis de<br />
origen de los inmigrantes, realizar una misión<br />
pastoral entre sus fieles residentes en las<br />
distintas Diócesis de destino.<br />
• Necesidad de conformar equipos diocesanos<br />
de pastoral de movilidad humana, donde se<br />
defina objetivamente el rol de cada uno y sus<br />
responsabilidades.<br />
• Coordinar trabajo con otras pastorales de<br />
servicio existentes en las diversas Diócesis,<br />
para dar una mejor atención al inmigrante.<br />
• Articular y fortalecer la red entre las<br />
Comisiones Nacionales con las Diócesis de<br />
Frontera y el Proyecto Fronteras Solidarias.<br />
• Socializar y compartir las distintas iniciativas<br />
en beneficio de los emigrantes existentes en la<br />
región Tres Fronteras y países involucrados.<br />
• Desde las Diócesis, enviar sacerdotes,<br />
agentes de pastoral y religiosas al SIMI y<br />
CELAM para formarse y capacitarse en<br />
PMH.<br />
• Elaborar un Programa de Formación y<br />
Capacitación, para agentes de PMH,<br />
comprometido con la misión entre los<br />
inmigrantes en esta zona de triple fronteras,<br />
• Que se repita la presencia scalabriniana<br />
priorizando las Diócesis de origen y tránsito<br />
de los migrantes.<br />
3. PROPUESTAS DE CONTINUIDAD<br />
Frente a la posibilidad de que la Congregación<br />
Scalabriniana se retire de la misión por haberse<br />
cumplido los tres años de su presencia en esta zona de<br />
fronteras, los participantes al encuentro solicitaron la<br />
renovación y actualización del Proyecto por un tiempo<br />
más. Esta solicitud quedó formalmente oficializada a<br />
través de una carta de los Obispos presentes, dirigida<br />
a los superiores provinciales, en la cual consideran<br />
“que la presencia de los Misioneros Scalabrinianos es<br />
indispensable para el éxito y continuidad del Proyecto<br />
(misión) a favor de los inmigrantes”. A su vez, los<br />
superiores provinciales prometieron considerar esta<br />
posibilidad en la próxima Asamblea Interprovincial, a<br />
ser realizada del 4 - 8 de julio de 2008, en la ciudad<br />
de Guaporé – Brasil.<br />
Eucaristía de Clausura del Encuentro<br />
MIGRANTES 19
COMUNICADO DEL ENCUENTRO DE OBISPOS<br />
DE LA PATAGONIA Y SUR DE CHILE<br />
20<br />
Reunidos en Valdivia (Chile), del 1 al 4 de abril,<br />
los Obispos del sur de Chile y de la Patagonia hemos<br />
reflexionado y compartido –en un ambiente de fraternidad<br />
y comunión eclesial- sobre distintos temas que desafían<br />
nuestra acción pastoral.<br />
Hemos recibido el aporte de expertos que nos han<br />
transmitido datos y tendencias de la realidad para<br />
proyectar allí la luz que viene del Evangelio y del<br />
Magisterio de la Iglesia, en especial del Documento de<br />
Aparecida.<br />
1. MIGRACIONES<br />
Nos proponemos desarrollar algunas acciones<br />
pastorales en nuestras Iglesias particulares, según las<br />
posibilidades. Ellas son:<br />
a) Fortalecer las Comisiones de Pastoral Migratoria, en<br />
los lugares donde las hay, y crearlas donde no existen.<br />
b) Establecer un puente entre la Iglesia que recibe al<br />
migrante y aquélla de donde proviene.<br />
c) Motivar y formar al personal consagrado y agentes<br />
laicos de pastoral en el tema de la movilidad humana,<br />
que es un signo de los tiempos.<br />
d) Establecer formas concretas de acogida en cada<br />
Diócesis, como por ejemplo un lugar de culto, una<br />
oficina y personal que atienda a quienes han venido de<br />
otras partes.<br />
e) Favorecer la promoción humana integral de<br />
los migrantes, lo que implica tutelar su dignidad y<br />
sus derechos, el ejercicio de la solidaridad y de la<br />
subsidiariedad, atendiendo por ejemplo, la situación de<br />
los indocumentados.<br />
f) Promover la evangelización de los migrantes que<br />
implica acoger su religiosidad, valorarla y acompañarla,<br />
junto con ofrecer instancias de catequesis, formación y<br />
espiritualidad, para que ellos mismos se conviertan en<br />
discípulos y misioneros de Jesucristo.<br />
g) Animar la inculturación, ayudando a valorar la cultura<br />
del lugar a donde se llega, sin perder su identidad de<br />
origen.<br />
2. PUEBLOS ORIGINARIOS<br />
Hacemos nuestro lo expresado por el Documento de<br />
Aparecida que afirma: “como discípulos y misioneros<br />
al servicio de la vida, acompañamos a los pueblos<br />
indígenas y originarios en el fortalecimiento de sus<br />
identidades y organizaciones propias, la defensa del<br />
territorio, una educación intercultural bilingüe y la<br />
defensa de sus derechos” (n. 549), todo ello realizado<br />
en un clima de diálogo, paz y justicia.<br />
Por eso, nuestras Pastorales tendrán como objetivos<br />
importantes la valoración, la integración, el respeto y la<br />
participación de estos pueblos.<br />
Hemos compartido con alegría y esperanza el regalo de<br />
Dios de la beatificación de Ceferino Namuncurá Burgos,<br />
joven mapuche, ocurrida el 11 de noviembre de 2007,<br />
y que consideramos como un don y desafío para la<br />
evangelización de nuestros pueblos.<br />
3. PATAGONIA: RESERVA DE VIDA DEL<br />
PLANETA<br />
Consideramos a la Patagonia como una unidad territorial<br />
de reserva de vida en el planeta, con una maravillosa<br />
biodiversidad.<br />
Es un don de Dios que todas las personas de buena<br />
voluntad, especialmente los creyentes, debemos<br />
amar y proteger, con sabiduría y solidaridad, para la<br />
sustentabilidad de la presente y futuras generaciones.<br />
En nuestro fraterno compartir nos ha preocupado la<br />
existencia de proyectos (mineros, hidroeléctricos,<br />
nucleares, acuícolas, forestales…) que buscan instalarse<br />
en nuestras tierras y que podrían dañar gravemente el<br />
equilibrio ecológico y la paz social.<br />
La ética medioambiental nos plantea evitar toda<br />
explotación indiscriminada de la naturaleza, sobre todo<br />
del agua, hoy tan indispensable y escasa para la vida<br />
humana.<br />
A su vez, exige elaborar una política energética<br />
sustentable en función del bien común.<br />
Llamamos a:<br />
a) participar muy activamente de las informaciones,<br />
propuestas de proyectos, discernimiento y toma de<br />
decisiones que se relacionan con la Patagonia;<br />
b) acrecentar la solidaridad con los más pobres<br />
e indefensos, promoviendo el servicio y la<br />
sustentabilidad;<br />
c) valorar la justicia y la paz, sobre todo en el trabajo y<br />
la convivencia social;<br />
d) promover la cultura de la vida y la austeridad con los<br />
bienes, aún en los detalles cotidianos.<br />
4. 30º ANIVERSARIO DEL TRATADO DE PAZ<br />
Y AMISTAD ENTRE CHILE Y ARGENTINA<br />
El 29 de noviembre de 2009 se cumplirán 30 años de<br />
la firma del Tratado de Paz y Amistad entre Argentina y<br />
Chile. Este Tratado nace de la mediación del Papa Juan<br />
Pablo II en la persona del Cardenal Antonio Samoré.<br />
A partir de este acontecimiento se proponen algunas<br />
iniciativas:<br />
a) Reactivar la promesa hecha por los Episcopados de<br />
Chile y Argentina de “levantar un monumento a la Virgen<br />
de la Paz en el límite de Monte Aymond, que proclame…<br />
la victoria de la paz” (del Documento firmado en Punta<br />
Arenas, Chile, el 4 de abril de 1987, refrendado por el<br />
Papa Juan Pablo II).<br />
b) Fomentar y favorecer iniciativas y encuentros<br />
binacionales que trabajen y eduquen a favor de la<br />
cultura de la paz.<br />
c) Solicitar a las Conferencias Episcopales de Chile y<br />
Argentina el tratamiento de este tema.<br />
Los Obispos de la Patagonia y sur de Chile damos<br />
gracias a Dios por vivir y servir en esta tierra tan fecunda<br />
en historia, bienes de la naturaleza, personas, pueblos<br />
y culturas.<br />
Ponemos en las manos de la Santísima Virgen María,<br />
Madre de nuestros pueblos, todos los propósitos,<br />
desafíos y compromisos, frutos del trabajo y la oración<br />
de este encuentro.<br />
Valdivia (Chile), 4 de abril de 2008<br />
MIGRANTES
Noticias de las Diócesis<br />
Obispado de Iquique<br />
Día a día la Pastoral de <strong>Migrantes</strong> del Obispado de<br />
Iquique se preocupa de atender a las personas que<br />
tocan su puerta en solicitud de algún apoyo.<br />
-<br />
-<br />
En relación al proceso de regularización<br />
migratoria en la Primera Región, el total de<br />
regularizados fue de 5.586 extranjeros, de los<br />
cuales alrededor de 1.600 fueron tramitados<br />
directamente por nuestra delegación.<br />
Entre los días 18 y 20 de Abril, se desarrolló<br />
en nuestra Diócesis el Encuentro de Obispos,<br />
directores nacionales y agentes pastorales de<br />
movilidad humana de las fronteras de Bolivia,<br />
Chile y Perú.<br />
Obispado de Valparaíso<br />
CONVENIO CON UNIVERSIDAD ANDRES BELLO<br />
Un convenio de mutuo apoyo y colaboración estableció<br />
el Departamento de Movilidad Humana del Obispado<br />
de Valparaíso con la carrera de Trabajo Social, Sede<br />
Viña del Mar, de la Universidad Andrés Bello.<br />
Según informó el director del DMH, Padre Pedro<br />
Nahuelcura Vargas, el convenio permitirá efectuar<br />
trabajos en conjunto en el área investigativa y<br />
formativa del fenómeno de Movilidad Humana en la<br />
región y el país.<br />
Además, se gestionarán pasantías, diplomados,<br />
perfeccionamientos y gestión a favor de los<br />
migrantes.<br />
PASTORAL DEL MAR<br />
-<br />
-<br />
-<br />
-<br />
-<br />
La atención de ciudadanos colombianos<br />
es un caso especial, puesto que vienen<br />
en situación de refugio. A ellos los hemos<br />
contactado con compatriotas suyos para que<br />
se sientan más acogidos en nuestro país. La<br />
Pastoral se ha esforzado en ayudarles en su<br />
búsqueda de un trabajo digno de acuerdo a<br />
sus capacidades.<br />
Se ha empezado un ciclo de charlas, en<br />
coordinación con la Defensoría Penal, de<br />
información a los migrantes en relación a la<br />
ley penal y a la ley de Migraciones chilenas.<br />
El domingo 25 de mayo se celebró el día de la<br />
Cultura con una muestra gastronómica de los<br />
países de Perú y Colombia, a la que fueron<br />
invitados los cónsules y otras autoridades.<br />
Destacamos el acompañamiento permanente<br />
de los Misioneros Scalabrinianos en nuestras<br />
diversas actividades, quienes realizan una<br />
Eucaristía mensual para los migrantes y<br />
acompañan y asesoran a la Hermandad del<br />
Señor de Los Milagros.<br />
Nuestras proyecciones para este año<br />
están relacionadas con la habilitación e<br />
implementación de la Casa de Acogida para<br />
que las mujeres migrantes que se hospeden<br />
allí puedan tener una atención integral. Esto<br />
es que mientras dure su estadía puedan<br />
durante los fines de semana realizar talleres<br />
productivos, con el fin de tener una mejor<br />
inserción laboral dentro de la sociedad.<br />
Con mucha alegría se encuentra trabajando un<br />
equipo de Pastoral del Mar en el puerto de Ventanas,<br />
a donde llegan naves en su mayoría del Asia y Centro<br />
América.<br />
El equipo es encabezado por Carlos López, un<br />
trabajador portuario con vasta experiencia en pastoral<br />
de adultos, que asumió el acompañamiento de sus<br />
pares y de los marinos que lleguen a este puerto. El<br />
catequista es asistido por el Padre Pedro Nahuelcura,<br />
quien hace las veces de capellán del puerto.<br />
CASA DE ACOGIDA<br />
La Casa de Acogida sigue cumpliendo un rol de<br />
servicio comunitario y de derivación de personas<br />
en situación de migración nacional y extranjeras.<br />
Durante lo que va del año, ha funcionado a capacidad<br />
máxima. Ubicada en calle Lafontaine 360 del cerro<br />
El Litre, es coordinada por la señora Cecilia<br />
Arancibia.<br />
Grupo de migrantes en la Casa de Acogida de Iquique<br />
MIGRANTES 21
d) Etapa actual, que presenta características<br />
especiales por cuanto quienes retornan son<br />
ciudadanos argentinos y chilenos con vínculos<br />
familiares con aquéllos que migraron en la primera<br />
y segunda etapa antes mencionada. Asimismo, se<br />
está produciendo una lenta pero significativamente<br />
inmigración de ciudadanos peruanos, argentinos,<br />
bolivianos y también ecuatorianos, en busca de<br />
mejores oportunidades, especialmente en el plano<br />
laboral.<br />
P. Pedro Nahuelcura con un grupo de <strong>Migrantes</strong> en Valaparaiso.<br />
CIDAPMI<br />
El Centro Integral Diocesano de Atención y Apoyo al<br />
Migrante (CIDAPMI), funciona en dependencias de la<br />
Parroquia del Inmaculado Corazón de María, ubicada<br />
en Pocuro 834.<br />
En el centro se presta atención psicosocial por parte<br />
de profesionales voluntarios que asumiendo su<br />
compromiso con la Iglesia velan por los migrantes. Es<br />
así como se cuenta con la colaboración permanente<br />
del psicólogo Cristian Campos; de los abogados<br />
Alejandro Chaparro y Gonzalo Le Dantec; y del<br />
asistente social Rodrigo Azócar.<br />
22<br />
Obispado de Temuco<br />
La Pastoral de Migraciones del Obispado de Temuco<br />
nació en el año 1975 como una forma de dar<br />
respuestas a las fuertes corrientes de emigración de<br />
este periodo.<br />
Durante estos 33 años, la Pastoral ha acompañado<br />
a las personas en movilidad, especialmente a los<br />
más pobres. Asimismo, ha acompañado las diversas<br />
etapas migratorias que se han dado en la Araucanía,<br />
intentando responder con creatividad y entusiasmo a<br />
cada una.<br />
a) Una primera etapa, a mediados de los años<br />
70, caracterizada por un importante número<br />
de familias que debió salir al exilio por razones<br />
políticas y otras familias que los hicieron producto<br />
del empobrecimiento que vivieron por la falta de<br />
trabajo y oportunidades en Chile.<br />
b) Una segunda etapa, a comienzos de los años 80,<br />
en que se produce una fuerte corriente emigratoria<br />
hacia la República Argentina, de familias afectadas<br />
gravemente por la crisis económica vivida por<br />
nuestro país en esa época.<br />
c) Una tercera etapa, situada a fines de la década<br />
del 80 y comienzos de los años 90, caracterizada<br />
por el retorno de los exiliados políticos al país y a<br />
la región en particular.<br />
Sra. Carmen Barra, apoyó por más de 30 años el trabajo con los<br />
<strong>Migrantes</strong> en la Araucanía.<br />
En todos estos años y acompañando de cerca cada<br />
una de las etapas, estuvo la Sra. Carmen Barra,<br />
quien después de este largo periodo, dejó el cargo<br />
en el Obispado de Temuco.<br />
Carmen ofreció sus servicios a los y las migrantes<br />
con entusiasmo y dedicación, por que lo ha sido sin<br />
lugar a dudas una referencia importante tanto en<br />
Chile como en Argentina. Esta es buena ocasión<br />
para manifestarle la gratitud y reconocimiento por<br />
su distinguido trabajo. El Señor en su infinita bondad<br />
sabrá recompensarle por su gran entrega.<br />
Obispado de Copiapó<br />
ATENCIÓN PASTORAL<br />
Con un encuentro informativo acerca de la regularización<br />
de los migrantes, la Diócesis de Copiapó inició<br />
formalmente la Pastoral de la Movilidad Humana en<br />
enero de 2008.<br />
La actividad –dirigida a un grupo de migrantes-, fue<br />
desarrollada por el representante de <strong>INCAMI</strong> Nacional<br />
Flávio Antunes, quien orientó a los presentes en los<br />
trámites migratorios. Por su parte, el Obispo Gaspar<br />
Quintana les saludó y reiteró el interés de la Diócesis<br />
en brindarles un acompañamiento pastoral.<br />
MIGRANTES
Dando continuidad al trabajo, el Obispado de<br />
Copiapó envió a la Hna. Clara García a Santiago para<br />
una capacitación, en tanto que el coordinador del Departamento<br />
de Acción Social, Jorge Alfaro, visitó la<br />
Casa del Migrante de Santiago para conocer la experiencia.<br />
Entre sus actividades, además, cuenta la coordinación<br />
con la Asociación de Damas Peruanas, presidida<br />
por la esposa del Embajador del Perú en Chile, la<br />
señora Inés Althaus de Otero, e integrada por más<br />
de 150 señoras, quienes ayudan a niños de escasos<br />
recursos sin distinción de nacionalidad. Por las<br />
gestiones realizadas para la facilitación de la obra,<br />
las damas de la asociación agradecieron por este<br />
medio a los agentes pastorales Ana Cristina Luza<br />
y Luis Navarro Rebolledo, quien es también el jefe<br />
del Departamento de Extranjería y Migraciones de<br />
Concepción.<br />
Arquidiócesis de Antofagasta<br />
La Pastoral de <strong>Migrantes</strong> de Antofagasta cuenta con<br />
una Oficina de Acogida donde se informa y asesora<br />
a los inmigrantes en diversas materias. Funciona<br />
también una Bolsa de Trabajo.<br />
En este momento está adquiriendo una propiedad para<br />
continuar con una Casa de Acogida implementada<br />
por la Congregación de las Hermanas del Buen<br />
Pastor, desde marzo a noviembre de 2007.<br />
Grupo folclórico Chileno ofrece esquinazo a <strong>Migrantes</strong> en Copiapó<br />
EUCARISTÍA<br />
En mayo se realizó la primera Eucaristía con los migrantes,<br />
momento celebrativo donde como un signo<br />
de confraternidad y acogida un grupo folclórico de<br />
Copiapó les dedicó un baile de cueca a los migrantes.<br />
Luego de la eucaristía y de las presentaciones<br />
culturales, se compartió un rico almuerzo con comida<br />
peruana.<br />
Arquidiócesis de Concepción<br />
Si bien la Pastoral se orienta siempre hacia la<br />
Parroquia donde residen los inmigrantes, con el<br />
fin de conservar su identidad religiosa y cultural, y<br />
para favorecer el encuentro entre ellos, cada primer<br />
domingo de mes se celebra la Misa de los Pueblos.<br />
Además prepara y celebra la Jornada Mundial de los<br />
Emigrantes e Itinerantes; organiza actividades con<br />
motivo de Navidad y Pascua, así como de las distintas<br />
Fiestas Patrias y Patronales de las colectividades<br />
presentes en la región.<br />
En lo referente a la capacitación profesional, las<br />
Hermanas del Buen Pastor en el 2006, y 2007 han<br />
organizado cursos de amasandería y repostería,<br />
confección, peluquería y cuidado de sí mismo con<br />
excelentes resultados.<br />
La Pastoral Migratoria de la Arquidiócesis de<br />
Concepción -a cargo del padre Ramón Caroca-,<br />
durante este último año continuó con las labores de<br />
asesoría jurídica, apoyo pastoral a los migrantes y<br />
organización del Día del Migrante.<br />
Celebración del Día del Migrante en Concepción<br />
Celebración con los <strong>Migrantes</strong> en Antofagasta<br />
MIGRANTES<br />
23
Obispado de Santiago<br />
MIGRANTES DE SANTIAGO CAMINANDO Y<br />
HACIENDO CAMINO…<br />
La parroquia personal para los fieles latinoamericanos<br />
ha realizado diversas actividades en este último<br />
tiempo, lo que ha contribuido a la realidad eclesial de<br />
la Arquidiócesis de Santiago. Contemporáneamente,<br />
estas acciones se insertan dentro del desarrollo de<br />
las diversas dimensiones migratorias, existentes con<br />
más fuerza en estos últimos tiempos; de este modo<br />
se puede atender con más ímpetu misionero las diversas<br />
necesidades de las diferentes colectividades<br />
de la región.<br />
¡Peregrinando a Los Andes!<br />
Una de las actividades que marcó profundamente a la<br />
parroquia latinoamericana y por ende, al Departamento<br />
de Movilidad Humana, fue una peregrinación realizada<br />
al Santuario de Los Andes, el día 18 de mayo del<br />
año en curso, en el sector de Auco, en donde se encuentran<br />
los restos de la primera santa chilena: Santa<br />
Teresita de Los Andes. Sin duda, el hecho de peregrinar<br />
hacia un santuario, lleva también a la comunidad a<br />
cuestionarse: ¿para qué peregrina el peregrino? Y en<br />
este caso, ¿cómo ser peregrino en tierra extranjera?<br />
Son interrogantes que surgen al contemplar el “compartir”<br />
de las diversas culturas en una misma mesa, la<br />
variedad de experiencias y expresiones, en donde se<br />
observa la práctica de la fe a partir de la experiencia<br />
latinoamericana.<br />
diversas colectividades. Esta actividad, coordinada<br />
por la Hna. Nilsa Stolf, quien despierta, promueve y<br />
anima una cultura latinoamericana de hermanos.<br />
¡Vivir es celebrar!<br />
Celebrar y acompañar a las diversas colectividades<br />
que aquí se congregan, es de vital importancia. La<br />
experiencia de fe en la vida de los migrantes, transita<br />
necesariamente por la celebración de sus propias<br />
raíces: la religiosidad popular, la devoción mariana, la<br />
cultura, la música, las fiestas patrias de cada país, etc.<br />
En este sentido, la parroquia latinoamericana trabaja<br />
incansablemente para que esta comunidad sea casa<br />
de acogida para aquellos que buscan a Jesucristo.<br />
Para concretizar esta dimensión de la comunidad, se<br />
les ofrece a los hermanos migrantes, la participación<br />
en diferentes grupos, tales como: catequesis, grupo<br />
de adoración, liturgia, coro latinoamericano, volley,<br />
bailes folklóricos, etc.; todo esto bajo el acompañamiento<br />
de la comunidad de los padres Scalabrinianos<br />
en la persona del pbro. Isaldo Bettin (padre Beto).<br />
Finalmente, la parroquia Latinoamericana cuenta con<br />
un equipo de religiosos y religiosas de varias congregaciones<br />
y muchos laicos que ayuda y compromete a<br />
la comunidad en el seguimiento de Cristo Migrante de<br />
una forma más simple y más alegre, por medio de las<br />
miradas de aquellos que son acompañados, nuestros<br />
hermanos migrantes que hacen historia.<br />
Ad hoc con el documento…<br />
Otra actividad realizada durante este tiempo, ha sido<br />
el estudio del documento de Aparecida. Todos los últimos<br />
domingos de cada mes, en un momento de la<br />
Eucaristía, se ha llevado a cabo la presentación de<br />
uno de los temas de los documentos publicados por<br />
INPAS, con la finalidad de crear conciencia de la misión<br />
eclesial de América Latina: ¡en tierra extranjera,<br />
ser discípulos y misioneros hoy!<br />
Acompañamiento integral:<br />
Conjuntamente con las experiencias pastorales<br />
en la Parroquia Latinoamericana todos los sábados y<br />
domingos, se realizan charlas de desarrollo personal<br />
y grupal en la Casa del Migrante; al mismo tiempo,<br />
se ofrece la posibilidad de orientación jurídico- legal<br />
y atención psicológica individual, sin costo, a los que<br />
necesitan.<br />
Jóvenes <strong>Migrantes</strong> en la Peregrinación al<br />
Santuario de Santa Teresita de los Andes<br />
Guatita llena, corazón contento…<br />
24<br />
Cabe destacar en esta acción la riqueza que se vive<br />
cada domingo con la primera comida en comunidad,<br />
la celebración eucarística a las 13 horas, seguida de<br />
la segunda, la celebración de la fiesta con la posibilidad<br />
de comer alimentos típicos preparados por las<br />
Baile Típico Colombiano en la Parroquia Latinoamericana de Santiago<br />
MIGRANTES
Noticias de <strong>INCAMI</strong> Nacional<br />
El 18 de diciembre de cada año se celebra el Día<br />
Internacional del Migrante, fecha significativa para<br />
toda la comunidad y las instituciones que prestan<br />
servicio a ese segmento de la población.<br />
En el marco de esta celebración se recibió en el<br />
Centro Integrado de Atención al Migrante (CIAMI) la<br />
visita de la Ministra del Servicio Nacional de la Mujer<br />
(SERNAM), Laura Albornoz.<br />
En una atmósfera de sencillez y confianza, se produjo<br />
el encuentro entre la Ministra y las mujeres migrantes<br />
que acuden al CIAMI en busca de trabajo, orientación<br />
y acogida.<br />
Ministra del SERNAM visita CIAMI<br />
El evento contó con la participación de la Jefa del<br />
Departamento de Extranjería y Migración, Carmen<br />
Gloria Daneri; la representante del Instituto de la<br />
Mujer, Carmen Torres; el Vicepresidente del Instituto<br />
Católico Chileno de Migración, P. Algacir Muhnak; el<br />
Director del CIAMI, P. Isaldo Antonio Bettin; diversos<br />
funcionarios del SERNAM y varios medios de<br />
comunicación.<br />
P. Algacir le da la bienvenida a la Ministra Laura Albornoz del SERNAM<br />
La Ministra Albornoz manifestó su alegría por la<br />
presencia de las mujeres migrantes, ya que reconoce<br />
la importancia de su trabajo y contribución al país.<br />
Con atención escuchó los testimonios e inquietudes<br />
de las mujeres, su experiencia como asesoras del<br />
hogar. Así también, supo de las situaciones de abuso y<br />
discriminacion a las cuales se ven expuestas algunas<br />
de ellas, provocadas en gran medida por la falta de<br />
información y los altos niveles de vulnerabilidad.<br />
Después de escuchar la experiencia de las mujeres,<br />
destacó la importancia de trabajar en forma conjunta<br />
y de formar redes que protejan los derechos de las<br />
mujeres. Enfatizó que los niveles de vulnerabilidad a<br />
los que se ven expuestas, no sólo son producto de su<br />
condición de migrante, sino por el hecho de ser mujeres.<br />
La Ministra compartió con un grupo de migrantes en el CIAMI<br />
Encuentro de la Pastoral del Turismo en Valparaíso<br />
El 21 de Diciembre se cumplieron 6 años desde la promulgación del Código Ético Mundial para el Turismo.<br />
En esta fecha significativa el Departamento de Movilidad Humana y su área de Pastoral del Turismo, organizó<br />
la Jornada de Pastoral de Turismo. El evento se llevó a cabo el día jueves 20 de diciembre y contó con la<br />
participación de destacados expositores.<br />
Hugo Alcamán Riffo, magíster en Turismo y asesor del Departamento de Movilidad Humana en el área de<br />
Turismo, expuso el tema “El Código Ético Mundial del Turismo y sus aportes a nuestra situación actual”; el<br />
P. Pedro Nahuelcura Vargas, experto en Migraciones y director del Departamento de Movilidad Humana del<br />
Obispado de Valparaíso, se refirió a “El Flujo de Movilidad Turística en la región, desafíos pastorales Hoy”; en<br />
tanto que Flávio Antunes, magíster en Ética Social y Desarrollo Humano, y representante de <strong>INCAMI</strong>, trató “El<br />
Turismo en el Magisterio de la Iglesia”.<br />
En dicha ocasión se lanzó en la Diócesis de Valparaíso la Campaña: “Cuidemos al turista, es mi hermano es<br />
mi amigo”; una valiosa iniciativa que puede servir de ejemplo a otras Diócesis del país.<br />
MIGRANTES<br />
25
Participación en el Proceso de<br />
Regularización Migratoria<br />
El 22 de octubre de 2007 se dio a conocer a través<br />
de los medios informativos la resolución de la<br />
Subsecretaria del Interior que puso a disposición<br />
un proceso de regularización para ciudadanos<br />
extranjeros de diversos países de Latinoamérica.<br />
Esta noticia generó un gran impacto y expectación,<br />
no sólo entre la comunidad migrante sino entre las<br />
instituciones relacionadas con el tema migratorio.<br />
Con el propósito de hacer explícita y extensiva esta<br />
información se convocó al <strong>INCAMI</strong> (Instituto Cátolico<br />
Chileno de Migración) y al CIAMI (Centro Integrado<br />
de Atención al Migrante), por lo cual participaron<br />
activamente de este proceso a lo largo de todo el<br />
país.<br />
Se estimaba que aproximadamente 20.000<br />
extranjeros podrían solicitar este beneficio, número<br />
que fue superado con creces, según los datos del<br />
Departamento de Extranjería y Migración, ya que<br />
más de 80.000 migrantes se acogieron al proceso.<br />
entre ellas eventos que promueven el intercambio<br />
cultural. Allí se realizó en noviembre del año<br />
pasado el 1er Concurso Internacional de Marinera.<br />
El evento contó con la participación del Sr. Hugo Otero,<br />
embajador de Perú en Chile; el P. Félix Fernández,<br />
anfitrión del recinto; la Hna. Fresia Martínez,<br />
directora de la casa de acogida; y el P. Isaldo Antonio<br />
Bettin, Párroco de la Parroquia Latinoamericana.<br />
En el mensaje inaugural, el P. Bettin enfatizó<br />
la importancia de promover y acompañar al<br />
migrante en todas sus dimensiones. “A través de<br />
la danza se pretende no sólo expresar la riqueza<br />
cultural, sino promover un sentido de integración<br />
entre la comunidad peruana y chilena, lo que es<br />
uno de los objetivos centrales del evento”, dijo.<br />
Añadió que la integración se logró por medio del<br />
intercambio musical y artístico, la conformación de<br />
parejas mixtas de baile, la apreciación del arte tanto<br />
chileno como peruano a través de la cueca y la<br />
marinera; todo lo cual generó un ambiente de alegre<br />
convivencia.<br />
Los ganadores no sólo recibieron su trofeo y premios<br />
especiales, sino la posibilidad de pasar a la gran final<br />
del Concurso Nacional de Marinera que se realizó<br />
el día 27 de enero del 2008 en la ciudad de Trujillo,<br />
Perú.<br />
<strong>INCAMI</strong> apoyó el proceso de regularización en todo el país<br />
Concurso de Marinera<br />
La Marinera es uno de los bailes más representativos<br />
del folclore peruano. En su proceso de<br />
configuración se identifican una mezcla de ritmos<br />
hispano, amerindio y africano; incluso algunas<br />
regiones presentan variaciones del baile, tal es<br />
el caso de la marinera limeña, norteña y puneña.<br />
26<br />
La parroquia Italiana y Latinoamericana Nuestra<br />
Señora de Pompeya se ha constituido en un punto<br />
de encuentro para varias de las comunidades<br />
migrantes, siendo la comunidad peruana una de<br />
las más numerosas. A través de la misma y con<br />
el auspicio y colaboración de <strong>INCAMI</strong> (Instituto<br />
Católico Chileno de Migración) y de la Fundación<br />
Scalabrini se han generado varias actividades,<br />
1er. Concurso de Marinera el Baile Nacional del Perú en Santiago<br />
MIGRANTES
Celebración de las Américas<br />
“Deseo vivamente que se me construya aquí un<br />
templo, para en él mostrar y prodigar todo mi amor,<br />
compasión, auxilio y defensa a todos los moradores<br />
de esta tierra y a todos los demás amadores míos<br />
que invoquen y en Mí confíen”.<br />
El Mensaje de Nuestra Señora de Guadalupe a San<br />
Juan Diego, expresa un signo de acogida y protección;<br />
es por ello que peregrinar hacia los templos y<br />
santuarios se ha constituido en una devoción muy<br />
difundida entre todos los fieles marianos.<br />
La comunidad latinoamericana residente en Santiago<br />
ha manifestado su devoción mariana participando de<br />
la celebración Eucarística realizada el pasado 9 de<br />
diciembre de 2007 en el Santuario de Maipú.<br />
Minutos antes del mediodía fueron llegando los<br />
buses que partieron de la Parroquia Latinoamericana<br />
“Nuestra Señora de Pompeya” al Santuario dedicado<br />
a la Virgen del Carmen. Significativa fue la presencia<br />
de las distintas colectividades: niños vestidos con<br />
trajes típicos e imágenes de las distintas advocaciones<br />
de la Virgen María participaron de esta celebración,<br />
presidida por el P. Carlos Cox, rector del Santuario.<br />
Curso de Formación para las<br />
religiosas de Antofagasta y<br />
Copiapó<br />
Como parte del proceso de fortalecimiento y<br />
expansión de la Pastoral de la Movilidad Humana en<br />
el país, <strong>INCAMI</strong> organizó en abril pasado un Curso de<br />
Capacitación para Agentes de Pastoral.<br />
En este curso participaron 3 religiosas. Dos de ellas, las<br />
Hermanas Ingrid Rojas y la Hermana Jenny Guevara,<br />
estuvieron en representación de la Arquidiócesis de<br />
Antofagasta, mientras que por la Diócesis de Copiapó<br />
participó la Hermana Clara Rojas.<br />
Las religiosas tuvieron la oportunidad de compartir<br />
los diversos servicios que se ofrecen en el Centro<br />
Integrado de Atención al Migrante de Santiago<br />
(alojamiento, comedor, inserción laboral, asistencia<br />
social y jurídica, escuela para asesoras de hogar).<br />
Además, en <strong>INCAMI</strong> se capacitaron en los aspectos<br />
relacionados con los trámites de documentación, los<br />
derechos y deberes de los migrantes y los trámites<br />
migratorios para la solicitud de visas, entre otros.<br />
Con un mensaje muy emotivo, el P. Cox manifestó su<br />
alegría por esta “Celebración de las Américas”, que<br />
reúne en torno a la religiosidad mariana que se vive<br />
en los distintos países de América Latina.<br />
La integración fue uno de los temas centrales de su<br />
mensaje. “Ser promotor y partícipe de este proceso<br />
constituye una invitación permanente para toda la<br />
comunidad que reside en Santiago de Chile”, señaló.<br />
Enfatizó la importancia de reconocer en este tiempo de<br />
Adviento la presencia de Jesús que sale al Encuentro<br />
del hombre, sobre todo del hombre sencillo, que sabe<br />
reconocerlo en la cotidianidad de la vida.<br />
Representantes de las colectividades participaron<br />
de la oración universal, elevando una plegaria por<br />
las distintas necesidades que se viven en nuestra<br />
región. Ofrecieron en el altar signos representativos<br />
de su cultura y la gratitud manifestada por el proceso<br />
de regularización migratoria que se realizó en todo<br />
el país.<br />
Religiosas del Norte de Chile participaron en el Curso de Asesoras del<br />
Hogar en el CIAMI de Santiago<br />
Grupo de <strong>Migrantes</strong> en Santiago de Chile<br />
MIGRANTES<br />
Religiosas del Norte de Chile con los funcionarios de<br />
<strong>INCAMI</strong> y el CIAMI<br />
27
Traslado de misionera a Japón<br />
La Hermana Ximena Lazcano, de las Misioneras<br />
Redentoristas, quien por muchos años colaboró<br />
en el servicio con los migrantes (en el <strong>INCAMI</strong>, en<br />
el Departamento Arquidiocesano de Pastoral de<br />
Migraciones y en la Parroquia Latinoamericana),<br />
atendiendo a una solicitud de su Congregación alzó<br />
vuelo y desde enero está trabajando en Japón.<br />
Después de un periodo de aprendizaje del idioma y<br />
conocimiento de la realidad, se dedicará, entre otras<br />
cosas, al acompañamiento pastoral de los migrantes<br />
latinos que se encuentran en Japón. Queremos<br />
en esta oportunidad agradecerle todo su apoyo, y<br />
desearle mucho éxito en su nueva misión.<br />
Hna. Ximena Lazcano en Japón donde ha sido enviada como Misionera.<br />
PASTORAL PARA LOS ESTUDIANTES INTERNACIONALES<br />
“Existe, además, entre los migrantes, como ya lo escribí en el mensaje del año pasado, una categoría que se ha<br />
de tener especialmente en cuenta, a saber, la de los estudiantes de otros países que, por motivos de estudio<br />
se encuentran lejos de casa. Su número aumenta continuamente; son jóvenes que necesitan una pastoral<br />
específica porque no sólo son estudiantes, como todos, sino también migrantes temporales. A menudo se<br />
sienten solos, bajo la presión del estudio, y a veces oprimidos por las dificultades económicas”...<br />
Con estas palabras, el Santo Padre Benedicto XVI se refiere a los estudiantes internacionales en su mensaje<br />
a la Jornada Mundial del Emigrante y el Refugiado el 13 de enero de 2008.<br />
Aquí en Chile se está desarrollando de a poco esta Pastoral específica, totalmente preocupada de la acogida<br />
y acompañamiento de estos alumnos. Existen ya algunas acciones organizadas en la Pontificia Universidad<br />
Católica y algunas otras universidades de modo aislado, pero, <strong>INCAMI</strong> en conjunto con la Vicaria de la Pastoral<br />
Universitaria, está programando un gran encuentro a nivel de toda la región metropolitana.<br />
Este consistirá en una especie de feria intercultural donde los alumnos de otros países podrán compartir con<br />
los demás estudiantes, chilenos y extranjeros, algo de su cultura y comidas típicas.<br />
Mayores informaciones, escribir a Julio Gulin a: jgulin@uc.cl<br />
Aumenta cada vez más el número de estudiantes internacionales.<br />
Grupo de estudiantes universitarios de la Pontificia Universidad<br />
Católica.<br />
28<br />
MIGRANTES
COLECTA NACIONAL 2007<br />
<strong>INCAMI</strong> agradece la generosidad de las Comunidades<br />
Católicas a lo largo de todo Chile<br />
En esta edición de la <strong>Revista</strong> <strong>Migrantes</strong> hemos<br />
querido agradecer a la comunidad católica<br />
nacional porque sin su ayuda durante la colecta,<br />
nuestra misión de acompañamiento al migrante extranjero<br />
y chileno, no sería posible. Por eso creemos<br />
que es importante que conozca hacia dónde son<br />
dirigidos los aportes y cuán significativos han<br />
sido para los migrantes. Que Dios el Señor les<br />
recompense su generosidad y apoyo.<br />
Esta ocasión es oportuna para destacar también que<br />
Chile se está encaminando a una política de inclusión<br />
de los migrantes y eso es una buena noticia, más<br />
cuando en este momento Europa adopta una política<br />
totalmente contraria, de rechazo y de expulsión, lo<br />
que obviamente no podemos aceptar.<br />
A nosotros, como Iglesia, la postura del gobierno de<br />
Chile nos alienta y nos anima a seguir contribuyendo<br />
con nuestro trabajo. Será de gran beneficio para<br />
nuestra sociedad la buena acogida de estas personas.<br />
Hay que recordar que un migrante no busca solamente<br />
un trabajo en el lugar de destino, sino también<br />
un hogar y una comunidad, una oportunidad que<br />
la Iglesia puede y debe ayudarle a encontrar.<br />
El Instituto Católico Chileno de Migración (<strong>INCAMI</strong>) de<br />
la Conferencia Episcopal de Chile aborda su misión<br />
por medio de las comisiones de Pastoral Migratoria,<br />
Apostolado del Mar y de la Aviación Civil (aeroportuarios),<br />
Pastoral del Turismo, Pastoral de los Itinerantes,<br />
Pastoral de la Carretera, Pastoral Circense y<br />
Pastoral de Estudiantes Internacionales.<br />
<strong>INCAMI</strong> participó activamente en el Proceso de<br />
Regularización Migratoria<br />
Por la Colecta Nacional del Día del Migrante 2007,<br />
<strong>INCAMI</strong> recibió $18.952.219. Este aporte fue de gran<br />
utilidad, ya que significó el 61% del ingreso anual del<br />
organismo, sin contar los recursos obtenidos a través<br />
de otros medios para la ejecución de algunos proyectos<br />
específicos.<br />
La contribución se destinó a las actividades pastorales<br />
y de promoción humana integral que realiza<br />
<strong>INCAMI</strong> para responder a las necesidades de los<br />
distintos grupos, así como también a los gastos de<br />
oficina y honorarios.<br />
Durante el 2007, las principales actividades realizadas<br />
por <strong>INCAMI</strong> fueron:<br />
- En coordinación con los centros diocesanos del<br />
país (Arica, Iquique, Valparaíso, Santiago, Temuco,<br />
Antofagasta, Calama y Copiapó), los organismos gubernamentales<br />
y asociaciones de migrantes, ha promovido<br />
los siguientes servicios para los migrantes y<br />
personas en movilidad.<br />
Comedor para <strong>Migrantes</strong> en la Casa de Acogida de Santiago<br />
Estos servicios se resumen en alojamiento en hogares<br />
de tránsito, comedores populares, asistencia<br />
social y psicológica, atención médica, capacitación<br />
laboral, promoción de la cultura propia de las comunidades<br />
de migrantes, bolsas de trabajo, asesoría<br />
jurídica y laboral, legalización de documentos, orientación<br />
y apoyo en el proceso de regularización migratoria,<br />
acompañamiento y promoción de comunidades<br />
y asociaciones de inmigrantes, redes de solidaridad<br />
entre los migrantes y organizaciones sociales vinculadas<br />
al fenómeno de la movilidad de las personas.<br />
MIGRANTES 29
- El 2007 el gobierno impulsó un proceso de Regularización<br />
Migratoria, y acogiendo la solicitud hecha<br />
por el Departamento de Extranjería del Ministerio<br />
del Interior, los Centros de Atención al Migrante se<br />
convirtieron en un importante centro de difusión de<br />
los beneficios del proceso.<br />
- Las distintas comisiones intensificaron las actividades<br />
de formación y capacitación de agentes de pastoral<br />
de la movilidad humana. Promovieron la conformación<br />
de nuevas comunidades de migrantes,<br />
circenses y personas en movilidad, animándolas a<br />
integrarse a la vida pastoral de las parroquias y a la<br />
sociedad local. Además, se motivó a las parroquias,<br />
capellanías y comunidades para que brindaran acogida<br />
a los migrantes y personas en movilidad.<br />
- La Pastoral Circense se ha focalizado en formación<br />
cristiana de las familias circenses, las celebraciones<br />
religiosas y la preparación para los sacramentos.<br />
Durante el año pasado un grupo de personas recibió<br />
los sacramentos de iniciación cristiana luego de<br />
la preparación específica por parte de catequistas<br />
de los propios circos. Monseñor Enrique Troncoso<br />
–presidente de <strong>INCAMI</strong>-, dio la bendición a la apertura<br />
de la temporada del Circo 2008.<br />
- <strong>INCAMI</strong> organizó el 1er. Congreso Nacional para<br />
la Pastoral de los Estudiantes Internacionales.<br />
- Participó en la organización del 1er Seminario<br />
Sudamericano “<strong>Migrantes</strong> e Itinerantes”, convocado<br />
por la Sección de Movilidad Humana del CELAM,<br />
desarrollado en Santiago.<br />
- Al significativo aporte realizado en el Proceso de Regularización<br />
Migratoria, se suman los constantes talleres,<br />
seminarios y campañas de información sobre regularización<br />
migratoria con grupos de inmigrantes y la<br />
información a los emigrados chilenos.<br />
- <strong>INCAMI</strong> presta servicio con las correspondencias e<br />
informaciones que se envían a las comunidades de<br />
chilenos residentes en exterior y el permanente servicio<br />
de legalización de documentos, en coordinación<br />
pastoral con las Conferencias Episcopales de destino<br />
de los emigrados chilenos.<br />
- Coordinó las actividades pastorales y de asistencia,<br />
promoción social y cultural entre las Diócesis con mayor<br />
presencia de migrantes con las Conferencias Episcopales<br />
de origen de los inmigrantes y de destino de<br />
los emigrados chilenos, con organismos internacionales,<br />
con los organismos gubernamentales vinculados a<br />
la temática migratoria, municipalidades, representaciones<br />
diplomáticas y consulares de los países de origen<br />
de la inmigración, Universidades, Colegios y Centros<br />
de Estudio, con organizaciones de la sociedad civil,<br />
eclesiales y organizaciones de migrantes.<br />
- Apoya las organizaciones de exonerados políticos<br />
chilenos que se encuentran en distintas partes del<br />
mundo.<br />
- <strong>INCAMI</strong> fue centro de acopio de donaciones para<br />
Chaitén, en coordinación con Caritas Chile, y emitió<br />
un donativo para las víctimas.<br />
- <strong>INCAMI</strong> participó activamente en la 1ª Asamblea<br />
Eclesial convocada por la Conferencia Episcopal de<br />
Chile.<br />
- En el área de difusión organizó la grabación de<br />
la Misa del Día del Migrante para TVN y publicó<br />
además la <strong>Revista</strong> <strong>Migrantes</strong>, que entre sus artículos<br />
incluyó uno del Subsecretario del Interior, Felipe<br />
Harboe, sobre la evolución de la Migración en<br />
Chile.<br />
- Elaboró materiales informativos sobre temas vinculados<br />
a la migración para boletines diocesanos,<br />
diarios, programas televisivos, páginas web, el Boletín<br />
<strong>INCAMI</strong> Informa y otros medios de comunicación.<br />
- La página web de <strong>INCAMI</strong> ha sido un importante<br />
vehículo de sensibilización sobre el fenómeno de la<br />
movilidad humana y de comunicación con las comunidades<br />
de emigrados chilenos y personas en<br />
movilidad.<br />
30<br />
- Con el apoyo de la OIM se editaron dos trípticos<br />
informativos sobre los derechos de los migrantes y<br />
sobre la trata y tráfico de personas, publicó la 1ª<br />
Edición de una Cartilla para Asesoras de Hogar.<br />
Con el apoyo de <strong>INCAMI</strong> la migrantes se capacitan<br />
para conseguir un mejor trabajo<br />
MIGRANTES