El padre de Mel, Hutton Gibson trabajaba en la Central de Ferrocarriles de Nueva York. Su trabajo llevaba poco dinero a casa, lo que obligaba a la familia a buscar recursos por cualquier medio. Aún así, los niños crecieron felices en el campo a unas 200 millas de la Gran Manzana. Fue criado en Australia después que la familia llegara a Melbourne en noviembre de 1968. Se instalaron poco tiempo después a las afueras de Sydney. Sus padres le matricularon en el St. Leo’s Christian Brothers School. Pocos años después sus padres lo cambiaron a un colegio público, el Asquith High, en donde se inicia en teatro. Durante esta época soñaba Mel en convertirse en periodista, aunque resulta ser un estudiante mediocre, y apenas logra aprobar el bachillerato. Su primer sueldo lo ganó como empaquetador en un supermercado, pero pronto cambió este trabajo por el de cocinero en un restaurante de comida rápida. Un día de 1974, Mel acompañó a una de sus hermanas, que fue a matricularse a clases de interpretación en el Instituto de Arte Dramático de Sydney. Mary, sin decirle nada, inscribió a su hermano Mel, quien realizó las pruebas de ingreso, quedó seleccionado junto a otros diecinueve aspirantes, entre los cuales irónicamente no quedó su hermana. Sin embargo, no le fue bien durante el primer año en el Instituto. Dedicó el verano de 1975 a trabajar como peón en una fabrica de jugos de naranja. Sus biógrafos comentan que ante la perspectiva de tener que continuar en un trabajo poco gratificante para Mel, decidió tomarse más en serio sus estudios. Comenzó a despuntar en el Instituto, dándose a conocer como un “roba escenas” en las obras de teatro de la escuela, al destacar más que los protagonistas. Su actitud respecto a su carrera cambió; realmente le gustó lo que hacía y se dedicó con entusiasmo a esta. Probó el teatro experimental, y consiguió uno que otro papel en producciones de la televisión australiana. <strong>Abril</strong> <strong>2012</strong> 10 | Columna W8 En 1977, poco después de graduarse, obtuvo su primera oportunidad en el cine. El productor Phil Avalon contactó a Mel y a su amigo Steve Bisley, ofreciéndoles papeles en la película de bajo presupuesto “Summer City”. George Miller, un joven director descubrió a Mel y lo invitó como protagonista de su primer largometraje, “Mad Max”, el cual obtuvo un éxito internacional sin precedentes. El nombre de Gibson, comenzó a sonar en el mercado cinematográfico. Un año después recibió el Premio al mejor actor y el Premio al intérprete revelación del Instituto Cinematográfico Australiano. Mel Gibson no proviene de una familia de contactos en el mundo de la actuación, ni tuvo un “pase especial” a Hollywood. Vio que la actuación podría ser su oportunidad para salir ade- lante, y puso su corazón y su empeño para conseguirlo. ¿Cuántos “Mel Gibson’s” existen, listos para desarrollarse, independientemente de la edad y los antecedentes? El gran toque de “suerte” fue quizá el registro que Mary, su hermana, hizo en las clases de interpretación, que le ayudó a identificar su pasión por la actuación. Sin embargo, cada uno de nosotros podemos mejorar nuestra “suerte”, o hacer un giro radical, al tomar un curso, leer un libro, hacer pruebas, y en general, al intentar nuevos retos y/o oficios. Todo esto puede convertirse, con el paso del tiempo, en la oportunidad que esperamos, nuestro propio “pase especial” * La Columna W8, es una colaboración de www.victordelrosal.com Su primer sueldo lo ganó como empaquetador en un supermercado, pero pronto cambió este trabajo por el de cocinero en un restaurante de comida rápida.
Comenzó a despuntar en el Instituto, dándose a conocer como un “roba escenas” en las obras de teatro de la escuela, al destacar más que los protagonistas. <strong>Valores</strong> | 11 <strong>Abril</strong> <strong>2012</strong>