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mensajes selectos tomo 3 - Loud-cry.com

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El carácter de Dios interpretado por sus obras.-*<br />

La naturaleza es un poder, pero el Dios de la naturaleza es ilimitado en poder. Sus obras<br />

manifiestan su carácter. Los que lo juzgan por las obras de sus manos, y no en base a las<br />

suposiciones de los grandes hombres, verán su presencia en todas las cosas. Contemplan su<br />

sonrisa en el alegre brillo del sol, y su amor y cuidado por el hombre en los ricos campos del<br />

otoño. Aun los adornos de la tierra, <strong>com</strong>o se observa en la hierba de vivo verdor, en las<br />

hermosas flores de todo matiz y en los altos y variados árboles del bosque, testifican acerca<br />

del cuidado tierno y paternal de nuestro Dios, y de su deseo de hacer felices a sus hijos.<br />

El poder del gran Dios se ejerce en favor de los que lo temen. Escuchad las palabras del<br />

profeta: "¿No has sabido, no has oído que el Dios eterno es Jehová, el cual creó los confines<br />

de la tierra No desfallece, ni se fatiga con cansancio, y su entendimiento no hay quien lo<br />

alcance. El da esfuerzo al cansado, y multiplica las fuerzas al que no tiene ningunas. Los<br />

muchachos se fatigan y se 355 cansan, los jóvenes flaquean y caen; pero los que esperan a<br />

Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas <strong>com</strong>o las águilas; correrán, y no se cansarán;<br />

caminarán, y no se fatigarán" (Isa. 40:28-31).<br />

En la Palabra de Dios se originan muchas preguntas que ni los más profundos eruditos podrán<br />

jamás contestar. Se llama la atención a estos temas para mostrarnos cuántas cosas hay, aun<br />

entre las <strong>com</strong>unes de todos los días, que las mentes finitas, con toda su jactanciosa sabiduría,<br />

nunca podrán entender plenamente.<br />

La ciencia es una ayuda para <strong>com</strong>prender a Dios.-<br />

Todos los sistemas de filosofía ideados por el hombre han conducido a la confusión y a la<br />

vergüenza cuando no se ha reconocido y honrado a Dios. Perder la fe en Dios es terrible. La<br />

prosperidad no puede ser una gran bendición para las naciones y los individuos, una vez que<br />

se pierde la fe en su Palabra. Nada es realmente grande sino sólo lo que es eterno en sus<br />

tendencias. La verdad, la justicia, la misericordia, la pureza y el amor de Dios son<br />

imperecederos. Cuando los hombres poseen estas cualidades, son puestos en estrecha<br />

relación con Dios, y son candidatos para la más alta exaltación a la cual pueda aspirar la raza<br />

humana. No prestarán atención a la alabanza, y se sobrepondrán al desaliento, al cansancio, al<br />

ataque de las lenguas y a la lucha por la supremacía.<br />

Aquel cuya alma está llena del Espíritu de Dios aprenderá la lección de una fe confiada. Toma<br />

la Palabra escrita <strong>com</strong>o su consejero y guía, y hallará en la ciencia una ayuda para <strong>com</strong>prender<br />

a Dios; pero no llegará a exaltarse hasta que, en su ciego engaño, se convierta en un necio con<br />

respecto a sus ideas de Dios (Signs of the Times, 13 de marzo de 1884).<br />

Los preceptos y principios de la religión son los primeros pasos en la adquisición del<br />

conocimiento, y constituyen el fundamento mismo de la verdadera educación. 356 El<br />

conocimiento y la ciencia deben ser vitalizados por el Espíritu de Dios a fin de que sirvan a<br />

los propósitos más nobles. Solamente el cristiano puede hacer el debido uso del<br />

conocimiento. La ciencia, para que pueda ser <strong>com</strong>pletamente apreciada, debe ser vista desde<br />

un punto de vista religioso. Entonces todos adorarán al Dios de la ciencia (Manuscrito 30,<br />

1896).<br />

Dios <strong>com</strong>o diseñador y creador<br />

Tenemos la necesidad de estar más en audiencia con Dios. Necesitamos guardar nuestros<br />

pensamientos. Vivimos, indudablemente, en medio de los peligros de los últimos días.<br />

Debemos andar delante de Dios con mansedumbre, con profunda humildad; porque<br />

solamente los tales serán exaltados.

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