ArbolAMA No.4 Vol.1 abril 2013 [Baja Resolución] - Asociación ...
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Publicación Oficial de la Asociación Mexicana de Arboricultura, A.C.<br />
no.4 <strong>abril</strong> <strong>2013</strong><br />
Revista<br />
Volumen 1 No. 4 Abril <strong>2013</strong><br />
<strong>ArbolAMA</strong><br />
A rbol AMA<br />
Asociación Mexicana de Arboricultura,A.C.<br />
IV Foro Nacional de Arboricultura<br />
y Dasonomía Urbana<br />
Informe del estado general del<br />
Árbol de Santa María del Tule<br />
Los Sabinos de SanPablo Güilá<br />
Método Hamburgo para la<br />
Poda de los Árboles<br />
1
Asociación Mexicana de Arboricultura<br />
Para quien AMA los árboles<br />
¿Quiénes Somos<br />
Somos más de 100 socios y simpatizantes que nos dedicamos desde febrero de 1999 a aprender y difundir la cultura del<br />
árbol urbano en México.<br />
¿Qué hacemos<br />
Las actividades que ofrecemos a nuestros asociados y al público en general son:<br />
• Participación en eventos como el Día del Árbol o el Foro Nacional de Arboricultura y Dasonomía Urbana.<br />
• Publicación de la revista <strong>ArbolAMA</strong>, boletines informativos, diversos folletos sobre el cuidado de los árboles.<br />
• Organización de exámenes de certificación como arborista avalado por la ISA (International Society of<br />
Arboriculture).<br />
• Organización de eventos y actividades que permiten a los arboristas certificados obtener Unidades de<br />
Educación Continua (CEUs).<br />
• Cursos y talleres de capacitación, días de campo para trabajar por los árboles, conferencias y foros de discusión.<br />
• Otros eventos tales como la Competencia Nacional de Poda de Árboles.<br />
• Difusión y promoción de temas de interés en arboricultura en nuestros sitios de la web, twitter y facebook.<br />
Siete razones para ser socio de la AMA<br />
1. Participación activa en la vida de la organización:<br />
• a través de pláticas relacionadas con la arboricultura.<br />
• foros de discusión en los sitios web, twitter y facebook de la asociación.<br />
• con voz y voto en las Asambleas.<br />
• con derecho de elegir y ser elegido para los diversos órganos de dirección.<br />
2. Credencial de membresía que lo identifica como socio de la AMA.<br />
3. Difusión de tu página personal o de negocio en nuestra revista y en nuestra página de internet.<br />
4. Actualización en las problemáticas más actuales en materia de arboricultura:<br />
información científica, pedagógica o simplemente lúdica acerca del árbol y su entorno urbano.<br />
5. Posibilidad de acreditarse en Poda de Árboles Urbanos y formar parte del padrón de podadores acreditados de la AMA.<br />
6. Participación activa con artículos y comentarios en nuestro sitio en la Web.<br />
7. Acceder a la revista <strong>ArbolAMA</strong>, publicación oficial de la Asociación.<br />
Únete hoy mismo<br />
www.arboricultura.org.mx<br />
facebook.com/arboricultura<br />
twitter.com/<strong>ArbolAMA</strong>
no.4 <strong>abril</strong> <strong>2013</strong><br />
Editorial<br />
<strong>ArbolAMA</strong><br />
Estimados socios y amigos de la AMA, estamos de<br />
acuerdo cuando se afirma que la comunicación<br />
social establece relaciones entre las personas…<br />
formando el tejido social sobre el que se construye la vida<br />
de la comunidad. En nuestro caso esa comunidad es la<br />
Asociación Mexicana de Arboricultura.<br />
Han pasado ya tres años desde nuestro último número de<br />
<strong>ArbolAMA</strong>, diferentes razones han impedido que salga<br />
a la luz con mayor regularidad y por ello pedimos nos<br />
disculpen. Ahora publicamos el número 4 porque nos<br />
anima dar soporte informativo a nuestro próximo evento:<br />
el IV Foro Nacional de Arboricultura y Dasonomía<br />
Urbana en Oaxaca.<br />
Hemos visto importante el tema de los árboles<br />
monumentales como lema del Foro porque la legislación<br />
actual en México carece de un<br />
documento de protección legal<br />
en materia ambiental, rector de<br />
las políticas de gestión de árboles<br />
monumentales majestuosos y<br />
notables, los cuales constituyen<br />
una parte primordial de nuestro<br />
patrimonio natural y cultural;<br />
vemos que muchos de ellos están<br />
abandonados a su suerte.<br />
En este número de <strong>ArbolAMA</strong><br />
están incluidos principalmente<br />
dos documentos de mucha<br />
importancia dentro de la temática<br />
de la arboricultura en la actualidad:<br />
el primero es el informe de Gerard<br />
Passola acerca de la condición de<br />
nuestro árbol más emblemático, el<br />
Árbol del Tule. Este documento es<br />
básico para conocer y entender la<br />
situación actual de este magnífico<br />
ejemplar.<br />
El otro artículo es la traducción del Método Hamburgo<br />
para la Poda de los Árboles, material valiosísimo que nos<br />
permite conocer los últimos avances en esta práctica, la<br />
más común con los árboles de la ciudad.<br />
En realidad el Foro ya ha iniciado, de una manera virtual<br />
en nuestros sitios Web, Facebook y Twitter se ha creado<br />
una dinámica para la participación. Desde este momento<br />
queremos plantear las interrogantes, intentar las<br />
respuestas y entre todos generar la visión y las políticas<br />
de la AMA hacia la gestión de los árboles monumentales<br />
en México.<br />
Esperamos disfruten y obtengan provecho de la lectura<br />
de este número de <strong>ArbolAMA</strong>.<br />
La ceiba de la plaza central de San Bartolo Coyotepec<br />
D. Rivas, Marzo <strong>2013</strong><br />
1
<strong>ArbolAMA</strong><br />
no.3 <strong>abril</strong> <strong>2013</strong><br />
MESA DIRECTIVA<br />
Asociación Mexicana<br />
de Arboricultura<br />
www.arboricultura.org.mx<br />
arboricultura.mx@gmail.com<br />
PRESIDENTE<br />
Ing. Ricardo Agapito Jara Arce<br />
VICEPRESIDENTE<br />
Ing. Víctor Velasco López<br />
TESORERO<br />
Víctor Díaz Coppe<br />
SECRETARIA<br />
Diana Marchal Valencia<br />
VOCALES<br />
Dr. Tomás Martínez Trinidad<br />
Dra. Rosa María García Núñez<br />
Ing. Juan Castillo Carrasco<br />
Ing. Eloy Cavazos Cavazos<br />
WEBMASTERS<br />
David Santiago Restrepo y<br />
Daniel Rivas Torres<br />
Revista <strong>ArbolAMA</strong><br />
Organo de difusión de la<br />
Asociación Mexicana de<br />
Arboricultura, A.C.<br />
DIRECCIÓN EDITORIAL<br />
Daniel Rivas Torres<br />
DISEÑO y FORMACIÓN<br />
David Santiago Restrepo<br />
CUIDADO DE LA EDICIÓN<br />
Daniel Rivas Torres<br />
Publicación digital<br />
Distribución gratuita de la versión de<br />
alta resolución a los socios de la AMA<br />
COMITÉ EDITORIAL<br />
Dr. Daniel Rivas Torres<br />
Diana Marchal Valencia<br />
Dr. Tomás Martínez Trinidad<br />
Dra. Rosa María García Núñez<br />
Revista de circulación<br />
internacional<br />
ISSN: en trámite<br />
Certificados de Derechos al Uso<br />
Exclusivo: en trámite<br />
ÍNDICE<br />
Editorial. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1<br />
IV Foro Nacional de Arboricultura y<br />
Dasonomía Urbana. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 3<br />
Informe del estado general del<br />
Árbol de Santa María del Tule. . . . . . . . . . . . . . . 7<br />
Los Sabinos de San Pablo Güilá. . . . . . . . . . . . . 20<br />
Método Hamburgo para la poda<br />
de los árboles. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 22<br />
2
no.4 <strong>abril</strong> <strong>2013</strong><br />
<strong>ArbolAMA</strong><br />
IV FORO N ACIONAL DE A RBORICULTURA<br />
Y D ASONOMÍA U RBANA<br />
O AXACA, M ÉXICO<br />
DEL 25 AL 27 DE A BRIL DE <strong>2013</strong><br />
El IV Foro Nacional de Arboricultura y Dasonomía<br />
Urbana, organizado y convocado por la Asociación<br />
Mexicana de Arboricultura en la ciudad de Oaxaca, se<br />
llevará a cabo del 25 al 27 de <strong>abril</strong>, llevando como lema:<br />
Hacia la gestión de los árboles monumentales en México<br />
La Semana de Arboricultura en Oaxaca, en noviembre<br />
de 2011, fue un precedente primordial; enfocada a<br />
la inspección del estado de salud del Árbol del Tule,<br />
participaron allí arboristas nacionales y extranjeros de<br />
renombre internacional, de los cuales se destaca el Biólogo<br />
Gerard Passola, quien entregó un informe detallado y las<br />
recomendaciones preconizadas para la gestión del Árbol<br />
del Tule. De esta manera, los orígenes del IV Foro subyacen<br />
en los resultados que se generaron en Oaxaca y los objetivos<br />
son los de abarcar más allá de nuestro árbol emblemático<br />
del Tule y alcanzar todos los árboles monumentales<br />
de México. También un antecedente fundamental es el<br />
trabajo realizado por la propia comunidad de San Pablo<br />
Güilá, Oaxaca, para la rehabilitación de sus sabinos, con la<br />
participación del Doctor Daniel Rivas.<br />
Otras consideraciones adyacentes al aspecto técnico son<br />
de índole social, normativa e institucional que ayudarán<br />
a incidir, a apuntalar integralmente la gestión del árbol<br />
monumental en México.<br />
Se habla a menudo de los derechos humanos, de los<br />
derechos de los animales, pero en general se observa que<br />
el árbol urbano para muchos no existe; en la planeación<br />
urbana es un inmueble y toda su gestión es prácticamente<br />
en base a eso… como si se tratara de un semáforo o<br />
una luminaria. Se aspira a que el IV Foro sea un paso<br />
importante en la Arboricultura en México, porque podrá<br />
ser la primera vez que se van a decretar los derechos del<br />
árbol: empezando por los más viejos y venerables y lo más<br />
pronto hacia los árboles maduros y los jóvenes.<br />
Se trata entonces de generar un Decálogo de Gestión de los<br />
Árboles Monumentales en México, creando los principios,<br />
con estándares según las reglas del arte de la arboricultura<br />
moderna; teniendo en cuenta los avances científicos y<br />
tecnológicos actuales.<br />
Participar desde ya en el Foro es ayudar a poner una tabla<br />
de salvación en este mar de incertidumbre en que navegan<br />
–más bien naufragan- actualmente los árboles urbanos.<br />
3
<strong>ArbolAMA</strong><br />
no.4 <strong>abril</strong> <strong>2013</strong><br />
Programación<br />
Jueves<br />
25<br />
Viernes<br />
26<br />
Sabado<br />
27<br />
8:00 - 8:30 Inscripciones<br />
8:30 - 9:00 Inauguración<br />
9:00 - 9:30 Reconocimiento Mérito en Arboricultura<br />
9:30 - 10:00 Receso<br />
Auditorio y Áreas Verdes Instituto Tecnológico del Valle de Oaxaca ITVO<br />
10:00 - 12:00 La arboricultura en el manejo de los árboles monumentales. Dr. Gerard Passola i Parcerissa, Asociación Española de<br />
Arboricultura<br />
12:00 - 13:00 El valor de los árboles monumentales. Dr. Glafiro José Alanis Flores, Facultad de Ciencias Biológicas UANL<br />
12:00 - 18:00 Curso-Taller: Trepa<br />
13:00 - 13:15 Receso<br />
13:15 - 14:00 Una década de estudios en áreas verdes de la capital Oaxaqueña. M.C . Rodolfo Hernández Rea, Instituto Tecnológico del<br />
Valle de Oaxaca<br />
14:00 -16:00 Comida<br />
16:00 - 16:45 Estudio de caso para la protección de los árboles en Quintana Roo. M.C. Rafael Reynoso Valdéz. Arborista Certificado ISA-<br />
México<br />
16:45 - 17:30 Registro Nacional de Árboles Históricos y Notables. SEMARNAT Delegación OAXACA<br />
17:30 - 18:15 Cambio climático y arbolado urbano. Instituto Estatal de Ecología y Desarrollo Sustentable de Oaxaca<br />
San Bartolo Coyotepec<br />
8:00 - 9:00 La ceiba de San Bartolo Coyotepec. Autoridades de San Bartolo Coyotepec, Casa Comunal y Museo de Arte Popular de<br />
Oaxaca<br />
8:00 - 12:00 Curso-Taller: Poda<br />
9:00 -10:00 Manejo del muérdago en árboles monumentales. Diana Marchal Valencia. Arborista Certificada ISA-México<br />
10:00 - 12:00 Foro: Hacia la gestión de los árboles monumentales en México: Dr. Tomás Martínez y Dra. Rosa María García<br />
Santa María del Tule y San Pablo Güilá<br />
12:00 - 17:00 Visita guiada Árbol del Tule y Sabinos de San Pablo Güilá: Ing. Víctor Velasco y Dr. Daniel Rivas<br />
17:00 - 20:00 Examen certificación ISA<br />
Sala de Conferencias: Jardín Etnobotánico de Oaxaca<br />
Jardín Etnobotánico de Oaxaca<br />
8:00 - 10:00 Visita guiada al Jardín Etnobotánico de Oaxaca: Ing. Víctor Velasco<br />
10:00 - 14:00 Competencia Nacional de Poda<br />
14:00 -15:00 Premiación Competencia Nacional de Poda<br />
15:00 - 18:00 Comida<br />
18:00 - 20:00 Calenda de clausura<br />
Bosque el Tequio. “Flechador del sol”<br />
Templo Santo Domingo de Guzmán: Centro Histórico<br />
4
no.4 <strong>abril</strong> <strong>2013</strong><br />
<strong>ArbolAMA</strong><br />
R ECONOCIMIENTO AL M ÉRITO<br />
EN A RBORICULTURA<br />
IV FORO N ACIONAL DE A RBORICULTURA Y D ASONOMÍA U RBANA<br />
M ÉXICO <strong>2013</strong><br />
La Asociación Mexicana de Arboricultura, con el objeto de reconocer el trabajo y la lucha de personas o instituciones en las actividades<br />
en pro del arbolado urbano, en todo el país, convoca a los socios de la AMA a postular candidatos(as); ya sean instituciones, agrupaciones<br />
o personas que trabajan en aspectos de la Arboricultura para obtener el: RECONOCIMIENTO AL MÉRITO EN ARBORICULTURA.<br />
CANDIDATOS<br />
Podrán participar personas físicas, instituciones educativas y organizaciones civiles, independientemente de que sean o no socias de<br />
la AMA, que hayan realizado o realicen acciones relevantes en materia de protección, conservación y rescate del arbolado urbano,<br />
dentro de su comunidad o en México en general.<br />
PROPUESTAS<br />
Las propuestas deberán contener la información siguiente:<br />
. Carta de postulación por parte de un socio activo de la AMA, en la que se señalen: datos del candidato y de quién lo propone y una<br />
reseña del trabajo meritorio. De preferencia, presentar descripción de los hechos o evidencias de las actividades del(a) candidato(a).<br />
. Las propuestas podrán enviarse electrónicamente a arboricultura.mx@gmail.com antes del 15 de <strong>abril</strong> del año en curso.<br />
RECONOCIMIENTO<br />
El Jurado estará integrado por el Consejo Directivo de la AMA y dos socios activos.<br />
El resultado se publicará en el sitio de internet de la AMA y el reconocimiento se entregará durante el IV Foro Nacional de<br />
Arboricultura y Dasonomía Urbana, a realizarse del 25 al 27 de <strong>abril</strong> próximo en la ciudad de Oaxaca.<br />
México, febrero 12 de <strong>2013</strong>.<br />
Asociación Mexicana de Arboricultura<br />
www.arboricultura.org.mx<br />
5
<strong>ArbolAMA</strong><br />
no.4 <strong>abril</strong> <strong>2013</strong><br />
T ERCERA C OMPETENCIA N ACIONAL<br />
P ODA DE Á RBOLES U RBANOS<br />
IV FORO N ACIONAL DE A RBORICULTURA Y D ASONOMÍA U RBANA<br />
B OSQUE EL T EQUIO, O AXACA, O AXACA<br />
S ABADO 27 DE ABRIL DE <strong>2013</strong><br />
8:00-15:00 horas<br />
La poda de copa es la actividad más frecuente con los árboles en nuestro medio, pero quizá la menos comprendida; cualquiera corta<br />
un árbol pero pocos lo saben podar. Con este evento se busca, nuevamente, crear las condiciones y dar la oportunidad para que los<br />
arboristas y trabajadores de los árboles muestren sus conocimientos y capacidades en la realización de este trabajo; es la tercera ocasión<br />
que se realizará en México.<br />
La historia de estos eventos se remonta al 2008, cuando se realizó la primera competencia en el Bosque de Chapultepec de la Ciudad de<br />
México; la segunda fue en el 2010 en el Bosque Los Colomos en Guadalajara.<br />
Para la calificación, el Jurado Calificador (en adelante el Jurado) tendrá en cuenta dos aspectos principales: seguridad y técnica<br />
de poda. Deberán seguirse las indicaciones de la Norma de Poda NADF-001-RNAT-2006 del Distrito Federal (http://www.<br />
arboricultura.org.mx/normas).<br />
También, las indicaciones que el Jurado señale antes de la competencia. Los premios para las cuadrillas participantes son los<br />
siguientes:<br />
6<br />
PREMIOS<br />
Primer lugar: $3,000.00, silla de trepa y diploma<br />
Segundo lugar: $1,500.00 y diploma<br />
Tercer lugar: $1,000.00 y diploma<br />
•••<br />
El Jurado Calificador, diferente al Comité Organizador del Foro, será nombrado por el Consejo Directivo de la AMA.<br />
Además de los premios, todos los concursantes recibirán un reconocimiento especial por su participación, y muy probablemente<br />
obsequios por parte de nuestros socios patrocinadores.<br />
La premiación se realizará públicamente ese mismo día a las 14:00 horas en el mismo lugar.<br />
Consulte nuestro sitio web para conocer las bases de la competencia.<br />
Los asuntos no considerados en la presente convocatoria serán resueltos por el Consejo Directivo de la AMA.<br />
Para cualquier aclaración favor dirigirse al correo rivasdaniel@usa.net<br />
Asociación Mexicana de Arboricultura<br />
www.arboricultura.org.mx<br />
México, 5 de febrero de <strong>2013</strong>
no.4 <strong>abril</strong> <strong>2013</strong><br />
<strong>ArbolAMA</strong><br />
I NFORME DEL E STADO G ENERAL DEL<br />
Á RBOL DE S ANTA M ARÍA<br />
DEL T ULE<br />
BIÓLOGO G ERARD P ASSOLA i PARCERISSA<br />
noviembre 11, 2011<br />
Consultor de arboricultura<br />
Árbol, Investigación y Gestión, S.L.<br />
www.doctorarbol.com<br />
Sant Cugat del Vallès, España<br />
Gerard Passola i Parcerissa<br />
Biólogo (Núm. Col. 16.860-C)<br />
Estudio del Árbol de Santa Maria del Tule, el árbol con el mayor diámetro de tronco del mundo. Conjuntamente con<br />
la Asociación Mexicana de Arboricultura se realizó una valoración general del árbol: visual biomecánica y de riesgo,<br />
de la estructura, fisiología y sistema radicular. El objetivo: conocer el estado general del árbol para proponer las actuaciones<br />
a medio y largo plazo adecuadas a su conservación.<br />
1. El árbol del Tule:<br />
De nombre científico Taxodium mucronatum, el<br />
ahuehuete -también conocido como sabino o<br />
ciprés Moctezuma- es un árbol de la familia de las<br />
cupresáceas, típico en México y muy popular por<br />
su belleza, su enorme tamaño y su longevidad. El<br />
ahuehuete acostumbra a vivir más de 500 años, aunque<br />
hay algunos que ostentan récords bastante superiores:<br />
es el caso del Árbol del Tule, que hunde sus raíces en<br />
Santa María del Tule, en el estado mexicano de Oaxaca.<br />
tiene más de 2,000 años.<br />
Este “viejo de agua”, junto con otros vecinos de su<br />
misma especie, que se recomiendan incluir en un<br />
Parque Nacional, debe ser apreciado y protegido por<br />
su gran valor histórico, ecológico y cultural para los<br />
Oaxaqueños y para los Mexicanos.<br />
El ahuehuete, cuyo nombre procede de la lengua náhuatl<br />
y significa “viejo de agua”, resulta muy vistoso por su<br />
envergadura: los troncos tienen diámetros de entre 2 y<br />
14 metros, alcanzando una altura de hasta 40 metros.<br />
Sus hojas son perennes y ordenadas en espiral y no<br />
produce flores, aunque sí una especie de piñas ovales.<br />
El sabino o ahuehuete de Santa María del Tule en Oaxaca,<br />
(Taxodium mucronatum) es un árbol monumental<br />
con una copa de 36 metros de altura y 40 metros de<br />
diámetro. Se localiza en el atrio de la iglesia de Santa<br />
María del Tule en Oaxaca, México, aproximadamente<br />
a 13 km de la Ciudad de Oaxaca, sobre la carretera a<br />
Mitla.<br />
Su edad real es desconocida, pero según estimaciones<br />
Actualmente, los ahuehuetes están en peligro de<br />
extinción por lo que es deber de todos conocer un<br />
7
<strong>ArbolAMA</strong><br />
no.4 <strong>abril</strong> <strong>2013</strong><br />
poco más sobre ellos, cuidarlos y conservar su entorno<br />
natural para que sigan presenciando el desarrollo de<br />
nuestra cultura y formando parte de nuestra identidad<br />
nacional por muchos siglos más, para que sigan siendo<br />
“los testigos más longevos de nuestra historia”.2.<br />
Introducción al informe:<br />
El Árbol de Tule es un elemento vegetal singular de<br />
valor mundial irremplazable.<br />
Desde el punto de vista biológico y ecológico los<br />
árboles monumentales son portadores de un genoma<br />
que probablemente esté hoy extinguido, por lo tanto, su<br />
desaparición significa perder una información genética<br />
irrecuperable. Suelen contener, además, en su sistema<br />
elementos no perturbados durante toda la vida del<br />
árbol: bacterias, hongos, insectos y otros organismos<br />
relacionados con su biología y entorno específico que<br />
han evolucionado conjuntamente con él. Así, si el<br />
Árbol del Tule tiene como mínimo 2,000 (¿) años, esto<br />
implica que contiene una fauna y flora acompañante de<br />
una edad similar.<br />
Estos árboles suponen también un bien cultural de<br />
respeto y estima por la naturaleza ancestral. Son<br />
elementos que no son propiedad nuestra sino que hemos<br />
recibido de nuestros padres y debemos transmitir a<br />
nuestros hijos con toda integridad y capacidad.<br />
El pueblo de Santa María del Tule ha sido quien ha<br />
velado por la conservación de un bien tan especial y<br />
como se detalla en el informe lo ha hecho de manera<br />
intachable durante muchos años.<br />
Se plantea en este informe el estado actual del árbol,<br />
y también se recomienda qué criterios, variables,<br />
o perspectivas vale la pena valorar para que esta<br />
conservación siga dándose de manera correcta en los<br />
próximos años (¿100).<br />
Con la finalidad de conocer el estado de salud de este<br />
Ahuehuete en especial, así como de los demás que se<br />
encuentran también en Santa María del Tule, expertos<br />
arboristas y podadores de diferentes partes del mundo<br />
se reunieron del 7 al 11 de noviembre del 2011 para<br />
evaluarlo y proponer un plan de trabajo necesario para<br />
conservarlos en buen estado.<br />
Este informe es el resultado de esta evaluación.<br />
.1. Ámbitos a los que afecta<br />
2.1. Ámbitos a los que afecta<br />
El presente informe intenta valorar todos los ámbitos<br />
que pueden de manera directa o indirecta afectar en la<br />
actualidad y en un futuro inmediato el estado del árbol.<br />
Brevemente el informe intenta abarcar los siguientes<br />
aspectos:<br />
Ámbito científico: este tema es el primordial en<br />
cualquier decisión. La realidad biológica del árbol<br />
debe ser siempre el referente en las actuaciones que<br />
se quieran realizar. Si esta realidad biológica presenta<br />
puntos oscuros en lo que se refiere a la respuesta a<br />
una actuación, ésta debe aplazarse hasta delimitar sus<br />
consecuencias. Solo en casos de fuerza mayor podrían<br />
darse actuaciones sin una certeza absoluta en la<br />
respuesta. En este sentido creemos que sería importante<br />
crear un comité de expertos para que puedan analizar<br />
y dar respuesta a cualquier cuestión relacionada con el<br />
árbol.<br />
Ámbito temporal: evidentemente el ámbito<br />
temporal primordial es el que se refiere al presente,<br />
sin embargo creemos que SIEMPRE deben tomarse las<br />
decisiones considerando que el árbol debe estar ahí<br />
en buenas condiciones “siempre” por tanto ninguna<br />
actuación debe realizarse si no se conoce su efecto<br />
claramente en los próximos 15 años y la tendencia al<br />
menos en los próximos 100 años.<br />
Ámbito espacial: tal y como se comenta más<br />
adelante los árboles son estructuras que viven mejor o<br />
peor en función de cómo pueden colonizar el espacio,<br />
tanto en la zona aérea como en la zona radicular que<br />
van parejas. La gestión del espacio es pues uno de los<br />
ámbitos que debe valorarse.<br />
Ámbito social: el árbol es un organismo vegetal que<br />
tiene un elevado reconocimiento, relación y conexión<br />
con la realidad de Santa Maria del Tule, Oaxaca. Es<br />
importante que el entorno social del árbol tenga el<br />
máximo de información sobre el árbol especialmente<br />
biológica.<br />
Comprendemos que la conservación del árbol es la<br />
primera prioridad para los vecinos del árbol, sin embargo<br />
su relación debe poderse mantener y a ser posible<br />
intensificar en beneficio de ambos. Entendemos que la<br />
opinión de los vecinos se expresa mayoritariamente en<br />
el Comité del Árbol. Sin embargo para actuaciones que<br />
impliquen una modificación importante del entorno<br />
del árbol, creemos que se debe hacer extensiva a toda<br />
8
no.4 <strong>abril</strong> <strong>2013</strong><br />
<strong>ArbolAMA</strong><br />
la población cada propuesta.<br />
Es importante que el entorno social del árbol tenga el<br />
máximo de información sobre el árbol especialmente<br />
biológica (siendo muy importante el sistema de<br />
comunicación que se establece), esto permite que<br />
necesidades. La promoción de la ciudad a través del<br />
árbol debe tener como prioridad el propio árbol. Los<br />
políticos de Santa María del Tule y Oaxaca deberían<br />
además anticiparse a los gastos que la correcta gestión<br />
requiere a través de subvenciones, patrocinios y otros<br />
apoyos.<br />
2.2. Objetivos<br />
El objetivo de este informe es aportar ideas y datos<br />
para mejorar la conservación del árbol a corto, medio y<br />
largo plazo. Para ello se analizan todos los ámbitos en<br />
los que se desarrolla su existencia, especialmente los<br />
biológicos.<br />
2.3. Limitaciones<br />
2.3.1. Este informe se ha realizado con los datos<br />
obtenidos durante las jornadas del pasado noviembre.<br />
La evaluación realizada ha sido eminentemente<br />
visual. Por tanto puede que algunos datos sean solo<br />
provisionales y que requieran en un futuro de análisis<br />
con mayor profundidad.<br />
sus opiniones tengan en consideración los aspectos<br />
fundamentales de la gestión del árbol, se aconseja<br />
para ello realizar cursos, jornadas, etc., especialmente<br />
diseñadas para este fin, sin olvidar las específicamente<br />
para escolares.<br />
Ámbito divulgativo: asociado al punto anterior<br />
pero con entidad suficiente debería generarse una<br />
documentación de todo lo que envuelve al árbol. Esta<br />
información debe incluir:<br />
Recopilación de toda la información del pasado del<br />
árbol (histórico, tradiciones, leyendas, actuaciones<br />
pasadas, fotografías); información divulgativa de lo que<br />
el árbol representa y de la filosofía que subyace en la<br />
gestión del árbol; información científica; establecer un<br />
día del árbol. Creemos que, en este sentido, se debería<br />
crear un Museo del Ahuehuete que aglutinara toda esa<br />
información y por extensión de la especie Taxodium<br />
mucronatum en México. Además podría ser un entorno<br />
adecuado para la venta de plantas y semillas del árbol<br />
entre otros productos.<br />
Ámbito político: la gestión política debe ser<br />
el principal valedor para asegurar la estabilidad<br />
del entorno del árbol. Cuando se requiera realizar<br />
actuaciones alrededor o cerca del árbol, la realidad<br />
biológica debe estar siempre por encima de estas<br />
2.3.2. Desde el punto de vista de la mecánica los datos<br />
obtenidos se basan principalmente en la valoración<br />
visual de los síntomas externos de los árboles (VTA<br />
de Mattheck y Breloer 1994). Ver descripción de la<br />
metodología en punto 5. Aquellos defectos sin síntomas<br />
de ningún tipo escapan a esta valoración.<br />
2.3.3. Algunos defectos de la parte más alta de las<br />
copas puede que no se hayan detectado debido a la<br />
presencia de follaje durante la evaluación visual y a la<br />
enorme dimensión del árbol.<br />
2.3.4. Los árboles son seres vivos, por tanto sus<br />
características mecánicas puede variar con el tiempo<br />
debido a causas bióticas o abióticas. En casos de<br />
fuerzas naturales impredecibles e intensas podrían<br />
darse roturas sobre estructuras sin defecto visible.<br />
El presente informe da cuenta de las características<br />
observadas en el momento de la evaluación.<br />
2.4. Criterios de valoración<br />
Los criterios de valoración que se han tenido en cuenta<br />
han sido (de más a menos importancia):<br />
Mejora biológica del árbol<br />
Conservación estructural del árbol<br />
9
<strong>ArbolAMA</strong><br />
no.4 <strong>abril</strong> <strong>2013</strong><br />
10<br />
Ecología del árbol<br />
Seguridad de los usuarios<br />
Factor estético y social<br />
3. Metodología<br />
La valoración de los árboles se ha realizado mediante<br />
el sistema de Evaluación Visual del Arbolado (EVA)<br />
derivado del sistema VTA que describió Claus<br />
Mattheck a principios de los 90. El sistema se basa<br />
en la valoración de las estructuras visibles del árbol<br />
para determinar su estado interno tanto referido a su<br />
vertiente fisiológica como mecánica. Hay que comentar<br />
que sobre el sistema base desarrollado por Mattheck<br />
se han añadido informaciones de muchos otros<br />
investigadores como Ted Green (relaciones hongo –<br />
árbol), Francis Schwarze (relaciones hongo – árbol),<br />
Francis Halle y Pierre Raimbault (estructura arbórea),<br />
Wessolly (estática y aerodinámica); además de nuestra<br />
propia investigación, percepciones y experiencia.<br />
Concretamente en la valoración visual se han observado<br />
variables como:<br />
• Densidad foliar, altura y distribución de las masa<br />
foliar, medidas y coloración<br />
• Estructura de ramas y rebrotes, procesos de<br />
crecimiento o atrincheramiento<br />
• Madera de reacción, excesos de peso o exposición<br />
• Defectos en uniones, codominancias<br />
• Tipología de la corteza<br />
Aparte del método de valoración, en la toma de<br />
decisiones sobre la mejora de las condiciones de un<br />
árbol o un grupo, hemos incorporado aspectos de lo<br />
que se está llamando la arboricultura ambientalista.<br />
Esta arboricultura parte de la base general, pero incluye<br />
aspectos de ecología, biodiversidad, cultura, etc.<br />
Uno de los puntos que se valoran en la arboricultura<br />
ambientalista es la realización de podas en árboles<br />
maduros mediante simulación de roturas naturales.<br />
Este tipo de podas permiten (con el mismo nivel de<br />
calidad, seguridad y expectativas de los árboles)<br />
mantener una estética de paisaje de “no intervención”,<br />
de estilo mucho más cercano al del entorno natural;<br />
para ello recomendamos, siempre que sea necesario, al<br />
realizar trabajos de poda, hacerlo mediante roturas (en<br />
ramas secas o debilitadas) ya que generan un aspecto<br />
del árbol en el que no se observa la intervención<br />
humana. Además estas prácticas fomentan y conservan<br />
la biodiversidad.<br />
4. La conservación de los árboles singulares<br />
Esquema que describe el ciclo vital de un roble, (Q. robur)<br />
que tiene una duración de 900 – 1,200 años.<br />
4.1 Criterios básicos<br />
Los árboles desarrollan su estructura a través de un<br />
proceso de crecimiento que busca fabricar una copa<br />
lo más amplia y alta posible, siempre que se de la<br />
suficiente eficiencia fotosintética. Este crecimiento<br />
es reactivo y dinámico y se acomoda constantemente<br />
a los cambios del entorno. La estructura dinámica de<br />
los árboles es un proceso regulado genéticamente que<br />
en función de la fase de edad, las modificaciones en<br />
el entorno, las agresiones, los cambios meteorológicos<br />
se desarrolla o bien expansionándose para aumentar el<br />
espacio colonizado (fases de juventud hasta la madurez<br />
o de recuperación del estrés) o bien se concentra<br />
(retrenchment o atrincheramiento) para facilitar los<br />
aportes de agua y minerales de la raíz a zonas más<br />
cercanas a la raíz (fase de senescencia o fases de estrés).<br />
El análisis de esta estructura, con sus componentes<br />
fisiológicas permite conocer las causas de su estado,<br />
su capacidad de recuperación y las labores de<br />
mantenimiento necesarias para su óptima conservación.<br />
El estudio de las fases de edad estructurales explica<br />
como los árboles se estructuran en el espacio en función<br />
de distintas estrategias de colonización hasta llegar a<br />
la madurez, y cómo después de pasar cierto número de<br />
años en esta fase reduce progresivamente su estructura<br />
para adecuarla a la capacidad de obtención de recursos<br />
del sistema radicular de las fases terminales.<br />
Los árboles maduros o senescentes (viejos), no lo son<br />
tanto por su edad como por su proceso de estructuración
no.4 <strong>abril</strong> <strong>2013</strong><br />
<strong>ArbolAMA</strong><br />
y colonización del espacio. Una vez el árbol, mediante<br />
su crecimiento de<br />
juventud, ocupa todo<br />
el espacio disponible<br />
(tanto por capacidades<br />
del espacio cómo<br />
de su capacidad de<br />
crecimiento interno)<br />
la producción neta<br />
disminuye. Además,<br />
en esta fase avanzada,<br />
cada uno de los ejes<br />
que constituye la<br />
copa, actúa, más o<br />
menos, de manera<br />
independiente<br />
generando “subcopas”<br />
con<br />
distintas<br />
características<br />
fisiológicas. La<br />
valoración debe<br />
hacerse de manera<br />
global, pero, también, considerando los ejes principales<br />
de manera aislada.<br />
La tendencia expansiva o de reducción se define por la<br />
eficiencia fotosintética, y esta depende de los aportes de<br />
agua que provienen del sistema radicular. Las disfunciones<br />
radiculares son la primera causa de procesos de reducción<br />
prematuros de la estructura aérea<br />
5. Estado actual del árbol<br />
5.1. Fisiología<br />
El Árbol de Tule tiene unos valores de vitalidad entre<br />
moderados y altos. Hay<br />
zonas de la copa en<br />
clara expansión otras<br />
están en fase de madurez<br />
y con crecimiento<br />
relativamente bajo.<br />
Alguna rama está en fase<br />
de regresión.<br />
La presencia de ramas en<br />
expansión muestra que el<br />
árbol tiene todavía ciertos<br />
síntomas de juventud.<br />
Esta expansión podría<br />
significar que el sistema<br />
radicular está aportando<br />
recursos suficientes para<br />
las necesidades de la copa<br />
y para el crecimiento.<br />
Las ramas claramente en<br />
regresión (una muy clara<br />
y alguna otra de menor tamaño) creemos que se debería más a<br />
una razón puntual y no extrapolable a todo el árbol.<br />
Las zonas de expansión de la copa se dan principalmente en<br />
zonas bajas del árbol. Si esto es así (estrictamente), quizá<br />
estaría mostrando no una fase de expansión general sino un<br />
cierto proceso de atrincheramiento (por tanto asociado a una<br />
cierta reducción de la vigorosidad en zonas altas del árbol). No<br />
se ha observado en la zona alta del árbol esta reducción de la<br />
densidad foliar, crecimiento reducido, etc., aunque el hecho de<br />
que el árbol recibiese una poda de ramas secas hace unos años<br />
puede reducir nuestra capacidad de valoración de este punto.<br />
Así, nos inclinamos más por la teoría de la expansión general.<br />
Sin embargo un seguimiento visual del árbol en los próximos 5<br />
años permitiría confirmarlo.<br />
Por tanto, resumiendo:<br />
• La vitalidad del árbol, con los interrogantes descritos, sería<br />
moderada-alta.<br />
• Tiene rasgos de juventud acusados y expansión lateral, algo más<br />
acusada en los primeros 15 metros de la copa.<br />
• Quedando pendiente de determinar en los próximos años si este<br />
crecimiento lateral se puede relacionar con un atrincheramiento<br />
de la copa (en principio creemos que no).<br />
5.2. Fitopatología<br />
No estamos muy familiarizados con la fitopatología<br />
11
<strong>ArbolAMA</strong><br />
no.4 <strong>abril</strong> <strong>2013</strong><br />
esta época se expresan de manera más clara.<br />
• Ausencia de xilófagos en rama y ejes: la única<br />
presencia de hongos xilófagos se ha asociado al propio<br />
deterioro de ramas que han fracasado por razones<br />
lumínicas, o por roturas por exceso de peso o exceso de<br />
viento, no se han detectado, prácticamente, chancros,<br />
necrosis, etc., también se han observado cavidades en<br />
el lugar que había ramas que han muerto hace tiempo;<br />
los xilófagos implicados en la degradación de la madera<br />
estaban afectando solo al duramen y no creemos que<br />
tengan ningún tipo de actividad parasítica o patógena.<br />
Solo en un caso hemos detectado presencia de pudrición<br />
marrón, esta podría estar extendida en todas las ramas<br />
con duramen relativamente viejas. Sin embargo la<br />
presencia de síntomas ha sido muy reducida.<br />
de esta especie, sin embargo después del análisis<br />
efectuado, los principales puntos a destacar serían:<br />
• Ausencia de plagas en hojas y brotes tiernos:<br />
las hojas no presentaban cochinillas, pulgones, necrosis,<br />
etc., aun siendo estación otoñal, cuando la presencia de<br />
organismos acompañantes de la senescencia foliar de<br />
• Presencia de necrosis en la zona de tensión<br />
de las ramas laterales con crecimiento en<br />
madera de compresión: las ramas laterales<br />
tienen el vector del peso compensado mediante un<br />
extraordinario crecimiento de madera de reacción en<br />
compresión. La zona de tensión de estas ramas es una<br />
zona de no inversión, de muy bajo crecimiento y por<br />
tanto con cierta facilidad para presentar estas necrosis.<br />
Asociado a esta necrosis cortical hay una muy elevada<br />
presencia de crecimiento epicórmico de ramas sin<br />
prácticamente desarrollo.<br />
• Ausencia de xilófagos en la zona basal: s e<br />
han detectado algunas cavidades en la zona baja (muy<br />
pocas y de reducido tamaño), y su presencia evidencia<br />
la presencia de algunos hongos que habrían podrido la<br />
madera vieja, la proporción en la que se han encontrado,<br />
su posición y dimensiones hacen pensar en el proceso<br />
natural que todos las especies de árboles presentan<br />
de deterioro de la madera muerta antigua por hongos<br />
especialistas sin capacidad de afectar a la albura.<br />
• Ausencia de enfermedades en las raíces<br />
finas: se han realizado solo un par de inspecciones<br />
de las raíces finas, estas han mostrado que están<br />
muy superficiales (como ocurre normalmente) y que<br />
estaban micorrizadas y sin síntomas de necrosis, etc.<br />
Los elevados valores de vitalidad hacen pensar que el<br />
sistema radicular absorbente está en general en buen<br />
estado.<br />
• Raíces leñosas (conductoras y mecánicas):<br />
no se ha realizado un examen de este tipo de raíces<br />
ya que ello conllevaba una limpieza de las mismas, es<br />
posible que presenten las más antiguas porciones de<br />
12
no.4 <strong>abril</strong> <strong>2013</strong><br />
<strong>ArbolAMA</strong><br />
madera muerta y cavidades, pero no se ha observado<br />
que al menos lo que era visible supusiera un problema<br />
fitosanitario.<br />
5.3. Estructura<br />
Ya se ha comentado en el análisis fisiológico que nos<br />
encontramos con un árbol que está en fase de expansión,<br />
por tanto sus características estructurales son las que<br />
corresponden a las de un ejemplar a finales de la fase<br />
de juventud, inicios de madurez.<br />
Las fases estructurales no dependen de la edad del<br />
árbol, sino de la relación del árbol con el espacio que<br />
ocupa.<br />
Es difícil decir donde acaba la “copa posible” del Árbol<br />
del Tule pero su capacidad de crecer lateralmente puede<br />
ser todavía muy importante.<br />
inmediata en la zona central y más alta del árbol, el<br />
hecho de que esta zona esté en buenas condiciones es<br />
un síntoma excelente.<br />
Desde el punto de vista estructural, nuestra principal<br />
duda es si el árbol va a ser capaz de generar copas<br />
de substitución en el centro del árbol (donde está<br />
teóricamente la copa más vieja) y en caso afirmativo<br />
con qué capacidad, de qué tipo y con qué altura final.<br />
Este es un proceso lento que creemos de darse no podrá<br />
valorarse antes de 15 o 25 años.<br />
Las reiteraciones: el Árbol del Tule está compuesto<br />
por los ejes principales y por un elevado conjunto de<br />
reiteraciones que se han ido generando.<br />
Las reiteraciones son ramas que repiten la estructura<br />
básica del árbol de una manera total o parcial.<br />
Es posible que los ejes originales se hayan perdido y la<br />
estructura esté constituida solo por reiteraciones.<br />
No se ha realizado un examen exhaustivo del número<br />
y orden de las reiteraciones. Éstas empiezan como<br />
rebrotes y se desarrollan en función de si el árbol<br />
está en una fase de expansión o contracción y de la<br />
presencia de luz.<br />
Como resumen del análisis estructural podemos<br />
concluir:<br />
• El Árbol del Tule está estructuralmente a finales de<br />
la juventud-inicios de la madurez, en todo caso está en<br />
una fase expansiva de su estructura asociada a esa fase<br />
de edad.<br />
Creemos realmente que en los próximos 100 o 200<br />
años el árbol podría llegar a doblar la anchura actual<br />
(si no hubiese impedimentos a su alrededor). Esta<br />
expansión podría darse en todas las orientaciones o<br />
darse especialmente o solo en algunas.<br />
Desde el punto de vista de la altura, las evidencias<br />
apuntan que la altura del árbol no se va a modificar<br />
(más allá de un margen de 3 o 4 metros). La cúpula del<br />
árbol es bastante cerrada, es decir el espacio colonizable<br />
(en altura) está copado, esto significa que el árbol<br />
tiene vitalidad suficiente para (en su altura máxima<br />
de trabajo) mantener una copa funcional y eficiente.<br />
Una reducción de la fisiología se expresa de manera<br />
• La anchura final de la copa es de difícil predicción,<br />
pero creemos que la “copa posible” podría ser de una<br />
anchura del doble de la actual.<br />
• Se tendría que valorar en los próximos 5-8 años si<br />
la hipótesis del atrincheramiento (reducción apical<br />
y aumento de la copa basal) se mantiene o se puede<br />
descartar.<br />
• La fase estructural en la que el árbol se encuentra<br />
hace posible dictaminar que las expectativas de vida del<br />
Árbol del Tule son todavía altísimas si las condiciones<br />
del ambiente se mantienen suficientemente estables y<br />
no hay ningún fenómeno atmosférico drástico que lo<br />
afecte.<br />
No se puede separar, en este caso, la estructura<br />
fisiológica del componente mecánico del árbol que se<br />
13
<strong>ArbolAMA</strong><br />
no.4 <strong>abril</strong> <strong>2013</strong><br />
analiza en el siguiente punto. Creemos que se debería<br />
contar con una imagen tridimensional de la estructura<br />
y mecánica del árbol, esto permitiría el estudio de su<br />
copa desde una nueva perspectiva y podría usarse para<br />
explicar sus especiales características.<br />
maderas de reacción (de compresión).<br />
Creemos, por las observaciones realizadas en otros<br />
árboles de edad suficiente para expresar este tipo de<br />
madera de reacción (si fuera una característica de la<br />
5.4. Mecánica<br />
La mecánica es la parte de la arboricultura que<br />
describe cómo los árboles son objeto de cargas del<br />
peso y, especialmente, del viento y cómo reaccionan<br />
a estas cargas desarrollando adaptaciones anatómicas<br />
que reduzcan la carga y mantengan unos niveles de<br />
seguridad aceptables.<br />
En este apartado se describe en primer lugar la<br />
estrategia de mejora de los estreses mecánicos naturales<br />
del árbol, en segundo lugar se describe la importancia<br />
de la adaptación mecánica y en tercer lugar algunos de<br />
los puntos críticos que el árbol tiene en su estructura y<br />
qué soluciones pueden darse para corregirlos.<br />
a) Descripción de la estructura mecánica<br />
natural del árbol<br />
El componente mecánico del Ciprés del Tule es lo que<br />
otorga al árbol una mayor singularidad. La forma y<br />
singularidad del árbol son el resultado de un crecimiento<br />
de madera de compresión extraordinario y que NO<br />
HEMOS ENCONTRADO EN OTROS EJEMPLARES de<br />
la misma especie. Esta singularidad puede ser debida<br />
a dos causas: debido a la edad del árbol este tipo de<br />
crecimiento se ha hecho especialmente evidente, o se<br />
trata de una singularidad genética de este ejemplar que<br />
le hace ser especialmente expresivo en la fabricación de<br />
especie), que se trataría de una característica específica<br />
de este árbol. Esto aumentaría su valor como elemento<br />
singular, irrepetible e insubstituible. También sería una<br />
de las causas de que las dimensiones del árbol sean tan<br />
extraordinarias. Al diámetro “normal” asociado a la<br />
edad y crecimiento se “sumaría” el crecimiento debido<br />
a la madera de reacción.<br />
14
no.4 <strong>abril</strong> <strong>2013</strong><br />
<strong>ArbolAMA</strong><br />
Este hecho podría reducir la estimación de edad<br />
que se le supone al árbol. Sin atrevernos a proponer<br />
ningún número que se derive del estado estructural<br />
y anatómico, (debido a nuestro desconocimiento de<br />
la dendrocronología de esta especie y concretamente<br />
de este ejemplar). Estudios dendrocronológicos de las<br />
ramas cortadas cuyos muñones están todavía en el árbol<br />
serían susceptibles de ser analizados desde este punto<br />
esfuerzos del peso. Todas las coníferas compensan la<br />
carga del peso a través de la madera de compresión, sin<br />
embargo hay especies que son especialmente expresivas.<br />
En este caso ya hemos comentado que creemos que hay,<br />
además, un componente individual específico.<br />
En el caso del Árbol del Tule el crecimiento de las<br />
ramas laterales (que son las que tienen una componente<br />
del peso elevada) generan de manera exclusiva madera<br />
de compresión. Así el anillo 1 está situado en la parte<br />
superior (a veces en el mismo límite de la rama)<br />
generando esta configuración tan especial.<br />
b) La adaptación de la copa<br />
de vista y permitirían realizar algunas aproximaciones.<br />
La madera de compresión es un tipo de madera de<br />
reacción que el árbol fabrica para compensar los<br />
Los distintos ejes del árbol forman una copa conjunta.<br />
Esta copa conjunta genera un resguardo donde todas<br />
las ramas se protegen entre ellas, y donde la pérdida de<br />
una rama puede propiciar desadaptaciones importantes<br />
en el resto de la copa. Por tanto se recomienda evitar<br />
en lo que se pueda realizar podas (aun de seguridad)<br />
que impliquen generar huecos en el árbol, en todo<br />
caso si se cree conveniente realizar alguna poda de<br />
este tipo, el factor adaptación debería considerarse<br />
suficientemente. Dentro del factor adaptación existen<br />
algunas ramas que mejoran extraordinariamente la<br />
estructura general del árbol. Estas ramas son ejes que<br />
se han fusionado con otros ejes colaborando en su<br />
15
<strong>ArbolAMA</strong><br />
no.4 <strong>abril</strong> <strong>2013</strong><br />
sustentación. Desde el punto de vista mecánico estas<br />
ramas (ANCLAJES NATURALES) son insustituibles.<br />
que se debería hacer una inspección instrumental sobre<br />
este punto para determinar el riesgo de que el defecto<br />
c) Defectos detectados en la copa del Árbol<br />
del Tule<br />
El Árbol del Tule presenta una copa joven, sin regresión<br />
y sin prácticamente defectos mecánicos.<br />
Se han detectado trabajos de poda relativamente<br />
se incremente. El incremento del defecto podría darse<br />
por la presencia de pudrición asociada a la fisura y/o<br />
evolución de la misma hasta la superficie del eje.<br />
Preventivamente se podría realizar un anclaje mediante<br />
la instalación de barras roscadas inoxidables que<br />
recientes que probablemente hayan eliminado bastantes<br />
de las ramas con defectos más evidentes. Aunque<br />
pueden existir defectos en ramas pequeñas, no hemos<br />
realizado una evaluación exhaustiva de aquellas que<br />
eran de diámetros inferiores a 40 o 50 cm. Algunos<br />
de los puntos que se ha detectado (a través de nuestra<br />
evaluación y del resto del equipo que ascendió al árbol)<br />
son:<br />
• Rama en el lado N de grandes dimensiones con una<br />
fisura en un cambio de dirección. Este eje es quizá el de<br />
mayor diámetro con defectos importantes. La fisura esta<br />
generada por el corrimiento de las fibras en tensión en<br />
relación con las de compresión en la fibra neutra. Este<br />
tipo de fisuras se dan a consecuencia de un exceso de<br />
peso (a veces asociado al viento que puede hacer oscilar<br />
la rama y aumentar la carga debida al peso). Creemos<br />
16<br />
atraviesen la fisura perpendicularmente. Existe la<br />
posibilidad de colocar anclajes de cuerda o cables, sin<br />
embargo el impacto visual sobre el árbol sería excesivo<br />
y creemos que es mejor o bien reducir la rama o realizar<br />
el anclaje de varilla (si el análisis del estado de la rama<br />
no lo desaconseja).<br />
• Eje con pudrición marrón en el interior: uno de los ejes
no.4 <strong>abril</strong> <strong>2013</strong><br />
<strong>ArbolAMA</strong><br />
no se tiene constancia de en qué medida o posición<br />
podría darse. Un análisis pormenorizado usando en<br />
algunos puntos un resistógrafo podría permitir un<br />
mejor conocimiento del estado interno de los ejes.<br />
presenta un descortezamiento y necrosis que muestra<br />
una pudrición marrón en el interior. Este hecho podría<br />
darse en más ejes en la zona de duramen, sin embargo<br />
• Ramas con la zona de tensión muy deteriorada y con<br />
baja vitalidad: algunas ramas de la zona alta del árbol,<br />
especialmente si se han quedado en el interior de la<br />
copa (con una cantidad de luz más reducida) están en<br />
regresión. La baja vitalidad de estas ramas hace que<br />
la inversión en madera sea muy reducida y por tanto<br />
la madera de compensación es prácticamente ausente.<br />
Estas ramas son las que actualmente representan un<br />
peligro más serio de rotura en el árbol. Si la zona de<br />
proyección de copa debe asegurarse deberían ser objeto<br />
de una poda de reducción, creemos sin embargo que<br />
la baja presencia de visitantes en esta zona permitiría<br />
dejarlas hasta su rotura, ya que no afectarán a la<br />
fisiología y estructura futura del árbol.<br />
• Ramas y ejes secos: la presencia de ramas secas es<br />
habitual en los árboles viejos. En este caso sin embargo<br />
la presencia de ramas de este tipo es reducida (por<br />
la poda comentada) y también por la buena salud del<br />
árbol.<br />
17
<strong>ArbolAMA</strong><br />
no.4 <strong>abril</strong> <strong>2013</strong><br />
5.5. Sistema radicular<br />
No se ha podido valorar este punto debido a que no<br />
se han realizado inspecciones en la zona radicular.<br />
Se describen aquí las hipótesis que creemos se están<br />
dando en el Árbol del Tule.<br />
La mayoría de ramas secas son:<br />
• De reducido tamaño y por tanto con una componente<br />
de riesgo muy baja asociadas a ramas muy grandes pero<br />
sin vela, y con una probabilidad muy baja de que se<br />
rompan. Estas ramas son importantes ya que colaboran<br />
d) Sistema radicular absorbente<br />
El sistema radicular absorbente está en buen estado. Su<br />
capacidad de aportar especialmente agua y minerales es<br />
óptima lo que está permitiendo la expansión de la copa.<br />
El sistema de riego instalado creemos que tiene una<br />
elevada importancia en la fisiología del árbol, éste está<br />
adaptado a su presencia y lo usa de manera prioritaria.<br />
Esta adaptación supone, como contrapartida, un riesgo<br />
elevado si por algún motivo dejara de aportarse, ya que<br />
se generaría una elevada deficiencia con una importante<br />
repercusión en la fisiología. Debe, por tanto, ser objeto<br />
de una atención especial.<br />
Por lo que hace al resto de sistema radicular absorbente,<br />
este se supone que se concentra en tres zonas:<br />
a configurar la estética del árbol. Recomendamos<br />
mantenerlas el máximo posible, si en algún caso se<br />
decide reducirlas (no retirarlas) debería hacerse<br />
usando la simulación de rotura como técnica de corte<br />
y reduciéndolas parcialmente sin retirar. Si el árbol es<br />
monumental también lo es su madera y esta debe ser<br />
objeto del mismo espíritu de conservación que afecta<br />
al árbol entero.<br />
a) Patio de arena del árbol: en esta zona se han<br />
encontrado raíces finas en buen estado. Para optimizar<br />
su presencia y capacidad se propone eliminar los<br />
trabajos de retirada de la materia orgánica que el<br />
árbol produce para que se incorpore al terreno, esto<br />
reducirá la compactación y la compactibilidad del<br />
suelo. La densidad radicular y las cotas donde se<br />
concentra podría conocerse con catas de inspección<br />
realizadas con Airspade en distintos puntos de la zona<br />
de proyección de copa. Esta zona del patio es objeto de<br />
limpieza continua, este tipo de actuaciones de higiene<br />
18
no.4 <strong>abril</strong> <strong>2013</strong><br />
<strong>ArbolAMA</strong><br />
no se corresponden con el sistema de funcionamiento<br />
natural. Recomendamos que se dejen de realizar o se<br />
hagan teniendo en cuenta la realidad del árbol.<br />
b) Pavimentos: la mayoría de pavimentos suelen tener<br />
debajo una capa con elevada humedad (debido a que<br />
evitan la evaporación) y elevada presencia de oxígeno,<br />
en esta zona se suelen desarrollar cabelleras de raíces<br />
absorbentes muy densas y funcionales. Este punto<br />
debería ser objeto de una inspección para comprobarlo.<br />
c) Zonas de acumulación de materia orgánica dentro<br />
de la propia estructura del árbol: una parte importante<br />
de los recursos que los árboles viejos obtiene proviene<br />
de la reconsumición de los propios restos, cualquier<br />
zona de acumulación de estos implica seguramente la<br />
presencia de raíces absorbentes.<br />
Asociado a este sistema radicular absorbente hay<br />
un conjunto de raíces portantes<br />
o conductoras que se encargan de<br />
conducir al árbol lo que se absorbe en<br />
las raíces finas. La protección de estas<br />
raíces es muy importante ya que su<br />
pérdida implicaría una reducción de<br />
los aportes hídricos. Desde este punto<br />
de vista creemos importante hacer la<br />
recomendación de Matheny y Clark<br />
sobre la protección de los árboles en<br />
obras.<br />
La zona de brotación de estas raíces de substitución<br />
es el cambium y este se encuentra en el límite exterior<br />
del tronco. Como la brotación se da en los primeros<br />
centímetros del suelo (principalmente) existe una<br />
franja de especial consideración y protección. El<br />
principal problema de esta zona es la compactación del<br />
suelo justo alrededor del árbol que puede dificultar el<br />
crecimiento en los primeros centímetros.<br />
Creemos que debería hacerse alguna cata (con Airspade)<br />
para determinar la presencia de estas raíces y valorar la<br />
compactación de esta zona. Como medidas correctoras<br />
se podría:<br />
• Eliminar el paso de visitantes cerca del tronco<br />
• Colocar una capa de mulch en esta zona<br />
• Disponer ramas o raíces enterradas o semienterradas,<br />
e) Sistema radicular mecánico<br />
El sistema radicular mecánico en<br />
tensión (habitualmente muy importante<br />
en la mayoría de árboles) no tiene<br />
mucho sentido en el Árbol del Tule, sus<br />
dimensiones y configuración de la base,<br />
hacen que no sea necesaria una tipología<br />
radicular encargada de transmitir los<br />
estreses de la copa al substrato ya que<br />
este se da de manera correcta a través de<br />
los esfuerzos de compresión.<br />
f) Sistema radicular de substitución<br />
El sistema radicular (sus raíces) está en constante<br />
evolución, las raíces viejas se deterioran y deben ser<br />
substituidas por raíces nuevas que nacen desde el<br />
cambium. Esta substitución radicular es la garantía<br />
de que existan siempre raíces jóvenes en crecimiento<br />
explorando el entorno y aportando los recursos que la<br />
copa necesita.<br />
en contacto con el cuello, que actúen de puente para<br />
que las raíces salgan de la zona del cuello hasta el<br />
resto del entorno<br />
• Colocar un paso elevado para evitar la compactación.<br />
19
<strong>ArbolAMA</strong><br />
no.4 <strong>abril</strong> <strong>2013</strong><br />
20<br />
L OS S ABINOS DE S AN P ABLO G ÜILÁ<br />
S ANTIAGO M ATATLÁN, O AXACA<br />
Reseña elaborada por David S. Restrepo, con fragmentos del proyecto de rehabilitación del Doctor Daniel Rivas Torres (2008)<br />
Los Sabinos de San<br />
Pablo Güilá en Oaxaca<br />
rehabilitados en 2009 por el<br />
pueblo y autoridades bajo<br />
la supervisión del Doctor<br />
Daniel Rivas, resplandecen<br />
con su historia, con sus<br />
ancestros y dejan un legado<br />
para las generaciones<br />
futuras.<br />
En antaño las “rodillas” o<br />
raíces neumatóforas de estos<br />
magníficos ejemplares eran<br />
el lugar predilecto para el<br />
juego de los niños. La sombra<br />
de sus majestuosas copas<br />
protegía de la insolación<br />
igual a la gente que a sus<br />
animales. El lugar era sitio<br />
de reposo en el camino hacia<br />
otras poblaciones. Aún hoy<br />
en día existen pobladores que se acuerdan<br />
y disfrutan recreándose con aquellas<br />
remembranzas.<br />
Están ubicados en el jardín principal de<br />
San Pablo Güilá, Municipio de Santiago<br />
Matatlán, en el Estado de Oaxaca. La<br />
población es de 3,932 habitantes, bilingües<br />
en su totalidad, con el zapoteco como su<br />
idioma principal.<br />
Los ahuehuetes de San Pablo Güilá ya<br />
hacen parte del patrimonio natural de<br />
Oaxaca en la declaración de árboles<br />
monumentales de la entidad.<br />
Durante la rehabilitación parte de<br />
los limitados recursos de la población se<br />
dedicaron al rescate de estos tres valiosísimos ejemplares de ahuehuete.<br />
En todo el proceso las autoridades del pueblo estuvieron atentas dirigiendo y haciendo un seguimiento
no.4 <strong>abril</strong> <strong>2013</strong><br />
<strong>ArbolAMA</strong><br />
exhaustivo de las obras. Los trabajos se realizaron al pie de la<br />
letra, tal y como se recomendaron<br />
en el proyecto inicialmente<br />
presentado.<br />
El terreno original donde se<br />
encuentran los árboles era<br />
una ladera, con una pendiente<br />
aproximada del 20 por ciento.<br />
Por el área pasaba un camino<br />
principal, con vehículos que<br />
atravesaban el lugar entre los<br />
árboles. En el sitio… “había un<br />
manantial con peces y tortugas<br />
y un gran sabino que lo protegía<br />
cuyas raíces se sumergían en el<br />
agua, formando grandes<br />
protuberancias para su respiración,<br />
que también servían para que los<br />
niños jugaran y donde las mujeres<br />
lavaban la ropa”. En la zona urbana<br />
existe un buen número de pozos,<br />
donde el manto freático está entre<br />
uno y dos metros de profundidad. De<br />
estos pozos se abastece la población.<br />
Hace aproximadamente 30 años,<br />
según versiones de los pobladores<br />
más antiguos, en este mismo lugar<br />
donde se encuentran los árboles<br />
(principalmente dos de ellos), en<br />
una superficie aproximada de 1,000<br />
metros cuadrados, se construyó una<br />
terraza con un terraplén o muro de contención de mampostería hidráulica de 50 metros de longitud y 3 metros de altura. Se<br />
hizo el relleno con el material de escombros de desecho, resultado de la construcción del templo aledaño.<br />
En el año 2,000 se diseño y terminó de construir, arriba de todo esto, lo que hoy es el jardín principal, con áreas jardinadas,<br />
andadores con adoquines, fuente, bancas, faroles y barandales metálicos. Se estaba completando y sellando el fatal destino de<br />
los árboles.<br />
Todos estos aspectos se tuvieron en cuenta al momento de planear la rehabilitación.<br />
21
<strong>ArbolAMA</strong><br />
no.4 <strong>abril</strong> <strong>2013</strong><br />
M ÉTODO H AMBURGO PARA LA<br />
P ODA DE LOS Á RBOLES<br />
U N E SQUEMA PARA LA P ODA DE Á RBOLES I NDIVIDUALES<br />
D IRK D UJESIEFKEN Y H ORST S TOBBE<br />
Instituto de Arboricultura, Hamburgo, Alemania<br />
Resumen: Los árboles en las zonas urbanas son podados por diversas razones. Cada corte de poda provoca<br />
una herida, lo que lleva, al menos en la madera expuesta en la superficie de la herida, a la decoloración y<br />
descomposición. La extensión del defecto resultante depende del diámetro de la herida, epoca y tratamiento<br />
de la misma, la especie de árbol y por último... pero no menos importante, la unión de la rama con el tronco.<br />
Las consecuencias de los diferentes cortes de poda en los árboles urbanos han sido objeto de investigación en<br />
Hamburgo, Alemania, desde 1985. El estudio de 750 heridas de poda en diferentes especies de árboles urbanos<br />
típicos condujo al Método Hamburgo para la Poda (Hamburger Schnitt-Methode). El sistema se describe en este<br />
documento y se responde a las siguientes preguntas: ¿Cómo se deben cortar las ramas con y sin cuello ¿Cómo<br />
deben ser removidas las ramas muertas ¿Cómo deben ser eliminadas las ramas con corteza incluida o tallos<br />
codominantes ¿Cuáles son las diferencias entre las especies de árboles en respuesta a una lesión ¿Cuál es el<br />
máximo tamaño de la herida que puede ser efectivamente compartimentada por el árbol<br />
Palabras clave: Arboricultura, poda, decoloración, descomposición, compartimentación<br />
Introducción<br />
Los árboles son podados por varias razones: en los bosques<br />
se podan para producir madera de alta calidad; en las<br />
zonas urbanas son podados, por ejemplo, por razones de<br />
seguridad para despejar vías rápidas y líneas eléctricas de alta<br />
tensión. Mientras que estudios extensos sobre la poda de las<br />
coníferas han estado disponibles desde hace mucho tiempo<br />
(por ejemplo, Mayer-Wegelin de 1936, 1952), la primera<br />
investigación detallada sobre la poda de árboles caducifolios<br />
se llevó a cabo por Shigo y su personal (Shigo et al.1978,<br />
1979; Green et al 1981; Shigo 1984, 1989). En Alemania, los<br />
resultados se presentaron por primera vez en una conferencia<br />
de arboricultura en 1984 provocando reacciones de confusión<br />
y protesta en los años subsecuentes. Hasta ese momento,<br />
en Alemania, el corte a ras había sido considerado como el<br />
método correcto para cortar una rama hasta el tronco. Desde<br />
entonces, la pregunta principal ha sido si el método alternativo<br />
de Shigo, de cortar al exterior del cuello de la rama, es mejor<br />
para el árbol que el corte a ras.<br />
Debido a que una gran cantidad de ramas no tienen collar<br />
o tienen corteza incluida en la horcadura, se realizaron<br />
investigaciones posteriores acerca de las reacciones a las<br />
heridas después de la poda de ramas con distintas inserciones<br />
en el tronco.<br />
Este documento resume los resultados de un total de 750<br />
heridas de poda y da recomendaciones para la práctica de la<br />
arboricultura.<br />
Materiales y Métodos<br />
Un total de 750 heridas diferentes de poda fueron realizadas a<br />
115 árboles urbanos de calles y parques (Dujesiefken y Liese<br />
1988) para comparar diferentes lugares de corte. Las ramas se<br />
encontraban unidas de diversas formas al tronco, por ejemplo,<br />
con o sin collar de la rama y tallos codominantes, con y sin<br />
corteza incluida en la horcadura, pero sin brotes epicórmicos.<br />
Los árboles se diferenciaban por el vigor, por la edad y por los<br />
daños existentes. La mayoría de los árboles tenían entre los<br />
60-100 años de edad y crecían en sitios urbanos. Se incluy-<br />
22
no.4 <strong>abril</strong> <strong>2013</strong><br />
<strong>ArbolAMA</strong><br />
eron 15 arces (Acer spp.), 15 hayas (Fagus sylvatica L.), 25 encinos<br />
(15 Quercus robur L., 10 Quercus rubra L.), 15 tilos (Tilia<br />
spp.), 10 álamos (Populus × euramericana [Dode] Guenier) y<br />
15 castaños de Indias (Aesculus hippocastanum L.). Adicionalmente<br />
fueron podados 10 manzanos (Malus spp.) y 10 cerezos<br />
(Prunus spp.), los cuales tenían aproximadamente 20 años de<br />
edad.<br />
[cm]<br />
castaño de indias<br />
tilo<br />
Un año después de la poda, cuatro árboles que tenían 44<br />
heridas de poda se derribaron para la disección en dirección<br />
radial con el fin de medir el área de la decoloración como un<br />
indicador de la compartimentación, la muerte regresiva del<br />
cambium en el margen inferior de la herida y el espesor del<br />
callo (Dujesiefken et al. 1988). Adicionalmente se registró<br />
la unión de la rama al tronco (por ejemplo, con o sin collar<br />
de la rama, con o sin corteza incluida). También se midió el<br />
diámetro de la rama (cm) y el tamaño de la herida (cm 2 ) de<br />
acuerdo con la ubicación de corte. Posteriormente, se hizo<br />
un comparativo entre las distintas reacciones a las heridas, en<br />
especial con relación a los diferentes tipos de corte, al tamaño<br />
de las heridas y a la unión de la rama al tronco, elaborando<br />
un análisis estadístico de los datos colectados. Cuatro años<br />
después de la poda, 64 árboles adicionales con 351 heridas de<br />
poda fueron investigados de la misma manera (Duje-Siefken<br />
1991). Después de seis años, otras 268 heridas de poda de 37<br />
árboles fueron analizadas. Nueve y diez años después se evaluó<br />
la compartimentación de la poda en 87 cortes diferentes de seis<br />
tilos y cuatro castaños de Indias (Dujesiefken et al 1998; Stobbe<br />
et al. 1998).<br />
En el primer año del estudio, adicionalmente, un total de 60<br />
ramas sin collar de arce, castaño de Indias, abedul (Betula<br />
verrucosa Ehrh.), carpinus (Carpinus betulus L.), encino y tilo<br />
(10 por especie) fueron reducidas a un muñón de 10 cm y se<br />
examinaron después de un año para responder a la pregunta de<br />
dónde se formaron las zonas de reacción (Dujesiefken 1991).<br />
Resultados y discusión<br />
¿Cómo cortar las ramas con y sin collar<br />
Los cortes a ras dejaron heridas dos o tres veces más grandes que<br />
las hechas en el collar de la rama. Los cortes a ras desarrollaron<br />
más tejido de callo en los bordes de la herida después de una<br />
temporada de crecimiento, pero el cierre de la herida fue más<br />
rápido en los cortes en el collar que en los cortes al ras debido<br />
a que las heridas eran más pequeñas. Diez años después de la<br />
poda sólo las heridas pequeñas se cerraron completamente y<br />
la mayoría de las heridas de poda de más de 5 cm de diámetro<br />
todavía estaban abiertas (Fig. 1a y b).<br />
Adicionalmente, los cortes al ras dejaron mucha más<br />
decoloración en el tejido leñoso y causaron muerte regresiva<br />
cambial extendida en los bordes de la herida, en comparación<br />
con los cortes en el collar (Fig. 2).<br />
diametro de la rama [mm]<br />
Fig. 7. Tilia spp. y Aesculus hippocastanum L., el área<br />
de decoloración del tronco depende del diámetro de<br />
la rama.<br />
[cm]<br />
1 año<br />
9 años<br />
diametro de la rama [mm]<br />
Fig. 8. Tilia spp., extensión de la decoloración en<br />
concordancia con el diámetro de la rama uno y nueve<br />
años después de la poda.<br />
[cm]<br />
diametro de la rama [mm]<br />
9 años<br />
1 año<br />
Fig. 9. Aesculus hippocastanum L., extensión de la<br />
decoloración en concordancia con el diámetro de la<br />
rama uno y nueve años después de la poda.<br />
Estos resultados confirman las recomendaciones de Shigo para<br />
la poda en el límite del collar de la rama (Shigo et al. 1978,<br />
1979) y también son acordes con los hallazgos de Neely (1988).<br />
Desde el inicio del estudio fue obvio que muchas ramas,<br />
especialmente en la parte superior de la copa, no tienen un<br />
collar y a veces adicionalmente tienen corteza incluida dentro<br />
de la horquilla. Si una rama sin collar fuese podada con un<br />
ángulo inclinado hacia el tallo, el cambium en el margen<br />
inferior morirá varios centímetros hacia abajo. Por lo tanto el<br />
tamaño de la herida aumenta y el margen inferior de la herida<br />
desarrolla madera muerta (Fig. 3). La madera de la herida<br />
creció sólo parcialmente sobre la superficie de corte, de modo<br />
que el cierre de la herida se hizo más lento.<br />
También fue evidente, para todos los árboles en este estudio,<br />
23
<strong>ArbolAMA</strong><br />
no.4 <strong>abril</strong> <strong>2013</strong><br />
Fig. 1. a: Tilia spp., corte en el collar<br />
de la rama, formación del callo nueve<br />
años después de la poda.<br />
b. Tilia spp., corte a ras, formación del<br />
callo nueve años después de la poda;<br />
la herida está menos cerrada que la del<br />
collar.<br />
Fig. 2. Aesculus hippocastanum L., compartimentación de dos ramas de tamaño similar nueve años después de la poda, vista radial;<br />
izquierda: corte a ras con gran decoloración alcanzando profundamente dentro del tronco; derecha: pequeña decoloración después<br />
del corte en el collar, restringido aisladamente al área de la base de la rama.<br />
Fig. 3. Heridas de poda inclinadas en ramas sin collar visible dejando muerte regresiva cambial en el margen inferior de la herida.<br />
Fig. 4. Zona de reacción en forma de embudo en la base de la rama con collar, vista radial.<br />
24
no.4 <strong>abril</strong> <strong>2013</strong><br />
<strong>ArbolAMA</strong><br />
Fig. 5. Zona de reacción en forma de<br />
S formada un año después del corte<br />
en la base del muñón de una rama sin<br />
collar, vista radial.<br />
Fig. 6. Una rama con corteza incluida<br />
usualmente no tiene collar y un<br />
reborde como costilla o cresta en<br />
lugar de la arruga de la corteza.<br />
que las ramas con collar normalmente formaron una zona<br />
de reacción en forma de embudo en la zona de abultamiento<br />
(Fig.4). La madera de la herida se desarrolló en el margen<br />
exterior del collar, donde la zona de reacción está en<br />
contacto con el cambium, lo cual está en consonancia con las<br />
conclusiones de Dujesiefken et al. 1991 y Eisner et al. 2002.<br />
En las ramas sin un collar la forma de la zona de reacción fue<br />
diferente (Fig. 5). En lugar de un embudo se creó una zona de<br />
reacción en forma de S. En el lado superior de la rama la zona<br />
de reacción se formó cerca de la arruga de la corteza, como en<br />
los muñones con un collar, pero en el lado inferior la zona de<br />
reacción se cerró más cerca del tallo.<br />
Los puntos donde las zonas de reacción se contactaron con<br />
el cambium sobre la parte superior y en el lado inferior de las<br />
bases de las ramas (Fig. 4 y 5) muestran la ubicación de los<br />
cortes de poda: ramas con collar deben ser podadas fuera del<br />
abultamiento en la base de la rama (sobre todo en un ángulo<br />
inclinado al tallo), y las ramas sin collar deben ser eliminadas<br />
también fuera de la arruga de la corteza, pero con un corte más<br />
paralelo al tallo para evitar la formación de un muñón muerto<br />
en el margen inferior de la herida. Este último corte no es a ras,<br />
porque la arruga de la corteza de la rama permanece en el tallo,<br />
y el corte inferior es más afuera del tallo. La herida es mucho<br />
más pequeña que el corte al ras y de forma ovalada. El cambium<br />
en los bordes de la herida es abastecido con substancias que<br />
le permiten al árbol, por tanto, aislar la herida directamente<br />
desde los bordes de la misma. Con este corte es posible una<br />
herida más pequeña y un mejor cierre de la misma. Este corte<br />
es también parte de la Guía de Poda Europea (1999).<br />
¿Cómo cortar ramas muertas<br />
Las ramas muertas por lo general tienen un abultamiento de<br />
los tejidos vivos en la base - a modo de collar - formado por el<br />
tronco más que por la rama, el cual es invadido por diferentes<br />
hongos de descomposición de la madera (Butin y Kowalski,<br />
1983a, b, 1986). Cerca del tronco, la descomposición de la<br />
madera en la rama seca es particularmente intensa y crea un<br />
punto de ruptura. Como son collares no se deben cortar cuando<br />
se poden las ramas vivas; tampoco las áreas abultadas de tejido<br />
vivo en las bases de ramas muertas deben ser eliminadas.<br />
Por lo general, se observa compartimentación insuficiente<br />
solamente en el tronco de ramas gruesas muertas y en árboles<br />
menos vigorosos. En estos casos no se puede encontrar un<br />
collar visible ni un abultamiento en la base de la rama (Aufsess<br />
1975). En estas ramas gruesas de madera muerta siempre<br />
se requiere vigilancia, sobre todo en los árboles de las zonas<br />
urbanas por razones de seguridad.<br />
¿Cómo cortar ramas con corteza incluida o<br />
tallos codominantes<br />
La corteza incluida se observó en casi todas las especies de<br />
árboles, pero muy a menudo en Fagus, Prunus y Tilia, y se<br />
desarrolla con frecuencia en horquillas en forma de V y entre<br />
tallos codominantes (Fig. 6). La corteza incluida significa<br />
corteza interior y exterior que se forma entre la rama y el<br />
tronco. El cambium vascular crece hacia adentro y hacia<br />
fuera de la horquilla de la rama. La arruga de la corteza de la<br />
rama crece también hacia adentro y forma un reborde como<br />
25
<strong>ArbolAMA</strong><br />
no.4 <strong>abril</strong> <strong>2013</strong><br />
costilla o cresta. Las ramas con corteza incluida en la horquilla<br />
están mal unidas al tallo y normalmente no tienen un collar<br />
visible. Tales ramas deberían ser eliminadas del árbol en<br />
una etapa temprana, por ejemplo en el vivero o mediante la<br />
poda formativa en el árbol joven. Ellas deben ser reducidas o<br />
cableadas cuando hay una ruptura en la unión.<br />
Cuando tengan que eliminarse ramas con corteza incluida se<br />
tienen que podar afuera de la costilla o cresta y el corte tiene<br />
que ser recto para evitar la muerte regresiva en el margen<br />
inferior de la herida. La observación de cortes viejos mostró<br />
que a pesar de la poda apropiada no se formó callo en la parte<br />
superior de la herida, porque aquí el cambium está servido<br />
pobremente con substancias nutritivas debido a la corteza<br />
incluida.<br />
También se observaron tallos codominantes en todas las<br />
especies de árboles en este estudio, pero más a menudo en<br />
Acer, Fraxinus y Tilia. El desarrollo de tales tallos se debe evitar<br />
eliminando uno de ellos en una etapa temprana en el vivero o<br />
mediante la poda formativa en el árbol joven. Si el diámetro de<br />
los tallos codominantes es ya demasiado grande, uno de ellos se<br />
debe reducir, no eliminar. Esta reducción disminuye la tasa de<br />
crecimiento en el tallo cortado, lo que ayuda a desarrollar una<br />
rama en lugar de un tallo codominante. Además, la herida de<br />
poda y la decoloración resultante estarán lejos de la unión del<br />
tallo. Cuando se eliminan tales tallos el corte tiene que hacerse<br />
cerca del tallo remanente, afuera de la arruga de la corteza de<br />
la rama. Este resultado es acorde con otras recomendaciones<br />
(Shigo 1989; Guía Europea Poda de 1999; Gilman 2002).<br />
Fig. 10. Aesculus<br />
hippocastanum<br />
L., dos grandes<br />
heridas de poda<br />
con decoloración<br />
profunda en el<br />
tronco.<br />
material almacenado. Por esta razón los períodos estacionales<br />
también tienen una influencia en las reacciones de heridas de<br />
los árboles. Esto no solo afecta la expansión de la decoloración<br />
de la madera, sino también la muerte regresiva del cambium y<br />
la formación de callo en el margen de la herida (Dujesiefken y<br />
Diferencias entre especies en cuanto a<br />
respuesta de la herida<br />
Las diferentes uniones de las ramas, anteriormente<br />
mencionadas, se presentaron en casi todas las especies<br />
arbóreas, por lo que este esquema se considera aplicable<br />
independientemente de la especie y del sitio, de la causa y el<br />
objetivo del tratamiento. Pero incluso la ubicación correcta<br />
del corte puede conducir a decoloración de largo alcance y<br />
descomposición en el interior del tronco. Los parámetros<br />
esenciales son el diámetro de la rama y la capacidad del árbol<br />
para compartimentar las heridas. Varias investigaciones sobre<br />
la compartimentación de las heridas similares en distintos<br />
árboles muestran que hay fuertes diferencias entre las especies<br />
de árboles (por ejemplo, Lenz y Oswald, 1971; Shortle 1979;<br />
Bauch et al 1980). En general existen dos grupos de árboles<br />
en cuanto a compartimentación (Dujesiefken 1991). Géneros<br />
de compartimentación débil son por ejemplo Aesculus, Betula,<br />
Malus, Populus, Prunus, y Salix. En comparación, géneros de<br />
compartimentación eficaz son, por ejemplo, Carpinus, Fagus,<br />
Quercus, y Tilia.<br />
Adicionalmente, los mecanismos de la compartimentación de<br />
los árboles deciduos dependen de la actividad fisiológica de<br />
las células del parénquima, así como de la disponibilidad de<br />
Fig. 11. Poda incorrecta: las cortas a ras dejan grandes heridas con<br />
decoloración vasta y tienen que ser omitidas; Ilustración: Gunnar<br />
Kleist.<br />
26
no.4 <strong>abril</strong> <strong>2013</strong><br />
<strong>ArbolAMA</strong><br />
Liese 1990; Dujesiefken 1991; Liese y Dujesiefken 1996).<br />
Tamaño máximo de la herida que puede ser<br />
efectivamente compartimentado<br />
El tamaño de una herida depende del diámetro de la rama<br />
suprimida así como en la localización del corte (Dujesiefken et<br />
al 1988; Stobbe et al 1998). Castaño y tilo han demostrado un<br />
aumento exponencial de la decoloración a mayor diámetro de<br />
la rama (Fig. 7). El castaño de Indias es un compartimentador<br />
débil y las ramas podadas con un diámetro similar dejaron<br />
una decoloración más extensa en comparación con el tilo. La<br />
decoloración de las heridas de poda de nueve años de edad, de<br />
ambas especies de árboles, fue más grande que las heridas de<br />
un año de edad (Fig.8-9).<br />
Hubo poca diferencia en el área de decoloración cuando se<br />
compararon las heridas pequeñas de uno y nueve años de<br />
edad. Las diferencias en tejido decolorado incrementaron con<br />
el aumento del diámetro de la rama.<br />
La causa esencial es probablemente la edad del tejido dañado.<br />
Pequeñas heridas de poda sólo dañan los tejidos más jóvenes,<br />
es decir, el incremento de los últimos años, los cuales contienen<br />
células activas de parénquima con la mayor cantidad de<br />
energía de reserva. Los cortes grandes lesionan también el<br />
tejido viejo en el centro del tronco, que no puede reaccionar<br />
tan eficazmente. La decoloración en el centro de la herida<br />
llega más lejos en el tronco que en la periferia de la herida y<br />
la compartimentación del tejido más viejo cerca de la médula<br />
parece ser más débil que la reacción del tejido joven.<br />
La zona de reacción formada inmediatamente después de la<br />
lesión puede ser penetrada por microorganismos después de<br />
varios años, lo que resulta en una nueva decoloración que rodea<br />
la madera decolorada inicialmente (Dujesiefken et al 1998;<br />
Stobbe et al. 1999a; fig. 10). Las zonas de reacción penetradas<br />
también se han descrito para el fresno, haya y castaño de Indias<br />
(Pearce 1991) y otros árboles deciduos (Schwarze et al. 2000)<br />
en el contexto de diferentes hongos descomponedores de la<br />
madera interior.<br />
En este estudio, todas las heridas de poda con un diámetro<br />
menor de 5 cm fueron compartimentadas con eficacia. Los<br />
árboles con fuerte compartimentación también reaccionaron<br />
en forma similar en cortes con un diámetro de hasta 10 cm.<br />
En todas las especies las heridas más grandes pueden llevar a<br />
la decoloración y descomposición en el tronco (Dujesiefken<br />
1991).<br />
Método Hamburgo para la Poda de los Árboles<br />
Para determinar el mejor corte para obtener una óptima<br />
reacción de la herida se tienen que considerar las especies<br />
de árboles y el patrón de ramificación. Como resultado de<br />
esta investigación, el Método Hamburgo para la Poda de<br />
los Árboles fue desarrollado y por primera vez introducido<br />
como “Hamburger Schnittmethode” en una conferencia de<br />
arboricultura en Heidelberg, Alemania, en mayo de 1989<br />
(Dujesiefken 1991).<br />
Desde 1992 el sistema ha sido integrado en las reglas y<br />
regulaciones alemanas para los métodos de cuidado de árboles<br />
(ZTV-Baumpflege). Las nuevas recomendaciones para las<br />
ramas sin collar son también parte de la Guía de Poda Europea<br />
(1999). De acuerdo a la unión de la rama con el tronco el corte<br />
tiene que estar afuera del tejido del tronco o tallo de manera<br />
que la arruga de la corteza no sea dañada y permanezca en el<br />
tronco. Los cortes a ras tienen que ser evitados. Este esquema<br />
para mantenimiento del árbol se presenta en las figuras 11 y<br />
12 a-f.<br />
Independientemente de la época del año y de las especies de<br />
árboles, por lo general, se puede decir que la poda radical de<br />
árboles, por ejemplo la eliminación drástica de partes de la<br />
corona o copas completas, no debería ser una práctica común.<br />
Si es posible, las ramas mayores de 5 cm de diámetro de los<br />
árboles de débil compartimentación, y de 10 cm en los de<br />
fuerte compartimentación, sólo deben reducirse parcialmente<br />
en lugar de eliminarse por completo. Lo mismo se aplica para<br />
los tallos múltiples. En algunos casos la instalación de un<br />
sistema de reforzamiento de la copa puede hacer seguro un<br />
árbol peligroso, sin necesidad de corte (Stobbe et al, 1999b;<br />
Lesnino et al 2000). Para la práctica arboricultural también es<br />
necesario contar con información acerca de la arquitectura de<br />
la copa, especialmente para la formación de los árboles jóvenes<br />
y la restauración de la copa de los árboles maduros (Drénou<br />
1999; Pfisterer 1999; Roloff 2001; Gilman 2002). De cualquier<br />
manera, es mejor llevar a cabo la poda de los árboles en una<br />
fase temprana y de acuerdo al esquema ya indicado.<br />
Fig. 12a-f. Método Hamburgo para la Poda. a: El collar de rama tiene<br />
que permanecer en el tronco ya que pertenece al tejido del mismo. El<br />
corte tiene que estar afuera de la arruga de la corteza, de acuerdo a la<br />
forma del collar; b: Las ramas sin un collar tienen que ser podadas<br />
afuera de la arruga de la corteza y el corte debe ser recto para evitar la<br />
muerte descendente del cambium; c: Las ramas con corteza incluida<br />
deben ser podadas afuera de los rebordes y el corte debe ser recto.<br />
A pesar de la poda apropiada es posible que no haya crecimiento<br />
cambial en la parte superior de la herida; debido a la corteza incluida<br />
el cambium en esta dirección está mal suministrado con asimilados;<br />
d: Poda de ramas muertas: el abultamiento distintivo en la base de la<br />
rama debe permanecer cuando se poda; e: Tallos codominantes con<br />
más de 5 ó 10 cm de diámetro solo deben ser parcialmente reducidos,<br />
en lugar de eliminarlos completamente. Si la remoción es inevitable<br />
el corte debe realizarse afuera de la arruga de la corteza y a menudo<br />
el cambium en el lado inferior de la herida muere varios centímetros,<br />
debido a que no puede ser provisto con asimilados; f: Para la poda<br />
de una rama lateral (reducción, en este caso a un lado) el corte debe<br />
hacerse afuera de la arruga de la corteza. Ilustración: Gunnar Kleist.<br />
27
<strong>ArbolAMA</strong><br />
no.4 <strong>abril</strong> <strong>2013</strong><br />
28
no.4 <strong>abril</strong> <strong>2013</strong><br />
<strong>ArbolAMA</strong><br />
Literatura<br />
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biologischen Voraussetzungen. I. Die Pilzflora der Buche (Fagus sylvatica).<br />
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Butin H & Kowalski T (1986) Die natürliche Astreinigung und ihre<br />
biologischen Voraussetzungen. III. Die Pilzflora von Ahorn, Erle, Birke,<br />
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nach Astung bei Roßkastanie. In: Jahrbuch der Baumpflege 1999 (eds D<br />
Dujesiefken & P Kockerbeck): 222–226. Thalacker Medien, Braunschweig.<br />
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With The Double Belt “System Osnabrück”. Journal of Arboriculture 25:<br />
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ZTV – BAUMPFLEGE (1992) Zusätzliche Technische Ver- tragsbedingungen<br />
und Richtlinien für Baumpflege und Baumsanierung. 2. edition<br />
Forschungsgesellschaft Land- schaftsentwicklung – Landschaftsbau e.V.<br />
(FLL), Bonn.<br />
Address for correspondence: Dirk Dujesiefken, Institute of<br />
Arboriculture, Brookkehre 60, D-21029 Hamburg, Germany.<br />
Tel.: +49-(0)40/7241310; fax: +49-(0)40/7212113.<br />
E-mail: dirk.dujesiefken@institut-fuer-baumpflege.de<br />
Artículo original:<br />
The Hamburg Tree Pruning System –<br />
A framework for pruning of individual trees<br />
Urban Forestry & Urban Greening 1 (2002)<br />
© Urban & Fischer Verlag http://www.urbanfischer.de/journals/ufug<br />
Para la traducción y publicación de este artículo se obtuvieron los<br />
permisos tanto de los autores como de los editores (28 de marzo de<br />
<strong>2013</strong>).<br />
Traducción del inglés:<br />
Dr. Daniel Rivas Torres y<br />
David Santiago Restrepo Fernández<br />
29
<strong>ArbolAMA</strong><br />
no.4 <strong>abril</strong> <strong>2013</strong><br />
E XAMEN DE C ERTIFICACIÓN COMO<br />
A RBORISTA EN E SPAÑOL<br />
IV FORO N ACIONAL DE A RBORICULTURA Y D ASONOMÍA U RBANA<br />
O AXACA, O AXACA<br />
J ardín E tnobotánico<br />
V IERNES 26 DE ABRIL DE <strong>2013</strong><br />
17:00 - 20:30 horas<br />
Si tienes por lo menos tres años comprobables de experiencia en arboricultura, y deseas ampliar y/o demostrar tus<br />
conocimientos sobre el tema, puedes presentar el… EXAMEN DE CERTIFICACIÓN COMO ARBORISTA EN ESPAÑOL<br />
Consulte nuestro sitio Web para conocer el mapa de<br />
ubicación del sitio del examen.<br />
ES MUY IMPORTANTE, ANTES DEL 10 DE ABRIL<br />
DE <strong>2013</strong>:<br />
Llenar la solicitud para presentar el examen:<br />
Entra en la página www.isa-arbor.com, en “Certification”,<br />
y llena el formato. Esto debe hacerse con mucha<br />
precisión. Si tienes alguna duda, o deseas ayuda para<br />
llenar el formato, comunícate con nosotros y con gusto<br />
lo ayudaremos.<br />
Realizar el pago correspondiente:<br />
(150 dólares - miembros de la ISA y de la AMA) (250<br />
dólares – no miembros).<br />
Para ser miembro de la ISA, deberás llenar la solicitud<br />
y pagar online previo a la solicitud para el examen de<br />
certificación.<br />
Para ser miembro de la AMA, consulta nuestra página.<br />
Sólo serán acreedores al precio de descuento quienes<br />
sean miembros de AMBAS asociaciones.<br />
¡Ponerte a estudiar!<br />
El examen estará dividido en 10 temas: Manejo del suelo;<br />
Identificación y selección; Instalación y establecimiento;<br />
Seguridad; Biología del árbol; Conceptos y técnicas de<br />
poda; Diagnóstico y tratamiento; Manejo de árboles<br />
urbanos; Protección del árbol; Manejo de árboles de<br />
riesgo.<br />
Se obtiene una calificación por cada tema, y una global.<br />
En caso de no aprobarse todos los temas, podrán<br />
presentarse posteriormente en exámenes parciales.<br />
Se recomienda no sólo estudiar la Guía de Estudio para<br />
la Certificación del Arborista, publicado por la ISA, sino<br />
también las lecturas que dicho libro recomienda.<br />
A TODOS LOS INTERESADOS: ¡ANÍMENSE!<br />
y comuníquense con DIANA MARCHAL a los<br />
teléfonos:/ 5534-6595 / 04455-9143-9155, o al correo<br />
diana.marchal@hotmail.com y arbol_ama@yahoo.com.<br />
mx<br />
RECUERDE QUE LA FECHA LÍMITE PARA<br />
REALIZAR LOS TRÁMITES ES EL 10 DE ABRIL, Y<br />
NO HAY PRÓRROGA POSIBLE<br />
¡NO DEJES PASAR ESTA OPORTUNIDAD!<br />
ASOCIACIÓN MEXICANA DE ARBORICULTURA<br />
“PARA QUIEN AMA LOS ÁRBOLES”<br />
México, febrero 25 de <strong>2013</strong><br />
30
no.4 <strong>abril</strong> <strong>2013</strong><br />
<strong>ArbolAMA</strong><br />
C URSO-TALLER DE A RBORICULTURA<br />
IV FORO N ACIONAL DE A RBORICULTURA Y D ASONOMÍA U RBANA<br />
25-26 DE ABRIL DE <strong>2013</strong>, OAXACA<br />
T REPA A LOS Á RBOLES<br />
El sitio de trabajo de los arboristas, muchas veces, se encuentra a 10, 20 o más metros de altura. En este taller de capacitación en el campo, los<br />
participantes tienen la oportunidad de conocer y practicar las principales técnicas para trepar y desplazarse con seguridad en la copa de los árboles.<br />
Se requiere estar en buenas condiciones físicas. Indispensable traer equipo de protección personal: ropa de trabajo, casco con<br />
barboquejo, guantes, lentes y botas. También proveerse de bloqueador solar, una torta o un pequeño lunch y agua. Si los participantes<br />
no lo traen, se les proporcionará equipo de trepa. Se expedirá constancia de participación. Costo $200.00. Socios AMA y estudiantes<br />
a nivel licenciatura pagan $100.00.<br />
Jueves<br />
25<br />
Auditorio y Áreas Verdes Instituto Tecnológico del Valle de Oaxaca ITVO<br />
12:00 - 13:00 Presentación: Exponer los objetivos y la dinámica del curso - Daniel Rivas<br />
12:30 - 13:30 Calistenia: Explicar y realizar los ejercicios basicos, comentar el estilo de vida y la dieta que debe seguir el trepador (a) :recomendaciones<br />
practicas - David Santiago Restrepo<br />
13:30 - 15:00 Técnicas de trepa: Con el apoyo de los instructores subir o intentar subir a los árboles; observar la seguridad<br />
-David S. Restrepo y René Villanueva<br />
15:00 – 16:00 Receso<br />
16:00 – 16:30 Equipo y Seguridad Describir los principales implementos utilizados para la trepa y botiquín de primeros auxilios. Explicar las<br />
medidas de seguridad: recomendaciones prácticas - René Villanueva<br />
16:30 – 18:00 Desplazamiento en la copa: Trepa y desplazamiento en la copa con el apoyo y demostraciones de los instructores<br />
-David S. Restrepo y René Villanueva<br />
P ODA DE Á RBOLES U RBANOS<br />
La corta de las ramas es el trabajo más frecuente con los árboles en la ciudad, lamentablemente no se realiza apropiadamente y lo que se observa es<br />
su mutilación y destrucción, afectando con esto la estructura, seguridad y salud de especies valiosísimas que han tardado muchos años en crecer para<br />
aportar sus múltiples beneficios ambientales, sociales y ecológicos.<br />
Este curso-taller permite a los participantes adquirir los conocimientos y el entrenamiento para realizar las cortas en la copa de<br />
los árboles. Se requiere estar en buenas condiciones físicas. Indispensable traer equipo de protección personal: ropa de trabajo,<br />
casco con barboquejo, guantes, lentes y botas. También proveerse de bloqueador solar, una torta o un pequeño lunch y agua. Si los<br />
participantes no lo traen, se les proporcionará equipo de trepa y trabajo en la copa. Se expedirá constancia de participación. Costo<br />
$200.00. Socios AMA y estudiantes a nivel licenciatura pagan $100.00.<br />
Viernes<br />
26<br />
San Bartolo Coyotepec<br />
8:00 – 8:30 Presentación: Exponer los objetivos y la dinámica del curso - Daniel Rivas<br />
8:30 – 9:00 Objetivos de la poda: Seguridad, ambientales y de salud del árbol (Aula) - René Villanueva<br />
9:00 – 10:00 Tipos de cortas y clases de poda Remoción y despunte; formación y mantenimiento (Aula) - David S.Restrepo<br />
10:00 – 12:00 Poda de copa: Práctica de campo: desplazamiento en las ramas para el despunte empleando el serrote<br />
- David S. Restrepo y René Villanueva<br />
31
<strong>ArbolAMA</strong><br />
C ONVOCATORIA AMA<br />
P ROCESO DE E LECCIÓN DE C ONSEJO D IRECTIVO<br />
<strong>2013</strong>-2015<br />
no.4 <strong>abril</strong> <strong>2013</strong><br />
Asociación Mexicana<br />
de Arboricultura A.C<br />
La Asociación Mexicana de Arboricultura A. C., (AMA)<br />
con apego en los estatutos contenidos en la escritura<br />
número 63260, con fecha 18 de junio de 1999, ante el<br />
notario público 137 del Distrito Federal, inscrita en el<br />
Registro Público de Personas Morales, en el folio número<br />
47881, invita al proceso de selección para Consejo<br />
Directivo que entrará en funciones del <strong>2013</strong> al 2015.<br />
La culminación de dicho proceso tendrá lugar el día<br />
sábado 25 de Mayo de <strong>2013</strong> a las 11:00 horas en la Quinta<br />
Colorada, del Bosque de Chapultepec de la Ciudad de<br />
México, con la elección de nuevo Consejo Directivo de la<br />
AMA.<br />
Los cargos a elegir son: presidente, vicepresidente, tesorero,<br />
secretario, vocales. El consejo deberá estar formado por al<br />
menos 5 miembros así como con un máximo de 9. Los<br />
consejeros serán seleccionados en asamblea mediante<br />
voto.<br />
REQUISITOS PARA CONTENDER POR ALGÚN CARGO:<br />
• Ser socio de la AMA, A. C.<br />
• Estar al corriente en sus cuotas.<br />
• Para los cargos de presidente, vicepresidente, tesorero y secretario, tener al menos dos años como miembros<br />
activos de la asociación.<br />
• De preferencia presentar un breve resumen del programa de trabajo que proponen.<br />
REQUISITOS PARA VOTAR:<br />
• Para votar, cada socio deberá estar al corriente en sus cuotas, encontrarse presente en la Asamblea y tendrá<br />
derecho a emitir un voto.<br />
México, a 8 de <strong>abril</strong> de <strong>2013</strong>.<br />
32
Asociación Mexicana de Arboricultura<br />
Para quién AMA los árboles<br />
¡Inscríbase a la AMA!<br />
Si ya esta inscrito, apóyenos renovando puntualmente su membresía anual.<br />
lnscripción regular: $500.00 M.N.<br />
Depósitos a la cuenta:<br />
Asociación Mexicana de Arboricultura A.C.<br />
Banco Scotiabank<br />
Sucursal 015, Plaza Patria<br />
Número de cuenta 01002460556<br />
CLABE 044320010024605560<br />
Enviando un escáner del depósito a nuestra Secretaria: Diana Marchal, dianafederica@hotmail.com, con su ficha de<br />
inscripción, que se encuentra en nuestro sitio de internet www.arboricultura.org.mx. Como confirmación de su inscripción,<br />
su nombre aparecerá en la lista de socios, que se encuentra en el mismo sitio .<br />
La presente edición está destinada a servir como órgano de difusión de la Asociación Mexicana de Arboricultura, A.C. que,<br />
al hacerse responsable de esta publicación, declara que no persigue con ello ningún propósito lucrativo.<br />
El contenido de los artículos es responsabilidad de cada uno de los autores y no refleja necesariamente la postura de la<br />
Asociación.<br />
La edición estuvo al cuidado del Comité Editorial de <strong>ArbolAMA</strong>.<br />
Las citas, reproducciones gráficas y fotografías, trabajos de diseño y demás material incluido en la presente publicación,<br />
están libres de pago de derechos de autor, según la Ley Federal de Derechos de Autor, publicada en el Diario Oficial de la<br />
Federación del 31 de diciembre de 1956, reformada segun decreto del 4 de noviembre de 1963.<br />
El articulo 18 de dicha Ley dice a la letra: “El derecho de autor no ampara los siguientes casos: c) la publicación de obras<br />
de arte o de arquitectura que sean visibles desde lugares públicos; d) la traducción o reproducción por cualquier medio, de<br />
breves fragmentos de obras científicas, literarias o artísticas, en publicaciones hechas con fines didácticos ...”<br />
Todo el trabajo de diseño, edición, elaboración y publicación digital estuvo a cargo de David Santiago Restrepo bajo la<br />
supervisión del Doctor Daniel Rivas.<br />
www.arboricultura.org.mx<br />
facebook.com/arboricultura<br />
twitter.com/<strong>ArbolAMA</strong>
P ATROCINADORES DEL IV FORO N ACIONAL DE A RBORICULTURA Y D ASONOMÍA U RBANA<br />
VIVEROS<br />
DEL NORESTE<br />
Tree Farm<br />
San Bartolo Coyotepec