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LA SOLUCIÓN 7 MINUTOS - Ediciones B

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La Solución<br />

7 Minutos


La Solución<br />

7 Minutos<br />

Allyson Lewis<br />

Traducción de Francesc Reyes Camps<br />

Barcelona • Madrid • Bogotá • Buenos Aires • Caracas • México D.F. • Miami • Montevideo • Santiago de Chile


Título original: The 7 minute solution<br />

Traducción: Francesc Reyes Camps<br />

1.ª edición: septiembre 2012<br />

© 2012 by Allyson Lewis<br />

© <strong>Ediciones</strong> B, S. A., 2012<br />

Consell de Cent, 425-427 - 08009 Barcelona (España)<br />

www.edicionesb.com<br />

Printed in Spain<br />

ISBN: 978-84-666-5131-8<br />

Depósito legal: B. 20.243-2012<br />

Impreso por LIMPERGRAF, S.L.<br />

Mogoda, 29-31 Polígon Can Salvatella<br />

08210 - Barberà del Vallès (Barcelona)<br />

Todos los derechos reservados. Bajo las sanciones establecidas<br />

en el ordenamiento jurídico, queda rigurosamente prohibida,<br />

sin autorización escrita de los titulares del copyright, la reproducción<br />

total o parcial de esta obra por cualquier medio o procedimiento,<br />

comprendidos la reprografía y el tratamiento informático, así como<br />

la distribución de ejemplares mediante alquiler o préstamo públicos.


Para Mark, Abby y J.


Índice<br />

Primera parte<br />

Necesidad de la Solución 7 Minutos. . . . . . . . . . . . . . . . . . 11<br />

Prólogo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 13<br />

Introducción . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 15<br />

¿Qué es la Solución 7 Minutos . . . . . . . . . . . . . . . . . . 27<br />

El problema: la falta de consciencia. . . . . . . . . . . . . . . . 41<br />

¿A qué prestamos atención . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 47<br />

Segunda parte<br />

Los 7 signos vitales . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 65<br />

Signo vital 1: ¿Tenemos plena conciencia . . . . . . . . . 67<br />

Signo vital 2: ¿Estamos motivados . . . . . . . . . . . . . . . 103<br />

Signo vital 3: ¿Crecemos y aprendemos. . . . . . . . . . . 143<br />

Signo vital 4: ¿Nos comprometemos . . . . . . . . . . . . . 177<br />

Signo vital 5: ¿Somos perseverantes . . . . . . . . . . . . . . 209<br />

Signo vital 6: ¿Vivimos en un estado de fluido . . . . . 239<br />

Signo vital 7: ¿Vivimos con fe . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 259<br />

Tercera parte<br />

Crear una vida plena en períodos de 7 minutos . . . . . . . . . 285<br />

Uso de los sistemas y herramientas 7 minutos . . . . . . . 287<br />

Informe de progreso diario Vida 7 Minutos. . . . . . . 307<br />

Vivir la Vida 7 Minutos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 325<br />

Epílogo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 331


Apéndice I.<br />

Guía rápida de iniciación en la Solución 7 Minutos:<br />

Un plan de acción en 31 días . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 333<br />

Apéndice II.<br />

Herramientas y hojas de trabajo de la Solución<br />

7 Minutos. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 389<br />

Agradecimientos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 413


PRIMERA PARTE<br />

Necesidad de la Solución<br />

7 Minutos


Prólogo<br />

La Solución 7 Minutos ofrece estrategias para que podamos<br />

priorizar, organizar y simplificar nuestra vida y hacer que sea más<br />

plena y productiva.<br />

Al utilizar las herramientas, ideas, listas de comprobación,<br />

procesos y sistemas de repetición 7 Minutos seremos capaces de<br />

utilizar el tiempo con mayor efectividad para proveernos de energía,<br />

para inspirarnos, para conectar con el yo que queremos ser y<br />

para conseguir más en los próximos noventa días de lo que nunca<br />

habíamos conseguido.<br />

La Solución 7 Minutos es una práctica realmente sencilla.<br />

Aprenderemos a avanzar a pasos pequeños y fáciles cada día, pasos<br />

que nos permitirán efectuar grandes cambios en aspectos pequeños.<br />

Podemos crear un gran volumen de cambios en nuestra<br />

vida mediante este proceso diario.<br />

La Solución 7 Minutos tiene dos principios básicos:<br />

• El cambio se produce en un instante ® . Aparece en el momento en<br />

que DECIDIMOS cambiar.<br />

• Tenemos que optar por avanzar a pasos pequeños, positivos y estratégicos<br />

CADA DÍA.<br />

Hoy avanzamos en una dirección. Y entonces ocurre algo.<br />

Caemos en la cuenta de que nos enfrentamos a una elección.<br />

Podemos optar por seguir siendo los mismos o podemos optar<br />

por dar un pequeño y nuevo paso adelante.


14<br />

la solución 7 minutos<br />

La Solución 7 Minutos consiste en decidirse por el cambio y<br />

en optar por dar un nuevo paso adelante hacia una vida más plena<br />

cada día.<br />

Bienvenidos a la comunidad 7 Minutos.<br />

He aquí un ejemplo de una de las más conocidas herramientas<br />

7 Minutos, el Informe de progreso diario. Un instrumento de administración<br />

del tiempo tan sencillo como este me ha cambiado la vida.<br />

Es solamente una de la multitud de ideas revolucionarias que encontraremos<br />

en este libro.<br />

Suscríbase a la sección de herramientas de los miembros de la<br />

web www.The7MinuteLife.com para descargar gratuitamente esta<br />

y las demás herramientas, fichas y listas de comprobación de Vida<br />

7 Minutos (en inglés).


Introducción<br />

Como el hombre piensa en su corazón, así<br />

es él.<br />

Proverbios 23, 7<br />

Biblia del rey Jacobo<br />

Hace miles de años, el sabio rey Salomón escribió: «Como el<br />

hombre piensa en su corazón, así es él.» En la época medieval,<br />

los científicos y filósofos creían que el alma residía en el corazón<br />

humano. La idea no carecía de sentido: cuando estamos tristes,<br />

el corazón duele. Cuando nos sentimos en plenitud física o emocional,<br />

notamos que late con fuerza.<br />

En uno de sus recientes sermones Dan Reeves, mi pastor,<br />

puso el ejemplo de las conexiones que se dan entre pensamiento,<br />

vida y corazón. Ese domingo por la mañana, cuando iba hacia el<br />

púlpito, el familiar sonido de un corazón humano invadió el auditorio,<br />

sumido en la penumbra.<br />

Bum-bum... bum-bum.<br />

El vídeo de un corazón humano latiendo apareció en la pantalla<br />

situada tras él.<br />

Bum-bum... bum-bum.<br />

«El corazón humano está diseñado para bombear la cantidad<br />

exacta de sangre, la que satisface las exigencias precisas del cuerpo<br />

en el momento justo —dijo Reeves—. Cuando descansamos,


16<br />

la solución 7 minutos<br />

el corazón va despacio. Cuando hacemos ejercicio, el ritmo cardíaco<br />

se incrementa hasta el nivel adecuado para satisfacer la demanda.<br />

No tenemos conciencia de ello, no pensamos en ningún<br />

momento: “Mejor será que acelere el ritmo del corazón.” Más<br />

bien es el corazón quien cambia de comportamiento según lo que<br />

se le pide en un momento u otro. Al igual que el corazón, la vida<br />

también está preparada para darnos exactamente lo que le pidamos.»<br />

Con el rítmico latido de un corazón como fondo, formuló<br />

una pregunta que espero respondamos ahora mismo: «¿Qué le<br />

pediréis a la vida»<br />

¡Qué afirmación más vigorosa! «La vida está preparada para<br />

darnos exactamente lo que le pidamos.» En este libro pediré que<br />

contemplemos nuestra vida en profundidad. ¿Sabemos qué queremos<br />

obtener realmente de ella ¿Sabemos que la vida podría<br />

ser diferente si sacáramos el mejor provecho de la mente, de la<br />

nutrición, del sueño, del estudio y del tiempo<br />

Queremos una vida más plena, pero ¿le pedimos realmente a<br />

la vida que nos dé lo mejor que tiene<br />

Reeves continuó su sermón tomando una gran piedra que<br />

tenía cerca. Aquella losa informe debía medir unos ochenta centímetros<br />

de ancho por cincuenta de alto, y pesaría sus buenos<br />

quince kilos. Mientras sostenía la piedra describió lo que le había<br />

costado traerla: como le resultaba imposible cargar con ella y<br />

abrir la puerta al mismo tiempo, había tenido que dejarla en el<br />

suelo, abrir la puerta, sostenerla con el pie, inclinarse, tomar la<br />

piedra, apoyar la espalda contra la puerta y maniobrar para pasar<br />

adentro. Desde allí había cargado con la piedra unos cien metros,<br />

hasta que había tenido que habérselas con una puerta más. Al<br />

final, sudoroso, había podido dejar su carga allí, procurando no<br />

estropear el suelo de madera.<br />

A medida que narraba el incidente la piedra parecía aumentar<br />

de peso, y la tensión se reflejaba en sus brazos y manos.<br />

«No estamos diseñados para ir todo el día cargando piedras<br />

pesadas —dijo, mientras la depositaba con cuidado en el suelo—.<br />

Ya ni me siento los dedos, y los brazos me duelen. Sencillamen­


Introducción 17<br />

te hay cosas en la vida con las que no tenemos por qué cargar.<br />

¿Qué necesitamos que cambie en nuestra vida ¿Qué necesitamos<br />

dejar en el suelo<br />

»El corazón y la fuerza de que dispongo me permitieron cargar<br />

con el peso de la piedra. Desgraciadamente, como tanta gente,<br />

luchaba por conseguir el objetivo equivocado. La vida está<br />

dispuesta a darnos exactamente lo que le pidamos; quizá sea el<br />

momento de preguntarnos qué buscamos.»<br />

Bum-bum... bum-bum.<br />

Allí sentada mientras escuchaba el sonido del corazón humano,<br />

pensé: «¿Cuáles son las piedras de mi vida ¿Con qué<br />

piedras he estado cargando que me impidan crear una vida con<br />

sentido Y lo más importante, ¿le estoy pidiendo lo suficiente a<br />

la vida»<br />

¿PUEDE CAMBIAR REALMENTE NUESTRA VIDA<br />

¿De qué necesitamos desprendernos o qué debemos dejar a<br />

un lado para vivir con mayor plenitud y menos cansados La<br />

buena noticia es que, lo mismo que podemos dejar en el suelo<br />

una piedra pesada, el cambio también puede producirse en un<br />

instante. En un momento tomamos una dirección en la vida. En<br />

el siguiente, nuestro mundo cambia para siempre.<br />

En mi caso, ese cambio me llevó siete minutos exactamente.<br />

Tenía cuarenta y un años, y como madre trabajadora sentía la<br />

constante presión del horario y de las obligaciones. La vida pasaba<br />

de largo a toda velocidad, de un día al siguiente, de un mes<br />

a otro y de año en año. Quería más. Quería que los días fueran<br />

más que levantarme e ir al trabajo. Quería que la vida importara.<br />

Quería tener una actitud positiva respecto de la familia y el mundo.<br />

Quería ser diferente, pero no sabía qué pasos dar para conseguirlo.<br />

Supongo que usted está buscando muchas de las cosas que<br />

yo aún busco. Quizá tenga algo que ver con mi historia. Trabajo<br />

a jornada completa, cuido de adolescentes y de algún perro o


18<br />

la solución 7 minutos<br />

gato, hago la colada, camino en la cinta, me apaño con el Twitter<br />

y el Facebook, tengo un marido cincuentón y soy madre e<br />

hija. Y estoy creando una vida con «más»: más sentido, más plenitud,<br />

más significado, más propósitos, más esperanza y más<br />

alegría.<br />

La Solución 7 Minutos es el resultado de mi deseo de crecer,<br />

vivir y dar con un propósito. No es el fin de la carrera, sino la<br />

narración de lo que me está pasando en la vida, de lo que ocurre<br />

en la de otros amigos y acompañantes que siguen por ese mismo<br />

camino.<br />

PREPÁRESE A CAMBIAR<br />

A lo largo de este libro le estimularé a considerar con qué<br />

piedras —con qué cargas— ha escogido cargar. ¿Merecen el esfuerzo<br />

¿No será que la tensión de sujetarlas está impidiéndole<br />

disfrutar y experimentar el crecimiento en otras áreas de la vida<br />

¿O que estas cargas le están inhibiendo la fe, las relaciones familiares,<br />

la salud, el crecimiento personal, la creatividad o la generosidad<br />

¿No será que el peso de lo que no funciona le impide<br />

ejercer una influencia positiva y duradera en las relaciones del<br />

hogar, en el lugar de trabajo, en la comunidad Si así fuera, ha<br />

llegado el momento de cambiar.<br />

Mañana podemos ser diferentes de como somos hoy,<br />

de siete en siete minutos.<br />

<strong>LA</strong> SOLUCIÓN 7 <strong>MINUTOS</strong><br />

Definición: la Solución 7 Minutos ofrece estrategias que ayudan<br />

a priorizar, organizar y simplificar la vida para que tenga un<br />

mayor sentido y una mayor productividad.<br />

Vivir la Solución 7 Minutos no significa vivir en incrementos<br />

de siete minutos, sino adquirir una mejor comprensión de los


Introducción 19<br />

siete signos vitales de la vida plena: conciencia, motivación, crecer<br />

y aprender, compromiso, perseverancia, vivir fluidamente y<br />

vivir con fe.<br />

La Solución 7 Minutos es una opción. La Solución 7 Minutos<br />

nos invita a concentrar conscientemente toda la atención, 7 minutos<br />

cada día, en lo que para nosotros tenga más sentido en la<br />

vida. Mañana podemos ser diferentes de como somos hoy según<br />

lo que escojamos hacer día a día. El proceso de desplazarnos<br />

desde donde nos encontramos hoy hasta donde queramos estar<br />

consiste en comprometer el deseo de aprender y de crecer, al<br />

tiempo que reconocemos que hoy, precisamente «hoy», disponemos<br />

de la oportunidad única de vivir y respirar. La Solución<br />

7 Minutos consiste en dar pequeños pasos hacia delante todos<br />

los días, mientras somos plenamente conscientes de cada momento<br />

que pasa en el presente.<br />

La vida es para vivirla, no para contemplarla; es para vivirla<br />

con inspiración, no como si nada; tiene que ser plena, no banal.<br />

Las ideas de la Solución 7 Minutos han inspirado el cambio en<br />

las vidas de miles de personas a las que he tenido el privilegio de<br />

conocer y con las que he compartido ideas durante las dos últimas<br />

décadas. Aprenderemos de padres que han vuelto a conectar<br />

con sus hijos y de parejas que han redescubierto la alegría en<br />

su vida de pareja. Nos inspiraremos en la perseverancia de mujeres<br />

y hombres que se han enfrentado a retos inimaginables...<br />

y que los han superado. Leeremos relatos triunfales experimentados<br />

en circunstancias de gran riesgo... y en la vida cotidiana.<br />

Conoceremos a personas cuyas vidas eran muy semejantes a<br />

la que tal vez sea la suya en estos momentos y luego, en cuestión<br />

de segundos, sus vidas cambiaron para siempre. Sus trayectorias<br />

nos inspirarán para desvelar nuestras propias nuevas posibilidades,<br />

y para no desfallecer cuando nos encontremos frente a algún<br />

reto.


20<br />

la solución 7 minutos<br />

EN BUSCA DE SIGNOS VITALES<br />

Imaginemos que somos los primeros en llegar al escenario de<br />

un accidente y nos encontramos con una persona herida. Según<br />

el protocolo de los primeros auxilios, empezaremos por comprobar<br />

si esa persona está consciente y respira, y luego seguiremos<br />

con los cuidados. Se trata de sacudir suavemente a la persona y<br />

llamarla. Si no responde, nos fijamos en su pecho para ver si sube<br />

y baja, colocamos la mano cerca de la nariz y la boca para tratar<br />

de percibir la respiración. Palpamos la arteria carótida para comprobar<br />

si tiene pulso. En fin, buscamos signos de vida.<br />

La Solución 7 Minutos está pensada para ayudarnos a comprobar<br />

nuestros propios signos vitales. Es posible que estemos de<br />

pie y caminemos, pero eso no quiere decir que realmente vivamos.<br />

Como la víctima de un accidente en estado de shock, es<br />

posible que discurramos por la vida en un estado de inconsciencia.<br />

El caos, las distracciones, las interrupciones, la dilación, la<br />

tensión, así como la velocidad y las exigencias cada vez mayores<br />

de la vida, nos privan de toda alegría: pueden ahogarnos antes de<br />

que nos demos cuenta. Ya es hora de despertar y concentrarnos<br />

en lo que realmente cuenta para nosotros. Es el momento de<br />

comprobar nuestros signos vitales.<br />

El corazón está diseñado para bombear por todo el cuerpo la<br />

sangre que da vida, pero no puede funcionar correctamente sin<br />

oxígeno. Del mismo modo, es imposible vivir la vida para la que<br />

estamos creados si estos siete signos de vida no son parte de<br />

nuestra existencia diaria. Una acción sin propósito es como un<br />

corazón sin acceso al oxígeno adecuado: incluso si es capaz de<br />

bombear, lo que entrega no es tan rico ni beneficioso como debiera.<br />

Ha llegado el momento de respirar en la vida. La Solución<br />

7 Minutos nos ayudará a evaluar nuestros signos vitales; nos sacudirá<br />

y nos gritará para que despertemos. Más aún: nos equipará<br />

con las herramientas y los sistemas necesarios para crear una<br />

vida con significado, de siete minutos en siete minutos.<br />

Empiece a descubrir los signos vitales 7 Minutos mientras<br />

responde a las siguientes preguntas.


¿Tenemos plena conciencia<br />

Introducción 21<br />

La vida es tan ruidosa que el cerebro tiene problemas para<br />

filtrar lo que realmente cuenta. El primer signo vital que debe<br />

comprobarse es sencillo: ¿somos conscientes de lo que realmente<br />

queremos de la vida La vida nos dará exactamente lo que le<br />

pidamos, pero primero tenemos que aclarar las ideas, ponerlas<br />

por escrito y crear un plan de acción.<br />

¿Estamos motivados<br />

Si le pedimos más a la vida, descubriremos vacíos entre lo que<br />

somos hoy y la persona que queremos ser en el futuro. La motivación<br />

es la fuerza que nos empuja para alcanzar nuestros<br />

objetivos. Al establecer objetivos en plazos de noventa días,<br />

dividiremos los objetivos últimos en otros miniobjetivos asequibles<br />

más rápidamente y experimentaremos la emoción del<br />

éxito más a menudo. Desarrollaremos también un poderoso impulso,<br />

porque al crear objetivos a noventa días fraccionaremos<br />

nuestros objetivos últimos en piezas manejables que nos permitirán<br />

experimentar el éxito como algo cotidiano. Una victoria<br />

lleva a la otra.<br />

¿Crecemos y aprendemos<br />

El cerebro tiene un potencial increíble, pero funciona siguiendo<br />

una norma: o lo usas o lo pierdes. Crecer y aprender nos faculta<br />

para desarrollar nuevas y mejores maneras de vivir. Crecer<br />

es un signo vital, porque es lo que hace que prenda nuestro entusiasmo<br />

para dejar atrás viejos hábitos y rutinas.


22<br />

la solución 7 minutos<br />

¿Nos comprometemos<br />

Hundidos en la rutina, resulta fácil convertirse en un zombi<br />

aburrido y fatigado, en un ser ignorante de las oportunidades que<br />

le rodean. Concentrarnos en las actividades de mayor valor garantizará<br />

nuestro compromiso con las personas y las prioridades que<br />

más cuentan. Esto también nos faculta para estar más despiertos<br />

y para aprovechar mejor cualquier oportunidad que se presente.<br />

¿Somos perseverantes<br />

Para realizar cambios se requiere perseverancia. ¿Por qué<br />

Porque los malos hábitos son difíciles de romper, y constituyen<br />

rutinas confortables a las que volver, por mucho que sepamos que<br />

no nos convienen. Pero cuando superamos la barrera de nuestra<br />

zona de confort, experimentamos un crecimiento sorprendente.<br />

¿Vivimos en un estado de flujo<br />

El término «flujo» implica en este caso el uso de nuestras<br />

mejores habilidades —nuestras mejores dotes y talentos— para<br />

alcanzar los retos más significativos. Se trata de canalizar las habilidades<br />

de manera que todo se active, para hacernos conscientes<br />

de experimentar la vida en su nivel óptimo.<br />

¿Vivimos con fe<br />

El signo vital de la fe vincula entre sí todos los elementos de<br />

la vida. Gracias a la fe buscamos una vida mejor —una vida llena<br />

de propósitos y significado— y confiamos en que exista. La fe nos<br />

obliga a mirar más allá de nosotros mismos, a dedicar al prójimo<br />

tiempo, energía y amor. Una vida sin fe está marcada por la desesperanza,<br />

pero con la fe, en cambio, todo es posible.


Introducción 23<br />

TOQUE DE DIANA<br />

El cambio se inicia cuando nos damos cuenta de dónde nos<br />

encontramos hoy. Así que antes de empezar con la Solución 7<br />

Minutos, tómese un momento para hacerse estas grandes preguntas<br />

sobre la vida:<br />

¿Cómo era su vida hasta ayer<br />

¿Cómo se sentía esta mañana al levantarse<br />

¿Qué es lo que más desea en la vida


24<br />

la solución 7 minutos<br />

¿Qué le motiva<br />

Describa su vida dentro de noventa días a contar desde hoy. ¿Cómo le<br />

gustaría sentirse ¿Qué le gustaría haber conseguido<br />

¿Qué tareas de las que requieren tiempo y energía no contribuyen a lo<br />

que más desea en la vida ¿Qué ocurriría si dejase de dedicar toda su<br />

atención a esas cosas<br />

¿Qué podría proporcionarle una felicidad real y más plenitud


Introducción 25<br />

Todos y cada uno de nosotros desearíamos que la vida, nuestra<br />

vida, tuviera sentido. Le buscamos un significado. Queremos<br />

volver a conectar con la fe y con el propósito. Queremos saber<br />

que hemos venido a este mundo por una razón. Pero demasiado<br />

a menudo transitamos por los vaivenes de la vida sin vivir de<br />

verdad. Las respuestas a las grandes preguntas sobre la vida le<br />

ayudarán a volver a vivir su vida: volverá a conectar con su significado<br />

más profundo. Al contestarlas ya habrá empezado un<br />

proceso para descubrir en qué punto se encuentra, para decidir<br />

dónde quiere estar y trazar un plan para llegar hasta ahí. Estas<br />

preguntas despiertan el alma. No deje que la vida continúe pasando<br />

de largo.<br />

Iniciemos ya el viaje que desvelará toda la bondad y grandeza<br />

que usted lleva en su interior. Antes de explorar los signos<br />

vitales 7 Minutos, profundicemos un poco en la Solución 7 Minutos<br />

y conozcamos de dónde proviene la idea de estos «7 minutos».


¿Qué es la Solución 7 Minutos<br />

El tiempo es gratis, pero no tiene precio.<br />

No puedes poseerlo, pero sí usarlo.<br />

No puedes guardarlo, pero sí gastarlo.<br />

Y cuando lo has perdido, ya no puedes recuperarlo.<br />

Harvey Mackay<br />

La Solución 7 Minutos es el sistema de vida que le proveerá<br />

del bagaje necesario para escapar del caos y disfrutar de una vida<br />

libre y plena. Aprenderá a planificarse el día y a utilizar el tiempo<br />

según su voluntad. Aprenderá a adiestrar el cerebro para que se<br />

concentre en aquello que para usted tiene más sentido en la vida.<br />

Las estrategias que aprenderá le permitirán tomar decisiones que<br />

le convertirán en la persona que desea ser. El resultado final:<br />

experimentar una vida más plena de sentido.<br />

<strong>LA</strong> SOLUCIÓN 7 <strong>MINUTOS</strong> FUNCIONA<br />

La Solución 7 Minutos es, para mí, algo muy personal. Hace<br />

ya casi veinte años comprendí que quería más de la vida. Quería<br />

renovar y regenerar mi fe en Dios. Quería conocerlo, y quería<br />

que mi vida fuera un reflejo de esta relación. Quería que mi alma<br />

volviera a vivir. Quería sentir que mi corazón latiera con alboro­


28<br />

la solución 7 minutos<br />

zo por cada nuevo día. Quería estar llena de la energía física que<br />

proporciona el hecho de vivir de acuerdo con los valores personales.<br />

Quería retos para aprender y crecer intelectualmente.<br />

Desde entonces he descubierto verdades sobre mí y sobre lo<br />

que era «más» significativo para mí. El viaje de descubrimiento<br />

de los principios de la Solución 7 Minutos me hizo recordar que,<br />

para mí, el sentido no es algo que provenga exclusivamente del<br />

autodescubrimiento o el desarrollo personal. Al tiempo que<br />

aprendía lo que más significaba para mí, adquirí mayor conciencia<br />

de las necesidades de quienes me rodeaban, y se acrecentó en<br />

mí el deseo de ayudarles a crecer y a descubrir más en sus propias<br />

vidas.<br />

Desde 1993 he enseñado las bases para la administración del<br />

tiempo a miles de hombres y mujeres: ejecutivos de empresas de<br />

servicios financieros, agentes comerciales de la industria farmacéutica,<br />

directores de hospitales, líderes de organizaciones sin<br />

ánimo de lucro, o estudiantes universitarios... La Solución 7 Minutos<br />

se basa en una estructura sólida de herramientas prácticas<br />

que se han desarrollado durante años por el uso que de ellas han<br />

hecho hombres y mujeres de todas las edades. Como es natural,<br />

muchos de los conceptos principales se basan en ayudar a las<br />

personas a mejorar sus aptitudes en el empleo del tiempo. Pero<br />

el objetivo de la Solución 7 Minutos no es solamente llegar a ser<br />

más eficiente o productivo. La intención real es ayudar a crear<br />

una vida llena de sentido, propósito y productividad. Las personas,<br />

liberadas del caos, son de pronto capaces de ir en pos de sus<br />

sueños y experimentar alegría y un optimismo renovado. El tiempo<br />

es una constante en la experiencia de la vida. Afecta nuestras<br />

relaciones con el trabajo, la familia y nosotros mismos. Para experimentar<br />

la existencia a un nivel diferente tenemos que optar<br />

por disponer de más tiempo libre en la vida cotidiana. La administración<br />

del tiempo no consiste sencillamente en hacer más,<br />

sino en hacer más de lo que para nosotros de verdad cuenta.


¿Qué es la Solución 7 Minutos 29<br />

¿POR QUÉ 7 <strong>MINUTOS</strong><br />

¿Cuánto dura nuestro umbral de atención<br />

En mi primer libro de administración del tiempo, The Seven<br />

Minute Difference: Small Steps to Big Changes [La Diferencia<br />

7 minutos: pequeños pasos hacia grandes cambios], me refería a<br />

diversos estudios según los cuales, debido a nuestra exposición<br />

a la televisión, el estadounidense medio tiene un umbral de atención<br />

de tan solo siete minutos. Son ya varias las generaciones que<br />

han crecido viendo la televisión y dedicándole mucho tiempo.<br />

Un informe de 2009 de la empresa Nielsen señalaba que el americano<br />

medio dedicaba a ver la televisión una media de 153 horas<br />

al mes. Es decir, más de cinco horas al día. No debería sorprendernos<br />

que este volumen de televisión y la pauta repetida de<br />

siete minutos de programación interrumpida por los anuncios<br />

afectara nuestra capacidad de concentración. Una y otra vez, esta<br />

pauta de un período tan corto como siete minutos de atención<br />

seguidos por la interrupción de los anuncios nos ha predispuesto<br />

a tener dificultades a la hora de concentrar nuestra atención<br />

durante períodos largos de tiempo.<br />

Pero la televisión es solo una pieza en el rompecabezas que<br />

conforma el umbral de atención. En este mismo momento millones<br />

de cosas solicitan nuestra atención: los proyectos que necesitamos<br />

llevar a cabo con nuestro equipo para cumplir los objetivos,<br />

los montones de papeles sobre la mesa del despacho, el<br />

rugir de nuestro estómago hambriento... Y el cerebro tiene una<br />

capacidad limitada para procesar esta información. Para sobrevivir<br />

debe ir constantemente de un aspecto a otro. Los resultados<br />

son obvios: proyectos inacabados, un sentimiento indefinido de<br />

relaciones pospuestas, de objetivos incumplidos.<br />

Para experimentar una vida más llena de sentido hemos de<br />

escoger de forma consciente lo que merecerá nuestra atención en<br />

cada momento. Aquello en lo que nos concentremos determinará<br />

nuestro nivel de logros, productividad y éxito.<br />

La triste realidad es que la mayoría de nosotros hemos estado<br />

tan ocupados sobreviviendo que no hemos dedicado el tiempo


30<br />

la solución 7 minutos<br />

necesario a clarificar nuestros valores, prioridades y objetivos. Si<br />

dejamos que estos elementos críticos sigan sin definir permaneceremos<br />

bloqueados, confundidos e insatisfechos. La Solución<br />

7 Minutos le enseñará cómo esclarecer lo que realmente desea en<br />

la vida. Aprenderá a filtrar opciones a través de valores, prioridades<br />

y objetivos personales, de manera que pueda concentrarse<br />

en sacar el máximo provecho de cada momento.<br />

¿Qué implica incrementar el umbral de atención e intensificar<br />

la concentración en proyectos y actividades que mejorarán nuestra<br />

existencia Creo que está usted en disposición de hacer grandes<br />

progresos para crear una vida con sentido en tan solo siete<br />

minutos. Y esto es así porque las pequeñas acciones que se llevan<br />

a cabo cada día pueden cambiar el curso de una vida. Yo las llamo<br />

«microacciones 7 Minutos». Como veremos, son sencillas y hacen<br />

que la vida cambie.<br />

MICROACCIONES 7 <strong>MINUTOS</strong><br />

Todo en la vida consiste en una serie de pequeñas acciones,<br />

de pequeñas opciones y pequeñas decisiones a las que denomino<br />

«microacciones». Las microacciones son importantes porque<br />

hacen que nos movamos. Constituyen un punto de partida, y la<br />

diferencia entre quedarse bloqueado (no hacer nada) o emprender<br />

la acción y moverse hacia delante. Las microacciones suman.<br />

Realizar una microacción —como devolver una llamada de teléfono<br />

que nos ayude a completar un proyecto— quizá parezca<br />

que no es mucho, pero con el tiempo una serie de microacciones<br />

deliberadas componen un punto de inflexión. Las microacciones<br />

no desbordan a nadie: pueden conseguirse. Por el hecho de<br />

ser tan pequeñas, son también fáciles de realizar.<br />

Realizar pequeños cambios en nuestros pensamientos y comportamientos<br />

puede comportar grandiosas diferencias en nuestra<br />

vida. Las microacciones 7 Minutos son tan sencillas que a menudo<br />

se pasan por alto y se infrautilizan. Pero pueden constituir<br />

la diferencia entre la mediocridad y la excelencia. En mi caso, la


¿Qué es la Solución 7 Minutos 31<br />

microacción de redactar una pequeña descripción de propósito<br />

representó un gran cambio en mi vida personal y profesional. Las<br />

microacciones pueden tomar muchas formas. Entre otras:<br />

• Trazar un plan de acción diario.<br />

• Dar las gracias a un compañero por un trabajo bien hecho.<br />

• Encontrar tiempo durante el día para recuperarse entre reuniones.<br />

• Llegar con antelación o puntualmente a cada cita.<br />

• Escribir dos notas de agradecimiento a la semana.<br />

• Leer diez páginas de un libro.<br />

• Levantarse quince minutos antes.<br />

• Comer más fruta.<br />

• Beber más agua.<br />

Si se incorporan a la rutina diaria, estas microacciones comportan<br />

un potencial todavía mayor para conseguir enormes y<br />

nuevos niveles de productividad y crecimiento en el trabajo y en<br />

la vida familiar. Las microacciones son pequeños pasos hacia el<br />

crecimiento positivo que uno da cada día. Las microacciones son<br />

manejables y fáciles de llevar a cabo. Y con el transcurso del tiempo,<br />

su poder es constructivo. Resulta tan fácil llevarlas a cabo que<br />

solo unos días después de concentrarnos en ellas estaremos en<br />

situación de comprobar los resultados.<br />

Pensemos en un gran ejemplo de microacción proporcionado<br />

por mi amigo John Arnold. Eliminó el desorden y los excesos en<br />

su vida en tan solo cuarenta días tras adoptar una única microacción.<br />

Específicamente, cada uno de esos cuarenta días llenó una<br />

bolsa de supermercado con artículos que ya no necesitaba, y o<br />

bien los tiraba o bien les encontraba un nuevo hogar. El resultado<br />

final fue que eliminó trastos de todas las habitaciones, armarios<br />

y cajones de su casa, así como del despacho, de los dos coches<br />

y del garaje.<br />

La microacción creaba no solamente un punto de inflexión<br />

físico que conllevaba un nuevo nivel de orden, sino también el<br />

punto de inflexión mental preciso para tener una nueva visión de<br />

las cosas materiales. Tal como dice John, «comprendí que todo

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