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UNIVERSIDAD CENTRAL DE VENEZUELA
FACULTAD DE HUMANIDADES Y EDUCACIÓN
ESCUELA DE HISTORIA
Trieste: la independencia Comunal como necesidad de
supervivencia. 1295 – 1369
Tesis de Grado presentada por
Fulvio Scarcia, para optar al
Título de Licenciado en Historia.
Tutor: Rodrigo Fernández

Ilustración 1 Escudo de Armas de Trieste
"Ed un popolo e solamente degno della liberta quando non misura y
sacrifici que costa l’ acquistarla o il difenderla”
-Giuseppe Caprin 1
1 -CAPRIN, Giuseppe. Il trecento a Trieste.
2

ÍNDICE
Introducción………………………………………………….. Pág. 5
Objetivos de la Investigación………………………………. Pág. 6
Justificación para la Investigación…………………………. Pág. 7
La Metodología de la Investigación………………………… Pág. 9
Las Referencias Bibliográficas…………………………….. Pág. 11
Nivel de las Fuentes……………………………. Pág. 11
Objetividad de las Fuentes……………………. Pág. 12
Capítulo 1 - Los orígenes de la Ciudad y su
Territorio natural desde el siglo I al Siglo
XIII…………………………. Pág. 14
La ocupación Romana………………………………………. Pág. 16
Visigodos, Bizantinos, Lombardos…………………………. Pág. 17
Los Francos, el Papa y el Patriarcado de Aquilea………… Pág. 19
Trieste entre los siglos IV y XII……………………………….. Pág. 24
Capítulo 2 - Las hegemonías nacientes en el
siglo XIII: Venecia, Hungria y los Habsburgo…………. Pág. 27
Venecia de su nacimiento al Siglo XIII………………………. Pág. 31
Hungría y Croacia…………………………………………….. Pág. 37
La dinastía Habsburgo………………………………………. Pág. 41
Capítulo 3 - El Comune de Trieste su formación y evolución
hasta el siglo
XIV…………………………………………………… Pág. 43
El origen del Comune de Trieste……………………………….. Pág. 48
El Territorio y la Ciudad en el siglo XIV……………………… Pág. 54
Los ciudadanos y las Instituciones del Comune………….. Pág. 59
La Industria y el Comercio de Trieste en el siglo XIV……… Pág. 65
La defensa de la
ciudad………………………………………………….. Pág. 73
Capítulo 4 - La defensa de la libertad del Comune………… Pág. 77
3

El Comune y la conjura de los Ranfi…………………………. Pág. 81
Los enfrentamientos con Venecia…………………………… Pág. 90
El asedio, la capitulación y la entrega……………………….. Pág. 96
Conclusiones…………………………………………………. Pág. 102
Anexos…………………………………………………………. Pág. 107
Mapas………………………………………………………………... Pág. 138
Bibliografía………………………………………………………. Pág. 142
4

Introducción
La definición del tema propuesto: “Trieste: la independencia
Comunal como necesidad de supervivencia. 1295 – 1369” pasa del
análisis de la ciudad y de la región histórica en la que se circunscribe, a la
consideración acerca de la ambición de independencia de los ciudadanos
de la misma ciudad en la edad media.
Dentro del contexto anterior, en primer lugar focalizamos a Trieste
como una ciudad ubicada en el norte de Italia a unos 150 kilómetros de
Venecia y nudo de vías de comunicación entre Italia, Istria, Austria y el
centro de Europa; luego visualizamos su entorno cercano y extenso: en
primer lugar Istria, luego el Friuli y los territorios bajo la influencia del
Patriarcado de Aquilea, extendimos el análisis al área de influencia de la
República de Venecia, y finalmente tuvimos presente al territorio de los
Hausburgo, con consideraciones históricas sobre Austria, Croacia,
Dalmacia y Hungría.
Todo lo anterior lo enmarcamos dentro de un tiempo determinado
como lo es el período que va desde el año 1295, cuando Trieste, se
convirtió en una ciudad independiente después de los largos años de
dependencia política del Arzobispado de Aquilea, hasta el 1369, año en el
que finaliza el asedio veneciano y la ciudad finalmente capitula y se
somete a Venecia.
Finalmente como asunto central y leid motiv de nuestra
investigación, resaltamos un problema específico de su proceso histórico:
la necesidad de la ciudad y sus ciudadanos de ser independientes, visto
como una salida diplomática para sobrevivir frente a las ambiciones
políticas, hegemónicas y expansionistas de sus vecinos.
Al respecto se consideraron los motivos por lo cuales en el año
clave de 1295 los miembros de las trece Casate, 2 parte del Consejo de la
ciudad, junto con el resto de los ciudadanos triestinos, decidieron que los
tiempos estaban maduros para lograr ser independientes.
2
-Se trata de la confadría de las familias más prominentes de la ciudad y de quienes hablaremos a suficiencia
en el tercer capítulo de este trabajo.
5

Además porqué con esa independencia podían asegurarse una
mejor posición política, en equilibrio entre los Habsburgo que presionaban
la ciudad desde el Este para anexarla y la republica de Venecia en el
Oeste, que insistía en sus derechos sobre la ciudad.
I- Objetivos de la Investigación.
El presente trabajo fue concebido con la intención de señalar
algunos aspectos poco tratados con respecto a un período de la Edad
Media de una ciudad del norte de Italia llamada Trieste, punto de
convergencia a través del tiempo de distintas corrientes migratorias,
codiciada por varios señoríos dada su ubicación geográfica y generadora
de conflictos muchas veces ajenos a sus propios ciudadanos. Además, la
investigación busca integrarse en la tradición historiográfica relativa a los
temas de circunstancias públicas y en cierta medida eclesiásticas del alto
medioevo europeo y la temática ha sido establecida teniendo, como
marco referencial, la lectura de una selección de fuentes, muchas de ellas
altamente estimulantes, como por ejemplo el clásico latino de Pablo
Diácono Historia Longobardorum, los documentos contenidos en el
Archivio Diplomatico Istriano, así como la obra de Vincenzo Scussa. 3
También hay que mencionar que el argumento de la investigación
es presentado y valorizado en sus distintas facetas, bajo la óptica de las
ideas de la historiografía de la región así como del panorama de los
estudios que han tenido por objetivo el territorio de Trieste en época
medieval.
Por lo tanto y en consideración de todo lo mencionado podemos
llegar a definir la presente investigación, como enmarcada dentro de una
“historia territorial”, sobre una circunscripción de la que trataremos de
reconstruir el desarrollo de los sucesos integrantes de su “leyenda
dorada” y de cómo esa ciudad en sintonía con sus ciudadanos, trató de
estructurar los distintos aspectos sociales, económicos y políticos.
3
- SCUSSA, Vincenzo. Storia Cronografica di Trieste dalle sue origini sino all’ anno 695, cogli annali dal 1695 al
1848 del procuratore Civico Cav. Pietro Dott. Kandler. Trieste, Edizioni Italo Svevo, 1975.
6

También consideramos que la presente tesis debería ayudar para
aclarar espacios vacíos que han quedado de la historia medieval de
Trieste, al tiempo que dará una nueva visión a la “leyenda dorada” de la
ciudad; esto debido a que para muchas personas, profesionales de la
historia o no, el periodo que se trata, es decir de 1295 a 1369 es
considerando como el de una época de oro, enmarcada en un espíritu
romántico, donde los ciudadanos de la ciudad llevados solo por el afán de
ser libres, se enfrentaron a varios de los gobiernos más poderosos de la
época, sin consideraciones de orden practico.
Adicionalmente y como un punto especial e importante, pensamos
que la elaboración de un trabajo del tipo que enfrentamos, aporta una
diversificación e internacionalización dentro de la Escuela de Historia al
tiempo que abre las puertas a un mayor intercambio de ideas entre
países, sea en el campo académico como en el social. Además
demuestra que la Universidad Central de Venezuela, representada en su
Facultad de Humanidades y Educación y en especial nuestra Escuela de
Historia, forma profesionales dignos de enfrentar retos historiográficos de
los más diversos índoles y utilizando lo más moderno de la tecnología
actual, dentro de los parámetros tradicionales de la rigurosa investigación
Histórica.
Por lo tanto y tomando en cuenta todo lo anterior, el desarrollo de
la presente tesis representó un reto personal y profesional en la medida
en que aporta informaciones adicionales, reales y en ciertos aspectos
inéditos sobre el tema propuesto.
II Justificación para la Investigación:
El núcleo fundamental de nuestra hipótesis de trabajo consistió
básicamente en considerar que el hecho de ser Trieste una ciudad de
frontera con un puerto comercial floreciente y una actividad salinera
prospera, la hacía atractiva para la expansión de la Republica de Venecia
y al mismo tiempo para Austria y Hungría.
7

Sin embargo, al menos formalmente, la ciudad dependía del
Patriarcado de Aquilea y por lo tanto podía considerarse como protegida
del Papa por lo que ni Venecia ni Hungría ni Austria podían anexarla
directamente. De toda esta situación, algo indefinida, se aprovecharon los
ciudadanos de Trieste para que en 1295, al obtener los derechos sobre la
ciudad por parte de los Obispos, decidieran declararse como una ciudad
independiente, tratando de mantenerse en equilibrio entre las distintas
potencias vecinas.
Con respecto a lo expuesto hay que señalar que a pesar de existir
una discusión historiográfica desde hace muchos años para no hablar de
siglos, sin solución de continuidad, el tema de “Trieste como ciudad
independiente” es recurrente.
Se habla mucho del tema a nivel del ciudadano local, siempre
interesado en conocer un pasado glorioso; en el ambiente socio-político
italiano en muchas ocasiones ha sido tocado el tema y en algunas
ocasiones alcanzó el ámbito mundial, como sucedió en el periodo
posterior a la II guerra mundial, desde el 1945 hasta el 1954.
En ese periodo a pesar de estar la ciudad y sus instituciones
regidas políticamente por el “Gobierno Militar Aliado” 4 en la realidad del
hacer diario, los propios ciudadanos regían su suerte.
Sin embargo a pesar de lo mencionado, el tema de “Trieste,
independiente”, adolece hasta el presente de una marcada falta y
discontinuidad en las investigaciones, por lo que consideramos nuestro
aporte como una contribución no indiferente.
Tambien hay que decir que si bien en los últimos años se ha
ampliado la investigación sobre la historia de Trieste en general la mayor
parte de los historiadores, a partir del siglo XVII en adelante, se han
ocupado fundamentalmente de los aspectos más conocidos y con mayor
caudal de documentos.
4
-El 15 /09/1947 se estableció la paz entre Italia y las Naciones Unidas y en la misma fecha la provincia de
Udine y la parte occidental de Gorizia en el Friuli fueron devueltas por el ejercito anglo-americano a Italia; sin
embargo el resto del Friuli-Venezia Giulia fue entregado a los comunistas de la Republica Popular Yugoslava,
con la sola excepción de Trieste y una minúscula área de su territorio en el norte. A través de un acuerdo entre
anglo-americanos y soviéticos se constituyó el “Territorio Libre de Trieste” bajo un Gobernador nombrado por la
ONU. La administración del Gobierno Militar Aliado, duró hasta el 5 de octubre de 1954.
8

Podemos añadir que esta tendencia se mantiene y se nota
fácilmente que la historia de la ciudad, correspondiente a los siglos XVIII y
XIX, tiene una gran cantidad de temas propuestos e investigados; lo
mismo sucede con el siglo XX, en particular los periodos de 1910 a 1918
y los años desde el 1920 hasta 1954.
Por último y con respecto al estado actual del problema y después
de haber investigado exhaustivamente, podemos decir que en la
actualidad si bien existe una corriente de interés con respecto a los temas
medievales en general, los mismos son adelantados de forma individual y
no como un planteamiento oficial y de interés público.
Es más debemos decir que en el momento que a fines de esta
investigación consideramos apoyarnos en una bibliografía específica y
actual sobre el tema, quedamos sorprendidos por la escasez del material
disponible.
Además de lo poco que logramos ubicar y obviando que en
muchos casos se trató solo de textos con un enfoque medieval en su
introducción y dirigidos a profundizar temas contemporáneos debemos
decir que los mismos no reflejaban un análisis historiográfico sino más
bien reseñaban información de alcance netamente común.
III- La metodología de la Investigación.
Como ya mencionamos la escasez de material disponible sobre
Trieste en la edad media y el hecho que en general no reflejaba un
análisis historiográfico profesional nos hizo tomar la decisión, que además
creemos la más adecuada dentro de los parámetros establecidos para el
presente trabajo, de apoyar nuestra investigación en la revisión de varios
de los textos del siglo XIX y en las fuentes medievales digitalizadas
disponibles, en lugar de efectuar un arqueo de textos actuales, que a
todas luces parece estéril por lo que para desarrollar el tema seleccionado
intentamos su abordaje desde el análisis directo de sus fuentes históricas
más importantes y a través de la lectura de los distintos documentos.
9

Dentro de lo posible, se trató dentro de localizar elementos
distintos o con caracteres de diversidad con respecto a las noticias de
conocimiento general sobre Trieste y su historia medieval.
De hecho queremos resaltar que notamos que para los
historiadores, el tema principal al tratar Trieste, siempre ha sido el del
origen de la ciudad, dándole una importancia primordial al tiempo anterior
a la romanización y a los siglos de ocupación romana. Luego se hace un
paréntesis para retomar con fuerza los temas de estudio concernientes la
Trieste de los Habsburgo y finalmente se pasa a profundizat el entorno
relativo al periodo 1945/1954.
Partiendo de esa base indagamos con respecto a las relaciones
entre la ciudad y sus vecinos buscando de caracterizar la época y el
entorno. Además las relaciones entre los ciudadanos y la actitud de sus
magistrados especialmente del siglo XIII y XIV. Podemos decir que la
lectura de los documentos nos ha llevado a considerar que existió una
ruptura en Trieste, entre el modo que la oligarquía triestina trató a sus
ciudadanos con respecto a como por ejemplo el pueblo era tratado en
otras ciudades, que eran aún en el siglo XIV consideradas feudos.
De hecho uno de los elementos de novedad que aporta esta tesis
al entorno de la historiografía local es el haber examinado las relaciones
internas entre ciudadanos y las actitudes de la ciudad en general con
respecto a sus vecinos y argumentos estos de los que los historiadores
locales se han ocupado poco.
También hay que mencionar que si bien el trabajo puntualiza
especialmente la reconstrucción de la sociedad y las instituciones del
periodo tratado, también examina el cuadro urbanístico, demográfico y
económico de la ciudad, junto con los juegos políticos de una de las
familias miembros del patriciado de la ciudad y el sistema de relaciones
que se ejercía en paralelo con las instituciones.
10

IV- Las Referencias Bibliográficas
A- Nivel de las Fuentes:
Considerando que el tema de la presente investigación es
netamente de historia medieval europea, a primera vista podría parecer
algo temerario tratar desde nuestro país un tema tan específicamente
territorial, sin embargo debemos aclarar que para llevar a cabo el
presente proyecto nos apoyamos en buena medida en las fuentes que
pudimos obtener en Internet.
No se puede decir que existe una abundancia de fuentes sobre
todos los aspectos de nuestro trabajo, sin embargo afortunadamente
varias de las fuentes primarias, tales como los documentos manuscritos e
impresos que utilizamos, junto con algunos planos y mapas, sobre los
puntos principales, los encontramos digitalizados por instituciones de
reconocida seriedad como la Biblioteca Civica Atilio Ortis di Trieste con su
Archivio Diplomatico y su recientemente digitalizado Archivio dei
Vicedomini (Secolo XIV).
Los documentos conservados en la Biblioteca Civica están
divididos en dos áreas y en la denominada Archivio Diplomatico, se
encuentran entre otros los documentos más antiguos junto con los
manuscritos de los historiadores locales que han utilizado el archivo para
sus investigaciones. Recientemente se digitalizó la información contenida
en los cuadernos de los ViceDomini que constituyen una fuente
importante sobre Trieste del trecento. Hay que señalar que los Vicedomini
estaban obligados a transcribir fielmente los documentos que le eran
presentados con excepción de contratos de compra/venta que podían ser
resumidos por el uso de formulas repetitivas. Por lo tanto estos
documentos son una fuente primaria extraordinaria de informaciones
prácticas de la vida diaria de la ciudad a pesar de las lagunas que existen
por causa de dos incendios que destruyeron en parte la vicedomineria.
11

También es importante señalar el Centro di Ricerche Storiche
Rovigno, el Archivio di stato di Udine, y el Archivio di Stato di Trieste
entre otros y obtuvimos por vía e-mail copias de alguno de los
documentos utilizados. Además existen páginas Web establecidas por
instituciones de probada seriedad que se dedican al estudio de la historia
de Trieste y su entorno y que tienen disponibles una cantidad
considerable de documentos de primera mano; en este caso queremos
mencionar como ejemplo las paginas de Scrinium Adriae 5 .
Sin embargo también utilizamos fuentes impresas tradicionales de
fácil ubicación en las distintas bibliotecas y finalmente queremos
mencionar que son de nuestra propiedad algunos de los textos que son
fuentes primarias sobre la historia de Trieste, como por ejemplo el libro de
Vincenzo Scussa y las crónicas de Giuseppe Caprin 6 .
B- Objetividad de las Fuentes:
Por lo que respeta a la objetividad de las fuentes debemos señalar
en primer lugar que metodológicamente la investigación está dirigida a la
lectura de una selección de ellas que consideramos suficientemente
amplia para el tema tratado. Además al adentrarnos en nuestra selección
tocamos una variedad de fuentes de primera mano tales como: la Historia
Longobardorum de Pablo Diacono 7 en cuyo texto podemos conocer la
historia de este pueblo desde sus orígenes hasta el año 744. La Historia
es un texto básico porqué se basó en buenas fuentes (como por ejemplo
la hoy perdida Historia Langobardorum de Secondo, obispo de Trento y
en la obra anónima Origo gentis Langobardorum, del año 671) y por qué
constituye un instrumento sin parragón para conocer al menos unos cien
años de historia de Italia.
5
-http://www.scriniumadriae.it/presentazione.html
6
-CAPRIN, Giuseppe. Il Trecento a Trieste. Trieste, Grafad Editores, (ristampa de la edizióne de 1897), 1974.
7
-PABLO DIÁCONO. Historia Longobardorum. Institut für Mittelalterforschung Österreichische Akademie der
Wissenschaften. www.oeaw.ac.at/gema/lango%20paulus2.htm
12

También nos aporta información el documento del año 1661, con la
trascripción de las Regole della Congregazione di Santo Francesco 8 , que
se refiere a la fundación en 1246 de las Trece Casate y que se conserva
en el Archivio Diplomatico di Trieste. Se utiliza el texto integral original del
Codice Diplomatico Istriano que es una recopilación de documentos
efectuada por Pietro Kandler, eminente historiador de Trieste, en 1865 y
que es una fuente de importancia superlativa.
Se utilizaron además fuentes como por ejemplo los textos clásicos
de la historiografía medieval europea de Henry Pirenne 9 y de Yves
Renouard 10 además de textos más recientes como por ejemplo el del
profesor Paolo Cammarosano. 11
8
-Documento original en pergamino del año 1661, conservado en el Archivio Diplomatico di Trieste y que
establece las reglas de la Congregación de San Francisco, (o sea las trece “Casate”) instauradas en el año de
1246.
9
- PIRENNE, Henry. Las ciudades de la edad media. Madrid, Editorial Alianza, 1972
10
-RENOUARD, Yves. Le cittá italiane dal X al XIV secolo .Milano, Rizzoli Editore, BUR,
11
-CAMMAROSANO, Paolo. Le campagne nell'età comunale (metà sec.XI-metà sec. XIV). Torino, Editorial
Loescher, 1974
13

Capítulo 1
Los orígenes de la ciudad y su territorio natural, desde el siglo I al
Siglo XII.
Ilustración 2: Foro Romano de Trieste. Fuente nuestra.
Los orígenes de la actual ciudad de Trieste como asentamiento
poblacional, se remontan a tiempos muy antiguos y a pesar que se han
encontrado restos arqueológicos prehistóricos en la zona, las primeras
noticias documentadas que tenemos de un establecimiento poblacional
firme en ese lugar, se remontan al I siglo d.C. cuando Tergeste 12 es citada
por el geógrafo griego Estrabon 13 , calificándola como un castillo cerca de
Aquilea: “...in medioq Tergeste castellu est ab Aqleia, c, xxx dista stadii”
(Geografía: libro V) y posteriormente la menciona como una encrucijada
de vías: “…a Tergesto, vico Carnico transitus per Cranam
est…”(Geografia: libro VII); sin embargo a los pocos años de tal cita,
Tergeste se convirtió en una Colonia Romana de importancia, por su
ubicación estratégica en la frontera de Iliria.
El año 394 marca el comienzo de la decadencia de la ciudad
romana, cuando el Emperador Romano de Oriente Teodosio derrota a
Eugenio y a Arbogasto cerca de Tergeste.
12
-El nombre de Tergeste esta compuesto por dos palabras que se derivan del antiguo dialecto de la región::
"Terg" que significaba mercado y "este" que significaba ciudad; Tergeste por lo tanto significaba “ciudad de
mercado”..
13
-ESTRABÓN (c. 63 a.C.-c. 24 d.C.), geógrafo e historiador griego. Su vida es poco conocida pero él mismo
afirmaba haber viajado a todo lo amplio del imperio romano en la época de Octaviano. Se conserva casi
completa su Geografía, en 17 libros, tal como se conoció en la antigüedad; tiene un gran valor, sobre todo por
sus amplias observaciones respecto al entorno natural y a los hombres que lo habitaban
14

En los años siguientes y tal como sucedió con muchas ciudades
del Norte de Italia, que sufrieron repetidos ataques de distintos invasores
la ciudad en muchos casos quedó directamente involucrada.
En el año 539 durante la reconquista de Italia por Belisario, general
en jefe del ejército bizantino de Justiniano, Tergeste pasa a formar parte
del Imperio Romano de Oriente y se mantendrá bajo el imperio, como una
pequeña ciudad de provincia, con un crecimiento lento pero estable. De
ese periodo hay que destacar que cuando en el año 556 el Obispo
Paulino Romano se convierte en patriarca de Aquilea, es apoyado entre
otros por el obispo de Tergeste y desde entonces la influencia de los
Patriarcas de Aquilea se conservará sobre la ciudad hasta el año de 1295,
año en que el Obispo de la ciudad, Brisa de Toppo, la cederá al gobierno
de sus ciudadanos.
Finalmente es importante señalar los sucesos que se
desencadenarán a partir del año 1199, cuando el Papa Inocencio III
convoca una cruzada contra los musulmanes ya que serán decisivos para
la historia de la ciudad. Nos referimos a la decisión que toman los
cruzados impulsados por el dux de Venecia, Enrico Dandolo, de desviar el
objetivo de la cuarta cruzada, para ayudar Alejo IV Angelo a tomar el
poder del Imperio Bizantino. Este hecho llevará a la conquista de
Constantinopla en el año de 1204 y además implicará el comienzo de la
hegemonía veneciana sobre todas las ciudades de Istria en el Adriático
Norte y en especial sobre Tergeste, que en el año de 1202 tiene que jurar
fidelidad a Venecia, ya que el dux Dándolo se presenta frente a la ciudad
con una flota de 240 navíos y un ejército de más de 100 mil hombres.
Ese año de 1202 también marcará el inicio de las hostilidades
abiertas entre los triestinos y los venecianos y que tendrán su ápice en el
año 1368, cuando después de un año de asedio las tropas venecianas
lograrán tomar la ciudad y empujarán a sus ciudadanos a buscar la
protección de un soberano mas fuerte y con menos pretensiones
señoriales sobre la ciudad, como será el caso de la dinastía de los
Habsburgo.
15

A- La ocupación Romana.
Como ya mencionamos anteriormente, la primera noticia que
tenemos de un asentamiento militar en la zona de la actual ciudad de
Trieste, proviene del geógrafo Estrabon, que en el siglo I, en su
“Geografía”, menciona la existencia de un castellu (castillo) y lo denomina
como “Tergeste” en la frontera de Histria (Istria), punto necesario a los
romanos para conquistar la mencionada península y para la guerra contra
Illiria (167 a.C.). Para el año 142 a.C. ya se tienen noticias que existe una
poblado con el mismo nombre en esa zona y un poco más tarde, el
asentamiento se convierte en Colonia Romana en el 129 a.C. en la época
del cónsul Sempronio Tuditano. 14
Siendo Tergeste colonia romana, fue saqueada por tribus bárbaras,
en por lo menos dos oportunidades; la primera fue documentada por Julio
Cesar (“…ne quod simile incommodum accideret decursione barbarorum
ac superiore aestate Tergestinis acciderat, qui repentino latrocinio atque
impetu illorum erant oppressi”) 15 y la segunda por Appiano Alessandrino, 16
quien reportó que una tribu de los Gépidos primero destruyó Tergeste y
luego atacó Aquilea en el año 34 a.C. Finalmente Octaviano los logra
vencer y la ciudad es reconstruida y provista cinco años mas tarde, en el
29 a.C. de muros fortificados además de dos acueductos.
Podemos añadir que bajo el Imperio Romano, Tergeste vivió una
época de esplendor, ya que toda la región, la denominada "Decima Regio
Venetia et Histria" gozó de un prolongado periodo de paz. Además su
situación geográfica le permitió desarrollarse económicamente gracias al
tráfico marítimo a lo largo de la costa de Histria, tanto que para la época
del emperador Trajano la ciudad contaba con una población de unas doce
mil personas.
Además contaba con dos puertos, una vía principal denominada
“via Gemina”, que la conectaba con Aquilea, la ciudad más importante de
la región y un teatro, símbolo este de su especial importancia.
14
-SCUSSA, Vincenzo. Storia Cronografica di Trieste dalla sua origine sino all’ anno 1695, cogli annali dal 1695
al 1848 del procuratore Civico Cav. Pietro Dott. Kandler. Capt. XI, pág. 19
15
-CESAR, Caio Julio. De Bello Gallico. Libro 8, 24
16
-APPIANO ALESSANDRINO. De Illirys Bellum.
16

Mesia. 17 Sin embargo al poco tiempo los Visigodos se rebelaron y en el año
B- Visigodos, Bizantinos y Longobardos.
En el año 376 los visigodos, que se habían establecido desde el
año 370, en un territorio que se extendía desde el río Dniéster, en la
actual Rusia, hasta el Danubio, fueron nuevamente amenazados por los
Hunos y decidieron buscar la protección romana logrando que el
emperador Valente, les permitiera establecerse en la provincia romana de
378 derrotan al ejercito romano en la batalla de Adrianopolis, donde
inclusive muere el emperador Valente; mas tarde y al amenazar
Constantinopla, el nuevo emperador Teodosio I acordó la paz con los
Visigodos y los incorporó al ejército romano. En septiembre del año 394,
Teodosio I, último emperador romano que logra unificar por un periodo
breve al imperio, derrota en el río Frigidus, en el Carso, cerca de
Tergeste, a Arbogasto, (conde Franco) quien había asesinado a
Valentiniano II y a Eugenio (entronado por Arbogasto como coemperador
de Occidente). Esta batalla marcó el inicio de la decadencia de Roma y
arrastró consigo a la mayor parte de las ciudades de la península italiana,
incluida Tergeste, que hasta el siglo IV, tal como mencionamos, había
vivido en calma y prosperidad.
Después de la muerte de Teodosio en el año 395, los visigodos
rompieron su pacto con Roma y eligieron como rey a Alarico I, quien
invadió Grecia y luego Italia, llegando a saquear Roma en el año 410.
Luego desde el 415 hasta el 418, bajo el mando de Walia, los
visigodos ampliaron su dominio territorial y al ayudar a los romanos a
eliminar tribus bárbaras, de España y el sur de Francia, obtienen para
asentarse el territorio de “Aquitania Secunda” (la región entre el río Loira
en Francia y el Garona en España) con Toulouse como capital, de forma
que se establece un reino Godo dentro del estado Romano.
17
-Provincia romana, situada en el Danubio inferior, que se extendía desde la desembocadura del Savus
(Save) hasta el mar Negro; aproximadamente correspondía al área que hoy ocupan Servia y Bulgaria.
Domiciano dividió la provincia en Superior e Inferior, conformando sus límites el río Almus (Lom). Formaban la
Mesía Inferior (57 d. de J. C.) la región costera del Mar Negro hasta más allá del Tyras y la actual Rumania, en
tanto que la Mesía Superior comprendía la Dacia Occidental entre el Danubio y el Maros.
17

Además y paradójicamente, hay que comentar que a Walia le
sucede el hijo de Alarico: Teodorico I, quien muere en la batalla de los
Campos Cataláunicos (452) combatiendo por Roma contra los Hunos.
En el año 453, Tergeste sufrirá por la invasión de los Hunos que
arrasan con las ciudades de la “X Regio” y muchas otras ciudades en su
avance hacia Roma, que se salva de ser asediada gracias a la bien
conocida y casi legendaria intermediación del Papa León I.
Para el año 489, aparece otro personaje y una nueva ocupación en
Italia: los Ostrogodos de Teodorico el Grande 18 que eliminan a Odoacro y
a los germanos que ocupaban Italia.
Este nuevo gobierno, que establece su capital en Ravenna, es
reconocido por Bizancio en el año 497. 19 y somete toda Italia incluyendo
Tergeste, donde sin embargo la influencia es mínima.
Teodorico muere en el año 526 y para el año 535 Belisario al
mando del ejército bizantino invadió Italia, por órdenes del emperador
Justiniano, logrando pacificar la península italiana y restablecer
provisionalmente el poder imperial.
Con la salida de Italia de los Godos, los problemas no concluyen
para el imperio romano, ya que como nos cuenta Pablo Diácono, en el
mes de abril del año 568 los Longobardos (en un numero cercano a las
100.000 personas) dejaron sus tierras de Panonia y se dirigieron hacia
Italia: “Tunc Alboin sedes proprias, hoc est Pannoniam, amicis suis
Hunnis contribuit, eo scilicet ordine, ut, si quo tempore Langobardis
necesse esset reverti, sua rursus arva repeterent. Igitur Langobardi, relicta
Pannonia, cum uxoribus et natis omnique supellectili Italiam properant
possessuri. Habitaverunt autem in Pannonia annis quadraginta duobus.
18
-Thiudareiks, cuyo significado era “gobernante del pueblo” y que fue degenerado en Teodorico
19
-Hay que señalar que Teodorico fue el único Ostrogodo en ser ciudadano romano, los demás eran soldados
extranjeros al servicio del imperio, de hecho ningún Romano ejercía cargos en el ejercito y ningún Ostrogodo
ejercía cargos civiles
18

De qua egressi sunt mense aprili, per indictionem primam, alio die
post sanctum Pascha, cuius festivitas eo anno iuxta calculi rationem ipsis
kalendis aprilis fuit, cum iam a Domini incarnatione anni quingenti
sexaginta octo essent evoluti”. 20
Cabe señalar, que Italia era una región ya conocida por algunos de
ellos, porque habían combatido años antes como mercenarios y además
sabían que la población no estaba muy conforme con el gobierno
bizantino.
La primera provincia que fue ocupada fue la del Friuli y
transformada en un ducado, política que siguieron en la medida que
avanzaban en Italia; la ciudad de Milán por ejemplo, fue ocupada en el
verano del 569.
Los Bizantinos mandaron a Longino para tratar de contener la
invasión pero no lo logró y únicamente la ciudad de Pavía resistió a los
longobardos por tres años y fue convertida luego en capital por el rey
Alboìno.
Sin embargo a pesar de dominar la península, constituyendo 36
ducados los Longobardos nunca estuvieron en condición de poder
controlar las ciudades en el litoral marino, como sucedió en Trieste donde
a pesar de depender del conde del Friuli, prácticamente no hubo
influencia Longobarda, de modo que el acceso a Italia siempre quedó
abierto para los Bizantinos.
C- Los Francos, el Papa y el Patriarcado de Aquilea.
Los sucesos de Italia entre los siglos VII y VIII fueron decisivos
para la ciudad de Tergeste (que de aquí en adelante la denominaremos
con el nombre de Trieste); estos sucesos fueron en primer lugar el
establecimiento del estado pontificio, para lo que el Papa Esteban II pidió
ayuda a los Francos.
20
-Paolo Diacono, liber II, 7: "Alboino dividió sus tierras entre los Hunos, amigos de él con el pacto que si los
Lombardos hubieran sido obligados a regresar pudieran recuperarlas. Después de eso los Lombardos
abandonaron la Panonia se apresuraron con sus mujeres, con sus hijos y todos sus bienes hacia Italia,
ardiendo por el ansia de adueñarse de ella. Habían vivido por cuarenta y dios años en Panonia: salieron de
ella en abril, en el tiempo de la segunda inducción, el segundo día después de Pascua, habiendo transcurrido
568 años desde la encarnación de nuestro señor”. (Traducción nuestra).
19

Al efectuar un análisis global de la situación italiana al final del siglo
VII, se puede notar que la Italia bizantina esta manejada por hombres
cuya suerte y fortuna no se encontraba amarrada a los destinos del
imperio, representado por el Exarca 21 bizantino.
En las distintas provincias mas bien la población estaba constituida
por campesinos o terratenientes, con lazos importantes con la Iglesia, ya
que esta constituía la única institución en capacidad de garantizar, al
contrario de los bizantinos o de los longobardos, algo de paz social.
Es por eso que la lucha iconoclasta del año 726 abre en Italia una
crisis religiosa que durará varias décadas pero sobre todo minará el poder
de Bizancio en la península y a partir de la condena del Papa Gregorio II
(715-731) en todo el territorio se suceden revueltas contra los funcionarios
bizantinos que tratan de aplicar el decreto imperial sobre los Iconos.
Así que al final entre la política religiosa del emperador, la presión
fiscal y la conducta punitiva de los bizantinos, hacia la población local,
logran estos factores, presentarnos un panorama que señala que los
tiempos estaban maduros para una separación del Imperio.
Sin embargo, tal separación debe tomar en cuenta la necesidad
defenderse de las aspiraciones de expansión de los Longobardos cuyo
rey Liutprando, entre los años 728 y 742, trata de unificar la península y
derrota en varias ocasiones a los bizantinos, amenazando Roma.
Finalmente en el año 754 el Papa Esteban II, frente a las nuevas
amenazas Longobardas representadas por el rey Astolfo, viaja a la corte
de Pipino el Breve, en Francia, para solicitar la ayuda de los Francos y
este decide darla; hay que señalar que la alianza que se estableció, se
caracterizó por un fondo netamente religioso y se basó en lazos cristianos
de paz y caridad unidos a aspectos prácticos con valor público legal, que
vincularon de facto a la Iglesia con los emperadores Carolingios.
21
-El Exarcado de Italia fue constituido con la promulgación por parte del emperador Justiniano de la
“Pragmatica Sanctio” (especie de constitución imperial, que tocaba temas de particular interés y promulgada a
solicitud de un alto funcionario) en el año 554, a solicitud del Papa Virgilio (Pragmatica Sanctio pro petitione
Vigilia). Con esta constitución el emperador establecía el sometimiento de Italia a la legislación bizantina y la
división entre poder político (dado a un gobernador llamado “Exarca”) y el poder civil (prerrogativa de un juez u
otro funcionario) nombrado por un Obispo.
20

De hecho el Papa corona a Pipino el Breve y le concede el titulo
honorífico de “Patricius Romanorum” obteniendo en cambio la protección
militar que necesitaba.
Cabe señalarse que estos acuerdos serán confirmados por todos
los sucesores hasta Enrique II de Sajonia en el 1020. Carlomagno amplia
los dominios del Papa en los años 781 y 787 y para la época se habla ya
de la “Respublica Romanorum” y no se mencionan a los derechos
bizantinos.
Posteriormente en el año 824 el Papa Eugenio II y el emperador
Ludovico el Pío establecen sus relaciones en la denominada “Constitutio
romana”.Por lo tanto a partir del siglo VIII la "Respublica Romanurum" ya
se ha convertido en una entidad política especifica y autónoma con todas
las instituciones y las estructuras necesarias para su gobierno.
Mientras todo esto sucedía en la península, hay que recordar que
para los cristianos, a partir del siglo IV, existía otro lugar importante para
su religión: Aquilea. Esta ciudad, había sido fundada en el año 181 a.c.
como base militar romana, en función de la expansión hacia Iliria, Histria y
Panonia.
Luego fue establecida como capital de la “Decima Regio Venetia et
Histria” y en el 89 a.C se convirtió en “municipium”. Hay que señalar que
el emperador Constantino residió en ella, donde construyó un suntuoso
palacio y finalmente murió (339). Es en esa ciudad es donde en Italia, se
origina un nuevo aspecto de la política unida a la religión y que influirá en
una gran parte del norte de Italia: el Patriarcado de Aquilea.
El origen del Patriarcado se puede establecer entre el III y IV siglo y
se encuentra ligado al periodo del obispo Teodoro (308 al 319) quien
establece la “corretta dottrine” 22 o sea una línea ortodoxa de fe y que
marcará el comienzo de un obispado regular en la ciudad.
Para cuando el Papa Dámaso convoca un concilio entre los años
369 y 371, ya Aquilea tiene un rol principal y su jurisdicción comprendía
unos veinte obispados en Italia y unos diez más afuera de ella (abarcaba
el norte de Italia, la zona del Adriático, Carniola y Panonia; entre ellos
tenemos en Venetia: Acilum (Asolo), Altinum, Bellunum, Concordia,
22
-La doctrina justa o en otras palabras la doctrina ortodoxa (de no confundir con la Iglesia ortodoxa oriental)
21

Feltria, Iulium Carnicum, Opitergium, Patavium, Tarvisium, Tridentum,
Verona, Vicetia, Forum Iulii; en Histria: Cissa, Parentium, Pola, Tergeste;
en Raetia: Sabiona, Augusta; en el Noricum: Aguntum, Celeia, Tiburnia,
Virunum; en Panonia: Scarabantia; en Savia: Aemona.
En el año 553 sucede el “Cisma de los Tres Capítulos” cuando el
emperador Justiniano, al tratar de imponer su voluntad en el concilio que
convocó en ese año, provoca la división de la Iglesia condenando como
heréticos a Teodoreto de Ciro, a Teodoro de Mopsuestia y a Iba de
Edesa, cuyos escritos estaban reunidos en “Tres Capítulos”. A tal
respecto los Patriarcas junto con la mayor parte de los Obispos Orientales
aceptaron su interferencia, mientras que el Papa Romano Virgilio fue
encarcelado, transferido a Constantinopla y finalmente obligado a aceptar
la voluntad del emperador.
A pesar de ello, muchos Obispos del Norte de Italia y de otras
regiones no aceptaron las imposiciones, entre ellos los obispos de Milán y
Aquilea.
Estos obispos convocaron un concilio en Aquilea en el año 579 y
no reconocieron más la autoridad de la Iglesia de Roma erigiéndose
Aquilea en un Patriarcado Autónomo.
Más tarde en el 580, el Patriarca Elías Greco en Grado, (donde se
había mudado el patriarca de Aquilea) en un sínodo convocado por él,
obtiene el apoyo de 18 obispos de su área de influencia (Friuli, Istria y
Dalmacia) entre los que se encontraba el obispo Severo de Trieste.
Para el año 699 termina el cisma pero desde momento existe una
división entre Grado y Aquilea y hubo dos patriarcas 23 . Grado queda bajo
la influencia de Bizancio, de cara al mar, pero obtiene dependencias
nuevas que están surgiendo a lo largo de la costa véneta- bizantina.
Además se puede ya entrever como detrás de esta división no están solo
los bizantinos, también está el naciente estado Veneciano, el cual para el
momento, era semi autónomo del imperio bizantino.
23 Paolo Diacono. Historia Longabardarum. Liber Quartus, 33
22

En cuanto al patriarca de Aquilea, hay que decir que a éste se le
reduce el territorio original del siglo V. Sin embargo, Aquilea se
proyectará hacia el interior, siendo que esa diócesis en la edad media fue
la de mayor territorio, ya que su jurisdicción comprendía ciudades tales
como: Como, Mantova, Verona, Vicenza, Padova, Treviso, Trento,
Belluno, Feltre, Concordia, Ceneda, Trieste, Capodistria, Parenzo, Pola,
Pedena, Emona (Cittanova). Además desde el momento que concluye el
cisma, el Patriarcado de Aquilea comienza a aparecer en los sucesos
propios del Friuli.
Sin embargo, en este punto, tenemos que aclarar que no se ha
podido aún establecer bien cómo eran las relaciones políticas entre el
Patriarca de Aquilea y el Duque del Friuli y hasta el momento no existe
disponible mayor información.
Se conoce sin embargo que cuando Carlomagno impone su ley
sobre todos los territorios Longobardos, en el año 776, siendo patriarca de
Aquilea Paulino II, se establece también el poder temporal de los
patriarcas de Aquilea y con este hecho se los convierte en grandes
feudatarios y posteriormente príncipes del imperio. Luego durante el
patriarcado de Sigualdo en el año 787, todo el Friuli viene ocupado por los
Francos.
Durante los siguientes doscientos años, Aquilea al igual que la
región del Friuli y la misma Trieste, sufrieron las invasiones de distintos
ejércitos: primero los sarracenos remontan el Adriático y llegan hasta el
golfo de Trieste (830 y 865), los eslavos saquean Istria (871), los
sarracenos tratan de saquear Trieste (880); luego los húngaros, primero
en el 889 y sucesivamente en el 901 y 902.
Los húngaros invaden Italia nuevamente en el año 935 y durante
unos 18 años se combatirá en el norte de Italia, en Istria y Carniola contra
ellos.
Finalmente el emperador Otón I en el año 944 se encuentra en
condiciones de enviar un ejército al mando de su hijo Enrique que logra
establecer una paz más duradera.
23

El emperador Enrique IV otorgará al Patriarca en el año 1065 la
investidura feudal, con prerrogativas de duque sobre el condado del Friuli
y el marquesado de Istria marcando con este acto el inicio de un “estado
patriarcal”, ya que de hecho el Patriarca de Aquilea a partir de ese
momento mantendrá el poder religioso y el poder temporal. Luego en el
año 1077 el emperador concede al Patriarca Sigeardo (1068-1077) el
marquesado de Carniola extendiendo aun más la autoridad del Patriarca.
Cabe señalar que desde el año 1065, también Trieste queda bajo el
dominio de los Patriarcas de Aquilea, ya no solo por lo que respecta a la
territorialidad de los Obispos sino como vasallos.
D- Trieste del siglo IV al Siglo XII.
Tal como mencionamos, el siglo IV marca el comienzo de los
cambios en Trieste que hasta ese momento había sido una pequeña,
apacible ciudad romana y lugar de veraneo. Entre el siglo IV y el VIII la
ciudad sufre por las invasiones bárbaras: en el año 373 los Alanos y los
Hunos la saquean en el año 453 Atila la arrasa antes de asediar y luego
destruir Aquilea: Los Longobardos en el año 568 invaden el Friuli y
someten a Trieste para regirla durante más de 300 años.
Luego por la invasión de Istria por parte de los Eslavos y la guerra
entre éstos y los Avaros y Longobardos en el año 600 la ciudad sufre
destrucciones, que se repetirán en los años 601 y 604 y otra vez por
invasiones de los Eslavos en el 733. Cabe sin embargo señalar que
dentro de ese periodo de conflictos, un momento importante de la vida
ciudadana se da en el año 587 cuando el Obispo Severo de Trieste apoya
Elias el patriarca de Aquilea durante el Cisma de los Tres Capítulos; hay
que decir sin embargo que para el año 601 el obispo Severo regresa a la
iglesia romana y pide ayuda al Papa Gregorio para que interceda con el
Exarca bizantino a fin de obtener su apoyo en contra del patriarca de
Aquilea.
24

Más tarde, tenemos noticias del año 889, en las que aparecen
tropas triestinas apoyando a Berengario, duque del Friuli en su guerra
contra Guido, duque de Spoleto, nos dice Vincenzo Scussa 24 : “in questi
anni (889) Berengario, duca del Friuli concesse molti privileggi a Trieste,
nè la citta gli fu ingrata di corrispondergli aiuto nelle guerre ch’ egli ebbe in
Italia, posciachè trecento cittadini triestini sostennero la battaglia contro
Guido, duca di Spoleto a facvore di Berengario, coprendo co’ propi petti .
la persona del re, che con essi si ricoverò in Verona.” 25
A partir del año 900 la amenaza para Trieste está representada por
los húngaros que casi anualmente invaden el norte de Italia, siendo en
particular recordadas las invasiones del 903 y del 924 por la gran
destrucción acarreada a las ciudades.
Será en el año 944 a raíz de la invasión de los húngaros a Carintia
y en vista que no recibían ayuda del emperador Otón I, que en ausencia
de duque Conrado se formó una coalición para combatirlos, compuesta
por los súbditos del conde, liderados por Bernardo comandante de parte
de la Carintia, su hermano Gotfredo, marqués de Istria y Lupo II 26
Patriarca de Aquilea. La batalla produjo una gran cantidad de muertos
entre los húngaros pero no quedaron derrotados; mueren Gotfredo y su
hermano Bernando y el patriarca Lupo II se salva huyendo para Aquilea.
El emperador entonces decide acabar con la amenaza húngara y manda
a su hermano Enrique, duque de Baviera, a Italia quien en dos batallas
en el año 948 derrota a los invasores y ocupa el norte de Italia hasta
Pavía. Ese año también es importante para Trieste ya que el rey de Italia
para ese momento Lotario II, en documento emanado en Pavía en agosto
de ese año hace donación a los obispos del dominio de la ciudad. 27
24
-SCUSSA, Vincenzo. Storia Cronografica di Trieste. Capt. X, Pág. 49
25
-“en esos años Berengario, duque del Friuli concedió muchos beneficios a Trieste y la ciudad no fue ingrata
en el momento de prestarle ayuda para su guerra en Italia en vista que trescientos ciudadanos triestinos lo
apoyaron en batalla contra Guido, duque de Spoleto , cubriendo con sus pechos la persona del rey que con
ellos se refugió en Verona.”. (traducción nuestra).
26
- Por el año del acontecimiento, se supone se trata del patriarca Lupo II (Patriarca 932 – 948)
27
- Ver documento anexo A
25

Esto redunda en un factor decisivo para Trieste, ya que su Obispo
Giovanni III, quien se había endeudado con un judío (sólo identificado
como Daniel David), para obtener recursos para la defensa de la ciudad y
sus fronteras contra los húngaros, vendió el dominio, por 500 marcos de
oro al Común de la ciudad quedándose el obispo sólo con la jurisdicción
espiritual, el diezmo y los censos feudales.
Desde ese año, las crónicas que tenemos del siglo XII, reseñan
solo el diario quehacer de un pequeño burgo medieval; resalta sin
embargo en la confirmación del emperador Enrique II en el año 1040 al
obispo Aldigarus de las prerrogativas y donaciones otorgadas con
anterioridad por reyes y emperadores. 28 Luego la donación que hace el
obispo Artuico Erenicio en el año 1114 de la Iglesia de los Santos Mártires
con todas sus posesiones (localizada afuera de los muros de la ciudad) al
abad de San Jorge Mayor de Venecia, dice el obispo de Trieste: “…Ego
itaque praelibatus Episcopus Tergestinus scilicet Herinicius plenam et
incommutabilem Cartulam donationis concedo tibi Tribuno Nobilissimo
Abbati Sancti Georgij, et Stephani Protomartyri…”. 29 Esta donación desató
mucha polémica entre los ciudadanos triestinos y marca el comienzo del
empobrecimiento del obispado triestino.
28
- KANDLER, Pietro. Codice Diplomatico Istriano, Edizioni WEB. (Ver documento anexo B)
29
- Ibid (Ver documento anexo C)
26

Capítulo 2
Las hegemonías nacientes en el siglo XIII: Venecia, Hungría y los
Habsburgo.
Ilustración 3 – El asedio de Constantinopla del año 1204 – Ilustración de la página de un Codice
efectuado para Felipe el Bueno de Francia. Fuente: Steve Runciman. Storia delle Crociate.
Después que Trieste lograra, desde el IV siglo sobrevivir a las
muchas y distintas invasiones que se presentaron a sus puertas, haber
sido parte del Imperio Bizantino y luego fuera parte del longobardo
ducado del Friuli, finalmente a final del siglo IX, alcanzó bajo la señoría de
los Obispos designados por Aquilea, un crecimiento comercial lento pero
estable y políticamente comenzó a establecer las estructuras internas que
le permitirían autogobernarse entre los siglos XIII y XIV. Sin embargo,
nuevas amenazas a su condición casi privilegiada en esos siglos
turbulentos, aparecieron en el horizonte; en primer lugar, una ciudad
“vecina”, que desde el siglo VI no había parado de crecer, se había
constituido en republica independiente y buscaba expandirse, en función
de su comercio: Venecia.
Esta ciudad se había convertido en un estado y había crecido
protegida por su entorno natural, logrando pasar casi desapercibida
mientras se desarrollaba en función de sus intercambios comerciales.
27

Sin embargo a partir del siglo X ya no se ocupaba solo de comercio
y de ser una pequeña republica se había transformado en una gran
potencia marina y a pesar de mantener su estructura republicana, “pro
forma”, en realidad el poder era detentado por la oligarquía rica de la
ciudad y el mandatario principal: el Doge actuaba siempre en perfecta
concordancia con los nobles de la ciudad.
Las primeras señales de peligro para Trieste, pasaron
prácticamente inadvertidas, dentro de los acontecimientos más relevantes
de esos siglos, pero las dos ciudades se encontraban en una ruta de
colisión. De hecho las primeras escaramuzas se dieron por el comercio de
la sal, que había sido el principal negocio para Trieste desde el siglo IV y
que Venecia también lo consideraba como un producto primordial de su
comercio, tanto que ya para el siglo VIII esa ciudad había logrado
alcanzar casi el control total de ese valioso producto; Es claro que una
pequeña ciudad, con unas pequeñas salinas como tenia Trieste no podía
inquietar a la nueva potencia marinera, sin embargo los triestinos
presentaban una molestia incómoda y cuando trataron de competir
comercialmente en el mar Adriático, los venecianos trataron de
someterlos.
En algunas ocasiones, los venecianos aprovecharon las
circunstancias del entorno, como en el año 999 30 ; otras veces
amenazaron abiertamente tal como sucedió en el año 1202 31 y en dos
ocasiones usaron la fuerza: en 1288 32 y en el año 1368 33 .
Además de los venecianos, Trieste tuvo siempre roces menores
con sus vecinos más cercanos, comenzando con Muggia (que se
encontraba a unos 10 kilómetros de distancia), siguiendo con CapodIstria,
Duino, Pirano, Parenzo y hasta con Gorizia; sin embargo los conflictos
eran siempre en una escala menor y la ciudad era lo suficientemente
fuerte para enfrentar cualquier peligro por ese lado.
30
-El doge de Venecia Pietro Orseolo II somete a todas las ciudades de la costa Istriana, incluyendo Trieste a
cambio de ayuda contra los piratas Narentinos.
31
-El doge Enrico Dándolo en ocasión de la cuarta cruzada la somete por la fuerza (Codice Diplomático
Istriano. Vol. II - 26 Octubre del año 1202, Indicción VI. Trieste – Ver documento anexo D).
32
-Fue asediada durante la guerra del año 1283 cuando Trieste y Muggia se unieron a Gorizia, Padova y
Treviso contra los venecianos.
33
-En ese año los venecianos acabarán con la independencia que Trieste había logrado en el 1295.
28

Es también importante recordar que Otón I en el año 952, bajo la
idea de defender mejor los territorios del norte de Italia junto con Istria de
las invasiones de los húngaros, separó Istria y Friuli (el Margraviado de
Verona) del Reino de Italia, incluyendo Istria en el ducado de Baviera y
aumentando así la influencia germánica en la zona.
Esta situación se incrementó cuando el emperador Otón II en el
año 976 formó el Ducado de Carintia, separado de Baviera pero que
incluía Istria, que se constituirá definitivamente en marquesado cuando el
emperador germánico Enrique III, la concedió en feudo a Ulderico de
Weimar (1040-1070). La consecuencia de esta situación en Istria, con el
tiempo llevó al debilitamiento de la autoridad de los grandes señores, ya
que se encontraban lejos de sus tierras y en general se ocupaban más de
los acontecimientos de Alemania. Adicionalmente en vista que también
los obispos no podían ocuparse directamente sus posesiones, dejaban la
administración en manos de sus “advocati” o representantes laicos y la
defensa de los feudos en manos de los distintos potentados de modo que
toda la situación favoreció la formación de pequeños señoríos feudales. Al
pasar de los años esa prerrogativa de “defensa” en muchos casos se
convirtió en una verdadera usurpación.
Nos cuenta Darco Davorec 34 que por ejemplo en la segunda mitad
del siglo XII el conde Mainard de Schwarzenberg se convirtió en señor del
centro de Istria y a través de las distintas sucesiones al final del mismo
siglo esa señoría estaba en mano de los condes de Gorizia.
Adicionalmente, Davorec comenta que la misma situación se dio con los
condes de Duino, con quienes Trieste estaba en buenas relaciones, y que
eran sus vecinos cercanos, (a menos de 8 kilómetros de la ciudad).
Por ser “abogados” de los patriarcas de Aquilea, los condes de
Duino obtuvieron feudos en el Carso (Eslovenia e Istria) y para la primera
mitad del siglo XII ya tenían poder sobre los feudos de Fiume, Castua,
Apriano y Mosquiena, feudos estos que en realidad pertenecían a los
obispos de Pola.
34
-DAVOREC, Darko. A brief history of Istra. 1998. En:
http://www2.arnes.si/~mkralj/istra-history/naslovna.html
29

Cabe señalar que los señores de Duino fueron vasallos de Aquilea
hasta el 1391, cuando muere Ugòn VI y hay que añadir que fue este
personaje el que vendió los derechos sobre sus tierras a los Habsburgo
en 1366 y de quienes recibió luego las mismas tierras en feudo privado y
de las relaciones de Duino con Trieste tenemos un ejemplo que data del
año 1139. 35
A pesar de los acontecimientos de los siglos XI y XII mencionados
anteriormente, hay que apuntar que el peligro para Trieste existió desde el
siglo X, cuando Istria interior es unificada por Tomislav quien después de
lograr obtener las ciudades de la costa istriana que estaban en mano
veneciana o bizantina, es coronado como rey de los croatas en el año
925. Podemos así considerar, que con este rey es que comienza a
aparecer Trieste en el primer plano de los conflictos que se sucederán a
través de los siglos siguientes en esa zona, ya que fue Tomislav, dentro
de sus miras expansionistas y unificadoras, el primer rey coronado que
tomó en consideración a la ciudad situada en un sitio estratégico para
enfrentar a Venecia y le apetecía obtenerla aunque hay que aclarar que
nunca llegó a atacarla.
Mas tarde esta nueva presión se agudiza sobre la ciudad libre
cuando Croacia queda en manos del rey húngaro Ladislao I, ya que éste
comienza un abierto enfrentamiento con los venecianos y cuando su hijo
Kálmán sube al trono, la amenaza para Trieste fue aún mayor ya que la
mayor parte de las ciudades de la costa de Istria lo habían preferido a él,
en lugar de los venecianos.
Todo lo anterior es importante señalarlo, ya que analizando la
situación geopolítica de la ciudad, se puede entender claramente por qué
la gente de Trieste pensaba en la independencia Comunal como una
necesidad de supervivencia. Por el oeste la ciudad representaba un
fastidio para Venecia, una de las “superpotencias” de la época, con la cual
desde siglos atrás había competido; por el este despertaba la envidia de
varios de sus vecinos de la costa de Istria, ya que desde hacía más de un
siglo la ciudad y su entorno se encontraba separada de la administración
provincial, por estar bajo la autoridad de sus obispos.
35
-Ver documento anexo E
30

Vicente Scussa 36 nos dice a tal respecto, que el emperador Lotario
en el año 848, donó al obispo Giovanni II de Trieste la ciudad con un
circuito alrededor de tres millas alemanas correspondientes a 15
italianas. 37
Esto le daba una independencia de movimiento con respecto a sus
vecinos que en general, administrativamente dependían o habían
dependido o para su defensa, en alternancia a las guerras y a los cambios
políticos, de los distintos doge, duques y reyes.
Adicionalmente, en la medida que en la frontera del este se
estableció un reino poderoso (primero Croacia, luego Hungría y a esta
luego anexada al poder naciente de los Habsburgo), los ciudadanos de
Trieste comenzaron a considerar que el mantener la ciudad independiente
(Y podríamos interpretar esa independencia, en términos contemporáneos
de “neutralidad”), era la mejor solución para sostenerse en equilibrio
dentro del conflicto oeste/este, sin correr el riesgo de estar continuamente
en la línea de fuego como por ejemplo sucedió en Dalmacia con la ciudad
de Zara, que tal como nos cuenta Alvise Zorzi 38 , fue asediada, tomada y
perdida por los venecianos en siete ocasiones, por ser “... considerada
como la causa principal [para los venecianos] de una inestabilidad y de
una inquietud demasiado a menudo utilizada por los reyes de Hungría en
función de sus ambiciones imperialistas.” 39
A -Venecia de su nacimiento al siglo XIII.
Venecia nació al borde del Adriático dentro de la llamada, por los
romanos “X Regio” (constituida por las actuales regiones italianas del
Trentino, el Friuli, el Veneto y por la península de Istria) en una región
cambiante, donde la interrelación de ríos y mar, han logrado establecer
un ambiente cenagoso y con numerosas lagunas.
36
-SCUSSA, Vincenzo. Storia Cronografica di Trieste. Divisione. IX, pág. 47 y 48
37
-Si bien no se ha localizado un documento que soporte esta primera donación, Scussa nos cita al historiador
italiano Ughellio, el cual dice “Joannes Episcopus cui Lotharius Caesar, Tergetae civitate ipsam delargitus est,
cum adiecto territorio per 15 millia passum.” 1.c.t.3 colum. 498.
38
-ZORZI, Alvise. Una città, una repubblica, un impero. Milano, Mondadori editori, 1978. Pág. 121/122
39
-Traducción nuestra.
31

Este territorio era la tierra de los “Venetos”, pueblo dedicado a la
pesca y a la explotación de las salinas, que después de haber sido
asimilado por los romanos permitió el establecimiento de zonas de
veraneo para los romanos ricos, de las ciudades vecinas (Padova,
Oderzo, Aquilea).
En la medida en que las distintas invasiones se suceden en Italia, a
partir del siglo IV, esa zona de lagunas se constituyó en refugio de los
pobladores de las ciudades en fuga, dado que la continuidad de ríos,
lagunas y ciénagas no permitía una fácil comunicación; además los bajos
arenosos por el lado del mar impedían cualquier ataque por ese lado. De
hecho la tradición, basada en una leyenda medieval, establece la
fundación del primer poblado en “Rialto” (Rio alto) lugar que luego se
llamará Venecia, en el año 421, por refugiados que huían de los visigodos
del rey Alarico. Se considera sin embargo que estos establecimientos en
realidad fueron temporales y una vez pasado el peligro, las personas en
general regresaban a sus lugares de pertenencia.
Muy distinta fue la situación en el siglo VI, tal como nos cuenta
Alvise Zorzi 40 “La vera, grande occasione che mise in moto una
migrazione destinata a durare a lungo, fu certamente l’arrivo di un popolo
germanico particolarmente agresivo e rozzo, i longobardi; i quali, a
differenza di gotti e unni, erano venuti in Italia con la ferma intenzione di
restare.” 41 Así fue que la laguna de Venecia, una de las principales, se
convirtió poco a poco en lugar de residencia y cambió su composición
social, ya que en la mayor parte de los casos, los refugiados eran
personas de bienes, autoridades civiles o eclesiásticas.
De esa forma, la tierra firme quedó en mano de los invasores y las
lagunas quedaron bajo la influencia del imperio romano de oriente y
dependiendo de Rabean. Sin embargo ya a partir del siglo VII la población
de las lagunas tiene un gobierno propio y casi autónomo y es para esa
época que los venecianos comienzan con la tradición de elegir un
magistrado del más elevado rango, con funciones vitalicias, este era el
40
-ZORZI, Alvise. “Una città, una repubblica, un impero”. Pág. 11
41
-“El verdadero gran suceso, que puso en marcha una emigración destinada a durar por largo tiempo, fue con
certeza, la llegada de un pueblo germánico particularmente agresivo y rudo: los Longobardos; estos a
diferencia de godos y hunos, habían venido a Italia con la firme intención de quedarse”. (Traducción nuestra)
32

“dux” 42 (de donde deriva el término de “doge”). Él gobernaba junto a un
grupo de consejeros a los que nunca podía oponerse y en caso de
necesidad, se convertía en cabeza del ejército.
Hay que mencionar que su cargo no era hereditario, pero era
siempre elegido entre los miembros de las familias más poderosas de
Venecia. Luego en el siglo VIII el rey longobardo Liutprando estableció
una frontera estable entre el área de influencia longobarda y la bizantina
con su “Terminatio Liutprandina”, pero la situación cambiará radicalmente,
un poco más tarde, cuando el rey Astolfo conquista Ravenna, poniendo
fin al Exarcado bizantino; Sin embargo el rey confirma el decreto de
Liutprando y Venecia a pesar de quedar en la esfera de influencia de
Bisanzio, obtiene una mayor autonomía.
Antes de continuar con los sucesos netamente historiográficos, en
este punto es necesario efectuar un análisis del porqué Venecia se
convierte, en poco tiempo, en una verdadera potencia internacional.
En primer lugar hay que señalar que la zona lagunar nunca
favoreció el desarrollo de una agricultura suficiente a sustentar a la
población local y lo mismo sucedió con respecto a la actividad pecuaria.
La pesca sin embargo era abundante y existía un producto que de
acuerdo a Alvise Zorzi 43 , “... altrettanto vitale per la civiltà del medioevo di
quanto lo è il petrolio per la nostra ...” 44 : la sal. Esta no solo era vendida
por todo el Adriático, sino que era llevada a todas las ciudades del norte
de Italia.
Hay que señalar, por ejemplo, que los venecianos la llevaban hasta
Ravenna donde era cambiada principalmente por trigo y en esa misma
ciudad, los comerciantes venecianos, aprovechaban para adquirir la
mercancía que llegaba de Oriente, en especial la seda púrpura, el
incienso y las especias en general.
42
-De acuerdo a la historiografía veneciana tradicional el primer doge fue electo en el año 697: Paoluccio o
Paulicius Anafesto. Sin embargo la critica histórica actual, considera que este fue Paolo, el Exarca de Ravenna.
43
-ZORZI, Alvise. Una città, una repubblica, un impero. Pág. 14
44
-“... tan vital para la civilización de la edad media como lo es el petróleo para la nuestra...”. (traducción
nuestra)
33

A continuación, una parte de la mercancía regresaba a Venecia,
pero una buena cantidad era transportada por barcazas venecianas, a
través de los ríos de la Italia del norte, llegando tan lejos como Pavía,
donde podía ser vendida a los distintos comerciantes que llegaban a la
capital lombarda.
Nos dice Yves Renouard que se considera que Venecia fue: “... en
el siglo X y XI el centro mas activo de la vida económica, no solo de Italia
sino de todo Occidente.” 45 . También debemos destacar que la habilidad
de los venecianos consistió en reunir y monopolizar los tráficos ya
existentes imponiendo que todo el movimiento de mercancías, fuera
dirigido hacia su puerto y puesto bajo su control. Y de esto es que se
derivan una gran parte de los continuos conflictos con Trieste, con las
ciudades de Istria (Pola, Zara, Fiume) y con Ancona y Ragusa, que
deseaban competir en libertad.
Adicionalmente y en función de alcanzar a los mercados originales
de donde provenían las mercancías: Constantinopla y Alejandría en
Egipto, cuyos mercaderes no viajaban a Europa, Venecia se vuelca hacia
el mar y durante los siguientes tres siglos, esa ciudad se convierte en la
capital de la “Repubblica Serenissima Veneta”, (que ha sido la república
de más larga duración en la historia, 1100 años, a pesar de haber sido
una república aristocrática) y conquista el predominio de la navegación en
el Adriático, al que los venecianos denominaron tradicionalmente (y aún a
veces en nuestros días) “golfo de Venecia”.
Sin embargo, Venecia tuvo dificultades que superar antes de lograr
la hegemonía de los tráficos con Oriente; por ejemplo, según nos cuenta
Vincenzo Scussa 46 en el año 840 los venecianos, sufren una importante
derrota por causa de los sarracenos y otra vez los sarracenos en el año
865, asedian y saquean Grado 47 .
Además los venecianos tenían que enfrentar en el Adriático la
competencia de Ancona y Ragusa (la actual Dubrovnik, en la Dalmacia)
unida en una alianza para enfrentar Venecia.
45
-RENOUARD, Yves. Gli uomini d’affari italiani del medioevo. Milano, Rizoli Editori, 1973. Pág. 33
46
-SCUSSA, Vincenzo. Storia Cronografica di Trieste. Divisione IX, Pág. 47
47
-Ibid. Divisione X, Pág. 48
34

Así por ejemplo en el año 1174, Venecia también forma una alianza
con el Sacro Romano Imperio, para derrotar a la ciudad de Ancona.
En el año 998 y a raíz de una solicitud de las ciudades de Istria el
“doge” Pietro Orseolo II, se adueñará de todas las ciudades de las costas
de Istria y de Dalmacia que habían sido abandonadas por los bizantinos y
asumirá para el y sus sucesores el titulo de “Dux Dalmatiae”.
De estos hechos tenemos noticias por parte de Marc Antoine
Laugier 48 quien nos describe los sucesos: “... dette città independenti
stanche de’ Narentini, risolsero unirsi insieme per opporsi a quelli pirati [...]
e non trovando miglior braccio che quello de’ veneziani loro vicini,
risolsero sollecitare l’assistenza della loro potente Repubblica, con la
promessa di darsi a essa quando venissero liberati dalle vessazioni de’
pirati” y sigue luego “... affine di ricevere le deputazioni di tutte le citta della
Provincia che si affrettarono a seguire l’esempio della capitale (Pola),
Trieste, Gustinopoli o Capo d’ Istria, Pirano, Isola, Emona, Rovigo
Umagno, tutte le città grandi e piccole spedirono a fare la loro
sommissione”. 49
A pesar de la continua expansión comercial, el factor decisivo de la
grandeza hegemónica veneciana lo constituyó, en el siglo XI la primera
cruzada, ya que gracias a este suceso los venecianos, sea por el
comercio, sea por sus banqueros o por el transporte de peregrinos y
cruzados, amasaron inmensas fortunas.
En este aspecto son más relevantes aún los acontecimientos de la
cuarta cruzada, que culminarán con la conquista de Constantinopla en el
año 1204 y el establecimiento del Imperio latino de Oriente. Las
circunstancias a las que nos referimos, se dieron a raíz de la cruzada
impulsada por Inocencio III y que había llevado a los cruzados franceses
hasta Venecia, para ser transportados a Tierra Santa.
48
-LAUGIER, Marc Antoine. Storia Della repubblica di Venecia dalla sua fondazione sine al presente. Venecia,
Editori C. Palese e G. Storti, 1767. Tomo I, libro 4, pág. 197.
49
-“Esas ciudades independientes, cansadas de los Narentini decidieron unirse para oponerse a esos piratas
[...]y no encontrando mejor brazo que el de los venecianos sus vecinos, resolvieron solicitar la asistencia de la
potente Republica con la promesa de entregarse a ella tan pronto como fueran liberado de los ataques de los
piratas”. Sigue: “De modo de recibir los delegados de todas las ciudades de la provincia que se apresuraron a
seguir el ejemplo de la capital (Pola), Trieste, Gustinopoli o Capo d’ Istria, Pirano, Isola, Emona, Rovigo
Umagno, todas las ciudades, grandes o pequeñas enviaron (delegados) para someterse”. (Traducción nuestra)
35

Enrico Dandolo, doge de Venecia, después de prometer ayudar al
derrocado emperador Alejo IV Angelo, para recuperar el poder en el
Imperio Bizantino obtiene promesas de enorme beneficios y mediante la
manipulación (o “negociación”) y en este aspecto Steven Runciman acota:
“Es difícil decir si los cruzados entendieron las sutilezas de la diplomacia
veneciana pero si alguno de ellos sospechó que era un engaño ya no
había nada que hacer”, 50 logra la ayuda de los cruzados para sus fines.
El 26 de Octubre del año 1202 la flota veneciana compuesta por
240 navíos y más de 100 mil hombres se presenta cerca de Trieste, 51
ciudad que trataba de competir comercialmente con Venecia,
especialmente por el comercio de la sal y a la que siempre había
hostilizado. El doge “solicita” a la ciudad jurar fidelidad obligada que
marcará el inicio de las hostilidades abiertas entre los triestinos y los
venecianos y que tendrán su ápice en el asedio del año 1368) y luego de
lograrlo sin mucha dificultad, dirige la flota hacia Pola que también jura
fidelidad.
Luego la flota se dirige a Zara, que decide resistir, contando con la
ayuda de los húngaros y es aquí donde entran en escena los cruzados
que después de un corto asedio el 15 noviembre del 1202 toman la
ciudad y la saquean (por estos sucesos Enrico Dándolo y los venecianos
son excomulgado por el Papa Inocencio III quien perdona a los cruzados,
considerándolos manipulados por el doge).
Por fin y después de varias confrontaciones, negociaciones, y con
la desaprobación del Papa, los cruzados se dirigen a Constantinopla que
es tomada en el año 1204.
Venecia se adueña así, de todas las islas del Mar Iónico y del
Mar Egeo; además consigue la exoneración de impuestos sobre sus
mercancías en todo el imperio bizantino y el doge obtiene el titulo de
“Dominator quarte et dimidie partis totius imperii Romanie” que se une al
titulo de “Dux Veneciarum, Croatiae et Dalmatiae” y sin mencionar la
ingente fortuna que obtiene los venecianos en el saqueo de
Constantinopla.
50
-RUNCINAM, Steve. Historia de las cruzadas. Milano, Giulio Einaudi editori, 1966. Pág. 785
51
-Ver documento anexo D.
36

Tenemos noticia de una mínima parte de la fortuna que se obtuvo
en el saqueo a traves de Godofredo de Villehardouin 52 , quien narra lo
siguiente: “Igual que este palacio se rindió al marqués Bonifacio de
Monferrato, el de las Blanquernas se rindió a Enrique, hermano del conde
Balduino de Flandes, salvando igualmente las vidas de los que estaban
dentro. También allí fue encontrado un tesoro muy grande, no menor que
el de Bucoleón. Cada uno llenó con sus gentes el castillo que le fue
entregado e hizo custodiar el tesoro; y las otras gentes que estaban
dispersas por la ciudad hicieron también gran botín; fue tan grande la
ganancia que nadie os podrá hacer la cuenta entre oro y plata, vajillas,
piedras preciosas, satenes, tejidos de seda, capas de cibelina, de gris de
armiño y toda clase de objetos preciosos como nunca se encontraron en
la tierra. Godofredo de Villehardouin, mariscal de Champagne, da
testimonio según la verdad y en su conciencia que, desde que el mundo
fue creado, nunca se ganó tanto en una ciudad. Cada uno escogió la
residencia que le plugo, pues había suficientes. Así, se albergó la hueste
de los peregrinos y de los venecianos; fue grande la alegría por la fortuna
y la victoria que Dios les había proporcionado pues los que habían estado
en la pobreza nadaban ahora en la riqueza y el lujo [...]”
A partir de ese momento Venecia se consolida como el centro más
importante para el comercio con Oriente y en la potencia europea más
fuerte del mar Mediterráneo.
Hungría y Croacia.
En el siglo X, la nueva amenaza para Italia del norte y directamente
para Trieste estuvo constituida por los húngaros. 53 En el año 944 se formó
una coalición para combatirlos, compuesta por los súbditos del conde de
Carintia, el marqués de Istria y el Patriarca de Aquilea, que a pesar de
frenarlos, no logró derrotarlos.
52
- VILLEHARDOUIN, Godofredo de. La conquête de Constantinople en Historiens et chroniqueurs du Mogen
Age. París Edit.. A. Pauphilet, 1952, pp. 144-147.
53
-Los húngaros o magiares eran unas tribus de origen ugrofinés que tomaron el control de Panonia después
de vencer a los restos de las tribus Avaras y a los Eslavos que poblaban ese territorio entre los años 896 y
898.
37

Luego Enrique, duque de Baviera, los derrota en Italia en dos
batallas (año 948) y finalmente en el 955, Otón I el Grande, emperador del
Sacro Imperio Romano Germánico, los derrotó definitivamente en la
batalla de Lechfeld.
En el año 975 el duque húngaro Gèza se convirtió al cristianismo y
su hijo Esteban I el Santo, descendiente de la legendaria dinastía iniciada
por el jefe Arpad, recibió el reconocimiento formal como rey de Hungría en
el año 1000, cuando el papa Silvestre II le concedió el título de “Majestad
Apostólica”. Con él es que comienza una nueva época para Hungría, ya
que se efectúan cambios radicales, sea religioso que administrativos.
Entre el año 1077 y el año 1095 reina Ladislao I, apodado
“elegantissimus rex.” 54 Este rey logra una alianza con el papa Gregorio
VII y de esa forma Hungría se consolidada como un poderoso reino
cristiano. De hecho es Ladislao I quien somete Croacia (cuyas pequeñas
“ciudades- estado” consideraban que el ser vasallos de los lejanos
húngaros era mas beneficioso que serlo de la cercana Venecia), Bosnia y
parte de Transilvania y luego su hijo y sucesor Kálmán (1095-1116),
obtiene parte de la Dalmacia.
Al final Venecia y Hungría llegan a un acuerdo por el cual se
permite el movimiento libre de sus respectivos mercaderes. En este punto
debemos considerar que tal acuerdo debe haber llevado beneficios
también para Trieste, ya que la ciudad mantenía buenas relaciones con
Venecia desde la época del doge Orseolo (año 1000) y a pesar que
sabemos que en Trieste no se estableció, ninguna dinastía familiar
dedicada al comercio internacional o a la banca, (a diferencia de otras
ciudades italianas tales como Prato, Siena o Pistoia, famosas por sus
banqueros y comerciantes) no tenemos mayores informaciones con
respecto a las relaciones comerciales que mantenía con regiones
distantes.
54
-LÄZÄR, István: Hungary, a Brief History. Budapest: Corvina, 1993. Pág. 45
38

A pesar de ello tenemos que pensar, que si la ciudad fue un factor
de competencia para Venecia con respecto a la sal y a los tráficos
marítimos del alto Adriático, sus ciudadanos deben haber tenido también
algún tipo de relaciones comerciales con regiones mas lejanas como la
Croacia interior o Hungría.
Hay que señalar que durante el reinado de Béla III (1205-1235),
sucesor e hijo de Andrés II, los húngaros inician su propia cruzada contra
los rusos y lo importante de este hecho, es que los gastos vienen
cubiertos básicamente por préstamos solicitados en gran parte a los
venecianos y es así como Venecia obtiene de forma estable la ciudad de
Zara que varias veces le había dado conflicto.
Finalmente, en el reinado de Béla IV, Hungría en el año 1241 sufre
una gran invasión de los mongoles y a pesar que éstos se retiran en el
mismo año, por la muerte del Gran Khan, la débil dirección posterior y las
concesiones reales dadas a los señores feudales llevan a la
desintegración del reino.
Junto con los húngaros otra amenaza para Trieste al principio, fue
la de los croatas, especialmente cuando se convierten en reino en el siglo
X.
La historia de Croacia después de la dominación romana es
bastante confusa pero se considera que finalmente quedó dividida en dos
áreas: el Ducado de la Panonia Croata bajo la influencia de los reyes
Carolingios y el Ducado de la Dalmacia Croata (la Croacia actual,
incluyendo Istria) bajo el dominio del imperio Bizantino. En el año 810 el
poder de Croacia-Dalmacia esta en manos de un tal Borma que acepta
ser vasallo de los emperadores francos y a partir de él en Dalmacia se
suceden los zupani vasallos de los francos Vladislav (821-835) y Mislav
(835-845), pero su sucesor, Trpimir I (845-864), se hace independiente y
le es reconocido el título de “Dux Croatorum” fundando una nueva
dinastía (los Trpimirovic) que gobernarán Croacia hasta la llegada de los
húngaros. Trpimir I asienta el ducado de Croacia aunque debe luchar con
la naciente potencia del Adriático, la república de Venecia.
39

Mas tarde Branimir (879-892) logra que las ciudades de la costa,
tributarias de los bizantinos, se conviertan en vasallos de los croatas y por
este motivo el papa Juan VIII reconoce al estado croata.
Tomislav (910-928), aparentemente nieto de Branimir, aumenta la
fronteras, siendo que Croacia domina Eslavonia, Dalmacia interior y gran
parte de Bosnia. También recibe vasallaje de las ciudades costeras de la
Dalmacia: Fiume (Rijeka), Zara, Sibenik, Spalato (Split), Ragusa
(Dubrovnik) y Cattaro (Kotor) que nominalmente pertenecían al Imperio
Bizantino de modo que el prestigio de Croacia crece y en el año 925 el
papa Juan X, corona Tomislav como rey de los croatas.
Luego al final del siglo X, el reinado de los hermanos Svetoslav
Mucimir Suronja, Krešimir III y Gojislav se reconoce como el más
conflictivo, ya que Svetoslav quiere tener todo el poder y los hermanos
menores apoyados por la nobleza croata comienzan una guerra civil que
concluirá con la muerte del primogénito.
Cabe señalar que es en esto años que el doge de Venecia, Pietro II
Orseolo aprovecha la ocasión para someter a su dominio las ciudades de
la costa dálmata y conquistar para la república gran cantidad de islas
adriáticas.
Entre los años de 1074 y 1076 y por la elección de Slavac, duque
de Neretva, como rey, se generalizan los conflictos en Croacia.
Intervienen los normandos del duque de Amalfi; Mihajlo, gobernador de
Duklja, no apoya la elección de Slavac y se proclama independiente en el
sur de Croacia; Venecia que ve en peligro su comercio por la competencia
normanda también interviene.
Finalmente el papa Gregorio VII, decide intervenir y envía a un
legado, que en la Dieta de Salona hace finalmente aceptar como rey a
Dimitar Zvonimir (1074-1089), coronándolo el 19 de octubre de 1076
como "Rey de los Croatas y los Dálmatas". Sin embargo con la muerte de
Zvonimir renacen las luchas dinásticas y ya que Zvonimir estaba casado
desde 1063 con Helena Illona Lijepa, hija del rey Bela I de Hungría, se
produce una división del reino: Los nobles del norte ofrecen el trono a los
reyes húngaros y la dieta de nobles del sur corona a uno de ellos, Petar
Svačić).
40

Cuando se enfrentan al ejercito húngaro y el croata en la batalla de
Gvozd, los croatas son derrotados y el rey Petar muere. A partir de ese
momento, los reyes de Hungría se convierten por tanto en reyes de
Croacia. Hay que señalar que la unión de Hungria con Croacia se
estableció por el “Pacta Conventa” (pacto convenido) que fue firmado por
el rey Kàlmàn y un grupo de nobles croatas en 1102.
En dicho pacto se estableció que ambos reinos permanecían
independientes con sus propia instituciones y leyes, y solo el rey era
común a ambos; con respecto a este punto nos aclara C. A. Macartney 55 :
“Ciertamente Croacia nunca fue tratada como una parte integral de
Hungría”.
El titulo real era, y Croacia fue
administrada por un vicerey [llamado Ban] a través de sus propias
instituciones”.
C- La dinastía Habsburgo.
En la segunda mitad del siglo XIII, aparecen en escenas nuevos
personajes y nuevas dinastías que terminarán de condicionar el futuro de
Trieste, estos fueron en primer lugar Ottokar II (El Grande) de la dinastía
Premysl de Bohemia y Moravia, quien anexará a su reino Baviera,
Austria, Carintia, Carniola, Istria, Estiria.; el otro personaje que surgirá
será Rodolfo de Habsburgo quien vence a Ottokar II y se queda con una
buena parte de sus tierras menos Baviera, Bohemia y Moravia.
Entre los siglos XI y XII, un hecho trascendental condicionó la vida
en general y rigió todos los asuntos políticos y religiosos de Europa: el
conflicto entre los Papas y en especial Gregorio VII y los emperadores,
principalmente Enrique IV, por el control de la Iglesia (Querella de las
Investiduras) y que concluye con el Concordato de Worms en el año
1122, cuando el emperador Enrique V y el Papa Calixto II llegan
finalmente a un acuerdo, por el cual el emperador renunciaba al derecho
de la investidura espiritual o nombramiento de obispos.
55
-MACARTNEY, C. A. Hungary a Short History. Original text digitized by Andrew L. Simon, 1996. Edinburgh
University Press, 1962. Pág. 16
41

En cambio en el siguiente siglo, el Sacro Imperio Romano tuvo
escasa importancia real en los asuntos políticos de Europa y en las
cuestiones religiosas, sobre todo después de la muerte de Federico II en
1250.
Éste periodo que se denominará del “Gran Interregno” y que
comenzó a partir del año 1254 cuando Conrado IV deja vacante el trono
imperial, llegó a su final cuando en el año 1273 con la elección de Rodolfo
de Habsburgo como emperador y marca el ascenso al poder de esa
dinastía.
Los Haubsburgo eran originarios de la región de Suabia y habían
emigrado a Suiza donde se establecieron en la ciudad de Argovia. Allí
vivieron en el castillo construido por Werner, obispo de Estrasburgo
(1001-1029,) cuyo sobrino aparece en documentos como el primer conde
de Habsburgo (1064). Rodolfo III, primogénito de Alberto IV de
Habsburgo, es considerado el fundador de la dinastía de los Habsburgo. 56
Fue elegido emperador del Sacro Imperio Romano Germánico
(con el nombre de Rodolfo I del 1273 a1 1291 y hay que mencionar que
en ese momento varios reyes germanos reclamaron el título imperial, pero
él logró que sus pretensiones al trono imperial fueran reconocidas por el
Papa. Sin embargo, y a pesar que el título para esa época era casi un
cargo honorífico de poco valor, ya que por la fragmentación del imperio la
autoridad del emperador tenia poca efectividad, la pretensión de Rodolfo
a la corona imperial fue rechazada por Alfonso X de Castilla y por Ottokar
II de Bohemia. Luego de negociaciones, el Papa Gregorio X convenció al
rey Alfonso X para que desistiera de sus objeciones y a cambio de ello,
Rodolfo renunció a toda pretensión sobre Roma y los Estados Pontificios.
Ya como emperador se enfrentó a Ottokar II y en el año 1278 lo derrotó,
con ayuda de los húngaros, en la batalla de Dürnkrut (Marchfeld) y en
consecuencia se adueña Austria y Estiria, que concede en ducado a sus
hijos; además se adueña de Istria y Carniola. Todos esos territorios serán
los que formarán el núcleo del Imperio de los Habsburgo y del que
Trieste hará parte.
56
WHEATCROFT, Andrew. Los Habsburgo. Barcelona, Editorial Planeta, 1996
42

Capítulo 3
El Comune de Trieste, su formación y evolución hasta el siglo XIV
Ilustración 4: Dibujo de Giulio de Franceschi, copia del fresco del siglo XIV que se encuentra en el
ábside del altar de la catedral de San Giusto de Trieste, efectuado para el libro de Giuseppe Caprín, Il
Trecento a Trieste.
Alrededor del año 1000, en una Italia que había pasado por casi
seis siglos de incontables invasiones y ocupaciones, sea en su interior
que a lo largo de las costas, en muchas de sus ciudades se produce una
nueva situación: el nacimiento del Comune. 57
57 -En el idioma italiano, para la historiografía, el término Comune define a las ciudades surgidas del
orden administrativo romano y que no habían sufrido ninguna solución de continuidad, judicial o administrativa
a través de los siglos del Alto Medioevo y que más bien por el contrario habían logrado alrededor del siglo XI
un desarrollo comercial sostenido que las llevó a buscar una independencia de los poderes seculares de los
Obispos o de las ingerencias de Reyes y Emperadores. Podemos añadir que en su etimología contemporánea
y de acuerdo al diccionario Garzanti, se define al Comune como: “subdivisión territorial del Estado que abarca
un centro habitado principal y el territorio inmediatamente circundante, regido por órganos administrativos
propios”. Al buscar una traducción adecuada del termino Comune, lo más parecido a tal palabra que se
encuentra en el idioma español es “Comuna” que de acuerdo al diccionario Larousse se define como: 1-
Unidad de organización económica y política basada en la ausencia de la propiedad privada. 2- Conjunto de
individuos que viven en una comunidad gestionada y administrada por ellos mismos al margen de las
conveniencias sociales. El Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española nos define
Comuna: (Del fr. commune) del siguiente modo: 1-. Conjunto de personas que viven en comunidad económica,
a veces sexual, al margen de la sociedad organizada. 2- Grupo de personas que viven juntas sin someterse a
las normas sociales establecidas. 3- Forma de organización social y económica basada en la propiedad
colectiva y en la eliminación de los tradicionales valores familiares. Sin embargo al no quedar satisfechos con
las anteriores definiciones ya que en nuestra opinión las mismas no logran darnos completamente la idea sobre
que se entiende por un Comune buscamos también el significado del término “Municipio” (Del lat. municipĭum).
y de acuerdo al Diccionario RAE tendríamos: 1- Conjunto de habitantes de un mismo término jurisdiccional,
regido por un ayuntamiento (corporación municipal). 2- Entre los romanos, ciudad principal y libre, que se
gobernaba por sus propias leyes y cuyos vecinos podían obtener los privilegios y derechos de los ciudadanos
de Roma.
Es por ello que finalmente consideramos que al no disponer de un mejor término que nos indique en
español el concepto de Comune hemos decidido dejar la palabra en el idioma original, siempre considerándola
en su significación medieval específica.
43

Éste en esencia un nuevo tipo de orden jurídico-administrativo y
que donde se establecía buscaba la independencia de la ciudad y
favorecia un cambio de las estructuras feudales internas.
Si bien mencionamos que el Comune constituyó un nuevo tipo de
orden jurídico administrativo, es necesario aclarar que en su origen existió
sólo la idea de comunidad (communitas), entendida como grupo de
agrupación humana.
Usualmente se trataba de aldeanos/campesinos que se reunían
para los mercados o las ferias y que a la larga se establecieron en un
lugar específico; en algunos casos fundaron una aldea nueva y en
muchos otros casos, se establecieron cerca o dentro de los límites de una
ciudad romana existente. En este punto y para aclarar el concepto
jurídico podemos señalar a José Manuel Pérez-Prendes 58 que nos define
a la communitas: como “…un simple agregado fáctico de sujetos dotados
cada uno de su propia personalidad jurídica individual, sin que del hecho
físico de esa agregación se haya transcendido al acto jurídico de crear
una capacidad jurídica nueva, diferente a la suma de las pertenecientes a
cada uno de los integrantes del conjunto. Ese conjunto, en tanto que
communitas, no tiene posibilidades ni identidades propias en Derecho”. A
pesar de esto ya en la Alta Edad Media en muchas partes parece que
comienza a despertar una especie de auto-conciencia de los grupos que
buscan reconocimiento jurídico y que desembocará en la Italia del siglo
XI en el Comune.
Hay también que señalar, que durante los siglos posteriores a la
caída del imperio romano de occidente, muchas de las ciudades italianas
habían logrado mantener una cierta estructura administrativa y social,
gracias principalmente a los Obispos, en los que el pueblo reconocía a
sus protectores inmediatos. Cuando en el siglo XI se da el fenómeno de
la gran expansión comercial estas ciudades ya poseían una estructura
administrativa y judicial eficiente lo que las convertía en un polo de
atracción no indiferente para una población probada por los abusos de los
diversos invasores y dominadores; así también a partir de ese siglo se
produce un reflujo de población de los campos a las ciudades.
58
-PÉREZ-PRENDES, José Manuel. Instituciones Medievales. Ediciones Síntesis, Madrid, 1997.
44

Hay que decir que este fenómeno no fue exclusivo de las ciudades
italianas ya que en cierta medida se produjo también en Flandes, España,
Francia y Alemania, a veces con distintos matices pero con el mismo fin.
Por ejemplo Henry Pirenne 59 con respeto a las “citès” francesas, nos
señala un fenómeno parecido al de los “Comuni” italianos. Nos aclara sin
embargo que si bien la situación del sur de Francia era parecida a la
italiana y los condes vivían en las ciudades, la situación en el Norte de
Francia y Alemania era distinta, ya que los condes y grandes propietarios
preferían vivir en sus tierras, donde tenían sus palacios y castillos. A este
respecto nos dice Pirenne: “Resulta bastante significativo constatar que
los palacios de los príncipes Carolingios no se encuentran en las Citès.
Se sitúan sin excepción en el campo, en los dominios de la dinastía…” 60
Por supuesto al leer Pirenne y el periodo que el trata hay que tomar en
cuenta el factor cronológico ya que la formación de los Comuni italianos
es posterior; sin embargo si tomamos en cuenta la falta de voluntad de los
Carolingios por vivir en zonas urbanas, podemos llegar a la conclusión
que en la zona de influencia de esos gobernantes las ciudades no
siguieron el mismo patrón evolutivo y por ello no llegaron a Comuni,
mientras que en las zonas más alejadas se dio este patrón, parecido al
italiano.
Ahora bien, en vista que el Comune, está estrechamente ligado a la
ciudad, queremos aquí aclarar que entendemos por una ciudad de la
edad media, ya que si bien sobre todo en la Italia del Norte, se trató de
una continuidad de las ciudades romanas, tuvieron unas características
comunes, que antes de hablar de los Comuni es necesario puntualizar.
La primera característica de estas ciudades medievales era que
poseían unos muros que las circundaban. Esto se convirtió en los tiempos
difíciles de la Alta Edad Media en un atractivo adicional para el comercio,
los artesano y la gente en general que de tal modo se sentían
protegidos 61 La segunda característica, fue la existencia de un poder local
y éste en muchos casos estuvo representado por el Obispo, que a pesar
59
-PIRENNE, Henry. Las ciudades de la Edad Media. Editorial Alianza, Madrid, 1972. Pág. 42
60
-Ibid. Pág. 43
61
-En las ciudades de origen romano los muros usualmente se originaron a partir del siglo IV por las invasiones
germánicas
45

de tener solo un poder limitado, representaba la continuidad del orden
romano. Otra característica importante fue: que en la medida que se
produjo el reflujo de personas de los campos a las ciudades, en estas se
encontraban personas que ejercían las más distintas actividades y
profesiones; esto con el pasar de los años empujará el crecimiento
comercial de las ciudades y en mucho caso su expansión territorial.
Por último y también en nuestra opinión muy importante, a pesar
de ser un factor más psicológico que real, se encuentra el sentido moral,
religioso y afectivo de “pertenencia”.
A este respecto, nos dice Roberto Sabatino López: 62 “…la ciudad
es antes que todo un estado de ánimo.” Y sigue “…son ciudadanos
aquellos que se sienten como tales, aquellos que sienten el orgullo de
pertenecer a una comunidad superior a la de la aldea, por su poder, su
riqueza, su cultura, sus tradiciones artísticas, un pasado admirable, sus
actitudes hacia un esfuerzo común”.
Lo anterior acentúa el orgullo de los ciudadanos por ser miembros
de una determinada ciudad y de hacer que ésta sea superior a las demás.
A esto añadimos el hecho que cada ciudad tiene su santo patrono: Milano
es la ciudad de San Ambrogio, Venezia es la de San Marco, Trieste es la
de San Giusto 63 , podemos comprender cómo y porqué se produjo la
expansión de muchas ciudades y los continuos conflictos medievales
entre ellas; además también podemos entender porqué el poder local en
Italia fue en muchos casos más importante que el de Reyes, Papas y
Emperadores lejanos.
Cuando a finales del siglo XI la lucha por las Investiduras afectó el
poder de los Obispos, esto coincidió, en muchas ciudades italianas, con el
surgimiento de corrientes deseosas de autogobernarse.
62
-SABATINO LÓPEZ, Roberto. Il commercio dell’ Europa post Carolingia. en: I problemi comuni dell'Europa
post-carolingia (Settimane di Studi del Centro Italiano di Studi sull'Alto Medioevo 2), Spoleto, Italia, 1955, p. 575
www.cisam.org
63
-El santo patrono de Trieste es San Giusto, quien fue el último mártir en esa ciudad entre el año 298 y 302.
Fue ahogado por orden del prefecto romano Manazio después de ser fustigado. Era noble e hijo de padres de
cristianos y con parientes cristianos. La leyenda dice que el cuerpo a pesar de los pesos con lo que lo
hundieron en el agua, salió a la superficie y un sacerdote de nombre Sebastián tuvo el sueño en el que San
Giusto le solicitaba que fueran a sepultarlo. Sin embargo especial consideración merece San Sergio, quien fue
militar romano y murió en Persia, martirizado en el camino entre Susa y Ruzzafatan. Este santo prometió a los
triestinos enviar una señal a la ciudad cuando muriera y de acuerdo a la leyenda el mismo día de su muerte
apareció en la plaza principal de Trieste una alabarda que fue convertida en estandarte de la ciudad y se
conserva en la catedral.
46

Podemos así relacionar el nacimiento de los primeros Comuni con
la necesidad de los ciudadanos de asegurarse una continuidad en el
respeto a sus derechos, tal como había sido con el mando de los Obispos
y por otro lado a que ya existía un despertar político, por lo que los
ciudadanos (usualmente parte de algún grupo representativo de las
oligarquías locales) buscaban la participación del poder.
Al estudiar la evolución de los Comuni italianos podemos ver
claramente cómo los primeros movimientos políticos estuvieron
relacionados a los intereses particulares.
De esto tenemos la idea de H. Pirenne quien al comentar sobre las
instituciones de las ciudades nos dice: “En todas partes se observa como
los comerciantes toman la iniciativa y conservan la dirección de los
acontecimientos. No hay nada más natural”. Y sigue luego “…el grupo
social [los comerciantes] que estaba más directamente interesado en el
cambio se puso a la cabeza de la oposición y fue seguido por la
masas.” 64 .
Sin embargo también tenemos que considerar que el Comune y es
este el caso de Trieste en muchos casos incluía no sólo comerciantes
sino también “miembros de la nobleza militar caballeresca, letrados y
oficiales, mercaderes, artesanos y gentes sencillas”. 65
Por todo lo anterior es que debemos concluir, apoyándonos
también en la posición de Yves Renouard 66 , que en su formación la mayor
parte de los “Comuni”, después de un período en el que el gobierno de la
ciudad estuvo básicamente relegado en el Obispo y en el cual se
consultaba para determinadas cuestiones a los ciudadanos, reunidos en
asamblea o Arengo 67 pasaron por varias etapas: en un primer tiempo una
aristocracia noble trató de sustituirse al Obispo o al Conde; en una
segunda fase la aristocracia dividida en facciones opuestas, por sus
conflictos internos, causa inestabilidad en las ciudades y por lo tanto los
comerciantes y artesanos intervienen logrando un arbitraje, en la figura
del “Podestà” con el apoyo del arengo.
64
-PIRENNE, Henry. Las ciudades de la Edad Media. Editorial Alianza, Madrid, 1972. Pág. 43
65
-GONZALEZ, Maria Asenjo. Las ciudades en el Occidente Medieval. Editorial Arco Libros, Madrid, 1996.
Pág. 47
66
-RENOUARD, Yves Le cittá italiane dal X al XIV secolo. Milano, Rizzoli Editori, BUR, 1976. Vol. I, Pág. 177
67
- GONZALEZ, Maria Asenjo. Las ciudades en el Occidente Medieval. Pág. 47
47

En la siguiente fase, los ciudadanos, organizados en
corporaciones, cofradías y grupos armados de los barrios logran
imponerse a los nobles y tomar el poder; Luego nombran un pequeño
grupo de los más ricos entre los miembros de las corporaciones para el
gobierno efectivo.
En la última fase sucede que el pueblo comienza a oponerse a este
grupo elegido entre los miembros de las corporaciones y es cuando
aparece un noble o un burgués que se establece como Señor y muchas
veces es reconocido por el Emperador o por el Papa.
Trieste entre los siglos XI y XIII, siguió éste proceso casi
completamente ya que nunca se llegó a dar el caso de una Signoria, a
pesar de un probable intento, por lo que deberíamos considerar a la
ciudad como un típico Comune del norte de Italia; A pesar de ello, la
peculiaridad de algunos sucesos registrados 68 así como las
características atípicas de algunas situaciones 69 y su conclusión, junto
con la tozudez de los triestinos, 70 nos hacen considerar que el
comportamiento de los ciudadanos de Trieste de la edad media se
distinguió de la forma de conducirse de sus vecinos y esto en gran parte
fue la razón de su gloria y su caída.
A- El origen del Comune de Trieste.
Tal como sucedió en numerosas ciudades de Italia, después del
siglo V a.C. y a medida que el Imperio Romano de Occidente se
desmembraba, la única autoridad que mantenía su influencia y respeto en
la población de Trieste fue el Obispo. Así que a pesar de que la ciudad
pasa por todo el difícil proceso de ser asediada, saqueada y sometida por
los distintos invasores entre los siglos V y X, como ya mencionamos en
los capítulos uno y dos de esta misma obra, sus instituciones internas se
mantienen en la línea de la romanidad anterior. 71
68
-Por ejemplo la necesidad que sintió Dandolo de asegurase fidelidad por parte de Trieste antes de proseguir
con su cruzada
69
-El tratamiento que se le dio a la conjura de Marco Ranfo en el año 1313
70
- El asedio del año 1368 por parte de Venecia, que duró una año y que si bien pone punto final a la libertad
del Comune por otro lado evidencia la terquedad de los triestinos.
71
- Una de las pocas instituciones romanas que quedan, especialmente entre los siglos IV y IX son los
denominados “Decuriones”, de los que no llegó información extensa de sus funciones pero que se conoce
48

En el proceso de descomposición del Imperio Romano, los Obispos
no sólo fueron los depositarios de la autoridad política y salvaron a ésta
de la crisis de las instituciones gubernamentales del Imperio, sino que
ellos mismos se hicieron cargo de importantes funciones sociales que
durante la vigencia del mismo estuvieron a cargo directamente del
Estado. Así sucedió con las distribuciones de trigo y pan con que los
emperadores aplacaban a la masa de indigentes que constantemente se
mantenía en la capital y en otras ciudades del Imperio.
Al terminar el poder de Roma y por la desorganización del sistema
administrativo, se cerraron las fuentes de donde llegaban auxilios a los
pobres. Esta misión de ayuda fue entonces absorbida por la Iglesia. Al
respecto hay que señalar que el mismo emperador Constantino le
reconoció este importante papel a la Iglesia concediéndole parte de los
abastecimientos de trigo que hasta entonces el Estado dedicaba a tal fin.
Una vez organizado el sistema episcopal, el Papa Simplicio
dispuso en el año 472 que las rentas de la Iglesia se dividieran en cuatro
partes, una para los obispos, otra para la fábrica de la iglesia, otra para el
sustento de los clérigos y otra para ser distribuida entre los pobres y los
forasteros.
Trieste no fue ajena a estos sucesos y también allí el Obispo
constituyó la autoridad por un buen periodo y representó políticamente a
la ciudad frente a los reyes y condes. Sin embargo ya que el
nombramiento del Obispo estaba tradicionalmente en manos de los
ciudadanos podemos considerar que no se trataba de una relación feudal.
El gran cambio vino cuando en el año 1082 el emperador Enrique
IV puso a los obispos de Trieste bajo el poder del patriarca de Aquilea,
tomando como excusa la pobreza de la Iglesia triestina. A partir de ese
momento ese cargo ya no fue cubierto por elementos locales, sino por
personas extranjeras relacionadas con los reyes o con el patriarcado. Sin
embargo estos Obispos siendo extranjeros tuvieron aún más necesidad
de la ayuda y los consejos de los ciudadanos triestinos que sacaron
provecho de la situación.
fueron una especie de jueces públicos. De hecho en Trieste los miembros de las 13 casate se consideraban
patricios porque supuestamente eran los descendientes de esos decuriones.
49

Además y ya que el patriarcado no los ayudó económicamente, con
el pasar del tiempo los Obispos, para solventar sus deudas, se vieron en
la necesidad de vender los derechos que tenían sobre la ciudad de modo
que ésta paulatinamente fue obteniendo una mayor autonomía y
evolucionando hacia el Comune.
De hecho ya para el año 1139, en ocasión de un conflicto de
frontera entre Duino y Trieste el Comune actúa con cierta independencia
del poder obispal y se presenta con un Gastaldo.
Este que es a la vez el procurador de la ciudad y representante del
Obispo y se acompaña con doce “buenos hombres” como consejeros. 72
También hay que decir que los triestinos recuperaron en el año
1190 73 la prerrogativa de elegir a sus Obispos. De hecho a la muerte del
Obispo Enrique, los sacerdotes triestinos basándose en el Ius anterior que
poseían y en función de la tradición antigua, eligieron como Obispo a
Woscalco (o Volcando) y luego lo presentaron para su consagración al
papa Clemente III, con la oposición del patriarca de Aquilea Gotifrido. A
pesar de que el papa muere ese mismo año, su sucesor Calisto III acepta
la solicitud y delega una decisión en los Obispos Marco de Castello y
Araldo de Chioggia en Mayo de 1192. Éstos luego de solicitar que se
presentaran las partes y ya que el patriarca de Aquilea finalmente acepta
la elección, declararon que los sacerdotes de Trieste tenían la facultad de
elegir a su Obispo el 1 de Julio de 1192 74 . Cabe señalar que este suceso
debe de haber redundado en una unión más estrecha entre los habitante
de Trieste y su Obispo, además de marcar una mayor independencia del
Comune.
Podemos también constatar que cuando el doge veneciano
Dandolo llega a Trieste en el año 1202 en vías a la cruzada, para
asegurarse la fidelidad de la ciudad 75 , a través del documento que se
protocoliza, se desprende que si bien Trieste gozaba de una amplia
independencia de movimientos, aún no estaba constituida completamente
como Comune ya que no se menciona un Podestá ni un Consejo de la
72
-Ver documento anexo E
73
-SCUSSA, Vincenzo. Storia Crongrafuica di Trieste. Pág. 57, Div. XII
74
-Ver documento anexo F
75
-Ver documento anexo D
50

ciudad como habría sido usual. De hecho, entre las personas que reciben
a los venecianos aparecen en primer plano el Gastaldo del obispo de
nombre Vitale y aparecen tres jueces (Wodolrico, Leone y Pietro).
Luego entre los participantes por la ciudad tenemos personas de
todos los oficios y condiciones, (con la excepción de miembros de las 13
Casate, de quienes hablaremos más adelante) por lo que debemos
considerar que se trataba de miembros del arengo, paso previo en la
formación del Comune pero ya base del él.
Para puntualizar aún más la independencia de Trieste debemos
también considerar que ese juramento de fidelidad que demandaron los
venecianos no era el de fidelidad a un rey, ya que el rey formal de Trieste
para ese momento era Otón IV y su Marqués en Istria (que incluía Trieste)
era Bertoldo de Andechs. De hecho ninguno de los dos consideró el
juramento de fidelidad como un acto hostil ya que existían precedentes de
este hecho. Se trataba más bien de una fidelidad de tipo feudal a un
“Señor” cumpliendo con obligaciones antiguas, cosa que estaba permitida
en las costumbres de la época.
También podemos ver lo anterior en las demandas venecianas: et
quod omni anno perpetualiter nos et successores nostri vobis et vestris
successoribus solvere debeamus vel solvi facere urnas optimi vini puri de
nostro territorio quinquaginta nostris espensis ad ripam Ducalis Palatii in
festo Sancti Martini 76 . Así podemos ver que a pesar del juramento en la
realidad diaria, nada se perdió de la independencia ciudadana y está
siguió evolucionando normalmente.
Para resaltar algunos momentos importantes en la formación del
Comune de Trieste, vemos como en el año 1216 existe la primera
mención de un Podestá, con el nombre de Marco Veneto. 77 Luego a partir
del 1226 el Obispo de tendencia Gibelina Corrado debe participar en las
operaciones militares del emperador Federico II por lo que al firmarse la
paz entre el Papa Honorio III y el Emperador en el 1230, el mismo obispo
Corrado obtiene del emperador la confirmación de todos los privilegios
76
-Ver documento anexo D. …Y cada año de aquí en adelante, para ustedes y sus sucesores, nosotros y
nuestros sucesores, les entregaremos por nuestra cuenta, en el palacio Ducal de Venecia, en el día de la
festividad de San Martín, 50 odres de vino de la mejor calidad de nuestro territorio. (Traducción nuestra)
77
-SCUSSA, Vincenzo. Storia Cronografica di Trieste. Div. XII. Pág. 58,
51

que la Iglesia y los Obispos de Trieste habían conseguido con
anterioridad de reyes y emperadores. 78
Sin embargo las continuas guerras típicas de la época dejan su
huella en la quiebra financiera de la Iglesia de la ciudad por lo que los
sucesores de Corrado deben vender al Comune varios de los derechos de
la Iglesia triestina. De hecho el obispo Giovanni IV concede al Comune
triestino en el año 1236 79 distintos derechos y manifiesta que tuvo que
hacer las concesiones por causa de las deudas contraídas en la defensa
de sus posesiones de los ataques del Duque Bernardo de Corintia quien
pretendía el Marquesado de Istria. También menciona los bandidos y
ladrones que asolaron Istria, probablemente apoyados por el Duque
Bernardo y llamados bandidos por él.
Un año importante para recordar es el 1253, ya que el sucesor de
Giovanni IV, el Obispo Volrico, quien había participado al lado del
emperador Federico II en el asedio de Brescia del 1238, al mando de la
milicia triestina, 80 para el año 1250 se encontraba en mala situación
financiera por lo que el Comune aprovechó la situación. En ese año de
1253 el Obispo Volrico entregaba al Comune los derechos del impuesto
sobre el vino producido, llamado la “Recolecta del Vino”; también le
concede el impuesto sobre el aceite exprimido, el derecho sobre el
calzado y la elaboración de pieles. Además renunciaba al derecho de
juzgar en segunda instancia las causas civiles por lo que las sentencias
de los Cónsules del Comune eran inapelables, entregaba sus derechos
sobre las multas (importante porque en la época casi todos los crímenes
menores eran castigados con multas). Hay que señalar que los crímenes
“de sangre” seguían siendo juzgados por el Gastaldo junto con los jueces.
Adicionalmente el obispo concedió al Comune el derecho a
promulgar leyes y cualquier ordenanza necesaria para el buen gobierno
de la ciudad.
78
- Ver documento anexo G
79
- El documento correspondiente a la cesión se encuentra en el Archivio Diplomatico Istriano, Vol. II, pagina
446. Sin embargo después de examinarlo, apoyamos la opinión de P. Kandler que considera el documento
como una falsificación del siglo XV
80
- También participa el Conde Mainardo de Gorizia quien tiene al mando de sus hombres Antonio Ravizza de
Trieste.
52

El Obispo conservó para sí el derecho sobre la acuñación de
moneda, la Aduana, sus propiedades civiles y su Dominio público y
privado.
Aquí es necesario abrir un paréntesis para señalar que para el siglo
XIII por Dominio se entendía los derechos sobre bienes y tierras que
habían heredado, en este caso, los Obispos a través de los siglos y que
se remontaban a la organización territorial romana. Adicionalmente y
como extensión del término, se incluye dentro del concepto de Dominio
también los derechos de Ban que a la vez comprenden, derechos de
carácter público y de orden judicial. 81
Hay por último que mencionar que el año 1257 el sucesor de
Volrico, el Obispo Arlengo, daba al Comune la investidura feudal de los
derechos cedidos en el 1253. 82
Como otro paso hacia la libertad comunal y que nos remite a la
idea de que Trieste era muy apetecida por sus vecinos, es que en el año
1262 aparece un nuevo personaje el Conde Mainardo de Gorizia como
Capitano del Popolo 83 . Sin embargo por los sucesos de la época podemos
considerar que el nombramiento de tal personaje puede haber
representado una forma diplomática del Comune por mantenerse en
equilibrio e independiente dentro del panorama de vecinos poderosos. De
hecho los Condes de Gorizia en esos años se estaban rápidamente
convirtiendo en una potencia local y bloqueaban la puerta de entrada a
Italia por las llanuras del norte.
A tal respecto y siempre dentro de la evolución del Comune, en el
año 1291, el Consejo de la ciudad, ya establecido, nombra como Podestá,
al conde de Gorizia Enrique quien unos años más tarde en 1295 cuando
el Obispo Brisa de Toppo agobiado por las deudas y ya anciano cede las
últimas facultades al Comune, junto con el castillo de Montecavo y su
jurisdicción sobre los pueblos circundantes apoya con su influencia las
negociaciones. 84
81
-GUGLIELMI, Nilda y Otros. Lexico Histórico del Occidente Medieval. 1- La Sociedad Feudal. Buenos Aires,
Editorial Biblos, 1991. Páginas 15 y 42.
82
-Ver documento anexo H
83
-Capitán del pueblo
84
-Ver documentos anexos I-J-K
53

Es así como a partir del año 1295 podemos considerar que la
ciudad de Trieste se convirtió de facto en un Comune libre; esto a pesar
que se puede pensar que fue una libertad formal tardía, ya que en otras
ciudades del norte de Italia, donde habían logrado una libertad Comunal
temprana, comenzaba a imponerse otras fórmulas de gobierno.
Estas ciudades, que en el siglo XIII habían vivido una gran
expansión comercial, habían también desarrollado una nueva clase social
en el plano económico y político: la burguesía.
Sin embargo, las continuas luchas internas entre sus miembros,
llevaron a la negociación del poder y en muchos casos llevaron a la
formación de una Signoria, 85 o sea, el centralizar el poder en manos de
una sola persona que de tal modo lograba garantizar por su autoridad la
paz del estado 86 . Cabe señalar que luego estos señores podían obtener
del Papa o del Emperador el reconocimiento de su poder convirtiéndose o
bien en Vicarios Papales o Vicarios Imperiales y transformando el estado
más adelante en hereditario asumiendo títulos de características feudales.
Por el contrario, Trieste no pasó por esa disyuntiva, más bien sus
ciudadanos en todas las ocasiones se mostraron compactos al lado de
sus autoridades a la hora de decisiones difíciles y por otro lado las
autoridades comunales siempre siguieron la voluntad de sus ciudadanos y
cabe señalar que esta situación se mantuvo igual mientras el Comune
tuvo vigencia y en especial a lo largo de casi todo el siglo XIV y la razón
de lo anterior, se puede encontrar en la convivencia dentro los muros de
la ciudad de una composición social mixta compuesta por propietarios con
bienes extra urbanos y con derechos señoriales sobre ellos junto con
mercaderes pequeños y medianos y con artesanos con libertad personal
plena y no sujetos por ser cives, a condiciones de justicia particular sino
en condición jurídica igualitaria con respecto a los que detentan el
poder 87 .
85
-Gobierno de un “Señor.”
86
-RENOUARD, Yves, Le cittá Italiane dal X al XIV secolo. Pág. 180
87
-BORDONE, Renato. La società urbana nell’Italia comunale (secoli XI-XIV). Torino, Loescher Editori, 1984
54

B- El territorio y la ciudad en el siglo XIV.
Trieste, desde la época Romana se desarrolló situada al borde
delMar Adriático y circundada por el Altiplano del Carso; esta localización
a la vez que la protegió un poco de los distintos invasores, fue siempre un
lugar privilegiado para controlar gran parte del territorio circundante.
Por el lado del mar, hasta el surgimiento de Venecia como potencia
hegemónica en el siglo XI, la ciudad no había tenido ningún serio
contrincante, haciendo salvedad de las incursiones sarracenas que eran
más actos de piratería que de expansión territorial.
Inclusive existieron múltiples intercambios comerciales por esa vía
que se extendieron hasta la Dalmacia, sin que se presentaran conflictos
con otras ciudades de la costa de Istria o de Italia. Por el lado terrestre, tal
como ya mencionamos, la ciudad vivió todo el proceso de las invasiones
bárbaras y fue sometida, al menos en teoría, a distintos señores, ya que
en la práctica la ciudad obedecía a su Obispo.
Una vez que la situación se formaliza a partir del siglo IX, con el
nombramiento del año 848 por el emperador Lotario de los Obispos de
Trieste como representantes reales, tenemos la primera mención oficial
del territorio y queremos recordar que Vincenzo Scussa 88 nos dice a tal
respecto, que la ciudad tenia un circuito de terrenos de unas tres millas
alemanas correspondientes a 15 millas italianas. 89
Al salir de los muros de Trieste hacia el Oeste, inmediatamente se
encontraban las salinas principales y luego a una distancia de no más de
unos 7 kilómetros terminaba el territorio de la ciudad ya que comenzaban
las posesiones de los señores de Duino. 90 En referencia a este vecino,
tenemos el documento 1139 donde la ciudad negocia amistosamente sus
límites con los señores de Duino. 91
88
-SCUSSA, Vincenzo. Storia Cronografica di Trieste. Divisione. IX, pág. 47 y 48
89
-Si bien no se ha localizado un documento que soporte esta primera donación, Scussa nos cita al historiador
italiano Ughellio, el cual dice ”Joannes Episcopus cui Lotharius Caesar, Tergetae civitate ipsam delargitus est,
cum adiecto territorio per 15 millia passum.” 1.c.t.3 colum. 498.
90
-Se mencionan por primera vez los señores de Duino solo después del año 1200 como vasallos de Aquilea.
En el curso del siglo XIV son capitanes del conde de Gorizia y en 1366 Hugo IV vende los derechos sobre sus
tierras a Leopoldo duque de Austria obteniéndolas inmediatamente de regreso como un feudo privado. Hay
que señalar que como representante del duque Leopoldo, Hugo de Duino se convierte en capitán de Trieste y
de la provincia de Carniola ya sometida a Austria
91
- Ver documento anexo E
55

Por el lado Este, Trieste limitaba con el Comune de Muggia que
quedaba a unos 5 kilómetros y las dos ciudades estaban separadas por
unos pantanos y prácticamente compartían el golfo; hay que señalar que
con la salvedad de algunos esporádicos roces Trieste en general tenia
buenas relaciones con Muggia ya que nunca fue competencia para
Trieste.
De hecho Muggia era demasiado pequeña casi un pueblito con un
castillo pequeño, sus habitantes vivían de unas salinas (cuya producción
probablemente vendían a Trieste, de la pesca y de la agricultura de los
campos cercanos.
Trieste en un par de ocasiones ocupó Muggia y en el siglo XIV le
destruyó el castillo, pero hay que notar que los venecianos estaban
involucrados ya que al final Muggia se sometió a Venecia.
Hacia la zona del altiplano del Carso la situación se presentaba
bien distinta: en primer lugar por la presencia de Gorizia, ciudad no muy
grande pero con fuertes pretensiones hegemónicas, no tanto hacia la
costa del Adriático pero sí hacia la llanura Padana de Italia y de la que
Trieste no podía descuidarse.
Si bien por un lado los Condes de Gorizia estuvieron muy ligados al
Patriarcado de Aquilea ya que eran los “abogados” de los Patriarcas y
éstos dominaban todo el Friuli y no les daban mucha libertad de
movimiento, a partir de siglo XIII la importancia de Gorizia dentro del
Imperio comienza a crecer vertiginosamente. En el año de 1210 la ciudad
obtiene la concesión imperial de tener un mercado una vez por año y
obtiene el privilegio de acuñar monedas.
Luego, en 1253 los condados de Gorizia y del Tirol se fusionan por
el matrimonio entre Mainardo III de Gorizia y Adelaida del Tirol, (Mainardo
III se convierte en Mainardo I de Tirol-Gorizia). Además Mainardo I en
1254 obtiene reconocimientos por parte de Otocar II de Bohemia durante
la guerra contra Prusia. Cuando en el año 1271, Mainardo I muere sus
posesiones se dividen entre sus hijos Mainardo II y Alberto I; este último
obtiene Istria, Friuli y Carintia. Mainardo II, obtiene las posesiones del
Tirol.
56

Luego, a diferencia de su padre Mainardo II, apoya a Rodolfo I de
Hasburgo contra Otocar II de Bohemia y por ello en 1286 obtiene el
Ducado de Carintia y más tarde su hija se casa con Alberto I de
Hasburgo.
Enrique II hijo de Alberto es quien trata de separarse
definitivamente del Patriarcado de Aquilea; ocupa la mayor parte de la
Carnia y luego aliándose a Verona logra ocupar en el año 1319 Treviso y
Padova. Sin embargo Enrique II no completa su proyecto ya que muere
en el 1323.
Hay que mencionar que Trieste también como Comune libre
participó como aliado de Enrique II en esa guerra enfrentándose así a
Venecia.
La frontera noreste de la ciudad estaba marcada por el castillo de
Moccó en la actual Val Rosandra a unos 6 kilómetros del centro de
Trieste; su posición estratégica controlaba la vía hacia el Carso, la
Carniola y en el siglo XIV era la salida a esa zona del Adriático para
Hungría por lo que la ciudad tenía que cuidar bien esa zona.
Entrando ya a hablar de la ciudad en sí, podemos comentar que
para el siglo XIV tenia unos muros imponentes que la circundaban con
cinco puertas y 14 torres; dentro de la ciudad había 14 Iglesias 92 . La
ciudad, como era usual en la época estaba divida en cuatro zonas
denominadas: Castello, Cavana, Mercato, Riborgo. 93
La zona llamada Castello además de ser la sede del clero y de la
milicia ciudadana, también y por la cercanía de campos cultivados dentro
de los muros estaba habitada por algunos agricultores ya que los otros
campesinos aún viviendo en la ciudad salían a trabajar diariamente en los
campos. Además en las calles cercanas y sobre la colina también vivían
los peones encargados de descargar y cargar los barcos y en otra área
cercana también los fabricantes de cuerdas y velas. La zona comprendía
desde la cima de la colina de San Giusto, sede de la Catedral, hasta la
base de ésta, en las cercanías del foro romano.
92
-CAPRIN, G. Il Trecento a Trieste. Pág.107
93
- Castillo, Cavana, Mercado y Riborgo
57

Cavana era el área habitada por los nobles, abarcaba el este de la
ciudad y llegaba hasta los muros por el lado del mar.
Mercato tal como lo especifica el nombre era la zona del mercado,
del comercio y se encontraba situada entre Cavana y Riborgo justo detrás
de la salida al puerto en la zona baja central de la ciudad.
Allí vivían y tenían sus negocios todo tipo de artesanos y
comerciantes (con excepción de los mercaderes más ricos y los
banqueros que se establecieron en la zona de los nobles, básicamente en
Cavana. La zona de Riborgo, también era habitada por nobles y ocupaba
la zona oeste de la ciudad.
Finalmente hay que señalar que los pescadores, los marineros y
los más pobres vivían en tugurios pegados de los muros cerca de la Torre
Fradella frente al puerto y en las zonas que circundaban los muros
estaban caracterizadas por el lado del mar por la presencia de las salinas
y hacia el interior por los campos cultivados y los viñedos.
Como se puede fácilmente entender, la ciudad como Comune
independiente presentó unas características que para decir poco se
volvieron incómodas para sus vecinos y a la larga definieron su suerte.
Trieste en el siglo XIV si bien ha jurado fidelidad a Venecia,
realmente no estaba sometida y mantenía su comercio en abierta
competencia con ésta, presentándose hasta conflictos bélicos en varias
ocasiones. Además, elige sus propios Obispos sin tomar en cuenta al
Patriarca de Aquilea que originalmente tenía el poder de la ciudad. Con
las ciudades de Istria negocia pero no se une a ellas y mantiene las
distancias. Mantiene buenas relaciones vecinales con Duino y luego se
acerca a Gorizia cuando esta comienza a presentar características
hegemónicas. Al mismo tiempo que al principio del siglo XIV tiene buenas
relaciones con Hungría al cambiar la situación geopolítica se relaciona
con los Habsburgo. Todo lo anterior poseyendo la ciudad buenas tierras
cultivables, unas salinas importantes una fuertes murallas (que se
convertirán en un problema mayor al tratar los venecianos de tomar la
ciudad por la fuerza en el año 1368) y con unos ciudadanos que no
quieren, dentro de lo posible, vivir sometidos a otros y que ni siquiera
aceptan el no seguir decidiendo su propia suerte de común acuerdo,
58

como se verá en el año 1313, cuando el intento de establecer una
Signoria por parte de Marco Ranfo termina con su ajusticiamiento.
C- Los ciudadanos y las instituciones del Comune.
Se puede considerar que Trieste en el siglo XIV, a pesar de ser
una ciudad pequeña tenía una población que gozaba de un cierto
bienestar. Al respecto nos cuenta Giuseppe Caprin, 94 ”Non v’era si può dir,
cittadino che non possedesse un pezzo di terra […] guardava pieno di
speranze al mare ma si sentiva tuttavia fortemente attacato all campagna
che gli dava il pane ed il vino per la sua mensa ed il legno per le sue
barche. Credevasi allora che nessuno potesse amare meglio la Patria di
colui che ne era padrone magari di un piccolo lembo” 95 .
La población del territorio de la ciudad se dividía en cittadini, que
eran los que habían nacido dentro de los muros de la ciudad, vicini,
distrettuali y abitatori (básicamente los extranjeros). Los ciudadanos
(cittadini) se dividían entre patricios (los ciudadanos más antiguos de la
ciudad, en general terratenientes y que habían tenido cargos en la gestión
administrativa de los Obispos), nobles (en general provenientes de
artesanos o comerciantes que se habían enriquecidos) y plebeyos. 96
El proceso que vivió Trieste como ciudad para llegar al Comune
Independiente en 1295, fue parecido al proceso de muchas de las
ciudades del norte de Italia que habían podido mantener una estructura
administrativa y social.
Tal como ya mencionamos, durante el periodo del V al IX siglo
hubo un tal vacío de poder que en esta ciudad al igual que en otras de
Italia, solamente el Obispo pudo mantener el orden social.
Este poder del Obispos se apoyó en la figura del Gastaldo, que
era considerado como el representante y ejecutor de las órdenes del
Obispo.
94
-CAPRIN, Giuseppe. Il trecento a Trieste Pág. 17
95
-“No existía, se puede decir algún ciudadano que no poseyera un pedazo de tierra […] miraba lleno de
esperanzas hacia el mar mientras sin embargo se sentía fuertemente amarrado al campo que le daba el pan y
el vino de su mesa y la madera para sus barcos”. Se creía entonces que nadie podía amar más a la Patria que
aquel que fuera dueño aunque sea de un pequeño pedazo. (Traducción Nuestra)
96
-Idem, Pág. 88
59

Además existían en la ciudad Jueces, que se ocupaban de la justicia
más inmediata para el pueblo y los Cónsules 97 quienes era aclamados por
la asamblea de ciudadanos (el Arengo).
Será a partir de la paz de Constanza, en 1183, que puso punto final
a la guerra entre los Comuni y el Imperio, que la asamblea de ciudadanos
aumentó considerablemente su importancia, tanto que vemos como en el
momento de pedir los venecianos, en el año 1202, un juramento de
fidelidad a la ciudad, este es suscrito por el Gastaldo, acompañado de
tres jueces y un grupo de más de 300 ciudadanos triestinos, que debemos
suponer formaban parte del Arengo. 98
Sin embargo es a principios del siglo XIII cuando se establece un
nuevo mecanismo de gobierno: el Consejo dividido en Consejo Mayor
(que en Trieste reunía 180 representantes de los patricios y de los nobles)
y el Consejo Menor también llamado Consiglio di Credenza (constituido
por 40 miembros elegidos entre los miembros del Consejo Mayor).
Este Consejo reunía al pueblo en Arengo para comunicarle la más
importantes decisiones de ambos consejos y las sentencias penales.
Podemos añadir que a partir del año 1295 y por todo el siglo XIV entre las
funciones del Consejo Mayor se encontraban las de establecer leyes,
elegir a magistrados, la vigilancia de la administración, supervisaba lo
concerniente a la higiene, la edilicia, las armas y la defensa.
El consejo Menor, se ocupaba de los asuntos de secundaria
importancia y daba su voto consultivo a los asuntos que proponía el
Consejo Mayor; por ejemplo elegía el “juez de maleficios”, el “médico
físico”, el cirujano y el maestro de escuela. Como nota ilustrativa, nos
cuenta Giuseppe Caprin 99 que en el año 1350 el Comune contrata por
cuatro años al maestro Michele, dottore di gramática, y se delibera de
hacer venir una persona scienciata para instruir a la juventud. Además
nos dice que en 1365 era Rector Scholarum un tal Michele de la Pena,
probablemente el mismo contratado en 1350.
97
- El origen de estos cónsules no esta muy claro, pero en general se supone que es una reminiscencia de los
cónsules de la republica de Roma. También podría tratarse de una asimilación del titulo que algunos nobles
como por ejemplo los Duques de Benevento utilizaban.
98
-Ver documento anexo D
99
-CAPRIN, Giuseppe. Il trecento a Trieste Pág. 88
60

Otra figura importante en la evolución del Comune fue el Podestá
quien como ya mencionamos aparece por primera vez en los documentos
referentes a Trieste en 1216. Este cargo no representaba a un jefe del
Comune sino que era un brazo ejecutivo y garantizaba que las decisiones
tomadas por el Consejo Mayor se llevaran a cabo.
Al principio este cargo fue electivo pero sucesivamente se eligió entre
extranjeros por estar estos (en teoría) menos implicados en los conflictos
internos de las ciudades.
El Podestá no podía casarse con alguien de la ciudad donde
ejercía el cargo, no podía comer en privado con ciudadanos, no podía
convocar el arengo por decisión propia, duraba un año o año y medio en
el cargo y recibía un sueldo por ello; al final del mandato tenían que
someterse a un examen público de eficiencia.
Hay que añadir que en general fueron personas cultas, políticos,
jueces y en muchos casos nobles. En Trieste muchos fueron de la casa
veneciana Torriani y otros de la nobleza del Friuli. Entre algunos famosos
personajes que ejercieron como Podestá de la ciudad podemos
mencionar: Simone degli Engelfredi en 1302 que fue vicario imperial en
Arezzo, Paolo de Solimani en 1315, capitán general de Feltre y Belluno,
Giovanni Vigencia en 1332 que fue Podestá en Vicenza, Cremona,
Firenze y Perugia y quien tuvo por sucesor Andrea Dandolo en 1333
quien sería Doge de Venecia en 1342. 100
Por último hay que señalar que el Podestá hacia finales del siglo
XIII comenzó también a encargarse de los asuntos militares y en
particular de la milicia ciudadana, por lo que debemos concluir que los
conflictos internos entre triestinos fueron pocos y de mínima importancia.
Lo anterior hay que traerlo a colación por que justamente es en el
siglo XIII cuando en muchos Comuni se eligió un Capitano del popolo, 101
que tenia a su cargo una guardia armada y que podía dar armas a la
burguesía y mandarla en caso de conflictos civiles.
100
.CAPRIN, Giuseppe. Il trecento a Trieste. Pág. 90
101
-Capitán del Pueblo
61

Las razones por las que aparece esta nueva figura en la
instituciones del Comune fueron básicamente de orden social ya que el
Consejo de la ciudad (constituido como mencionamos por una oligarquía
de nobles y patricios) no quiso ceder prerrogativas a favor de la nueva
burguesía emergente constituida por los miembros de las corporaciones
artesanales y elementos del pueblo.
El Capitano del popolo era elegido por seis meses, tenía que ser
extranjero y se apoyaba en un Consejo Menor, también denominado
Consejo de las Artes (compuesto por miembros de las corporaciones) y
en un Consejo Mayor, denominado Consejo del pueblo (conformado por
elementos de la burguesía). De tal modo muchos Comuni tuvieron dos
gobiernos contemporáneamente y representaron dos clases rivales: la
antigua aristocracia y la burguesía emergente. Maria Asenjo González
nos puntualiza lo anterior y nos dice que: “El capitano asociado al
predominio político del popolo tenía la función de defender militarmente a
la ciudad y asegurar su gobierno. Su cargo tuvo un carácter excepcional y
por ello no quedó sujeto al control de las instituciones, lo cual le daba
amplio poderes”. 102
Un buen ejemplo de la diplomacia triestina y de la armonía dentro
del Comune, la tenemos en la elección que mencionamos anteriormente
del Conde Mainardo de Gorizia, en 1262, por ocho años como Capitano
del Popolo. De esta elección nos comenta Pietro Kandler 103 : …ma
abbiamo motivo di credere fosse un civettare col Comune per uno di quei
malumori frequentissimi nei Conti [de Gorizia] contro i Prelati [de
Aquilea]. 104
Luego en 1291 el Comune elige Podestá al Conde Enrique de
Gorizia, lo que significa a nuestro entender que en cierta medida todos
los ciudadanos triestinos, patricios, nobles o burgueses se movían en
sintonía.
102
- GONZALEZ, Maria Asenjo. Las ciudades en el Occidente Medieval. Pág. 68
103
-SCUSSA, Vincenzo. Storia Cronografica di Trieste. Escrito de Pietro Kandler. Pág. 222
104
-…pero tenemos motivos para creer que fuera un flirtear con el Comune por uno de aquellos malhumores
frecuentísimos en los Condes en contra de los Prelados. (Traducción nuestra.)
62

Después de una revisión de todo lo anteriormente expuesto, nos
parece que se nos presenta una pregunta como necesaria y fundamental
para el entendimiento de nuestra tesis: ¿Quién manda realmente en
Trieste en el siglo XIV La respuesta no es simple y lineal así que en
primer lugar trataremos de dar una idea cronológica global.
Desde el siglo V y hasta el siglo X a gran escala, la ciudad estuvo
bajo el dominio de los Godos, los Bizantinos, los Longobardos y los
Francos, sin embargo y a pesar de la informalidad del mando, la única
referencia real para los ciudadanos triestinos fue su Obispo quien a la vez
dependió del Patriarca de Aquilea. En el siglo IX, en el año 948 el rey de
Italia para ese momento Lotario II, hace donación formal de la ciudad a
los Obispos quienes se convierten así en sus Condes. La ciudad además
en el año 1000 debe jurar fidelidad a Venecia y en el año 1204 debe
renovarlo. Sin embargo ya para el siglo XII se comienza a vislumbrar la
base del Comune dado que los obispos comienzan a relegar sus
funciones principalmente en su Gastaldo y en los Jueces de la ciudad.
Luego en el siglo XIII los Obispos ceden sus derechos al Comune y
aparece el Consejo de la ciudad, el Podestá y el Capitano del Popolo. En
el año 1295 el Comune compra los últimos derechos al Obispo Brisa de
Toppo y logra así su independencia. Quedaba aún vigente el juramento
de fidelidad hecho a los venecianos que era respetado a regañadientes
más como un tratado comercial que como un vasallaje. 105
En el siglo XIV, por lo tanto, la ciudad esta establecida como
Comune y es gobernada por el Consiglio di Credenza, quienes
nombraban un Podestá para los asuntos administrativos y a veces cuando
el mando lo tiene el Consiglio delle Arti nombraba un Capitano del Popolo,
todo en armonía entre los partidos ciudadanos y de acuerdo a las
circunstancias por las que atravesaba la ciudad.
105
-Los triestinos estaban claro que, junto a varias ciudades de Istria, le habían solicitado por necesidad ayuda
al doge Orseolo en el año 1000 contra los piratas del Adriático norte. Se había firmado un tratado por el cual
Trieste tenía que mandar a Venecia 50 odres de vino para el aniversario de San Marco e izar el pabellón
veneciano en la misma fecha en Trieste en la plaza principal. Por el resto los venecianos no fastidiaron mucho
la ciudad durante el tiempo que va del siglo XI a finales del XIII, básicamente se limitaban al cobro de los
aranceles y las revisiones en función del contrabando (con excepción del 1203 por la 4ta cruzada). Es por eso l
que los triestinos sienten el tratado como un factor comercial y no un punto de vasallaje. Se comienza a sentir
una fuerte presión veneciana a principios del siglo XIV en la medida que el comercio y la fuerza militar triestina
se expande.
63

Adicionalmente a lo anterior y a través de nuestra investigación
pudimos recopilar informaciones sobre la existencia en el siglo XIV de un
grupo de patricios 106 cuyos nombres aparecen con cierta frecuencia en los
distintos documentos del Archivio Diplomatico de la ciudad, especialmente
a partir del siglo XII en adelante, ostentando distintos cargos y funciones.
Estos patricios formaron en el año 1246 la Cofradía de San Francisco,
que se ha denominado popularmente de las Trece Casate 107 por
representar a las trece familias más influyentes de Trieste y a través del
documento constitutivo 108 de la cofradía obtuvimos los nombres de las
familias: Argento, Baseggio, Belli, Bonomo, Burlo, Cigotti, Giuliani, Leo,
Padovino, Pellegrini, Pettazzi, Stella, Toffani.
Si consideramos que el Consiglio di Credenza fue la institución que
realmente gobernó la ciudad ya que el Consiglio delle Arti lo hizo
ocasionalmente y en menor medida, podemos concluir que la ciudad en el
siglo XIV estaba gobernada por una oligarquía ciudadana, que tenía sus
miembros en el Consejo Mayor de forma casi vitalicia 109 y de estos los
hombres pertenecientes a las Trece Casate representaron una parte
importante.
Hay que señalar que en Trieste al igual que en muchas ciudades
italianas en la edad media se difundieron las Cofradías. Estas encarnaban
originalmente el espíritu religioso de la época ya que se relacionaban con
aspectos de la religión, (por ejemplo en Trieste existió la Cofradía de los
Battuti cuyos miembros se flagelaban en público). 110
106
-Estos patricios tenían como referencia la época anterior al periodo feudal, origen de la nobleza europea. Su
referencia era la época romana y al Municipium en el cual los cargos nobles venían de la administración de la
Res Publica y por lo tanto pensaban que merecían ser reconocidos como los representantes de la ciudad.
107
- La primera noticia que se tiene de estos patricios triestinos nos llega por Fra Ireneo Della Croce, autor de
una Historia de Trieste publicada en Venecia en 1698. Fra Ireneo fue utilizado luego como fuente histórica por
todos los estudiosos posteriores entre ellos Pietro Kandler y G. Caprin. Luigi de Jenner que trabajó para Kadler
dejó una serie de documentos y entre ellos varios que se ocupan de las Trece Casate dando la genealogía,
escudos y noticias varias
108
- Debemos aclarar que no existe el documento original del año 1246. En su lugar existe un documento (ver
documento anexo L) fechado 1661 el cual hace referencia al documento original del año 1246. También hay
que mencionar que muchos documentos antiguos se perdieron en un incendio en el año 1690.
109
- Al principio los miembros del consejo duraban solo un año en sus funciones; a partir de la mitad del siglo
XIV se decidió que el cargo de Consejero fuera vitalicio y que no podía ser elegido quien no hubiera tenido el
padre o un ancestro Consejero. Sin embargo tal medida no se aplicó por completo ya que hay noticias de
Consejeros que pertenecían al pueblo más ínfimo.
110
-No hay que confundir esta cofradía fundada alrededor del año de 1260 con las numerosas sectas de
“Flagelantes” que surgieron por toda Euroopa a raiz de la peste negra del año 1348
64

Con el pasar de los años las Cofradías nacieron con un propósito
determinado; así surgieron por ejemplo la anteriormente mencionada
Cofradía de San Francesco cuyo propósito era mantener la nobleza
ciudadana separada de las otras clases sociales, la Cofradía de San
Nicoló que ayudaba a los pescadores y a los marineros y además
ayudaba a extinguir incendios dentro de la ciudad mientras que de los
incendios en el campo se ocupaba la Cofradía de Santa Maria dei Mari.
Tenemos además conocimiento que en el año de 1308 el Consejo Mayor
de la ciudad solicitó a las Cofradías de San Giusto, San Sergio, San
Pietro, Santísima Croce, Madonna del Mare, San Nicoló, San Lorenzo y
Sana Maria que adquirieran una ballesta con cien dardos y que deberían
ser aumentados de año en año hasta alcanzar la cantidad de 1000
dardos. Resulta claro que el Consejo no solicitaba contribuciones en
efectivo pero quería asegurarse que estos grupos de voluntariosos
cristianos preocupados por sus intereses religiosos no olvidaran que
todos debían rendir tributo a la defensa de la ciudad. 111
D- La Industria y el Comercio de Trieste en el siglo XIV.
El desarrollo que presenta la industria triestina en el siglo XIV no
difiere mucho de aquella de la mayor parte de los Comuni italianos de
esa época. Básicamente podemos decir que los modestos trabajos que se
hacían en la edad feudal son sustituidos por nuevas empresas
industriales con una producción mayor y perfeccionada. Sin embargo no
existen grandes fábricas de tipo moderno.
Se trata siempre de una organización artesanal que se desarrolla en la
casa del dueño o del Maestro (quien puede tener unos socios o
compañeros iguales en habilidades) debidamente inscrito en su
Corporación. En momentos de mucha actividad el artesano contrata
obreros asalariados al destajo. También hay que mencionar que la
organización de la industria en la edad de los Comuni obedece a lo
establecido por las Corporazioni d’Arte 112 .
111 -CAPRIN, Giuseppe, Il Trecento a Trieste. Pág. 136
112
-Corporación de las Artes.
65

En las ciudades medievales cualquiera que hubiera querido ejercitar
un “arte” tenía que inscribirse en su propia corporación primero como
aprendiz, luego como socio y finalmente como Maestro.
Ninguno de estos peldaños puede ser obviado además existen
requisitos que se deben cumplir: por ejemplo haber nacido en la ciudad
donde se ejerce, el ser cristiano, haber cumplido con los exámenes
exigidos. Hay que añadir que las corporaciones de las Artes en la edad
media, que habían nacido de la necesidad, absorbían completamente a
los hombres en todas los aspectos de su vida y al mismo tiempo
ayudaban en los Comuni al buen gobierno. Al dirigirse el Consejo a las
Corporaciones no necesitaba dirigirse directamente al pueblo en arengo
para conocer las opiniones de los ciudadanos.
En Trieste no destaca ningún gremio, al contrario de Venecia,
Milano o Florencia donde ciertas corporaciones prevalecerán sobre otras.
Además una parte importante de la población estaba constituida por
comerciantes, campesinos, pescadores y trabajadores de las salinas.
Ahora bien para los triestinos, a partir del siglo V en adelante, lo
importante -y que dio vida a la ciudad- fue la actividad comercial.
Al principio fue un comercio basado netamente en un sólo producto
(la sal), pero al pasar los años y en la medida que la ciudad creció y se
estableció el Comune, el mayor tráfico estuvo representado por el
intercambio de productos entre el campo y la ciudad, supervisado por los
magistrados quienes usualmente se preocupaban por la provisión de
víveres para la población amenazada muy a menudo por hambrunas.
Sin embargo cuando el Comune logró su completa autonomía y
con ello una mayor prosperidad, las actividades comerciales se
incrementaron y los mercaderes triestinos se hicieron presentes en
mercados anteriormente dominados por otras ciudades italianas.
Una preocupación nueva comenzó a presentarse entonces, sea en
el mundo religioso que en el gobierno de la ciudad: la usura. El mismo
Comune trató de limitarla ya que se estaba difundiendo la costumbre de
especular con las cosechas por parte de compañías bancarias y por
prestamistas particulares.
66

Nos dice a este respecto G. Caprin 113 : Il commercio e l’industria
rompendo le catene dei monopoli cominciavano a ordinarsi piú
liberamente a avevano bisogno del credito e lo pagavano a caro prezzo,
contenti di dividere con chi glielo acordaba, i fruti del guadagno. 114
Con respecto a lo anterior, existió la particular circunstancia que a
partir de 1286 y por causa de los conflictos entre Güelfos y Gibelinos y
más tarde Blancos y Negros que se dieron en Florencia y en muchas de
las ciudades de Toscana llegaron a Trieste más de 50 personas entre
familias e individuos exiliados. Estas personas fueron en su mayor parte
gente de recursos que se establecieron dentro del territorio o de la ciudad
de un modo permanente; algunos se dedicaban al sector textil, pero
muchos eran miembros de esas típicas familias medievales italianas que
se dedicaron al comercio y a la banca en gran escala a través de Europa
y Levante. Algunos representantes de estas familias fueron: la familia
Angolanti, Lamberto degli Ubbriachi (quien Dante Alighieri colocó en su
Infierno), la familia de los Bardi, que a causa de una quiebra económica
en el año 1339 el Comune de Trieste los persigue jurídicamente en
Venecia donde se refugiaron para obligarlos a pagar sus deudas.
De esta familia Bardi y de su endeudamiento, junto con los Peruzzi
que llevan a la quiebra de 1338 en Toscana y a los sucesos de Trieste del
1339 nos cuenta Giovanni Villani: 115 Nel tempo ch'era la detta guerra
da·rre di Francia con quello d'Inghilterra sì erano mercatanti del re
d'Inghilterra la compagnia di Bardi e quella di Peruzzi di Firenze, e a·lloro
mani venia tutte sue rendite, e·llane e cose; ed ellino forniano tutte le sue
spesarie, gaggi, e bisogne;[...] che montarono più di MCCCLXVm fiorini
d'oro, che valeano un reame. Ben avea in questa somma assai quantità di
provisioni fatte a·lloro per lo detto re per li tempi passati; ma come che si
fosse, fu la loro gran follia per covidigia di guadagno o per raquistare il loro
113
-CAPRIN, Giuseppe. Il Trecento a Trieste. Pág. 147
114
-El comercio y la industria rompiendo las cadenas de los monopolios comenzaban a ordenarse mas
libremente pero tenían necesidad del crédito y lo pagaban bien caro, contentos de dividir, con quien se lo
otorgaba los frutos de la ganancia. (Traducción nuestra)
115
-Giovanni Villani nació en 1280 de una familia florentina burguesa y se dedicó primero al comercio y a las
finanzas. Como filiación política era Güelfo Negro. Fue socio de la familia Peruzzi de 1301 al 1308. Luego fue
funcionario del Comune florentino ejerciendo varios cargos públicos entre ellos embajador en diversas
ocasiones. En 1338 volvió a las finanzas asociado a la familia Bardi y cuando estos quebraron definitivamente
en 1345 Villani fue encarcelado por las deudas y en el 1348 murió por la peste.
67

follemente prestato mettere così di grosso il loro e l'altrui inn-uno signore.
E nota che i detti danari non erano la maggiore parte delle dette
compagnie, anzi gli aveano inn-accomanda e in diposito di più cittadini e
forestieri. 116
A pesar del tipo de conflicto mencionado, hay que decir que estos
exiliados darán un gran impulso al comercio de la ciudad ya que la
actividad bancaria y por ende la comercial se verá incrementada.
Además el comercio de las telas junto con la industria del tinte tuvo un
auge importante en ese período impulsado por los exiliados sobre todo
provenientes de Prato y Lucca. Adicionalmente podemos decir que el
Comune para controlar un poco el negocio bancario en los estatutos del
1350 117 establece que los créditos sean reducidos a la mitad por dos años
y suspende también por dos años cualquier juicio o intento de ejecución
de bienes.
Entre los banqueros se nombran entre otros en el documento a
Ugone degli Angolanti, Scolaro degli Scolari, Rizzardo Malatesta,
Lamberto degli Ubbriachi, Francesco Ruggeri todos ellos toscanos.
Sin embargo la primera fuente de ingresos para Trieste seguía
siendo la sal, en abierta competencia con los vecinos de Latisana,
Muggia, Capodistria y Parengo pero en especial Venecia que también lo
consideraba como un producto primordial de su comercio (para el siglo
XIV, probablemente sólo como un punto de honor ya que el comercio
veneciano con Oriente le proporcionaba una riqueza ampliamente
superior) y que desde el siglo VIII había logrado alcanzar el casi
monopolio de ese valioso producto.
116
-VILLANI, Giovanni. Nuova Cronica. En http://www.classicitaliani.it/index144.htm Libro 12, 2da parte.
En la época de la guerra entre el rey de Francia y el rey de Inglaterra los mercaderes del rey de Inglaterra eran
la compañía de los Bardi y la de los Peruzzi de Florencia, y por sus manos pasaban todas las rentas ingresos y
las lanas y otras cosas; y ellos suministraban para todo sus gastos, salarios y necesidades;[...] que sumaban
más de 1.365.000.- fiorini de oro, tanto cuanto vale un reino. Esta cantidad incluía una gran cantidad de
abastecimientos que habían adquirido para el rey en el pasado; Pero aunque eso haya sido así, su gran locura,
por la codicia de ganar más o para recuperar lo que habían tan insensatamente prestado fue poner toda su
riqueza y la de otros en un solo Señor. Y es de notar que el mencionado dinero no era en la mayor parte de las
mencionadas compañías, sino que se lo habían entregado en deposito muchos ciudadanos y extranjeros.
(Traducción nuestra)
117
-Archivio diplomatico Istriano. Vol.III. Pág. 1230
68

Hay que señalar que la sal no era sólo un banal condimento sino
constituía una necesidad primaria para la vida diaria; por supuesto servía
para mejorar el sabor de los alimentos pero tambíen suministraba
minerales importantes al organismo humano y sobre todo se utilizaba
como conservante de carne, pescado y verduras además de ser utilizada
con el ganado. En caso de fallar el suministro de la sal, se podían
entonces presentar carestías ya que se deterioraban las reservas de
alimentos y desmejoraba la salud de las personas y de la ganadería.
De hecho una buena parte del comercio marítimo en el área
Adriático-Mediterránea en la edad media estaba subordinada a la
necesidad de comprar, transportar y vender la sal y por ello la importancia
de las flotas de barcos adaptados para llevar grandes cargas de sal y la
utilización de escoltas armadas.
En cuanto a este comercio por tierra, hay que decir que se
basaba en las ”vías de la sal” que ya desde la época romana habían sido
establecidas y que no sólo permanecieron iguales sino que se
incrementaron en toda Europa siendo a menudo utilizadas por los
peregrinos para alcanzar los distintos santuarios religiosos. Además, hay
que decir que a lo largo de estas “vías” se fundaron varias ciudades y un
buen ejemplo lo fue la ciudad de Salzburg en Austria, literalmente la
“ciudad de la sal” y donde los mercaderes triestinos llegaban a vender su
producto.
Trieste a parte del comercio de la sal, dentro de su territorio tenia
pocos productos comerciables, entre ellos se encontraba en primer lugar
el vino del Carso, (muy apreciado desde la época romana y mencionado
por Plinio el viejo), el aceite, la cera para las velas y el pescado.
Por otra parte y tal como nos cuenta Giuseppe Caprin 118 , los
mercaderes triestinos negociaban por toda Italia y en especial compraban
en Udine el grano y los cereales, en Carniola y Corintia, hierro y madera
para las construcciones, resina y pieles; en Puglia compraban aceite,
frutas cítricas, azufre y azafrán; en Venecia, telas, especias, drogas, y
distintos tipos de objetos manufacturados, especialmente de vidrio.
118
.CAPRIN, Giuseppe. Il Trecento a Trieste. Pág. 153/154
69

Además, estos mercaderes no sólo comerciaban con las ciudades
italianas sino que alcanzaban los puertos del Adriático, como una
extensión normal para una ciudad de mar y a pesar de las trabas
venecianas llegaban a los puertos de Istría, a Zara y en menor medida a
Ragusa, por lo que comenzaron a ser bien conocidos por los reyes
húngaros.
A este respecto podemos considerar que algún tipo de relación se
estableció entre Hungría y Trieste a partir del siglo X a raíz de las
invasiones húngaras a Italia de esos años.
Estos invasores, se llevaron esclavos y bienes de regreso a sus
territorios que sentaron las bases para formar un estado sedentario
cuando en el 975 el duque Géza se convierte al cristianismo y luego para
que en el año 1000 su hijo Esteban I el Santo reciba el reconocimiento
como rey de Hungría por parte del papa Silvestre II. Este mismo rey
llevará colonos extranjeros y especialmente italianos a su país para
dedicarse a las actividades agrícolas y artesanales.
Luego con Ladislao I, quien reinó entre 1077-1095 y que
estableció una alianza con el papa Gregorio VII, las relaciones
comerciales entre Trieste y Hungría se intensificaron; ésto sucedió
también por haber obtenido Hungría las ciudades Croatas de Istria y Zara
en la Dalmacia. Además la ciudad tambien se benefició del acuerdo entre
Venecia y Hungría establecido por su hijo Kálmán (1095-1116), por el cual
se permitió el movimiento libre de sus respectivos mercaderes y los
húngaros realmente no hacían distinción entre triestinos y venecianos.
Hay además que mencionar, dándole especial atención a los
tráficos terrestres triestinos que alcanzaron como ya mencionamos
Salzburg pero también lugares más lejanos como Buda y Pest en
Hungría.
Para aclarar suficientemente este aspecto y en consideración a
que en general se considera que las vías de comunicación terrestres en la
edad media se encontraban deterioradas queremos señalar las
principales vías que seguían los mercaderes desde Trieste.
70

En primer lugar existía la antigua vía romana llamada Gemina que
saliendo desde Aquilea, llegaba hasta Lubliana donde se abría la
posibilidad de seguir al norte hasta Viena; desde Trieste se llegaba hasta
Istria, Fiume y la Dalmacia.
Luego, siempre saliendo desde Trieste, se podía conectar en
Aquilea con la vía Julia Augusta que partía de allí hacia el norte y
atravesando el Friuli llegaba hasta Linz y Klagenfurt en Austria.
La vía Postumia, construida en el 148 a.c. conectaba Aquilea con
el norte y a través de la vía Emilia con el centro de Italia. Esta vía sirvió
de directiva para la penetración de los Hunos, de los Ostrogodos, de los
Longobardos y de los húngaros y por ello finalmente fue denominada
Strada Hungarorum; y es esta vía que llega hasta Buda y Pest en el siglo
XIV la que era más utilizada por los comerciantes triestinos y venecianos.
Ahora bien, todas estas vías, construidas en la época romana,
estaban en condiciones de ser utilizadas por los mercaderes, a pesar de
no encontrase en las condiciones originales por la falta de mantenimiento.
La verdadera dificultad para los comerciantes que usaban los caminos
terrestres estaba dada por la gran cantidad de robos que en muchos
casos eran tolerados y a veces aceptados.
Los mercaderes se unían en caravanas para su seguridad pero
muchas veces al pasar por el territorio de algún señor, este imponía unas
tarifas arancelarias leoninas o simplemente secuestraba la caravana, a
veces usando violencia. 119
En cuanto a las exportaciones de los húngaros, estas consistían
principalmente en plata y oro. Estos metales eran sumamente necesarios
para mantener la acuñación de las monedas, sean de las acuñadas por
los Patriarcas de Aquilea, las de Venecia o las emitidas por los Obispos
de Trieste. 120
119
-Como anécdota nos cuenta G. Caprin que los mercaderes venecianos viajaban llevando en sus caravanas
magos, saltimbanqui, músicos y animales curiosos para divertir a los feudatarios y asegurarse así su
protección. CAPRIN, Giuseppe. Il Trecento a Trieste. Pág.152.
120
-Después de la paz de Costanza en 1183, los Patriarcas de Aquilea comenzaron a emitir moneda y
prácticamente al mismo tiempo lo hicieron los obispos de Trieste. Estas tenían la efigie del Obispo que pedía la
acuñación en el anverso y una imagen de la ciudad en el reverso siendo la única excepción la moneda del
1236 donde aparece en el anverso San Justus y en el reverso la ciudad con la inscripción Civitas Tergestum.
71

Y es dentro de este medio del dinero y por lo tanto de las
transacciones financieras hay que recordar la presencia de los banqueros
italianos en Hungría, principalmente los Spini, los Medici, los Peruzzi y los
Bardi. En especial esta última familia nos da la base para considerar que
los banqueros Bardi que se encontraban en Hungría en el siglo XIV
debían haber ido desde Trieste ya que como señalamos estaban exiliados
de Florencia.
Adicionalmente a lo ya mencionado, en nuestra opinión una
circunstancia que influyo notablemente en la expansión comercial de
Trieste y que sus ciudadanos supieron aprovechar bien fue la aparición en
el año de 1348 de la peste negra en el Norte de Italia y que luego se
difundiría por toda Europa. Esta enfermedad acabó con una gran parte de
la población e influenció notablemente la vida diaria y en el desarrollo de
las actividades artesanales y comerciales 121 .
La difusión de la peste fue tan amplia que en palabras de la época
se nos señala que: Per totum orbem maxima pestis mortalitatis fuit 122 y en
el caso de Venecia por ejemplo ésta ciudad perdió las tres quintas parte
de su población; solo entre 1348 y 1349 se señalan unas 600 muertes
diarias entre Chioggia y Venecia 123 .
Sin embargo, a pesar que la peste atacó fuertemente también las
ciudades de Istria, por alguna razón que aún no se ha sido determinada
por los investigadores con claridad, 124 en los territorios del Patriarcado de
121 - Es necesario señalar, tal como nos lo señala Gabriella Zanella, profesora de la universitá di Pavia en su
libro: La peste del 1348. Italia, Francia e Germania: una storiografia a confronto. Edición electronica:
http://spfm.unipv.it/zanella/Todi93/Todi93.doc que la peste negra influyó tanto en la vida diaria en la Europa de
ese año 1348 y por varios años más que muchas crónicas y diarios que eran mantenidos por distintos
personajes a nivel personal o los libros de las distintas instituciones presentan interrupciones. Usualmente
entre el año 1348 y el 1350.
122 - Chronicon Estense cum additamentis usque ad annum 1478. Editado por. G. Bertoni - E. P. Vicini, «Rerum
Italicarum Scriptores» p. 159
123 - ZANELLA, Gabriella. La Peste del 1348, Italia, Francia e Germania: una storiografía a confronto.
http://spfm.unipv.it/zanella/Todi93/Todi93.doc . Pág. 162
124 - Usualmente en las obras históricas de fuente italianas encontramos que las señalaciones con respecto a
la peste están integradas en un discurso más amplio y en general no se centran en ella; hace excepción Matteo
Villani que le dedica varios capítulos de su obra. Pareciera que la peste no atrajo el interese de los
contemporáneos ya que desde las primeras fases de ella existen grandes silencios y no hay por lo tanto que
sorprenderse que en muchas de las crónicas de las ciudades no tocadas por la peste o lejanas de los centros
de infección los señalamientos sean pocos o nulos. Sin embargo no se trata de un estigma historiográfico sino
más bien la confirmación del un gran desinterés que se reflejó también en la actividad legislativa y
administrativa de la época.
72

Aquilea, así como en Gorizia, Udine y Trieste la plaga no incidió tan
dramáticamente.
Esto en el caso de los triestinos fue un factor decisivo para su
crecimiento comercial ya que pudieron aprovechar en esos años difíciles,
especialmente entre 1348 y 1350, de la debilidad de Venecia para
expandir su influencia, sobretodo en los mercados de Austria, Croacia y
Hungría que al principio fueron afectadas por la peste en menor medida.
Finalmente queremos decir, con la visión comercial presente, que
definitivamente el dominar Trieste debe haber sido un tema de
consideración sea para los reyes húngaros que más tarde para los
Habsburgo, principalmente por la posición geográfica de la ciudad de
frente al mar Adriático y sus posibilidades de comercio ultramarino.
En segundo lugar y también muy importante, por la facilidad de
conexión con las principales vías de comunicación terrestres; Zara por
ejemplo, el otro puerto importante húngaro tenía su zona de Hinterland
no tan próspera como Trieste y las vías de comunicación para alcanzar
Viena o Budapest dejaban mucho que desear.
D- La defensa de la ciudad.
Como ya habíamos mencionado la ciudad de Trieste en el siglo XIV
estaba bien defendida por una muralla que la circunda con cinco puertas y
14 torres; además un foso circunda una gran parte de la muralla. Estos
muros eran imponentes y de ellos la mejor descripción que tenemos nos
la da Giuseppe Caprin: 125 La cinta a corsi di pietra rozza, alta nove passi
veneti 126 , larga alla base sette e cinque alla sommitá aveva la forma di un
prisma poligonale, ed era rinforzata da torri pentagone, quadrate ed una
rotonda. Sulle mura formava parapetto e shermo un incoronamento di
merli guelfi e non foggiati a quel modo perché la cittá, soggetta da piú
secoli ai vescovi parteggiasse per la sovranotá temporale del Papato, ma
per proteggere alle ronde il passaggio sullo spessore del muro e per
125 - CAPRIN, Giuseppe. Il trecento a Trieste. Pág. 18
126 -Un passo veneto corresponde a 1.738675 mts.
73

coprire in caso d’assalto l’azzione dei balestrieri. 127 La muralla debía ser
mantenida limpia de matas que pudieran dañarla o facilitar la escalada a
los atacantes; las cinco puertas, correspondían también cada una a una
torre y se denominaban: Triborgo, Donota, Tor Grande, San Michele y
Cavana; tenían defensas adicionales y puente levadizo. Cabe señalar
que en tiempos de guerra se construían puntos de vigilancia en las partes
más altas de la ciudad, casi siempre en la catedral de San Giusto.
El arsenal de la ciudad se encontraba en la zona de Cavana y
además de las armas mas especificas custodiaba las máquinas
lanzadoras de piedras junto con cuerdas, estopa, pez griega, azufre y
otros materiales incendiarios.
Entrando ahora en el tema de quien componía la fuerza militar,
queremos en primer lugar señalar lo que se dice en los estatutos del año
1350 y que nos da la idea exacta de las responsabilidades ciudadanas:
Ordiniamo e vogliamo che suonandosi la campana a stormo ogni persona
dai quindici ai sessanta anni, debba correre in piazza e mettersi agli ordini
del Podestá 128 . Tenemos así la visión de una Trieste del siglo XIV donde
los habitantes del Comune saben que deben estar a disposición en
cualquier momento para enfrentar un enemigo que aparezca a sus
puertas. Además los ciudadanos eran reclutados o designados como militi
para ocuparse de los asuntos internos de la ciudad, las rondas en los
muros, el cuidado de las puertas, etc.
También queremos recordar aquí que el Podestá hacia finales del
siglo XIII comenzó a encargarse también de los asuntos militares y en
particular de la milicia ciudadana a pesar que a veces fue sustituido con el
Capitano del popolo.
127 -El cinturón, formado por bloques de piedra burda, alto nueve pasos venecianos, largo en la
base siete pies y cinco en la parte superior, tenía la forma de un prisma pentagonal y estaba
reforzado por torres pentagonales, cuadradas y una redonda. Sobre los muros formaba un parapeto
y escudo una corona de merlos güelfos que no fueron hechos en ese estilo porque la ciudad,
sometida por varios siglos a los obispos se inclinara por el poder temporal del Papado, sino para
proteger a las rondas la caminata sobre el espesor de los muros y para cubrir en caso de asedio la
acción de los ballesteros. (traducción nuestra)
128 -Archivio Diplomatico Triestino. Statuti del 1350. Ordenamos y queremos que cuando la
campana repique con celeridad, toda persona de quince a sesenta años tendrá que presentarse en la
plaza y ponerse a las ordenes del Podestá. (traducción nuestra)
74

Este tenia a su cargo una guardia armada personal pero que al
igual que el Podestá podía dar armas a los ciudadanos y mandarlos en
caso de conflictos.
Las armas que se entregaban para la defensa personal, consistían
de las usuales en la época: espadas, picas, lanzas, cuchillos cortos,
ballestas de madera o cuerno con varios dardos además de un escudo
que podía ser de forma acorazonada, redonda o rectangular. En Trieste
las armaduras completas no eran muy conocidas y de hecho no se
usaban, probablemente tambíen por el alto costo. Sin embargo hay que
señalar que los tiempos estaban cambiando y ya a principios del siglo XIV
había comenzado el uso de las primeras armas de fuego: en el asedio de
Brescia de 1311, en Firenze en 1327, en Piemonte se usan los primeros
schioppi (especie de arcabuces) en 1331 y muy importante para Trieste,
los venecianos habían usado cañones por primera vez en la batalla naval
de Alghero en 1349, los usarán en tierra por primera vez en 1376 contra
Leopoldo de Austria.
Sin embargo a nuestro parecer el espíritu de la defensa de la
ciudad se encontraba en sus ciudadanos ya que como nos señala G.
Caprin, 129 …il nemico si trovava di fronte ad uomini che combattendo sulla
porta della propia casa, ne contrastavano con dispèrazione l’accesso 130 .
Tema aparte lo constituye el uso de tropas mercenarias hecho muy
difundido en Italia en el siglo XIV; Trieste también los utilizaba,
básicamente para los combates de ataque y fuera de los muros de la
ciudad.
Los mercenarios en ese siglo XIV se podían dividir en varias
categorías: existía el típico contrato individual entre un Señor y un hombre
de armas; el contrato (condotta) entre un Señor y un Capitano di
Ventura 131 que se comprometía por un tiempo determinado y por un
sueldo determinado, usualmente pagado por anticipado, a mantener y
adiestrar a sus expensas una tropa.
129
-CAPRIN, Giuseppe. Il Trecento a Trieste. Pág. 36
130
-El enemigo se encontraba en frente a hombres que combatían en la puerta de sus propias casas y
disputaban con desesperación el ingreso. (traducción nuestra)
131
-El Capitano di Ventura formaba una Compagnia di ventura y del contrato (o condotta) que se firmaba se
derivó el nombre de Condottiero, denominación tradicional de los Capitanos.
75

Con respecto a las Compagnie di Ventura las palabras de Peter
Burke nos ilustran suficientemente la situación: 132 Formatesi in Europa
dopo il Mille dal disfacimento degli eserciti feudali e costituite da elementi
di varia nazionalità (in origine spagnoli, tedeschi e fiamminghi),
continuarono a essere impiegate in quasi tutte le guerre fino al XVI secolo.
Particolare diffusione ebbero le compagnie di ventura dal XIV secolo in
Italia, dove le autonomie comunali e signorili rendevano necessaria la
presenza di truppe armate che non conveniva, per motivi economici e
politici, reclutare e addestrare all'interno della compagine urbana 133 .
Finalmente queremos señalar que también en el asedio contra
Trieste que llevaron a cabo los venecianos en el año 1368, la ciudad
utilizó soldados mercenarios provenientes del Carso y de ciudades
vecinas (Udine y Gorizia) y a este respecto tenemos el testimonio de,
Marc Antoine. Laugier 134 quien narra como los extranjeros y mercenarios
que combatieron a favor de del Comune podían dejar la ciudad sin perder
sus bienes y además le conceden el privilegio de quedarse a vivir en la
ciudad si lo desean.
132
-BURKE, Peter. Cultura e società nell'Italia del Rinascimento. Bologna, Editoriale Il Mulino, 2001. Pág. 124
133
-Habiéndose formado en Europa después del año Mil, por el desmembramiento de los ejércitos feudales y
constituidas por elementos de varias nacionalidades (originalmente españoles, alemanes y flamingos),
continuaron a ser empleados en casi todas las guerras hasta el siglo XIV. Una difusión particular tuvieron las
compañías de ventura en el siglo XIV en Italia donde las autonomías Comunales y Señoriales hacían
necesaria la presencia de tropas armadas ya que no convenía por motivos económicos y políticos, reclutar y
adiestrar gente en el interior de las ciudades. (Traducción nuestra).
134 - LAUGIER, Marc Antoine. Storia della repubblica di Venezia. Libro XIV. Pág. 128
76

Capítulo 4
La defensa de la libertad del Comune
Ilustración 5: El Leon de San Marco que se encontraba sobre la puerta de la Torre San Marco (conocida
durante el periodo del Comune libre como Torre Grande). Fue removido del mencionado lugar por los
genoveses en el año de 1380.
La ilustración fue obtenida del libro de G. Caprin, Il Trecento a Trieste.
A través de los tres capítulos anteriores pudimos recorrer varias
etapas de una ciudad que en su periodo medieval llegó a cobrar una
importancia superlativa por la posición geográfica, por la capacidad
comercial y por la tenacidad de sus ciudadanos poco dispuestos a
someterse a un gobierno extranjero o a ceder sus prerrogativas de
autogestión. Además apreciamos como a la hora de encontrase en
situaciones difíciles, el Comune demostraba una habilidad poco usual en
su negociaciones, logrando trabajar todos los sectores exponentes de la
sociedad ciudadana en sincronía, sin conflictos entre ellos.
Sin embargo, una cosa es ser decidido y otra es poder enfrentar
los tiempos cambiantes, así que al final del siglo XIV, Trieste y sus
ciudadanos tuvieron que aceptar lo que parecía ser el menor de los males
y concederse como súbditos de la nueva súper potencia emergente de la
época: los Habsurgo. Esto a pesar de todos los esfuerzos que durante
siglos había hecho su vecina Venecia para lograr controlar esa ciudad
rebelde y competidora.
77

Ahora bien, los sucesos que en el siglo XIV hicieron ceder a
Trieste su ansiada independencia fueron varios, unos de índole interno y
otros de carácter externo; a través de nuestro análisis fue nuestro deseo
presentar todos estos factores que se conjugaron para que al final se
diera el fin del Comune independiente.
Para poder dar una explicación exhaustiva a los factores internos
que influyeron en el cambio, comenzamos por analizar los motivos por lo
cuales en el año clave de 1295 el Comune, representado por el Consiglio
di Credenza y del que formaban parte los miembros Patricios de la
ciudad, junto con los nobles pero apoyado por el resto de los ciudadanos
triestinos, decidieron que los tiempos estaban maduros para lograr ser
independientes y además porque con esa independencia podían
asegurarse una mejor posición política, en equilibrio entre la república de
Venecia en el Oeste, que insistía en sus derechos sobre la ciudad y los
Habsburgo que presionaban la ciudad desde el Este para anexarla a sus
cercanos territorios del Ducado de Carniola.
Luego seguimos examinando el Comune y a través de los
documentos notamos que existió en el año 1313 un episodio de vida
ciudadana que se concluyó en tragedia y que por sus características
podía tener varias vertientes, esto fue la denominada “la conjura de los
Ranfi.” Esta conjura como veremos podía tener un objetivo personal muy
común de la época como era el tratar de establecer una Signoria
personalista por parte de Marco Ranfo y consideramos que realmente eso
no habría sido nada fuera de lo usual en el siglo XIV; sin embargo y como
otra posibilidad, el considerar las relaciones comerciales y diplomáticas
que habían tenido a través de los años muchos de los miembros de la
casa Ranfi con Venecia, nos hace pensar que talvez la conjura trataba de
poner en el poder absoluto de Trieste un personaje subordinado a los
venecianos. Otra posibilidad estudiada, nos permite pensar que podía
haberse tratado de una conjura instigada por el Obispo de la época
Rodolfo Pedrazzani, quien no era originario de Trieste y quien se mostró
muy activo en la búsqueda de la restitución por parte del Comune de
todas las prerrogativas y bienes concedidos por el Obispo Brisa de Toppo
en el 1295.
78

Cualquiera de las posibilidades nos parece factible y las revisamos
también en función de los castigos que recibió la familia Ranfi, que fueron
bastante descomunales aún para la época y que prácticamente los
extinguió como familia.
Adicionalmente hay que señalar que en los estatutos ciudadanos
establecidos en 1319 se menciona el episodio y luego al establecerse los
nuevos estatutos de la ciudad en el año 1350 se vuelve a mencionar el
episodio y aún se señala en los estatutos del año 1365, por lo que
debemos asumir que fue algo realmente grave y con mucha probabilidad
la amenaza consistió que de un modo u otro el Comune podía haber
perdido la independencia conquistada y eso era intolerable para los
triestinos.
Otro factor de división interna y que pudo haber causado una
situación grave vino cuando el obispo Antonio Negri, quien era veneciano
y había sido decano en la ciudad de Candia, 135 en el año 1350 buscó
recuperar los derechos laicos del Episcopado al igual que había tratado
su antecesor el obispo Rodulfo en el 1305. Esto no habría sido difícil de
manejar por el Comune si no hubiera sido que el Obispo Negri estaba
apoyado por el Patriarca de Aquilea Nicolás quien era de la casa real
bohema de Luxemburgo; Además era hermano carnal del emperador
Carlos IV de Luxemburgo y aspiraba al dominio de la ciudad, mas allá de
lo que le correspondía como Marqués de Istria 136 y esto fue causa para
que se produjeran fuertes disturbios civiles en la ciudad que serán
resueltos mediante un arbitraje a finales de 1351.
Por otro lado el Obispo Negri obtuvo en 1352 por parte del
emperador Carlo IV la confirmación de todas las concesiones e
investiduras efectuadas por reyes y emperadores a los Obispos de Trieste
y a partir de ese momento el Obispo nunca renunció a su titulo de Conde
de Trieste, siendo imitado por sus sucesores.
135 -Candía es la actual Heraclion en la isla de Chipre.
136 - El Patriarca Nicolás en el 1354 obtiene de parte del emperador Carlos IV el Vicariato imperial
sobre la ciudad de Trieste y su territorio
79

En cuanto a los factores externos que decidieron la suerte del
Comune los acontecimientos decisivos se dieron en el año 1368, a raíz de
lo que se puede considerar como un incidente comercial menor pero que
desencadena una serie de sucesos por los que los venecianos terminan
por perder la calma y en lugar de agotar las posibilidades de negociación
deciden someter a la ciudad por la fuerza.
Probablemente temiendo que otras ciudades de Istría siguieran el
ejemplo, sin embargo reciben la sorpresa que la ciudad no se rinde frente
al ejército veneciano y éste tiene que asediar la ciudad por un largo
periodo y enfrentar varias situaciones adversas.
Al principio Venecia trata a los asediados con la arrogancia de los
poderosos pero luego al pasar de los meses y viendo que la ciudad
resiste e inclusive recibe el auxilio del Duque de Austria, la inquietud
militar de los venecianos aumenta y a ello se une la preocupación que al
de no poder llevar a cabo los castigos prometidos, Venecia termine
humillada por una pequeña pero combativa ciudad. Por ello los
venecianos asumen el asedio con seriedad y después de 11 meses en
1369 la ciudad es sometida por hambre.
Es en ese año cuando los Habsburgo sacan provecho de la
situación ya que desde que esta familia originaria de Suiza había obtenido
primero Austria y luego Carintia y Carniola, se dieron cuenta de la
necesidad de tener una salida al mar para sus tráficos comerciales. Por el
lado de Dalmacia no podían lograr algún resultado ya que los húngaros
tenían el mismo propósito y el punto álgido entre ellos y los venecianos
era el dominio de la ciudad de Zara. Por las costas de Istria también
tenían dificultades ya que el interior dependía en parte del Patriarca de
Aquilea y en parte del reino de Hungría.
Es por ello que la salida más factible y que de hecho era utilizada
por los austriacos y los carsos para sus productos, era a través del puerto
de Trieste. Además siendo una ciudad autónoma, los duques de Austria
esperaban solo una oportunidad para obtenerla sin entrar en conflicto con
el Patriarca, con el conde de Gorizia o con Venecia.
80

La oportunidad llegó durante el asedio del año 1369 cuando Trieste
para no se sometida por Venecia solicitó la ayuda a Leopoldo III. Éste
inmediatamente se presentó con un ejército pero fue derrotado y tuvo que
esperar once años más para que nuevamente las circunstancias fueran
favorables para que Trieste se sometiera a los Habsburgo.
A- El Comune y la conjura de los Ranfi.
Cuando en el año 1295 el Obispo Brisa de Toppo ofreció vender
los últimos derechos que poseía sobre la ciudad al Comune e
inmediatamente los miembros del Consejo aceptaron la transición. Con
ello por un lado cumplían con las antiguas aspiraciones de los ciudadanos
de darse un gobierno autónomo propio y por otro lado probablemente
pensaban en el incremento de sus negocios, teniendo como indicación el
progreso que había significado el ser independientes para otras ciudades
de mar como por ejemplo para su vecina Venecia o para los comerciantes
de Génova o también para los banqueros de Florencia que se apoyaban
en los tráficos marítimos y que debemos recordar que a principios del
siglo XIV eran muchos los que se encuentran exiliados en Trieste.
Si consideramos que dentro del consejo se encontraban los
representantes de los patricios (miembros de las 13 Casate) y de los
nobles triestinos debemos considerar que deben haber pensado que esto
podía ser un primer paso hacia una hegemonía regional que les
permitiera estar en equilibrio dentro de un área donde sus vecinos
poderosos comenzaban a preocupar.
Por un lado estaban los venecianos, siempre buscando controlar
las ciudades de la costa para evitar competencia mercantil. Al Norte se
encontraba Gorizia, que si bien no había intentado nada en contra de
Trieste y más bien en varias ocasiones la había ayudado, estaba
surgiendo como una potencia y era necesario cuidarse de ella y mantener
buenas relaciones.
81

También hacia el noreste se encontraba las tierras del duque de
Carniola dependiente de los Habsburgo y quienes desde la época de
Rodolfo I, que había obtenido Austria, Carintia y Carniola no escondían
sus ambiciones de dominar Trieste como un punto de salida para el nuevo
imperio en formación.
Es así como se le vislumbra al Comune que probablemente la
única posibilidad de Trieste para lograr subsistir, sin ser aplastada por sus
vecinos, era el convertirse en una ciudad poderosa e independiente y esto
para el siglo XIV significaba para la ciudad tener una milicia ciudadana
fuerte 137 y una flota importante. Por otro lado era necesario y vital también
incrementar la actividad comercial y todo esto a principios del siglo XIV se
estaba logrando.
Sin embargo justamente el crecimiento que experimentaba Trieste
era también la causa del incremento de los roces con sus vecinos y en
especial con Venecia. Los venecianos (en realidad al igual que varios
vecinos de Trieste, en general ciudades menores del Adriático tales como
Pola o Ancona 138 que también se sentían amenazadas) consideraban que
los triestinos actuaban no sólo como comerciantes en el Adriático sino
también como corsarios y por ello tenemos noticias como los venecianos
usando sus prerrogativas feudales paraban los barcos triestinos que
comerciaban con el Friuli o con las ciudades de Istria solicitándoles pagos
de impuestos o secuestrándoles las mercancías acusándolos de piratería,
todo en aras de controlar la expansión comercial triestina. Además ya
muy a menudo como señalamos con anterioridad, los venecianos se
topaban en Austria o Hungría con mercaderes triestinos o con miembros
de casas comerciales de origen toscano residentes en Trieste y que
negociaban en esos territorios.
Además hay que considerar como enmarcada dentro de la
diplomacia de la época la razón por la cual eran elegidos por el Comune
como Podestá de la ciudad a veces miembros de la casa gobernante de
137
-Si bien ya para esa época muchas ciudades en Italia optaban por contratar milicias mercenarias mientras
sus ciudadanos se ocupaban en otros asuntos.
138
-En octubre de 1288 Venecia libera de impuestos a la madera (200 tablones) que la ciudad de Ancona va a
usar para construir barcos para defenderse de los corsarios triestinos. Archivio Diplomatico istriano. Vol. I Pág.
487
82

Gorizia y otras veces miembros de la nobleza veneciana y por otra parte
triestinos eran nombrados para comandar las milicias en Gorizia.
Una nueva situación también surgió en el año1295 para el Comune
ya que si como ya mencionamos la actuación del Obispo daba
cumplimiento a las antiguas aspiraciones de autonomía de los triestinos,
debemos considerar que a más de uno de los miembros de las 13 Casate
o algún noble triestinos se le debe de haber ocurrido la idea que esto
podía ser un primer paso para obtener el poder total de Trieste, como de
hecho estaba ocurriendo en muchas otras ciudades italianas y donde se
estaban estableciendo Signorie hereditarias obteniendo luego el
beneplácito del Papa o del Emperador.
Puede ser que los miembros de las 13 Casate que habían siempre
tenido relevancia en los asuntos triestinos y que dentro del régimen
comunal pertenecían al consejo de la ciudad estaban satisfechos con su
situación pero otros miembros de la nobleza, que habían logrado a lo
largo de los años obtener beneficios principalmente a través del comercio
y no por nacimiento, seguramente mantenían aspiraciones de mayor
poder y aquí debemos abrir un paréntesis y considerar los sucesos de la
política italiana a partir del siglo XIII.
En Italia, después de la muerte de Federico II, se incrementaron
las tendencias expansionistas de varias de las ciudades más poderosas
(Milano, Firenze, Pisa, Verona) y ese proceso fue acompañado del
declinar del gobierno comunal siendo éste sustituido por el dominio de un
Señor y su familia.
El proceso en muchos casos se debió a que la burguesía que
había llegado al gobierno de las ciudades no había logrado garantizar ni
la justicia ni la estabilidad política a sus ciudadanos.
Por ello el pasar de un Podestá a un “Señor” a partir de la segunda
mitad del siglo XIII fue algo casi natural; la burguesía decidió delegar en
el podestá poderes cada vez más amplios o en otros casos los poderes
amplios fueron concedidos al miembro más relevante de una familia de
prestigio.
83

El gobierno personalista se fue así afianzando utilizando estatutos
unitarios y centralizadores dentro de la tendencia más general de la época
en Europa de ir hacia la formación de estados con monarquías
autoritarias.
Este proceso de unificación político-administrativa terminará por
obtener el reconocimiento del Emperador o del Papa mediante el
nombramiento del “señor” como vicario papal o imperial y de tal modo se
reconocía tal dignidad como hereditaria y por derecho salía de cualquier
tipo de control popular.
A pesar de la situación anteriormente descrita y que podemos
considerar como común en Italia durante los siglos XIII y XIV, lo mismo no
había sucedido en Trieste, probablemente porque la formación e
independencia definitiva del Comune fue algo tardía.
Sin embargo estudiamos un episodio de principios del siglo XIV
que se puede enmarcar en el tentativo de establecer una Signoria por
parte de un miembro de la nobleza, Marco Ranfo de la familia de los Ranfi
quien era un noble triestino, pero no un patricio de la ciudad por no ser
miembro de las 13 Casate y como ello descendiente de los Decuriones
que gobernaron la ciudad al desmembrarse el poder de Roma y antes del
poder del Obispo.
Esta situación a nuestro apreciar puede tener varias lecturas: por
un lado la más banal sería el considerar que una familia proveniente de la
nobleza vieja de Trieste 139 en un dado momento del siglo XIV, inspirada
en los acontecimientos italianos, decide lanzarse la aventura de tomar el
poder por las vías de hecho.
No le faltaban los ejemplos a seguir, a la muerte de Federico II se
habían formado dos signorie en Italia del Norte: la de los Estensi en
Ferrara y la de los Da Romano pero a fines del siglo XIII, se generalizó el
dar el poder por un periodo largo de años o de por vida a un ciudadano
139
-La casa de los Ranfi es conocida a través de muchos documentos triestinos desde principios del siglo XI.
Esto da para considerar que pueden haber sido de los primeros en obtener de los Obispos una investidura
feudal. Sin embargo hay que señalar que el apellido Ranfi no es de origen triestino o istriano; el origen del
nombre parece ser Ramph luego latinizado en Ramphus por lo que podrían haber llegado a Trieste y
establecidos como feudatarios por algún Obispo para el cuidado de alguna propiedad; de hecho cerca de
Trieste existió una localidad de Raifemberg o Ramplember.
84

con el titulo de Podestà o Capitano del popolo o Signore. Por ello es que
en el siglo XIV nos encontramos a los Scaligeri en Verona, los Della Torre
primero y luego los Visconti en Milano, en Mantova los Bonaccolsi, en
Treviso los Da Camino, en Rimini los Malatesta, en Urbino los Montefeltro.
No es por lo tanto de extrañar que algún miembro de una familia
prominente como lo eran los Ranfi, en una ciudad próspera decidiera
seguir el ejemplo y tratar de instaurar su propia dinastía.
La trayectoria política de la familia Ranfi entre el siglo XIII y el siglo
XIV fue envidiable y de ella tenemos noticias a través de la crónica del
historiador Pietro Kandler: 140 en documento del año 1202 aparece un V.
Ranfo firmando el juramento de fidelidad a Venecia, sin cargo público,
sólo como ciudadano triestino.
Más adelante en el año 1253 Giovanni Ranfo aparece en
documentos como juez y luego en 1257 aparece un Andrea Ranfo como
juez. A partir del año 1288 aparece Marco Ranfo en distintos documentos
y cargos públicos: en 1293 es embajador donde Mosca Della Torre en
Milano, en 1295 es embajador donde el Doge de Venecia Enrico Dandolo;
a principios de 1304 aparece en la Curia entre los vasallos del obispo y a
finales del año es nombrado Vicario presidente de la Curia de los Pares
feudatarios del obispo de Trieste 141 . En 1311 aparece Marco Ranfo como
juez del Comune de Gorizia y el día 29 de marzo de 1313 como testigo en
una sentencia de la que su hijo Giovanni Ranfo es juez. Además hay que
mencionar que Marco Ranfo desde 1288 comerciaba con Venecia y el
Friuli y era dueño de varios barcos.
También hay noticias que se refieren a préstamos otorgados a los
prelados de la catedral de Trieste por lo que definitivamente debemos
considerar a los Ranfi como una familia poderosa y por eso es que
asombra cuando en documentos de marzo 1314 aparece Marco Ranfo
muerto sin mayores explicaciones.
140
-KANDLER, Pietro. Storia del Consiglio dei Patrizi. Trieste 1858. Editado por G. Cervani, 1972
141
- Archivio diplomatico di Trieste.- Atti dei Vicedomini, Vol. XXXIX
85

Por eso es que los historiadores a partir del siglo XIX usualmente
hablan de “conjura” para dar una explicación a la desaparición improvisa
de Marco Ranfo y las duras condenas contra toda la familia y sus
allegados. Marco Ranfo muere, su hermano Giovanni y todos sus hijos
varones son condenados a muerte. Las hijas de Marco fueron
condenadas como adúlteras y expulsadas de la ciudad y la hija menor de
Giovanni fue dada en adopción.
Fue tan terrible la actuación de Marco Ranfo y su familia que para
hacer desaparecer su nombre el palacio de la familia fue destruido y se
mantuvo la prohibición de construcción sobre el terreno para escarmiento
de la población.
Además hasta en los primeros estatutos ciudadanos del año
1319 142 hay muchas referencias generales conectadas a la conjura pero
llaman la atención especialmente una, en el Libro I, rúbrica 38 donde
cuatro artículos se refieren específicamente a la familia: el primer articulo
especifica que será condenada a muerte cualquier persona que diera
auxilio o consejos a los Ranfi y a sus secuaces, les escribiera cartas o
recibiera cartas de ellos sin entregarlas al Comune.
El segundo artículo instituye el bando 143 contra los Ranfi. Estaban
indicados todos los Ranfi, hombres o mujeres, sus descendientes y sus
herederos así como sus secuaces y sus herederos.
El bando tenía que ser perpetuo y en caso que alguien cayera en
manos del Comune este se encargaría de hacerle (literalmente) cortar la
cabeza. El tercer artículo establece un premio de 400 liras (de la época) a
quien matara un Ranfi, 200 a quien lo entregue vivo al Comune y la
liberación de bando para quien matase un hombre de los Ranfi. El último
artículo se refiere a las hijas de Ranfi que son expulsadas de la ciudad sin
posibilidad de regresar. Además se ponían al bando aquellas mujeres que
salieran de Trieste para unirse a los condenados.
142
-KANDLER, Pietro. Statuta 1150 recte 1318. Trieste 1849. Biblioteca Civica di Trieste. Archivio
Diplomatico.
143
-Diccionario RAE 2006: Del fr. ban, y este del franco ban, con infl. de bando). m. Edicto o mandato
solemnemente publicado de orden superior. || echar ~. fr. Publicar un edicto o mandato.
86

Por todo lo anterior y a pesar de no tener información, por falta de
documentos que lo reflejen, con respecto a cual fue el fin de la familia
Ranfi, si ellos o sus allegados muriendo lejos de la ciudad, por causas
naturales o fueron apresados y ejecutados o que sucedió finalmente con
ellos, debemos insistir en que los Ranfi debieron hacer algo muy
deplorable para los parámetros de la época contra el Comune, (como el
querer disolverlo para crear su propia Signoria) para merecer una
venganza tan terrible como lo fue la aniquilación total de la familia y sus
descendientes siendo esto establecido por ley en los estatutos de 1319
primero y luego mantenido en los nuevos estatutos del año 1350 y en los
del año 1365.
Otra hipótesis a considerar es que detrás de los acontecimientos
estuvieran los venecianos. Podemos pensar en esto ya que para Venecia
no era muy importante la relación de dependencia feudal que pudiera
existir con Trieste.
Los venecianos tradicionalmente buscaban controlar las ciudades
para limitarlas en sus movimientos comerciales y así evitar la
competencia; dejaban el gobierno de las ciudades en manos de sus
habitantes y se limitaban a solicitar libertad para sus mercaderes y para el
comercio de determinados artículos según el caso (sal, madera, hierro,
granos).
Les era suficiente obtener un juramento de fidelidad y que se
enseñara el pabellón de san Marco una o dos veces al año en la plaza de
la ciudad y de hecho la mayor parte de las guerras en el Adriático
terminaron obteniendo Venecia facilidades comerciales por parte de los
vencidos.
En el caso de Trieste los venecianos actuaron de tal modo en
varias ocasiones sin mucho resultado además para la ciudad no era
suficiente tener solo la autonomía comunal, Trieste no podía aceptar que
se le quitara el comercio porque habría representado su fin y decadencia.
87

Conociendo esto, entonces se puede conjeturar que los venecianos
podían haber estado interesados en tener en el lugar de más poder de la
ciudad un personaje subordinado a ellos y siendo que los triestinos no
hubieran aceptado tener un señor que no fuera nativo de Trieste, Marco
Ranfo constituía un buen prospecto.
A primera vista se podría pensar que el hecho que los venecianos
controlaran el comercio de Trieste hubiera causado un perjuicio a los
Ranfi por ser ellos comerciantes y dueños de barcos que enviaban con
sus cargas por todo el Adriático.
Pero hay también que pensar que los venecianos estaban en
condiciones de ofrecerles facilidades comerciales adicionales, como
dejarlos ser intermediarios o establecerles algún tipo de facilidad de
mercadeo si se hubieran inclinado hacia Venecia. Indudablemente para
una familia de las más ricas y poderosas de la ciudad un tal ofrecimiento
debe de haber sido muy atractivo y se puede pensar que si el Comune
hubiera tenido conocimiento de una conjura para obtener el control de la
ciudad no hubiera actuado muy a la ligera contra los conspiradores.
Como sea que haya sucedido y a pesar de todas las sospechas
que no se pueden aclarar, lo que llama la atención es que justamente en
ese año 1313 el Doge Giovanni Superantio había solicitado a Trieste
renovar el juramento de fidelidad.
Sin embargo los triestinos dudaban en hacerlo y el Doge en un
escrito 144 protesta al Comune por la tardanza; esto nos da para pensar
que ya en Venecia se tenía conocimiento de la conjura y trataba de
evitarse el involucramiento en ella.
También hay que mencionar que en ese momento el Obispo
Rodolfo Pedrazzani se encontraba en Venecia, solicitando al Senado
veneciano ayuda para el retorno de sus dominios de Sipar y se puede
suponer que estaba también buscando ayuda con respecto a sus
prerrogativas perdidas en Trieste. De esto el porqué los triestinos
dudaban en ese momento el jurar fidelidad. Además en ese periodo se
encontraba como Capitán en Trieste el Conde Enrique de Gorizia por lo
que se sentían apoyados.
144
-Archivio diplomatico Istriano. 28 Mayo de 1313. Pág. 880
88

Una última hipótesis que hay tomar en consideración con respecto
a “la conjura de los Ranfi” es la que nos lleva a estudiar las ambiciones
del obispo Rodolfo Pedrazzani. Éste fue el elegido en el año 1302 y no
era originario de Trieste. Desde un principio se mostró muy interesado en
lograr la restitución por parte del Comune de todas las prerrogativas y
bienes concedidos por el Obispo Brisa de Toppo en el 1295. En primer
lugar reclamó que le restituyeran el castillo de Montecavo y en 1305 el
Comune acordó la devolución pero a cambio le pidió al Obispo Rodolfo
que aceptara la alienación de los derechos sobre la ciudad efectuada por
Brisa de Toppo; el Obispo entró en negociaciones pero en ningún
momento quiso ceder los derechos porque sostenía que originalmente no
se podían haber alienado los derechos sin consultar previamente a los
prelados triestinos y al Papa.
Con el pasar del tiempo la posición definitiva del Comune fue que
habría aceptado la jurisdicción del Obispo de acuerdo a la tradición pero
en ningún caso habría cedido la autonomía y las leyes que habían
establecido de modo autónomo. El Obispo por su parte, no cedió en su
posición de regresar a la situación de antes del 1253 ya que sostenía (y
con cierta razón jurídica) que tenía la razón en sus planteamientos.
Es en ese periodo que consideramos que el Obispo pudiera haber
conspirado con un personaje distinguido como lo era Marco Rango; de
hecho los Ranfi eran vasallos directos del Obispo.
Además en 1313 Marco Rango fue nombrado vicario presidente
de la Curia por lo que estaba en estrecho contacto con el obispo Rodolfo
y no habría sido nada sorprendente que los dos hubieran complotado
para el restablecimiento de las prerrogativas obispales.
Por último lo que hay que añadir a este episodio de “la conjura de
los Ranfi” y en consideración de lo poco que aportan los documentos es
que independientemente de cual hay sido la razón del castigo para Marco
Ranfo su familia y sus seguidores lo que podemos entender es que
pareciera como si los contemporáneos trataron de diluir cualquier
información al respecto y lo único que quedó en firme fueron los castigos
ejemplarizantes que se transmitieron de un estatuto ciudadano a otro.
89

B- Los enfrentamientos con Venecia.
En el siglo XIV la Republica de Venecia era la ciudad más rica y
poderosa de Europa. Tanta era la potencia y la seguridad de lo
venecianos que en Venecia no existían murallas para defenderla. De
hecho el Doge Marco Cornaro había hecho construir el Palacio Ducal
totalmente abierto, con pórticos y dirigido hacia la isla de San Jorge y el
mar abierto. Además, la ciudad, después de la toma de Constantinopla
había recibido los más preciados tesoros de esa metrópoli y Marino Zeno,
el primer podestá veneciano en Constantinopla había enviado
posteriormente a Venecia aún más riquezas.
La Serenísima Repubblica Veneziana negociaba con todo el
mundo conocido de la edad media: sus mercaderes llegaban a Londres,
Amberes, Sevilla, Marsella, Nuremberg, Buda y Pest. Los venecianos
compraban el algodón de Siria y Egipto, compraban pimienta, amoniaco,
clavos de clavel en Armenia.
En le Mar Negro tenían puntos comerciales donde recibían las
caravanas de mercaderes que venían de tan lejos como de la India y de
la China.
Proveían de monedas de oro a los sultanes y a los califas del
Levante y de África. A la vez Venecia exportaba drogas, aromas,
medicinas, vidrio, tejidos, pieles, jabón, cera y espejos. A bordo de los
barcos venecianos había casi siempre hombres de guerra, especialmente
ballesteros para defenderlos de los piratas; aproximadamente 3000
barcos constituían la flota veneciana, con 36000 marineros y en el
Arsenale trabajaban 16000 obreros.
Tanto era el poder de Venecia que cuando en el año 1202 el Doge
Enrico Dandolo que dirigía la cuarta cruzada, se presentó enfrente de
Pirano en Istria con una flota de cincuenta galeones, trescientos diez
barcos de transporte de pasajeros y ciento veinte barcos de carga con
todas las maquinas de asedio, para luego dirigirse a Trieste a pedir a la
ciudad el renovar el juramento de fidelidad, los triestinos obviamente no
estuvieron en condiciones de rehusarse y ese juramento impuesto pesó
mucho en los años siguientes.
90

Las relaciones entre Venecia y Trieste a través de los siglos habían
sido siempre algo difíciles; las dos ciudades, sobre todo entre los siglos
VII y X, habían competido por el comercio, sea el marítimo en el Adriático
como el de los territorios cercanos de Friuli, Istria, Dalmacia y Carniola.
Además Trieste poseía salinas lo que era considerado como uno de los
productos más preciados en la edad media.
La diferencia entre las ciudades rivales comenzó a hacerse
evidente a partir del siglo X cuando Venecia amplió sus comercios
marítimos alcanzando las costas del Levante, Constantinopla y el Mar
Negro. Además ya a partir de las cruzadas que se sucedieron desde el
siglo XI en adelante la potencia hegemónica de Venecia fue incontenible,
tanto que como ya mencionamos en el año 1204 fue por instigación de los
venecianos que los cruzados en lugar de dirigirse a Tierra Santa optaron
por tomar Constantinopla.
Es a partir de ese momento y por los siguientes tres siglos Venecia
creció comercialmente y militarmente sin pausa.
Este crecimiento de Venecia, sobre todo en los siglos XIII y XIV al
principio benefició Trieste ya que los venecianos tan ocupados como
estaban en obtener todas las riquezas posibles de Oriente y sus
mercaderes haciendo negocios en los más remotos lugares del mundo, 145
a veces no tenían tiempo para ocuparse de sus vecinos más cercanos.
Así que después de obtener juramentos de fidelidad (Trieste, Pola)
o de sumisión (Capodistria, Pirano) y de dejar bien establecida su área de
influencia y sus puntos de compra y venta, los venecianos no se
preocupaban mayormente por ellos.
En el caso de Trieste la obligación feudal que tenía la ciudad hacia
Venecia consistía en una renovación periódica del juramento de fidelidad,
que insistimos, no era un juramento de sometimiento ya que las
obligaciones de la ciudad consistían en enviar al Doge 50 odres de vino
para el aniversario de San Marco, el patrón de Venecia, mantener libre de
piratas y corsarios las aguas y las costas del golfo y exentar de impuestos
a las mercancías venecianas además de enarbolar el pabellón veneciano
en la misma fecha en la plaza de Trieste.
145
-Es emblemático señalar a Marco Polo y su familia como prototipos de los mercaderes venecianos.
91

Sin embargo con esto los venecianos preparaban el terreno para
en el futuro poder establecer derechos de soberanía sobre la ciudad y los
triestinos intuían el plan por lo que mal soportaban hasta las pequeñas
ofertas anuales que debían entregar al Doge.
Las hostilidades abiertas entre triestinos y venecianos comenzaron
hacia el año 1274 cuando en ocasión de la situación de incertidumbre que
se vivía en Istria en ese año y donde varias ciudades 146 de ello
Capodistria y Trieste se rebelaron contra los venecianos.estaban en
continua agitación por las hostilidades entre Alberto II, conde de Gorizia,
que tenía posesiones en Istria, el Patriarca de Aquilea y Venecia; a raíz
En el año de 1278 el conde Alberto II de Gorizia y el Patriarca se
unen en contra de Venecia, y Capodistria que no apreciaba al Patriarca se
entrega al Conde de Gorizia y lo nombra Podestá; sin embargo a fines de
ese año los venecianos toman esa ciudad y le destruyen los muros por el
lado del mar y construyen el castillo Leone.
Por otra parte mientras en Istria los conflictos continúan e inclusive
el conde Alberto II entra en conflicto con el Patriarca, los venecianos por
dos veces tratan de asediar Trieste sin suceso gracias a los auxilios del
Patriarca.
Finalmente en el 1281 se firma un tratado de paz entre los
venecianos, el Patriarca, el Conde de Istria Alberto y Trieste; este fue un
pacto que más bien se puede considerar un armisticio ya que en el
año1283 recomienzan las hostilidades cuando el Patriarca Raimundo se
une a Trieste, Muggia, Padova, Treviso y al Conte de Istria Alberto II en
contra de los venecianos. 147
En esta ocasión Trieste es tomada por los venecianos y debe
firmar una paz muy humillante, además la ciudad en el momento de firmar
la paz debe de actuar sola ya que su obispo Ulvino de Portis que estaba
presente en el acto de firma de la paz y que hubiera podido figurar como
mediador entre Trieste y los venecianos se abstiene de actuar como si la
actuación del Comune le hubiera sido indiferente.
146
-Nos referimos en particular a Capodistria, Parenzo, Cittanova, Pirano, Rovigno, Umago, S.Lorenzo y
Montona
147
-SCUSSA, Vincenzo. Storia Cronografica di Trieste. Pág. 62
92

Cabe mencionar que un personaje que estuvo presente como
Procurador por el Comune de Trieste fue Marco Ranfo de quien ya
hablamos acerca de su actuación.
En ese tratado de paz los triestinos quedaron bastante mal
parados: los venecianos impusieron costos en moneda muy altos a ser
pagados para una época en la que el dinero efectivo era escaso, además
pidieron una gran cantidad de rehenes, la entrega de las máquinas de
guerra para ser quemadas en la plaza de San Marco y además que la
ciudad destruyera las murallas por el lado del mar.
A pesar de esta derrota, nuevamente Trieste en el año 1286 está
en guerra contra los venecianos y después de unos primeros sucesos del
ejército del Patriarca los venecianos en 1287 toman Capodistria y más
tarde a finales del 1288 toman Muggia que se les somete definitivamente.
Trieste es nuevamente asediada pero resiste; el 24 de abril del año
1289 el Patriarca Raimundo unido al Conde Alberto II reúne un ejército
de cinco mil caballeros y treinta mil infantes en Mofalcone 148 y
nuevamente entran en conflicto con Venecia. Trieste que está siendo
asediada es ayudada por las tropas del Patriarca y la ciudad sigue
resistiendo.
Hay que mencionar la ciudad deberá seguir por un tiempo sola
contra los venecianos ya que Alberto II, por la muerte de su nieto en el
campo de batalla, abandona la guerra regresando intempestivamente a
Gorizia y el 6 de mayo el Patriarca Raimundo, solicitado por sus oficiales,
abandona la lucha y regresa al Friuli. Afortunadamente cuando la
situación es casi desesperada para la ciudad, al pedir nuevamente auxilio
al Patriarca y al Conde de Gorizia, este último se disculpa con el Comune
por haber partido de improviso y después de reunir una gran cantidad de
tropas el 7 de Junio se presenta a la vista de Trieste en el Carso.
Los venecianos por el gran ruido que escuchan, pensando que se
trata de un ejercito aún mayor al reunido en Abril levantan el asedio y
parten de regreso a Venecia. 149
148
-Unos 25 kilómetros de Trieste
149
-Scussa, Vincenzo. Storia Cronografica di Trieste. Div. XIV. Pág. 63.
93

Finalmente 1290 los venecianos son derrotados y en el 1291 se
establece la paz, con la promesa por parte de Venecia de pagar al
Patriarca 10.065.- ducados por las tierras de Istria ocupadas.
La primera mitad del siglo XIV fue un periodo de prosperidad para
Trieste; los enfrentamientos con Venecia fueron mínimos a pesar de que
la belicosidad del Comune fue en aumento y proporcional al florecer del
comercio ciudadano que estaba en plena expansión.
Tenemos noticias de de un primer enfrentamiento con Duino en
1303 y luego existe la firma de un acuerdo de paz en el año 1328 entre
Trieste y Ugon de Duino quien era en ese tiempo Capitano del Comune
de Gorizia 150 y que se encontraba junto con Enrique Conde de Gorizia en
conflicto con el Patriarca de Aquilea por lo que se solicitaba
indirectamente que Trieste no lo apoyara.
A pesar de este tratado Trieste si ayudará en algún modo al
Patriarca ya que en el año 1338 se firma un acuerdo de paz en
Monfalcone entre Enrique Conde de Gorizia y el Comune de Trieste.
Lo que es necesario aclarar es que a pesar de los roces y
escaramuzas en general se respiraba en Trieste un clima de paz y
prosperidad donde los triestinos buscaban progresar y enriquecerse
mientras el Comune, como órgano político buscaba su afianzamiento
definitivo como modelo de gobierno.
Dentro de ese clima de nuevos tiempos y progreso en el año de
1319 se establecen los primeros estatutos del Comune. 151
150
-Biblioteca Civica di Trieste. Archivio dei Vicedomini.
151
- El decreto de aprobación y publicación de los Estatutos de Trieste del año 1350 fue copiado del Prologo
del Doge Giacopo Tiepolo que se encuentra en los libros de los Estatutos Vénetos del año 1242. Lo que
cambia es donde se menciona “Ducado” se sustituye por Podestaria, San Marco patrón de Venecia es
sustituido por los cinco Santos protectores de Trieste y por último se cambian los nombres de los Sabios
consultados para la redacción del documento. Luego más adelante las diferencias entre el Prologo del Doge
Giacomo Tiepolo y el del Prologo del Podestà Giovanni Foscari se centran en las diferencias que existían entre
el jus veneto y el jus triestino.El Doge ordenaba que a falta de leyes explicitas se utilizara la analogía: de
similibus est ad similia procedendum, a falta de una analogía se utilizaría la costumbre: ad consuetudinem
approbatam y a falta de una tradición consuetudinaria se tenia que juzgar sicut justum et aequum eorum
providentiae apparebit. Todo esto porque los venecianos rechazaban el jus común y las leyes romanas
considerando que no habían sido redactas para la zona de las lagunas. Hasta 1253 no hubo mucha posibilidad
por parte del Comune de establecer leyes propias; algunas leyes penales se promulgaron frenando el poder del
Gastaldo y se reconocen porqué en los primeros estatutos comienzan con el termino Ordinamus. Estos
estatutos se registraron en un libro sin ningún tipo de orden o clasificación de tiempo. Se conoce también que
existió un libro inicial que se denominó posteriormente Liber veterum Statutorum; sin embargo este no ha
llegado hasta nuestros días y se conoce de su existencia por encontrarse la referencia al margen de los
estatutos reconocidos más antiguos del año 1319. Además existe la prueba de la existencia de ese libro
primitivo por su mención en un documento del año 1293, 151 en el cual se le ofrece la Potestaria a Mosca della
Torre. Pero el primer Código fue recompilado en el 1319 después de la conjura de los Ranfi consistía de cuatro
libros: forma municipal, jus penal, jus civil, finanzas y policía.
94

Estos serán renovados en el año 1350 y luego nuevamente en el
año 1365. También durante esos primeros 50 años del siglo XIV es que
Trieste se acercará más sea al Rey de Hungría que al Duque de Austria y
esto sucederá gracias a los intercambios comerciales de los triestinos en
abierta competencia con los venecianos. Además en el caso de los reyes
de Hungría, es especialmente Luís (El grande) hijo de Carlos I (Carlos
Roberto de Anjou) quien ayuda al Comune de Trieste ya que desde el año
1347 mantiene una guerra contra Venecia (que concluirá en el año de
1381 con la pérdida de la Dalmacia por parte de los venecianos).
Otro suceso que se origina en 1352 y que demuestra el crecimiento
de la potencia de Trieste es la solicitud de auxilio que hace el Podestá de
Muggia Enrique de Gallis de Padova el 19 de diciembre del año 1357 al
Comune di Cividale y quien refiriéndose a Trieste dice “… pro continuis, et
adeo fortibus insultibus inimicorum, tam per mare, quam per terram.” 152
Hay que recordar que si Trieste estaba en guerra desde 1352 con
su vecino de Muggia, prácticamente era como enfrentarse a Venecia ya
que debemos recordar que Muggia se había entregado a Venecia en el
año 1288; pero en ese momento los venecianos estaban muy ocupados
defendiendo sus territorios de Dalmacia amenazados por los húngaros
por lo que necesitaban las vías terrestres del Carso libres y en ese
momento los carsos estaban ayudando al Patriarca de Aquilea que
apoyaba Trieste, impidiendo el paso de mercaderes por su territorio por lo
que a los venecianos les urgía se estableciera la paz. Sin embargo y a
pesar de firmar la paz Trieste misma tranca las vías del Carso y de Istria
obligando así a los mercaderes a pasar por la ciudad para sus negocios.
En el 1350 comienza la codificación de los estatutos con la intención que se vieran como las leyes establecidas
por un Príncipe, cuya figura era sustituida por la del Podestà pro Comune Tergesti; Es en ese año y en esos
estatutos que arranca un verdadero cuerpo de leyes soberanas. Los mencionados estatutos, establecían la
justicia de acuerdo a las leyes escritas en el mismo código, de acuerdo a las reformas efectuadas por el
Consejo mayor y de acuerdo a las costumbres aceptadas; en su defecto por el jus común romano basado en
las leyes Teodosianas, el cuerpo de leyes de Justiniano y las leyes bizantinas hasta el año 789. Además el
principio de los estatutos triestinos se encuentra en los edictos de Teodorico y las leyes emanadas por los
emperadores antes del interregno. En su recopilación actuaron dos insignes jurisconsultos de la época Antonio
Lanfrancoci de Modena y Nicolò del Ferro de Parma, vicarios del Podestà y cuanto hay en ellos de romano o
de véneto es difícil de establecer. Por último queremos mencionar que los estatutos del año 1365 establecidos
por el Podestá Giovanni Foscari son una imitación de los estatutos Vénetos del Doge Andrea Dandolo del año
1346.
152 -Archivio Diplomatico Istriano. Año 1357, pag.1042
95

Debemos por último recordar que Trieste en esos primeros 60 años
del siglo XIV se enfrentó a Venecia, a Duino, a Capodistria, a Muggia, a
Gorizia y hasta se enfrentó con el duque de Austria, todo en aras de
mantenerse libre e independiente; realmente nunca buscó aumentar sus
territorios u ocupar otra ciudad como base permanente.
C- El asedio, la capitulación y la entrega.
A pesar de los años de crecimiento, y de prosperidad que vivió
Trieste durante la primera parte del siglo XIV y aunque la paz se alternó
con periodos de guerra, siempre el destino de los triestinos estuvo en una
ruta de colisión con los venecianos y finalmente en el mes de mayo del
año 1368 se desataron los acontecimientos que llevarán a que Venecia
ocupe Trieste y que redunde poco más tarde en el final de la
independencia del Comune.
El primero de Mayo del año 1368 fue nombrado Doge de Venecia
Andrea Contarini y siguiendo la tradición mandó como embajadores a
Marino Venier y a Marco Marcello a Trieste para que presentaran el
estandarte de la Republica veneciana al Comune.
Por razones que se desconocen los jueces y los miembros del
Consejo se rehusaron a izarlo y reconocerlo, y este hecho que ya por si
solo constituía un agravio notable contra Venecia, se incrementó por otros
acontecimientos que podían haber sido considerados menores.
Venecia mantenía una galera navegando desde la laguna
veneciana hasta cerca de Pola en Istria en un papel que actualmente se
consideraría como de guardacostas, y además tenia ordenes estrictas de
abordar los barcos triestinos por la fama que tenían de contrabandistas. 153
Éstos por su parte y principalmente por su descontento, siempre
que podían se escapaban burlando a los venecianos. En esos primeros
días de mayo, la galera veneciana encargada de la vigilancia de las
costas trató de detener un barco de carga triestino en las aguas cerca de
Duino que llevaba forraje para los animales desde el Friuli hacia Trieste.
153
-LAUGIER, Marc Antoine. Storia della repubblica di Venezia dalla sua fondazione sine al presente…
Venecia, Editores C. Palese e G. Storti, 1767. Libro XIV, pág. 124
96

De acuerdo a Marc Antoine Laugier el capitán triestino rehusó
dejarse abordar ya que debajo del forraje llevaba un contrabando de sal
para Trieste, entonces los venecianos por la fuerza abordaron el barco
matando a su capitán y secuestrando el barco y la carga. 154
Los triestinos entonces, molestos, decidieron vengarse y durante la
noche abordaron la galera veneciana matando el capitán veneciano y
algunos miembros de la tripulación liberando luego el barco triestino y
llevando la carga a su puerto.
Al llegar la noticia de los sucesos a Venecia, el Doge y el Senado
se molestaron sobremanera; el Comune imaginando la molestia
veneciana mandó inmediatamente dos embajadores: Facina de Canciano
y Francesco de Bonomo 155 encargados de negociar la paz.
Pero las solicitudes venecianas fueron exageradas aún para los
términos de esa época: pretendían la restitución del barco triestino con su
carga, la entrega del armador del mismo, el pago de los costos, la entrega
del líder de los que atacaron en la noche la galera veneciana, la entrega
de los jueces triestinos para exiliarlos por seis meses si hubieran sido
culpables de ayudar en el hecho y la entrega de doce miembros del
consejo a ser escogidos por los venecianos como rehenes para hacerlos
responsables de los sucedido.
Por último solicitaron que fuera aceptado el izar el pabellón de San
Marco sobre el palacio comunal a cada elección de doge y en los días de
semana santa y el día de San Marco. 156
Los triestinos entendiendo que se abría la perspectiva de una
nueva guerra contra Venecia decidieron ganar tiempo, aceptando por un
lado los términos de la paz y buscando por otro un aliado poderoso, a la
par que comenzaron a reforzar los muros de la ciudad y a preparar las
armas.
154
-Si bien la referencia se encuentra en la Historia de Venecia de Marc Antonine Laugier, pensamos que esta
fue la versión veneciana, ya que una ciudad como Trieste que poseía salinas no necesitaba contrabandear sal
desde el Friuli hasta su territorio. Pensamos entonces que nos quedan dos posibilidades: o bien el barco
triestino estaba llevando sal de contrabando “hacia” y no “desde” el Friuli. O bien la carga de contrabando
podía consistir de granos y harina que Trieste usualmente compraba en el Friuli y que trataba de pasar sin
pagar los impuestos venecianos.
155
-Archivio diplomatico di Trieste. Atti della Vicedominaria
156
-Ver documento anexo M. Este documento reviste especial importancia ya que reúne todos los pactos
firmados entre la República de Venecia y el Comune de Trieste.
97

Cuando Lodovico Falier, veneciano, llegó a Trieste como el
Podestá establecido en los términos de paz y con la intención de izar
inmediatamente el pabellón veneciano el consejo del Comune no lo
reconoció y declararon que esperarían el regreso de los nuevos
embajadores enviados a Venecia con nuevas condiciones. Sin embargo
los venecianos al conocer la actitud del Comunes y de los triestinos,
quienes de acuerdo a lo que dice Marc Antoine Laugier 157 : “…i triestini
volendo sostenere la loro ribelione, avevano lacerato e calpestato lo
stendardo della Repubblica; che avevano implorata la assistenza dei
popoli vicini della Carniola, che loro avevano somministrato truppe e
munizioni; e che si occupavano con fervore a riparare le fortificazioni della
loro cittá per metterla in istato di difesa” 158 decidieron no perder tiempo.
Enviaron Creso Molin al mando de doce galeras y a Domenico
Michiel quien venía de desempeñarse exitosamente en la guerra en
Chipre al mando del ejército. Estos llegaron a la ciudad a principios del
mes de Diciembre del 1368.
Los triestinos mientras tanto, habían hechos los preparativos
posibles necesarios a un largo asedio: habían hecho acopio de
municiones, fortalecido las torres, acumulado animales y granos en la
ciudad y el Comune había llamado a todos sus ciudadanos a que
acudieran a la defensa de la ciudad sitiada.
Los primeros seis meses del asedio están descritos en las cartas
que mandó Domenico Michiel al doge Contarini 159 En ellas se refleja una
situación nada favorable a los venecianos: entre diciembre y enero a
causa del clima lluvioso y frío se dieron tantos casos de deserción dentro
del ejército veneciano que Michiel solicita que los refuerzos que le
manden no sean de tropas alemanas 160 sino compuesto por venecianos.
157
- LAUGIER, Marc Antoine. Storia della repubblica di Venezia. Libro XIV. Pág. 125
158
- “…Los triestinos queriendo sostener su rebelión habían destrozado y pisado el estandarte de la República;
que habían implorado la asistencia de las poblaciones cercanas de la Carniola quienes le suministraron tropas
y municiones; y que se ocupaban intensamente a reparar las fortificaciones preparándolas para la defensa.”
(traducción nuestra)
159
-CAPRIN, G. Il Trecento a Trieste. Pág. 235/236 provenientes de G. B. di SARDAGNA, Lettere del Doge
Contarini e del capitano generale Domenico Michiel, 1368-1369. En Archeografo Triestino. Vol. VIII y IX.
Trieste, 1881-1882.
160
-Mercenarios.
98

Las armas de madera (ballestas y arietes) se estában pudriendo y
necesitan ser reparadas. Los triestinos seguían muy belicosos saliendo de
la ciudad para atacarlos y causando destrucciones con su maquinaria de
guerra. Para el mes de Marzo la situación está tan mal que solicita
permiso para arrasar el territorio circundante a la ciudad para evitar que
lleguen alimentos a ella. También en ese mes llegan cinco consejeros
militares para decidir si hay que tomar por asalto la ciudad. En Abril y a
pesar que el arrasar los campos a dado algún resultado los consejeros
establecen que no hay posibilidades de tomar Trieste por la fuerza; hay
que resaltar que a Michiel le llegan suministros a través de Nicola de
Trento para sus armas de fuego. En el mes de Julio del año 1369 Michiel
viene sustituido por Paolo Loredan y este decide tomar medidas más
drásticas en contra de los triestinos para doblegarlos. De hecho proclama
que “…che chiunque fosse trovato a portar viveri, passati gli anni
quattordici, se uomo gli siano cavati gli occhi, se donna le sia tagliato il
naso.” 161
Para ese momento la situación en Trieste es difícil, los tres
Rectores 162 de la ciudad habían solicitado la ayuda de los Señores de
Carrara, de los Visconti, del Patriarca, del rey de Hungría todos ellos
enemistados con Venecia pero nadie había acudido.
Finalmente el 13 de agosto del 1369 solicitan la ayuda del duque
de Austria Leopoldo III de Habsburgo y éste consiente en auxiliar Trieste
de modo que el 31 de agosto de ese mismo año se establece el
documento 163 por el cual los triestinos se convierten en súbditos de los
Duques Alberto y Leopoldo de Austria.
El Duque Leopoldo envía unos diez mil infantes y una cantidad de
caballeros a liberar la ciudad y el día 10 de noviembre se enfrentan a los
venecianos; al principio parece que la suerte está a favor de los
austriacos pero al atardecer del mismo día los venecianos reciben ayuda
desde las naves y los austriacos retroceden.
161
-CAPRIN, G. Il Trecento a Trieste. Pág. 237
162
.Cargos que se establecian en la ciudad por causas mayores. Para ese año 1369 y a causa del asedio son
Rectores: Ottobono de Giuliani, Giovanni de Cigotti y Francesco Bonomo, todos ellos miembros de los patrizios
triestinos (13 Casate).
163
-Ver documento anexo N
99

Siete días después, los triestinos que ya no tenían nada que comer
y habían sufrido muchas bajas deciden entonces negociar con los
venecianos y el día 17 de Noviembre aceptan rendirse y abren las puertas
de la ciudad para que Paolo Loredan entre al frente de 1000 ballesteros y
400 caballeros. Lo último que hay que señalar es que después de un
asedio de once meses y una guerra de destrucción, los venecianos no
pudiendo tomarla por la fuerza, doblegaron por el hambre a una de las
pocas ciudades que se atrevió a desafiar su potencia.
El acto de sumisión de la ciudad al doge veneciano especificaba
entre otros puntos lo siguiete: los ciudadanos tenían salva la vida y sus
bienes. Los que habían sido puestos al bando por el Comune podían
regresar. Los extranjeros y los soldados mercenarios podían irse con sus
bienes y quedaba a facultad del doge el concederles permiso para
quedarse a vivir en Trieste.
Se perdonaban las ofensas o daños sucedidos en cualquier tiempo
o en cualquier lugar, por cualquier Jus o causa, sea por parte de Venecia
que por parte de Trieste. Se facultaba a los ciudadanos triestinos a
gozar y tener en propiedad sus bienes muebles e inmuebles situados
dentro o afuera de Trieste y poderlos obligar o enajenar. Se conservan
los estatutos, eliminando lo referente a los venecianos, dejando la facultad
de aumentarlos, diminuirlos, corregirlos, interpretarlos y aclararlos al
Podestá.
Los venecianos brindaban protección y defensa a la ciudad, a su
territorio y a sus ciudadanos en contra de cualquier persona o potentado y
se excarcelaban los ciudadanos prisioneros de Venecia.
De acuerdo a lo establecido en la Capitulación los venecianos
tomaron posesión de Trieste el 18 de noviembre; 164 la ciudad fue ocupada
por las tropas venecianas y luego se procedió a desarmar a los
ciudadanos, de ellos cuarenta fueron hechos prisioneros y enviados a
Venecia.
164
-Ver documento anexo O
100

A pesar de esto los vencedores no derramaron más sangre
triestina ni tomaron venganza; de hecho los cargos inferiores al de
podestá quedaron en mano del Comune y del Consejo y finalmente hay
que mencionar que el doge anticipó veinte mil liras a los triestinos para
ayudar a la recuperación de los campos que habían sido arrasados
durante la guerra amarrando así la ciudad económicamente.
Otro acto inmediato de los venecianos fue pagar a Leopoldo duque
de Austria 75000 florines de oro a cambio de su renuncia sobre sus
derechos soberanos por el sometimiento de Trieste el 31 de agosto del
1369 a él. Esta era una cifra enorme y nos puede dar medida del valor
económico de Trieste.
Por ejemplo el censo anual que la Republica de Venecia pagaba al
Patriarca de Aquilea por las ciudades de Istria desde Capodistria hasta
Pola, era de 2000 liras; la indemnidad que habían establecido con el
Patriarca por todo el Friuli, que era una provincia muy amplia sumaba
40,000 liras.
En los años siguientes Venecia mantuvo tropas en Trieste y
construyó el castillo de San Giusto que domina desde la cima de la colina
a toda la ciudad; la dominación de los venecianos durará once años, ya
que en 1380 los genoveses llegan a Trieste y apresan al Podestá
veneciano Donato Tron quedando luego la ciudad otra vez libre. Sin
embargo, los tiempos habían cambiado y Trieste se encontró que dentro
de los acontecimientos italianos había quedado totalmente aislada. No
tenia buenas relaciones con sus vecinos y dentro de la misma ciudad
existían divergencias por lo que al final el Comune opta nuevamente por
dirigirse a Leopoldo de Austria y el 30 de Septiembre de 1382 se firma el
acuerdo en la ciudad de Granz; como punto final el Duque Leopoldo
sustituye el Podestá triestino con un Capitán de su elección.
101

Conclusiones
En nuestra paginas introductivas, dejamos establecido que el
asunto central de nuestra investigación consistía en el análisis de un
problema específico de la ciudad de Trieste, como lo fue la necesidad de
sus ciudadanos de ser independientes entre los años de 1295 y 1369,
buscando la manera de sobrevivir frente a las ambiciones políticas,
hegemónicas y expansionistas de sus vecinos. Además hay que
mencionar que si bien el trabajo puntualizó especialmente la
reconstrucción de la sociedad y las instituciones del periodo tratado,
también se examinó el cuadro urbanístico y económico de la ciudad, junto
con los movimientos políticos típicos de la época.
Nos enfocamos entonces al análisis de la región histórica en la que
se circunscribe la ciudad buscando integrar nuestra investigación a la
tradición historiográfica del medioevo europeo. Además los temas fueron
establecidos teniendo como marco referencial y metodológico la lectura
de una colección amplia de fuentes que en muchos casos localizamos
digitalizadas por instituciones de reconocida seriedad, además de la
utilización de los textos clásicos de la historiografía medieval europea
junto con obras de historiadores del siglo XIX.
Queremos aquí señalar que a pesar que en general se puede
considerar que la lectura de los distintos capítulos delinean las
conclusiones a las que hemos llegado, consideramos que es necesario
establecer algún tipo de sumario de lo logrado para poder tener una visión
más amplia del trabajo en conjunto. En función de lo anterior es que
estimamos pertinente no volver a relatar detalladamente el contenido de
cada una de las partes de esta investigación sino más bien señalar
sumariamente los puntos más importantes considerados y las
observaciones finales a las que hemos llegado.
A tal respecto y para delimitar nuestro campo de investigación,
establecimos un hilo conductor que partiendo desde el IV siglo d. C. nos
llevó al siglo XIV.
102

Es así como a través del primer capitulo del trabajo analizamos
someramente la Trieste Romana extendiéndonos luego al análisis de las
invasiones bárbaras, al auge del Patriarcado de Aquilea y resaltamos
aspectos ciudadanos del siglo IV al XII.
En el segundo capítulo definimos quienes eran los vecinos
poderosos de Trieste, señalando en primer lugar a Venecia y analizando
su desarrollo comercial y militar además de las causas primordiales que
llevarán a los conflictos con los triestinos en el siglo XIV. Nuestro análisis
nos llevo a observar también a los reinos de Croacia y Hungría,
importantes como vecinos para el comercio triestino pero causa al mismo
tiempo de preocupaciones por sus expansiones hegemónicas en Istria.
Por último estudiamos los orígenes de la casa de Habsburgo que a
partir del siglo XIII comienza a perfilarse como la potencia emergente en
Europa y que más tarde en el siglo XIV se convertirá en un factor decisivo
para Trieste primero apoyando la independencia y luego aceptando el
sometimiento de la ciudad.
Es en este capítulo que el cuerpo de nuestro trabajo se delinea
observando como los ciudadanos de Trieste comenzaron a considerar
que el mantener la ciudad independiente, era la mejor solución para
sostenerse en equilibrio dentro del panorama conflictivo de la región
tratada del siglo XIV.
El tercer capítulo lo dedicamos a un extenso estudio del Comune y
para ello establecimos en primer lugar su origen y su patrón evolutivo
hasta el siglo XIV, en otras palabras el porqué se llego a establecer un
Comune independiente en Trieste. Seguimos con la determinación del
entorno físico así como de las fronteras del territorio del Comune para
luego detallar las divisiones internas determinantes de la estratificación
social. A continuación tratamos las características de los propios
ciudadanos y sus instituciones sea desde el punto de vista de la
composición y división, que de las dinámicas sociales resaltando las
continuidades y variaciones.
103

En el estudio de las instituciones del Comune se puso particular
atención en la reconstrucción de su administración y de los magistrados.
Nos centramos luego en considerar los factores comerciales y la
influencia en ellos, a nuestro parecer decisiva, de la peste negra del año
1348, y que en última instancia causaron que, los esfuerzos diplomáticos
del Comune para mantenerse independiente y evitar el someterse a unos
de sus vecinos, fueran inútiles. Entendimos así como el punto de ruptura
con Venecia se alcanzó en el año 1368 cuando los venecianos
reaccionan a una crisis menor con una respuesta atípica y
desproporcionada pasando a las vías de hecho contra los triestinos
siendo esta la consecuencia final de la competencia comercial que
mantenían las dos ciudades desde hacia siglos. Como consecuencia de lo
anterior entonces señalamos como los triestinos se preparaban para la
defensa de su ciudad y su territorio.
Finalmente en el cuarto y último capítulo nos dedicamos a
puntualizar los antecedentes del conflicto que llevan al asedio del año
1368 y que concluirá con la independencia del Comune. Para ellos
analizamos en primer lugar una situación puntual de la vida ciudadana,
con características muy peculiares, como lo fue la conjura de los Ranfi y
que nos abrió las puertas a consideraciones diversas sobre quien podía
estar detrás de los conflictos internos de Trieste. A continuación
presentamos un exhaustivo estudio de los enfrentamientos entre
venecianos y triestinos poniendo un especial énfasis en las diversas
alianzas y estrategias características del siglo XIV. Concluimos este
capítulo describiendo los sucesos del asedio con la sucesiva capitulación
y haciendo mención al posterior sometimiento de Trieste a los Habsburgo.
Una vez finalizada la estructura de nuestro trabajo y más allá de lo
expuesto en los distintos capítulos, pudimos darnos cuenta que la ciudad
de Trieste, si bien por un lado reunió varias de las características típicas
de un Comune medieval italiano, es también cierto que por otro lado ese
Comune tuvo ciertas peculiaridades que lo llevó a distinguirse de otros.
104

Esas particularidades en nuestra opinión fueron más de fondo que
de forma ya que desde afuera el observador podría decir que el
nacimiento, la estructura feudal, las instituciones sean del primer periodo
entre los siglos X y XIII que del siglo XIV, eran parecidas o iguales a la de
muchas otras ciudades que se establecieron como Comuni durante la
edad media en la Italia del Norte, sin embargo la peculiaridad observada
se extiende en observar la acción de los triestinos de acuerdo a cada
situación que enfrentaron y esto nos dio la bases para nuestras
consideraciones en cuanto al fondo detrás de esa forma de actuar.
Para aclarar más nuestra idea, hay que señalar por un lado lo difícil
que resultaba vivir cerca de una las potencias de la época: Venecia era
una ciudad volcada a asumir un rol protagónico en el Mediterráneo, sea
comercial que militar y al mismo tiempo consideraba al Adriático una
suerte de lago en su “patio trasero”. El tratar de competir con esta ciudad,
aún solo en escala menor comportaba un riesgo bastante considerable,
que pocas ciudades asumieron y varias de ellas resultaron destruidas en
el intento. Se trataba entonces el decidir cuidadosamente como actuar y
para los ciudadanos de Trieste, orgullosos de su pasado romano y que
por antigüedad se consideraban superiores a los venecianos, esta
situación comportó un problema no indiferente. Además considerando que
los triestinos desde el siglo IV, a pesar de las prerrogativas de sus
Obispos y del juramento de fidelidad a Venecia, primero en el siglo X y
luego la renovación del mismo en el siglo XIII, siempre mantenían una
independencia al menos de facto.
A partir del siglo XI también por el oeste comenzó a presentarse
una situación preocupante para Trieste, primero por las expansiones en el
interior de Istria del reino de Croacia que ambicionaba ocupar todas las
ciudades de la costa incluyendo Trieste y luego por el reino de Hungría
que se sustituye a los croatas en el siglo XII como factor hegemónico en
la región y con las mismas ambiciones de llegar al Adriático.
105

Finalmente a partir del siglo XIII aparece en la frontera norte del
territorio de la ciudad un nuevo protagonista en la historia de esa región:
los Habsburgos que se están perfilando como el nuevo factor a considerar
en la geopolítica europea de fines de la edad media.
Es por todo lo anterior que llegamos a la conclusión que a finales
del siglo XIII la autonomía y casi independencia que había nacido como
producto del orgullo y la ambición triestina se transformó en una
necesidad; si los ciudadanos de Trieste querían conservar esa libertad de
movimiento comercial e independencia institucional que habían logrado a
duras penas a través de los siglos no les quedaba más remedio que
mantenerse en un punto de equilibrio entre los vecinos poderosos.
De allí podemos entender porqué Trieste firma un juramento de
fidelidad a Venecia pero mantiene corsarios en el Adriático y saquea
bienes venecianos o de ciudades aliadas de ellos. Mas tarde los triestinos
intercambian productos con Venecia y su entorno pero también tienen
relaciones comerciales con los húngaros, enemigos de Venecia; Luego en
el siglo XIV llegamos a la paradoja que en la ciudad se nombra como
Podestá de la ciudad primero a Enrique, conde de Gorizia, ciudad en el
área de influencia de los Habsburgo y luego como sucesor se nombra
Andrea Dandolo, miembro de una de las familias patricias de Venecia y
que será elegido mas tarde Doge. A nuestro parecer todo esto nos
demuestra las habilidades de la diplomacia triestina y los esfuerzos del
Comune para mantener su autonomía dentro de un precario equilibrio.
Adicionalmente a lo señalado, al analizar como en el siglo XIV
Trieste busca establecer su influencia militar y se enfrenta en alianza con
otras ciudades y con el Patriarca de Aquilea a Venecia. Además en el
transcurso del mismo siglo tiene conflicto menores con sus vecinos más
cercanos de Duino y Muggia además de escaramuzas con pobladores del
Carso. Todo lo anterior enfocado dentro de la óptica de los triestinos nos
llevó a considerar que el Comune buscó disuadir a los venecianos de
tomar realmente la ciudad por la fuerza ya que en ese caso habrían
enfrentado también al Patriarca, a Gorizia y hasta a los húngaros.
106

ANEXOS
107

ANEXO A
Donación por parte de Lotario II del dominio de Trieste a los Obispos.
8 agosto del año 948, Indicción VI dada en Pavía.
In nomine sancte et individue Trinitatis. Lotharius, divina favente Clementia, Rex.
Si sanctis ac Venerabilibus (locis) digna conferimus munera, anime nostre
proficuum esse non ambigimus. Quocirca omnium Sancte Ecclesie Dei fidelium
nostrorum, presentium scilicet et futurorum comperiat universitas, qualiter
interventu ac petitione Otonis Venerabilis Episcopi nobis dilecti fidelis, ac pro Dei
amore, animeque nostri parentis nostreque remedio, per hoc nostrum preceptum,
prout juste et legaliter possumus, donamus, concedimus, largimur, atque
offerimus Ecclesie Beate Dei Genitricis et Virginis Marie, Sanctique Justi Martyris
que Caput sunt Tergestini Episcopii, cui preest Venerabilis Vir Joannes
Episcopus noster dilectus fidelis omnes res juris nostri Regni atque Districtus et
publicam querimoniam, et quidquid publice parti nostre rei pertinere videtur, tam
infra eamdem Tergestinam Civitatem conjacentes, quam quod extra circuitum
circa et undique versus tribus miliarys portentis. Nec non et murum ipsius
Civitatis totumque circuitum cum turribus, portis, et porterulis, et quidquid, ut
dictum est, ad partem nostre rei publice inibi pertinere videtur; percipientes itaque
jubemus, ut nulla regni nostri magna parvaque persona in prelibata Civitate,
curaturam, aliquod vectigal aut aliquam publicam functionem exigere audeat,
neque de foris ut dictum est tribus miliarys undique versus portentis, nec alicujus
auctoritate Principis placitum custodiant, nec ante aliquem distringantur, nisi ante
pretaxatum Johannem Episcopum suosque successores ad partem predicte
Ecclesie vel eorum missos, tanquam ante nos aut ante nostri Comitis presentiam
palatii. Et quidquid nostre publice rei parti usque modo pertinuisse videtur ipsi
quos prediximus ad partem predictarum Ecclesiarum procurent in perpetuum et
fruantur, omnium hominum contradictione remota. Si quis igitur hujus nostri
precepti violator extiterit, cognoscat se compositurum auri optimi libras mille,
medietatem predicte Ecclesie atque eidem Johanni Venerabili Episcopo dilecto
fideli nostro suisque successoribus. Insuper cum Juda et Saphyra in eterno
incendio habeat punitionem. Quod ut verius credatur, diligentiusque ob omnibus
observetur, manu propria roborantes anulo nostro subter insigniri jussimus.
Signum Domini Lothary Regis Serenissimi, Brumineus Episcopus ac Vice
Cancellarius recognovit.
Datum octavo die Augusti, anno Dominice Incarnationis DCCCCXLVIII, Regni
vero Domini Lotharii Regis XVIII, Indictione sexta. Actum Papie feliciter.
108

ANEXO B
Confirmación por parte del rey Enrique IV a los Obispos de Trieste de las
libertades y jurisdicciones concedidas a ellos por parte de los reyes y
emperadores. 3 de enero del año 1040, Indicción VIII dada en Ratisbonda.
In nomine sancte et individuae trinitatis Henricus, diuina favente clementia Rex.
Si sanctis ac venerabilibus locis digna concessimus munera, tam anime
nostrae quam corpore proficuum esse minime ambigimus. Quo circa omnium
sancte ecclesie Dei fidelium praesentium scilicet et futurorum comperiat
universitas, qualiter nos interuentu ac petitione nostri dilecti fidelis poponis
patriarche nec non et cadlohi nostri dilectissimi cancelarii atque ob remedium
anime nostre parentumque nostrorum Adalgero sancte Tergestine sedis presuli
suoque episcopio in honore sancte Dei genitricis marie sanctique Justi martiris ibi
corporaliter quiescentis constructo ac dedicato omnia illa scilicet, Res, predia,
possessiones, familias que ab antecessoribus nostris regibus uel imperatoribus
per totam Istrie prouinciam seu loca eidem ecclesie praeceptaliter concessa seu
confirmata fuerunt, tam umagum siue fontanam Georgicam quoque cetera loca
simili modo donamus, confirmamus atque coroboramus prout juste et legaliter
possumus. Per hanc nostram regalem siue preceptalem paginam statuentes et
modis omnibus precipientes firmiterque iubemus ut in prescripta sancte
Tergestine sedis ecclesia siue episcopio tam in ejus plebibus quam monasteriis
titulis alysue ecclesiis domibus seu vrbanis siue rusticanis uel in prenominatis
locis aut in aliquibus eiusdem episcopij possessionibus nullus dux Marchio
comes vicecomes nullaque regni nostri magna paruaque persona placitum tenere
audeat aut eiusdem ecclesie massarios excusatos uel mendatos colones liberos
aldiones suos seu quosque super prefate ecclesie proprietatem residentes
quomodo distringere pignorare angariare nec non ad pretorium comitis ad
laborem costringere aut census reddibitiones donaria aliquo ingenio exigere
presumat sed liberos massarios excusatos uel comendatos quos legalis coactio
ad placitum querere exigite sine patrono aut aduocato suo nullus uenire
compellat: ut legalis intentio legali examine diffiniatur. Haec eadem etiam in
omnibus liberis et erimannis prefate ecclesie massariis quippe excusatis uel
comendatis et colonis omnimodis obseruari iubemus uidelicet ut ab eis nec
donaria reddibitiones pignorationes uel iniuste districtiones exigantur, sed
unusquisque quae regalis censura exigit a patrono suo ad placitum deducatur.
Tertiam partem quam reipublice debuerunt nulli comiti dent nisi eorum pontifici ne
pignorationis occasio aditum rapine depredatoribusque in aliquo prestet. Insuper
concedimus autem iam dicto Adalgero episcopo suisque successoribus ut
licentiam habeant undecunque potuerint homines attrahere et colocare super
ejusdem ecclesie terras ad comanendum et delaborandum.
Si quis igitur huius nostri precepti uiolator extiterit mille libras auri optimi se
compositurum nouerit dimidium camere nostre et dimidium sepedicto episcopo
sueque ecclesie. Et ut hec nostra regalis institutis stabilis et inconvulsa
permaneat hoc praeceptum manu propria roborantes sigillo nostro jussimus
insigniri.
Signum Domini Henrici tertii serenissimi et invictissimi Regis.
Kadelohus cancelarius uice herimanni archicancelarij recognouit.
Datum est tertio calendas Januarij indictione octaua anno dominice incarnationis
millesimo quadragesimo, anno Domini Henrici ordinationis duodecimo Imperij
primo. Actum in ciuitate ratisbona feliciter. Amen.
109

ANEXO C
El Obispo de Trieste Eirinicio concede el sitio de los SS Mártires de Trieste
al monasterio de S.Giorgio Maggiore de Venezia.
4 de Julio del año 1114, Indicción VII. Trieste.
In Nomine Dei aeterni Filij ejus Jesu Christi Sanctique Spiritus. Anno MCXIV
Imperante Dno. Nostro Henrico V die vero IV mensis Julij Indictione VII. Actum in
Civitate Tergesti. Cum Pontificalis Celsitudo Divinae Clementiae nutu ab ipso
Authore rerum omnium ad hoc instituta videatur, ut Pastores, et Rectores
Ecclesiarum Dei, quae per Orbis terrarum spatiumdifusae sunt oves, quae
dispersa fuerunt, congregentur in unum necessario duximus, quo, Pastor Ovem,
quae perdita fuerat ad Gregem super humerum reportare gaudeat.
Qua propter Herinicius Divino instinctu Tergestinus Episcopus, de Salute
Animarum providens, Loca Sanctorum Martyrum, quae eidem Civitati sunt
confinia, quae quasi destructa esse videbantur ad Salutis Portum, quasi Navim
passam Naufragium deducere cupio. Ego itaque praelibatus Episcopus
Tergestinus scilicet Herinicius plenam et incommutabilem Cartulam donationis
concedo tibi Tribuno Nobilissimo Abbati Sancti Georgij, et Stephani
Protomartyris, juxta Palatium Ducis prope Rivum altum tuisque successoribus,
atque Fratribus de praenominata Ecclesia Sanctorum Martyrum juxta Litus Maris
cum omnibus suis pertinentijs intus et extra istius Civitatis Tergestinae absque
ullo pretio, vel terreno lucro; sed solumodo pro Nostrae Animae Omniumque
Defunctorum remedio, et illorum qui illum locum ordinaverunt, ejusdemque loci
concedimus potestatem habendi, tenendi, gaudendi, fruendi, possidendi
perpetuis temporibus, et quidquid Vobis in eodem loco, vel in proprio Monasterio
aut in quocumque loco firmissimam potestatem habeatis. Ita tamen dico, quod
singulis annis in festo Sancti Justi Martyris cuius Sacratissimum Corpus in hac
Tergestina requiescit Civitate, quod est IV Nonas Novembris, XXIV denarios
Camerae episcopali persolvatis. Idem autem do, et concedo Vobis Supradictis ut
ibi servitium Dei facere debeatis et ordinare illos, qui, ibi debeant permanere;
Locum vero secundum vestrum posse deinceps debeatis honorare, et exaltare,
ut januam Coelesti Regni possitis intrare. Si quis vero quod fieri non credo nec in
futurum spero, Ego praenominatus Herinicius hujus Tergestinae Dioecesis
Episcopus vel aliquis de successoribus meis contra hanc Donationis Cartulam ire
tentaverit, aut corrumper vel molestare praesumpserit, aut aliquod praemium vel
debitum, aut jugum ibi nisi Defunctorum fidelium orationes habere vel imponere
voluerit, exceptis illis supradictis vigintiquatuor denariis, sicut praediximus, sciat
se compositurum auri purissimi libras tres, coactus enim Lege Romana hoc
solvat et pena soluta stabilis, firmaque persistet. Hac vero mea Donationis in sua
permaneat firmitate etc.
Signum manus Domini Herinici Episcopi Tergestini, qui hanc Donationis Cartam
scribere jussit. Signum manus Domini Almerici Vicedomini.
110

ANEXO D
El Doge Enrico Dandolo, moviéndose hacia la Cruzada exige juramento de
fidelidad por parte de Trieste.
26 octubre del año 1202, Indicción VI, Trieste
Anno dominice incarnationis millesimo CC secundo, indictione sexta. Actum in
civitate Tergestina, die quinto exeunte, mense Octubri.
Exeunte de Veneciis glorioso ac magnifico domino nostro H. Dandulo, dei gratia
Venetie, Dalmatie atque Chroatie Duce, qui in domini servitio et totius
Christianitatis ultra mare in copiosa navium, galearum, usiriorum ac militum
multitudine erat iturus. Altera vero die post egressum ejus de Venetia
potencialiter ac gloriose Pyranum applicuit. Nos vero homines Tergestinae
civitatis cognoscentes de ipsius domini ducis adventu, timentes etiam, ne forte
nobis ad merita responderet, qui ipsius gratiam amiseramus, viros utique de
melioribus civitatis nostre, videlicet Vitalem gastaldionem, Petrum iudicem,
Mauretum, Bonifacium, Dominicum de Antonia, Bernardum, Martinum de Of,
Vitalem de Bilissima, Diettemarum, Natalem de Azzo, Johannem de Jema,
Dominicum de Laurentio, Dominicum Mirizo, Wodolricum Mesalt, Lo. Mos,
Bernardum Zechigna, Leonardum Crescentium, Arthuicum Cacarinum, Martinum
de Lazera, Almericum de Ghenana, Ugolinum, Almericum dc Bilissima,
Almericum de Cono, Matheum de Aurelia, Blagdinum, Johannem de Venereo,
Albericum, Wismanum, Dedolricum, Johannem de Leonardo, Andream Rubeum,
Matheum de Contaffia, Dominicum Marcheso, Vitalem de Alderico, Johannem de
Ysola, Bertaldum, Andream de Marina et alios quam plures, ad ipsius
dominationis pedes duximus transmittendos: Qui de voluntate et consensu
omnium hominum dicte civitatis nos et terram nostram ac omnia nostra sue
potentie facere subditos, et omnia precepta domini Ducis remota omni occasione
jurarent. Et sic illi pro se et pro nobis omnibus juraverunt servare et servari
facere.
Memoratus vero dominus Dux tanquam vir christianissimus, et qui in dei servitio
ac totius Christianitatis iter arripuerat, non considerata nostrorum malitia nos ad
suam gratiam revocavit, precipientes legatis suprascriptis, ut cito ad civitatem
redirent nuntiantes, quod nos ad suam revocaverat gratiam, et quod se
prepararent ad ipsum honorifice suscipiendum.
Adveniente itaque eo in magna manu ac exercitu copioso ad civitatem
Tergestinam, recepimus cum ornatis sacerdotibus ac clericis, candelis accensis
et pulsantibus campanis, subponentes nos per omnia sue dominationis potentie.
Qui vero dominus Dux convocatis hominibus civitatis precepit, ut tale
sacramentum illi facere deberemus, videlicet quod, usquedum vixerit, simus
fideles; post decessum vero ejus similiter suis successoribus fidelitatem
servabimus. Et quod homines Venetiarum in personis et rebus in toto nostro
districtu securos sine datione aliqua haberemus, et quod servitia debita illi facere
deberemus, sicut alie civitates Ystrie faciunt, secundum nostram tamen
possibilitatem.
Et si contigerit, piratas vel alios predones a Rubino infra venire, nos illos persequi
et debellare debeamus. Et si capere eos poterimus, ipsi domino Duci eos
representari faciemus. Quod sacramentum faciendum nobis fuit valde
delectabile, et fecimus animo diligenti. Nomina vero eorum, qui juraverunt, haec
sunt, videlicet:
[sigue el nombre y ocupación de los ciudadanos firmantes del acuerdo]
111

Insuper etiam nos omnes homines Tergestine civitatis universaliter promittimus,
omnia suprascripta inviolabiliter conservare, et quod omni anno perpetualiter nos
et successores nostri vobis et vestris successoribus solvere debeamus vel solvi
facere urnas optimi vini puri de nostro territorio quinquaginta nostris espensis ad
ripam Ducalis Palatii in festo Sancti Martini. Et si contra hanc pactionis, cautionis
et promissionis cartulam ire temptaverimus, componere promittimus cum nostris
successoribus vobis et vestris successoribus auri obrici libras centum. Et hec
pactionis, cautionis et promissionis cartula maneat in sua firmitate. Hujus rei
testes sunt scilicet Dominicus Delfinus, Jacobus Quirinus, Jacobus Basilius,
Marcus Sanudo, Andreas Valleresso, Almericus Potestas Justinopolitane
civitatis, Matheus Sarracenus ejusdem civitatis, Almericus frater Sofie, et alii
quam plures.
Ego Andreas Diaconus, sacri palatii notarius, rogatus interfui, et manu mea
scripsi, complevi atque firmavi.
112

ANEXO E
Problemas de fronteras entre el Comune de Trieste y los Señores de Duino.
10 de junio del año 1139, Indicción II. Trieste.
In Nomine Domini Nostri Jesu Christi. Anno vero ab incarnatione ejusdem
MCXXXVIIII. Regnante Domino Nostro Conrado. Tergesti, die X exeunte Junio,
Indictione secunda.
Cum Lis et Contentio esset inter Commune Tergestinae Civitatis et Dominum
Dieltamum de Duino pro confinibus territorii ejusdem Civitatis Tergesti.
Conquerebatur, quod idem Dieltamus excessisset fines suos, et intromisisset de
territorio eorum. Et ipse Dieltamus similiter conquerebatur quod Tergestini
intromisissent de territorio suo. Tandem Dominus Dietmarus Tergestinus
Episcopus, de communi utriusque partis voluntate, locavit terminum unum inter
eos in loco qui dicitur Licusel in quo cum utraque pars venisset et diu super
tenuta et possessione litigasset; in fine Ripaldus Gastaldio praedictae Civitatis
Procurator Communitatis cum duodecim bonis hominibus recordantibus, nomina
quorum scribentur inferius, probavit, quod territorium et possessio Comunitatis
Tergestinae Civitatis erat a Carraria quae vadit ad portum de Sistigliano versus
Longheram sicut vadit via publica ultra Venam, totum versus mare tam pascua
quam silvae et quicquid inter hos fines continetur. Ita quod Domino Dieltamo nec
alicui alio aliquid pertinet intra praedesignatos confines.
Et si ipse vel alius aliquis aliquid habet ibi, a Civitate Tergestina habuit, et
etiam quaedam pars Ecclesiae Sancti Johannis de Tuba jacet super terram
Sancti Justi, unde praedicta Ecclesia Sancti Johannis tenetur solvere omni anno
Canonicis Tergestinis, nomine census, medietatem oblationis quae venit in festo
Sancti Joannis ad maiorem missam.
Haec omnia juraverunt et probaverunt vera esse praedicti recordantes, scilicet
Vincentius Judex, Aymo Judex, Adalgerus Judex, Tefanius de Martino,
Remenardus, Bonifacius, Ripaldus filius Leonis, Azo de Of, Of frater ejus, Amizo,
Vitalis filius Zinisini, et Voldricus filius Preroz. Quod vero cum ita factum fuisset,
praenominatus Dieltamus promisit quod de coetero se non intromitteret de
praedesignato territorio.
Et praedictus Ripaldus Gastaldio pro Communi de Tergesto promisit similiter,
quod ultra hoc, quod designatum est superius, se non deberet intromittere.
Praenominati vero Dominus Episcopus, ad hoc ut de coetero non cresceret inter
eos contentio, posuit inter eos poenam ut quaecumque pars intromitteret ultra
praedesignatos confines, subjaceret V. lib. optimi auri et haec omnia nihilominus
perpetuam obtineant firmitatem. Actum in loco quod dicitur Licusel. Testes vero
rogati fuerunt Vodolricus Tergestinus Locopositus, Bonifacius Caprensis
Locopositus, Almericus Viced., Engelpertus Miles, et alii multi; et ut haec firmius
credatur a posteris, prefatus Dominus Episcopus sigilli sui impressione fecit
muniri.
Ego Voldericus Tergestine Civitatis Tabellio interfui et jussu Domini Dietmari
Episcopi, et a partibus rogatus, hanc cartulam propria manu scripsi complevi et
roboravi.
113

ANEXO F
Los Obispos Marco di Castello y Araldo de Chiozza jueces establecidos por
el Papa Celestino para conocer de la querella entre el Patriarca Gofrado de
Aquilea y el Capítulo de Trieste para la elección del obispo Wolcango
detienen la querella por motivo del reconocimiento hecho por el Patriarca.
Año 1192 en la ciudad de Altino
Marcus Dei gratia Castellanus, et Araldus eadem gratia Clugiensis Episcopi etc.
Conveniens, et aequum esse videtur, ut negotii processus ordine quo geritur ad
posteritatis memoriam stylo scripturae transmittetur, ne imposterum oblivionis
errore ambiguitas, et ex ambiguitate litigium oriatur. Qua propter nos memorati
episcopi supradicti de causa electionis Tergestinae Ecclesiae ad notitiam nostrae
perventa, praesenti paginae inserere curavimus. Cum autem memorata causa,
quae inter dictum Gottifridum Aquilejensem Patriarcham, et Archidiaconum, et
Canonicos Tergestinae Ecclesiae super electione Domini W. Tergestinensis
electi vertebatur nobis a Domino Papa Caelestino, decidenda, et fine debito,
appellatione remota, terminanda foret commissa, sicut in exemplo commissionis
manifeste apparet, eidem Patriarchae de mandato Domini Papae tertia feria intra
octavam Apostolorum Petri, et Pauli, idest Kalendiis Julii terminum peremptorium,
praefiximus. Verum praedictus Patriarcha in termino sibi constituto, Nuntium cum
litteris suis ad nos destinavit, in quibus continebat, quod ipse ab reverentiam
Domini Papae, sicut in exemplo litterarum ipsius annotata apparet, electionem
Wolcangi Tergestinensis electi, ab Archidiacono, et Canonicis Tergestinae
Ecclesiae factam confirmavit, nec quidquam eis de libera electione obiicere.
Sciant praesentes, et post nos venturi, quod Dominus Patriarcha, sciscitantibus
Tergestinae civitatis Nuntiis, utrum noviter electum eorum confirmaverit,
manifeste confessus est, quod dictum Wolcangum eorum electum confirmasset,
nec quidquam eis de libera electione obiicisse. Interfuerunt testes, Amicus
Concordiensis Canonicus, Octo Frat. Rasacensis, Abbati Ulricus Suaevius,
Philippus de Verona, Henricus Ruperti filius Decanus, Ulricus filius Ravini de
Mucho, Dominicus Tergestinus Praesbiter, Bonifacius Tergestinus della Corte.
Act. hoc An. Dom., Incar. 1192. In Altineis. Prius Prandium etc.
114

ANEXO G
El emperador Federico II confirma a los Obispos de Trieste las donaciones
efectuadas por sus antecesores a la Iglesia de Trieste.
Septiembre del año 1230, Indicción IV, dado en Anagni.
In Nomine Sancte et Individue Trinitatis.
Fridericus Secundus, Divina favente Clementia, Romanorum Imperator semper
Augustus; Jerusalem et Sicilie Rex.
Etsi in exaudiendis petitionibus Subditorum que Celsitudini nostre multoties
porriguntur, Majestatis Nostre gratiam ostendimus favorabilem et benignam;
illorum tamen supplicationes Serenitatis nostre munificentiam debebunt magis
favorabilem invenire qui pro se nobis non supplicant, sed pro Ecclesys quibus
presunt. Inde est quod notum facimus universis Impery nostri Fidelibus tam
presentibus quam futuris: Quod cum Coradus Venerabilis Episcopus Tergestinus
fidelis noster ad Majestatis nostre presentiam accessisset, quedam privilegia
Lothary Regis, Oddonis (Henrici), Karoli, Lodoyci, Lothary Ugonis fily, Berengary
et aliorum quamplurimum Imperatorum et Regum predecessorum nostrorum
Ecclesie Tergestine indulta nostre Celsitudini presentaverit, de quibus privilegys,
privilegium predicti Lothary Regis ad petitionem dicti Episcopi huic nostro
privilegio de verbo ad verbum jussimus interserendum. Cujus continentia erat:
Quibus privilegys nostre Celsitudini presentatis idem Episcopus pro parte
Ecclesie sue, Eccellentie nostre humiliter supplicavit, ut, tam privilegia ipsa, quam
quelibet bona Ecclesie Tergestine sibi confirmare de munificentie nostre gratia
dignaremur. Nos igitur petitionibus suis benignum prestantes assensum, et
singulis diligenter inspectis, que ipsa privilegia continebant, predecessorum
nostrorum vestigys inherentes, tam privilegia ipsa, quam quelibet bona Ecclesie
Tergestine quae nunc juste tenet et possidet, vel in antea justo titulo poterit
adipisci, predicto Corado Episcopo suisque successoribus pro parte Ecclesie
Tergestine perpetuo duximus confirmanda. De habundantiori quoque liberalitatis
nostre gratia concessimus et confirmamus eidem Episcopo et successoribus suis
pro parte Ecclesie supradicte Castrum Humagense, Syparum, Fontanam
Georicam, Castrum Vermes, et Insulam Pontiani cum omni jure et pertinentys
suis, ut liceat eidem Episcopo et successoribus suis undecumque potuerint
homines attrahere et collocare super ejusdem Ecclesie terras ad laborandum et
comanendum pro ut in privilegio Regis Henrici tercy et Octonis tercy vidimus
contineri. Mandantes et presenti scripti munimine firmiter statuentes, ut nulla
omnino persona alta, vel humilis, ecclesiastica seu secularis, publica seu privata
contra hanc nostram concessionem vel confirmationem venire presumat. Quod
qui presumpserit, preter indignationem nostram quam se pro certo noverit
incursurum, mille libras auri purissimi pro pena componat. Cujus medietas sit
Camere nostre, et reliqua medietas ipsi Episcopo ejusque successoribus
persolvatur. Ad cujus concessionis et confirmationis nostre memoriam et robur
perpetuo valituram, presens privilegium per manum Phylippi de Sabano Notary et
fidelis nostri Scribe et Typario nostre Majestatis Bulle auree impresso jussimus
communiri. Anno, mense et Indictione subscriptis.
Hujus rei testes sunt Berardus Venerabilis Panormitan. Archiepiscopus, Jacobus
Venerabilis Pactensis Episcopus, Rainaldus Dux Spoleti, Joannes de Romania
Secretarius, Ricardus Imperialis Aule Mareschallus, Venerabilis Salteburiensis
Archiepiscopus, Fr. He. Magister Domus Sancte Marie Theutonicorum in
Jerusalem.
Acta sunt hec apud Anagniam. Anno Dominice Incarnationis M. CC. Trigesimo,
mense septembris, quarta Indictione, Impery vero Domini nostri supradicti Dei
gratia Gloriosissimi Romanorum Imperatoris semper Augusti, Jerusalem et Sicilie
115

Regis, Anno Decimo, Regni Jerusalem quinto, Regni vero Sicilie trigesimo tercio
feliciter.
Amen.
Ego Bertoldus Tergestinus Sacri Palaty Notarius ad petitionem Venerabilis
Arlongi, Dei gratia Episcopi Tergestini, sicut inveni in privilegio Incliti Friderici
Romanorum Imperatoris aureo sigillo pendenti comunito, sicut inveni et legi, nihil
augens vel minuens, rogatus transcripsi et exemplavi, testibus his presentibus
Domino Pucelino de Carsperch de Suarzenich, Domino Fricone de Pluicenpach,
Domino Friderico de Jusnoverch, Georgio Scolare, Domino Willelmo de Mucho,
Domino Bertoldo Subdiacono dicti Domini Episcopi familiare.
116

ANEXO H
El Obispo Ulrico (o Volrico) de Portis concede a cambio de dinero muchos
de los derechos públicos sobre la ciudad al Comune de Trieste.
4 de Mayo del año 1253, indicción XI, Trieste
In Nomine Dei Aeterni, Amen. Anno Domini Millesimo CC.° quinquagesimo tertio,
Die VI Exeunte Mense Maii, Indictione XI.
Cum Ecclesia Tergestina foret magnis debitis et variis aggravata propter magnas
expensas et sumptus, quas Dominus Worlicus Dei gratia Episcopus Tergestinus
fecerat, tam in obsessu Brixie, ad petitionem et mandatum Domini Bertoldi bonae
memoriae, Sanctae Sedis Aquilejensis Patriarchae, quam in eundo cum eodem
Domino Patriarcha Lugdunum ad Concilium generale, et Austriam, Stiriam et
Hungariam, quam etiam propter graves collectas et provisiones sibi ac suae
Ecclesiae impositas a Domino Octaviano Cardinali, et a Domino Gregorio de
Montelongo Apostolicae Sedis Legatis, tam in providendo Regnum Ungariae,
quam etiam Episcopo Arateno, Tervisino, et Episcopo Cenetensi, et aliis personis
ecclesiasticis, et etiam propter gravia damna et expensas, quae et quas
Episcopatus Tergestinus sustinuerat propter guerram habitam inter dictum
Patriarcham Aquilejensem et Dominum Meynardum Comitem Goritiae et eorum
sequaces, propter quae debita possessiones Ecclesiae in majori parte sunt
pignori obligatae et Ecclesia supradicta sit in destructione maxima et ruina. Et
cum falces ygantum foeneratorum et aliorum creditorum, velut tineae dictam
Ecclesiam Tergestinam quotidie demoliantur devorent et corrodant, considerans
memoratus Dominus Episcopus, quod cum supradictus Episcopatus suus non
decrescerit, sed de malo in pejus potius augumentetur; nec in dicto Episcopatu
sunt aliqua mobilia cum quibus possit dicta debita expediri, ut majus damnum
Ecclesiae evitetur, de consilio et consensu Capituli sui proposuit de bonis
Episcopatus sui, de quibus Ecclesia minus lederetur, vendere et alienare pro
debitis persolvendis.
Unde memoratus Dominus Episcopus, titulo venditionis, dedit et tradidit et
concessit Dominis Johanni Rampho, Vitali de Alborio, et Bonifacio filio quondam
Canciani Consulibus Tergesti, recipientibus nomine suo et nomine totius
Communis, et omnium Civium Tergesti et eorum successoribus, et haeredibus in
perpetuum jus Collectae vini, et jus Petrolii, et jus Calcificum, et Pellipariae, et jus
Appellationum; videlicet, quod deinceps coram Consulibus appellatio non fiat de
aliqua quaestione ad eum, nec ad ejus successores; et jus Consulatus, videlicet,
quod potestatem habeant eligendi Consules Cives Tergesti ad dictae Civitatis
regimen, sine eo et ejus successoribus, et sine ejus et eorum contradictione; et
jus condemnationum et redditus; videlicet, quod damnare et absolvere possint ad
eorum voluntatem excepta condemnatione sanguinis, quam Gastaldio cum
Judicibus facere debeat secundum formam Statuti, quod Consules facient. Dans
eis et eorum successoribus licentiam et potestatem plenariam faciendi statuta,
tam de sanguine,
quam de omnibus aliis negotiis pro statu terrae, salvis omnibus aliis rationibus
Domini Episcopi tam in temporalibus quam in spiritualibus, et jus de non jurando
mandatum ejus, sed solum Consulum, et jus minuitatis mensurarum et pensae,
et jus p...., cum omni jure et actione, usu, seu requisitione reali et personali, utili
et directo sibi suisque successoribus nomine suo et nomine suae Ecclesiae
pertinenti.
Ad habendum, tenendum, et possidendum, et quidquid sibi, et suis
successoribus et haeredibus deinceps placuerit faciendum, pro praetio
octingentarum marcharum denariorum Tergesti, sive Aquilegens. de quibus
denariis satisfactum fuit quibusdam creditoribus, quibus Dominus Episcopus
supradictus tenebatur et obligatus erat, tam personaliter, quam per fidejussores
117

occasione dictarum procurationum promissionum et earum memoratarum, sicut
superius est expressum.
Renuncians dictus Dominus Episcopus exceptioni non solutae, datae, habitae,
receptae et numeratae pecuniae, exceptioni doli mali, in factum, et Epistolae Divi
Adriani, et exceptioni deceptionis plus duplo vel dimidio justi praetii; et quod non
possit dicere, quod dictum praetium in utilitatem Ecclesiae non sit versum,
omnique alio jure et juribus exceptionibus, et defensionibus privilegiis et
constitutionibus, et litteris impetratis et impetrandis, omnibus aliis juribus et
actionibus canonicis et civilibus sibi nomine suo et propriae suae Ecclesiae
pertinentibus et cohaerentibus, et quibus possit se tueri, et aliqua occasione
contravenire; et de eo quod praedicta plus valerent nomine purae et simplicis
donationis inter vivos, quod amplius revocari non possit aliqua ingratitudine, jure,
vel causa, dictos Rectores pro se et dicto Communi legitime investivit.
Renuncians illi legi, quae dicit, quod donatio fieri non potest ultra quingentos
aureos sine insinuatione. Dans eis licentiam et plenariam potestatem intrandi in
tenutam, et corporalem possessionem, vel quasi corporalem omnium
praedictorum sua auctoritate permisit et dictus Dominus Episcopus per se
suosque successores dictos redditus jura et actiones ab omni persona legittime
semper defendere guarentare auctorizzare atque disbrigare et expedire dictis
Consulibus, et Communi suisque successoribus et haeredibus. Et dictam
venditionem et cessionem, sive donationem ratam, et firmam habere, tenere, et
observare in perpetuum, nec amplius contravenire, ant facere per se nec per
alium vel alios aliqua ratione, exceptione, nec ratione sub poena duo millia
Marcharum boni argenti et expensarum omnium litis, et damna ei ratione
competituras, et competitura integre resarcire, pro qua poena damnis et expensis
dictus Dominus Episcopus pignori obligavit dictis Consulibus et Communi, et
eorum successoribus et haeredibus monetam, et mutam suam de Tergesto et
omnes alios suos redditus, et possessionem, quos et quas ipse habet in Civitatis
Tergesti et circa Civitatem.
Itaque si ipse vel sui successores, aliqua occasione vel exceptione venirent vel
facerent, contra praedicta vel aliquod praedictorum, quod liberam habeant
potestatem Consules et Commune Tergesti intrandi in possessionem dictarum
mutae, et monetae, et possessionum, atque reddituum absque nuntio alicujus
dominii, vel alterius personae contradicentis, et faciendi de eis quidquid voluerint;
dans et concedens ex nunc eis licentiam et potestatem intrandi in tenutam, et
corporalem possessionem eorum. Promittens dictus Dominus Episcopus per se
suosque successores dictum pignus legiptime ob omni persona defendere
guarentare auctorizzare atque disbrigare, et dictam obligationem ratam et firmam
in perpetuum habere et tenere dictis Consulibus et Communi, eorumque
successoribus et haeredibus in perpetuum. Nec contra praedicta vel aliquod
praedictorum aliqua occasione, venire aut facere sub dicta poena, qua soluta,
praedicta omnia nihilominus in perpetuum suum robur obtineant et illibata
permaneant. Insuper Dominus Vitalis Decanus Ecclesiae Tergestinae, Dominus
Voldoricus ejusdem Ecclesiae Archidiaconus, Praesbyter Andreas Custos,
Mathaeus Scholasticus, Conradus, et Henricus, Rantulfus, et Sardius, et
Johannes Diaconi, Albertus Subdiaconus, Henricus Clericus Canonici Tergesti
nomine suo, et nomine totius Capituli Tergestini consenserunt praedictis
venditionibus, traditionibus, concessionibus, et obligationibusomnibus,
considerantes et cognoscentes dictam venditionem, sive venditiones et
alienationem in minore damno Ecclesiae Tergesti redundare, quam si dictus
Dominus Episcopus alias possessiones et redditus Ecclesiae vendidisset.
Insuper juraverunt corporaliter ad Sancta Dei Evangelia dicti Decanus, et
Archidiaconus in ipsorum omnium eorum de capitulo anima, eorum consensu et
voluntate, dictum consensum ratum, et firmum habere, tenere, et non
118

contravenire, movere vel facere, communiter, nec divisim per se, nec alium vel
alios aliqua occasione, vel exceptione.
Et quod dabunt consilium, et auxilium, ac favorem quod praedicta omnia et
singula in perpetuum robur obtineant et firmitatem. Ad cujus antem rei memoriam
et stabilem firmamentum de voluntate Domini Episcopi et Capituli fuit hoc
Instrumentum eorum sigillorum munimine roboratum.
Actum Tergesti in Palatio Episcopatus.
Testes fuerunt rogati Praesbyter Germanus Capellanus Domini Episcopi
memorati, Dominus Pezemanus de Ragonia, Marcus Signolus, Marcus Venerius,
Johannes Ugozzono de Venetiis et alii plures.
Ego Rantulfus Sacri Palatii Notarius his omnibus interfui, hanc cartam scripsi et
roboravi.
Ego Lazarus Sacri Palatii Notarius his omnibus interfui, hanc cartam scripsi et
roboravi.
2 de Abril del año 1257, Indicción XV. Trieste.
El Obispo Arlongo da al Comune de Trieste la investidura feudal de los
derechos cedidos por el obispo Volrico en el año 1253.
In nomine Dei aeterni. Anno Domini MCCLVII, die secundo intrante mense
Aprilis, Indictione XV. Actum Tergesti in coro majoris Ecclesiae. Praesentibus D.
Vitale Decano Tergestino, D. Volricho Archidiacono Tergestino, Dominis Andrea
Sacrista et Mattheo Scolastico, presbiteris Conrado et Hogero, et aliis de
Capitulo Tergestino, et D. Michaele dicto Sophia, Hermuto Gastaldo Tergestino,
D. Ottone de Loos et Joane Zuccolo, Mauro Pantelo et aliis.
Ibidem ad petitionem et requisitionem Dominorum Natalis quod D. Johanis de
Alboriis, et Andreae Ramffi Consulum Tergesti pro se et toto Commune Tergesti.
D. Harlongus Dei gratia Episcopus Tergestinus investivit dictis Consulibus,
recipientibus, pro se et toto Commune Tergesti feudum et jus illud quod ipsi
habebant, si aliquod jus habent, de rationibus et redditibus et honoribus quos
olim D. Volricus Dei gratia Episcopus Tergestinus eis et dicto Communi dedit jure
recti et legalis feudi, dicendo ei dictus D. Harlongus Episcopus Tergestinus: Ego
investio vobis illud jus quod habetis, et illud jus quod non habetis non investio
vobis, et dicti Consules statim juraverunt dicto D. Episcopo pro se et toto
Commune fidelitatem, secundum quod vassallus etc.
Ego Lazarus Sacri Palatii Notarius hiis interfui, et rogatus hanc Cartulam scripsi
et roboravi.
119

ANEXO I
El Obispo de Tieste Brissa di Toppo con el consentimiento del Patriarca
Raimondo de la Torre traspasa al Comune el Gastaldonado y las regalías
sobre Trieste. 10 Marzo del año 1295. Indicción VIII. Trieste.
In nomine Dei Eterni. Anno ejusdem Millesimo ducentesimo nonagesimo quinto,
Indictione octava, die decima intrante Martio. Actum Tergesti in Episcopali
Palatio, presentibus prudentibus Viris Domino Gillone Archidiacono Aquilejensi,
et
Dominis
Blaxio Mansionario Aquilejensi, Rantulfo Presbytero, et Zufredo Notario de
Tergesto, Riccardo et Odorico dicto Testa de Toppo familiare dicti Domini
Episcopi infrascripti, Ulvino Plebano de Umago, Jacobo dicto Abbadia familiare
dicti Domini Archidiaconi et testibus ibi ad hec vocatis et aliis.
Cum propter guerras et discordias habitas olim in provincia Histrie, et specialiter
in districtu et Diocesi Tergesti, ville et alia bona Episcopatus et Ecclesie Tergesti
depopulate, destructe et vastate sint, ita quod propter nimiam et urgentem
necessitatem bona et jura dicti Episcopatus obligata sint per Reverendum Patrem
Dominum Brixam Dei gratia Episcopum Tergestinum propter sui et familie sue
opportunitatem victus et vestitus et aliorum necessariorum, cum aliter haberi non
posset, et cum idem Dominus Episcopus, usurarum onere pergravatus, dictum
onus sustinere non valeat, quia in gravissimum damnum, nec non imo in
destructionem Episcopatus sui redundaret, que supradicta patent ad plenom,
Idem Dominus Episcopus habita deliberatione solemni et consilio ac tractatu
precedentibus cum prudenti viro Gillone Archidiacono Aquilejensi Legato et
Nuncio Reverendi Patris Domini Raymundi Dei gratia Sancte Sedis Aquilejensis
Patriarche et Capituli Aquilejensis, ac cum discretis viris Domino Henrico Decano
et Capitulo Ecclesie Tergestine, et aliis solemnitatibus, que de jure consueverunt
in hujusmodi contractibus observari, considerans concessionem et locationem
infrascriptam sibi et Episcopatui suo esse expedientem et minime damnosam,
locavit et concessit ac consengit in vita sua Domino Mathaeo Bajardo Sindico et
Procuratori Dominorum Sardii Mostelli, Valexii Henriverici, et Sardii de Larzento
Consulum Consilii et Communis Tergesti, sindicario et procuratorio nomine
ipsorum renuncians de consensu et voluntate dictorum Dominorum Decani et
Capituli Ecclesie Tergestine Officium Gastaldionatus, cruentam et lividam, et
regalia, cum eo jure quod habet, vel habere videtur, et hoc pro precio et nomine
precii Ducentarum Marcharum Frixachensium novorum denariorum, Aquilejeusis
vel Tergestine monete, de quibus dictus Pracurator et Sindicus, sindicario et
procuratorio nomine supradicto, medietatem solvere promisit usque ad festum
Sancti Martini proxime venturi, Alteram vero medietatem a festo Sancti Georgii
proxime venturi ad unum anuum immediate sequentem in denariis tantum dicto
Domino Episcopo, vel cui commiserit sub pena tertii plus in denariis ut sors pro
quolibet termino pro rata. Ita etiam quod si idem Dominus Episcopus aliqua alia
jura haberet contra Commune et homines Tergestinos in Civitate et districtu
Tergesti, quae jura Commune et homines de Tergesto non vident nec credunt,
nec recordantur; idem Dominus Episcopus quiescet, et tacebit de ipsis petendis,
vel requirendis in vita sua. Salva sibi semper muta, moneta, decimis, feudis et
jure feudorum. Et si aliquae speciales personae eidem Domino Episcopo
detinerent vel occuparent possessiones, vineas, campos, prata, vel alia bona
mobilia vel immobilia; idem Dominus Episcopus possit eos et ea petere et
requirere coram Dominio Tergestino, confitens et asserens Dominus Episcopus
memoratus, quod de jam dictis juribus superius nominatis nullam donationem vel
alienationem, seu concessionem fecit alicui personae, aliquo ingenio, sive causa
vel modo.
120

Quod si contrarium appareret, teneatur dictus Dominus Episcopus ad poenam
infrascriptam et nihilominus suprascripta et infrascripta firma permaneant
Revocavit insuper Dominus Episcopus memoratus omnes processus, quos fecit
contra Capitulum, et Clerum, et Commune ac homines Tergestinae Civitatis et
Dioecesis, et omnes et siugulos eorum, cassans et irritans instrumenta,
scripturas, et omnia jura quae apparerent exinde, promittens dictus Dominus
Episcopus de consensu et voluntate Dominorum Henrici Decani, et Capituli
Ecclesiae memoratae dicto Sindico et Procuratori, sindacario et procuratorio
nomine supradicto, stipulanti et recipienti dictam locationem, concessionem, et
consensum, et praedicta omnia et singula dictis Communi et hominibus de
Tergesto rata et firma habere et tenere, attendere et observare, defendere et
manutenere, et non contravenire, vel facere, seu movere per se nec per aliquam
aliam personam interpositam aliquibus nomine, exceptione, vel modo, ingenio,
sive causa, sub poena tercentarum Marcharum denariorum novorum,
Aquilejensis vel Tergestinae monetae, quod toties peti possit et exigi cum effectu,
quoties contrafactum filerit, poena quoque soluta vel non, suprascripta et
infrascripta nihilominus in sua permaneant firmitate.
Juraverunt insuper dictus Dominus Episcopus, in suam animam sibi praepositis,
ac Dominus Sindicus et procurator in animas praedictorum Consulum Consilii et
Communis, ac suam, tactis Evangeliis Sacrosanctis praedicta omnia et singula
rata et firma habele et tenere, et non contravenire occasione aliqua vel
exceptione.
Obligans dictus Dominus Episcopus jam dicto Sindico et Procuratori stipulanti et
recipienti sindacario et procuratorio nomine supradicto, omnia bona et jura sua et
Episcopatus sui, quae si contrafaceret, ipsi Commune et homines sua propria
auctoritate intromittere, tenere, ac possidere valeant absque licentia, judicio, vel
requisitione alicujus Dominii, seu Judicis Ecclesiastici, vel Saecularis, omnisque
alterius personae contradictione remota, usque ad integram solutionem et
satisfactionem omnium praedictorum, quae bona et jura dictus Dominus
Episcopus praecario jure, se ipsorum nomine, possidere confessus est, si contra
praedicta vel aliquod praedictorum faceret, vel veniret.
Renuntians dictus Dominus Episcopus exceptioni indebiti, sine causa vel ex
injusta causa in factum actioni omnique juri et legum decretalium, seu
decretorum auxilio, constitutionibus, consuetudinibus, litteris a Romana vel
qualibet alia Curia impetratis vel impetrandis, et cujuslibet alterius juris et usus
suffragio.
Supradictis interfuerunt Domini Henricus Decanus, Jacopus Archidiaconus,
Odorlicus Scolasticus, Almericus Sacrista, Gregorius Karottus, Andreas, Tomas,
Bertoldus, Floravancius, Marsilius et Bernardus Canonici Ecclesie memorate
suum adhibentes assensum. Ad majorem autempredictorum omnium firmitatem,
Dominus Episcopus memoratus ac dicti Domini Decanus, et Capitulum,
Consules, Consilium, et Commune Tergesti fecerunt presens instrumentum
eorum sigillorum pendentium appensione muniri. Ego Henricus Imperiali
Auctoritate Notarius hiis interfui et rogatus scripsi.
Ego Michael filius quondam Zampauli de Mugla Imperiali auctoritate Notarius ad
petitionem venerabilis Antonii Dei gratia Episcopi et Comitis Tergestini, de
mandato et licentia ejus supradictum exemplum ex publico Instrumento manu
Henrici Imperiali auctoritate Notarii sigillato sigillis cereis pendentibus, scilicet
Domini Episcopi, Communis, et Capituli Tergestini fideliter scripsi et exemplavi ad
perpetuam rei memoriam et ne perdatur, nil addens vel minuens quod sensum
mutet vel intellectum, nisi forte litteram vel sillabam aut punctum propter errorern
aut oblivionem, signumque meum apposui consuetum in testimonium
premissorum. Testibus Discreto Viro Stephanulo de Garbagniate, Fhilippo de
Tarabotis de Ancona, Igualdo de Bertin ......... Diocesis, Nicolao qm. Johannis de
Padua familiare dicti Domini Episcopi et aliis.
121

ANEXO J
El Obispo de Tieste Brissa di Toppo con el consentimiento del Patriarca
Raimondo de la Torre traspasa al Comune el Gastaldonado y las regalías
sobre Trieste reservándose la acuñación de monedas, la aduana, los
feudos y los diezmos.
10 Marzo del año 1295. Indicción VIII. Trieste.
In nomine Dei aeterni. Anno ejusdem millesimo ducentesimo nonagesimo quinto.
Indictione octava, die decima intrante martio. Actum Tergesti in Episcopali
Palatio, praesentibus prudente Viro Domino Gillone Archidiacono Aquilejen., et
Dominis Blaxio Mansionario Aquilejen., Rantulfo Praesbytero, et Zufredo Notario
de Tergest., Riccardo et Odorico dicto Testa de Coppo familiari dicti Domini
Episcopi infrascripti, Volvino Plebano de Umago, Jacobo dicto Albadia, familiare
dicti Domini Archidiaconi et testibus ibi advocatis, rogatis, et aliis.
Cum propter guerras et discordias habitas olim in provincia Histriae, et specialiter
in districtu et Dioecesi Tergestina, depopulatae destructae et devastatae sint ......;
ita quod propter nimias et urgentes necessitates, bona et jura dicti Episcopatus
obligata sint per Reverendum Patrem Dominum Brixam Dei Gratia Episcopum
Tergestinum, propter sui et familiae oportunitatem victus, et vestitus et aliorum
necessariorum, cum aliter haberi non possint, et cum idem Dominus Episcopus
usurarum onere pergravatus, dictum onus sustinere non valeat, quod in
gravissimum damnum, imo in destructionem Episcopatus sui redundaret, quae
supradicta patent ad plenum, Idem Dominus Episcopus habita deliberatione
solemni et consilio, ac tractatu praecedentibus cum prudente viro Domino Gillone
Archidiacono Aquilejensi Legato et Nuncio Reverendi Patris Domini Raymundi
Dei Gratia Sanctae Sedis Aquilejensis Patriarchae et Capituli Aquilejensis, ac
cum discretis viris Dominis Henrico Decano et Capitulo Ecclesiae Tergestinae, et
aliis solemnitatibus, quae de jure consueverunt in hujusmodi contractibus
observari.
Considerans concessionem et locationem infrascriptam sibi et Episcopatui suo
esse expedientem et minime damnosam, locavit et concessit, ac consensit in vita
sua Domino Mathaeo Bajardo Sindico et Procuratori Dominorum Sardi Mostelii,
Valexii Henriverici, et Sardii de Larzento Consulum Consilii et Communis
Tergesti, sindicario et procuratorio nomine ipsorum recipienti, de consensu et
voluntate dictorum Dominorum Decani et Capituli Ecclesiae Tergestinae Officium
Gastaldionatus, cruentam et lividam, et regalia, cum eo jure quod habet et
habere videtur, et hoc pro praetio et nomine praetii Ducentarum Marcharum
frixeriorum bonorum denariorum, Aquilejensis vel Tergestinae monetae, de
quibus dictus Procurator et Sindicus, sindicario et procuratorio nomine
supradicto, medietatem solvere promisit usque ad festum Sancti Martini proxime
venturi.
Alteram vero medietatem a festo Sancti Georgii proxime venturi ad unum annum
immediate sequentem in dictum terminum dicto Domino Episcopo, vel cui
commiserit sub poena tertii plus in denariis, ut sors pro quolibet denario pro rata.
Ita etiam quod si idem Dominus Episcopus aliqua jura habet contra Commune
et homines Tergesti in Civitate et districtu Tergestino, quae jura Commune et
homines de Tergesto non vident nec credunt, nec recordantur; idem Dominus
Episcopus quiescet, et tacebit de ipsis petendis, vel requirendis in vita sua. Salva
sibi semper muta, moneta, decimis, feudis et jure feudorum.
122

Et si aliquae speciales personae eidem Domino Episcopo detinerent vel
occuparent possessiones, vineas, campos, prata, vel alia bona mobilia vel
immobilia; idem Dominus Episcopus possit eas et ea petere et requirere coram
Dominio Tergestino, confitens et asserens Dominus Episcopus memoratus, quod
de jam dictis juribus superius nominatis nullam donationem vel alienationem, seu
concessionem fecit alicui personae, aliquo ingenio, sive causa vel animo.
Quod si contrarium appareret, teneatur dictus Dominus Episcopus ad poenam
infrascriptam et nihilominus suprascripta et infrascripta firma permaneant.
Revocavit insuper Dominus Episcopus memoratus omnes processus, quos fecit
contra Capitulum, et Clerum, et Commune ac homines Tergestinae Civitatis et
Dioecesis, et omnes et singulos eorum, cassans et irritans instrumenta,
scripturas, et omnia jura quae apparerent exinde, promittens dictus Dominus
Episcopus de consensu et voluntate Dominorum Henrici Decani, et Capituli
Ecclesiae memoratae dicto Sindico et Procuratori, sindacario et procuratorio
nomine supradicti, stipulanti et recipienti dictam locationem, concessionem, et
consensum, et praedicta omnia et singula dictis Communi et hominibus de
Tergesto rata et firma habere et tenere, attendere et observare, defendere et
manutenere, et non contravenire vel facere, seu movere per se vel per aliquam
aliam personam interpositam aliquibus nomine, exceptione, vel modo, ingenio,
sive causa, sub poena tercentarum Marcharum denariorum novorum,
Aquilejensis vel Tergestinae monetae, quod toties peti possit et exigi cum effectu,
quoties contrafactum fuerit, poena quoque soluta vel non, suprascripta et
infrascripta nihilominus in sua permaneant firmitate.
Juraverunt insuper dictus Dominus Episcopus, in suam animam sibi praepositis,
ac Dominus Sindicus et Procurator in animas praedictorum Consulum Consilii et
Communis, ac suam, tactis Evangeliis Sacrosanctis praedicta omnia et singula
rata et firma habere et tenere, et non contravenire occasione aliqua vel
exceptione.
Obligans dictus Dominus Episcopus jam dicto Sindico et Procuratori stipulanti et
recipienti sindacario et procuratorio nomine supradicto, omnia bona et jura sua et
Episcopatus sui, quae si contrafaceret, ipsi Commune et homines sua propria
auctoritate intromittere, tenere, ac possidere valeant absque licentia, judicio, vel
requisitione alicujus Dominii, seu Judicis Ecclesiastici, vel Saecularis, omnisque
alterius personae contradictione remota, usque ad integram solutionem et
satisfactionem omnium praedictorum, quae bona et jura dictus Dominus
Episcopus praecario jure, se ipsorum nomine, possidere concessus est, si contra
praedicta vel aliquod praedictorum faceret, vel veniret.
Renuntians dictus Dominus Episcopus exceptioni indebiti, sine cansa vel ex
injusta causa in factum actioni omnique juri et legum decretalium, seu
decretorum auxilio, constitutionibus, consuetudinibus, litteris in Romana vel
qualibet alia Curia impetratis vel impetrandis, vel cujuslibet alterius.
Ego Henricus Imperiali auctoritate Notarius his interfui et rogatus scripsi.
123

ANEXO K
Obispo de Trieste Brissa di Toppo entrega al Comune su castillo de
Montecavo para que lo custodien por diez años.
10 Marzo del año 1295. Indicción VIII. Trieste.
In Nomine Dei aeterni. Anno ejusdem millesimo ducentesimo nonagesimo quinto.
Indictione octava, die decima intrante mense martio. Actum Tergesti in Episcopali
Palatio, praesentibus prudente Viro Domino Gillone Archidiacono Aquilejen., et
Dominis Blaxio Mansionario Aquilejen., Rantulfo Praesbytero, et Zufredo Notario
de Tergest., Riccardo et Odorico dicto Testa de Coppo familiari dicti Domini
Episcopi infrascripti, Volvino Plebano de Umago, Jacobo dicta Albadia, familiare
dicti Domini Archidiaconi, testibus ibi ad haec vocatis et rogatis, et aliis.
Consideratis multiplicibus malis et damnis, quae evenerunt Episcopatui et
Ecclesiae, Communi et hominibus Tergestinis per homicidia, captivitates,
incendia, rapinas, depopulationes, et vastationes vinearum et laboreriorum
suorum, et plures alias maneries et modos propter Castrum de Mucho quod
pervenit ad manus inimicorum Episcopatus Ecclesiae et Communis, ac hominum
de Tergesto, ut de ipso Castro diligens et secura custodia habeatur. Utque omne
dubium et periculum, quod evenire possit praedicto Castro tollatur, ac et ut villae,
et alia bona Episcopatus, et Ecclesiae liberae et securae sint sub protectione
Communis et hominum de Tergesto. Reverendus Pater Dominus Brisa, Dei
Gratia Episcopus Tergestinus habita deliberatione solemni et consilio ac tractatu
praecedentibus cum prudente viro Domino Gillone Archidiacono Aquilegensis,
Legato et Nuncio Reverendi Patris Domini Raymundi Dei Gratia Sanctae
Aquilegensis Sedis Patriarchae et Capituli Aquilegensis, ac cum discretis viris
Dominis Henrico Decano et Capitulo Ecclesiae Terg., et aliis solemnitatibus quae
de jure consueverunt in hujusmodi contractibus observari. Cognoscens
concessionem infrascriptam utilem esse pro Episcopatu ut Ecclesia Tergestina,
de consensu et voluntate Dominorum Henrici Decani, et Capituli memoratae
Ecclesiae Tergestinae, commisit et concessit Domino Mathaeo Bajardo Sindico
et Procuratori Dominorum Sardii Mostellis, Valexii Henrivici, et Sardii de Largento
Consulum Consilii et Communis Tergesti vice et nomine dicti Communis
recipienti custodiam Castri de Mucho, usque ad decem annos proxime venturos.
Remanentibus villis et aliis possessionibus spectantibus ad ipsum Castrum cum
Dominio et honorantiis Domino Episcopo memorato, excepto dominio de
maleficiis. Illa autem maleficia, quae exigunt poenam pecuniariam, dictus
Dominus Episcopus intra suos confines habeat, cognoscat, faciat et punire. Ita
etiam quod Commune et homines de Tergesto juvare, defendere, et
manutenere debeant dictum Dominum Episcopum bona fide in manutenendis
villis et juribus suis. Et e contra dictus Dominus Episcopus eis similiter facere
teneatur. Completis autem dictis decem annis Commune et homines de Tergesto
dictum Castrum dare, et restituere teneantur libere et absque ullo praetio, vel
satisfactione custodiae fatuminum, vel aliarum aliquarum expensarum factarum
Domino Episcopo memorato, promittens dictus Dominus Episcopus per se et
suos successores, et dictus Sindicus et Procurator, sindacario et procuratorio
nomine supradicto, stipulatione solemni interveniente ad invicem supradicta
omnia et singula rata et firma habere et tenere, attendere et observare, et non
contravenire vel facere per se, nec per aliquam personam interpositam aliquibus
ratione, exceptione, vel modo, ingenio, sive causa sub poena tercentarum
Marcharum denariorum novorum, Aquileg. vel Tergestinae monetae, quae toties
peti possit et exigi cum effectu, quoties committetur in eam cum refectione
damnorum, interesse, ac expensarum exinde competitorum, ac dictus Sindicus et
Procurator in animas praedictorum Consulum Consilii et Communis, ac suam,
tactis Evangeliis Sacrosanctis praedicta omnia et singula rata, et firma habere et
124

tenere stipulatione solemni ad invicem. Obligantes ad haec dictus Dominus
Episcopus bona Episcopatus sui, ac Dominus Sindicus et Procurator, sindacario
et procuratorio nomine supradicto, ad invicem bona omnia dicti Communis
poenaque solutione damnorum et expensarum refectione, praesens
Instrumentum nihilominus in sua permaneat firmitate. Supradictis interfuerunt
Domini Henricus Decanus, Jacubus Archidiaconus, Odorlicus Scolasticus,
Almericus Sacrista, Gregorius, Carottus, Andreas, Thomas, Pertoldus,
Florauantius, Marsilius, et Bernardus Canonici Ecclesiae memorate, suumque
adhibentes assensum. Ad majorem autem praedictorum omnium firmitatem,
Dominus Episcopus memoratus, ac dicti Domini Decanus et Capitulum, Consules
et Consilium et Commune Tergesti fecerunt praesens Instrumentum eorum
singulorum sigillorum pendentium appensione muniri.
Ego Henricus Imperiali auctoritate Notarius his interfui et rogatus scripsi.
125

ANEXO L
Trascripción del documento original en pergamena del año 1661,
conservado en el Archivio Diplomatico di Trieste, que establece las reglas
de la Congregación de San Francisco (o sea las Trece Casate).
Constitutione ordini et constitutione della devota et nobile Congregatione o vero
Fraternità di Santo Francesco, de quaranta Fratelli Nobili Tergestini.
In quanta veneratione et stima debbon gli huomini che vivono vita christiana sotto
il glorioso vessillo de Christo haver i luochi sacri, non è alcuno l’esprimer lo possa
con favole, i quali con ogni lor forso et lo bene debbono procurar ch’a gloria sua
si fondino, et constituiscono luochi pij, con quali cresca la Religione ad ogni suo
colmo et sumità, la qual radicando ne’ cuori delle genti l’amabilissima gloria
d’Iddio et con l’incomparabil sua virtù illuminando et infiamando gli animi de quali
che l’osservano di giorno in giorno fioriscono in loro opere degne, pie et grate al
nostro Signore, per mezzo poi delle quali maggiormente si stabilisce la pace et
l’unione fra fratelli in Christo et la tranquilità de tutto il mondo della qual non è
cosa veruna ch’a ciascuno debbi esser più cara, né che da tutti con maggior
effetto d’animo desiderar si debba; et veramente si dia tener per fermo che ogni
di qual sorte travagli, pene, incomodi et massime che li huomeni patiscono in
questo mondo, da niuna altra caggione pervengino se non dalla giustissima ira
d’Iddio provocata dalle male voglie et opinione degli huomeni allontanatesi da
detta Religione, la qual è mezo et dritta via de unirsi con Dio optimo et massimo
qui in terra et su nel Cielo. Perciò che questa santissima et benedetta Religione è
quella in somma che s’associa et fa veri amici del Sommo et alto Iddio viva fonte
et gratia d’ogni bene dobbiamo al tutto noi con ogni nostra forza imittarla et
seguirla, la qual mediante l’aiuto d’Iddio augumentava per virtù di questa buona
riforma.
Essendo adunque questa Benedetta Confraternita ancor dell’anno 1246 da
maggior nostri instituita, così possa alle santissime vie vostre di darci cotal carica
da noi si farrà con somma sincerità di core per quanto farran le debol forze del
nostro ingegno.
Noi adunque a questo deputati publicaremo queste benedette leggi et santi ordini
da noi refformati nel modo come intendevasi, quali pregamo Iddio ottimo
massimo ch’a laude et gloria sua per augumento er accrescimento di questa
benedetta Congregatione, debbino con ogni sincerità esser conservata.
Et primo che li fratelli di questa Congregatione haver debbino due governatori ò
ver Camerarij elletti per il più numero di detta Congregatione, i quali per lor debito
et officio debbino con ogni diligentia procurar l’utile et beneficio d’essa
Congregatione et ad unquem esseguir quel tanto che dalli Fratelli di detta
Congregatione iustamente fosse determinato.
2° Item, che li detti Camerari insieme con il guardiano del convento de lo Santo
Francesco debbino admonir tutti li fratelli che dui volte almeno all’anno, et si
comne ad ogni buon Christiano s’aspetta debbino confessando li suoi peccati
reconciliarsi con il nostro Signore Iddio, le quali admonitioni debbino fare l’una lo
primo di decembrio et l’altra il primo capitolo avanti la Resuretione del nostro
Signore.
3° Item, che di continuo così di giorno come di notte si debbi ardere una lampada
dinanzi all’Altar grande di Santo Francesco a veneratione del nostro Signore
Jesu Christo, et si come debitamente si deve fare.
4° Item, che ad honore et laude di Iddio et Santo Francesco in ogni prima
domeniga del mese si habbia celebrar una messa alla qual tutti li fratelli trovar si
debbino con le candelle accesse, eccetto quelli che fossero impediti de infirmità ò
ver d’alcun altro urgente impedimento, per li qual impediti debbino le lor mogli
star alla detta Messa altrimente caschino alla pena de soldi 3 .
126

5° Item, che tutti li Fratelli che sarrano stati alla detta Messa ò quella fornita
recusassero, ò vero non curassero redursi al Capitolo insieme con gli altri,
caschino alla pena de soldi 3 per cadauno.
6° Item, che se alcuno de Fratelli di detta Congregatione biastemasse il nome de
Dio, ò ver della Vergine Maria, siano obligati il guardiano et camerarij admonir in
secretto quello che biastemeva che debbia da simil biastema astenersi, et se
perseverasse nella biastema debbino detti guardiano et Camerarij dui altre volte
admonirlo in Publico Capitolo non voglia perseverare nella biastema, et non
volendo emendarsi sia ipso iure cassa’ da questa Congregatione.
7° Item, che tutti li Fratelli quando s’entra in Capitolo, finita la Messa si come è
costume debbino al locho solito dir 3 Pater Nostri et 3 Ave Maria per l’anima de
vivi et morti.
8° Item, che essendo redotti li Fratelli in Capitolo debbino parlar con ogni
modestia et non debbino impetuosamente uno contra l’altro contrastar, et
admonitti da cadauno delli Camerarij de non perseverar in simil contrasto et non
aquietandosi, casca alla pena de soldi 4: quali recusando pagar detta pena ad
monito per 3 volte dall’official deputato se intenda ipso iure casso et privo d’essa
Confraternità.
9° Item, che mancando di questa vita alcun di detti Fratelli o vero le moglie et
figlioli o altri de congionti di sangue habitanti però in casa d’esso Fratello, siano
tenuti tutti li Fratelli sotto pena de soldi 8. per cadauno contrafaciente et debino
star alla Messa, o ver Vespero, con le Candelle accesse.
10° Item che debbino nel tempo de otto giorni, come meglio a loro pareva, far dir
una messa cantada per l’anima del defonto, alla qual messa debbino similmente
trovarsi tutti li Fratelli sotto pena de soldi 3.
11° Item, che li Camerarij in occorenza di portar qualche fratello morto, o vero de
sua casa come di sopra alla sepoltura, recercar debbino quattro de detti Fratelli a
dover portar detto Fratello morto, i quali recusando detti Camerarij debbino
recercar altri quattro, et quelli havevan recusato, caschino alla pena de soldi 12.
per cadauno.
12° Item, che nel giorno de Santo Francesco tutti li Fratelli d’essa Congregatione
venir debbino alla Messa nella festività di quel santo celebrata, quali debbino
finita la Messa intravenir alli conti delli Camerarij per molte cause et rispetti sotto
pena de soldi 10. per cadauno de contrafacienti come di sopra, li quali conti li
detti Camerarij debbino nell’istesso giorno de Santo Francesco chiaramente
haver resi et fatti, sotto pena de soldi 5: ... et li crediti di detta Confraternità
debbino esser saldati dalli detti Camerarij, anchor che per loro non fossero
scossi.
13° Item, che se alcuno Fratello per 3 volte fosse contumace, come è detto de
sopra et recusando pagar li soldi 3: della pena, et …, essendo però quello per li
official della detta Congregatione admonito, debbi ipso facto, et s’intenda quello
esser casso d’essa Confraternita, per il che i Camerarij che sarrano per tempo
debbiano subito proponer di crear novi Fratelli in luocho de quelli che sarrano
cassati, et questo sotto pena de ... diece.
14° Item, che alcuni non possi esser admesso in questa Confraternità che non
sia nato d’una delle tredice Fameglie infrascritte, però in tutto e per tutto iuxta la
parte presa che già fu fatta in questo nobile Colleggio l’anno 1558 il dì 27 genaro
aggionta in fine delli presenti capitoli.
127

I nomi delle quali tredice nobbili Famiglie di questa nobile et honoranda
Confraternità seguono come infrascripto:
Cioè La nobile Fameglia delli Argento - La nobile Fameglia de Giuliani
La nobile Fameglia de Bonomi - La nobile Fameglia de Burli
La nobile Fameglia de Leo - La nobile Fameglia de Paduino
La nobile Fameglia de Basejo (estinta) - La nobile Fameglia de Cigotti (estinta)
La nobile Fameglia de Stella (estinta) - La nobile Fameglia de Peregrini (estinta)
La nobile Fameglia de Belli (estinta) - La nobile Fameglia de Pettacy
La nobile Fameglia de Tophany (estinta)
15° Item, che nella Festa de Santo Francesco ogni anno per li Camerarij debbia
esser fatta una Ellemosina alli Poveri de Christo, et questua alla presentia di tutti
li Fratelli ò ver della maggior parte, la qual Elemosina però non debbi passar la
summa de lire dodeci de pizzoli.
16° Item, che in tutti li Capitoli si farrano debbia esser letto la nottula de detti ...
acciò che quelli non intervuenivan debbino esser zontati quale ... s’intendino à
quelli che venivan alla Messa ... comenzato el Evangelio.
17° Item, che il numero de detti d’essa Congregatione non debbia esser più di
40.
18° Item, che tre volte all’anno, cioè la prima domeniga de genaio, la prima
domenica de marzo, et la prima domenica de Luio quest’ordini per il Cancelliero
della Confaternità debbino esser publicati nel Capitolo ad intelligentia delli
Fratelli.
19° Item, che il giorno di Santo Francesco si debbino crear li Camerarij quali
durino per un anno, et al più ne possino esser confirmati oltra detto anno, mà
debbino vottar secondo il consuetto.
20° Item, se alcuno delli Camerarij non venivano alla Messa come di sopra,
caschino alla penna de soldi 10. per cadauno.
21° Item, che li Camerarij se farrano, siano tenuti prestar idonea segurtà per la
loro Administratione, et se intenda principal securtà coloro che ellegerano detti
Camerarij et similmente li vecchi Camerarij che admettessero securtà non
sufficienti s’intenda ... per li detti Camerarij confirmati.
22° Item che nel giorno de Santo Francesco si debbia creare un Cancelliero alla
detta Confraternità, al quale se darà per suo sallario soldi 6: di piccoli all’anno, et
quando esso Cancelliero non venirà a esercitare il officio suo, ò verò non
manderà persona admissibile secondo la forma di questi Capitoli, un altro de detti
fratelli chiamato per li Camerarij debbia per tal giorno far quell’officio al qual se
dia soldi dieci per la sua fatticha del sallario, però del detto Cancelliere, qual
salario non debbin li Camerarij pagar al detto cancelliere se non finito il suo
regimento sotto pena de ... del suo.
23° Item che li Camerarij debbino ellegere un officiale o vero Comandatore al
qual se dia per suo salario soldi 6: di piccoli all’anno.
24° Item quando s’accettarà et confirmarà qualche fratello nella detta
Congregatione o Colleggio, di nuovo quello sia tenuto a esborsar et pagare alla
Confraternità soldi trenta dui de piccoli et sia il suo arbitrio a far del suo la
collatione alli fratelli in segno di Charità come esser consuetto.
25° Item detti intrade d’essa Confraternità si debbia comprare le Candelle quali li
fratelli tenirano accesse alla Messa ordinaria et similmente si debbia comprare
dui Candellotti per l’altare, et uno per ardere quando fa sera al Corpus Domini.
26° Item, siano obligati tutti li Fratelli che si trovevano alla detta Messa andar a
sofferir, secondo è il costume.
128

ANEXO M
Acuerdo entre Venecia y Trieste.
3 de Septiembre del año 1368. Indicción VI. Dado enVenezia.
In nomine Domini Dei eterni amen. Anno ab incarnacione Domini nostri Jesu
Christi Millesimo tercentesimo sexagesimo octavo, indictione sexta, die tercio
septembris.
Cum Comunitas et homines Tergesti, antiquissimis et continuatis temporibus
fuerint, et ad presens sint, ac esse debeant, et esse vellint perpetuo, ac
teneantur fideles illustris Ducalis Dominii et Comunis Venetiarum, prout constat
per non nullas legittimas obligaciones et pacta, specialiter quodam publico
instrumento scripto manu Andree Diaconi, Sacri palatii notarii, Anno Dominice
Incarnacionis MCCII, indictione VI die quinto exeunte mensis octubris, tempore
inclite memorie Domini Henrici Dandulo, olim Venetiarum Ducis; et quodam olim
publico Instrumento scripto manus Petri sacri palatii et Tergesti notarii, Anno
Domini MCCXXXIII die octavo exeunte angusti, Et quodam alio publico
instrumento scripto manus Marci Siboto Imperiali auctoritate notarii, et ducalis
aule Veneciarum scribe, et subscripto manu Henrici civitatensis Imperiali
auctoritate notarii, anno Domini MCCLXXXV, indictione decimatertia mensis Maii,
die jovis octavo intrante, tempore bone memorie Domini Johannis Dandulo Ducis
Venetiarum; et quodam alio publico instrumento scripto manus Walterii
civitatensis apostolica et imperiali auctoritate notarii, ac subscripto manu Donati
Lambardi Imperiali auctoritate notarii publici et Ducatus Venetiarum scribe; Nec
non Henrici Imperiali auctoritate notarii Anno Domini MCCXCI indictione quarta
die undecimo intrante novembre tempore felicis memorie Domini Petri Gradonigo
olim Venetiarum Ducis, que quidem suprascripta instrumenta a me notario
suprascripto visa et lecta fuerunt. A quo quidem Ducali Dominio ipsa Comunitas
et homines Tergesti semper fuerunt benigne et favorabiliter pertractati.
Accidit tamen nuper quod dum una ex galeis custodie ad ripam Istrie per Ducale
Dominium deputatis, intromisisset et arrestasset in mari supra portum Tergesti,
quoddam navigium onustum frumento pro eo quod iverat contra banna et ordines
Veneciarum, et comitus dicte galee ad instantem requisitionem et preces
Comunis et hominum Tergesti supersederet, donec haberetur responsio, a nobili
viro capitaneo dicte custodie, ipsi Tergestini non expectata responsione predicta,
superveniente nocte, manu armata, miserunt gentes armigeras ad navigium, et
contra voluntatem dicti comiti, dicte galee et secum extantium, per vim navigium
cum toto carico traxerunt in portum civitatis predicte Tergesti, aggredientes
quoque comitum predictum, ac gentem dicte galee, qui et que erant inermes in
dicta galea, interfecerunt comitum predictum, et octo de aliis viris ipsius galee
vulnerarunt, in gravem prefacti Ducali Dominii et Comunis Venetiarum injuriam et
offensam, et grave damnum dictorum occisi et vulneratorum. Ipsi autem
Comunitas et homines Tergesti cognoscentes errorem suum miserunt ad pedes
excelsi et illustris Domini Domini Andree Contareno Incliti Venetiarum Ducis
quamplures ambaxatores et nuncios, ad implorandum gratiam et misericordiam
ejusdem Domini Ducis et Comunis Veneciarum super predictis, offerentes se
paratos stare, obedire et parere, precepto et voluntati ipsius Domini Ducis, et
Comunis Veneciarum, tamquam sui veri antiquissimi fideles et humiles
servitores.
Prefatus autem Dominus Dux cum suis Consilio minore rogatorum quadraginta et
zonte, considerans humilitatem et supplicationem ipsorum Tergestinorum,
intendens potius ad suam benignitatem ducalem respicere, quam ad aliquem
eorum excessum, deliberavit predictam Comunitatem et homines Tergesti ad
gratiam et misericordiam suam recipere, ipsis Comuni et hominibus Tergesti
promittentibus et observantibus solemniter et fideliter infrascripta in presenti
129

contractu contenta, et inferius declarata, de quibus omnibus predicta Comunitas
et homines Tergesti per prefatos ambaxatores suos plenissime et clarissime
cerciorati, plurimum contenti fuerunt. Regraciantes humiliter exinde prelibato
Inclito Domino Duci, et Comuni Veneciarum de tanta benignitate quam fecerant
eisdem, et confestim dicti Comune et homines de Tergesto, remiserunt Venecias
ad Ducalem excellentiam viros providos et discretos, Ser Bartholomeum de
Stoiano et Ser Franciscum de Bonohomis cives Tergesti, cum pleno et sufficienti
sindicatu, ad componendum, promittendum, firmandum, et complendum omnia et
singula in presenti contractu contenta. Quare predicti Ser Bartholomeus de
Stoiano et Ser Franciscus de Bonohomis, cives Tergesti, sindici procuratores, et
nuncii, Comunis, populi et universitatis Tergesti ad infrascripta omnia et singula,
et alia exercenda specialiter constituti, ut constat publico instrumento scripto
manu Mathei Bithini Imperiali auctoritate notarii anno Domini MCCCLXVIII
indictione sexta die vigesimo sexto mensis Augusti, a me notario infrascripto viso
et lecto, sindicario et procuratorio nomine suprascripto, et omnibus modo jure
forma et causa, quibus melius poterunt sponte et ex certa scientia, et non per
errorem, promiserunt et convenerunt per stipulationem solemnem Nobilibus et
sapientibus Viris Leone Bembo, et Andree Venerio de contracta Sante Margarite,
sindicis et procuratoribus predictorum Domini Ducis et Comunis Venetiarum pro
infrascriptis exercendi specialiter constituti, ut de eorum sindacatu constat publico
instrumento, scripto manu mei notarii infrascripti suprascriptis anno mense et
indictione, die vero secundo mensis septembris predicti presentis stipulantis et
recipientis nomine et vice predictorum Domini Ducis et successorum suorum, ac
Comunis Venetiarum.
Primo, quod Comunitas et homines Tergesti statim predictum navigium
contrabanni cum toto carico, vel valorem ejus, dabunt et assignabunt nobilibus
officialibus de Catavere Domini Ducis et Comunis Venetiarum, qui officiales de
ipso faciant et disponant prout ex eorum tenentur officio.
Secundo. Quod singulariter omnes illi de generali Consilio Tergesti personaliter
nomine suo, et totius Comunitatis prestabunt suprascripto Illustri Domino Andree
Contareno Duci Venetiarum, et similiter suis successoribus Ducibus Venetiarum
seu ambaxatoribus et nuntiis eorum, perpetue fidelitatis juramentum.
Tercio. Quod in signum dicte fidelitatis, Comunitas et homines Tergesti,
vexillum Sancti Marci nunc recipient ab ambaxatoribus seu nunciis prefacti
Domini Ducis et similiter recipient in qualibet creatione Illustrium Dominorum
Ducum et successorum eorumdem, et ipsum vexillum ponent et tenebunt
honorifice ad palatium Tergesti, supra platheam extensum, uno die, a mane,
usque ad vesperas, tam nunc quam pro qualibet creatione Ducis, ut dictum est;
et ultra hoc perpetuo omni anno in festo Pascatis resurrectionis Domini, ponent et
tenebunt ipsum vexillum Sancti Marci honorifice ad palatium per modum
jamdictum in signum fidelitatis, qua sunt Domino Daci et Comuni Venetiarum
perpetuo obbligati. Quarto. Quod tota Comunitas et homines et singuli homines
Tergesti realiter et personaliter et cum effectu, bona fide, et sine fraude
observabunt prelibato Domino Duci et Comuni Venetiarum ac successoribus suis
omnia et singula pacta in quibus Domino Duci, et predecessoribus suis, et
Comuni Venetiarum obligati fuerunt et sunt et tenebantur ac hodie tenentur a
tempore Inclite memorie Domini Henrici Dandulo olim Venetiarum Ducis inclusive
citra.
Quinto. Quod sit et esse debeat salvum et reservatum prefacto Domino Duci et
Comuni Veneciarum ac successoribus suis omne jus suum in penis, damnis, et
interesse in quibus Comunitas et homines Tergesti ceciderunt ab hinc retro, quia
non servaverunt hactenus pacta predicta.
Sexto. Quod illo duo judices qui fuerunt causa istius facti, videlicet Michael Ade et
Dominicus de Leo, ac ille qui fuit capitaneus sive caput illorum de Tergesto, qui
130

fuerunt ad defendendum navigium predictum, veniant ab hodierna die usque ad
unum mensem proximum personaliter Venecias ad abediendum sicut
terminabitur per Illustrem Dominum Dominum Ducem, et ejus Consilium
Rogatorum et zonte, et in causa quo ipsi vel aliquis eorum non veniant, et non
parueriut, seu obedierint ut est dictum, ex nunc tenentur et debent Regimen et
homines Tergesti, ponere in banno perpetuo Tergesti et districtus, ipsos tres, aut
illos vel illum qui non venerint et paruerint seu obedierint, ut dictum est supra. Et
prefactus Dominus Dux cum suis consiliis antedictis ex nunc prout ex tunc, ponet
illum vel illos, qui non venerint et non paruerint seu obedierint ut est dictum, in
banno perpetuo Veneciarum et omnium terrarum et locorum Ducali Dominio
subiectorum, et si quo tempore se permiserint reperiri in civitate vel districtu
Tergesti vel in aliqua terra seu loco Ducalis Dominii Venetiarum, stare debeant
sex mensibus in carceribus, et postmodum iterum banniantur perpetuo ut supra,
et hoc totiens observetur quotiens se permiserit reperiri.
Et predicta omnia et singula suprascripti Sindici et Procuratores Comunis, populi,
et universitatis Tergesti sindicario et procuratorio nomine suprascripto
promiserunt et convenerunt suprascriptis Sindicis et Procuratoris prelibati illustris
Domini Ducis et Comunis Venetiarum stipulantibus et recipientibus nominibus
quibus supra, perpetuo attendere, observare, et fideliter adimplere, ac attendi,
observari, et adimpleri facere per Comune et singulares homines de Tergesto, et
quemlibet eorum, et non contrafacere vel venire aliqua ratione vel causa, modo,
vel ingenio, vel aliquo quesito colore, per se vel alium seu alios, de jure vel de
facto, in judicio, vel extra, directe, vel indirecte, et contra predicta vel aliquod
predictorum litem, questionem, vel controversiam non movere vel moventi
consentire, sub pena et in pena marcarum mille argenti pro quolibet capitulo de
predictis non servato, totiens committenda et exigenda cum effectu, quotiens
fuerit contrafactum in aliquo de predictis. Que pena solvatur per Comune et
homines Tergesti, et quemlibet eorum, et applicetur Domino Duci et Comuni
Venetiarum, in omnibus et singulis casibus supradictis, et pena comissa, vel non
comissa, soluta vel non soluta, presens contractus et omnia et singula in eo
contenta, firma perdurent, et debeant perpetuo inviolabiliter observari.
Insuper suprascripti Sindici et Procuratores Comunis, populi, universitatis
Tergesti, sindicario et procuratorio nomine suprascripto sponte et ex certa
scientia juraverunt corporaliter ad sancta Dei evangelia tactis scripturis in animas
omnium et singulorum civium Tergesti, omnia et singula suprascripta et
infrascripta fideliter, attendere, observare, et adimplere, ac attendi observari et
adimpleri facere. Promisernnt insuper per pactum expressum nominibus quibus
supra, se facturos et curaturos cum effectu, sub pena predicta, quod ab hodierna
die usque quindecim dies proximos venturos, Comunitas, populus, universitas
Tergesti in suo pleno et generali Consilio sponte et ex certa scientia, et non per
errorem, approbabunt et ratificabunt, confirmabunt, et omologabunt presentem
contractum, et omnia et singula in ipso contractu contenta, per publicum
instrumentum trasmittendum prefacto Domino Duci Venetiarum infra mensem
predictum.
Pro quibus omnibus et singulis, attendendis, observandis, et adimplendis
suprascripti Sindici et Procuratores predictorum Comunis, populi, et universitatis
Tergesti, nominibus quibus supra, suprascriptis Sindicis et Procuratoribus Domini
Ducis
et
Comunis Veneciarum stipulantibus et recipientibus nominibus suprascriptis,
obligaverunt pignori omnia bona Comunis, et universitatis, ac hominum Tergesti,
mobilia, et immobilia atque fixa, presentia et futura, de quibus se dictis nominibus
possessiones precario constituerunt pro ipsis Domino Duce et Comune
Venetiarum. Renunciantes ipsi Sindici et Procoratores Comunis, populi, et
universitatis Tergesti, nominibus suprascriptis, conditioni sine causa, vel ex
injusta causa, exceptioni non facti, seu celebrati presentis contractus, fori
131

privilegio, exceptioni metus doli mali, et in factum; et omnibus quibus comunibus,
tam civilibus quam canonicis, et sinodalibus, seu municipalibus, sive mixtis, et
consuetudinibus quibus possent seu vellent contra predicta, vel aliquod
predictorum aliquo modo facere vel venire.
Quibus omnibus sic peractis prelibatus Dominus Dux cum suis Consiliis
antedictis, ac suprascripti eorum Sindici et Procuratores nominibus antedictis
receperunt suprascriptos Sindiocs et Procuratores, Comunis, populi, et
universitatis Tergesti ad gratiam et misericordiam predicti Domini Ducis et
Comunis Venetiarum, revocantes partem et processum ordinatum et captum per
Dominum Ducem, et Consilia Venetiarum contra illos de Tergesto, occasione
predicta, die tertio mensis augusti proxime elapsi, hoc acto et expresso declarato,
quod per presentem contractum, non intelligatur nec sit derogatum in aliquo
pactis hactenus factis inter Ducale Dominium, et Comune Venetiarum ex una
parte, et Comune, et homines Tergesti ex altera, a tempore scilicet predicti
Domini Henrici Dandulo olim Ducis citra inclusive, sed ipsa pacta et omnia et
singula in eis contenta firma perdurent, et debeant inviolabiliter observari.
Actum Veneciis in Ducali Palatio, in capella Sancti Nicolay, presente
circumspecto, et sapiente viro Domino Raphayno de Caresinis honorabile
Cancellario Venetiarum, ser Arnadeo de Bonguadagnis, ser Johannes Vido, et
ser Franceschino Vulpe Notario Ducatus Venetiarum, ac ser Brandelisio de
Golzardinis qui fuit de Bononia, Guidoni Nardi de Roncofrigido diocesis Arimini,
et Petro Niblo, filio ser Johannis Niblo, et Bartholomeo de Leo quondam ser Justi
de Leo civibus Tergesti, et aliis testibus ad hoc vocatis specialiter et rogatis.
Ego Nicolaus quondam Domini Andree de Girardo de Clugia pubblicus Imperiali
auctoritatis Notarius, hiis omnibus interfui et rogatus scribere scripsi supscripsi
etc.
132

ANEXO N
El Comune de Trieste se somete a los Duques Alberto y Leopoldo de
Austria.
31 de agosto del año 1369, Indicción VII, en Trieste
In Dei nomine. Amen. Nos Rectores. Consilium et Commune. Civitatis Tergesti
fatemur et Notum facimus, Universis in perpetuum qui presentes litteras viderint
legerint seu legi audiverint nunc vel temporibus in futuris.
Quod nos deliberatis animis de Comuni consilio unanimi consensu et de certa
sciencia nostrum omnium ac alliorum ad nos pertinencium, pro nobis et universis
nostris heredibus et successoribus nomine Civitatis et territorii de Tergesto,
illustres et magnificos principes Dominos nostros graciosos Dominos Albertum et
Leopoldum fratres Duces Austrie, Styrie, Karintye, et Charniole, Dominos
Marchie et portus naonis, Comites de Habspurg Tyrolis in Kyburg et de Ferretis,
Marchiones Burgowie et Lantgraffios Alsatie, eorumque heredes et successores
nostros veros naturalles et hereditarios Dominus fore recognoscimus ac pro
Dominis habere volumus perpetuo quemadmodum ex debito id tenemur, cum
ipsorum progenitores ac ipsi ab antiquo nostri veri naturalles et hereditarii Domini
fuerint et de jure esse debeant et existant, et id circho vigore recognicionis
huiusmodi, nos prefatis nostris Dominis Ducibus Alberto et Leupoldo, suo
omniumque suorum heredum et successorum nomine integre et liberaliter
assegnamus et tradimus dictas Civitatem et territorium in Tergesto ac omnia
fortalitia ac castela ad ea pertinencia. Nec non personas et res nostrum omnium
habendas ut alliorum suorum hominum de suis Civitatibus et castelis Austrie et
etiam jura judicia jurisdicionem potestates dacias ac reditus et proventus ad
Comune dicte Civitatis pertinentes, quas et quos Comune dicte Civitatis Tergesti,
hactenus tenuit et levavit in dicta Civitate et territorio de Tergesto quibuscumque
numcupentur nominibus, seu de quibuscumque rebus proveniant semotis
excepcionibus omnibus atque dolis. Ita videlicet quod prefati Domini nostri Duces
Austrie nos Civitatem et territorium in Tergesto cum omnibus prenotatis suis
pertinenciis integraliter et libere teneant possideant instituant et destituant ac de
eis disponere et ordinare possint et debeant quemadmodum de ceteris suis
Civitatibus et castelis in Austria, eo solo excepto dumtacxat quod ipsi nos Venetis
seu quibuscumque aliis non vendant obligent nec in manus allias alienent vel
transferant, quovis modo, verum ipsi nos et dictam Civitatem Tergesti cum suo
territorio debent ad manus suas perpetuo retinere, prefati quoque Domini nostri
Duces Austrie posint etiam in dicta Civitate Tergesti iu quocumque loco voluerint
Castrum hedificare et erigere ad quod nos ipsi debemus et volumus suffragari et
cooperari vecturis et modis aliis quanto melius poterimus sine dolo et in
premissorum omnium testimonium evidens et robur perpetuum. Quod quam
prenotata omnia per nos et nostros successores adimpleantur et serventur
perpetuo inviolabiliter, presentes litteras dictis Dominis nostris Ducibus Austrie
appensione sigili Civitatis Tergesti tradidimus Communitatis. Dat. et et act. in
Civitate iamdicta. Anno Domini Millesimo tricentesimo sexagesimonono die
ultimo mensis Augusti Indictione septima.
Ego Matheus Bitinus de Tergesto Imperiali auctoritate notarius precdictis
omnibus interfui, ac de mandato Comunis Civitatis Tergesti subscripsi.
133

ANEXO O
Tratado de paz entre Venecia y Trieste.
17 de Noviembre de 1369, Indicción VII, Trieste
In Christi nomine amen. Anno nativitatis ejusdem millesimo trecentesimo
sexagesimo nono, Indictione septima, die vigesimo octavo mensis novembris.
Cum providi viri Ser Rizardus de Bonhomis, Ser Julianus de Juliano, Ser Bonaffè
Grasso, et Ser Dominicus Burlo, cives Tergesti, Sindici procuratores, Nuntii, et
Ambaxiatores ac negociorum gestores ac sindicario et procuratorio nomine,
Prudentum virorum Judicum comunis, universitatis, hominum, et Consilii civitatis
Tergesti, ut constare dicitur publico instrumento inde confecto, scripto manu
Nicolaj de Picha imperiali auctoritate notarii Anno Domini millesimo trecentesimo
sexagesimo nono, Indictione septima die sextodecimo presentis mensis
novembris, Obtulerint et promiserint dare et consignare seu dari et consignari
facere die decimo-octavo presentis mensis novembris, Nobilibus et sapientibus
viris, dominis Paulo Lauredano de Ducali mandato Veneciarum Capitaneo
generali terre Ystrie, Jacobo Mauro procuratori Sancti Marci, et Johanni de Priolis
Gubernatoribus, et Laurentio Dandulo, Zacharie Contareno, Marco Dolfino, et
Lodovico de Molino Provisoribus exercitus ducalis dominii Veneciarum
recipientibus, nomine et vice Illustrissimi Principis et Domini Domini Andree
Contareno Incliti Ducis Venetiarum etc. ac comunis Veneciarum, et successorum
suorum, Civitatem Tergesti, cum omnibus suis castris, locis pertinenciis et
districtu ac juribus et actionibus libere, ac plenum merum et liberum dominium,
cum mero et mixto imperio et plenissima et omnimoda iurisdictione ipsius
civitatis, pertinentiarum et districtus Tergesti, sub certis modis, formis et
obligacionibus, conventis factis et promissis et firmatis inter prefactos dominos
Capitaneum Gubernatores et provisores, nomine et vice prelibati domini ducis et
comunis Veneciarum ex parte una, et predictos sindicos, Ambaxiatores, et
procuratores ac sindacario et procuratorio nomine, judicum Comunis
universitatis, hominum et Consilii Civitatis Tergesti ex parte altera, Pro ut constat
instrumento publico inde confecto scripto manu Francisci Vulpe publica imperiali
auctoritate notarii, ac ducatus Veneciarum scribe, suprascriptis Anno et
indictione, die vero decimo septimo mensis novembris a me notario infrascripto
viso et lecto. Cujus quidem instrumenti tenor inferius per omnia est insertus. Et
inter cetera in ipso instrumento contenta, prefati domini Capitaneus Gubernatores
et provisores dicto nomine promiserint suprascriptis Ambaxiatoribus et Sindicis
Comunis Tergesti dicto nomine recipientibus se facturos et curaturos cum effectu
quod prelibatus illustris dominus dux et comune Veneciarum ratificabunt et
approbabunt omnia in dicto instrumento contenta per literas Ducales vel per
pablicum instrumentum ex tunc usque quindecim dies tunc proxime venturos. Id
circo Nobiles et sapientes viri domini Jacobus Bragadino, Franciscus Bembo,
Marcus de Priolis, Jacobus de Priolis, Petrus Cornario et Nicolaus Contareno
Cives Venetiarum Sindici et Procuratores predictorum domini ducis et Comunis
Veneciarum, ad infrascripta omnia et singula et alia exercenda specialiter creati
et constituti, ut de ipsorum sindicatu constat publico instrumento inde confecto
scripto manu Bartholomei de Gallerate pubblica Imperiali auctoritate notarii ac
ducatus Veneciarum Scribe, suprascriptis Anno et indictione, die vero vigesimo
sexto mensis Novembris a me notario infrascripto viso et lecto, sindicario et
procuratorio nomine suprascripto cerciorati de omnibus et singulis, actis, factis,
conventis, promissis et firmatis intra partes predictas sponte et ex certa scientia
et non per errorem sindicario et procuratorio nomine prefati domini ducis et
comunis Veneciarum, et omni modo Jure forma et causa quibus melius potuerunt
ad instantiam mei notarii infrascripti velut publice persone scribentis et recipientis
nomine et vice suprascriptorum Judicum comunis universitatis hominum et
consilii Tergesti, et omnium quorum interest vel interesse posset, ratificaverunt et
134

approbaverunt et omologaverunt per presens publicum instrumentum ac firma
rata, et grata habuerunt et esse voluerunt omnia et singula acta, facta promisisa
et conventa per suprascriptos dominos Capitaneos, Gubernatores, et provisores
cum suprascriptis sindicis et Ambaxiatoribus, Judicum, Comunis Universitatis
hominum et Consilii Tergesti et omnia et singula contenta expressa et specificata
in suprascripto instrumento scripto manu Francisci Vulpe notarii supradicti, cujus
copia et tenor inferius est insertus. Promittentes dicto nomine ipsa omnia et
singula perpetuo attendere, observare et efficaciter adimplere sub pena in ipso
instrumento infrascripto contenta et obbligacione omnium bonorum comunis
Veneciarum presentium et futurorum. Actum Veneciis in Ducali Palacio.
Presentibus sapiente et circumspecto viro domino Rafayno de Caresinis
Cancelario ducatus Veneciarum, ac providis viris Dominis Amadeo de
Bonguadagnis, Johanne Vido, Petro de Quadraginta, Andrea de Oltedo, et de
Girardo, omnibus Notaris Ducatus Veneciarum testibus fide dignis, notis ibi
vocatis adhibitis et rogatis et aliis.
Tenor autem suprascripti instrumenti celebrati inter suprascriptos Dominos
Capitaneum Gubernatores et Provisores nomine prefati domini ducis et comunis
Veneciarum ex parte una et suprascriptos sindicos et procuratores Civitatis
Tergesti ex altera talis est, videlicet:
In nomine Sancte et individue Trinitatis Patris et Filii et Spiritus Sancti, et gloriose
Virginis Marie, Sanctissimi evangeliste Marci protectoris Veneciarum et civitatum
suarum, nec non beati Justi protectoris civitatis Tergesti, et tocius celestis curie.
Ad honorem, exaltacionem, et augumentum Illustrissimi Principis et Domini
Domini Andree Contareni Dei gratia incliti ducis Veneciarum etc. ac comunis
Veneciarum. Ad comendacionem insuper et laudem Nobilium et sapientum
virorum dominorum Pauli Lauredano de ducali mandato Veneciae Capitanei
generalis terre Istrie, Jacobi Mauro procuratoris Sancti Marci et Johannis de
Priolis Gubernatoris et Laurentii Dandulo, Zacharie Contareno, Marci Dolfini, et
Lodovici de Molino provisoribus exercitus ducalis dominii Veneciarum. Coram
prefatis dominis Capitaneo generali terre Ystrie, ac Gubernatoribus et
provisoribus comparuerunt providi viri Ser Rizardus de Bonhomis, ser Julianus de
Juliano, Ser Bonaffè Grasso et Ser Dominicus Burlo Cives Tergesti, Sindici,
procuratores nuncii et Ambaxatores ac negociorum gestores prudentum virorum
Judicum comunis Universitatis hominum et Consilii Civitatis Tergesti ad
infrascripta omnia et singula et alia exercenda et facienda specialiter creati et
constituti, habentes ad ipsa omnia et singula infrascripta et alia speciale
mandatum et liberam potestatem pro ut de eorum sindicatu et procuratorio plene
constat publico instrumento scripto manu Nicolai de Picha Imperiali auctoritate
notarii Anno Domini millesimo trecentesimo sexagesimo nono indictione septima
die sextodecimo mensis novembris, a me notario infrascripto viso et lecto
sindicario et procuratorio nomine suprascripto, sponte et ex certa scientia animi
et non per errorem, omnibus modo iure forma et causa, quibus melius potuerunt
exposuerunt ac confessi et manifesti fuerunt dicto nomine quod Judices comune
Universitas, homines et consilium, civitatis Tergesti cognoscuntur et fatentur se
se graviter et multipliciter peccasse contra Illustre Ducale dominium et comune
Venetiarum, ac fecisse et venisse contra fidelitatem promissiones convenciones
pacta, et iuramenta quibus dictum comune et homines Tergesti per publica et
autentica instrumenta fuerunt legitime obligati prefato serenissimo et
excellentissimo domino domino Andree Contareno Inclito Duci Veneciarum etc.
et comuni Veneciarum ac predecessoribus suis. Unde merito perdiderunt gratiam
prefati domini ducis et comunis Venetiarum et incurerunt penas contentas in
instrumentis iamdictis. Sed quia humanum est peccare, Angelicum autem
emendare, ipsi judices, homines, comune Universitas, et consilium Tergesti, et
dicti eorum Sindici Ambaxiatores et procuratores eorum nomine, sperantes de
summa ipsius domini Ducis et comunis Veneciarum benignitate ac clementia,
135

que redeuntibus ad rectam semitam veritatis gremium sue gratie et misericordie
numquam claudit, Spiritus Sancti gratia devotissime invocata reverenter et
humiliter supplicarunt prefatis dominis Capitaneo Gubernatoribus et provisoribus
ut eis placeat nomine et vice suprascripti domini ducis et Comunis Venetiarum
recipere ipsum comune, univesitatem, homines et consilium civitatis Tergesti, ad
gratiam et misericordiam predicti domini ducis et comunis Venetiarum, et recipere
nomine ipsius domini ducis, ac comunis Veneciarum, et suorum successorum
civitatem Tergesti. Quia dicto nomine offerebant et promittebant ac obtulerant et
promiserunt dicto nomine sese daturos et designaturos die crastina
decimaoctava presentis mensis novembris eisdem dominis Capitan.
Gubernatoribus et provisoribus recipientibus nomine et vice prefati domini ducis
et comunis Veneciarum ac successorum suorum ipsam civitatem Tergesti cum
omnibus suis castris, locis, pertinentiis, et districtu, ac Juribus et actionibus libere
ac plenum merum et liberum dominium cum mero et mixto imperio et plenissima
ac omnimoda jurisdictione ipsius civitatis pertinentiarum et districtus Tergesti
eligentes et costituentes ex nunc dicto nomine prefatum dominem ducem et
comune Veneciarum ac successores suos imperpetuum suum ac dicte Civitatis
Tergesti territorii et districtus dominum liberum et generalem, ac volentes et
sopplicantes dicto nomine quod ipse dominus dux et comune Veneciarum et
successores sui imperpetuum ipsam civitatem, castra et fortilicia territorium et
districtum et personas eorum regat habeat et gubernet per se vel alium cum
omnibus juribus et pertinentiis suis sub dominio jurisdictione mero et mixto
imperio protectione et subiectione ipsius domini ducis et comunis Venetiarum
perpetuo, alte et basse, pro ut ipsi domino duci et comuni Venetiarum et
successoribus suis melius videbitur et placebit contradictione ipsorum
tergestinorum vel alicuius eorum seu alterius persone non obstante, cum capitulis
infrascriptis:
Primo quod persone et hona omnium civium habitatorum et districtualium
Tergesti, remaneant salve, sine aliquo impedimento personarum et bonorum
suorum.
Item quod forbanniti alias per comune Tergesti recepti ad gratiam per ipsum
comune similiter salvi remaneant sine impedimento in personis et bonis, excepto
Astulfo
Piloso.
Item quod quilibet forensis et stipendiarius qui reperirentur ad presens in civitate
Tergesti possint recedere cum personis et rebus suis libere et sine aliquo
impedimento, de remanendo sit ad voluntatem Ducalis Dominii.
Item quod remittantur, cassentur et aboleantur omnes injurie damna et
gravamina hinc retro perpetrata et commissa hactenus quocunque tempore et
quolibet modo, forma, iure et causa tam pro comune Veneciarum quam per
comune Tergesti ac forenses et stipendiarios qui reperirentur ad presens in dicta
civitate Tergesti, salvis et reservatis juribus civium Veneciarum de his que
habebant agere in Tergesto. Item quod cives et habitatores Tergesti possint
gaudere et usufructuare et in eorum dominio habere et tenere omnia bona sua
mobilia et fixa intrinseca et extrinseca pacifice et quiete, et ad eorum voluntatem
obligare vel alienare.
Item quod statuta civitatis Tergesti serventur pro ut hactenus sunt servata
preterquam, si qua reperirentur et viderentur ducali dominio Veneciarum fore
contra ipsum ducale dominium Veneciarum que ex nunc cassa sint et revocata,
reservata prefato domino duci Venetiarum et successoribus suis libertate et
plenaria potestate addendi, corrigendi, minuendi, et in totum commutandi,
interpretandi, et declarandi omnia et singola statuta predicta, sicut et quando
domino duci et comuni Veneciarum ac successoribus suis videbitur utilius
expedire, et plus et minus ad voluntatem predicte ducalis dominacionis.
suis videbitur utilius expedire, et plus et minus ad voluntatem predicte ducalis
dominacionis.
136

Item quod ducale dominium Veneciarum debeat tueri et defendere civitatem
Tergesti, ejus districtum, cives et habitatores, ac districtuales ipsius nec non bona
ipsorum contra quamlibet personam et dominum de mundo.
Item quod relaxentur omnes carcerati cives et habitatores Tergesti per dominium
Veneciarum tam in civitate Venecie, quam alibi, libere et sine impedimento.
Item quod cum comune Tergesti exigere debeat a pluribus personis tam pro
fontico quam aliis causis certas pecunie quantitates, ipsum comune dictos
denarios a debitoribus exigere et recipere valeat, ut cum eis possit creditoribus
Comunis
satisfieri.
Item quod Regaliae Illustris domini ducis Veneciarum sint salve et reservate.
Hec igitur audientes prefati domini Capitanei Gubernatores et Provisores
habentes a ducali dominio Veneciarum libertatem et potestatem plenariam ad
scripta et infrascripta exercenda et percomplenda tam per eorum commissiones
quam per patentes literas ducalis dominacionis volentes clementer et benigne
agere nomine suprascripto cum predictis, comuni, universitate et hominibus
Tergesti, Ipsum comune, universitatem et homines ac districtuales et consilium
Civitatis Tergesti nec non suprascriptos ambaxatores et sindicos dicto nomine ad
gratiam et benignitatem ac amorem prefati domini ducis et comunis Venetiarum
illariter receperunt, et de omnibus et singulis scriptis contenti fuerunt, acceptantes
et approbantes dicto nomine omnia et singula suprascripta et infrascripta
dummodo Comune Judices universitas consilium et homines Tergesti dent et
assignent per se vel alium dicta die decimaoctava presentis mensis novembris
ipsis dominis Capitaneo Gubernatoribus et provisoribus recipientibus nomine et
vice prefati domini ducis et Comnnis Venetiarum et successorum suorum,
suprascriptam Civitatem Tergesti cum omnibus suis castris locis pertinenciis et
districtu libere, ac plenum merum et liberum dominium cum mero et mixto imperio
et plenissima et omnimoda jurisdictione et potestate ipsius civitatis pertinentiarum
et districtus Tergesti per modum suprascriptum. Unde suprascripti Ambaxatores
et sindici predictorum judicum comunis universitatis et hominum et Consilii
Civitatis Tergesti, ac sindici et procuratores nomine eorum per stipulacionem
solennem promiserunt suprascriptis dominis Capitaneo, Gubernatoribus et
provisoribus ibi presentibus stipulantibus et recipientibus nomine et vice
suprascriptorum domini ducis et Comunis Venetiarum et successorum suorum
dare et consignare seu dari et consignari facere die crastina presentis mensis
novembris, ipsam Civitatem Tergesti, cum omnibus suis castris, locis pertinentiis
et districtu libere, ac plenum merum et liberum dominium cum mero et mixto
imperio et plenissima et omnimoda jurisdictione ipsius civitatis pertinentiarum et
districtus Tergesti, et cum capitulis suprascriptis ac cum omnibus aliis
supracontentis ac expressis. Insuper prefati domini Capitanens Gubernatores et
provisores dicto nomine promiserunt sub obligacione omnium suorum bonorum
et iuramento, suprascriptis Ambaxiatoribus et sindicis comunis Tergesti
stipulantibus et recipientibus dicto nomine se facturos et curaturos cum effectu
quod prefatus Illustris dominus Dux et Comune Veneciarum ratificabunt et
approbabunt omnia supradicta per literas ducales vel per publicum instrumentum
amodo usque quindecim dies proxime venturos. Et predicta omnia et singula
suprascripte partes et quelibet caram dictis nominibus sponte et ex certa scientia
animi et non per errorem promiserunt sibi ad invicem perpetuo firma rata et grata
habere et tenere attendere et observare, et adimpiere et non contrafacere vel
venire aliqua ratione vel causa de jure vel de facto vel aliquo colore quesito, sub
pena ducatorum viginti quinque millia et refectione damnorum expensarum, et
interesse tociens committenda, et exigenda, quociens fuerit contrafactum
solvenda a parte non observante et applicanda parti observanti seu observare
volenti, et pena soluta vel non, predicta omnia et singula firma perdurent et
debeant a partibus perpetuo et inviolabiliter observari. Pro quibus omnibus et
singulis attendendis et perpetuo et inviolabiliter observandis suprascripti
137

Ambaxiatores et sindici, ac sindicario nomine Comunis universitatis et hominum
Tergesti prefatis dominis Capitaneo Gubernatoribus et provisoribus recipientibus
nominibus suprascriptis, obligaverunt omnia et singula bona mobilia et immobilia
seu fixa dictorum Comunis Civium et Universitatis Tergesti presentia et futura.
Ceterum suprascripti Ambaxatores et sindici nomine suprascripto et in animabus
singularum personarum civitatis et districtus Tergesti iuraverunt corporaliter ad
Sancta Dei Evangelia tactis scripturis predicta omnia et singula perpetuo
observare et adimplere, et quod dictum comune Civitas et Universitas et homines
ac districtuales Tergesti erunt perpetuo fideles et obedientes prefato domino Duci
et Comuni Venetiarum ac successoribus suis. Renunciaverunt quoque predicti
sindici ac Ambaxiatores nominibus suprascriptis condicioni sine causa vel ex
iniusta causa, exceptioni doli mali et in factum, fori privilegio, privilegiis
reformacionibus, et omni iuris et legum auxilio quibus possent contra predicta vel
aliquid predictorum quolibet facere vel venire.
Actum apud Tergestum in Bastita inferiori Ducalis Dominii Veneciarum posita
contra Tergestum, in domo habitacionis prefati domini Capitanei generalis terre.
Anno nativitatis Domini nostri Jesu Christi Millesimo trecentesimo sexagesimo
nono Indictione septima die sabbati decimoseptimo mensis novembris.
Presentibus Egregiis viris Dominis Johanne de Manfredis et Cinello de
Savignano militibus, et Jacobo de Gonzaga, ac nobilibus viris Dominis Paulo
Dandulo solutore Exercitus Veneciarum, et Jacobo Barozi civibus Venetiarum ac
providis viris Ser Natali de Judicibus, Ser Johanne Stella, Ser Johanne Vilano,
Ser Ambroxio de l'Argento, Ser Natali Siza, et Ser Tricho Trina de Tergesto,
testibus ibi vocatis specialiter et rogatis et aliis.
Ego Franciscus Vulpe publica imperiali auctoritate ac Ducatus Veneciarum et
prefatorum Dominorum Capitanei, gubernatorum et provisorum Scriba, predictis
omnibus et singulis interfui et rogatus scripsi, et in hanc publicam formam redegi.
Ego Angelus Pensabene de Zuchelis, quondam domini Facherii civis
Cremonensis publicus Imperiali auctoritate Notarius ac Ducatus Veneciarum
Scriba, predictis omnibus et singulis interfui eaque rogatus scribere in hanc
publicam formam redegi, meorumque signi et nominis munimine roboravi.
138

Mapa Topográfico de Trieste en el siglo XIV
Castello: Además de ser el lugar de asiento del clero y de
la milicia estaba abitado por agricultores. La zona comprendía
desde la cima de la colina de San Giusto sede de la Catedral hasta
la base de esta, en las cercanías del foro romano.
Cavana: era el área habitada por los nobles, abarcaba el
este de la ciudad y llegaba hasta los muros.
Mercato: tal como lo especifica el nombre era la zona del
mercado, del comercio y se encontraba situada entre Cavana y
Riborgo justo detrás de la salida al puerto en la zona baja central
de la ciudad.
Riborgo: era también habitada por nobles y ocupaba la
zona oeste de la ciudad.
139

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