Ver PDF - Fundamentar

dido a buscar el manejo casi total del desarrollo
de determinados procesos. Es decir,
incluso luego de la crisis del ’29, las crisis
petroleras mundiales y la crisis asiática en la
década del ’90, el sistema financiero mundial
y los mismos operadores financieros demostraron
ser incapaces de crear mecanismos
adecuados que reflejen las “lecciones aprendidas”
de los “cisnes negros” precedentes,
así como también garanticen paliativos para
algunos efectos de futuras crisis.
El rescate de Bearn Stearns, de Fannie y
Freddy, la quiebra de Wamu (Washington
Mutual), la caída de Lehman Brothers y el
paquete de emergencia diseñado por el gobierno
de Bush, para evitar la destrucción del
sistema financiero de su país, son claros exponentes
del alcance de una crisis financiera
cuya duración y desenlace no es fácil de pronosticar
y que además refleja la inexistencia
de mecanismos preestablecidos que demuestren
ser eficientes a la hora de controlar
daños.
Tal como se afirma en The Financial Times,
algunos años atrás rondaba en los
mercados la idea de que “el sistema financiero
y la economía global del siglo XXI se
volverían más estables y sofisticados y que
los movimientos “bruscos” en la actividad
tenderían a desaparecer. La volatilidad, en
otras palabras, se supuso
sería un tema del
pasado” 3 .
Lejos del escepticismo
del pasado en torno a las
nocivas consecuencias
de eventuales crisis futuras,
además de la incertidumbre
que corona
numerosos ámbitos del
mundo, muchos modelos
de previsión de riesgo
muestran que el proceso
parece comenzar a revertirse
y a tomar la dirección
contraria en que,
lejos de las épocas que
hablaban de la “gran moderación”
y la estabilidad,
hoy se habla del
vehemente “retorno de la
volatilidad”.
En la actualidad, el retorno de la volatilidad
implica que los modelos usados para
medir y, de este modo, controlar los riesgos,
han comenzado a quedar en el pasado. Los
“VAR models” (modelos de valoración de
riesgos, por sus siglas en inglés) han demostrado
ser incapaces no sólo de prevenir la
actual crisis, sino también de anticipar los
efectos y brindar opciones para controlar daños.
Es contra estas teorías cuantitativas
que Taleb arremete, ya que, tal como manifestó
en una entrevista
a La Nación, los
mismos obvian el
análisis de los “cisnes
negros” y el
efecto dominó de
grandes magnitudes
que pueden ocasionar.
Entre las ideas
que manifestó en numerosas
entrevistas
y declaraciones, se
destaca aquella en la
que Taleb cuestiona
la tendencia actual a
vivir con la ilusión del
orden (en base a la
creencia de que la
Los “VAR models” (modelos
de valoración de riesgos, por
sus siglas en inglés) han demostrado
ser incapaces no
sólo de prevenir la actual crisis,
sino también de anticipar
los efectos y brindar opciones
para controlar daños
planificación y la previsión son siempre posibles)
y la incapacidad de la mayoría de las
personas para coexistir con lo aleatorio, al
punto tal que se crean disciplinas que intentan
dar sentido al pasado, pero en última instancia,
no consiguen entenderlo, al igual que
fallan en la predicción del futuro.
En los últimos días del mes de octubre,
Wall Street siguió presentando altas y bajas,
al igual que muchas bolsas del mundo, luego
de una leve mejora los días precedentes. Japón,
la segunda economía del mundo, redujo
notablemente su expectativa de desarrollo y
pronosticó que será de sólo -0,1% y no del
1,2%, como estaba previsto para el 2009.
Además, en las semanas posteriores al
anuncio norteamericano, por primera vez en
más de siete años, el Banco Central nipón
rebajó la tasa de interés del 0,5 al 0,3%, con
el objetivo de paliar los efectos de la crisis financiera
global, sumándose de este modo a
las medidas de este tipo acordadas recientemente
por instituciones emisoras como la
Reserva Federal de Estados Unidos y el
Banco Central Europeo (BCE).
Al parecer, pese a los cuestionamientos
en torno a los planteos teóricos elaborados
por Taleb, su teoría es por estos días la
única capaz de dar al menos algunas certezas
en torno a los sucesos actuales y, a pesar
de su cuestionada calidad académica,
dichos planteos han resurgido dejando de
lado cientos de críticas que ponían los enunciados
de Taleb en el
centro de las burlas
y objeciones.
A MODO DE CIE-
RRE…
Es probable que
las consecuencias
de lo sucedido hasta
el momento muestren
que el mundo se
encamina hacia una
mayor multipolaridad,
por la pérdida
de peso relativo de
EEUU en el ámbito
financiero y económico
mundial, ya
3- Tett, Gillian. “Insight: Volatility returns with a vengeance”. The Financial Times.
En: http://www.ft.com/cms/s/0/d6527f50-a442-11dd-8104-000077b07658.html .
6
Crisis, Globalización y ¿Multipolaridad?