El declive de la socialdemocracia - El Siglo

DE LA CULTURA Y LA CIENCIA / LIBROS‘El declive de la socialdemocracia’, la obra magna deJosé Víctor SevillaUN NUEVO PACTOENTREDEMOCRACIAY CAPITALISMOLa crisis de la socialdemocracia se está llevando pordelante principios esenciales de la propia democracia, apareciendo latentación populista o la del despotismo escasamente ilustrado de los mercados.José Víctor Sevilla nos ha dado precisa cuenta de lo que ha ocurrido en los últimoscuarenta años en su libro: El declive de la socialdemocracia (RBA, 2011), una obramagistral.Por J. G. A.El profesor Sevilla, doctor en CienciasEconómicas y especialista enfiscalidad fue director general deTributos en el Ministerio de FranciscoFernández Ordóñez y el primer secretariode Estado de Hacienda en el Gobiernode Felipe González en el departamento dirigidopor Miguel Boyer. A partir de 1985 fueconsultor de gobiernos. Actualmente ha vueltoal Instituto de Estudios Fiscales donde fuedestinado cuando ganó la oposición.José V. Sevilla ha escrito numerosos librospero El declive de la socialdemocracia es suobra magna, en la que condensado su experienciay sus reflexiones a lo largo de muchosaños de trabajo, casi todos ellos dedicadosal servicio público. Hay que leer, pues,este libro con mucho detenimiento y con ellápiz de subrayar en la mano.Una aportación sumamente actual del mismoes una inusual propuesta de soluciones,de reformas realistas para generar un nuevopacto social entre democracia y capitalismodistinto al que rigió en la vieja socialdemocraciade las tres décadas posteriores a la SegundaGuerra Mundial.52 21–27 de noviembre de 2011. nº 948Sostiene Sevilla que, a pesar de los éxitoslogrados en los treinta años que siguieron ala Segunda Guerra Mundial, cuando surgieronlos primeros problemas en los años setenta,la reacción conservadora no consistióen revisar los defectos de la socialdemocracia,sino en intentar eliminar desde la raízlos “treinta gloriosos” en un paréntesis comosi se tratara de una anomalía que hubieravenido a interrumpir el curso natural dela historia.En su opinión, la crisis ha sido un bancode pruebas para constatar lo poco que quedade la vieja socialdemocracia como correctordel capitalismo y para distribuir conmayor equidad sus resultados. Ha desaparecidoprácticamente el componente redistributivo;los sistemas públicos de pensionesse hacen cada vez más contributivos,reforzando su carácter de seguro y a vecesni eso, al trasladar los riesgos a sus titulares.Y los grandes servicios públicos, la sanidady la educación, aparecen acosadospor la oferta privada a medida que la escasezde recursos públicos reduce sus nivelesde prestación.Esta pérdida de capacidad redistributivadel Estado constituye, en opinión del autor,un indicador elocuente no sólo del obscenodominio de la economía sobre la política,sino de la pérdida de calidad de lademocracia.Objetivos concretos. Propone Sevilla un nuevopacto social sobre los siguientes objetivos:Corregir los enormes desajustes entre elespacio de la economía mundializada y elámbito fraccionado de la política, para locual sería útil dotar de más competenciaspolíticas a la Unión EuropeaAbordar el papel de las instituciones financieras,que han crecido a un ritmo desor -bitado desde finales de los ochenta, sin estarjustificado por la economía real, apropiándosede una parte excesiva del valor añadido,dándoles una desmesurada influencia

La reacción conservadorade los 70 no buscó revisarlos defectos de 30 añosde socialdemocracia,sino eliminarla de raízsobre los gobiernos y generando fuertes inestabilidadesen los mercadosLimitar la circulación de capitales a cortoplazo; garantizar la transparencia de lasoperaciones bancarias y los mecanismos desupervisión.Apoyar fiscalmente aquellas actividadesen las que el enriquecimiento individual esconsecuencia de la creación de riqueza frentea las que el enriquecimiento individual seproduce a costa de la riqueza de otros sinque aporten producción algunaLos trabajadores deberán aceptar que laspolíticas salariales en los sectores más abiertosa la competencia, deberán estar influidasno sólo por la evolución de la propia productividad,sino también de lo que ocurra alrespecto en los países competidores. Para estecompromiso sería precisa una presenciaestable de los trabajadores en la gestión dela productividad, para lo que deben disponerde la información adecuadaRecuperar y desarrollar las políticas deigualdad de oportunidades que, además depermitir que nadie por falta de medios quedeprivado de utilizar sus facultades, constituyenuna vía inteligente de movilización deF. MORENOlos recursos disponibles a través de la mejorageneralizada de los niveles educativos;una profunda reforma fiscal donde la equidadaparezca en lugar preferente.Reformas precisas. En resumen, para conciliardemocracia y capitalismo habría quehacer importantes reformas: ampliación yautonomía de la política; favorecer las actividadessocialmente productivas; pactar lagestión de la productividad; aplicación depolíticas redistributivas; y el entendimientode la política“ no sólo como un medio en elque se intercambia el voto por ventajas materiales,sino como un instrumento que permitetambién configurar la sociedad en laque nos gustaría vivir, aceptando pagar loque sea necesario para ello”. lnº 948. 21–27 de noviembre de 2011 53