13.07.2015 Views

¿Están en peligro las pensiones públicas? - Pensamiento crítico

¿Están en peligro las pensiones públicas? - Pensamiento crítico

¿Están en peligro las pensiones públicas? - Pensamiento crítico

SHOW MORE
SHOW LESS
  • No tags were found...

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Vic<strong>en</strong>ç NavarroJuan Torres LópezAlberto Garzón Espinosa¿ESTÁN EN PELIGROLAS PENSIONES PÚBLICAS?¿cuáles son <strong>las</strong> verdaderas am<strong>en</strong>azas?¿a quién interesa que <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones sean privadas?¿llevan razón qui<strong>en</strong>es dic<strong>en</strong> que son inviables?¿qué convi<strong>en</strong>e hacer para garantizar su futuro?....LAS PREGUNTAS QUE TODOS NOS HACEMOSLAS RESPUESTAS QUE SIEMPRE NOS OCULTANEdita


Los textos de este libro son de libre difusión (copyleft) con elruego de que sea m<strong>en</strong>cionada su proced<strong>en</strong>cia <strong>en</strong> su caso.Diseño cubiertas:Miguel VagalumeFotografía bajo lic<strong>en</strong>cia Creative CommonsAutor: Sergio Bastida Nuneshttp://www.flickr.com/photos/sergioblanconegro/Imprime Artes Gráficas J. Guillén, S.L.Depósito Legal: M-8821-2010Editado por ATTAC EspañaATTAC es un movimi<strong>en</strong>to ciudadano internacional para el controldemocrático de los mercados financieros y sus instituciones.Más información <strong>en</strong> www.attac.es


El Consejo Ci<strong>en</strong>tífico de Attac, responsable de la edición de estelibro, es un colectivo formado por académicos españoles yextranjeros que desean contribuir a que <strong>las</strong> propuestas políticas querealiza ATTAC t<strong>en</strong>gan el máximo rigor y fundam<strong>en</strong>to ci<strong>en</strong>tífico.Este libro y los que irán apareci<strong>en</strong>do está dedicado a todas <strong>las</strong>personas, asociadas y simpatizantes de este movimi<strong>en</strong>to socialinternacional que es ATTAC y también a todas <strong>las</strong> que, desdecualquier otra posición, compart<strong>en</strong> nuestros ideales de transformaciónsocial para la igualdad y la justicia global.Los miembros del Consejo Ci<strong>en</strong>tífico de Attac son:Albert Recio Andreu; Alberto Garzón Espinosa; Alejandro Nadal;Ángel Martínez González-Tab<strong>las</strong>; Arcadi Oliveres Boadella;Armando Fernández Steinko; Carlos Alfonso Mellado; CarlosBerzosa Alonso-Martínez; Carlos Jiménez Villarejo; Coral del RíoOtero; Cristina Carrasco B<strong>en</strong>goa; Ernest García; Gerardo Pisarello;Ignacio Ramonet; Jaime Pastor Verdú; Joan Martínez Alier;José Manuel Naredo Pérez; José Vidal B<strong>en</strong>eyto; Juan FranciscoMartín Seco; Juan Hernández Vigueras; Juan Torres López;Julio Rodríguez López; Lina Gálvez Muñoz; Lourdes B<strong>en</strong>eria;Luis Enrique Alonso B<strong>en</strong>ito; Mª José Fariñas Dulce; Mª RosarioValpuesta Fernández; Marcos Roitman Ros<strong>en</strong>mann; María PazosMorán; Montserrat Galcerán Huguet; Nuria Almirón Roig; OscarCarpintero Redondo; R<strong>en</strong>é Passet; y Vic<strong>en</strong>ç Navarro López.José Luis Sanpedro es su Presid<strong>en</strong>te de Honor y Ricardo GarcíaZaldívar su coordinador.7


INTRODUCCIONLos cambios sociales de los últimos años han sido extraordinarios.Se ha producido una gran revolución tecnológica que ha traídoconsigo nuevas formas de producir, nuevas relaciones laborales,modos de gobernar difer<strong>en</strong>tes y un reparto de <strong>las</strong> r<strong>en</strong>tas y de losfrutos del progreso mucho más desigual e injusto. En el capitalismode la postguerra había un equilibrio de poderes que permitiómant<strong>en</strong>er pot<strong>en</strong>tes estructuras de bi<strong>en</strong>estar pero <strong>en</strong> los años set<strong>en</strong>tael mundo empresarial se rebeló fr<strong>en</strong>te a este estado de cosas. Con elliderazgo de políticos como Pinochet, Reagan y Tatcher se aplicaronpolíticas neoliberales que han dado lugar a un capitalismo sin bridasni limitaciones que no admite contemplaciones a la hora de apostarpor <strong>las</strong> r<strong>en</strong>tas financieras y del capital <strong>en</strong> perjuicio de los trabajadoresy amplios sectores de <strong>las</strong> c<strong>las</strong>es populares.Eso se ha podido producir porque se ha propiciado un grancambio moral y <strong>en</strong> los valores sociales. El equilibrio social <strong>en</strong> torno albi<strong>en</strong>estar colectivo ha sido sustituido por un capitalismo insolidarioque rompe con la cohesión social. Se ha debilitado a la sociedad parasost<strong>en</strong>er la conviv<strong>en</strong>cia <strong>en</strong> el individualismo y los ciudadanos hanquedado <strong>en</strong>vueltos <strong>en</strong> una avalancha de m<strong>en</strong>sajes que les impid<strong>en</strong><strong>en</strong>t<strong>en</strong>der que su situación es la de otros muchos millones como ellos.Y así, aislados, solo sab<strong>en</strong> gobernarse a sí mismos aspirando a salirindividualm<strong>en</strong>te de la frustración y del <strong>en</strong>torno fantaseado por losgrandes medios de información y persuasión que los <strong>en</strong>vuelve.En tales medios se pres<strong>en</strong>tan como verdades ci<strong>en</strong>tíficas yobjetivas argum<strong>en</strong>tos que son claram<strong>en</strong>te erróneos e ideológicos yque no ti<strong>en</strong><strong>en</strong> detrás sino la búsqueda compulsiva de más b<strong>en</strong>eficiosy mejores condiciones de acumulación para los afortunados quetodo lo ti<strong>en</strong><strong>en</strong>.9


Las p<strong>en</strong>siones y el discurso articulado para acabar con <strong>las</strong>públicas es quizá uno de los ejemplos más palmarios del fraudeintelectual <strong>en</strong> que se basa la política de nuestros días. Con falsedades,medias verdades y trampas se trata de conv<strong>en</strong>cer a los ciudadanosde que <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones públicas deb<strong>en</strong> desaparecer, o que deb<strong>en</strong>disminuir sus b<strong>en</strong>eficios. Para conv<strong>en</strong>cerlos se les dice que soninviables o que traerán consigo costes insoportables que hundirán<strong>las</strong> economías.Detrás de esas afirmaciones hay modelos que se pres<strong>en</strong>tancomo muy elaborados pero que <strong>en</strong> realidad están sost<strong>en</strong>idos <strong>en</strong>supuestos infundados. Gracias a ellos se difund<strong>en</strong> un día detrásde otro m<strong>en</strong>sajes catastrofistas que van haci<strong>en</strong>do mella <strong>en</strong> losciudadanos que al final terminan por creerse lo que oy<strong>en</strong> tantísimasveces.Lo que quier<strong>en</strong> lograr con esos discursos es muy s<strong>en</strong>cillo: quesean los bancos y no los poderes públicos qui<strong>en</strong>es manej<strong>en</strong> el ahorrocolectivo, y que ese ahorro se gobierne con vistas a darle r<strong>en</strong>tabilidadprivada y no equidad o solidaridad <strong>en</strong>tre una g<strong>en</strong>eración y otra.La privatización de los sistemas públicos de p<strong>en</strong>siones es,posiblem<strong>en</strong>te, una de <strong>las</strong> medidas más b<strong>en</strong>eficiosas del capitalfinanciero, puesto que permitiría poner <strong>en</strong> manos de los bancosy <strong>en</strong>tidades financieras volúm<strong>en</strong>es ing<strong>en</strong>tes de recursos, quizásufici<strong>en</strong>tes para garantizarles el dominio total sobre <strong>las</strong> economíasy <strong>las</strong> fu<strong>en</strong>tes de creación de empleo, r<strong>en</strong>ta y riqueza. Es decir,del poder.Y precisam<strong>en</strong>te por ello es urg<strong>en</strong>te reaccionar y evitar el bruta<strong>las</strong>alto que se propon<strong>en</strong> sin descanso. En primer lugar, desvelandolos errores y <strong>las</strong> falsedades <strong>en</strong> que se basan sus discursos y, además,tratando de movilizar a los ciudadanos para que defi<strong>en</strong>dan por todoslos medios sus derechos y <strong>las</strong> conquistas sociales que tanto esfuerzocostó alcanzar.Este texto divulgativo y escrito <strong>en</strong> un tono muy conciso int<strong>en</strong>tacontribuir a esa toma de conci<strong>en</strong>cia y a esa movilización. Porque solola movilización ciudadana puede parar esta <strong>en</strong>orme avalancha10


ideológica que se pres<strong>en</strong>ta como ci<strong>en</strong>tífica, y que <strong>en</strong> realidadresponde a unos intereses concretos, contrarios a los interesesg<strong>en</strong>erales de <strong>las</strong> c<strong>las</strong>es populares. Es propósito de este trabajomostrar la falsedad de sus argum<strong>en</strong>tos, con datos e información qu<strong>en</strong>iegan su veracidad y credibilidad.Animamos a sus lectores a divulgarlo y hacer de estosargum<strong>en</strong>tos un arma de debate y de conci<strong>en</strong>ciación para evitar que sesigan dando pasos hacia atrás <strong>en</strong> el ejercicio de los derechosciudadanos y del bi<strong>en</strong>estar al que todos <strong>las</strong> mujeres y hombres delmundo ti<strong>en</strong><strong>en</strong> derecho.Vic<strong>en</strong>ç Navarro, Juan Torres López, Alberto Garzón EspinosaFebrero de 201011


¿Qué son <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones y cómo se financian?¿Qué es un sistema público de p<strong>en</strong>siones?Un sistema público de p<strong>en</strong>siones es un mecanismo que elEstado manti<strong>en</strong>e con el fin de garantizar unos recursos que <strong>en</strong> teoría(y no siempre <strong>en</strong> la práctica) permitan mant<strong>en</strong>er un nivel digno devida a aquel<strong>las</strong> personas que han dejado de percibir tales recursospor causas aj<strong>en</strong>as a su voluntad como pued<strong>en</strong> ser la jubilación, la1invalidez o la muerte .¿Qué ti<strong>en</strong><strong>en</strong> que ver <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones públicas con la SeguridadSocial?El sistema público de p<strong>en</strong>siones forma parte del sistema de laSeguridad Social, que es un instrum<strong>en</strong>to del Estado que, además de<strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones, abarca muchos más ámbitos de protección social.¿Qué es la Seguridad Social?La seguridad social es un sistema ideado para proteger a lapoblación de una sociedad contra <strong>las</strong> privaciones económicas ysociales que pudieran afectarles.Según la Organización Internacional de Trabajo es la protecciónque la sociedad proporciona a sus miembros, mediante unaserie de medidas públicas, contra <strong>las</strong> privaciones económicas ysociales que, de no ser así, ocasionarían la desaparición o una fuerte2reducción de los ingresos .1 Algunos textos fundam<strong>en</strong>tales para <strong>en</strong>t<strong>en</strong>der la Seguridad Social <strong>en</strong> España son: 1) Los capítulossobre la Seguridad Social <strong>en</strong> España, escritos por Adolfo Jiménez <strong>en</strong> los Volúm<strong>en</strong>es I, II y III de “LaSituación Social de España”, colección dirigida por Vic<strong>en</strong>ç Navarro. 2) Arza, C. Kohli, M. “P<strong>en</strong>sionReform in Europe: Politics, policies and outcomes”. London, Routledge. 2007. 3) De la Fu<strong>en</strong>te, Mikel.“El sistema de p<strong>en</strong>siones <strong>en</strong> España. Evolución y perspectivas de futuro”. Comares, 2006.2 Organización Internacional del Trabajo. http://www.ilo.org/wow/PrintEditions/lang--es/docName--WCMS_122248/index.htm13


¿De qué riesgos nos protege, <strong>en</strong>tonces, la Seguridad Social?La Seguridad Social cubre <strong>las</strong> privaciones que puedan sufrir losindividuos a causa de <strong>en</strong>fermedad, maternidad, accid<strong>en</strong>te de trabajoo <strong>en</strong>fermedad laboral, desempleo, invalidez, vejez y muerte; ytambién la protección <strong>en</strong> forma de asist<strong>en</strong>cia médica y de ayuda a <strong>las</strong>familias con hijos.Por tanto, incluye <strong>en</strong>tre otros servicios la asist<strong>en</strong>cia sanitaria,<strong>las</strong> prestaciones por incapacidad temporal, <strong>las</strong> prestaciones pormaternidad, <strong>las</strong> prestaciones de at<strong>en</strong>ción a la tercera edad, <strong>las</strong>prestaciones por desempleo y <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones.¿Cuándo nace la Seguridad Social?El movimi<strong>en</strong>to obrero es el que inicia la demanda de que segarantice la seguridad y protección social durante el siglo XIX. Sonlos movimi<strong>en</strong>tos socialistas los que pid<strong>en</strong> la universalización de talprotección social, incorporando los derechos sociales y laboralescomo parte de la condición de ciudadanía. En esta concepción, lafinanciación de tales derechos prov<strong>en</strong>dría de los fondos g<strong>en</strong>eralesdel Estado y la provisión sería la responsabilidad del Estado.Este modelo (erróneam<strong>en</strong>te llamado modelo de Beveridge, pues elmodelo que este autor inspiró no fue universal) se desarrolló <strong>en</strong>aquellos países donde el movimi<strong>en</strong>to obrero fue más fuerte.En el otro modelo, el movimi<strong>en</strong>to obrero no consiguió launiversalización pues la resist<strong>en</strong>cia de <strong>las</strong> c<strong>las</strong>es dominantes <strong>en</strong>aquellos países lo impidió. Este segundo modelo no universalistagarantizó la protección social de los trabajadores y sus familias através de <strong>las</strong> aportaciones de los trabajadores y empresarios a <strong>las</strong>Cajas de la Seguridad Social, recibi<strong>en</strong>do los b<strong>en</strong>eficios sociales segúnsu nivel de contribuciones. Con el tiempo, y como resultado de <strong>las</strong>presiones continuas del movimi<strong>en</strong>to obrero, este segundo modelose ha ido ext<strong>en</strong>di<strong>en</strong>do, alcanzando niveles de cobertura muy ext<strong>en</strong>so,aún cuando nunca ha llegado a ser universal. Se le llama modeloBismarck pues se estableció durante el gobierno conservador delCanciller de Alemania Otto von Bismarck (<strong>en</strong> 1883, con la Ley del14


Seguro de Enfermedad). El término Seguridad Social fue utilizadopor primera vez <strong>en</strong> EEUU, durante la Administración Roosvelt.La difer<strong>en</strong>cia fundam<strong>en</strong>tal <strong>en</strong>tre los dos modelos es que elprimero es un sistema de solidaridad <strong>en</strong>tre los ciudadanos y elsegundo es un sistema de ahorro forzoso <strong>en</strong> el que los derechos seadquier<strong>en</strong> según el nivel de aportaciones basados <strong>en</strong> el mercado detrabajo.¿Cuándo nace la Seguridad Social <strong>en</strong> España?Se suele decir que nace de modo parcial <strong>en</strong> 1900 que es cuandose crea el primer seguro social que fue la Ley de Accid<strong>en</strong>tes deTrabajo. En 1908 se creó el Instituto Nacional de Previsión <strong>en</strong> el seintegraban <strong>las</strong> cajas que gestionaban los seguros sociales que<strong>en</strong>tonces ya iban surgi<strong>en</strong>do.Más tarde fueron naci<strong>en</strong>do otros derechos o seguros socialescomo el Retiro Obrero (1919), el Seguro Obligatorio de Maternidad(1923), el Seguro de Paro Forzoso (1931), el Seguro de Enfermedad(1942), y el Seguro Obligatorio de Vejez e Invalidez (SOVI) (1947).Durante la dictadura que gobernó España durante cuar<strong>en</strong>ta años sepromulgaron leyes (1963, 1966) que pret<strong>en</strong>dían la implantación deun modelo unitario e integrado de protección social para todos lostrabajadores pero <strong>en</strong> realidad dejó a muchos de ellos y a sus familiasfuera del sistema. Las cotizaciones no t<strong>en</strong>ían mucho que ver conlos salarios reales de los trabajadores y, además, no se aportaban losrecursos sufici<strong>en</strong>tes. Solo <strong>en</strong> la década de los och<strong>en</strong>ta com<strong>en</strong>zó auniversalizarse el sistema de seguridad social para que llegara a todoslos ciudadanos y se s<strong>en</strong>taron <strong>las</strong> bases para su estabilidad financiera.¿Cómo se financia la Seguridad Social?Originalm<strong>en</strong>te, el sistema de seguridad social se financiabamediante <strong>las</strong> cotizaciones sociales a lo que más tarde se añadieronfondos de los Presupuestos G<strong>en</strong>erales del Estado. En resum<strong>en</strong>, sefinancian a partir del salario de los propios trabajadores y de losimpuestos que pagaban todos los ciudadanos <strong>en</strong> proporciones que15


han variado a lo largo del tiempo y <strong>en</strong> los difer<strong>en</strong>tes países.Las reformas sucesivas que se han llevado a cabo <strong>en</strong> España y laaprobación del Pacto de Toledo (1997) establecieron lo que pasó allamarse “separación de fu<strong>en</strong>tes de financiación”. Lo que quiere decirque <strong>las</strong> prestaciones contributivas se financian a través de <strong>las</strong>cotizaciones sociales y que <strong>las</strong> prestaciones no contributivas yuniversales mediante <strong>las</strong> aportaciones del presupuesto del Estado(a través de impuestos g<strong>en</strong>erales).Actualm<strong>en</strong>te, <strong>las</strong> cotizaciones sociales repres<strong>en</strong>tan aproximadam<strong>en</strong>teel 88,1% de los recursos de la Seguridad Social, y <strong>las</strong>transfer<strong>en</strong>cias del Estado el 8,9%.¿Qué son <strong>las</strong> cotizaciones sociales?Son una parte del salario de los trabajadores que se destina afinanciar la Seguridad Social. Una proporción de el<strong>las</strong> la transfier<strong>en</strong>los empleadores directam<strong>en</strong>te al Estado y otra se descu<strong>en</strong>ta de lanómina de cada trabajador o trabajadora pero, <strong>en</strong> ambos casos, sal<strong>en</strong>o forman parte de la retribución de los asalariados. Por eso, cuandose propone reducir <strong>las</strong> cotizaciones sociales lo que realm<strong>en</strong>te seestá haci<strong>en</strong>do es proponer que baj<strong>en</strong> los salarios puesto que elempresario no sube el salario directo del trabajador cuando bajael salario indirecto (es decir la cotización social).¿Es obligado que se financie de esa forma la Seguridad Social?No. Como veremos más adelante, cada sociedad puede elegir elmodelo de financiación que considere más favorable o coher<strong>en</strong>tecon los objetivos que desee alcanzar. El que un país t<strong>en</strong>ga un sistemau otro dep<strong>en</strong>de <strong>en</strong> gran manera de <strong>las</strong> relaciones de fuerza exist<strong>en</strong>tes<strong>en</strong>tre el mundo del trabajo y el mundo empresarial.¿Qué tipos de sistemas de p<strong>en</strong>siones hay?Se pued<strong>en</strong> c<strong>las</strong>ificar desde dos puntos de vista fundam<strong>en</strong>tales.Por un lado, los sistemas de p<strong>en</strong>siones pued<strong>en</strong> basarse <strong>en</strong> dosmodelos g<strong>en</strong>erales: el modelo contributivo y el modelo universalista16


o no contributivo. Por otro, se distingu<strong>en</strong> dos sistemas, uno dereparto y otro de capitalización.En el modelo contributivo recib<strong>en</strong> p<strong>en</strong>siones aquel<strong>las</strong>personas que han cotizado a lo largo de su vida laboral. Bajo estesistema los empresarios ti<strong>en</strong><strong>en</strong> que destinar a la Caja de la SeguridadSocial una parte del salario del trabajador <strong>en</strong> forma de cotizacionessociales, <strong>las</strong> cuales se van acumulando <strong>en</strong> un fondo del que seobt<strong>en</strong>drán <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones <strong>en</strong> la época de jubilación. Se dice que esun sistema contributivo porque <strong>en</strong> realidad el trabajador estádestinando forzosam<strong>en</strong>te una parte de su salario a un fondopersonal del que se obt<strong>en</strong>drán <strong>en</strong> su mom<strong>en</strong>to <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones de sujubilación.El modelo universalista o no contributivo, <strong>en</strong> cambio, estábasado <strong>en</strong> los principios de solidaridad <strong>en</strong>tre ciudadanos y bajo suaplicación recib<strong>en</strong> p<strong>en</strong>siones todas <strong>las</strong> personas de una sociedad conindep<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia de que hayan trabajado o no a lo largo de su vida.¿Qué difer<strong>en</strong>cia existe <strong>en</strong>tre <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones contributivas y <strong>las</strong>p<strong>en</strong>siones no contributivas?Las p<strong>en</strong>siones contributivas son aquel<strong>las</strong> que se calculan apartir de <strong>las</strong> cotizaciones sociales que cada trabajador ha realizadodurante su vida laboral. Su cuantía final dep<strong>en</strong>de, precisam<strong>en</strong>te, de lacantidad y cuantía de dichas cotizaciones. Se financian íntegram<strong>en</strong>tea partir de <strong>las</strong> cotizaciones sociales.Las p<strong>en</strong>siones no contributivas son aquel<strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones que elEstado proporciona a aquel<strong>las</strong> personas que de otra formacarecerían de todo tipo de ingresos tras su jubilación, bi<strong>en</strong> sea por nohaber cotizado sufici<strong>en</strong>te o por no haber trabajado nunca <strong>en</strong> elmercado de trabajo. La cuantía de este tipo de p<strong>en</strong>siones estáestablecida por ley y se financian a través de los impuestos.¿De qué dep<strong>en</strong>de la cuantía de <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones no contributivas?S<strong>en</strong>cillam<strong>en</strong>te dep<strong>en</strong>de de la voluntad política del gobierno deturno. Así, si consideran que <strong>las</strong> cuantías actuales son insufici<strong>en</strong>tes17


para proporcionar un nivel de vida digno, podrán subir<strong>las</strong>financiándo<strong>las</strong> a través de los presupuestos del Estado. Si, por elcontrario, consideran que son sufici<strong>en</strong>tes <strong>en</strong> su cuantía, <strong>en</strong>tonces <strong>las</strong>mant<strong>en</strong>drán como están.¿Cuál es el sistema que hay <strong>en</strong> España?En España, como <strong>en</strong> la mayoría de los países desarrollados,existe un sistema mixto que combina el modelo contributivo con elmodelo no contributivo.Así, <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones contributivas se calculan de acuerdo a lo quecada persona ha cotizado a lo largo de su vida laboral. Y para aquel<strong>las</strong>personas que no han cotizado o cuyas p<strong>en</strong>siones son insufici<strong>en</strong>tespara un nivel de vida digno exist<strong>en</strong> un tipo de p<strong>en</strong>siones mínimas (nocontributivas) que regula el Estado.¿Qué son los planes de p<strong>en</strong>siones privados?Los llamados planes de p<strong>en</strong>siones privados son distintos a losplanes de p<strong>en</strong>siones públicos. En realidad, no son p<strong>en</strong>siones. Sonfondos privados constituidos simplem<strong>en</strong>te por el ahorro que cadapersona va depositando voluntariam<strong>en</strong>te poco a poco <strong>en</strong> una<strong>en</strong>tidad gestora –normalm<strong>en</strong>te un banco- hasta el mom<strong>en</strong>to de sujubilación. Esta <strong>en</strong>tidad gestora invierte ese ahorro <strong>en</strong> algún activoprivado –por ejemplo <strong>en</strong> el mercado financiero- y obti<strong>en</strong>e unar<strong>en</strong>tabilidad con ello. Una vez la persona se jubila puede retirar esosfondos que fue ahorrando durante su etapa laboral más la suma delos intereses que tales fondos pued<strong>en</strong> haber producido durantetodos aquellos años. Esta suma puede transformarse <strong>en</strong> una restacuando los intereses son negativos, es decir, cuando la r<strong>en</strong>tabilidadde los ahorros e inversiones es negativa como ocurre <strong>en</strong> <strong>las</strong>recesiones.¿Qué es un sistema de capitalización?Un sistema de p<strong>en</strong>siones de capitalización es aquel <strong>en</strong> el quecada cotizante recibe al final de su vida activa la p<strong>en</strong>sión que se18


corresponde con los fondos que ha ido acumulando y que el sistemacapitaliza a lo largo del tiempo invirtiéndolos <strong>en</strong> activos privados queg<strong>en</strong>eran intereses. Así, la p<strong>en</strong>sión que finalm<strong>en</strong>te reciba se calcularía<strong>en</strong> función que lo que cada trabajador haya cotizado por él mismomás los intereses dev<strong>en</strong>gados. Bajo este método cada trabajador sepaga su propia p<strong>en</strong>sión pero <strong>en</strong> una cuantía que <strong>en</strong> realidad dep<strong>en</strong>dedel r<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>to que el sistema sea capaz de obt<strong>en</strong>er de los fondosque acumule. Este r<strong>en</strong>dimi<strong>en</strong>to puede ser positivo o negativo. De ahíel riesgo que este tipo de p<strong>en</strong>siones ti<strong>en</strong>e para el p<strong>en</strong>sionista.¿Qué es un sistema de reparto?El sistema de p<strong>en</strong>siones de reparto es aquel <strong>en</strong> el que lostrabajadores van cotizando día a día y con los fondos que actualm<strong>en</strong>tese han g<strong>en</strong>erado se pagan <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones de los jubilados que<strong>en</strong> ese mom<strong>en</strong>to ti<strong>en</strong><strong>en</strong> derecho a recibir<strong>las</strong>, mi<strong>en</strong>tras que <strong>las</strong>p<strong>en</strong>siones de los jubilados de mañana se pagarán con <strong>las</strong> cotizacionesque <strong>en</strong> su día estén aportando los trabajadores. Este es el métodoque se aplica <strong>en</strong> España.¿Por qué <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones <strong>en</strong> España son un mecanismo deredistribución?Por dos razones. Primera, porque transfier<strong>en</strong> r<strong>en</strong>tas desde losperíodos de actividad hacia los períodos de no-actividad, ya que <strong>las</strong>r<strong>en</strong>tas que los b<strong>en</strong>eficiarios recib<strong>en</strong> cuando no trabajan han sidog<strong>en</strong>eradas <strong>en</strong> los períodos de actividad.Y segunda porque también redistribuy<strong>en</strong> intrag<strong>en</strong>eracionalm<strong>en</strong>te,es decir, <strong>en</strong>tre distintas g<strong>en</strong>eraciones, ya que <strong>las</strong> r<strong>en</strong>taspercibidas por los b<strong>en</strong>eficiarios, normalm<strong>en</strong>te personas jubiladas ycon más de 65 años, provi<strong>en</strong><strong>en</strong> de <strong>las</strong> contribuciones que realizan lostrabajadores de ese mom<strong>en</strong>to y que pert<strong>en</strong>ec<strong>en</strong> a g<strong>en</strong>eracionesposteriores.¿Podemos considerar que <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones son parte del salario?Efectivam<strong>en</strong>te <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones son una parte del salario de los19


trabajadores, tal y como hemos dicho que lo son <strong>las</strong> cotizacionessociales. Son un salario diferido y que <strong>en</strong> la literatura económica seconoce como parte del salario indirecto. En un s<strong>en</strong>tido amplio, laretribución que recib<strong>en</strong> los trabajadores la forman el salario directo,que es el que percib<strong>en</strong> directam<strong>en</strong>te cuando cobran la nómina; y elsalario indirecto, que percib<strong>en</strong> <strong>en</strong> forma de bi<strong>en</strong>es públicos que <strong>en</strong>realidad se financian con sus contribuciones; y el salario diferido, queson <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones.20


¿Qué se quiere decir cuando se habla de“crisis” de <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones públicas?¿Por qué se habla de crisis del sistema público de p<strong>en</strong>siones?Como hemos señalado, los sistemas modernos de p<strong>en</strong>siones seconsolidaron <strong>en</strong> la fase de expansión posterior a la segunda guerramundial, <strong>en</strong> la época que se ha llamado la “época dorada delcapitalismo”.Durante esta época, hubo un pacto social <strong>en</strong>tre el mundo deltrabajo, por un lado, y el mundo del capital por el otro. En este pacto,los trabajadores y sus sindicatos aceptaron el derecho a la propiedadpor parte de los empresarios a condición de que estos aceptaran laexpansión de los derechos laborales y sociales del mundo del trabajoy de <strong>las</strong> c<strong>las</strong>es populares. Fue durante este periodo cuando <strong>en</strong> lamayoría de países del mundo capitalista desarrollado se establecierony desarrollaron sus estados del bi<strong>en</strong>estar, incluy<strong>en</strong>do sussistemas de protección social. En los años set<strong>en</strong>ta, sin embargo,el mundo empresarial se rebeló y rompió el Pacto Social, y bajo ladirección del Presid<strong>en</strong>te Reagan <strong>en</strong> EEUU y la Sra. Thatcher <strong>en</strong>la Gran Bretaña, se com<strong>en</strong>zaron a aplicar una serie de políticaspúblicas, llamadas neoliberales, que redujeron tales derechos3laborales y sociales, privatizando la Seguridad Social .Para justificar la m<strong>en</strong>or transfer<strong>en</strong>cia de los estados a lossistemas de p<strong>en</strong>siones públicas se com<strong>en</strong>zaron a difundir tesiscatastrofistas afirmando que sería imposible financiarlos, que<strong>en</strong>trarían <strong>en</strong> una crisis inevitable y que, <strong>en</strong> consecu<strong>en</strong>cia, sería másconv<strong>en</strong>i<strong>en</strong>te sustituirlos por otros sistemas privados.3 Navarro, V. “Globalización económica, poder político y Estado del Bi<strong>en</strong>estar”. Editorial ArielEconómica, 2000; y Torres López, J. “Toma el dinero y corre. La globalización neoliberal del dineroy <strong>las</strong> finanzas”. Icaria. Barcelona 2005.21


¿Quiénes difundieron esas ideas y qué proponíanexactam<strong>en</strong>te?Inicialm<strong>en</strong>te se propuso directam<strong>en</strong>te la privatización delos sistemas públicos de reparto y su sustitución por otrosde capitalización. Así se hizo <strong>en</strong> <strong>las</strong> primeras experi<strong>en</strong>ciasneoliberales que se dieron <strong>en</strong> dictaduras como la chil<strong>en</strong>a de Pinochet(qui<strong>en</strong>, por cierto privatizó todas <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones m<strong>en</strong>os <strong>las</strong> de lapolicía y del ejército). Pero pronto se pudo de manifiesto que eranmuy inestables, poco eficaces y muy costosos.¿Qué consecu<strong>en</strong>cias t<strong>en</strong>ía este tipo de reforma radical?El sistema de p<strong>en</strong>siones privado pasaba a ser gestionado por elsistema financiero (es decir, de los bancos) que t<strong>en</strong>ía como objetivoaum<strong>en</strong>tar los ingresos y b<strong>en</strong>eficios del capital financiero, a costa delos intereses de la ciudadanía, incluy<strong>en</strong>do aquella que dep<strong>en</strong>día desus p<strong>en</strong>siones privadas. De esa forma se dinamitaba también elrégim<strong>en</strong> tradicional que había gobernado el sistema de p<strong>en</strong>sionesprácticam<strong>en</strong>te <strong>en</strong> todos los países. Sustituir el sistema de reparto porotro de capitalización llevaba consigo echar por tierra el cont<strong>en</strong>idoredistribuidor y solidario que hasta <strong>en</strong>tonces había estado implícito<strong>en</strong> la exist<strong>en</strong>cia de p<strong>en</strong>siones. Sustituir la gestión pública de losfondos por la privada implicaba también r<strong>en</strong>unciar a gestionar elahorro de los trabajadores mediante criterios políticos, lo que podíapermitir no dar cu<strong>en</strong>tas a la población de su utilización y evitar serc<strong>en</strong>surados <strong>en</strong> caso de que ésta no responda a <strong>las</strong> prefer<strong>en</strong>cialesciudadanas. En el sistema de capitalización, el criterio era lar<strong>en</strong>tabilidad de <strong>las</strong> empresas financieras, indep<strong>en</strong>di<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te delb<strong>en</strong>eficio que ello supusiese al p<strong>en</strong>sionista. En la Gran Recesión quehemos estado experim<strong>en</strong>tando hemos podido ver como <strong>las</strong>compañías de p<strong>en</strong>siones privadas (incluy<strong>en</strong>do los bancos) hanantepuesto sus intereses a <strong>las</strong> de sus usuarios, práctica g<strong>en</strong>eralizaday que adquiere dim<strong>en</strong>siones dramáticas <strong>en</strong> situaciones de crisiscomo la actual. El asegurami<strong>en</strong>to privado es, además de altam<strong>en</strong>tearriesgado, sesgado a favor del banco y <strong>en</strong> contra del b<strong>en</strong>eficiario.22


¿Qué dificultades conlleva poner <strong>en</strong> marcha la privatizaciónde <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones?En el sistema de reparto <strong>las</strong> g<strong>en</strong>eraciones que trabajanfinancian <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones de los que no trabajan. Pero <strong>en</strong> el sistema decapitalización, no hay tal transfer<strong>en</strong>cia interg<strong>en</strong>eracional. Entonces,la pregunta que debe hacerse es quién paga <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones de aquellosque se están jubilando y se estarán jubilando durante varios años. Larespuesta es, el Estado. Pero ello significa unos costes <strong>en</strong>ormes, unoscostes de transición muy elevados, tanto desde el punto de vistapuram<strong>en</strong>te económico como administrativo. Por otro, se trata de unproceso muy difícilm<strong>en</strong>te asumible socialm<strong>en</strong>te, que necesariam<strong>en</strong>teabriría un debate social tanto más amplio <strong>en</strong> la medida <strong>en</strong> quela propuesta fuese más radical. Y <strong>las</strong> debilidades intrínsecas a esedebate son muy grandes debido a que no hay <strong>en</strong> modo algunorazones definitivas para probar la conv<strong>en</strong>i<strong>en</strong>cia de la propuesta.Además, cualquier proceso hacia la privatización de <strong>las</strong>p<strong>en</strong>siones es contemplado socialm<strong>en</strong>te como una pérdida deb<strong>en</strong>eficios, lo que obliga a darle una sufici<strong>en</strong>te cobertura delegitimación que garantice el conv<strong>en</strong>cimi<strong>en</strong>to y la aceptación. Peroexperi<strong>en</strong>cias como la chil<strong>en</strong>a mostraban que eso iba a ser muy difícilporque sus costes sociales eran muy evid<strong>en</strong>tes, el número depersonas que se quedaban sin p<strong>en</strong>sión o que perdían sus derechosera muy alto y eso advertía de los riesgos de todo tipo que habría quecorrer si la opción se aplicaba sin más <strong>en</strong> otros países. Eso llevó a quelos organismos internacionales, la patronal y los gobiernos neoliberalesoptaran por una estrategia m<strong>en</strong>os radical y más disimulada.¿Cuál fue la propuesta inicial de reforma del Banco Mundial?La propuesta que realizó el Banco Mundial (1994) consistía <strong>en</strong>establecer dos pilares básicos: uno de p<strong>en</strong>sión mínima para “aliviar lapobreza <strong>en</strong> la ancianidad” gestionado por el sector público y otro de4gestión privada basado <strong>en</strong> la capitalización .4 World Bank. “Averting the Old Age crisis: Policies to protect the Old and Promote Growth”, NewYork: Oxford University Press 1994.23


¿Qué proponía <strong>en</strong> España la patronal?Prácticam<strong>en</strong>te lo mismo:- Nivel básico o mínimo predominantem<strong>en</strong>te público,aunque no exclusivam<strong>en</strong>te.- Segundo nivel, profesional, con predominio de la iniciativaprivada compatibilizada con la pres<strong>en</strong>cia de institucionespúblicas.- Nivel complem<strong>en</strong>tario, libre e individual, exclusivam<strong>en</strong>tegestionado por el sector privado.¿Y cómo se llevó a cabo este proceso?Una modificación de esta naturaleza era m<strong>en</strong>os problemáticaque la radical pero también era dificultosa porque debilitabainevitablem<strong>en</strong>te un sistema que la población apreciaba y había hechosuyo.Para poner <strong>en</strong> marcha la estrategia se avanzó <strong>en</strong> dosdirecciones:a) Justificar la necesidad de sustituir progresivam<strong>en</strong>te elsistema de p<strong>en</strong>siones públicas y para ello nada mejor quetratar de demostrar su inviabilidad financiera a medioplazo. Eso dio lugar a una ing<strong>en</strong>te producción académicade trabajos e investigaciones financiada <strong>en</strong> su inm<strong>en</strong>samayoría por bancos e instituciones financieras y dirigida amostrar que el sistema de p<strong>en</strong>siones públicas estaría <strong>en</strong>quiebra <strong>en</strong> unas pocas dec<strong>en</strong>as de años y que, por lo tanto,había que reformarlo y sustituirlo por otro difer<strong>en</strong>te.24b) Aplicar reformas parciales que, por un lado, fues<strong>en</strong>m<strong>en</strong>guando la cobertura y la capacidad protectora delsistema público y, paralelam<strong>en</strong>te, que fues<strong>en</strong> fortaleci<strong>en</strong>doel sistema complem<strong>en</strong>tario de gestión privada.


¿Qué medidas y reformas parciales se han ido adoptando conla excusa de la inviabilidad futura del sistema público dep<strong>en</strong>siones?Las medidas propuestas incluy<strong>en</strong>:- Reducción progresiva de <strong>las</strong> prestaciones del sistemapúblico.- Modificación de los sistemas de cálculo, aum<strong>en</strong>tandolos años necesarios para acceder a <strong>las</strong> prestaciones y lost<strong>en</strong>idos <strong>en</strong> cu<strong>en</strong>ta para calcular el montante de <strong>las</strong>p<strong>en</strong>siones.- Aum<strong>en</strong>to de la edad de jubilación.- Adopción de mecanismos de indiciación que limitaran laposibilidad de mejora sustancial de <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones recibidas.- Apoyo fiscal muy g<strong>en</strong>eroso a los fondos de p<strong>en</strong>sionesprivados.¿Qué consecu<strong>en</strong>cias han t<strong>en</strong>ido todas estas reformas?Al disponer de m<strong>en</strong>os fondos, al disminuir sus cuantías y al sermás favorable el ahorro privado, los ciudadanos han percibido queefectivam<strong>en</strong>te había una “crisis” del sistema de p<strong>en</strong>siones públicas yhan tratado de destinar una parte de sus ahorros (qui<strong>en</strong>es hanpodido hacerlo) a fondos privados que es, <strong>en</strong> definitiva, lo que ibanbuscando los bancos y <strong>las</strong> <strong>en</strong>tidades financieras como explicaremosmás adelante.¿Cuál es la situación <strong>en</strong> España? ¿Qué es el Pacto de Toledo?El llamado Pacto de Toledo se pres<strong>en</strong>tó <strong>en</strong> 1995 <strong>en</strong> Españacomo la fórmula que podría permitir evitar que el debate de <strong>las</strong>p<strong>en</strong>siones quedara sometido a <strong>las</strong> idas y v<strong>en</strong>idas de la coyunturapolítica, planteándose como una “cuestión de Estado”.Posiblem<strong>en</strong>te, fue el resultado de que ninguna de <strong>las</strong> partesimplicadas estaba <strong>en</strong> condiciones de imponer su alternativa: optarclaram<strong>en</strong>te y sin fisuras por un sistema público basado <strong>en</strong> elprincipio de solidaridad como deseaban <strong>las</strong> izquierdas o por uno de25


capitalización o de predominante gestión privada como pedíansectores próximos a la Banca.¿Qué aspectos positivos incluye el Pacto de Toledo?El Pacto de Toledo conti<strong>en</strong>e propuestas que pued<strong>en</strong> considerarsemuy positivas desde el punto de vista del fortalecimi<strong>en</strong>to delsistema público:- el acuerdo para que <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones no contributivas pas<strong>en</strong> aser financiados con cargo a los Presupuestos G<strong>en</strong>erales delEstado,- los compromisos de mant<strong>en</strong>imi<strong>en</strong>to del poder adquisitivo,la creación de un fondo de reserva y el compromiso poraum<strong>en</strong>tarlo, y- los compromisos de adopción de medidas ori<strong>en</strong>tadas aampliar <strong>las</strong> prestaciones y el alcance del sistema <strong>en</strong> algunosámbitos como la conciliación laboral, la inmigración,situaciones de dep<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia y discapacitados, <strong>en</strong>tre otros.¿Y qué aspectos negativos conlleva?El Pacto de Toledo admitía la posibilidad y conv<strong>en</strong>i<strong>en</strong>cia delos sistemas complem<strong>en</strong>tarios privados e incluso la de los seguros dedep<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia igualm<strong>en</strong>te privados, lo que ha resultado <strong>en</strong> unaexpansión de estos sectores. También ac<strong>en</strong>túa el principio decontribución a costa del principio de solidaridad, diluy<strong>en</strong>do elcompromiso con la universalización de los b<strong>en</strong>eficios.Además establece una desconexión <strong>en</strong>tre la situaciónfinanciera de la Seguridad Social y el tipo de políticas económicasque se aplican y que marcan la posibilidad de alcanzar unos u otrosritmos de crecimi<strong>en</strong>to.¿Protege <strong>en</strong>tonces el Pacto de Toledo el sistema público dep<strong>en</strong>siones?El Pacto de Toledo constituye una afirmación institucional deldeseo de mant<strong>en</strong>er <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones públicas pero ni <strong>en</strong> su letra ni <strong>en</strong> sudesarrollo se <strong>en</strong>cu<strong>en</strong>tran medidas que lo apuntal<strong>en</strong> definitivam<strong>en</strong>te.26


Por eso es muy importante que los def<strong>en</strong>sores del sistema públicofortalezcan constantem<strong>en</strong>te sus posiciones <strong>en</strong> la negociación que sepueda ir realizando al respecto, sobre todo, combati<strong>en</strong>do <strong>las</strong>informaciones inadecuadas e interesadas que a veces se difund<strong>en</strong>para confundir a la población, haciéndole creer que su desmantelami<strong>en</strong>toy sustitución por la iniciativa privada es más conv<strong>en</strong>i<strong>en</strong>tey favorable para todos, cuando <strong>en</strong> realidad eso solo b<strong>en</strong>eficia a <strong>las</strong><strong>en</strong>tidades financieras y a <strong>las</strong> c<strong>las</strong>es adineradas.¿Es inevitable <strong>en</strong>tonces ir hacia la privatización del sistemapúblico de p<strong>en</strong>siones?En este docum<strong>en</strong>to mostraremos que el interés <strong>en</strong> cambiar elsistema de p<strong>en</strong>siones público por uno privado no responde anecesidades reales y técnicas sino más bi<strong>en</strong> a <strong>las</strong> necesidadeseconómicas de los bancos y otras <strong>en</strong>tidades financieras que haríanun negocio muy lucrativo si ese cambio se llevara a cabo. Además,veremos que el deterioro del sistema de p<strong>en</strong>siones públicas conllevaigualm<strong>en</strong>te el deterioro de <strong>las</strong> condiciones de vida de la población y,especialm<strong>en</strong>te, de aquel<strong>las</strong> personas <strong>en</strong> peor situación económica.Por tanto, no se puede considerar que la privatización completao progresiva del sistema de p<strong>en</strong>siones públicas sea inevitable, comonada lo es <strong>en</strong> la historia de los seres humanos. Mi<strong>en</strong>tras que <strong>las</strong> c<strong>las</strong>espopulares y sus repres<strong>en</strong>tantes políticos y sindicales t<strong>en</strong>gan el podersufici<strong>en</strong>te, podrán evitar que los grandes grupos financieros llev<strong>en</strong> acabo unos cambios que solo se dirig<strong>en</strong> a que ellos puedan apropiarsemás cómodam<strong>en</strong>te de los recursos sociales.27


¿Llevan razón qui<strong>en</strong>es afirman que elsistema público de p<strong>en</strong>siones es inviable?¿Hay cons<strong>en</strong>so sobre ello?¿Qué argum<strong>en</strong>tos dan los def<strong>en</strong>sores de la progresivaprivatización?Aunque fueron muy dispares pued<strong>en</strong> sintetizarse <strong>en</strong> lossigui<strong>en</strong>tes:- La evolución demográfica hará que cada vez haya máspersonas jubiladas y m<strong>en</strong>os trabajando, de modo que seráimposible que haya recursos sufici<strong>en</strong>tes para financiar <strong>las</strong>p<strong>en</strong>siones.- Las tasas de desempleo t<strong>en</strong>derán a aum<strong>en</strong>tar y, por tanto,habrá m<strong>en</strong>os cotizantes y, <strong>en</strong> consecu<strong>en</strong>cia, también m<strong>en</strong>osrecursos para financiar<strong>las</strong>.- La edad de incorporación al primer empleo ti<strong>en</strong>de aretrasarse. Como eso acorta la vida activa, disminuye elperíodo <strong>en</strong> que se puede estar cotizando y habrá m<strong>en</strong>osfondos para financiar <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones.- La vida activa también se acorta porque igualm<strong>en</strong>te seti<strong>en</strong>de a la reducción de la edad de jubilación, ya sea porqueesto se pot<strong>en</strong>cia para luchar por el desempleo o porquelos sistemas vig<strong>en</strong>tes inc<strong>en</strong>tivan la jubilación al ofrecerp<strong>en</strong>siones atractivas.¿Qué dic<strong>en</strong> que habría que hacer <strong>en</strong>tonces?Los def<strong>en</strong>sores de la privatización argum<strong>en</strong>tan que comoconsecu<strong>en</strong>cia de esas circunstancias van a g<strong>en</strong>erarse m<strong>en</strong>os recursos.Además, se dice que <strong>las</strong> alternativas posibles para mant<strong>en</strong>er <strong>las</strong>29


p<strong>en</strong>siones públicas tales como aum<strong>en</strong>tar <strong>las</strong> cotizaciones sociales,increm<strong>en</strong>tar la aportación del Estado a la financiación del sistema, oelevar la presión fiscal global, no son factibles. De ahí que concluy<strong>en</strong>que la única alternativa posible es avanzar cuanto antes <strong>en</strong> ladirección privatizadora que acabamos de apuntar.¿Hay un cons<strong>en</strong>so g<strong>en</strong>eralizado sobre la necesidad deabandonar o de privatizar el sistema público de p<strong>en</strong>sionesporque éste sea inviable?Los def<strong>en</strong>sores de la privatización afirman que sus propuestasrespond<strong>en</strong> a un cons<strong>en</strong>so unánime <strong>en</strong>tre los expertos. Pero eso no escierto. De ninguna manera existe tal cons<strong>en</strong>so porque son muchoslos expertos que han demostrado claram<strong>en</strong>te lo contrario y que laprivatización total o parcial de la seguridad social es innecesaria,salvo si se quiere b<strong>en</strong>eficiar a los grandes capitales financieros.Son muchos los economistas, incluso premios Nobel de5economía como Joseph Stiglitz , conocedores de la experi<strong>en</strong>ciasinternacionales llevadas a cabo a nivel mundial como Mesa Lago6,expertos <strong>en</strong> España como Adolfo Jiménez, Camila Arza,Felipe Serrano, Ignacio Zubiri, Vic<strong>en</strong>ç Navarro <strong>en</strong>tre otros, que handemostrado <strong>en</strong> repetidas ocasiones y por difer<strong>en</strong>tes vías, que <strong>las</strong>tesis neoliberales de privatización de <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones carec<strong>en</strong> defundam<strong>en</strong>to y rigor ci<strong>en</strong>tífico7. Importantes instituciones como laOrganización Internacional del Trabajo o el Consejo de Europa hanmant<strong>en</strong>ido posiciones críticas respecto a <strong>las</strong> propuestas el Banco5 Stiglitz, Joseph y Orszag, Peter. “Un Nuevo Análisis de la Reforma de <strong>las</strong> P<strong>en</strong>siones: Diez MitosSobre los Sistemas de Seguridad Social”. Pon<strong>en</strong>cia <strong>en</strong> la Confer<strong>en</strong>cia “Nuevas Ideas sobre la Seguridad<strong>en</strong> la Vejez”. Banco Mundial. Washington 14-15/9/1999.6 Mesa Lago, Carmelo. “Evaluación de un cuarto de siglo de reformas estructurales de p<strong>en</strong>siones <strong>en</strong>América Latina”. Revista de la CEPAL, nº 84 (2004), pp. 59.82.7 Entre otras de sus obras pued<strong>en</strong> verse: Arza, C. “El sistema español de p<strong>en</strong>siones <strong>en</strong> elcontexto europeo: estructura institucional, reformas e impactos sociales” <strong>en</strong> Navarro, V. (director).“La situación social de España/III”. Biblioteca Nueva. Madrid 2009; Jiménez, A. “La evolución de laSeguridad Social <strong>en</strong> España. Evolución y situación actual”, <strong>en</strong> Navarro, V. (director). “La situaciónsocial de España/III”, cit.; Serrano, F., García, M.A., y Bravo, C. “El sistema español de p<strong>en</strong>siones”.Ariel Sociedad Económica, Madrid 2004; Zubiri, I. “El futuro del sistema de p<strong>en</strong>siones <strong>en</strong> España”.Instituto de Estudios Fiscales. Madrid 2003. Navarro, V. (ed). “The Political Economy of the WelfareState”. 2007.30


Mundial. Incluso algunos líderes políticos como la Presid<strong>en</strong>ta delGobierno chil<strong>en</strong>o, la Sra. Bachelet, que gobernó un país donde ti<strong>en</strong>evig<strong>en</strong>cia desde la dictadura un sistema de p<strong>en</strong>siones privado (quepoco a poco se pret<strong>en</strong>de revertir) han afirmado claram<strong>en</strong>te a raíz desu propia experi<strong>en</strong>cia, que el sistema privado que se pret<strong>en</strong>deimponer manifiesta grandes defici<strong>en</strong>cias.¿Quiénes pon<strong>en</strong> <strong>en</strong> cuestión la viabilidad del sistema?Es fácil comprobar que los def<strong>en</strong>sores de la privatización máso m<strong>en</strong>os <strong>en</strong>cubierta de <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones públicas son los grandesempresarios que desean dejar de pagar cotizaciones sociales, losbancos que pret<strong>en</strong>d<strong>en</strong> gestionar los ahorros ahora <strong>en</strong> manos delsector público, o economistas que están <strong>en</strong> su nómina o seducidospor la fe ciega <strong>en</strong> el libre mercado y su mano invisible. Además,los políticos de ideología liberal o incluso algunos de adscripciónformalm<strong>en</strong>te socialdemócrata que aplican, <strong>en</strong> la práctica, los principiosneoliberales.¿Aciertan <strong>en</strong> sus previsiones qui<strong>en</strong>es constantem<strong>en</strong>te auguranla inviabilidad del sistema público de p<strong>en</strong>siones?También es fácil comprobar que los “expertos” que vi<strong>en</strong><strong>en</strong>insisti<strong>en</strong>do <strong>en</strong> que el sistema público de p<strong>en</strong>siones está cond<strong>en</strong>ado ala quiebra se equivocan continuam<strong>en</strong>te <strong>en</strong> sus predicciones.El caso español es esclarecedor. Para argum<strong>en</strong>tar sus propuestasprivatizadoras todos ellos habían previsto primero que <strong>en</strong> elemblemático año 2000 se produciría un importante déficit delsistema, como anticipo de su deterioro v<strong>en</strong>idero. Y lo mismovaticinaron más tarde para 2005.8Herce aseguraba <strong>en</strong> junio de 2009 que “el sistema público dep<strong>en</strong>siones español <strong>en</strong>trará <strong>en</strong> déficit <strong>en</strong> torno al año 2020”, unapredicción ampliam<strong>en</strong>te difundida por los medios y que lógicam<strong>en</strong>teconllevaba la natural preocupación a los ciudadanos. Pero este8 Herce, José A. “Declaraciones <strong>en</strong> la comparec<strong>en</strong>cia <strong>en</strong> la Comisión no perman<strong>en</strong>te deseguimi<strong>en</strong>to y evaluación de los acuerdos del Pacto de Toledo del Congreso de los Diputados el9 de junio de 2009”. Diario de Sesiones, nº 305, p. 16. 2009.31


mismo autor había pronosticado <strong>en</strong> un trabajo publicado <strong>en</strong> 1995que la Seguridad Social t<strong>en</strong>dría un déficit del 0,62% del PIB <strong>en</strong> 2000y del 0,77% <strong>en</strong> 2005; <strong>en</strong> otro trabajo de 1996 que el déficit sería del1,37% del PIB <strong>en</strong> 2000 y del 1,80% <strong>en</strong> 2005; <strong>en</strong> otro estudio conJ. Alonso que sería del 0,96% del PIB <strong>en</strong> 2000 y del 1,17% <strong>en</strong> 2005 y<strong>en</strong> su último estudio de 2000 que sería del 0,16% del PIB <strong>en</strong> 2005 ydel 0,03% <strong>en</strong> 20059.Sin embargo, lo cierto fue que que al finalizar el año 2000 laSeguridad Social no registró déficit como Herve había pronosticadosino un superávit del 0,4%, y del 1,1% <strong>en</strong> 2005.También erraron otros def<strong>en</strong>sores de <strong>las</strong> tesis liberales comoPiñera y Weinstein (1996) que habían pronosticado un déficit del0,42% del PIB para 2000 y del 0,75% para 2005, Barea y otrosinvestigadores que afirmaron sería del 1,61% del PIB <strong>en</strong> 2000 eincluso el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (1995) que estimóun déficit del 0,10% del PIB <strong>en</strong> 2000 y del 0,40% para 200510.¿Por qué fallan tanto <strong>las</strong> predicciones de qui<strong>en</strong>es vaticinan queel sistema público se hundirá sin remedio?La mayoría de estos análisis están ideologizados, <strong>en</strong> el s<strong>en</strong>tidode que part<strong>en</strong> de supuestos que respond<strong>en</strong> a prefer<strong>en</strong>cias y que noson ci<strong>en</strong>tíficos. Las hipótesis de <strong>las</strong> que part<strong>en</strong> se establec<strong>en</strong> apropósito para que se puedan alcanzar los resultados que se buscan.Así, J.F. Jim<strong>en</strong>o, para poder afirmar que el sistema de p<strong>en</strong>sionespúblicas es insost<strong>en</strong>ible supone que hasta 2050 habrá una tasa decrecimi<strong>en</strong>to del Producto Interior Bruto del 1,5% anual y de un3,22% de la p<strong>en</strong>sión, lo que <strong>en</strong> opinión de Felipe Serrano y otrosexpertos son dos ritmos de crecimi<strong>en</strong>to “incompatibles para9 Herce, José A. et alia (1996). “El futuro de <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones <strong>en</strong> España: Hacia un sistema mixto”.Servicio de Estudios de La Caixa. Barcelona. 1996 Herce, José A. y Alonso, Javier (1998). “Los efectoseconómicos de la Ley de Consolidación de la Seguridad Social”. Docum<strong>en</strong>to de Trabajo de FEDEA.Publicado también <strong>en</strong> Haci<strong>en</strong>da Pública Española, nº 152, pp 51-66. 1998. Herce, José A. y Alonso,Javier (2000). “La reforma de <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones ante la revisión del Pacto de Toledo”. La Caixa, Barcelona.2000.10 Ver Herce, José A. y Alonso, Javier. “La reforma de <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones ante la revisión del Pacto deToledo”. La Caixa. Barcelona 2000.32


cualquier distribución de la r<strong>en</strong>ta <strong>en</strong>tre remuneración de asalariadosy exced<strong>en</strong>te empresarial incluso <strong>en</strong> un esc<strong>en</strong>ario de pérdida depoblación <strong>en</strong> edad de trabajar”11. A veces, como también han puestode manifiesto Felipe Serrano y sus coautores, los def<strong>en</strong>sores de <strong>las</strong>tesis catastrofistas hac<strong>en</strong> vaticinios con presupuestos e hipótesis quecontradic<strong>en</strong> los establecidos solo unos pocos meses antes. Sonfácilm<strong>en</strong>te rebatibles ci<strong>en</strong>tíficam<strong>en</strong>te, pero los daños que produce el“ruido” que consigu<strong>en</strong> hacer cuando trasladan sus conclusiones a <strong>las</strong>ociedad es casi siempre inevitable.¿Hay previsiones más acertadas por parte de qui<strong>en</strong>esdefi<strong>en</strong>d<strong>en</strong> el sistema público?Los expertos que defi<strong>en</strong>d<strong>en</strong> el sistema público de p<strong>en</strong>siones,como Adolfo Jiménez y su equipo <strong>en</strong> la Secretaría G<strong>en</strong>eral de laSeguridad Social, predijeron correctam<strong>en</strong>te que no habría talcolapso <strong>en</strong> los años nov<strong>en</strong>ta, alcanzando superávit <strong>en</strong> los 2000tal como ocurrió. Un saldo positivo que incluso se mantuvo <strong>en</strong> unaño muy negativo como 2008, cuando registró de nuevo unsuperávit equival<strong>en</strong>te al 1,31% del PIB. También son mucho másrealistas y acertados los análisis realizados por los equipos deestudios de los sindicatos o por los autores que acabamos de citar <strong>en</strong>la nota anterior.¿Es excesivo <strong>en</strong>tonces, como dic<strong>en</strong> los informes liberales, elcoste del sistema público de p<strong>en</strong>siones?Algunos autores liberales como Taguas y Sáez han d<strong>en</strong>unciadoque el coste de la seguridad social <strong>en</strong> España am<strong>en</strong>aza con destruir<strong>las</strong> bases mismas del sistema de p<strong>en</strong>siones. Según ellos, el costepasaría de ser el 7,7% del PIB <strong>en</strong> 2004 a un 17,9% del PIB <strong>en</strong> 2059,algo que consideran excesivo12a pesar de que no es mucho másalto del porc<strong>en</strong>taje que actualm<strong>en</strong>te dedican a p<strong>en</strong>siones países d<strong>en</strong>uestro <strong>en</strong>torno como Italia (14%). Este error lo ha hecho también11 Serrano, F., García Díaz, M.A. y Bravo, C. “El sistema español de p<strong>en</strong>siones...”, ob. cit., p. 165.12 Navarro, Vic<strong>en</strong>ç. “¿La Seguridad Social <strong>en</strong> España es inviable?”. Temas para el debate. Mayo 2007.33


el Banco de España y la Comisión Europea.Este es uno de los errores metodológicos más importantes yfrecu<strong>en</strong>tes que aparece <strong>en</strong> los informes del Banco de España y de laComisión Europea, y que ha sido reproducido <strong>en</strong> gran número deartículos y editoriales. Tal argum<strong>en</strong>to indica que el porc<strong>en</strong>tajedel PIB <strong>en</strong> p<strong>en</strong>siones subirá de un 8,4% <strong>en</strong> el año 2007 a un 15,1%del PIB <strong>en</strong> el año 2060, un porc<strong>en</strong>taje que estos informes señalancomo excesivo, pues la sociedad <strong>en</strong> el año 2060 no podrá absorbertales gastos pues restarán recursos necesarios para otras actividades,programas o servicios a la población no p<strong>en</strong>sionista. El hecho de queel porc<strong>en</strong>taje de gasto <strong>en</strong> p<strong>en</strong>siones públicas alcanzará el 15,1% <strong>en</strong> el2060 se considera una noticia alarmante que requiere una interv<strong>en</strong>ciónya ahora, disminuy<strong>en</strong>do los b<strong>en</strong>eficios de los p<strong>en</strong>sionistas.En este argum<strong>en</strong>to se ignora el impacto del crecimi<strong>en</strong>to de laproductividad sobre el PIB del año 2060. Supongamos que elcrecimi<strong>en</strong>to anual de la productividad es un 1,5%, un crecimi<strong>en</strong>toque incluso el Banco de España admite como razonable. En estecaso, el valor del PIB español será 2,23 veces mayor que el PIB delaño 2007. Ello quiere decir que si consideramos el valor del PIBdel año 2007 como 100, el del año 2060 será de 223. Pues bi<strong>en</strong>, elnúmero de recursos para los no p<strong>en</strong>sionistas <strong>en</strong> el año 2007 fue de100 m<strong>en</strong>os 8,4 (8,4 es la cantidad que nos gastamos aquel año <strong>en</strong>p<strong>en</strong>sionistas), es decir, 91,6. En el año 2060 los recursos a losp<strong>en</strong>sionistas serán el 15,1% de 223, es decir 33, y para los nop<strong>en</strong>sionistas será 223 m<strong>en</strong>os 33, es decir, 192, una cantidad que esmás del doble de la exist<strong>en</strong>te <strong>en</strong> el año 2007, 91,6. Debido alcrecimi<strong>en</strong>to de la productividad, <strong>en</strong> el año 2060 habrá más recursospara los no p<strong>en</strong>sionistas que hoy, y ello a pesar de que el porc<strong>en</strong>tajedel PIB dedicado a p<strong>en</strong>siones es superior <strong>en</strong> el año 2060 que <strong>en</strong> el2007. Los que alarman innecesariam<strong>en</strong>te a la población olvidan unhecho muy elem<strong>en</strong>tal. Hace cincu<strong>en</strong>ta años, España dedicaba a <strong>las</strong>p<strong>en</strong>siones sólo un 3% del PIB. Hoy es un 8%, más del doble quecincu<strong>en</strong>ta años atrás. Y la sociedad ti<strong>en</strong>e muchos más fondos paralos no p<strong>en</strong>sionistas de los que había <strong>en</strong>tonces, aún cuando el porc<strong>en</strong>-34


taje del PIB <strong>en</strong> p<strong>en</strong>siones sea mucho mayor ahora que <strong>en</strong>tonces. Porcierto, ya hace cincu<strong>en</strong>ta años, cuando España se gastaba un 3% delPIB <strong>en</strong> p<strong>en</strong>siones, había voces liberales que decían que <strong>en</strong> cincu<strong>en</strong>taaños se doblaría o triplicaría tal porc<strong>en</strong>taje, arruinando el país. Puesbi<strong>en</strong>, estamos cincu<strong>en</strong>ta años más tarde, y el país ti<strong>en</strong>e más recursospara los no p<strong>en</strong>sionistas que existían <strong>en</strong>tonces, aún cuando el13porc<strong>en</strong>taje del PIB dedicado a p<strong>en</strong>siones se ha doblado .¿Están los ciudadanos de acuerdo con mant<strong>en</strong>er un sistemapúblico de p<strong>en</strong>siones?El aprecio que la ciudadanía de los países europeos ti<strong>en</strong>e a losdifer<strong>en</strong>tes Estados del Bi<strong>en</strong>estar es bi<strong>en</strong> conocido por multitud de<strong>en</strong>cuestas. Y también que los ciudadanos son conocedores de que elprecio a pagar por mant<strong>en</strong>erlos y mejorarlos está medidos por lapresión fiscal que han de soportar.Una reci<strong>en</strong>te <strong>en</strong>cuesta revelaba que un 57,8% de la poblaciónespañola prefiere pagar impuestos altos con tal de mant<strong>en</strong>er unamplio sistema de seguridad social. La misma <strong>en</strong>cuesta tambiénmostraba que el 75,1% de los españoles considera que el Estadoti<strong>en</strong>e que t<strong>en</strong>er la responsabilidad principal de asegurar un nivel devida digno a los ciudadanos fr<strong>en</strong>te a un 21,0% que considera que esaresponsabilidad descansa <strong>en</strong> uno mismo.Sobre <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones, el estudio indicaba que un 75,0% de losespañoles considera que el Estado ti<strong>en</strong>e “mucha” responsabilidad ala hora de asegurar una p<strong>en</strong>sión sufici<strong>en</strong>te para <strong>las</strong> personasjubiladas, fr<strong>en</strong>te a un 22,4% que considera que ti<strong>en</strong>e “bastante”responsabilidad y un insignificante 2,6% que considera que ti<strong>en</strong>e14“poca” o “ninguna” responsabilidad .Es preciso, pues, que se sepa que <strong>las</strong> propuestas liberales,además de estar infundadas ci<strong>en</strong>tíficam<strong>en</strong>te, están <strong>en</strong> contra la losdeseos de la inm<strong>en</strong>sa mayoría de la población.13 Navarro, V. “Las P<strong>en</strong>siones son viables”. El Viejo Topo. 200614 Fundación BBVA, “Percepción del Modelo Económico y valoración de la crisis”, Julio 2009.http://www.fbbva.es/TLFU/dat/Pres<strong>en</strong>tacion_percepcion_modelo_economico_valoracion_crisis.pdf35


Si la mayoría de la población está a favor de un sistema públicode p<strong>en</strong>siones ¿debemos temer que este sistema no se privaticeparcial o totalm<strong>en</strong>te?Es un error p<strong>en</strong>sar que la c<strong>las</strong>e política no se atreverá aprivatizar un sistema tan apreciado por los ciudadanos, puesto queson muchos y muy cuantiosos los intereses <strong>en</strong> juego. De hecho, losanalistas liberales conoc<strong>en</strong> perfectam<strong>en</strong>te la opinión que ti<strong>en</strong><strong>en</strong> losciudadanos sobre el sistema público de p<strong>en</strong>siones y son sabedores deque <strong>en</strong> caso de llevar a cabo una privatización parcial o total delmismo t<strong>en</strong>dría lugar una gran oposición popular.Precisam<strong>en</strong>te por ello, estos mismos analistas han desarrolladodifer<strong>en</strong>tes estrategias para evitar dicho <strong>en</strong>fr<strong>en</strong>tami<strong>en</strong>to, que vandesde la sutil desinformación y propaganda acerca de los planes dep<strong>en</strong>siones privados hasta el descarado int<strong>en</strong>to de procurar aprobar<strong>las</strong> reformas privatizadoras <strong>en</strong> órganos poco democráticos como laUnión Europea.¿Qué papel ti<strong>en</strong>e la Unión Europa respecto al sistema dep<strong>en</strong>siones?La forma escasam<strong>en</strong>te democrática <strong>en</strong> que se toman <strong>las</strong>decisiones <strong>en</strong> la Unión Europea hace que pueda ser utilizada paraimponer medidas poco populares.Si <strong>las</strong> reformas privatizadoras se impusieran desde arriba, estoes, desde la Unión Europea, los partidos políticos españoles noasumirían el coste electoral al quedar desvinculados del procesomismo de privatización. En ese caso, aunque los ciudadanos protestas<strong>en</strong>ante los políticos españoles, éstos no t<strong>en</strong>drían más que mirarpara otro sitio o echar balones fuera.¿Cómo se utiliza la Unión Europea para aprobar <strong>las</strong> reformasprivatizadoras?Los grandes banqueros y los lobbies de los empresariospued<strong>en</strong> presionar a la Unión Europea para que lleve a cabo <strong>las</strong>reformas que <strong>en</strong> ningún país se atrevería a tomar la c<strong>las</strong>e política36


local por el coste político y electoral que conllevaría. Esta es laopinión explícita de Vinc<strong>en</strong>zo Ga<strong>las</strong>so, un analista liberal <strong>en</strong> cuyoinforme aseguraba lo sigui<strong>en</strong>te:“Las decisiones aquí propuestas podrían facilitarsetrasladando la responsabilidad por su establecimi<strong>en</strong>to a laUnión Europea -y muy <strong>en</strong> especial a la Comisión Europealocual sería posible por el déficit democrático exist<strong>en</strong>te <strong>en</strong>la U.E. Su falta de t<strong>en</strong>er que dar cu<strong>en</strong>tas a la ciudadanía(acountability) permitiría que fuera ésta la que impusieratales decisiones que se tomarían <strong>en</strong> contra de los deseos delos votantes exist<strong>en</strong>tes hoy pero a favor de los intereses15de los que todavía no han nacido” .15 Ca<strong>las</strong>o, V. “The political future of social security in aging societies”. The MIT Press, Mass. 200637


¿Con qué argum<strong>en</strong>tos se critica al sistemapúblico de p<strong>en</strong>siones?¿Cuál es el argum<strong>en</strong>to demográfico que se utiliza parajustificar la privatización de <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones?Desde hace años se vi<strong>en</strong>e insisti<strong>en</strong>do <strong>en</strong> que la evolucióndemográfica va a ser muy negativa para la sufici<strong>en</strong>cia financiera delsistema porque <strong>las</strong> estimaciones demográficas más aceptadasanuncian que la evolución de <strong>las</strong> tasas de natalidad y mortalidadllevará consigo un aum<strong>en</strong>to de la población de más edad <strong>en</strong> elconjunto de la población. Según esas hipótesis, se producirá<strong>en</strong>tonces un increm<strong>en</strong>to sustancial de la población jubilada,mi<strong>en</strong>tras que será cada vez m<strong>en</strong>or la proporción de los ciudadanos<strong>en</strong> edad de trabajar. En consecu<strong>en</strong>cia, se deduce que la relación <strong>en</strong>trep<strong>en</strong>sionistas y cotizantes (la llamada tasa de dep<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia) t<strong>en</strong>derá aaum<strong>en</strong>tar, lo que provocará que haya recursos insufici<strong>en</strong>tes parafinanciar <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones públicas.¿Qué es la tasa de dep<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia?La tasa de dep<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia es un indicador estadístico que puedecalcularse de difer<strong>en</strong>tes formas según el propósito para el que seutilice. Para lo que aquí pret<strong>en</strong>demos podemos definirla como larelación <strong>en</strong>tre la cantidad de personas que recib<strong>en</strong> p<strong>en</strong>siones y <strong>las</strong>que cotizan.¿Cómo influye el <strong>en</strong>vejecimi<strong>en</strong>to de la población <strong>en</strong> la tasa dedep<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia?El <strong>en</strong>vejecimi<strong>en</strong>to de la población supone un increm<strong>en</strong>to <strong>en</strong> latasa de dep<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia porque aum<strong>en</strong>ta el número de p<strong>en</strong>sionistas <strong>en</strong>relación con el de cotizantes.39


Si se reduce el número de cotizantes y se amplía el número depersonas que ti<strong>en</strong><strong>en</strong> derecho a p<strong>en</strong>siones, <strong>en</strong>tonces cada trabajadorque cotiza está sufragando <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones de cada vez más g<strong>en</strong>te.O, dicho de otra forma, aum<strong>en</strong>tan los gastos (p<strong>en</strong>siones satisfechas)y se reduc<strong>en</strong> los ingresos (cotizaciones efectuadas).¿Es verdad que el <strong>en</strong>vejecimi<strong>en</strong>to afecta negativa einevitablem<strong>en</strong>te al sistema de p<strong>en</strong>siones?El <strong>en</strong>vejecimi<strong>en</strong>to de la población no ti<strong>en</strong>e por qué significarnecesariam<strong>en</strong>te que se produzca un desequilibrio <strong>en</strong>tre los ingresosy los gastos <strong>en</strong> el sistema público de p<strong>en</strong>siones porque al mismotiempo que aum<strong>en</strong>ta el número de p<strong>en</strong>sionistas pued<strong>en</strong> modificarseotros factores de los que dep<strong>en</strong>de el equilibrio <strong>en</strong>tre ambos.¿A qué se le llama equilibrio financiero del sistema dep<strong>en</strong>siones?Se llama equilibrio financiero del sistema de p<strong>en</strong>siones a <strong>las</strong>ituación <strong>en</strong> la que los recursos g<strong>en</strong>erados por el propio sistema dep<strong>en</strong>siones son sufici<strong>en</strong>tes para hacer fr<strong>en</strong>te al montante dep<strong>en</strong>siones que hay que satisfacer. Es decir, se alcanza el equilibriofinanciero cuando <strong>las</strong> cotizaciones sociales <strong>en</strong> un determinadomom<strong>en</strong>to son sufici<strong>en</strong>tes para hacer fr<strong>en</strong>te a <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones de esemismo mom<strong>en</strong>to.Sin embargo, para poder decir si se puede alcanzar esteequilibrio o no (como quier<strong>en</strong> demostrar los que propon<strong>en</strong> laprivatización) hay que determinar cuáles son todos los factores delos que dep<strong>en</strong>de el equilibrio y qué problemas le pued<strong>en</strong> afectar.¿De qué variables dep<strong>en</strong>de el equilibrio financiero?La cantidad de ingresos que proced<strong>en</strong> de <strong>las</strong> cotizacionesdep<strong>en</strong>de lógicam<strong>en</strong>te de <strong>las</strong> cotizaciones mismas, pero éstas dep<strong>en</strong>d<strong>en</strong>a su vez de una gran cantidad de variables a t<strong>en</strong>er <strong>en</strong> cu<strong>en</strong>ta.Por lo tanto, para que la financiación del sistema llegue adesequilibrarse no basta con que la población <strong>en</strong>vejezca y aum<strong>en</strong>te el40


gasto, sino que deberían darse otras circunstancias que ti<strong>en</strong><strong>en</strong> quever con <strong>las</strong> fu<strong>en</strong>tes capaces de g<strong>en</strong>erar los ingresos de donde sal<strong>en</strong> <strong>las</strong>cotizaciones sociales.Los factores más importantes que hac<strong>en</strong> que pueda aum<strong>en</strong>tar odisminuir el volum<strong>en</strong> de <strong>las</strong> cotizaciones sociales son los sigui<strong>en</strong>tes:- El empleo y desempleo exist<strong>en</strong>tes.- El nivel salarial.- El volum<strong>en</strong> de actividad económica y su evolución a lolargo del tiempo, es decir, la tasa de crecimi<strong>en</strong>to económico.- La distribución de la r<strong>en</strong>ta.- La calidad del empleo.- La productividad del trabajo.- La ext<strong>en</strong>sión de la economía sumergida.- La tasa de actividad y de empleo fem<strong>en</strong>ina.Solo cuando, además del <strong>en</strong>vejecimi<strong>en</strong>to, todos estos factoresevolucionaran negativam<strong>en</strong>te podría av<strong>en</strong>turarse que habría problemasfinancieros para el sistema público de p<strong>en</strong>siones.¿Cómo afecta el paro al equilibrio financiero del sistema dep<strong>en</strong>siones?Los altos niveles de desempleo, especialm<strong>en</strong>te <strong>en</strong> la poblaciónmás jov<strong>en</strong> y <strong>en</strong> el paro de larga duración, reduc<strong>en</strong> la cantidad deingresos <strong>en</strong> el sistema de p<strong>en</strong>siones porque, lógicam<strong>en</strong>te, losdesempleados no pued<strong>en</strong> cotizar y, de esa forma, no pued<strong>en</strong> destinarrecursos a los fondos de p<strong>en</strong>siones.En cambio, si estuvies<strong>en</strong> trabajando se increm<strong>en</strong>taríanotablem<strong>en</strong>te la cantidad de ingresos y se podría mant<strong>en</strong>er conmayor facilidad el equilibrio financiero del sistema de p<strong>en</strong>siones.¿Qué papel desempeña la mayor o m<strong>en</strong>or capacidad deg<strong>en</strong>erar actividad económica sobre el sistema de p<strong>en</strong>sionespúblicas?Cuando el nivel de actividad de una economía es más alto, <strong>las</strong>cotizaciones sociales suel<strong>en</strong> ser también más elevadas. Por tanto,41


incluso <strong>en</strong> condiciones de alto <strong>en</strong>vejecimi<strong>en</strong>to, el sistema de p<strong>en</strong>sionespúblico puede ser completam<strong>en</strong>te viable si la economía escapaz de mant<strong>en</strong>er ritmos adecuados de progreso de la actividadeconómica.Sin embargo, es importante señalar que la mera exist<strong>en</strong>cia detasas positivas de crecimi<strong>en</strong>to económico no garantiza por sí sola nila viabilidad del sistema ni el alcance de un mayor progresoeconómico y social. Si el crecimi<strong>en</strong>to económico se mide exclusivam<strong>en</strong>tecon variables como el Producto Interior Bruto (PIB), qu<strong>en</strong>o ti<strong>en</strong><strong>en</strong> <strong>en</strong> cu<strong>en</strong>ta ni la calidad de la actividad, ni <strong>las</strong> actividades nomonetarias, ni los daños al medio ambi<strong>en</strong>te, ni el despilfarro derecursos, <strong>en</strong>tre otras cosas, el crecimi<strong>en</strong>to puede ser realm<strong>en</strong>te unproceso de destrucción de recursos y de deterioro económico.Eso indica que los análisis de los def<strong>en</strong>sores de la privatizaciónbasados solam<strong>en</strong>te <strong>en</strong> hipótesis (ya de por sí infundadas)sobre la evolución del PIB no pued<strong>en</strong> ser consideradas ni creíblesni rigurosas ni, como la experi<strong>en</strong>cia ha demostrado, capaces deproporcionar previsiones realistas.¿Cómo influye la distribución de la r<strong>en</strong>ta <strong>en</strong> la inviabilidad delsistema?La desigual distribución de la r<strong>en</strong>ta afecta muy negativam<strong>en</strong>teal mant<strong>en</strong>imi<strong>en</strong>to del equilibrio financiero de <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones. Y no espara m<strong>en</strong>os: la t<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia a la disminución de los salarios reales, o latónica de distribución privilegiada a favor de los b<strong>en</strong>eficios, mermagravem<strong>en</strong>te el volum<strong>en</strong> recaudado de cotizaciones sociales.Y <strong>en</strong> un país como el nuestro, <strong>en</strong> donde la participación de lossalarios <strong>en</strong> la r<strong>en</strong>ta ha desc<strong>en</strong>dido más de diez puntos porc<strong>en</strong>tuales<strong>en</strong> los últimos treinta años, este es un verdadero factor de distorsión16<strong>en</strong> dicho equilibrio financiero .¿Y cómo influye la calidad del empleo?La ext<strong>en</strong>sión g<strong>en</strong>eralizada del empleo precario o de baja16 Annual macro-economic database of the European Commission’s, AMECO (2009)42


calidad también afecta muy negativam<strong>en</strong>te al equilibrio financierodel sistema de p<strong>en</strong>siones porque implica salarios más reducidos, loque a su vez supone un m<strong>en</strong>or nivel de cotizaciones sociales.¿Qué ocurre cuando hay altos grados de economíasumergida?Cuando una gran parte de la actividad económica está fuerade la ley, como ocurre con la llamada economía sumergida, no seg<strong>en</strong>eran cotizaciones sociales y, por lo tanto, no se contribuye aldesarrollo del sistema público de p<strong>en</strong>siones.¿Cómo influye sobre <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones la escasa participaciónfem<strong>en</strong>ina <strong>en</strong> el mercado de trabajo?Como hemos señalado, los ingresos necesarios para financiar<strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones o vi<strong>en</strong><strong>en</strong> de <strong>las</strong> cotizaciones sociales de los trabajadoresempleados o de los impuestos, que podrán proporcionar unamayor recaudación cuanto más empleo haya <strong>en</strong> la economía. Por esoes muy importante que el empleo fem<strong>en</strong>ino sea el mayor posible. SiEspaña tuviera la tasa de participación de la mujer <strong>en</strong> el mercado detrabajo que ti<strong>en</strong>e Suecia, habría tres millones más de trabajadoraspagando impuestos y cotizando a la Seguridad Social. Mi<strong>en</strong>tras quet<strong>en</strong>er una tasas de actividad y empleo fem<strong>en</strong>inas mucho más bajasque <strong>las</strong> de los países de nuestro <strong>en</strong>torno significa r<strong>en</strong>unciar a unagran fu<strong>en</strong>te de ingresos.Por eso, una vía fundam<strong>en</strong>tal para garantizar el futuro de <strong>las</strong>p<strong>en</strong>siones es acabar con <strong>las</strong> dificultades que <strong>en</strong>cu<strong>en</strong>tran <strong>las</strong> mujerespara incorporarse al mercado de trabajo. Y para ello es precisofom<strong>en</strong>tar la corresponsabilidad <strong>en</strong>tre hombres y mujeres para qu<strong>en</strong>o sean solam<strong>en</strong>te éstas <strong>las</strong> que se hagan cargo del trabajodoméstico, e invertir <strong>en</strong> escue<strong>las</strong> de infancia y <strong>en</strong> serviciosdomiciliarios.La integración de <strong>las</strong> mujeres <strong>en</strong> el mercado de trabajo es unainversión pública de gran calado que es una estrategia fundam<strong>en</strong>talpara garantizar el futuro de <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones públicas.43


¿Cómo es que los análisis que defi<strong>en</strong>d<strong>en</strong> la privatización noti<strong>en</strong><strong>en</strong> <strong>en</strong> cu<strong>en</strong>ta estas variables?Es muy significativo que no contempl<strong>en</strong> este tipo de variablesy que, como hemos dicho, se c<strong>en</strong>tr<strong>en</strong> <strong>en</strong> establecer hipótesis (qu<strong>en</strong>unca resultan acertadas) sobre la evolución del PIB. Ello demuestraque su int<strong>en</strong>ción no es la de establecer previsiones objetivas sinojustificar sus propuestas privatizadoras que han establecido conanterioridad a la realización de los análisis.¿Cómo habría que razonar <strong>en</strong>tonces para poder establecerhipótesis sobre el equilibrio financiero de <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones ycómo actuar para alcanzarlo?Habría que considerar todas esas variables y no solo <strong>las</strong>demográficas y la evolución del PIB.Si se quisiera garantizar el equilibrio financiero del sistema loque habría que hacer sería incidir sobre todas estas variables arribadescritas.Por ejemplo, impulsar políticas que t<strong>en</strong>gan como objetivog<strong>en</strong>erar actividad productiva y la creación de empleo dec<strong>en</strong>te,aum<strong>en</strong>tar la masa salarial y su participación <strong>en</strong> el conjunto de <strong>las</strong>r<strong>en</strong>tas, mejorar la distribución de la r<strong>en</strong>ta, mejorar la calidad <strong>en</strong> elempleo, increm<strong>en</strong>tar la productividad mediante inversión <strong>en</strong> I+D+i,facilitar la integración de <strong>las</strong> mujeres <strong>en</strong> el mercado de trabajo, oluchar contra el fraude fiscal y la economía sumergida para integrar<strong>en</strong> el sistema una gran cantidad de recursos y r<strong>en</strong>tas que hoy <strong>en</strong> díapermanec<strong>en</strong> <strong>en</strong> la ilegalidad y no se traduc<strong>en</strong> <strong>en</strong> más ingresos delsistema de la seguridad social.¿Justifica el aum<strong>en</strong>to de la esperanza de vida el alargami<strong>en</strong>to<strong>en</strong> la edad de jubilación?Uno de los errores más ext<strong>en</strong>didos <strong>en</strong>tre los def<strong>en</strong>sores de laprivatización es que el aum<strong>en</strong>to <strong>en</strong> la esperanza de vida obliga aretrasar la edad de jubilación para poder mant<strong>en</strong>er los ingresos delsistema, lo que les permite obviar que hay otras medidas socialm<strong>en</strong>te44


más b<strong>en</strong>eficiosas para fortalecer el sistema de p<strong>en</strong>siones públicas.Es también un error porque del aum<strong>en</strong>to de la esperanza devida promedio <strong>en</strong> España (que ha pasado de 76 a 80 años <strong>en</strong>tre 1980y 2005) se deduce que el ciudadano medio español vive ahora cuatroaños más. Lo cual no es cierto. Supongamos que España tuviera sólodos habitantes. Uno, Pepito, que muere al día sigui<strong>en</strong>te de nacer, y elotro, la Sra. María que ti<strong>en</strong>e 80 años. La esperanza de vida promediode España sería 0 años más 80 años dividido <strong>en</strong>tre dos, es decir,cuar<strong>en</strong>ta años. Pero supongamos que <strong>en</strong> un país imaginario vecinohay también dos ciudadanos: uno, Juan, que <strong>en</strong> lugar de morir al díasigui<strong>en</strong>te de nacer, como Pepito <strong>en</strong> España, vive veinte años, y la otrapersona es la Sra. Victoria que ti<strong>en</strong>e también 80 años como laSra. María. En este país imaginario, la esperanza promedio de vidaes de 20 más 80 dividido <strong>en</strong>tre dos, es decir 50 años, diez añosmás que <strong>en</strong> España. Ello no quiere decir (como constantem<strong>en</strong>te semalinterpreta este dato) que el ciudadano promedio de aquel paísviva diez años más que <strong>en</strong> España: lo que el dato de esperanza devida dice es que hay diez años de vida más <strong>en</strong> el promedio de aquelcolectivo de dos personas, sin clarificar que ello se deba a que laSra. Victoria viva diez años más que la Sra. María (lo cual no escierto), o que sea Juan el que vive veinte años más que Pepito.Todos los docum<strong>en</strong>tos que defi<strong>en</strong>d<strong>en</strong> la reducción de <strong>las</strong>p<strong>en</strong>siones concluy<strong>en</strong> que la Sra. María vive diez años más, lo cual,como hemos visto, no es así. Y por tanto, alargar la edad dejubilación con esta interpretación errónea es evid<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te unerror.¿Cuál es la consecu<strong>en</strong>cia de este error?Lo que ha estado ocurri<strong>en</strong>do <strong>en</strong> España (y <strong>en</strong> Europa) es que lamortalidad infantil ha ido disminuy<strong>en</strong>do de una manera muymarcada, con lo cual la esperanza de vida ha ido aum<strong>en</strong>tando,pasando de 76 años a 80 años. Ello no quiere decir, comohabitualm<strong>en</strong>te se asume, que el anciano viva cuatro años más ahoraque hace veinticinco años. La mortalidad por cada grupo de edad ha45


ido desc<strong>en</strong>di<strong>en</strong>do (incluy<strong>en</strong>do <strong>en</strong>tre los ancianos), pero los años devida que el anciano vive ahora no es de cuatro años más que <strong>en</strong> 1980.Calcular <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones tomando como base esta lectura errónea delos datos p<strong>en</strong>aliza a la población, pues asume que los ancianos viv<strong>en</strong>más años de los que <strong>en</strong> realidad viv<strong>en</strong>.¿Es bu<strong>en</strong>o alargar la vida laboral?, ¿afecta esa medida porigual a todos los ciudadanos?Alargar la vida laboral puede ser un gran b<strong>en</strong>eficio para uncatedrático universitario que disfruta con su trabajo pero es una graninjusticia exigirle cinco o dos años más de trabajo a una persona delimpieza de la Universidad que ha realizado un trabajo manualy repetitivo durante toda su vida laboral. De hecho, tal comohan docum<strong>en</strong>tado varios estudios epidemiológicos, la salud delprofesional universitario a los 70 años es mucho mejor que la saludde la trabajadora manual no cualificada, la cual, a los ses<strong>en</strong>ta añosti<strong>en</strong>e ya el nivel de salud que el catedrático ti<strong>en</strong>e a los set<strong>en</strong>ta años(ver los trabajos del profesor Chandola del University College ofLondon ampliam<strong>en</strong>te popularizados por la BBC).Por eso, proponer que aum<strong>en</strong>te obligatoriam<strong>en</strong>te la edad dejubilación para todas <strong>las</strong> personas por igual, con indep<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia deldesgaste sufrido a lo largo de su vida laboral y de su estado actual desalud, es extraordinariam<strong>en</strong>te injusto.¿Cuáles son <strong>las</strong> consecu<strong>en</strong>cias del retraso obligatorio de laedad de jubilación?En España, los años de vida de una persona dep<strong>en</strong>d<strong>en</strong> de suc<strong>las</strong>e social. En g<strong>en</strong>eral, un burgués vive dos años más que unpequeño burgués que vive dos años más que un profesional de c<strong>las</strong>emedia alta, que vive dos años más que un trabajador no cualificadoque vive dos años más que un trabajador no cualificado con más decinco años de paro. La difer<strong>en</strong>cia <strong>en</strong>tre el primero y el último sondiez años, una de <strong>las</strong> mortalidades difer<strong>en</strong>ciales por c<strong>las</strong>e socialmás altas de la Unión Europea (cuyo promedio son siete años).46


Es profundam<strong>en</strong>te injusto que la persona de la limpieza de laUniversidad, t<strong>en</strong>ga que trabajar dos años más (algunos como DavidTaguas pid<strong>en</strong> incluso cinco años más) para pagar <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones queun Catedrático que va a sobrevivirle seis años más.¿Qué medidas respecto a la edad de jubilación deberíamosllevar a cabo?Se debe ajustar la edad real de jubilación, que está sobre los 62años, a la edad legal, situada <strong>en</strong> los 65 años, pero establecer edadessuperiores de jubilación con carácter obligatorio es un grave error.Incluso países con esperanza de vidas mayores y con tasas dedep<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia más grandes que España (tales como Suecia, Francia,Alemania y Bélgica) ti<strong>en</strong><strong>en</strong> edades de jubilación <strong>en</strong>tre los 60 y los 65años. Según datos de la Organización Internacional del Trabajo, <strong>en</strong>2007 sólo Estados Unidos (65,8 años), Noruega e Islandia (67 años)t<strong>en</strong>ían una edad de jubilación superior a los 65 años. Y sólo elgobierno de coalición alemán liderado por Angela Merkel y elgobierno federal republicano del Presid<strong>en</strong>te Bush han hecho lapropuesta de retrasar la edad de jubilación a 67 años. En España,Taguas y Sáez propusieron nada m<strong>en</strong>os que un retraso de la edad dejubilación a los 70 años, una propuesta única hoy <strong>en</strong> los paísesdesarrollados y, como hemos señalado, profundam<strong>en</strong>te antisocial einjusta.Por el contrario, es mucho más justo y efici<strong>en</strong>te permitir laprolongación de la vida laboral con carácter voluntario para aquel<strong>las</strong>personas que lo dese<strong>en</strong>.¿Cómo afecta la discriminación, basada <strong>en</strong> edad, a <strong>las</strong>p<strong>en</strong>siones?El mundo empresarial habla constantem<strong>en</strong>te de la necesidadde rejuv<strong>en</strong>ecer <strong>las</strong> plantil<strong>las</strong>, prejubilando a los trabajadores conmayor edad, para sustituirlos por trabajadores más jóv<strong>en</strong>es.Constantem<strong>en</strong>te se utiliza la imag<strong>en</strong> de que se está def<strong>en</strong>di<strong>en</strong>doexcesivam<strong>en</strong>te a los “insiders” (es decir a los que ti<strong>en</strong><strong>en</strong> trabajos47


fijos) a costa de los “outsiders” (los que no ti<strong>en</strong><strong>en</strong>). Se establec<strong>en</strong> asídivisiones <strong>en</strong>tre la c<strong>las</strong>e trabajadora, <strong>en</strong>fr<strong>en</strong>tando a los jóv<strong>en</strong>es fr<strong>en</strong>tea los de mayor edad. La lucha de c<strong>las</strong>es se olvida, sustituyéndola conla lucha de g<strong>en</strong>eraciones, una lucha que ac<strong>en</strong>túa la discriminacióncontra <strong>las</strong> personas ancianas y de edad madura que está muyg<strong>en</strong>eralizada <strong>en</strong> España.De ahí que debiera haber leyes antidiscriminación por edad(como ti<strong>en</strong><strong>en</strong> Finlandia o EEUU) <strong>en</strong> los que se prohibiera laprejubilación por edad. En España <strong>las</strong> prejubilaciones han sidoutilizadas ampliam<strong>en</strong>te para reducir la plantilla y la masa salarial.Estas medidas han empeorado la financiación de <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones puesal prejubilar a un trabajador que ha estado trabajando muchos años,se reduce la cotización social, si<strong>en</strong>do sustituida por una cotizaciónsocial m<strong>en</strong>or (la del trabajador con m<strong>en</strong>or vida laboral y m<strong>en</strong>orsalario) o por ninguna cotización, <strong>en</strong> caso de que no se le reemplace.En ambos casos el trabajador de edad avanzada, pasa de ser cotizantea ser b<strong>en</strong>eficiario con lo cual quedan afectadas <strong>las</strong> cu<strong>en</strong>tas de laSeguridad Social.En este aspecto es importante subrayar que los países queti<strong>en</strong><strong>en</strong> un gasto <strong>en</strong> p<strong>en</strong>siones más alto son precisam<strong>en</strong>te aquellosque ti<strong>en</strong><strong>en</strong> un porc<strong>en</strong>taje m<strong>en</strong>or de la población de 50 a 65 añostrabajando. Las prejubilaciones dañan la viabilidad de la SeguridadSocial. Las políticas de retrasar obligatoriam<strong>en</strong>te la edad dejubilación debieran eliminarse y <strong>en</strong> su lugar, desinc<strong>en</strong>tivar <strong>las</strong>prejubilaciones, sancionando al empresariado que <strong>las</strong> utiliza comomedidas de ahorro de puestos de trabajo o de salarios.En cuanto a los trabajadores jóv<strong>en</strong>es, el mayor problema es suprecariedad, que les lleva a cambiar de trabajo con gran frecu<strong>en</strong>cia, locual implica unas cotizaciones sociales bajas e interrumpidas. Estacondición de precariedad no se basa -como los liberales proclaman<strong>en</strong>la supuesta excesiva seguridad de los trabajadores de mayor edad,sino <strong>en</strong> la escasa seguridad de los más jóv<strong>en</strong>es, y es el resultado delexcesivo poder empresarial que dificulta su sindicalización, comoconsecu<strong>en</strong>cia del tipo de trabajo y lugar de producción y distribución48


<strong>en</strong> donde se ubica su trabajo. El llamado deseo de modernizar <strong>las</strong>plantil<strong>las</strong> (basadas <strong>en</strong> un supuesto erróneo y falso, de que laproductividad dep<strong>en</strong>de de la edad) es, <strong>en</strong> realidad, el deseo de diluirla sindicalización de la fuerza laboral.¿Son demasiado elevadas <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones <strong>en</strong> España?Otro argum<strong>en</strong>to que suel<strong>en</strong> argum<strong>en</strong>tar los partidarios de privatizar<strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones públicas es que éstas son demasiado g<strong>en</strong>erosas<strong>en</strong> España. Pero se trata de un argum<strong>en</strong>to exagerado y falso, comopuede comprobarse fácilm<strong>en</strong>te si se hace un estudio comparado.En realidad, el problema de <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones –tanto contributivascomo no contributivas- no es su excesiva g<strong>en</strong>erosidad sino precisam<strong>en</strong>telo contrario: son demasiado bajas. La insufici<strong>en</strong>cia de <strong>las</strong>p<strong>en</strong>siones no contributivas es un hecho ampliam<strong>en</strong>te reconocido <strong>en</strong>España.Pero lo que no es tan conocido es que incluso <strong>las</strong> contributivasson bajas <strong>en</strong> comparación con el promedio de los países de la UniónEuropea de los quince (EU-15) el grupo de países más cercanos aEspaña por su nivel de desarrollo económico. La p<strong>en</strong>siónmedia contributiva <strong>en</strong> España es sólo el 68% de la p<strong>en</strong>sión mediacontributiva de la UE-15 (homologada por el tipo de p<strong>en</strong>siones ymedida no por la tasa de sustitución de los salarios –que son muybajos <strong>en</strong> España- sino por la cantidad de la p<strong>en</strong>sión). Y la p<strong>en</strong>sión nocontributiva es sólo el 46% del promedio de la UE-15.¿Se correspond<strong>en</strong> los niveles de p<strong>en</strong>siones exist<strong>en</strong>tes <strong>en</strong>España con nuestro nivel de riqueza?Para valorar el significado de los datos anteriores que muestranque <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones españo<strong>las</strong> no son, como dic<strong>en</strong> los liberales,demasiado g<strong>en</strong>erosas, hay que t<strong>en</strong>er <strong>en</strong> cu<strong>en</strong>ta que España ti<strong>en</strong>e unnivel de riqueza (medido por su PIB per cápita) semejante alpromedio de la UE-15: su PIB per cápita es ya el 92,7% del PIB percápita promedio de la UE-15. Sin embargo, su gasto social per cápitaes sólo el 62% del promedio de la UE-15.49


Si nos gastásemos el porc<strong>en</strong>taje del gasto social que noscorresponde por nuestro nivel de riqueza debiéramos gastarnosmás de 72.000 millones de euros más de lo que nos gastamos.Según los datos elaborados por la oficina europea de estadística(EUROSTAT) España destina el 19,7% del PIB (2003) a gasto<strong>en</strong> protección social mi<strong>en</strong>tras que el promedio de la UE-15 esdel 28,3%. Si se consideran los gastos de vejez, invalidez y superviv<strong>en</strong>cia,el porc<strong>en</strong>taje sobre el PIB es de 9,8%, ocupando elp<strong>en</strong>último lugar de la UE-15 (2003), fr<strong>en</strong>te a países como Suecia17(17,6%) o Alemania (14,7%) .¿Qué conv<strong>en</strong>dría hacer <strong>en</strong>tonces con la cuantía de <strong>las</strong>p<strong>en</strong>siones <strong>en</strong> España?Además de por la razón que acabamos de apuntar, la subida de<strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones es una medida política prácticam<strong>en</strong>te obligada <strong>en</strong>función de la dinámica que ha seguido la economía española <strong>en</strong> losúltimos años.Hemos pasado de un modelo de crecimi<strong>en</strong>to económico <strong>en</strong> elque los ciudadanos al jubilarse t<strong>en</strong>ían a su disposición una vivi<strong>en</strong>dade propiedad completam<strong>en</strong>te pagada a un modelo <strong>en</strong> el que losfuturos jubilados aún t<strong>en</strong>drán que seguir pagando sus vivi<strong>en</strong>dashipotecadas. En esa situación, sólo una subida de <strong>las</strong> p<strong>en</strong>sionescomp<strong>en</strong>sará la pérdida de nivel adquisitivo al que harán fr<strong>en</strong>te losnuevos jubilados españoles. En consecu<strong>en</strong>cia, España debe gastarse<strong>en</strong> su Estado del Bi<strong>en</strong>estar, incluy<strong>en</strong>do su Seguridad Social, más delo que se gasta actualm<strong>en</strong>te.¿Deb<strong>en</strong> reducirse, como pid<strong>en</strong> los empresarios, <strong>las</strong>cotizaciones sociales?La demanda de la patronal española responde a un nuevoint<strong>en</strong>to de apropiación de aún mayor parte del exced<strong>en</strong>te económicog<strong>en</strong>erado <strong>en</strong> el proceso de producción.17 Navarro, V., Quiroga, A. “La protección social <strong>en</strong> España y su desconverg<strong>en</strong>cia con la UniónEuropea”. Universidad Internacional M<strong>en</strong>éndez Pelayo, Santander 2003.50


Como recordábamos más arriba, la participación de lossalarios <strong>en</strong> la r<strong>en</strong>ta ha desc<strong>en</strong>dido <strong>en</strong> España más de diez puntosporc<strong>en</strong>tuales <strong>en</strong> los últimos treinta años, lo que significa que losincrem<strong>en</strong>tos de productividad (el increm<strong>en</strong>to <strong>en</strong> la cantidad deproducción g<strong>en</strong>erada por hora de trabajo) de los últimos años hanido fundam<strong>en</strong>talm<strong>en</strong>te a los b<strong>en</strong>eficios empresariales, mi<strong>en</strong>tras queap<strong>en</strong>as han repercutido <strong>en</strong> <strong>las</strong> r<strong>en</strong>tas salariales.¿Por qué lo pid<strong>en</strong> <strong>en</strong>tonces?La petición de la patronal española es una simplereivindicación política destinada a lograr una proporción másgrande <strong>en</strong> el “reparto de la tarta” pero que se hace sin fundam<strong>en</strong>toeconómico alguno. De llevarse a la práctica puede arrastrar a lapobreza a un número importante de jubilados y jubiladas que veránmermada seriam<strong>en</strong>te su capacidad adquisitiva. Su interés no es otroque el afán de lucro y la búsqueda incesante de más y más b<strong>en</strong>eficios,sin tomar <strong>en</strong> consideración <strong>las</strong> consecu<strong>en</strong>cias económicas y socialesque ello <strong>en</strong>traña.Y si no hubiera ingresos sufici<strong>en</strong>tes para financiar <strong>las</strong>p<strong>en</strong>siones públicas por la vía de <strong>las</strong> cotizaciones sociales¿habría que r<strong>en</strong>unciar a el<strong>las</strong>, o se podrían financiar por otrosmedios?Además de financiar el sistema de p<strong>en</strong>siones públicas por la víade <strong>las</strong> cotizaciones sociales, también se puede financiar directam<strong>en</strong>tepor vía impositiva. El sost<strong>en</strong>imi<strong>en</strong>to del sistema público dep<strong>en</strong>siones se facilita si se utiliza esta vía y así se permite que lostrabajadores se apropi<strong>en</strong> también de una mayor parte del exced<strong>en</strong>teeconómico.Además, la carga fiscal <strong>en</strong> España (porc<strong>en</strong>taje de los impuestossobre el PIB) es uno de los más bajos de la UE-15, lo que significaque su capacidad recaudatoria dista mucho de haberse agotado.Y dado que <strong>en</strong> España el sistema impositivo no es demasiadoprogresivo y está sujeto a un grado <strong>en</strong>orme de evasión fiscal (por51


inoperancia de los instrum<strong>en</strong>tos del Estado destinados a evitarla),se podría lograr un gran increm<strong>en</strong>to de ingresos públicos si sefortalecieran <strong>las</strong> estrategias de lucha contra el fraude y se llevaran acabo reformas fiscales que hicieran más justo el sistema.52


¿Es mejor un sistema privado de ahorro queuno de p<strong>en</strong>siones públicas?¿Hay argum<strong>en</strong>tos incuestionables a favor de la privatizacióndel sistema público de p<strong>en</strong>siones?El discurso liberal ha desarrollado difer<strong>en</strong>tes argum<strong>en</strong>tos paratratar de demostrar que los planes de p<strong>en</strong>siones privados (que <strong>en</strong>realidad, como hemos señalado anteriorm<strong>en</strong>te, son el simple ahorropersonal que cada uno pueda ser capaz de realizar) son másefici<strong>en</strong>tes que el sistema público de p<strong>en</strong>siones. Sin embargo, dichosargum<strong>en</strong>tos distan mucho de ser considerados pl<strong>en</strong>am<strong>en</strong>te ciertos ypued<strong>en</strong> ser contrapesados con otros tantos posiblem<strong>en</strong>te de muchamás importancia.No hay argum<strong>en</strong>tos incuestionables a favor de la privatización.Si acaso, más bi<strong>en</strong> se podría concluir <strong>en</strong> lo contrario, como hacíaalgunos años atrás un informe de la Organización Internacionaldel Trabajo: “Si se ti<strong>en</strong><strong>en</strong> <strong>en</strong> cu<strong>en</strong>ta todos los factores, el fiel dela balanza se inclina claram<strong>en</strong>te contra el recurso a aseguradoresprivados, siempre y cuando los regím<strong>en</strong>es públicos se administr<strong>en</strong>18con eficacia y sean s<strong>en</strong>sibles a <strong>las</strong> necesidades de los usuarios” .¿El sistema de Seguridad Social desinc<strong>en</strong>tiva el trabajo yafecta negativam<strong>en</strong>te a la competitividad de la economía?Según los liberales, los sistemas de Seguridad Social hanext<strong>en</strong>dido hasta tal punto los niveles de protección social quedesinc<strong>en</strong>tivan el trabajo y el esfuerzo, mi<strong>en</strong>tras que además nopermit<strong>en</strong> a los ciudadanos percibir el verdadero coste económicoque conlleva el sistema público <strong>en</strong> su conjunto.18 O.I.T. “La Seguridad Social <strong>en</strong> la perspectiva del año 2000”. OIT, Ginebra 1984, p. 113.53


Sin embargo, la evid<strong>en</strong>cia empírica demuestra que la exist<strong>en</strong>ciade altos niveles de protección social no va acompañada def<strong>en</strong>óm<strong>en</strong>os negativos <strong>en</strong> <strong>las</strong> economías, sino más bi<strong>en</strong> todo locontrario. Así, los países del norte de Europa, con un alto nivel deprotección social y con un sistema de p<strong>en</strong>siones mucho mejordotado, se <strong>en</strong>cu<strong>en</strong>tran <strong>en</strong>tre los más competitivos del mundo.¿Perjudica a la economía el gasto público de la SeguridadSocial?Según los liberales, el gasto público de la Seguridad Social estágestionado de forma poco efici<strong>en</strong>te y sin el rigor que se mant<strong>en</strong>dría<strong>en</strong> caso de que la gestión de los recursos fuese privada. Sin embargo,el gasto <strong>en</strong> Seguridad Social constituye un elem<strong>en</strong>to primordial parael sost<strong>en</strong>imi<strong>en</strong>to de la demanda agregada de la economía (es decir, elgasto total) y es un factor es<strong>en</strong>cial del crecimi<strong>en</strong>to y el desarrolloeconómico. Este gasto es el que permite al sistema capitalistacontinuar la s<strong>en</strong>da del crecimi<strong>en</strong>to económico al insuflar recursos apersonas que los destinarán al consumo y que, de esa forma,repercutirán también <strong>en</strong> mayores niveles de empleo. Cuando el gastoes insufici<strong>en</strong>te la economía se paraliza.Por otro lado, tampoco se puede afirmar que la gestión privadavaya a ser más efici<strong>en</strong>te. Basta ver el desastre financiero que haocasionado la gestión de los bancos y fondos financieros <strong>en</strong> losúltimos años, provocando <strong>en</strong>ormes pérdidas económicas.¿Son más eficaces los planes de p<strong>en</strong>siones privados?Antes que nada, hay que reiterar que los llamados “fondos dep<strong>en</strong>siones privados” no son tales. Son, simplem<strong>en</strong>te, el ahorroacumulado de qui<strong>en</strong> puede ahorrar a lo largo de su vida.En todo caso, cualquier sistema privado de ahorro ti<strong>en</strong>e m<strong>en</strong>orgarantía y m<strong>en</strong>os solv<strong>en</strong>cia que un sistema público de p<strong>en</strong>siones. Lacrisis financiera actual demuestra esta situación.Y no solo es más inseguro económicam<strong>en</strong>te hablando sinoque, además, implica r<strong>en</strong>unciar a los mecanismos de transfer<strong>en</strong>cia de54


derechos y r<strong>en</strong>tas que permit<strong>en</strong> alcanzar más estabilidad económica,mayor bi<strong>en</strong>estar social y lazos sociales más solidarios y humanos.¿Por qué son más arriesgados los fondos de ahorro privadoque los sistemas públicos de p<strong>en</strong>siones?En primer lugar, porque los fondos privados no pued<strong>en</strong>garantizar una remuneración determinada cuando llegue la hora dehacerse efectivos “como p<strong>en</strong>sión”. Eso es así porque su valor finaldep<strong>en</strong>de de cómo se vayan dando <strong>las</strong> circunstancias de <strong>las</strong> quedep<strong>en</strong>de su capitalización. La inflación, por ejemplo, mermacontinuam<strong>en</strong>te su valor.Otro riesgo es que <strong>las</strong> grandes empresas dej<strong>en</strong> de cotizar paradedicar los fondos de sus trabajadores a otros fines más r<strong>en</strong>tables,como ya ha ocurrido <strong>en</strong> varias ocasiones, especialm<strong>en</strong>te <strong>en</strong> EstadosUnidos.Además, los fondos ti<strong>en</strong><strong>en</strong> que “mover” constantem<strong>en</strong>te losrecursos de los que dispon<strong>en</strong> para tratar de hacerlos más r<strong>en</strong>tables yeso les lleva a realizar inversiones arriesgadas que, <strong>en</strong> muchasocasiones, provocan grandes pérdidas patrimoniales.¿Son los fondos de p<strong>en</strong>siones privados más r<strong>en</strong>tables?La r<strong>en</strong>tabilidad de los fondos privados de ninguna manera estáasegurada, puesto que dep<strong>en</strong>de de los vaiv<strong>en</strong>es de los mercadosfinancieros que por definición son muy inestables y volátiles. Dichar<strong>en</strong>tabilidad dep<strong>en</strong>de fundam<strong>en</strong>talm<strong>en</strong>te del contexto económico, yconcretam<strong>en</strong>te del contexto financiero, <strong>en</strong> el que se manti<strong>en</strong><strong>en</strong> losfondos privados.De hecho, cuando un trabajador suscribe un plan de p<strong>en</strong>sionesprivado lo que está haci<strong>en</strong>do <strong>en</strong> realidad es depositar (ahorrar) partede sus ingresos <strong>en</strong> un fondo que gestionará una <strong>en</strong>tidad financiera.Ésta invierte ese dinero <strong>en</strong> el mercado financiero de acuerdo a suspropios criterios, buscando <strong>en</strong> todo mom<strong>en</strong>to revalorizarlo a travésde procedimi<strong>en</strong>tos la mayor de <strong>las</strong> veces puram<strong>en</strong>te especulativos, yobt<strong>en</strong>i<strong>en</strong>do ingresos financieras con dichas operaciones.55


La r<strong>en</strong>tabilidad de dichas operaciones dep<strong>en</strong>derá del riesgoasumido y del contexto financiero, pero <strong>en</strong> todo caso la mayor partede la misma se la quedará el banco.Sólo una parte de dicha r<strong>en</strong>tabilidad será devuelta al trabajador<strong>en</strong> forma de “intereses del fondo de p<strong>en</strong>sión” al finalizar su vidalaboral.¿Son seguros los planes de p<strong>en</strong>siones privados?Los liberales afirman que los sistemas de capitalizaciónprivados son más r<strong>en</strong>tables a largo plazo pero nada hay que asegureeso si se ti<strong>en</strong>e <strong>en</strong> cu<strong>en</strong>ta la extremada inestabilidad, la gran incertidumbrey el alto riesgo que hoy día caracterizan a los mercadosfinancieros.Para hacer fr<strong>en</strong>te a todos estos riesgos lo que han de hacer losgestores de fondos privados es aum<strong>en</strong>tar <strong>las</strong> primas pero bajando<strong>en</strong>tonces su r<strong>en</strong>tabilidad.Pero incluso con primas cada vez más altas, nada podría evitarla quiebra g<strong>en</strong>eral de los fondos privados si se llegara a una crisisfinanciera más o m<strong>en</strong>os g<strong>en</strong>eralizada, lo que no es una hipótesisdescartable, como hemos podido ver a partir del verano de 2007, ot<strong>en</strong>i<strong>en</strong>do <strong>en</strong> cu<strong>en</strong>ta que desde 1970 a 2003 se han contabilizado 117crisis bancarias sistémicas <strong>en</strong> 93 países y 113 episodios de “stress”19financieros <strong>en</strong> 17 países .En contextos de crisis financiera <strong>las</strong> inversiones acometidaspor los difer<strong>en</strong>tes fondos de p<strong>en</strong>siones privados pued<strong>en</strong> sercontraproduc<strong>en</strong>tes y proporcionar r<strong>en</strong>tabilidades negativas.Es lo que vi<strong>en</strong>e ocurri<strong>en</strong>do <strong>en</strong> la reci<strong>en</strong>te crisis financierainternacional, la cual ha provocado que de marzo de 2008 a marzo de2009 los fondos privados hayan devuelto una r<strong>en</strong>tabilidad mediaanual negativa del 6,37%.19 Caprio, Gerald y Klingebiel, Danila (2003). “Episodes of Systemic and Boderline Financial Crisis.World Bank”, Mimeo, January 2003 y “Banking Crises Database” <strong>en</strong>:http://www1.worldbank.org/finance/html/database_sfd.html56


¿Están asegurados fr<strong>en</strong>te a estos riesgos los fondos privados?¿podrían quebrar?No solo no están asegurados sino que la experi<strong>en</strong>cia hademostrado que pued<strong>en</strong> quebrar y que así ha ocurrido <strong>en</strong> muchasocasiones provocando grandes pérdidas, sobre todo, a los pequeñosahorradores y cotizantes.¿Ha ocurrido eso reci<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te? ¿y cómo se ha hecho fr<strong>en</strong>te ala situación?En agosto de 2006, bajo la presid<strong>en</strong>cia de G. Bush se dictó unaley para salvar a los fondos de ahorro privados de Estados Unidosque estaban materialm<strong>en</strong>te quebrados, sufri<strong>en</strong>do pérdidas que laOficina de Auditoría del Congreso estimó <strong>en</strong> 600.000 millones dedólares.Ante la quiebra de los fondos privados es un organismopúblico (el PBGC, P<strong>en</strong>sion B<strong>en</strong>efit Guarantee Corporation) el quedebe hacer fr<strong>en</strong>te a los pagos que no pued<strong>en</strong> hacer los fondosprivados.¿Por qué se suscrib<strong>en</strong> <strong>en</strong>tonces los planes de p<strong>en</strong>sionesprivados?En realidad, e incluso cuando su r<strong>en</strong>tabilidad es positiva, losintereses que pued<strong>en</strong> obt<strong>en</strong>er suel<strong>en</strong> ser muy bajos. Sin embargo,los gobiernos que apoyan la estrategia privatizadora han establecidog<strong>en</strong>erosas desgravaciones fiscales.Estas desgravaciones son uno de los elem<strong>en</strong>tos más injustos yregresivos que hoy día hay <strong>en</strong> el sistema fiscal pues b<strong>en</strong>efician casiexclusivam<strong>en</strong>te a <strong>las</strong> r<strong>en</strong>tas más altas que son <strong>las</strong> que pued<strong>en</strong> invertircantidades elevadas <strong>en</strong> fondos de ahorro. Y además son muy caras,pues repres<strong>en</strong>tan actualm<strong>en</strong>te <strong>en</strong> España alrededor de un 4% deltotal de la recaudación del Impuesto sobre la R<strong>en</strong>ta de <strong>las</strong> PersonasFísicas.Esa es la razón por la que se manti<strong>en</strong><strong>en</strong> pero puede afirmarsecategóricam<strong>en</strong>te que si no fuese por esos apoyos fiscales, los fondos57


de ahorro como fu<strong>en</strong>te de p<strong>en</strong>siones de cara a la jubilación not<strong>en</strong>drían el m<strong>en</strong>or interés como inversión.¿Es justo el sistema privado de p<strong>en</strong>siones?La gestión privada del ahorro que se resuelve <strong>en</strong> la órbita delmercado es incapaz, por definición, de resolver de manera efectiva<strong>las</strong> conting<strong>en</strong>cias que trata de paliar la protección social, <strong>en</strong>tre otrascosas, porque g<strong>en</strong>eralm<strong>en</strong>te es el propio mercado el que <strong>las</strong> produce.Eso es lo que explica que cualquier régim<strong>en</strong> privado secaracterice por <strong>las</strong> barreras de <strong>en</strong>trada que pres<strong>en</strong>ta, pues sólo losque dispon<strong>en</strong> de un alto nivel de ingresos pued<strong>en</strong> acceder a él comomecanismo efectivo para garantizarse la p<strong>en</strong>sión.Bajo un sistema pl<strong>en</strong>am<strong>en</strong>te privado sólo aquel<strong>las</strong> personascon capacidad para ahorrar <strong>en</strong> su vida laboral podría t<strong>en</strong>ergarantizada una jubilación adecuada o s<strong>en</strong>cillam<strong>en</strong>te sufici<strong>en</strong>te paravivir. Basta observar el costo de la vida actual y el bajo nivel deingresos de la mayoría de la población para hacerse una idea de <strong>las</strong>consecu<strong>en</strong>cias catastróficas que conllevaría implantar un sistemabasado <strong>en</strong> tales principios.58


¿Es mejor un sistema de capitalización queuno de reparto?¿Qué hay detrás de la disyuntiva <strong>en</strong>tre el sistema decapitalización y el de reparto?El sistema de capitalización es equival<strong>en</strong>te a un sistema privado<strong>en</strong> el que cada trabajador contribuye a su propio fondo de p<strong>en</strong>siones,algo que ti<strong>en</strong>e importantes inconv<strong>en</strong>i<strong>en</strong>tes económicos y sociales.El sistema de reparto, <strong>en</strong> cambio, está basado <strong>en</strong> principiossolidarios y <strong>las</strong> contribuciones de los trabajadores no se destinan a unfondo personal sino a pagar <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones de los jubilados de esemom<strong>en</strong>to.En consecu<strong>en</strong>cia, detrás de la polémica sobre la conv<strong>en</strong>i<strong>en</strong>ciade uno u otro lo que hay es una posición u otra sobre los términos<strong>en</strong> que se va a dar la solidaridad <strong>en</strong>tre ciudadanos de una mismasociedad y sobre <strong>en</strong> qué medida se está dispuesto a lograr unadistribución más igualitaria y justa de la r<strong>en</strong>ta y la riqueza.¿Favorece el sistema de capitalización el ahorro y la inversión?Según los liberales, a difer<strong>en</strong>cia de lo que ocurre <strong>en</strong> el sistemade reparto, <strong>en</strong> donde lo recaudado se gasta inmediatam<strong>en</strong>te, cuandose constituy<strong>en</strong> fondos se favorece el ahorro y, <strong>en</strong> consecu<strong>en</strong>cia, lainversión.Sin embargo, la inversión no siempre dep<strong>en</strong>de de la exist<strong>en</strong>ciade ahorro <strong>en</strong> la economía sino, más bi<strong>en</strong>, de la exist<strong>en</strong>cia de opcionesde colocación de capitales r<strong>en</strong>tables.Por otro lado, tampoco hay evid<strong>en</strong>cia empírica decisiva quepermita id<strong>en</strong>tificar claram<strong>en</strong>te los efectos reales de los difer<strong>en</strong>tessistemas sobre el ahorro.59


¿Perjudican al crecimi<strong>en</strong>to económico los sistemas dereparto?Según los liberales el sistema de reparto es un mecanismo deasignación de recursos que actúa fuera de la órbita del mercado y ellosupone un elem<strong>en</strong>to de rigidez e inercia para el funcionami<strong>en</strong>to de laeconomía que puede llevar a deprimir la actividad económica <strong>en</strong> unsistema de intercambio gobernado por la iniciativa privada demercado.Sin embargo, también se puede argum<strong>en</strong>tar de formaalternativa afirmando que ni la magnitud de esta pérdida deposibilidades puede estimarse con precisión, ni un m<strong>en</strong>orcrecimi<strong>en</strong>to económico (suponi<strong>en</strong>do que se diera) t<strong>en</strong>dría quesignificar necesariam<strong>en</strong>te un m<strong>en</strong>or bi<strong>en</strong>estar social si vaacompañado, por ejemplo, de una distribución de la r<strong>en</strong>ta másequitativa.Además, <strong>en</strong> la medida <strong>en</strong> que los sistemas de repartoproporcionan más garantías de recibir r<strong>en</strong>tas <strong>en</strong> la jubilación,supon<strong>en</strong> una inyección también más segura para el gasto queimpulsa la actividad económica. Los liberales olvidan demasiadoa m<strong>en</strong>udo que la pobreza y los bajos salarios son la fu<strong>en</strong>te másdirecta del m<strong>en</strong>or crecimi<strong>en</strong>to económico que dic<strong>en</strong> buscar.¿Inc<strong>en</strong>tivan los sistemas de reparto la jubilación?Otra crítica de los liberales al sistema de reparto es que, alproporcionar p<strong>en</strong>siones cuya cuantía es mayor a la contribuciónrealizada a lo largo de la vida activa, inc<strong>en</strong>tiva la jubilación, disminuy<strong>en</strong>doasí la oferta de mano de obra y distorsionando el mercadode trabajo.Como contrapartida mucho más razonable puede argum<strong>en</strong>tarseque los problemas de oferta de trabajo no suel<strong>en</strong> proceder delos segm<strong>en</strong>tos de edad más cercana a la jubilación.Si ese argum<strong>en</strong>to liberal fuera riguroso no se <strong>en</strong>t<strong>en</strong>dería que <strong>las</strong>grandes compañías financi<strong>en</strong> p<strong>en</strong>siones muy g<strong>en</strong>erosas a sus directivosporque <strong>en</strong>tonces estarían dando lugar a que se jubilaran antes.60


¿Qué sistema está más preparado para proteger a los másdébiles?El sistema de reparto ti<strong>en</strong>e mayor capacidad para protegerefectivam<strong>en</strong>te a los sectores más débiles de la sociedad, lo que al fin yal cabo es uno de los objetivos que debe perseguir un sistema deseguridad social.Como habíamos visto antes, bajo un sistema de capitalización<strong>las</strong> personas que no hubieran podido ahorrar sufici<strong>en</strong>te durante suvida laboral, o que ni siquiera lo hubieran hecho, estarían destinadasa vivir prácticam<strong>en</strong>te <strong>en</strong> la m<strong>en</strong>dicidad una vez alcanzada la edad dejubilación.¿Qué ocurre con la inflación <strong>en</strong> el sistema de capitalización?¿Y <strong>en</strong> el de reparto?El sistema de reparto es más eficaz para hacer fr<strong>en</strong>te alproblema de la inflación porque financia <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones con recursosactuales, mi<strong>en</strong>tras que <strong>en</strong> un sistema de capitalización los fondosacumulados se van desvalorizando por efecto de la inflación.Además, el sistema de reparto ti<strong>en</strong>e posibilidad de g<strong>en</strong>erarfondos con carácter inmediato, mi<strong>en</strong>tras que la capitalizaciónrequiere un largo periodo de acumulación.¿Cuáles son los costes de administrar un sistema decapitalización?El coste de gestionar un sistema de capitalización es muysuperior al coste de administrar la Seguridad Social. La evid<strong>en</strong>ciaacumulada es que los costes de administración de los sistemasprivados de asegurami<strong>en</strong>to son muchas veces más grandes que loscostes de administración de los sistemas públicos. Así, el 22% delcoste de la prima de asegurami<strong>en</strong>to van a cubrir gastos administrativos<strong>en</strong> Arg<strong>en</strong>tina, el 22% <strong>en</strong> México, el 19% <strong>en</strong> el Salvador, el15% <strong>en</strong> Chile y el 14% <strong>en</strong> Colombia. En EEUU, por lo contrario,tal porc<strong>en</strong>taje <strong>en</strong> la Seguridad Social es sólo el 0.5%. En realidad, talexperi<strong>en</strong>cia internacional con el asegurami<strong>en</strong>to privado ha sido61


sumam<strong>en</strong>te problemática, b<strong>en</strong>eficiando sólo al capital financiero(bancos y cajas) pero no a la mayoría de los supuestos20b<strong>en</strong>eficiarios .Ante esta realidad, lo que está ocurri<strong>en</strong>do es que a la hora dedef<strong>en</strong>der el paso a los sistemas de capitalización se pas<strong>en</strong> por altoestos costes, como hac<strong>en</strong> los españoles Sáez y Taguas <strong>en</strong> el trabajoanteriorm<strong>en</strong>te citado, lo que equivale a aceptar una <strong>en</strong>orme disminución<strong>en</strong> los niveles de protección y seguridad social de lapoblación.¿Es fácil transformar un sistema de reparto <strong>en</strong> un sistema decapitalización?Pasar de un modelo actual de reparto a uno de capitalización es<strong>en</strong>ormem<strong>en</strong>te costoso, puesto que si <strong>las</strong> personas que ahora cotizana la Seguridad Social dejaran de hacerlo para pasar una parte de susalario a su banco o a su caja, el Estado t<strong>en</strong>dría <strong>en</strong>tonces que pagar<strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones a los p<strong>en</strong>sionistas de ahora.Los analistas liberales no acostumbran a citar el coste de estatransición de un sistema de reparto a un sistema de capitalización apesar de que se trata de cifras elevadísimas. Así, Dean Baker yDebayani Kar han calculado que tal transición <strong>en</strong> la privatización delsistema de reparto al sistema de capitalización que tuvo lugar <strong>en</strong>Chile durante la dictadura del G<strong>en</strong>eral Pinochet costó a <strong>las</strong> arcas del21Estado una cantidad equival<strong>en</strong>te al 8% del PIB .¿Qué propon<strong>en</strong> los liberales para diferir los costes de dichatransición?La naturaleza de tales costes explica que autores liberales comoTaguas y Sáez aconsej<strong>en</strong> que se vaya a la capitalización individualgradualm<strong>en</strong>te. Para ello se irían dando una serie de pasos progresivoscomo los que hemos m<strong>en</strong>cionado anteriorm<strong>en</strong>te:20 James, E., Smalhour, J., Vittas, D. “Administrative costs in the organizations of individual AccountSystems: a Comparative Perspectiva”. Washington D.C. World Bank 199921 Baker, D. y Kar, D. “The World Bank's Approach to Social Security Reform”. C<strong>en</strong>ter for Economicand Policy Research”. 200262


- La reducción significativa de los b<strong>en</strong>eficios de <strong>las</strong>p<strong>en</strong>siones, convirtiéndose éstas <strong>en</strong> un sistema de mínimosuniversales.- Basar la p<strong>en</strong>sión <strong>en</strong> el salario promedio de la vida laboraldel p<strong>en</strong>sionista (lo cual significaría la reducción de un 30%de <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones actuales como los propios autoresreconoc<strong>en</strong>).- Aum<strong>en</strong>to de la edad de jubilación a 70 años.- Disminución considerable de la actualización de <strong>las</strong>p<strong>en</strong>siones de manera que <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones no seguirían laevolución de los salarios (como ocurre <strong>en</strong> la mayoría depaíses de la UE-15) ni de los precios (la inflación) según elIPC normal sino de otro disminuído que daría un registrode la inflación a la baja y que reduciría <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones con laedad.Cuando estas medidas provocaran una insufici<strong>en</strong>cia fatal de <strong>las</strong>p<strong>en</strong>siones públicas, se supone que no quedaría más remedio queacudir a la creación de fondos privados.63


¿Qué hay detrás de <strong>las</strong> propuestas liberales?¿quién <strong>las</strong> promueve y a quién b<strong>en</strong>efician?¿Ha quedado demostrada ci<strong>en</strong>tíficam<strong>en</strong>te alguna afirmaciónliberal?No está demostrado que la evolución demográfica por símisma haga inviable a medio o largo plazo un sistema público dep<strong>en</strong>siones.No se ha demostrado que un régim<strong>en</strong> de gestión privado seamás efici<strong>en</strong>te que el público.No está demostrado que el régim<strong>en</strong> de capitalización sea máseficaz, más seguro y por lo tanto más conv<strong>en</strong>i<strong>en</strong>te y sost<strong>en</strong>ible queuno de reparto.Tampoco se ha podido contrastar que la financiación de <strong>las</strong>p<strong>en</strong>siones a través de cotizaciones sociales t<strong>en</strong>gan los efectosnegativos que se le achacan sobre el empleo o el crecimi<strong>en</strong>to.En definitiva, ninguna afirmación liberal se sosti<strong>en</strong>e cuando secontrasta con la realidad.¿Qué dice la teoría económica?Un economista español tan poco sospechoso como JulioSegura concluía hace unos años: “La teoría económica noproporciona apoyos irrefutables <strong>en</strong> favor de posiciones neoliberalesy privatizadoras como con frecu<strong>en</strong>cia int<strong>en</strong>tan hacernos creerqui<strong>en</strong>es hac<strong>en</strong> gala de mant<strong>en</strong>er el debate sobre la protección social<strong>en</strong> el ámbito de la economía positiva sin interfer<strong>en</strong>cias ideológicasespurias”22.22 Segura, Julio. “Pon<strong>en</strong>cia síntesis”. En Seminario Europeo sobre la financiación de la SeguridadSocial, editado por el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social con el título “La reforma de laprotección social. La reforma financiera del sistema español de Seguridad Social <strong>en</strong> 1989”. Madrid1991, p. 393.65


¿Manti<strong>en</strong><strong>en</strong> <strong>en</strong>tonces todos los liberales <strong>las</strong> mismaspropuestas privatizadoras que antes?Sin fundam<strong>en</strong>tación ci<strong>en</strong>tífica alguna que permita sost<strong>en</strong>ercomo probados los principales argum<strong>en</strong>tos que justifican <strong>las</strong>reformas privatizadoras, <strong>las</strong> propuestas que se hac<strong>en</strong> son cadavez m<strong>en</strong>os rigurosas e incluso contradictorias <strong>en</strong> <strong>las</strong> hipótesis ypresupuestos, como hemos señalado. Son cada vez más ideologizadase impuestas a base de poder <strong>en</strong> lugar de con razonami<strong>en</strong>tosdiscutidos y contrastados.Tanto es así que incluso el propio Banco Mundial, que fue laprimera institución que divulgó la ortodoxia a seguir, ha matizadosus propuestas iniciales a la vista de los efectos perversos y negativosque ha producido <strong>en</strong> los países <strong>en</strong> los que se ha llevado a cabo laprivatización más avanzada.¿Por qué, <strong>en</strong>tonces, sigu<strong>en</strong> empeñados <strong>en</strong> privatizar?La respuesta radica <strong>en</strong> que la actividad y los negocios financierosson cada vez más r<strong>en</strong>tables. Eso ha hecho que la gestión de elrecursos que movilizan <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones públicas sea especialm<strong>en</strong>teatractiva para los intereses privados. Los recursos que mueve elsistema de p<strong>en</strong>siones públicas se han convertido <strong>en</strong> un botín con elque muchas <strong>en</strong>tidades privadas sueñan quedarse.¿Por qué han crecido tanto los planes de p<strong>en</strong>siones privados <strong>en</strong>los últimos años?El extraordinario crecimi<strong>en</strong>to de los planes de p<strong>en</strong>siones estáestrecham<strong>en</strong>te vinculado a <strong>las</strong> modificaciones <strong>en</strong> la configuración dela economía mundial que tuvieron lugar a partir de la década de losset<strong>en</strong>ta y bajo políticas económicas de inspiración neoliberal.Por un lado, la <strong>en</strong>orme desigualdad que se ha g<strong>en</strong>erado <strong>en</strong> losúltimos treinta años ha hecho que <strong>las</strong> r<strong>en</strong>tas más altas puedandisponer de una gran capacidad de ahorro, un increm<strong>en</strong>to de losb<strong>en</strong>eficios y del ahorro de <strong>las</strong> c<strong>las</strong>es más altas que lógicam<strong>en</strong>te esparalelo a la pérdida de peso de la masa salarial.66


Por otro lado, <strong>las</strong> desregulaciones financieras que se han idoacometi<strong>en</strong>do <strong>en</strong> todas partes del mundo, unidas a la aparición de <strong>las</strong>nuevas tecnologías de la información y la telecomunicación, hanpermitido utilizar esos fondos ahorrados de manera muy r<strong>en</strong>table<strong>en</strong> los mercados financieros. Los bancos aprovecharon esaoportunidad para convertirse <strong>en</strong> catalizadores de esas inversionesfinancieras especulativas y para hacer que sus ganancias crezcan sinfr<strong>en</strong>o. Y por ello tratan por todos los medios de acumular todo elahorro disponible lo que, <strong>en</strong>tre otras cosas, lleva a evitar que losestados manej<strong>en</strong> el inm<strong>en</strong>so ahorro social vinculado a los sistemasde p<strong>en</strong>siones públicas.¿Cómo funcionaban antes los bancos y cómo se han adecuadoal nuevo mundo financiero?El sistema bancario basaba tradicionalm<strong>en</strong>te su negocio <strong>en</strong> lospréstamos que concedía a empresas y hogares, a los cuales aplicabaun tipo de interés más alto que el que pagaba por los depósitos de suscli<strong>en</strong>tes.Tras <strong>las</strong> transformaciones del sistema financiero comoresultado de <strong>las</strong> medidas económicas neoliberales, <strong>las</strong> empresascom<strong>en</strong>zaron a preferir financiarse <strong>en</strong> los mercados financierosemiti<strong>en</strong>do bonos o acciones, e incluso los hogares preferíanmant<strong>en</strong>er sus ahorros <strong>en</strong> forma de acciones o de otros títulosfinancieros. Los bancos, por lo tanto, cada vez t<strong>en</strong>ían más dificultadespara recibir dinero que poder prestar, por lo que tuvieron queampliar sus líneas de negocios.¿Qué tipo de nuevas líneas de negocio abrieron los bancos?Una de estas nuevas líneas de negocios son los fondos deinversión colectiva y, <strong>en</strong> particular, los fondos de p<strong>en</strong>siones. Estaforma de negocio se caracteriza porque el banco recoge dinero dedifer<strong>en</strong>tes cli<strong>en</strong>tes, forma un fondo con ellos e invierte <strong>en</strong> losmercados financieros <strong>en</strong> busca de su revalorización. Si ésta seproduce se devuelv<strong>en</strong> ganancias financieras al cli<strong>en</strong>te después de queel banco se haya quedado con la mayor parte.67


¿Qué papel han t<strong>en</strong>ido los fondos de p<strong>en</strong>siones <strong>en</strong> la reci<strong>en</strong>tecrisis financiera?Estos nuevos instrum<strong>en</strong>tos han crecido expon<strong>en</strong>cialm<strong>en</strong>te <strong>en</strong>los últimos años y han t<strong>en</strong>ido un papel crucial <strong>en</strong> el orig<strong>en</strong> de la actual23crisis financiera . Los fondos de p<strong>en</strong>siones privados son una partecada vez más importante del total de fondos de inversión colectiva,aunque <strong>en</strong>fr<strong>en</strong>tan la dificultad de que ti<strong>en</strong><strong>en</strong> que competir con losfondos públicos de p<strong>en</strong>siones.Por esa razón los fondos de p<strong>en</strong>siones privados son especialm<strong>en</strong>teimportantes <strong>en</strong> aquellos países donde el Estado del Bi<strong>en</strong>estares más débil, como ocurre <strong>en</strong> Estados Unidos, país del que provi<strong>en</strong><strong>en</strong>el 61% de todos los fondos de p<strong>en</strong>siones privados del mundo.De hecho, mi<strong>en</strong>tras que <strong>en</strong> Francia los fondos de p<strong>en</strong>siones privadosrepres<strong>en</strong>tan el 3,4% del total, <strong>en</strong> EEUU alcanzan prácticam<strong>en</strong>teel 50%24.¿Por qué quier<strong>en</strong> los bancos que se privatice el sistema públicode p<strong>en</strong>siones?Más allá del papel pernicioso que ti<strong>en</strong><strong>en</strong> los movimi<strong>en</strong>tosfinancieros de los fondos de p<strong>en</strong>siones privados la cuestión estáclara: son un instrum<strong>en</strong>to más, y cada vez más importante, parael b<strong>en</strong>eficio de los bancos y <strong>las</strong> <strong>en</strong>tidades financieras <strong>en</strong> g<strong>en</strong>eral. Y elobstáculo principal que ti<strong>en</strong><strong>en</strong> <strong>en</strong>fr<strong>en</strong>te para poder r<strong>en</strong>tabilizarlo almáximo es la superviv<strong>en</strong>cia del sistema público de p<strong>en</strong>siones, quedesvía hacia el Estado recursos económicos que los bancos buscanpara proseguir sus lucrativas actividades económicas.No son por tanto, razones económicas ni de sost<strong>en</strong>ibilidad oequilibrio financiero, <strong>las</strong> que pon<strong>en</strong> sobre la mesa la necesidad,como dic<strong>en</strong> los liberales, de privatizar el sistema público dep<strong>en</strong>siones. Ni es “la sociedad” qui<strong>en</strong> prefiere o quiere hacer esecambio. Son los bancos qui<strong>en</strong>es desean acabar con este sistema para23 Torres López, J., Garzón, A. “La crisis de <strong>las</strong> hipotecas basura. ¿Por qué se cayó todo y no se hahundido nada?”. En pr<strong>en</strong>sa.24 International Financial Services London, 2009.68


aum<strong>en</strong>tar su volum<strong>en</strong> de negocio y poder competir <strong>en</strong> mejorescondiciones con otros bancos extranjeros.Como hemos explicado, la privatización radical era y es laalternativa más r<strong>en</strong>table, más atractiva y más deseada por el capitalfinanciero que de esa forma se haría cargo de la gestión de fondossupermillonarios y extraordinariam<strong>en</strong>te r<strong>en</strong>tables. Pero se trata, sinembargo, de una alternativa costosa y arriesgada tanto económicacomo social y políticam<strong>en</strong>te.¿Es que acaso pued<strong>en</strong> los bancos influir <strong>en</strong> <strong>las</strong> decisiones delos políticos?Pued<strong>en</strong> y tratan de hacerlo cada vez más.David Taguas, uno de los técnicos liberales que más insiste <strong>en</strong>divulgar la tesis de la inviabilidad del sistema público de p<strong>en</strong>siones,fue Director de la Oficina Económica del presid<strong>en</strong>te del gobiernode España <strong>en</strong>tre 2007 y 2008. Antes, sin embargo, había sidosubdirector del servicio de estudios del Banco Bilbao VizcayaArg<strong>en</strong>taria (BBVA). Tras abandonar su puesto pasó a trabajar alservicio de la patronal inmobiliaria.Las relaciones <strong>en</strong>tre políticos, banqueros y empresarios sonpor lo g<strong>en</strong>eral muy poco transpar<strong>en</strong>tes, a pesar de lo cual de vez <strong>en</strong>cuando nos <strong>en</strong>contramos con evid<strong>en</strong>cias palmarias: antiguosgobernadores del banco c<strong>en</strong>tral que pasan a formar parte deconsejos de administración de bancos privados o subgobernadoresque lo hac<strong>en</strong> a la patronal de la banca privada son casos que t<strong>en</strong>emosmuy cercanos y que muestran que el tejido de intereses es compactoe intelig<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te articulado.Todo ello obliga a concluir que qui<strong>en</strong> toma muchas de <strong>las</strong>grandes decisiones <strong>en</strong> nuestras democracias no son losrepres<strong>en</strong>tantes de los ciudadanos sino qui<strong>en</strong>es de verdad det<strong>en</strong>tan elpoder: los que ti<strong>en</strong><strong>en</strong> el dinero.69


¿Hay que dejar <strong>en</strong>tonces el sistema público de p<strong>en</strong>sionescomo está?Aunque la estrategia neoliberal de apropiación del ahorro queestá detrás de estas continuas llamadas a la reforma para privatizar<strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones se sust<strong>en</strong>te <strong>en</strong> análisis y propuestas que no se pued<strong>en</strong>dar ci<strong>en</strong>tíficam<strong>en</strong>te irrebatibles, sino más bi<strong>en</strong> todo lo contrario, nose puede tampoco concluir que no hay <strong>peligro</strong> para el sistema y quese puede dejar la situación tal y como está.Por supuesto que <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones públicas están <strong>en</strong> <strong>peligro</strong>.Como también lo están otros derechos sociales. Lo que ocurre esque lo están pero no por <strong>las</strong> razones a <strong>las</strong> que apuntan los liberalessino justam<strong>en</strong>te porque se aplican <strong>las</strong> políticas que ellos propon<strong>en</strong>.Lo que hace peligrar el disfrute de los derechos sociales es la falta deempleo, el empleo precario, los salarios bajos, la desigualdad, laespeculación financiera, el reducido gasto social..., es decir, todo loque han provocado <strong>las</strong> políticas que se vi<strong>en</strong><strong>en</strong> aplicando <strong>en</strong> losúltimos dec<strong>en</strong>ios.En <strong>las</strong> condiciones actuales <strong>en</strong> <strong>las</strong> que se <strong>en</strong>cu<strong>en</strong>tra nuestraeconomía, con el alto nivel de paro y de empleo precario, con escasogasto social... el sistema de p<strong>en</strong>siones público está <strong>en</strong> auténtico<strong>peligro</strong> si solo se financia con <strong>las</strong> cotizaciones sociales que puedeproporcionar el actual nivel de empleo y con <strong>las</strong> tasas de crecimi<strong>en</strong>toque se pued<strong>en</strong> obt<strong>en</strong>er a partir de un modelo productivo que primala actividad especulativa y que g<strong>en</strong>era una destrucción neta derecursos materiales y naturales.Por eso es preciso avanzar <strong>en</strong> dos fr<strong>en</strong>tes complem<strong>en</strong>tarios.Por un lado, fortaleci<strong>en</strong>do la capacidad de g<strong>en</strong>erar actividadeconómica sost<strong>en</strong>ible y verdaderam<strong>en</strong>te ori<strong>en</strong>tada a satisfacernecesidades humanas que se traduzca <strong>en</strong> más empleo e ingresos máselevados y mejor distribuidos. Y, por otra, logrando que el sistema dep<strong>en</strong>siones públicas pase a financiarse también mediante impuestosgracias a la mayor recaudación que puede proporcionar la primeravía y a reformas que incidan <strong>en</strong> la equidad fiscal y <strong>en</strong> la lucha contra elfraude y la evasión fiscal. Hay países donde <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones son70


financiadas con fondos públicos <strong>en</strong> su mayoría. La gran popularidadde <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones garantiza que la sociedad, a través del Estado,siempre <strong>en</strong>contrará <strong>las</strong> vías, a través de la fiscalidad progresiva deapoyar<strong>las</strong>.¿Es esto último posible?Salvar <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones públicas no solo es imprescindible paragarantizar el bi<strong>en</strong>estar y la sost<strong>en</strong>ibilidad social. Es un objetivoposible siempre y cuando los ciudadanos se conv<strong>en</strong>zan de suconv<strong>en</strong>i<strong>en</strong>cia y apoy<strong>en</strong> opciones de gobierno firmem<strong>en</strong>te comprometidascon su mant<strong>en</strong>imi<strong>en</strong>to. Como <strong>en</strong> tantas otras dim<strong>en</strong>sionesde la vida social el que se adopt<strong>en</strong> políticas <strong>en</strong> uno u otro s<strong>en</strong>tido es,al fin y al cabo, una cuestión de prefer<strong>en</strong>cias y, sobre todo, de poderpara lograr que éstas se transform<strong>en</strong> <strong>en</strong> decisiones.71


Los autoresVic<strong>en</strong>ç NAVARRO (www.vnavarro.org) ha sido Catedráticode Economía Aplicada <strong>en</strong> la Universidad de Barcelona. Actualm<strong>en</strong>tees Catedrático de Ci<strong>en</strong>cias Políticas y Sociales, Universidad PompeuFabra (Barcelona, España). Es también profesor de PolíticasPúblicas <strong>en</strong> The Johns Hopkins University (Baltimore, EEUU)donde ha impartido doc<strong>en</strong>cia durante 35 años. Dirige el Programa<strong>en</strong> Políticas Públicas y Sociales patrocinado conjuntam<strong>en</strong>te por laUniversidad Pompeu Fabra y The Johns Hopkins University. Dirigetambién el Observatorio Social de España. Tuvo que exiliarse deEspaña por razones políticas. Ha vivido y trabajado <strong>en</strong> Suecia(Upsala), Gran Bretaña (London School and Economics, Oxford yEdimburgo) y <strong>en</strong> EEUU (The Johns Hopkins University) donde hasido Catedrático de Políticas Públicas y Ci<strong>en</strong>cias Políticas. Fuepropuesto como Catedrático Extraordinario de Economía Aplicadapor la Universidad Complut<strong>en</strong>se de Madrid y se integró a la vidaacadémica catalana como Catedrático de Economía Aplicada de laUniversidad de Barcelona y más tarde como Catedrático de Ci<strong>en</strong>ciasPolíticas de la Universidad Pompeu Fabra donde dirige el programade Políticas Públicas y Sociales patrocinado junto con The JohnsHopkins University, <strong>en</strong> el que continúa si<strong>en</strong>do profesor. Haasesorado a <strong>las</strong> Naciones Unidas, a la Organización Mundial de laSalud y a muchos gobiernos incluy<strong>en</strong>do: el gobierno de UnidadPopular de Chile, el gobierno cubano (<strong>en</strong> su reforma sanitaria), elgobierno socialdemócrata sueco, el gobierno socialista español, losgobiernos tripartitos y “d'<strong>en</strong>tesa” catalanes, así como al gobiernofederal de EEUU, habi<strong>en</strong>do sido miembro del grupo de trabajosobre la reforma sanitaria la Casa Blanca dirigida por Hillary Clinton.Sus áreas de investigación son: Economía Política, Estado deBi<strong>en</strong>estar y Estudios Políticos. Ha publicado ext<strong>en</strong>sam<strong>en</strong>te (24libros traducidos a varios idiomas) si<strong>en</strong>do los más reci<strong>en</strong>tes elSubdesarrollo Social de España: Causas y Consecu<strong>en</strong>cias. Anagrama y72


Neoliberalism, Globalization and Inequalities. Baywood. En 2002,recibió el premio de <strong>en</strong>sayo de la Editorial Anagrama por su libroBi<strong>en</strong>estar Insufici<strong>en</strong>te, Democracia Incompleta. De lo que no se habla <strong>en</strong>nuestro país.Juan TORRES LÓPEZ (www.juantorreslopez.com) esdoctor <strong>en</strong> Ci<strong>en</strong>cias Económicas y Catedrático de EconomíaAplicada <strong>en</strong> la Universidad de Sevilla. Entre otros cargosacadémicos ha sido vicerrector de la Universidad de Málaga ySecretario G<strong>en</strong>eral de Universidades e Investigación de la Junta deAndalucía. Autor de una doc<strong>en</strong>a de libros <strong>en</strong>tre los que destacanEconomía de la comunicación de masas; Análisis Económico del Derecho.Panorama doctrinal; El neoliberalismo. Sociedad, trabajo y poder financiero;España va bi<strong>en</strong> y el mundo tampoco; Toma el dinero y corre. La globalizaciónneoliberal del dinero y <strong>las</strong> finanzas; Desigualdad y crisis económica. El repartode la tarta; el manual universitario Economía Política y los de bachillerEconomía y Economía de la Empresa. También es coautor de La economíadel delito y de <strong>las</strong> p<strong>en</strong>as, coordinador de otros como P<strong>en</strong>siones públicas:¿y mañana qué?; La otra cara de la política económica. España 1982-1994, oV<strong>en</strong>ezuela, a contracorri<strong>en</strong>te. Los oríg<strong>en</strong>es y <strong>las</strong> claves de la revoluciónbolivariana además de haber publicado numerosos artículosci<strong>en</strong>tíficos y un gran número de trabajos de divulgación y análisispolítico. Coordina con Alberto Garzón la web de información yp<strong>en</strong>sami<strong>en</strong>to económicos alternativos altereconomia.org y con sucolaboración publicó La crisis financiera. Guía para <strong>en</strong>t<strong>en</strong>derla yexplicarla, que editó ATTAC-España.Alberto GARZÓN ESPINOSA (www.agarzon.net) es lic<strong>en</strong>ciado<strong>en</strong> Ci<strong>en</strong>cias Económicas por la Universidad de Málaga y <strong>en</strong> laactualidad alumno de postgrado <strong>en</strong> la Universidad Complut<strong>en</strong>se deMadrid.Los tres autores son miembros del consejo Ci<strong>en</strong>tífico deATTAC España73


INDICEIntroducción. ..........................¿Qué son <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones y cómo se financian? . .¿Qué es un sistema público de p<strong>en</strong>siones?. .............¿Qué ti<strong>en</strong><strong>en</strong> que ver <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones públicas con la SeguridadSocial? .........................................¿Qué es la Seguridad Social? ........................¿De qué riesgos nos protege, <strong>en</strong>tonces, la Seguridad Social?¿Cuándo nace la Seguridad Social? ...................¿Cuándo nace la Seguridad Social <strong>en</strong> España?. ..........¿Cómo se financia la Seguridad Social? ................¿Qué son <strong>las</strong> cotizaciones sociales? ...................¿Es obligado que se financie de esa forma la SeguridadSocial? .........................................¿Qué tipos de sistemas de p<strong>en</strong>siones hay? ..............¿Qué difer<strong>en</strong>cia existe <strong>en</strong>tre <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones contributivas y<strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones no contributivas? ......................¿De qué dep<strong>en</strong>de la cuantía de <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones nocontributivas? ...................................¿Cuál es el sistema que hay <strong>en</strong> España? ................¿Qué son los planes de p<strong>en</strong>siones privados?. ............¿Qué es un sistema de capitalización? .................¿Qué es un sistema de reparto? ......................¿Por qué <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones <strong>en</strong> España son un mecanismo deredistribución? ..................................¿Podemos considerar que <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones son parte delsalario?. ........................................91313131314141515161616171718181819191974


¿Qué se quiere decir cuando se habla de“crisis” de <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones públicas? ..........¿Por qué se habla de crisis del sistema público dep<strong>en</strong>siones? .....................................¿Quiénes difundieron esas ideas y qué proponíanexactam<strong>en</strong>te?. ...................................¿Qué consecu<strong>en</strong>cias t<strong>en</strong>ía este tipo de reforma radical? . . .¿Qué dificultades conlleva poner <strong>en</strong> marcha la privatizaciónde <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones? .......................................¿Cuál fue la propuesta inicial de reforma del BancoMundial? .......................................¿Qué proponía <strong>en</strong> España la patronal?. ................¿Y cómo se llevó a cabo este proceso? .................¿Qué medidas y reformas parciales se han ido adoptandocon la excusa de la inviabilidad futura del sistema públicode p<strong>en</strong>siones? ...................................¿Qué consecu<strong>en</strong>cias han t<strong>en</strong>ido todas estas reformas? ....¿Cuál es la situación <strong>en</strong> España? ¿Qué es el Pacto deToledo? ........................................¿Qué aspectos positivos incluye el Pacto de Toledo? ......¿Y qué aspectos negativos conlleva? ..................¿Protege <strong>en</strong>tonces el Pacto de Toledo el sistema público dep<strong>en</strong>siones?. .....................................¿Es inevitable <strong>en</strong>tonces ir hacia la privatización del sistemapúblico de p<strong>en</strong>siones? .............................¿Llevan razón qui<strong>en</strong>es afirman que el sistemapúblico de p<strong>en</strong>siones es inviable? ¿Haycons<strong>en</strong>so sobre ello? .....................¿Qué argum<strong>en</strong>tos dan los def<strong>en</strong>sores de la progresivaprivatización? ...................................¿Qué dic<strong>en</strong> que habría que hacer <strong>en</strong>tonces?. ............21212222232324242525252626262729292975


¿Hay un cons<strong>en</strong>so g<strong>en</strong>eralizado sobre la necesidad deabandonar o de privatizar el sistema público de p<strong>en</strong>sionesporque éste sea inviable? ...........................¿Quiénes pon<strong>en</strong> <strong>en</strong> cuestión la viabilidad del sistema? ....¿Aciertan <strong>en</strong> sus previsiones qui<strong>en</strong>es constantem<strong>en</strong>teauguran la inviabilidad del sistema público de p<strong>en</strong>siones? .¿Por qué fallan tanto <strong>las</strong> predicciones de qui<strong>en</strong>es vaticinanque el sistema público se hundirá sin remedio? ..........¿Hay previsiones más acertadas por parte de qui<strong>en</strong>esdefi<strong>en</strong>d<strong>en</strong> el sistema público? .......................¿Es excesivo <strong>en</strong>tonces, como dic<strong>en</strong> los informes liberales, elcoste del sistema público de p<strong>en</strong>siones? ...............¿Están los ciudadanos de acuerdo con mant<strong>en</strong>er un sistemapúblico de p<strong>en</strong>siones? .............................Si la mayoría de la población está a favor de un sistemapúblico de p<strong>en</strong>siones ¿debemos temer que este sistema nose privatice parcial o totalm<strong>en</strong>te? .....................¿Qué papel ti<strong>en</strong>e la Unión Europa respecto al sistema dep<strong>en</strong>siones?. .....................................¿Cómo se utiliza la Unión Europea para aprobar <strong>las</strong>reformas privatizadoras? ...........................¿Con qué argum<strong>en</strong>tos se critica al sistemapúblico de p<strong>en</strong>siones?. ...................¿Cuál es el argum<strong>en</strong>to demográfico que se utiliza parajustificar la privatización de <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones? .............¿Qué es la tasa de dep<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia? .....................¿Cómo influye el <strong>en</strong>vejecimi<strong>en</strong>to de la población <strong>en</strong> la tasade dep<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia? .................................¿Es verdad que el <strong>en</strong>vejecimi<strong>en</strong>to afecta negativa einevitablem<strong>en</strong>te al sistema de p<strong>en</strong>siones? ..............¿A qué se le llama equilibrio financiero del sistema dep<strong>en</strong>siones?. .....................................¿De qué variables dep<strong>en</strong>de el equilibrio financiero? ......303131323333353636363939393940404076


¿Cómo afecta el paro al equilibrio financiero del sistema dep<strong>en</strong>siones?. .....................................¿Qué papel desempeña la mayor o m<strong>en</strong>or capacidad deg<strong>en</strong>erar actividad económica sobre el sistema de p<strong>en</strong>sionespúblicas? .......................................¿Cómo influye la distribución de la r<strong>en</strong>ta <strong>en</strong> la inviabilidaddel sistema? .....................................¿Y cómo influye la calidad del empleo? ................¿Qué ocurre cuando hay altos grados de economíasumergida? .....................................¿Cómo influye sobre <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones la escasa participaciónfem<strong>en</strong>ina <strong>en</strong> el mercado de trabajo? ...................¿Cómo es que los análisis que defi<strong>en</strong>d<strong>en</strong> la privatización noti<strong>en</strong><strong>en</strong> <strong>en</strong> cu<strong>en</strong>ta estas variables? .....................¿Cómo habría que razonar <strong>en</strong>tonces para poder establecerhipótesis sobre el equilibrio financiero de <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones ycómo actuar para alcanzarlo?. .......................¿Justifica el aum<strong>en</strong>to de la esperanza de vida elalargami<strong>en</strong>to <strong>en</strong> la edad de jubilación? ................¿Cuál es la consecu<strong>en</strong>cia de este error? ................¿Es bu<strong>en</strong>o alargar la vida laboral?, ¿afecta esa medida porigual a todos los ciudadanos?. .......................¿Cuáles son <strong>las</strong> consecu<strong>en</strong>cias del retraso obligatorio de laedad de jubilación? ...............................¿Qué medidas respecto a la edad de jubilación deberíamosllevar a cabo? ....................................¿Cómo afecta la discriminación, basada <strong>en</strong> edad, <strong>las</strong>p<strong>en</strong>siones?. .....................................¿Son demasiado elevadas <strong>las</strong> p<strong>en</strong>siones <strong>en</strong> España? ......¿Se correspond<strong>en</strong> los niveles de p<strong>en</strong>siones exist<strong>en</strong>tes <strong>en</strong>España con nuestro nivel de riqueza? .................¿Qué conv<strong>en</strong>dría hacer <strong>en</strong>tonces con la cuantía de <strong>las</strong>p<strong>en</strong>siones <strong>en</strong> España? .............................414142424343444444454646474749495077


¿Deb<strong>en</strong> reducirse, como pid<strong>en</strong> los empresarios, <strong>las</strong>cotizaciones sociales? .............................¿Por qué lo pid<strong>en</strong> <strong>en</strong>tonces?. ........................Y si no hubiera ingresos sufici<strong>en</strong>tes para financiar <strong>las</strong>p<strong>en</strong>siones públicas por la vía de <strong>las</strong> cotizaciones sociales¿habría que r<strong>en</strong>unciar a el<strong>las</strong>, o se podrían financiar porotros medios?. ...................................¿Es mejor un sistema privado de ahorro queuno de p<strong>en</strong>siones públicas? ...............¿Hay argum<strong>en</strong>tos incuestionables a favor de laprivatización del sistema público de p<strong>en</strong>siones? .........¿El sistema de Seguridad Social desinc<strong>en</strong>tiva el trabajo yafecta negativam<strong>en</strong>te a la competitividad de la economía? .¿Perjudica a la economía el gasto público de la SeguridadSocial? .........................................¿Son más eficaces los planes de p<strong>en</strong>siones privados? ......¿Por qué son más arriesgados los fondos de ahorro privadoque los sistemas públicos de p<strong>en</strong>siones? ...............¿Son los fondos de p<strong>en</strong>siones privados más r<strong>en</strong>tables?. ....¿Son seguros los planes de p<strong>en</strong>siones privados?. .........¿Están asegurados fr<strong>en</strong>te a estos riesgos los fondosprivados? ¿podrían quebrar? ........................¿Ha ocurrido eso reci<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te? ¿y cómo se ha hechofr<strong>en</strong>te a la situación?. ..............................¿Por qué se suscrib<strong>en</strong> <strong>en</strong>tonces los planes de p<strong>en</strong>sionesprivados? .......................................¿Es justo el sistema privado de p<strong>en</strong>siones? .............¿Es mejor un sistema de capitalización que unode reparto? ............................¿Qué hay detrás de la disyuntiva <strong>en</strong>tre el sistema decapitalización y el de reparto? .......................¿Favorece el sistema de capitalización el ahorro y lainversión? ......................................50515153535354545555565757575859595978


¿Perjudican al crecimi<strong>en</strong>to económico los sistemas dereparto? ........................................¿Inc<strong>en</strong>tivan los sistemas de reparto la jubilación? ........¿Qué sistema está más preparado para proteger a los másdébiles? ........................................¿Qué ocurre con la inflación <strong>en</strong> el sistema decapitalización? ¿Y <strong>en</strong> el de reparto? ..................¿Cuáles son los costes de administrar un sistema decapitalización?. ..................................¿Es fácil transformar un sistema de reparto <strong>en</strong> un sistemade capitalización? ................................¿Qué propon<strong>en</strong> los liberales para diferir los costes de dichatransición? ......................................¿Qué hay detrás de <strong>las</strong> propuestas liberales?¿quién <strong>las</strong> promueve y a quién les b<strong>en</strong>eficia?. . .¿Ha quedado demostrada ci<strong>en</strong>tíficam<strong>en</strong>te algunaafirmación liberal?. ...............................¿Qué dice la teoría económica? ......................¿Manti<strong>en</strong><strong>en</strong> <strong>en</strong>tonces todos los liberales <strong>las</strong> mismaspropuestas privatizadoras que antes? .................¿Por qué, <strong>en</strong>tonces, sigu<strong>en</strong> empeñados <strong>en</strong> privatizar? .....¿Por qué han crecido tanto los planes de p<strong>en</strong>siones privados<strong>en</strong> los últimos años? ...............................¿Cómo funcionaban antes los bancos y cómo se hanadecuado al nuevo mundo financiero?. ................¿Qué tipo de nuevas líneas de negocio abrieron los bancos?¿Qué papel han t<strong>en</strong>ido los fondos de p<strong>en</strong>siones <strong>en</strong> lareci<strong>en</strong>te crisis financiera? ..........................¿Por qué quier<strong>en</strong> los bancos que se privatice el sistemapúblico de p<strong>en</strong>siones? .............................¿Es que acaso pued<strong>en</strong> los bancos influir <strong>en</strong> <strong>las</strong> decisiones delos políticos? ....................................¿Hay que dejar <strong>en</strong>tonces el sistema público de p<strong>en</strong>sionescomo está? ......................................¿Es esto último posible?. ...........................Los autores ............................60606161616262656565666666676768686970717279

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!