Debate 25

ÍNDICE
3
EDITORIAL
5
EL PLACEBO DEL MANDO ÚNICO
Por: Redacción
8
DEL FEDERALISMO AL MANDO ÚNICO
Por: Alma Ugarte Pérez
10
EL PRD FRENTE AL MANDO ÚNICO
Por: Oscar Eduardo García Mota
13
GOBIERNOS MUNICIPALES CON PERSPECTIVA DE
IZQUIERDA
Por: Moisés Sánchez Ramírez
16
CON SELLO DEMOCRÁTICO
Fotogalería
24
UNA AGENDA MÍNIMA DE LAS IZQUIERDAS DESDE
LO LOCAL
Por: Carlos A. Romero Arreola

Partido de la Revolución Democrática Estado de México
27
UNA POLÍTICA DE ALIANZAS QUE VEA MÁS ALLÁ
DEL 2018
Por Saúl Vázquez Torres
29
LAS ALIANZAS EN EL JUICIO CIUDADANO
Por Julio Gutiérrez
31
LAS ALIANZAS DE CONVENIENCIA
Por Juan Carlos Gómez Esquivel
2

Editorial
El debate sobre el Mando Único Policial en
México evidencia que el gobierno federal
tiende al centralismo y autoritarismo cuando ve
pérdida la batalla ante los poderes fácticos del
crimen organizado y la creciente inseguridad
pública que viven millones de mexicanos.
Como si fuera el mundo al revés, el
planteamiento de la administración federal
comienza con los efectos, soslayando las
causas, es decir, si existe inseguridad pública
lo inmediato es centralizar la función policíaca
para supeditar a todos los cuerpos locales a un
mando único.
El planteamiento parecería correcto si en
México las policías municipales presentaran
una alta capacitación, excelentes salarios,
promociones laborales, e incentivos, además
de estructura en materia de inteligencia contra
la delincuencia y un dique excepcional contra
la corrupción.
La realidad es que nada de eso existe. En
nuestro país y en el Estado de México las
policías municipales llegan a ser corporaciones
endebles de presupuesto y personal, sin visión,
ni misión por salvaguardar al ciudadano; en
el mejor de los casos son reductos temporales
para quien busca emigrar a un buen empleo o
a las filas del crimen organizado.
Pueril crear un mando único cuando estas
condiciones no cambiaran por variables tan
consistentes como la falta de presupuesto,
capacitación y profesionalización.
Sin embargo, la descalificación de tal estrategia
debe ir acompañada de una propuesta sólida,
cuyos cimientos los da el modelo policial
adoptado en Nezahualcóyotl, donde la
solución fue acercarse a la ciudadanía.
Una policía de proximidad que ocupe el
territorio municipal por cuadrantes, mismos
que se convierten en células de seguridad
pública, acompañado de una identificación
directa del ciudadano con quien lo cuida es la
vía para la recuperación de nuestras ciudades.
Insistir sólo en una visión unilateral, sin ver
lo evidente y cercano sólo puede conducir
al fracaso, como ya ocurrió en el Estado de
México, donde el Mando Único ya existe,
pero en los hechos nunca pudo aplicarse por la
incapacidad de los gobiernos municipales y la
negligencia de la administración estatal.

Partido de la Revolución Democrática Estado de México
EL
PLACEBO
DEL
MANDO
ÚNICO
Frente a la intentona autoritaria de instrumentar el Mando Único Policial
como alternativa contra el crimen organizado, el PRD resalta la efectividad
de la Policía de Proximidad.
Por Redacción
La propuesta del gobierno federal para
crear el Mando Único Policial no resolverá
las necesidades específicas de cada uno de
los municipios y por el contrario criminaliza
a todas las autoridades municipales, al
caracterizarlas de facto como corruptas y
al servicio de la delincuencia organizada,
afirmó el dirigente del PRD en el Estado de
México, Omar Ortega Álvarez.
Al señalar que con tal medida se viola
la autonomía de gobiernos estatales y
municipales, el también diputado federal
recordó que en las demarcaciones donde se
ha aplicado el Mando Único no disminuyen
los índices delictivos.
“Apostamos por la coordinación y no por la
sustitución, por el fortalecimiento y no por
la disolución, por la institucionalidad y los
derechos humanos y no por el centralismo
corrupto”, afirmó.
La propuesta correcta, indicó, es generar
un nuevo esquema de coordinación entre
los tres ámbitos de gobierno, que garantice
la gobernabilidad y el fortalecimiento de las
capacidades municipales en la materia.
5

Partido de la Revolución Democrática Estado de México
Consideró que antes de institucionalizar
el Mando Único debe garantizarse que
los cuerpos policíacos actúen con pleno
respeto a los derechos humanos, a la par
de que el Congreso federal priorice la
discusión de leyes para evitar violaciones
a garantías individuales y evitar la
desaparición forzada.
CASO DE ÉXITO
Un ejemplo de la propuesta del PRD
es el municipio de Nezahualcóyotl,
donde se implementó la llamada Policía
de Proximidad, lo cual mereció el
reconocimiento de países como Estados
Unidos y Chile.
Entre las medidas que incluyó esta
estrategia destaca la baja de 446 elementos
policiacos y la incorporación de mil 64
nuevos policías, además de capacitarse a
todos; hubo incremento en los salarios y la
totalidad aprobó el examen de control de
confianza.
En la operación del plan, el municipio fue
dividido en cuadrantes para que cada uno
de estos territorios tuviera asignada una
patrulla, lo cual alentó la identificación de
los elementos policíacos con la comunidad,
pues los vecinos cuentan los números
telefónicos de sus respectivos guardias.
LA REALIDAD
En el debate del Mando Único sus impulsores
olvidan una de las principales carencias de
las policías municipales: la capacitación e
incentivos para su profesionalización.
De acuerdo a un análisis realizado
por la página www.metricadigital.com,
entre 2013 y 2014 estaban contratados
3 mil 366 policías municipales en los 22
Ayuntamientos que conforman la zona
metropolitana del Valle de Toluca.
El salario mensual promedio de dichos
guardias, quienes son los responsables de
la prevención de delitos, era de 5 mil 800
pesos, cantidad insuficiente a todas luces
para el mantenimiento de una familia.
En el estudio de dicho portal se indica que para
los policías municipales el mínimo requerido
debería ser de 10 mil pesos mensuales, de
6

Partido de la Revolución Democrática Estado de México
acuerdo a especialistas en seguridad pública
como Cristina Pablo Dorantes.
Al momento de realizar el análisis www.
metricadigital.com encontró que municipios
como Almoloya del Río pagaban a sus
policías 2 mil 430 pesos a la quincena,
mientras entre los “mejor pagados” estaban
Ocoyoacac y Zinacantepec, donde
percibían 3 mil 500 y 2 mil 800 pesos,
respectivamente.
En los 22 municipios de la zona de Toluca
tampoco existen las mínimas condiciones
laborales para sus policías, pues sus
seguros de vida tienen como máximo la
cantidad de 400 mil pesos.
Carencia, refiere el citado análisis, que se
suma a las pocas facilidades que se les
otorgan para adquirir una vivienda; junto a
la inexistente partida especial para viáticos,
en el entendido que pasan todo el día en
la calle.
Problemas enfrentados por los uniformados,
quienes en su mayoría tenían entre 30 y 38
años de edad, además de una antigüedad
promedio de siete años en sus respectivas
corporaciones, es decir, ser policía
municipal es una actividad temporal que
depende de encontrar mejores alternativas
económicas, ya sean legales o ilícitas.
Los policías municipales tampoco cuentan
con una atención médica y sicológica
especializada, pese a que están expuestos
permanentemente a situaciones de estrés
y riesgo constante. Y aunque en algunos
casos llegan a percibir bonos económicos
de productividad, éstos no están
estandarizados.
Otro aspecto del que adolecen los policías
municipales del Valle de Toluca, es de un
esquema de reconocimiento sistematizado
ante la sociedad; tampoco cuentan con
horarios laborales escalonados o por
turnos, ya que actualmente todas las
corporaciones operan bajo el esquema de
24 por horas de servicio por 24 ó hasta 48
horas de descanso.
Este escenario laboral adverso provoca
un mínimo margen de jubilación en este
trabajo, y que las bajas en el periodo
referido hayan sido del 16 por ciento.
EL ANALGÉSICO
Con tales variables hablar de un Mando
Único, donde las policías locales quedarían
supeditadas a una directriz estatal o nacional,
no resuelve el problema de las carencias y
deficiencias de los guardias locales.
Y más aún en el Estado de México, donde el
Mando Único opera en teoría desde el 4 de
marzo de 2013, cuando firmaron convenios
voluntarios la mayoría de los alcaldes con
el gobierno de Eruviel Ávila Villegas, quien
como presidente municipal de Ecatepec se
había puesto a tal mando, pero ahora como
mandatario mexiquense lo respalda.
Entre los objetivos de dichos convenios
estaba el que las policías municipales
mejoraran salarios, capacitación y
equipamiento, lo cual no ha ocurrido.
También destacaba el abatir índices
delictivos, disminuir corrupción, e
implementar tecnologías de información.
Objetivos que serían alcanzados en uno
o dos años, según dijo el entonces titular
de la Secretaría de Seguridad Ciudadana,
Salvador Neme Sastré, funcionario que
al igual que la citada dependencia ya
desapareció de la vida pública, pues ya
no dirige esa institución que ahora bajó de
rango al denominarse Comisión Estatal de
Seguridad (CES).
Así, a tres años de la firma de los convenios
del Mando Único en el Estado de México
no hay reportes públicos de los alcances y
resultados de tal medida.
Incluso en su momento el ahora ex Secretario
estatal de Seguridad Ciudadana, Damián
Canales Mena, tercer funcionario que ocupó
la titularidad de esa dependencia creada
y desaparecida en el actual gobierno, se
pronunció a favor de analizar con claridad,
precisión y madurez si era conveniente
mantener el esquema de Mando Único.
Planteamiento que realizó Canales Mena
al comparecer ante diputados locales, en
el marco de la glosa del Tercer Informe
de Gobierno de Ávila Villegas, no sólo
a partir de los escasos resultados de
operativos coordinados, sino también de la
incapacidad de los alcaldes para otorgar
salarios adecuados a sus policías.
7

DEL FEDERALISMO A
La centralización de la seguridad pública no evita la infiltración
Partido de la Revolución Democrática Estado de México
Por Alma Ugarte Pérez
La incapacidad del gobierno mexicano para abatir
la violencia generada por el crimen organizado, es
una realidad que se ve plasmada en las lamentables
cifras de asesinatos y personas desaparecidas, las
cuales aumentan día a día en una espiral de violencia
que pareciera verdaderamente, incontenible.
Frente a esta problemática, la respuesta de los
últimos titulares del Ejecutivo Federal, ha sido
buscar la centralización de la seguridad pública,
como Felipe Calderón con su “Policía Acreditable”,
y como Peña Nieto con la Gendarmería Nacional.
Fracaso tras fracaso y millones tras millones
invertidos, la violencia en el país no ha disminuido;
la injusticia e impunidad permanecen arraigadas
en nuestro sistema mexicano, arropando criminales
y a sus cómplices. Es en este contexto al que se
suma la peor crisis de credibilidad institucional
encabezada por el Ejecutivo, la discusión sobre el
nada nuevo “Mando Único”, que ha sido reanimada
bajo la justificación de la corrupción existente en los
cuerpos policíacos municipales.
Sin embargo, resulta irrisorio que la corrupción
se discuta solamente a nivel municipal, cuando la
posibilidad de infiltración del crimen organizado
es una realidad en todos los niveles de gobierno,
incluso en las instituciones partidistas que gobiernan
México, como nos lo ha mostrado España.
En este sentido, volver a intentar la por demás
probada y equivocada hipótesis que apunta a la
centralización de la seguridad pública como la
respuesta a nuestros problemas de inseguridad y
de corrupción de los cuerpos policíacos, se puede
volver absurda y representar un impacto negativo
8

Partido de la Revolución Democrática Estado de México
AL MANDO ÚNICO
filtración del crimen organizado en los organismos policíacos.
en la autonomía municipal, baluarte histórico del
Federalismo mexicano.
Como lo han señalado expertos en gobiernos
municipales, la seguridad de los municipios
debería realizarse a través de esquemas mixtos de
coordinación. Estos esquemas han resultado ser
casos de éxito en países como Colombia o en el
mismo México (Cherán), los cuales a través de ceder
el mando a la ciudadanía y las alcaldías, lograron
reducir la violencia hasta en un 90% durante un corto
tiempo.
De igual forma, reconstruir la confianza ciudadana en
los cuerpos policíacos podría tener más posibilidades
de concretarse a través de los esquemas de policía
comunitaria con resultados eficaces en la prevención,
contención y disminución de la violencia, que a través
de reformas orientadas al control político centralizado
de la seguridad.
Sobre todo si es una reforma que no reconoce la
corrupción en otros niveles de gobierno más allá
del municipal, cuyo plan estratégico de transición
incluye la reincorporación de las mismas policías
municipales que señala de corruptibles a los cuerpos
de seguridad pública estatal, y que no instrumenta
medidas paralelas de reconformación de los cuerpos
policíacos, contribuyendo a la centralización de la
corrupción.
La corrupción no se combate con la centralización del
poder que abre la posibilidad al manejo discrecional
de los cuerpos de seguridad, se combate con
iniciativas con enfoque ciudadano y una visión de
derechos humanos.
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Partido de la Revolución Democrática Estado de México
La policía de proximidad es una alternativa que funciona en
Nezahualcóyotl, pero que otros gobiernos se resisten a replicar.
Por Oscar Eduardo García Mota
Son ya seis años desde que inició la
discusión acerca del Mando Único Policial
(MUP) y desde entonces la gran mayoría
(119 de los 125) de los municipios del Estado
de México firmaron el convenio con el
gobierno del estado para la implementación
del programa y con ello unirse al Sistema
Nacional de Seguridad.
A su vez son diez años desde que el
Consejo de Seguridad Nacional iniciara
esta tendencia por centralizar el poder
policiaco en 32 cuerpos que se instalarían
en cada entidad federativa.
Por supuesto, en el caso del Estado de
México los municipios de Nezahualcóyotl,
Teotihuacán, Tultepec y Villa de Allende
se reusaron a suscribir el convenio, a
sabiendas de que el tema no había sido
analizado a profundidad, y de que diversas
organizaciones de académicos y de la
sociedad civil habían criticado el modelo,
ya que los argumentos que lo sustentaban
dejaban en claro que el modelo tiende a
centralizar el poder y reconocen en él un
pretexto para que el gobierno federal pueda
intervenir en los municipios reduciendo
la autonomía otorgada por el artículo 115,
10

Partido de la Revolución Democrática Estado de México
EL PRD FRENTE
AL MANDO ÚNICO
fracción III, índice h, en donde se les faculta
para organizar un cuerpo de policía que
vigile la seguridad pública.
La Secretaría de Seguridad Ciudadana del
Estado de México destacó, en los primeros
meses del 2013, que 23 mil 500 elementos
de la policía del estado serían integrados al
modelo de policía de mando único, y con
ello se daría fortaleza y organización a la
policía municipal, además echarían mano de
modelos de selección y control de confianza
estandarizados que darían la certeza de
contar con elementos capacitados física,
psicológica y tácticamente para la tareas
de la policía.
Se mencionó que el proyecto preveía rutas
críticas, seis ejes de acción y veintiséis
objetivos específicos a realizarse de
manera inmediata a la firma del convenio,
estos objetivos contemplaban en su
conjunto la lucha contra la infiltración de la
delincuencia organizada en los municipios,
la mejora en la acción de la policía por su
centralización y homogenización en todo el
estado, la cooperación presupuestal entre
gobiernos municipales y el estado para
el financiamiento del equipamiento, entre
otras.
A pesar del avance en la firma del convenio
de colaboración entre los municipios y
11

Partido de la Revolución Democrática Estado de México
el estado, el PRD siempre se mantuvo
en contra de la imposición del MUP y por
ello desde el inicio de la discusión sobre
el tema, personajes como Juan Hugo de
la Rosa, entonces dirigente estatal del
PRD, comentó que los municipios bajo un
gobierno perredista no aceptarían el mando
único, debido a que el tema no había sido
ampliamente discutido. Como él, fueron
muchos quienes se declararon en contra del
modelo de centralización del mando, pues
advertían una violación a la autonomía de los
municipios y una clara falla de coordinación
entre los niveles estatal y municipal. Una
excesiva intervención del gobierno federal y
una clara falla sistémica en comunicación y
velocidad de acción ante los delitos.
Además del PRD, también organismos
como la Red de Investigadores en
Gobiernos Locales Mexicanos (IGLOM),
advirtieron que el modelo de mando único
no respondía a lo que a nivel internacional
otras naciones se encontraban
implementando, países de América Latina
y Europa, que han tenido éxito en la lucha
contra la delincuencia organizada utilizando
modelos que mezclan el MUP y la policía
de proximidad, la policía ciudadana o bien
modelos que integran a la sociedad civil en
la lucha contra la delincuencia.
El modelo de policía de proximidad,
policía de cercanía o policía ciudadana, se
puede presentar con diversas vertientes,
sin embargo, guarda como constante el
contacto directo del ciudadano con sus
elementos de policía, en algunos casos
se designa un policía por un corto espacio
geográfico (sector, cuadra, manzana), lo
que permite que los vecinos lo conozcan e
interactúen con él.
También algunas de sus vertientes integran al
mismo ciudadano en las labores del policía,
es decir, pueden formar pequeños grupos de
guardias o vigilantes que en su totalidad son
integrados por los propios vecinos. Algunos
llegan incluso a intentar integrar a diversos
sectores de la sociedad como los niños o
adultos mayores, dando a cada uno una
tarea específica, como puede ser un grupo
de adultos mayores que vigilan la entrada y
salida de los niños a las escuelas.
En el caso del Estado de México tenemos un
ejemplo en el municipio de Nezahualcóyotl,
donde en fechas recientes recibieron un
reconocimiento por parte del Centro de
Investigación y Desarrollo Económico
(CIDE), por haber implementado un modelo
de policía vecinal de proximidad, que desde
la administración de Juan Zepeda hasta la
fecha, sigue dando excelentes resultados, y
que ha logrado disminuir el índice delictivo
en más del sesenta por ciento.
Por supuesto el modelo, a pesar de haber
demostrado su efectividad, no ha sido
replicado a nivel estatal y nacional por
los intereses políticos que trascienden el
interés del bienestar de la ciudadanía.
El modelo de Nezahualcóyotl divide al
territorio municipal en 90 cuadrantes, y
acerca a los policías a cada uno de ellos
para que tengan contacto cercano con el
ciudadano; una patrulla por cuadrante,
que no tiene motivo por el cual alejarse
del mismo, así se pretende tener una
convivencia del policía con el territorio y
con ello conocer el modo de interactuar de
la comunidad que habita el mismo, conocer
a la gente y sobre todo general familiaridad
con ellos y en especial con los jóvenes.
Para cerrar el círculo entre trabajo policiaco
y participación ciudadana, el modelo de
policía vecinal de proximidad prevé que
cada vecino del cuadrante cuente con el
nombre y teléfono del policía asignado,
asimismo con el número de patrulla que
de manera constante estaría vigilando su
comunidad.
Ante los problemas actuales de inseguridad,
el gobierno no puede continuar con su
empecinamiento en la lucha por el control
totalitario del poder. Los organismos
internacionales y la sociedad en su conjunto
demandan que se abran espacios a la
sociedad y que la solución a la violencia y la
inseguridad venga de un trabajo coordinado
entre sociedad y gobierno.
El ejemplo lo está dando el PRD, quien a
nivel estatal y nacional continúa trabajando
con políticas que integran y fortalecen el
tejido social. El modelo de MUP no solo
ha demostrado su ineficiencia e ineficacia,
sino que representa uno más de los
fracasos del gobierno de Felipe Calderón y
Enrique Peña Nieto. Más aún, demuestra la
falta de asertividad y los oídos sordos de un
gobierno alejado de la ciudadanía y de los
ideales de la democracia.
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Partido de la Revolución Democrática Estado de México
GOBIERNOS
MUNICIPALES
CON PERSPECTIVA
DE IZQUIERDA
Repensar a los gobiernos
locales desde una visión
de izquierda debe alentar
políticas públicas eficaces.
Por *Moisés
Sánchez Ramírez
La falta de eficacia y eficiencia en
la gestión de políticas públicas, la
ausencia de oportunidades, las grandes
desigualdades, la exclusión y la pobreza,
son factores que multiplican la probabilidad
de deslegitimización en el orden local y la
retirada del apoyo ciudadano, conduciendo
a la desintegración social, el conflicto y la
violencia.
Para contrarrestar este problema, la política
social es un instrumento que utilizan
los gobiernos municipales para regular
y complementar las instituciones y las
estructuras sociales.
La política social es definida a menudo en
términos de servicios sociales, como la
educación, la salud o la seguridad social.
Sin embargo, la política social incluye
mucho más: distribución, protección y
justicia social.
La política social consiste en situar a los
ciudadanos en el núcleo de las políticas
públicas, ya no mediante el suministro
de asistencia social residual, sino
incorporando sus necesidades y voz en
todos los sectores.
La política social es también instrumental,
y ha sido utilizada pragmáticamente
por muchos gobiernos para conseguir
el respaldo político de los ciudadanos,
generar cohesión social, y potenciar un
mayor desarrollo económico, mejorando el
capital humano y el empleo productivo.
A pesar de todos los esfuerzos que se han
hecho en México, el municipio todavía es un
minúsculo ente receptor del poder, aún y
cuando existen algunos grandes municipios
con peso económico y político específicos,
por ejemplo, las capitales de los estados o
algunos enclavados en regiones de cada
entidad federativa, que ejercen influencia
de ser polos de desarrollo.
Una de las últimas encuestas acerca de
Gobierno, Sociedad y Política, de Gabinete
de Comunicación Estratégica (GCE), sobre
los niveles de marginación urbana, que
mide educación, salud y bienes materiales,
arroja lo siguientes resultados para los
municipios:
• Poblaciones con índices de marginación
muy baja, es decir, con capacidad de
desarrollo, representan el 10.4%.
• Con marginación baja, es decir con
limitantes de desarrollo, el 16.33%.
• Con marginación media, que tienen
dificultades severas para el desarrollo,
alcanzan el 19%.
• Con marginación alta y muy alta, esto
es con posibilidades remotas de salir
adelante en el corto plazo, son el 54.27%
del total de los municipios en nuestro
país.
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Partido de la Revolución Democrática Estado de México
Como datos complementarios podemos
apuntar que, de acuerdo con el INEGI y el
CONEVAL, los 2 mil 454 municipios actuales
muestran un perfil contrastante:
a) Metropolitanos, son el 15%, con casi
50 millones de mexicanos.
b) Urbanos, representan el 20%, con 20
millones.
Sin duda, tratar sobre el gobierno local
y la participación ciudadana cuando la
llamada globalización se extiende a todo
tipo de procesos socioeconómicos y
políticos, puede parecer una tarea menor.
Sin embargo, ahora que lo local recupera
su importancia, en comparación con la
época reciente de hegemonía del Estado–
Nación (centralismo), requiere de una
reconsideración mayor.
En este sentido, “la globalización estimula
y requiere la repolitización del gobierno
local”. De manera particular, las entidades
municipales de izquierda deben tomar
conciencia de su ubicación en la gran
red mundial de intercambios de todo
tipo y de las oportunidades y riesgos
que de tal ubicación se derivan para su
vida económica, su estructura social o su
identidad cultural.
Sólo una visión política comprometida, y
no meramente administrativa o de gestión,
confiere a los municipios la capacidad para
reaccionar o para anticiparse cuando es
posible ante tales oportunidades y riesgos.
Dicha capacidad se enmarca en la
posibilidad de elaborar propuestas potentes
para impulsar la promoción económica
del entorno local, la provisión de servicios
sociales o la reordenación de infraestructuras
de todo tipo. Tales propuestas sólo
adquirirán sentido, si se hacen desde una
visión integral y de largo plazo, es decir,
mediante una opción estratégica entre
modelos alternativos de comunidad local.
De ahí la importancia de la denominada
repolitización del gobierno local con la
perspectiva de izquierda (que implica una
gran participación ciudadana, un cambio y
crecimiento de la cultura política).
En este contexto, el panorama que
ofrecen los gobiernos locales de México
se ha vuelto complejo y diverso. Esto no
es necesariamente novedoso, este nivel
de gobierno ha sido objeto de múltiples
transformaciones, algunas de ellas producto
de los cambios demográficos y socioeconómicos
característicos del paso de siglo.
Pero en algunos casos, los cambios han
sido producto de propósitos políticos
encaminados justamente a dar una nueva
fisonomía y a modificar el papel que estos
gobiernos están llamados a cumplir en sus
14

Partido de la Revolución Democrática Estado de México
respectivos territorios y sociedades, sobre
todo los gobiernos municipales gobernados
por los partidos de izquierda. Y es este último
tipo de cambios el que ha marcado con
mayor influencia las perspectivas actuales
de los gobiernos locales de México.
En esta perspectiva, la promoción de debates,
reflexiones o simplemente el intercambio
de opiniones acerca de la izquierda en el
municipio es imprescindible para lograr la
transición democrática que se requiere.
La izquierda, como fenómeno político,
ideológico y social, no es homogénea
ni monolítica; por lo tanto, en el ámbito
de nuestro sistema de partidos, pero en
particular en los de izquierda, existe un
conjunto de principios políticos e ideológicos
básicos que definen a las izquierdas y una
gran diversidad de enfoques teóricos y
prácticas políticas que las distinguen.
No será el objetivo hacer una descripción,
pero actualmente en México se identifican
cuatro corrientes o expresiones
izquierdistas. Debemos reconocer a una
izquierda organizada en partidos, que
privilegia la acción electoral, que forma
parte del sistema político y que actúa dentro
del marco institucional.
En la arena política se denota la existencia
de un debate más que ideológico, de
formas de ejecución, de gestión pública y
de interacción del gobierno con la sociedad,
de un gobierno municipal que está ubicado
irremediablemente en un paraguas de
globalización económica.
Los planteamientos estructurales hay
que ubicarlos en cuestiones de políticas
generales, de formas de vida y culturales, y
precisarlas o especificarlas en la eficacia de
las administraciones públicas, en la calidad de
sus servicios, y por tanto, en los beneficios que
impactarán en el bienestar de la población.
En este marco, en cada uno de los aspectos
o temáticas señaladas, las diferencias
pueden también establecerse en las
respuestas nuevas que puedan ofrecerse
en cada caso para desarrollar soluciones,
procedimientos, mecanismos novedosos,
pero sobre todo eficaces y eficientes, en
términos de una gestión pública exitosa, en
la orientación o destino final de la acción
gubernamental: justicia social, equidad,
redistribución de beneficios, entre otros. Y
quizás en ese ámbito cabría recuperar (en
los casos que fuese posible) los trasfondos
ideológicos que animan los propósitos de la
izquierda en México.
*Moisés Sánchez Ramírez Licenciado en
Economía egresado de la Escuela Superior de
Economía del Instituto Politécnico Nacional. M.
en C. con Especialidad en Administración Pública
y los Nuevos Escenarios a Nivel Internacional.
15

Partido de la Revolución Democrática Estado de México
CON SELLO
DEMOCRÁTICO
El PRD instaló la Coordinadora de Autoridades Locales en el Edomex que será el órgano
rector de los gobiernos de extracción perredista.
La meta radica en generar un sello distintivo para los gobiernos y autoridades del PRD,
quienes desde una convicción democrática deben estar más cerca de la ciudadanía.
La coordinadora quedó integrada por miembros del Comité Ejecutivo Estatal (CEE) y por
autoridades locales, entre ellos el dirigente del PRD mexiquense, Omar Ortega Álvarez; el
coordinador de la fracción parlamentaria, Juan Zepeda; los presidentes municipales Juan
Hugo de la Rosa (Nezahualcóyotl), Ramón Montalvo (Valle de Chalco), Adriel Negrete
(Nextlalpan), Saúl Benitez (Zacazonapan); y la regidora Claudia Reyes (Huixquilucan), así
como por las integrantes del CEE, Nunila Pedraza y Xochitl Limón.
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UNA
AGENDA
MÍNIMA
DE LAS
IZQUIERDAS
DESDE LO LOCAL
Por Carlos A. Romero Arreola
Hay que reconocer la realidad a la que se
enfrenta nuestra entidad en el momento
actual, tras la vorágine de las elecciones y
todo lo que ello ha implicado al interior de
nuestro partido, pero sobre todo al exterior
como fuerza activa y permanente en el
escenario político estatal.
Debemos ser conscientes que el ligero
descenso que el PRI obtuvo en lo referente
a Ayuntamientos y curules en la Cámara
de Diputados, en ningún momento ha
significado un retroceso en su control
político o margen de acción territorial.
Por el contrario, hoy más que nunca
debemos ser hábiles en identificar aquellos
sutiles, algunos, y vulgarmente francos, los
otros, esfuerzos y acciones mediante los
que el PRI, encabezado por Eruviel Ávila
Villegas, ha venido trastocando la de por
sí incipiente vida democrática del más
poblado estado del país.
No hay que abundar mucho en el hecho de
que la perdida de curules y Ayuntamientos
por parte del tricolor se compensa con otra
de las habilidades que el sistema ha venido
perfeccionando en sus ya casi noventa años
de regencia: la cooptación; sin embargo, y
fundamentalmente pretendo en estas líneas
evidenciar otros mayormente dañinos
esfuerzos que han venido lastimando la
má básica y fundamental esfera de
organización política, administrativa y de la
vida pública, misma que es el municipio.
La intentona de este gobierno por hacerse
con el control de toda la vida política de
este estado va más allá de las pretensiones
electorales, trasciende incluso al resultado
de las urnas y lo hace con gravísimas
consecuencias para la vida institucional de
los Ayuntamientos y por ende de la calidad
de vida de sus habitantes.
¿Qué logros ha traído el convenio de
Mando Único que firmaran 120 municipios
en marzo de 2013 1 y que está pronto a
renovarse? Se puede decir categórica y
enérgicamente que ninguno; solamente
constituyó un atropello a la autonomía
municipal. No es cierto que cederle al
estado el mando de nuestras policías nos
garantice una coordinación y un mando
incorruptible como lo ofertaron en los
Cabildos. El espíritu y la voluntad política de
esta iniciativa es un esfuerzo centralista y
autoritario que nada tiene que ver con darle
garantías a la población.
La organización “Causa Común” dio a
conocer la información que han construido
a partir del monitoreo del programa de
Acompañamiento Ciudadano al Desarrollo
Policial 2 , que analiza los cuatro ejes que
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Partido de la Revolución Democrática Estado de México
exige a cada corporación la Ley General
del Sistema Nacional de Seguridad
Pública: carrera policial, profesionalización,
certificación integral y régimen disciplinario;
la calificación obtenida por el estado
de México a este respecto fue de 5.1,
obteniendo el lugar número 23 de 32 a nivel
nacional y situándonos por debajo de la
media del país, cabe mencionar que esta
cifra representó un retroceso con respecto
al resultado de 2014 que fue de 6.75.
Las cifras son alarmantes, en días pasados
el semanario Z difundió en el portal Sin
Embargo 3 la cifra escalofriante de 8 mil
845 asesinatos de 2012 a la fecha, suma
que supera a estados como Guerreo,
Chihuahua, Tamaulipas o Ciudad de México
y pone a nuestra entidad en el primer lugar
por muertes violentas del país. Como si
no fuera suficiente con esta aseveración,
en la misma publicación se hizo evidente
la omisión del gobierno por informar la
cifra correcta de homicidios en la entidad,
maquillando los datos a fin de dar números
alentadores como sí por la estadística oficial
corrigieran lo que los ciudadanos enfrentan
en el diario devenir de su existencia.
Y qué decir de los feminicidios en este
estado, en el que en los últimos nueve años
se han registrado dos mil 318 de acuerdo
con la cifra del Observatorio Ciudadano
Nacional del Feminicidio 4 , y en el cual
tan sólo durante el gobierno de Eruviel
Ávila de 2011 a la fecha se ha registrado
la desaparición de más de 600 mujeres
menores de 20 años, mismo número de
mujeres asesinadas tan sólo en Ecatepec
de 2012 a la fecha.
El decreto de Alerta de Género emitido
para 11 municipios del Estado de México
el pasado 28 de julio de 2015 consistió en
una pantalla mediática e irresponsable por
parte de los gobiernos federal y estatal,
ya que no ha constituido ninguna acción
afirmativa, política pública, protocolo
de actuación o conformación de ningún
equipo para la atención de esta indignante
situación, tan solo en lo que va de 2016
se han registrado 12 5 muertes violentas
de mujeres en el estado, todas ellas con
las características suficientes para ser
consideradas feminicidios, es decir, en el
Estado de México se asesina a una mujer
cada 2.5 días, a este paso terminaremos
2016 con 144 6 .
Otro atropello al espíritu municipalista
es el que fue firmado por gran parte de
los municipios del estado, referente al
Convenio de Colaboración Administrativa
en Materia Hacendaria para la recaudación
y fiscalización del impuesto predial y sus
accesorios legales, que establece que el
gobierno del Estado de México realizará
el cobro del citado impuesto a nombre
de los Ayuntamientos, con la justificación
de ampliar la base recaudatoria de los
municipios, sin embargo, implica según
su cláusula octava, el descuento de las
comisiones bancarias correspondientes a
los pagos electrónicos, así como los gastos
de ejecución derivados del cobro del
impuesto, es decir, el estado le cobrará a
los municipios por recaudarles el impuesto
y se beneficiará de los réditos que este
dinero genere en los bancos; recursos que
dejarán de entrar a los Ayuntamientos.
Hay que recordar que en el artículo 115
de la Constitución de 1917 se reconoce al
municipio como un nivel de gobierno, pero
que es hasta su posterior reforma de la
década de los ochentas, más de cincuenta
años después de su promulgación, que
se denomina al municipio “libre”, y se le
asignan contribuciones inmobiliarias como
el predial para fortalecerlo financieramente
con la finalidad de garantizar su autonomía,
no obstante, le estaba negado modificar la
tabla de valores catastrales, función aún
en poder del estado. No fue hasta 1999
que se logra la reforma que permite a los
municipios la capacidad de proponer a sus
Congresos estatales, de manera anual, las
tablas de valores catastrales.
Con esa reforma los municipios adquirieron
los lineamientos reales para el desarrollo,
con el fin de modernizar el sistema de
recaudación del cobro del impuesto
predial. Pero el convenio citado representa
un retroceso de décadas en materia de
soberanía municipal y hacendaria.
Aunado a esto cabe decir que el Índice de
Información Presupuestal Estatal 7 califica al
Estado de México con el lugar 26 de las 32
entidades del país, lo que implica una mala
evaluación en términos de transparencia de
la información sobre el uso y destino de los
recursos públicos, la opacidad en materia
fiscal es una constante en este estado, es
evidente que Eruviel Ávila está jineteando el
dinero del predial de los Ayuntamientos y
les cobra por hacerlo.
25

Partido de la Revolución Democrática Estado de México
Otro tema impostergable para nuestra
agenda es el de la cultura, como la
soberanía, la cultura emana principal y
originalmente del pueblo, se alimenta del
cotidiano devenir de la coexistencia social
y se dispersa como el lazo envolvente de la
identidad de cada pueblo.
El arte y los artistas que se encierran en
sus talleres y auditorios se condenan al
ostracismo y condenan a sus pueblos a la
inanición espiritual. A este respecto hago
votos para cumplir lo que en su momento
señalara el célebre muralista David Alfaro
Siqueiros: vamos a sacar la producción
pictórica y escultórica de los museos
-cementerios- y de las manos privadas
para hacer de ellas un elemento de máximo
servicio público y un bien colectivo, útil para
la cultura de las grandes masas populares.
La cultura, es un acto revolucionario, en
tanto que ella se convierte en una chispa
de rebeldía que provoca con su propuesta
a quien la consume, que incendia la
conciencia del pueblo que libera.
La brújula de nuestra conciencia y la
integridad de nuestros actos han de lograr
que revindiquemos el honorable trabajo que
representa la militancia partidista, la función
pública y la actividad legislativa.
Seamos enérgicos en evidenciar la forma en
la que nuestro Congreso ha sido reducido
a un teatro de legitimación de la voluntad
imperial surgida del Palacio de Gobierno,
desde el cual el Gobernador de este estado
tiene intervenido al Poder Legislativo. Para
ser claro, 90 por ciento de las iniciativas
son dictadas por él y para él; como la que
reformó al Código Civil para permitir a un
ex Gobernador casarse inmediatamente
después de su divorcio o como la que facultó
a otro Gobernador a ungir magistrados
a sus comparsas y compinches sin
ningún mérito judicial, como las reformas
electorales para impedir las candidaturas
comunes o centralistas y conservadoras
para robarle las atribuciones recaudatorias
y de seguridad a los Ayuntamientos.
En este estado es impostergable la discusión
y materialización de leyes sobre movilidad,
revocación de mandato, de educación
media superior y superior, de diversidad
e inclusión, de violencia de género y
crímenes de odio; también es imprescindible
replantear el camino trazado en materia
de coordinación fiscal, mando único y
reelección de autoridades. Hay agenda
compañeros, salgamos a dar la lucha.
¡Firmes y Dignos!
Citas:
1 http://www.eluniversaledomex.mx/nezahualcoyo/neme-sastre-pidio-a-municipios-faltantes-unirse-amando-unico-.html
2 http://www.alfadiario.com.mx/articulo/2016-01-26/62571/mando-unico-y-seguridad-publica-en-el-estadode-mexico
3 http://www.alfadiario.com.mx/articulo/2016-01-26/62570/se-dice-que
4 http://www.sinembargo.mx/opinion/27-01-2016/45014
5 http://www.jornada.unam.mx/2016/01/27/estados/026n1est
6 Cálculo realizado al 30 de enero cuando se escribió este artículo.
7 http://imco.org.mx/banner_es/indice-de-informacion-presupuestal-estatal-iipe-2015/
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Partido de la Revolución Democrática Estado de México
UNA POLÍTICA DE ALIANZAS
QUE VEA MÁS ALLÁ DEL 2018
El PRD está en la disyuntiva de reconstruir su identidad desde la soledad
de su militancia o en alianza con otras fuerzas políticas.
Por *Saúl Vázquez Torres @SawieV
Ante el sectarismo mesiánico y la
restauración autoritaria, parecería que
la mejor alternativa es la planteada
por Agustín Basave y su programa de
frentes amplios opositores en 2016. Sin
embargo, una parte importante de nuestro
partido ha cuestionado fuertemente la
conveniencia de estos arreglos políticos
con Acción Nacional.
Para analizarlos primero deberíamos
preguntarnos, ¿cuál es el objetivo de la
política de alianzas del PRD?, ¿ganar la
mayor cantidad de elecciones en 2016?,
¿construir una identidad de largo plazo?, ¿la
ansiada y utópica unidad de las izquierdas?
Para responder a esa pregunta me gustaría
distanciarme de la postura que analiza las
alianzas, sólo en una lógica patrimonialista
en la cual al momento de aliarnos, o no, sólo
debemos considerar cuantos votos, distritos
y presupuesto representa cada entidad.
Es decir, nuestras alianzas no deben
basarse en el “te doy una entidad grande por
otra grande y una pequeña y otra pequeña”.
Pensar en clave patrimonial, como lo hizo
uno de los primeros comunicados en contra
de la política de alianzas amplias, sólo
nos iguala a la política clientelar del PRI.
Si vamos a hacer política de izquierda no
podemos concebir a los ciudadanos como
algo que se pueda negociar, simples votos
traducidos en presupuesto público.
En consonancia, puedo coincidir con
quienes dicen que una política sistemática
de alianzas con la derecha nos desdibuja
como alternativa de izquierda de cara a los
votantes. Sin embargo, hay que evaluar qué
alternativas le quedan al PRD. El sectarismo
del resto de los partidos de izquierda es claro;
no irán ni a la esquina con nuestro instituto
político. Aunque el escenario ideal sea crear
una banda de representación política amplia
con los partidos de izquierda, este escenario
no es factible. Quien siga apostando a ello
simplemente es necio o perverso.
Otro escenario a tomar en cuenta es la
conformación de una banda anti-política.
Los llamados candidatos independientes,
quienes se comienzan a nuclear en torno
a la figura de Jaime Rodríguez “Bronco”
Calderón.
27

Partido de la Revolución Democrática Estado de México
Ante el desprestigio de la política tradicional,
grupos empresariales, universitarios o
incluso antiguos miembros de los partidos
políticos han manifestado su intención de ir
por Gubernaturas, espacios en el Congreso
e incluso la Presidencia de la República.
Esto representará un reto no sólo para el
régimen, sino también y en mayor medida,
para la oposición institucional.
El discurso anti-política ha permeado
en amplios sectores de la sociedad,
especialmente en la clase media informada,
quienes han construido una concepción
donde toda la política institucional es
corrupta y obsoleta. Para quienes voten
por estas alternativas no hay de origen
diferencias entre el PRI y cualquier otro
partido político, incluido Morena, PRD, MC
y PT. El desprestigio de la política aplica a
todos.
Entonces pensar en la alternativa de ir
solos, conservar nuestra pureza ideológica
y reconstruir nuestra identidad como la
principal alternativa de salida al régimen es
arriesgada, al menos en el corto plazo.
Tanto en 2016, como en 2018, serán los
independientes quienes representen el
mayor reto a los partidos de oposición,
quienes encontrarán difícil diferenciarse
del PRI, al participar del mismo régimen de
financiamiento público y excesos que se han
desprestigiado tanto en los últimos 20 años.
A eso hay que sumar que es justo la
estrategia que Movimiento Ciudadano ha
estado practicando a lo largo de todo el
país. Podrán argumentar algunos que con
bastante éxito, sin embargo, tras tres años
de ventaja ¿vamos a copiar una identidad
que no nos pertenece?
Hay momentos para tomar esta clase de
decisiones y hasta ahora los resultados
parecen dar la razón a Dante Delgado y
la Coordinadora Nacional de Movimiento
Ciudadano. También hay que reconocer
que en esta estrategia la ideología y perfil
de los candidatos no ha sido siempre de
izquierda, habrá que recordar en Jalisco
el bloqueo de la bancada de MC a la
propuesta de nuestro diputado Enrique
Velásquez, de matrimonio igualitario, así
como el perfil claramente empresarial de
sus candidatos en San Luis Potosí y Nuevo
León o francos ex panistas como Leoncio
Morán en Colima.
A pesar de lo anterior, tampoco es difícil
darnos cuenta que la ruta independiente
es una burbuja que no tardará mucho en
desencantar a la ciudadanía. Miremos el
proceso de países como Perú e Italia que
tuvieron a sus líderes ciudadanos (Fujimori
y Berlusconi), quienes resultaron ser
tan corruptos como la clase política que
pretendían reemplazar, agravado por su
inexperiencia en el gobierno. Simplemente
hay que mirar las limitaciones que han
tenido Manuel Clouthier a nivel federal y
Pedro Kumamoto en el local para legislar
y participar de las comisiones sin una
bancada que los respalde.
También considerar que embarcarnos en
una tercera aventura con Andrés Manuel
López Obrador será una triste reedición
de la gran alianza que postuló por tercera
ocasión a Cárdenas a la Presidencia en el
2000, sólo que ahora el PRD no estará a la
cabeza.
No hay otra alianza posible en las
izquierdas, quizás el PRD mismo se encargó
de depredar a la otra figura que era capaz
de hacernos confluir a todos, Marcelo
Ebrard, ahora tenemos que enfrentar las
consecuencias de lo mismo.
Habría que mirar otra experiencia
sudamericana, la del Partido Liberal
de Colombia. Con altos costos decidió
participar en la Unidad Nacional entorno
a Manuel Santos. Hoy el Partido Liberal
es el principal partido en el Congreso de
Colombia. Está en posición para volver a
competir por la Presidencia y la entonces
fuerte Alianza Verde a su izquierda, parece
desaparecer tras perder Bogotá, tanto
Antanas Mokus, como Gustavo Petro fueron
incapaces de rebasar a los liberales por
la izquierda. ¿Podría el PRD participar de
un gobierno de Unidad Nacional y luego
reconstruirse rumbo al 2024? Esa es la
reflexión que hay que tener.
* Saúl Vázquez Torres Consejero Nacional del
Partido de la Revolución Democrática (PRD).
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Partido de la Revolución Democrática Estado de México
LAS ALIANZAS
EN EL JUICIO
CIUDADANO
Antes de pensar en una alianza con otro partido es obligado reconstruir
la identidad del PRD.
Por Julio Gutiérrez
Antes de pensar en una alianza partidista,
preguntémonos por qué no podemos
enfrentar de manera individual unas
elecciones, de índole que sean.
No somos un partido nuevo, tenemos una
trayectoria, una identidad, una historia y
valores que nos identifican con gran parte
de la ciudadanía, pero mantenerse y crecer
como partido a través del tiempo requiere
de una ardua tarea.
Es comprometerse a evolucionar y fortalecer
de manera sustentable la estructura del
mismo. A mantener y crear nuevos vínculos
de acercamiento con su militancia, con sus
simpatizantes y con la ciudadanía, que se
siente identificada con el partido y más
aún que tienen un sentido de pertenencia
con sus ideales y objetivos, ellos son la
semilla que logrará que el partido crezca
en número porque no debemos olvidar
que este sentido de pertenencia y simpatía
también se trasmite entre generaciones.
Lo que hace falta es trabajo, amor por la
institucionalidad y apego a los principios
fundamentales del partido, no podemos
29

Partido de la Revolución Democrática Estado de México
cambiar todo eso por la ambición de poder
o por el deseo de protagonismo, nuestra
prioridad antes de pensar en una alianza es
un análisis interno de cómo se encuentra el
partido al interior y al exterior.
Se ha permitido que desertores de otros
partidos, sin valores, ni escrúpulos,
mercenarios del poder a costa de lo que
sea y cualquier persona con recursos,
utilicen al partido como plataforma para sus
fines, demeriten la imagen del mismo, pero
sobre todo fortalezcan la creencia de la
ciudadanía de que ya no existe un control,
ni interés por conservar el propósito para el
cual fue creado el mismo.
Una alianza con otro partido se da cuando
existen intereses comunes, cuando los
valores y objetivos son en el mismo sentido,
cuando se necesitan aprobar leyes en
beneficio del país y la ciudadanía, crear
nuevas instituciones y lograr acuerdos
para fortalecer y hacer crecer de
manera sustentable la infraestructura de
investigación científica, sector industrial y
de servicios en un municipio, estado o en
el país, teniendo siempre como prioridad
la democracia, el servicio a la ciudadanía
y la distribución equitativa de la riqueza, sin
olvidar lo que la militancia y la ciudadanía
esperan de nosotros como partido y como
servidores públicos.
Todos somos responsables de lo que es
nuestro partido hoy en día, dejemos de
ser conformistas y aceptar imposiciones,
comencemos por hacernos escuchar y si
tenemos el privilegio de tener algún cargo
público, dejemos de ser indiferentes y
sirvamos conforme a nuestros valores
institucionales y personales. No seamos
instrumento de la mayoría en el poder en
aras de alcanzar posicionamiento político
o poder, olvidándonos completamente
de nuestra identidad y valores, ni seamos
esclavos de nuestra ambición protagónica.
Y sólo cuando hayamos recuperado
nuestra esencia, sabremos qué buscamos
en una alianza, porque en apariencia y
a criterio de los demás, nuestro objetivo
es no desaparecer como partido político,
intentando tener un falso protagonismo,
donde los únicos que ganan son: el partido
con el que se hace la alianza si este es
contrario a nuestra corriente, ya que a ojos
de la ciudadanía preferimos mantenernos
en el poder a servir de acuerdo a nuestros
ideales , tal parece que en una alianza, ya
no importa si comulgamos o no con los
valores del otro partido, con sus objetivos
o si estos tienen o no compromisos con sus
cúpulas o con el partido en el poder.
Cuestionemos en primer lugar si nuestros
dirigentes cumplen también con los
estatutos y estándares de nuestro partido,
¡o ni siquiera sabemos ya quiénes son o de
dónde han salido!, sólo así, recuperando
nuestra identidad, volveremos a ser
protagonistas y recuperaremos la confianza
de la ciudadanía.
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Partido de la Revolución Democrática Estado de México
LAS ALIANZAS DE
CONVENIENCIA
“No pretendo convencer a mi enemigo del error, sino llegar con él a una
verdad más alta”. Enrique Domingo Lacordaire.
Por Juan Carlos Gómez Esquivel
La búsqueda de las alianzas
es buena cuando el fin único
es competir contra un sistema,
que de enfrentarse de manera
solitaria no garantizaría la
adecuada competencia.
Pero cuando esta supuesta
alianza lleva atrás un beneficio
personal o de grupo, entonces
no puede concebirse tal alianza.
Dado que no hay equidad entre
los aliancistas.
31

Partido de la Revolución Democrática Estado de México
Las alianzas tienen a su favor haber
generado algunas victorias, sin embargo,
tienen aspectos negativos muy graves
porque convirtieron en gobernantes a
quienes terminaron haciendo exactamente
lo mismo que los anteriores o lo que habrían
hecho sus contrincantes.
La alianza no termina con el hecho de
sufragar el voto popular en favor de ésta,
sino que la alianza debe continuar y asumir
las acciones del gobierno, es por eso que
debe construirse con un ideario con el
que se formuló la alianza ante los órganos
electorales. No es “ganar por ganar”,
sino cambiar las circunstancias de los
gobernados.
Quien sólo busca “ganar por ganar”,
entonces mejor que busque las alianzas
con el partido que no ha perdido en esa
entidad, porque si al final se sienta a las
mesas de negociación con él, por qué no
mejor comienza desde la alianza con ellos
y así sale a pedir el voto para él. Además
también ganaría el derecho de participar en
las políticas públicas del gobierno de esa
alianza.
El fondo real de la disputa en el Comité
Ejecutivo Nacional (CEN) del Partido de
la Revolución Democrática (PRD) es muy
claro.
Hay quienes no piensan en el 2016 ó
2017, sino que ya sus mentes los llevan
a “pensarse” en el 2018. Piensan en un
alianza con el Partido Acción Nacional y ya
hasta con candidato de este mismo instituto
político.
Es ahí donde ellos se asumen como
candidatos a Senadores y Diputados
federales “plurinominales”; por supuesto
en los primeros lugares de cada una de las
circunscripciones del país.
¿Cuáles son sus méritos, qué los hace
superiores a cualquiera de los militantes
del PRD? ¿por qué deben ser ellos, sus
esposas, sus hijos o hijas, ahora por la
“paridad”; y hasta el extremo sus amigas
más cercanas, quienes sólo pueden
acceder a las candidaturas plurinominales
y a las primeras de representación
proporcional en cualquiera de los tres
ámbitos de gobierno del país?
Las alianzas deben ser de cara a la
militancia del país, sin denostarles
capacidad intelectual, porque muchos
dirigentes nacionales creen que en los
estados sus correligionarios están muy
pequeños “intelectualmente” (como si
fueran estudiantes de primaria) para pensar
que es lo que más les conviene, por eso
ellos lo hacen.
O acaso es porque ellos ya se sentaron en
las mesas gubernamentales de los estados
para convenir cuál es el siguiente cargo en
el que quieren poner al gobernador en turno
y por supuesto en cuál estarán ellos.
Es tal su avaricia que les gana su codicia.
Quien hace unos meses buscaba ser
el dirigente nacional del Partido de la
Revolución Democrática, pero que ni
su corriente ideológica apoyó, ahora se
desgarra las vestiduras diciendo que hace
seis años la corriente ideológica que hoy se
opone a las alianzas quería hacer lo mismo.
¿Qué es lo que buscan?, por qué se
tratan de hacer los mártires diciendo que
sólo buscan que no regrese el régimen
autoritario de un partido (con el cual hicieron
el Pacto por México), que quieren liberar a
esos estados en donde no hay alternancia
en el poder estatal.
Y luego lo hacen desde una nueva
corriente ideológica (que tal parece sigue
subordinada a la corriente de donde
salieron) que dicen: “y sin embargo se
mueve”.
La pregunta es hacia dónde se “mueven”.
¿Será acaso que ellos con su corriente
nacional se mueven con quienes dicen
“Mover a México”?
Para qué entonces la alianza, para qué
detener el regreso autoritario. ¿Para darle
por primera vez un gobierno de alternancia,
para ganar sus espacios políticos de ese
posible gobierno estatal, para ganar sus
próximos espacios de representación
proporcional?
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