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Equipo 12:
Montes de Oca Reyes Ernesto
Navarro Padilla Ángel Nemian
Rosales Hernández Samuel
Miércoles 7 de Octubre de 2015 Sesión: 16
¿Qué hora es?.... es hora de oxidar
cosas.
La clase anterior la profesora nos había pedido algunos materiales para la práctica, eran cosas
como hielo, sal, objetos de metal y lo más importante: las ganas de ser unos genios en química.
Es bueno decir que la sal se consiguió, lo último nadie lo vendía…ni en el supermercado.
El miércoles llegamos antes de que empezara la clase, debido a que el profesor de educación
para la salud noto que pusimos empeño en su práctica y que estaban bien hechas. Entre
pláticas, risas y quejas de sueño, mis compañeros se iban poniendo sus batas de laboratorio y
aquellos que no desean cortarse el cabello tenían que pedirles a las mujeres que les prestaran
una liga o pasador.
Sacamos las investigaciones previas, los lentes de seguridad y nos fuimos formando para que
como en la ruleta de la suerte nos asignaran el lugar donde trabajaríamos, pero las cosas
siempre resultan porque somos un grupo tan unido que compartimos todo, incluso cuando se
nos llega a olvidar los materiales aunque solo fueran cosas como clips, pipeta o cosas sencillas.
Pusimos mucha atención a la profesora, como siempre, pues estábamos conscientes de que
esta vez trabajaríamos con sustancias peligrosas y con objetos muy frágiles. Nos explicó cómo
íbamos a realizar los cambios físico y químicos, digo que se tenía que hacer con cuidado y más
o menos esto dijo: “jóvenes primeramente deben tomar uno de estos tubos de destilados y lo
van a llenar de agua, tomando como limite el grosor de su dedo. En lo que ustedes hacen eso,
la profesora de auxilio ira a preparar la tina de hielo, para que ahí se coloquen los tubos de
destilado…”
Lo hicimos de esta forma y fue muy rápido, cuando la tina estuvo preparada fuimos colocando
los tubos para que después se cubrieran con hielo, el objetivo de esto fue que el agua que
contenía el tubo se congelara. Después de cinco minutos sacamos las muestras y procedimos a
la segunda parte.