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COLEGIO Y SOCIEDAD
CARA A CARA
P.- ¿Desde cuánto tiempo formas parte
del grupo de trabajo de Ética?
Alrededor de dos años, tal vez menos.
Entre año y medio y dos años. Este es
el tiempo que, hasta la fecha, llevo presidiendo
y trabajando por el grupo de
trabajo de Ética.
P.- ¿Qué actividad realizáis?
Desde la formación del grupo de trabajo
de Ética en el Colegio Oficial de Ingenieros
Industriales de la Comunitat, y
al margen de otras cuestiones de orden
secundario, hemos avanzado en dos temas,
principalmente:
Alejandro Marín arcas
Presidente del grupo de trabajo
de ética
CARA A CARA
Una profesión sin ética, supone
un perjuicio para el conjunto de
la sociedad, y a los hechos me
remito
Preside el Grupo de Trabajo de Ética, y trabaja porque la
transparencia forme parte del día a día del Colegio. Convencido
de la necesidad de garantizar al ciudadano y al profesional
un entorno deontológico adecuado, considera tan
importante la ética profesional como el buen gobierno de las
instituciones, el otro gran objetivo de un grupo de trabajo
cuyos resultados no forman parte de la cartera de ningún colegio
profesional. Hablamos con Alejandro Marín, ingeniero
industrial colegiado que vivió la creación de este grupo profesional,
en 2004, siendo decano de este colegio profesional.
En primer lugar, el desarrollo y profundización
de un código ético que no sólo
promueva, sino que también garantice
el adecuado desarrollo profesional.
Y en segundo término, en el diseño e
implantación de un código de buen gobierno,
que garantice el adecuado funcionamiento
del Colegio como institución,
su buen gobierno y los resultados
de su gestión.
P.- ¿Háblenos del grupo desde la retrospectiva?
El grupo de trabajo de Ética se inauguró
en el año 2004, siendo yo Decano
de este colegio profesional. Fue una
novedad por aquel entonces, realizar
una apuesta por la transparencia sin
que fuera exigido, por las garantías que
ofrecía al ingeniero industrial colegiado,
en primer lugar, y para el conjunto de
la sociedad donde los profesionales desarrollan
sus servicios. Desde entonces,
hemos estado trabajando para profundizar
en este código, y ver la forma de
desarrollar actividades para poder darlo
a conocer, generar empatía y participación,
y comprobar y evaluar su aplicación
práctica. No queremos que con
estas medidas, tanto el colegiado como
el conjunto de la sociedad nos perciban
(al colegio) como una entidad regresora,
creada para sancionar la mala praxis.
Pretendemos y este objetivo forma parte
de nuestro trabajo, que el colegio sea
AÑO 2016