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economía
El principal reto que
deberá cumplir el
Presupuesto General de
la República para el 2017
será la atención urgente
de las necesidades básicas
de los peruanos más
pobres, especialmente, en
el tema de saneamiento,
porque mientras no se
solucionen los problemas
de agua y desagüe en
los pueblos más alejados
del país, no se podrá
disminuir los
alarmantes
índices de
anemia
infantil.
Presupuesto
inclusivo
Confirmó,
de paso, las denuncias
que durante años se le
hicieron a varios de los programas
sociales del quinquenio
pasado, como es
el caso de la entrega de
alimentos a través del
programa Qali Warma.
En efecto, el sistema
de proveedores que
se ha venido utilizanescribe:
NANCY MILLER
nancy.miller@revistavelaverde.pe
Así lo dejó en claro el congresista
de Peruanos por
el Kambio, Pedro Olaechea
Calderón, (vicepresidente
de la Comisión de Presupuesto y
Cuenta General de la República del
Parlamento), quien también calificó
de ‘aterradora’ la situación
sanitaria que se vive en algunas
zonas del país, como en Socos
(Ayacucho), donde los médicos
utilizan una motocicleta
como ambulancia.
Velaverde entrevistó a
Olaechea con el objetivo de
preguntarle cuál es el balance
de los viajes que realizó,
en el curso
de la semana
de representación
congresal, a diferentes puntos de la
sierra y selva peruana, y su respuesta
nos dejó preocupados. Megaobras
sin culminar, niños bebiendo aguas
contaminadas, pueblos enteros sin
obras de saneamiento básico y una
inclusión social que no funcionó es
el resumen de sus visitas. Una nefasta
herencia del pasado régimen humalista.
A decir del congresista Olaechea,
la falta de obras de saneamiento en
el interior del país origina, por ejemplo,
que en diversos pueblos los
niños tengan que beber agua sin
purificar, lo cual suele ocasionarles
diarreas crónicas que deviene en
una anemia generada, en muchos
casos, no tanto por la falta de una
alimentación adecuada, sino porque
los pequeños no pueden contener lo
que comen.
“Imagínese cómo va quedando
el tracto digestivo en niños con diarreas
crónicas y el riesgo en el que
están; por eso Perú tiene cifras preocupantes
de cáncer de estómago.
Si visita las zonas del Alto Putumayo
verá cómo la gente toma el agua
del río pese a estar contaminada,”
sostiene Olaechea.