Revista rem! N°2

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Hay que limpiar el disco duro. Los archivos innecesarios ocupan espacio y vuelven lento el equipo.
Por eso recomendamos eliminar los temporales, vaciar la papelera de reciclaje y quitar del sistema
los elementos que ya no se usen.
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Es conveniente ejecutar menos programas al mismo tiempo, porque al usar muchos en simultáneo,
aumenta el uso de la memoria y disminuye la velocidad del equipo.
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Reiniciar la PC con regularidad es fundamental. Hay que hacerlo, al menos, una vez por semana,
especialmente si se usa con intensidad. Es una buena manera de limpiar la memoria y asegurarse
de que los procesos y servicios errantes que comenzaron a correr se cierren. En muchos casos,
reiniciar la PC puede resolver problemas de rendimiento cuando la causa exacta es difícil de
identificar.
Agregar más memoria RAM puede ser la respuesta. Windows 10, por ejemplo, puede ejecutarse
en un equipo con gigabyte (GB) de RAM, pero funciona mejor con 2 GB. Por eso, para obtener
un rendimiento óptimo se recomienda aumentar a 3 GB o más.
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Utilizar la opción Disk cleanup, que sirve para borrar y hacer espacio. Para entrar en Windows 10
hay que escribir Disk cleanup en el buscador de la barra de inicio y seguir los pasos.
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Cambiar la tarjeta gráfica según el uso que se dé al equipo. En general el tiempo promedio que
duran es entre 4 y 5 años. Pero no es lo mismo una PC familiar o de oficina que una para gamers
o para diseño y animación.
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Tener un buen antivirus. Windows Defender viene instalado en Windows 10, es gratuito y es
más que suficiente para proteger la PC. Brinda protección contra el malware y proporciona
actualizaciones de seguridad continuas y gratuitas durante todo el ciclo de vida del dispositivo.
Fuente: www.infobae.com
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