Reporte-2015

2. Programa
de Alumbrado
Público
A fines de 2014 se lanzó el “Programa de Recambio Masivo
de Luminarias de Alumbrado Público” desarrollado por
el Ministerio de Energía e implementado por la Agencia
Chilena de Eficiencia Energética.
Este programa fue incluido en la Agenda de Energía
presentada por el actual Gobierno como una de las medidas
para apoyar la gestión energética de las municipalidades,
entendiendo el aporte que puede realizar cada municipalidad
en la meta país de reducir en un 20% el consumo de energía,
y los beneficios en ahorros de gestión que significan este
tipo de iniciativas, así como las mejoras en luminosidad,
finalmente, calidad de vida de quienes viven en cada comuna.
I
II
III
IV
Eficacia luminosa
Se exigen luminarias con valores de eficacia luminosa
superiores a 80 lúmenes por watts.
Uniformidad lumínica
Se requieren valores mínimos para la uniformidad
lumínica del proyecto que debe ser superior a 0,30,
lo que se traduce en una iluminación uniforme en
las calles, permitiendo una mejor visibilidad de los
usuarios y evitando que queden espacios oscuros
entre cada luminaria.
Cono lumínico
La orientación de la iluminación entregada por las nuevas
luminarias contempla un mejor aprovechamiento de la luz,
direccionándola a las superficies que se desean iluminar.
Niveles de iluminación
Se proyectan adecuados niveles de iluminación,
teniendo en consideración el uso al cual se destina
cada calle, lo que permite disminuir la sensación de
inseguridad y evitar la ocurrencia de delitos.
En este contexto, el programa que partió su ejecución
durante el primer semestre de 2015, permitirá reemplazar
200.000 luminarias a lo largo de todo el país, en un período
de cuatro años, recambiando luminarias con tecnología
menos eficiente por otras de mayor eficiencia.
Este programa introduce el concepto de “proyecto de
iluminación”, que implica incorporar variables como:
30 | Agencia Chilena de Eficiencia Energética
V
VI
Tecnologías más eficientes
La incorporación de nuevas tecnologías, permite
garantizar una mayor vida útil de las luminarias,
conservando su rendimiento lumínico, y reduciendo
los gastos en mantenimiento.
Reducción de consumo
Se requiere una potencia proyectada de al menos 20%
inferior a la potencia actualmente instalada, lo que implica
ahorros aproximados de al menos un 20% de los gastos
asociados a la factura eléctrica del parque de alumbrado
público. Sumado a lo anterior, los costos asociados a la
mantención y mantenimiento de las nuevas luminarias
son inferiores a los costos actualmente asumidos por las
municipalidades, lo que representa un ahorro significativo
para los municipios, que podrán destinar estos recursos a
otras prioridades.