REVISTA LITERARIA 2017 - COLEGIO VALLES

LA LUNA Y LAS ESTRELLAS
Antes de que el mundo estuviera repleto de personas, incluso de la maldad. Solo existían Lun y
estrella. Lun era un chico dulce y le encantaba que todos los animales estuvieran felices, pero a
Estrella le preocupaba que la luz desapareciera y que toda la esperanza, alegría y sueños se
desaparecieran. Lun y Estrella pasaban todo el día llevando animales a los lugares a donde no había.
La luz nunca desaparecía así que no dormían, pero un día llegaron a una jungla, era diferente a todas
las demás, era oscura, se oían sonidos de animales, pero ellos no sabían que animales podían ser, así
que empezaron a sentir algo que jamás habían sentido “temor”.
Llenos de temor empezaron a correr sin saber a dónde iban, hasta que llegaron a una cueva, entraron
y observaron una luz roja. En su desesperación por volver a ver la luz se acercaron a esa extraña luz
roja, hasta que vieron que provenía de una roca. Estrella, como era precavida, le dijo a Lun que no la
tocara sino que se mantuviera alejado hasta que salieran de regreso a su hogar. Estrella, confiando en
que Lun le obedecería, salió a buscar un camino para escapar de esa terrorífica jungla y, para no
perderse, agarró unas piedrecitas que fue dejando por donde pasaba. Mientras tanto, Lun sentía el
impulso de tocar es curiosa luz que emanaba de la roca y como era muy curioso se fue acercando
poco a poco. Estrella sintió la corazonada de que Lun tocaría esa roca, así que se regresó. Cuando
volvió al lugar donde había dejado a Lun se dio cuenta de que Lun tenía su mano sobre roca, Estrella
grito “Lun, apártate de la roca”, sin embargo, Lun sentía en él una luz, pero la luz de la maldad.
Estrella no sabía qué hacer, entonces tomó un pedazo de madera que estaba cerca de ella y empezó
a golpear aquella roca y esta se rompió.
Lun, lleno de ira por lo que había hecho Estrella, empezó a gritar “¡¿Qué has hecho, qué has hecho?!”
y comenzó a elevarse hasta que llegó a cielo. De él empezó a salir esa extraña luz roja y esta comenzó
a cubrir toda la tierra. Estrella, que seguía en la cueva, observó que entre los escombros de la roca,
había una luz amarilla, así que la tocó y en ella empezó crecer esa luz, la luz de todo aquello que era
bueno, así que se elevó hasta que llegó al cielo, estando a la par de Lun le gritó “ Lun para, esto es
malo”, pero Lun se había convertido en la maldad y no le hizo caso.
Estrella sabía qué tenía que hacer, pero le dolía porque tenía que destruir a Lun, así que ideó otro
plan: con su poder de luz amarilla tiró un rayo hacia Lun y este salió volando hasta que llegó al
espacio. Lun no podía respirar porque no había maldad, en eso llegó estrella y con su poder convirtió
a Lun en luz blanca, pero la Tierra estaba llena de luz roja, sin embargo, Estrella y Lun sabían qué
tenían que hacer. Se tomaron de las manos y tocaron al planeta Tierra, entonces una roca gigantesca
se acercó a Lun, él la lleno de luz blanca y Estrella la llenó con luz amarilla. Todos los pedazos de roca
que flotaban en el universo empezaron a atraer la luz roja y cuando esta llegó al espacio, desapareció,
pero había dejado luz negra que solo aparecía por cierto tiempo. Cuando los humanos empezaron a
poblar la Tierra nombraron como “noche” a la luz negra que llenaba el cielo. Los animales les
hablaron a los humanos sobre Lun y Estrella pero como los humanos no le entendían muy bien a los
animales, le pidieron a aquella piedra llena de luz blanca y las piedrecitas con luz amarilla que
alumbran el cielo cuando la luz negra lo cubriera. Lun y estrella aceptaron. Desde entonces, los
humanos llamaron a la luz blanca “Luna” y a las luces amarillas “Estrellas”.
Esther Alvarado