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PERIÓDICO ESCOLAR DEL CEIP SAN LORENZO<br />
Finalmente, y después de este breve recorrido histórico, debemos decir<br />
que en el 2018, La Cuesta de la Traición, y su halo romántico y misterioso,<br />
perteneció durante un par de horas a un valeroso grupo de niños y niñas<br />
de 8/9 años del colegio San Lorenzo.<br />
alternábamos ratos de llaneo con<br />
pequeñas bajadas. A las 13:30 y<br />
antes de llegar a las Ermitas,<br />
paramos de nuevo para tomarnos<br />
el “bocata grande”. Lo más difícil<br />
estaba hecho, pero el sol...<br />
apretaba.<br />
Coronamos la subida alrededor<br />
de las 11:30h, momento ideal<br />
para tomarnos un tentempié y<br />
jugar un rato en la explanada del<br />
paraje conocido como el Lagar de<br />
la Cruz, cerca también de las<br />
piscinas de Assuan. Después de<br />
una hora y con las “pilas<br />
recargadas”, continuábamos<br />
nuestro recorrido serrano en<br />
dirección a las Ermitas. Desde<br />
aquí el camino se hacía más<br />
llevadero ya que ahora,<br />
Página 16. LEEMOS<br />
Tras breve visita al exterior<br />
de las Ermitas (el edificio estaba<br />
cerrado), y después de haber<br />
disfrutado de las espectaculares<br />
vistas de la ciudad y la campiña<br />
que ese lugar nos ofrece,<br />
iniciamos la bajada por la<br />
conocida como -Cuesta del<br />
Reventón-. Este sendero por su<br />
parte, debe su nombre según la<br />
tradición, a una visita de Alfonso<br />
XIII a la ciudad, durante la cual su<br />
caballo reventó del esfuerzo que<br />
tuvo que hacer para subir por este<br />
empinado camino. Verdad o no, lo<br />
que sí es cierto es que son pocos<br />
los cordobeses que no conocen<br />
este acceso a la sierra; tal es así,<br />
y tan vinculada está la cuesta a la<br />
idiosincrasia de la ciudad, que<br />
incluso el músico y compositor<br />
Ramón Medina le dedicó un<br />
villancico popular. ...“La Cuesta<br />
del Reventón la suben cantando<br />
para hacer picón...”.<br />
A las 16:20 h, como estaba previsto,<br />
finalizábamos la bajada y el autobús nos<br />
recogía en la Carretera de las Ermitas,<br />
donde acaba la Sierra y comienza la Ciudad.<br />
Para muchos de los niños fue su<br />
primer senderismo medianamente exigente,<br />
y la verdad es que la prueba la pasaron con<br />
nota.