Cuentos BECAS

El mismo día que le informaron que había perdido los exámenes de la universidad pública, recibió una llamada que
cambiaría el rumbo de su vida, había obtenido la beca y estudiaría administración de empresas en Arkansas, Estados
Unidos.
Alma siempre llevó impregnado en su corazón sus
raíces, su Quetzaltenango querido y su familia.
Mientras estudiaba en Estados Unidos, aprendió
a dominar el idioma y a descubrir nuevos mundos.
Le maravillaba tener compañeros de todas partes
del mundo, de diferentes culturas y etnias. Amaba
compartir en las noches culturales donde podía
escuchar la música, degustar platillos y convivir con
jóvenes de los cinco continentes.
Antes de irse, sus hermanas y madre le habían comprado una valija para su
ropa y habían ido a la iglesia para encomendarla. Tomó un bus con su familia
y pisó por primera vez el aeropuerto. En ese momento tuvo un presentimiento,
sabía que sería la primera vez de muchas veces que viajaría en avión. Antes de
irse, su madre la bendijo y le dijo palabras que nunca olvidaría:
—Lucha por tus sueños hija mía y nunca te olvides de tu tierra y tu
hogar—
La beca le permitió vivir con una familia en Arkansas que la acogió como hija propia. Al llegar de la universidad, le
compartía a su madre adoptiva cómo le había ido y qué cosas nuevas había aprendido. El día de acción de gracias
ayudó a hacer el pavo y brindó agradeciendo los regalos de la vida. Para navidad, pudo tener una conversación en
internet con su familia en Guatemala y saludarlos. Alma sentía vibrar su corazón pues estaba en el camino para
lograr sus sueños.
La maravilla del éxito ✶ Alma Teresa Cojom Leiva
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