La Vida en México Etapa 1

Etapa 1. Las Ciencias Sociales en México 17
A inicios del siglo xxi volvimos a tener un proceso similar. Por varios
años se creía que todo estaba perfecto, que crecimiento e inversión eran
maravillosos, hasta que se dieron cuenta de que no había sustento para
ello. La crisis ocurrió en 2008, y ahora la conocemos como la Gran Recesión,
para diferenciarla de la de 1929. Aunque no hubo una caída económica
de la misma magnitud que en 1929, sí ha tenido repercusiones
serias. Entre ellas, el triunfo de políticos populistas, como Donald Trump,
o como el Brexit. Estamos viviendo justo ese proceso y no está claro hasta
dónde llegará.
Aunque los ciclos económicos sean naturales, la falta de atención en
algunos casos provoca crisis de tal magnitud, que todo cambia.
La decisión entre consumo e inversión al interior de un país es muy importante.
Mientras más se destine a la inversión, mayor puede ser el crecimiento
económico en el futuro, pero menor es el bienestar en el presente.
Por eso no es fácil invertir, porque implica dejar de consumir hoy. Muchas
personas creen que se pueden hacer las dos cosas al mismo tiempo, pero
eso es lo que hemos platicado desde el inicio de la sección: la escasez es la
clave. Si se pudiera todo al mismo tiempo, no necesitaríamos economistas.
Países como Alemania, Japón, Corea del Sur, o incluso China, han logrado
altas tasas de crecimiento por muchos años seguidos debido a que
han mantenido una tasa de inversión alta, con un consumo bajo. Convencer
a la población de que deje de consumir no es sencillo. Alemania y
Japón, después de TD&IS la Segunda Training Guerra Distribution Mundial, pudieron and Integrated hacerlo porque Services
habían sido derrotados, y la población lo entendía como un sacrificio para
rehacer su país. Corea del Sur y China lo lograron porque eran países autoritarios
cuando redujeron el consumo de la población, que no pudo ni
quejarse. Pero en países democráticos eso es imposible.
En América Latina, específicamente, el consumo es sumamente alto
en proporción de lo que se produce. Normalmente estamos entre 60 y
70% del PIB en consumo, que es una cifra altísima, que obliga a que la
inversión sea baja. Y por eso mismo el crecimiento económico no puede
elevarse, porque no hay inversión para ello. Es normal que las personas se
quejen de que no crecemos, pero no consideran que, mayor crecimiento
futuro, implica un menor consumo en el presente. Dicho de otra forma,
habría que ahorrar más para poder crecer, en lugar de consumir.
Y ya que hablamos de ahorro, vale la pena dedicarle unos momentos.
Ahorrar significa dejar de consumir hoy para consumir en el futuro. Cuando
existe un mercado financiero eficiente, lo que hoy se ahorra puede producir
una ganancia, mejor conocida como interés. El dinero que hoy no
utilizamos, podemos prestarlo a otras personas que sí lo quieren utilizar:
a cambio, les vamos a pedir que nos paguen una tasa de interés, que compense
lo que dejamos de consumir hoy. La tasa de interés, como todos los
demás precios, es resultado del número de personas que hoy prestan contra
las que piden prestado. Si muchas personas prestan, abunda el dinero
en el presente, así que se hace barato: la tasa de interés baja. Si muchas
personas piden prestado, el dinero del presente se agota, así que se hace