MAGAZÍN DOMINICAL # 577 MAY 22 1994
En marzo 20 de 1983, se lanzó el ejemplar “Magazín Dominical” número uno en papel periódico, con el mismo nombre del suplemento. Los lectores de El Espectador fueron sorprendidos por el cambio de formato del Magazín Dominical. La modificación llegó acompañada de una pequeña nota editorial titulada: Los tiempos cambian. En ella se anunció que un concienzudo estudio sobre los hábitos de lectura mostraba que el interés por los temas culturales estaba intacto, pero existía una resistencia en el lenguaje tradicional. A tono con el auge de los medios electrónicos, El Espectador introdujo un cambio generacional inevitable. En este formato la revista circuló hasta el ejemplar número 843 de julio 11 de 1999 y luego volvieron al formato del suplemento tabloide, con la numeración que traía la revista, el cual no duró mucho tiempo, (sólo 32 ediciones en este tamaño). El suplemento se titulaba EL ESPECTADOR MAGAZIN, dirigido por Fernando Garavito, desde el # 848 (agosto 15 de 1999) hasta el # 876 (febrero 27 de 2000).
En marzo 20 de 1983, se lanzó el ejemplar “Magazín Dominical” número uno en papel periódico, con el mismo nombre del suplemento. Los lectores de El Espectador fueron sorprendidos por el cambio de formato del Magazín Dominical. La modificación llegó acompañada de una pequeña nota editorial titulada: Los tiempos cambian. En ella se anunció que un concienzudo estudio sobre los hábitos de lectura mostraba que el interés por los temas culturales estaba intacto, pero existía una resistencia en el lenguaje tradicional. A tono con el auge de los medios electrónicos, El Espectador introdujo un cambio generacional inevitable. En este formato la revista circuló hasta el ejemplar número 843 de julio 11 de 1999 y luego volvieron al formato del suplemento tabloide, con la numeración que traía la revista, el cual no duró mucho tiempo, (sólo 32 ediciones en este tamaño). El suplemento se titulaba EL ESPECTADOR MAGAZIN, dirigido por Fernando Garavito, desde el # 848 (agosto 15 de 1999) hasta el # 876 (febrero 27 de 2000).
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edicionescamaleón@gmail.com
POR LOS TALLERES
Femando Dramas
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pero es lo único
que sé hacer"
ARMANDO Por RODRIGUEZ B.
Se deja abordar
en plena
actividad,
pero mostrándose
decidido
a no
dialogar sobre
su obra:
prefiere, más
bien, que por
boca del pintor
hable sin
tapujos el
hombre contemporáneo.
De mediana
estatura, delgado, con barba blanca y
ojos vivaces, exhibe un refinado sentido
del humor con que acompaña su
agudeza de libre pensador. Es sabido
que quien no se sintoniza desde un
principio con el tono de su conversación,
duda en más de una ocasión
sobre cuándo Fernando Oramas está
hablando en serio.
Nacido en Bogotá en 1925, durante
su proceso de formación pictórica residió
en Centroamérica y México. Alli
conoció personalmente a los grandes
muralístas, de quienes, además de
las técnicas que involucran nuevos
materiales industriales en la plástica,
le quedó la predilección por los formatos
enormes y los muros. Sobre esas
bases desarrolló un estilo personal
definido en la gran variedad viveza
del color aplicado con pincel y espátula.
Puede decirse que es un muralista
que accede a pintar en formatos
de pliego; Luis Vidales lo definía como
el colorista por excelencia; Marta Traba
lo ponía dentro del cajón. Pero en
esta ocasión, el artista no dio oportunidad
de inquirir sobre aquello.
El taller es amplio y hace parte de una
casa con jardín cuyas ventanas se
abren ante el paisaje del parque Montes.
en Bogotá. En el diálogo informal
queda plasmado un desenfado natural
con que Fernando Oramas aborda
temas, ejecutando juegos verbales con
los que, en broma y en serio, pone en
entredicho más de una verdad.
lismo -¿Ha producido soviético el alguna derrumbe sensación del socia de
frustractori en un artista que ha
como manifestado usted? abiertamente socialista
-En realidad no fueron las ideas socialistas
las que se derrumbaron. Lo
que cayó con estrépito fue el aparato
que se había dedicado a mantener un
orden de cosas donde existían privilegios
soterrados y se alimentaba una
gigantesca e inoperante burocracia.
Aquello sucedió, entre otras razones,
porque no se interpretaron y pusieron
en práctica acertadamente ideas
socialistas fundamentales. De otro
lado, durante la guerra fría, el capitalismo
hizo todo lo posible para deslumbrar
a la opinión soviética con la
bisutería de la sociedad de consumo
y con el oropel del sueño americano.
Hoy en día esa misma opinión está
desinflada de toda aquella propaganda.
Y aunque la prensa muestre cómo
derrumban las estatuas de Lenin y
descuelgan sus retratos, no ocurre
igual con las ideas. El pensamiento
socialista no se mata clausurando la
Tumba de Lenín. Esas ideas viven
porque guardan una concepción humanista.
-Se dice que usted es un radical anticlerical.
¿Cuál es la verdad al respec
to?
-Acepto una religiosidad natural sustentada
en el asombro del hombre
MAGAZIN DOMINICAi. 12
ante las leyes y secretos del universo.
También es comprensible que, dentro
de las diversas interpretaciones que
dan las gentes sobre el origen del
mundo y del hombre, abunde la imaginería.
Lo que es inaceptable es el
trasfondo de algunas doctrinas que
introducen en sus fantasías cosmogónicas
la sombra de la culpa para
someter la libertad natural del hombre.
Repruebo las ideologías pesimistas
cifradas en el arraigo de la idea del
pecado en la psiquis para matar la
inocencia. Condeno las que toman
como símbolo el instrumento de tortura:
un logotipo del que escurre la
sangre. Y es textualmente un logotipo
porque es el único logo del que cuelga
torturado un tipo. El Pontífice sale
por el mundo en su papamóvil a ven- ·
der los conceptos del pecado y la
culpa. Es capaz de ofrecer ese pro;
dueto en quince o veinte idiomas.
Algunos compran ... otros no.
-En
cerca sujuventud los planteamientos usted conoció y obras muy de de
notables nos y mexicanos: intelectuales Vasconcelos, centroamerica
Siqueaos, Silvestre Revueltas, Carlos Mirón,
Chávez, entre otros. ¿Qué le quedó de