Indice Revista de Marina #744

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REVISTA
DE
MARINA
PUBLICACION BIMESTRAL
DE LA AR1\I\ADA DE CHILE
ISSN - 0034 85 11
f- LJ!'; I );\1)1\ El 1 DF JUL 10 l)E 188',
Nº 6 NOVIEMBRE · DICIE MBRE 1981 VOLUMEN 98 Nº 745
AÑO XCVII

La Revista de Ma rina acoge con amplio criterio
las colaboraciones que r~cibe y publica,
pero ello no implica que comparte los conceptos
e ideas contenidos en ellas. Los artículos
que aparecen en sus páginas representan
exclusivamente el pensamiento de sus autores
y, por lo tanto, no comprometen en forma
alguna a la Armada.
La Revista de Marina publica solamente artículos
originales e inéditos. Desea recibir el máximo
de colaboraciones, correspondientes al
campo de las disciplinas básicas de la conducción
naval (Estrategia, Táctica, Logística,
Planeamiento) y del progreso científico -
técnico ligado a lo anterior. Igualmente, temas
relativos al contexto poi ítico, geopolítico,
jurídico, histórico, económico y social en que
se insertan los intereses marítimos y el correspondiente
rol del Poder Naval.
Todo artículo publicado recibi rá una remuneración
de estímulo. La Revista de Marina
retiene por el lapso de un año los artículos
remitidos que no hayan sido publicados.
Los artículos publicados en la Revista de Marina
pueden ser citados o reproducidos total o
parcialmente, debiendo señalarse convenientemente
el nombre del autor y de esta Revista.
Los colaboradores de la Revista se ceñirán a
igual predicamento al utilizar citas de otros
autores, y, en todo caso, deberán señalar la
fuente, directa o indirecta, de sus trabajos.
SUBSCRIPCIONES 1982
SUBSCRIPCIONES CONTINUAS
Personal Armada Servicio Activo
(Descuentos por D.A.C.A.)
Personal en Retiro
(Descuentos por CAPREDENA)
$ 140,00 mensual
$ 150,00 mensual
(L as subscripciones voluntarias se mantienen indefinidamente, salvo
expresa comunicación del suJscriptor, en contrario)
SUBSCRIPCIONES DIRECTAS
En Chile
En el extranjero
$
us $
1.800,00 anual
55,00 anual
(Las subscripciones directas son por año calendario y, por lo tanto,
deben renovarse a principios de cada año; subscripciones posteriores a
esta época cancelan un valor proporcional al período anual restante)
NUMEROSATRASADOS
(Si hay disponibilidad)
INDICE 1960 - 1980
$ 360,00 cada uno
$ 200,00 cada uno

CO NSEJO CONSULTI VO
PRESIDENTE
Ca pitán de Nav 10 Sr. l< cnnc th W PUGH G1llrnmc
VOCALES
V1cealrn1 ran tc Sr Horac10 JUST IN IANO Au u1r1·e
Cap1 tá11 ele Nav10 S1·. Pat1ic10 VI LLALOBOS Lo bos
Ca pi tán de F1·aga ta S1· EutJen 10 GUZMA N Ama clo
Cap itán de Frag ata Sr Galo BARROS Um :1a
Capitán de Fragata S1· J aime DONOSO D1o~¡h ett 1
D IR EC:CION
DIRECTOR
Capitá n de Nav 10 IM. Sr. Claucl10 CO LLADOS ~L1ñez
SUBDIRECTOR
Car:i1 tán el e F1·agata S1· Carl os PEF~EY Opazo
PEDRO LEON GALLO, YAVAR Y VILLASECA
CORREO NAVAL - TELEFONO 59645
VALP A RAISO - CHILE

"CARTAS AL DIRECTOR"
La Revista de Marina desea incentivar el envío de comentarios a los artículos
pub licados , para lo cual mantiene una sección "Cartas al Di rector" . En ella se
publica una selección de aque ll as consideraciones qu e, por claras, sintéticas y
decididamente acordes o discrepantes con el autor, mejor sirven pa ra ilustrar
ampli amente a todos los lectores. Como estímu lo a lo anterior se so1·tea una
subscripción anua l entre todas las cartas publicadas en cada número.
Estas comunicaciones deben diri girse a Rev ista de Marina - Correo Naval -
Valparaíso, con la debida in div idual ización.
* * *
Mi estimado Director de la Revista de Marina y amigo:
Es con sumo agrado que he recibido su amable comunicación del 15 de
septiembre último, con la que me env/a un ejemplar del Nº 4 de la revista de su dirección, en
la que aparece un comentario del profesor Enrique Pascal acerca de mi obra Los Tratados de
Límites con Argentina en la Historia de las Fronteras de Chile.
No puedo dejar de expresarle mi reconocimiento por la distinción de
que he sido objeto al comentarse mi libro en una publicación de la Armada de Chile, baluarte
de nuestra soberan/a en el mar.
El art/cu/o del profesor Enrique Pascal tiene para m/ una extraordinaria
importancia, porque junto con ser él una autoridad reconocida en la materia goza de un muy
sólido prestigio en la vida nacional.
La verdad es qúe sus elogios de carácter personal me han confundido,
pero veo en ellos la mano sabia estimulando a proseguir. Bien sab/a yo que la empresa que
acomet/a era una aventura; de ah/ que sus palabras tengan especial significación para el autor.
Su extensa y elevada cr/tica, con juicios certeros que mucho valorizo,
ha reparado en los cap/tufos medulares de la obra, como el del "Beagle", el Estrecho de
Magallanes.
La razón está de su parte cuando escribo en algunos, dinamos, superficia·Jmente.
La tercera edición, que ya está en preparación, le dará satisfacción respecto a
determinados puntos por él señalados. Otros, lamentablemente, por motivos superiores,
tendrán que aguardar el juicio de la historia.
Reciba Ud. el aprecio de su afect,'simo amigo, Guillermo Lagos Carmona.
* * *

Estimado Sr. Director:
Con profunda inquiewd he /e/ria el editorial ele la última revista, el cual
deja traslucir un claro temor a la intruclucción ele la ciencia vele la tecnolog/a en nuestra pro ­
fesión, v que "surjan (en ella) verdaderos cientdico-técnicos".
Creo que si existe en la actualic/ac/ alguna profesión que requiera con
mavor urgencia la inclusión de sólidos principios cient/fico -tecnológicos, ésa es la 11ues1ra,
no sólo por el avance vertiginoso de la tccnolog ia empleada en nuestras unidades, sino también
debido a que el oficial ele marina maneja un amplio espectro ele/ conocimiento, que abarca
diversos campos del saber, vendo éstos desde los human/sticos, sociales, económicos, matemáticos
v de ciencias aplicadas hasta los más abstractos, como son los morales, éticos v filosóficos.
El oficial, antes que nada, es un conductor ele hombres v un administrador
ele recursos cuva misión principal es tomar decisiones, para lo cual debe estar preparado v
capacitado. En el mundo de hov, cada vez más complejo e interrelacionado, toda decisión
involucra una serie de problemas que, para visualizarlos en profundic/acl, es necesario anqlizar ­
los en un proceso sistemático que permita organizar la información v con ella obtener las
alternativas más propicias para escoger la mejor, ele acuerdo a una medida de efectividad establecida.
La ciencia y la tecnolog/a no limitan; muy por el contrario, ampl/an el
horizonte profesional brindándole un cúmulo de herramientas útiles que, empleadas con sentido
común y orientadas hacia el objetivo propuesto, sea éste estratégico, /ogistico, táctico o
ele cualquier otra /ne/ole, ayudan al proceso de toma de decisión y, por ende, al ejercicio
del mando.
Saluda atentamente Ud., Patricio Romero Julio, Capitán de Fragata.
* * *
De mi consideración:
En la interesante editorial dedicada a la carrera navai, en la edición Nº 4/
1981 de la revista que usted dirige, llama la atención la forma, a mi 1Uicio, ligera y en algunas
frases despectiva con que se trata, en varios párrafos, la especialización y la formación técnico -
profesional del marino, mencionando situaciones que son aplicables a cualquier nivel ele preparación
técnica.
Lo anterior es aún más c!if/cil de comprender cuando no se cumplen
toclav/a tres meses desde que nuestro Comandante en Jefe recalcara en forma especial, en
reunión de oficiales, que éste es el momento en que debemos estar mejor preparados, técnica
, y profesionalmente, para enfrentarnos a las crecientes complejidades que nos presenta el
servicio naval moderno.
Aunque no se puede negar que las mencionadas !/neas hayan siclo escritas
con las mejores intenciones, no me parece válido que en nuestra Armada Nacional se califique
de "monstru os cientt'fico-técnicos" a personas que contribuyen con tocio su esfuerzo al engrandecimiento
de la institución. Por el contrario, se deberia fomentar su interés para que puedan

entregar toda su capacidad en beneficio de una obra que, aunque muy antigua y de gloriosas
tradiciones, nunca será terminada, por cuanto su mayor wandeza consiste en la reactualización
perenne de la capacidad que un día tuvo para alcanzar esas glorias. Por ello, también,
nunca será inmoderado, como se pretende, todo esfuerzo que se haga para acrecentar la preparación
personal en todos los ámbitos que el servicio de la carrera naval nos exige, y no podemos
culpar con ligereza la acción de elevar nuestras capacidades de males que es muy posible
que existan por otros motivos.
Saluda respetuosamente a Ud., Mario l. Giacaman Ahues, Teniente 2° .
t /
)
/
r. '2',,t.
N. de la D. Publicamos con es pecial agrado la carta del .Sr. Lagos, que culmina el proceso de
comentario iniciado por el Sr. Pascal y nos muestra elocuentemente el superior
nivel de tan conceptual debate.
N. de la D. Respecto de la s cartas sobre el tema La carrera naval, es del caso hacer presente
que de una lectura reflexiva de nuestro meditado editorial no se desprende la
idea general señalada por los remitentes. Cabe citar, a modo de simple acotación, la siguiente
frase de su texto: "La capacidad profesional se ha hecho así decisiva, tanto más cuanto el
desarrollo científico y técnico crea exigencias crecientes en conocimientos y habilidades".
El texto, luego, precave contra una deformación mostruosa de esta exigencia. En ningún momento
se ha pretendido desvalorizar a la ciencia y a la tecnología en sí, pues son manifestaciones
culturales relevantes, ni mucho menos a aquellas de sus aplicaciones que, ajustadas a las
demandas institucionales, constituyen pilares fundamentales de la capacidad profesional.
N. de la D. En el sorteo correspondiente, salió favorecido con una subscripción por el año
1982 don Guillermo Lagos Carmona.

··· ~::. .'.. ~-.
CONTENIDO
Editorial: Puertos
Las Armadas y la polít ica de poder
Eugenio Guzmán Amado
La decisión estratégica
Gerald Jacob Neumann
El Pacífico Sur
Rubén Scheihing Navarro
Maremotos
Guillermo Barros González
La guerra de Vietnam
Eduardo Garci'a Dom ínguez
Hispanidad, na vegante y marinera
Mario Arnello Romo
El petróleo y su historia
Pedro Pulgar Jara
LIBROS •
NOTICIARIO
Países: México, Au;tralia, lrak, india, lsi-ael, F1·ancia, Estados
Unidos de Norteamérica, Ornan, Suecia, Indonesia, Perú,
Argentina, Chile
Miscelánea,
Pág.
685
691
703
709
721
733
745
773
783
795

NUESTRA PORTADA
"La Ola", de O. Letelier
(Perteneciente a la Galería de Arte del Club de Viña del Mar)
La excelente paleta del pintor ha sabido poner en un bien logrado primer plano, entre
las revueltas aguas de un paraje típico de nuestras costas, a una hermosa ola que empieza a
quebrarse sobre la resaca de otra anterior. Su pronunciada comba muestra una transparencia
de azulado cristal, junto a la bullente y alba espuma de su rompiente. En lontananza, un islote
rocoso marca sutilmente el horizonte, desde el que se eleva un ingrávido manto de veloces
nubes que empiezan a dejar descubierta la suave tersura del límpido azul.
Destacamos esta tela no sólo por su impresionante belleza plástica, sino porque realza a
esa vigorosa figura poética que es la ola, cuya presencia llena en gran medida el ámbito sentimental
de las gentes de mar.
Se dice que la ola que alcanza la costa, a diferencia de las que se agotan en los inmensos
espacios oceánicos, es la mensajera incansable que logra llevar a tierra la nostalgia íntima de los
que navegan. Lleva en sí el espíritu rondante de lejanos marinos, que se hace presente en la
playa vernácula con sonoridad vibrante y colorido sin par. Cuando bate gozosa las aguas
ribereñas, es el recuerdo amable del padre, hijo o amigo; si alcanza vehemente las doradas
arenas, la caricia anhelante del amor marinero que anticipa el retorno de su pecho encendido.