Listín Diario 04-02-2023
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10 cm<br />
5 cm<br />
SANTO DOMINGO, RD. SÁBADO, 4 DE FEBRERO DE 2<strong>02</strong>3<br />
7<br />
Opinión<br />
4 cm<br />
3,5 cm<br />
TRIBUNA DEL ATLÁNTICO<br />
SONDEOS<br />
Publica los sábados<br />
3 cm<br />
EDGAR LANTIGUA<br />
Publica semanal<br />
LUIS ENCARNACIÓN PIMENTEL<br />
El asesinato es<br />
el fracaso de la<br />
razón, cuando<br />
la ira, el desamor,<br />
la envidia,<br />
la ambición de dinero,<br />
de poder, nos impiden ver<br />
el valor de la vida del otro,<br />
ese al que no hemos creado,<br />
aunque haya llegado a<br />
través nuestro.<br />
M á s a u n , c u a n d o a<br />
quien se mata es a quien es<br />
o ha sido, esposa y madre.<br />
Excepto en la obra de<br />
Thomas de Quincey, Del<br />
asesinato considerado como<br />
una de las bellas artes<br />
y, en el proceder de los<br />
asesinos psicópatas, en los<br />
que el asesinato se torna<br />
en un acto en el que predomina<br />
el deleite con la ejecución,<br />
la forma o el afán<br />
de demostrar superioridad<br />
sobre policías, investigadores<br />
y, sobre la sociedad<br />
misma, en el resto de<br />
La democracia tiene<br />
sus bemoles, tiene<br />
altas y bajas. Unos<br />
destacan sus puntos<br />
fuertes, otros su<br />
fragilidad, y otros, su capacidad<br />
de resiliencia. Todos los sistemas<br />
reivindican para sí la democracia<br />
más genuina, solo que desde<br />
perspectivas conceptuales diferentes.<br />
La nuestra es una democracia<br />
capitalista. De la sociedad<br />
capitalista dice el profesor Rafael<br />
Ciprián: “La sociedad capitalista,<br />
para que funcione como<br />
debe ser o como mandan las relaciones<br />
sociales de producción,<br />
necesita que la burguesía, como<br />
clase social, tome el control del<br />
poder político (Cfr. “Burguesía y<br />
poder”, periódico “El Nacional”,<br />
Del asesinato como<br />
fracaso de la razón<br />
edición de fecha 28/01/23). La<br />
cuestión viene a cuento a propósito<br />
del conflicto entre el Colegio<br />
Médico Dominicano y las A.R.S.<br />
Es verdad que, en el caso de la<br />
Ley No.87-01, que instituye el<br />
Sistema Dominicano de Seguridad<br />
Social, muchos políticos<br />
han servido en bandeja de plata<br />
-de forma abyecta-, al sector<br />
financiero, máximo exponente<br />
de nuestra rancia burguesía, el<br />
manjar de un sistema rentable<br />
y útil solamente para éste; pues,<br />
a pesar de lo costoso que resulta<br />
para los afiliados, las migajas<br />
que dejan caer a éstos los propietarios<br />
de las A.R.S. -que son<br />
los bancos comerciales-, apenas<br />
cubren la cura de forúnculos. Y,<br />
como propietarios de las A.F.P., ni<br />
OTEANDO<br />
Publica los sábados<br />
los casos el afán de poseer,<br />
dinero, propiedades,<br />
a la persona amada, son<br />
las fuerzas impulsoras del<br />
atentado contra la vida.<br />
Poseer lo que el otro tiene,<br />
en términos materiales,<br />
en afectos, en poder,<br />
ocupan un lugar cimero<br />
en el atentado a la obra de<br />
Dios, la vida.<br />
Donde la razón se pierde<br />
más, es cuando el motivo<br />
del crimen o de la intención<br />
criminal, es el<br />
amor o el desamor, cara y<br />
cruz de una misma moneda,<br />
por ese enfermizo sentido<br />
de pertenencia del<br />
otro, que proclama, “mía o<br />
de nadie”.<br />
Con cuanta frecuencia,<br />
el detonante es una canción,<br />
una copa, un ambiente<br />
que trae recuerdos,<br />
el dilema que nos presenta<br />
Neruda en estos versos<br />
del poema 20 de su libro;<br />
Veinte poemas de amor<br />
y una canción desesperada,<br />
que dice: “De otro.<br />
Será de otro. Como antes<br />
de mis besos. Su voz,<br />
su cuerpo claro. Sus ojos<br />
infinitos”. Duda de oscuras<br />
y terribles consecuencias.<br />
En 2<strong>02</strong>2 en nuestro<br />
país hemos tenido una<br />
disminución de los casos<br />
de feminicidios, con 58<br />
muertes, frente a las 80<br />
del 2<strong>02</strong>1, seguimos estando<br />
en el grupo grande de<br />
los países con más casos<br />
por cada 100 mil habitantes<br />
en la región.<br />
Y no es un fenómeno<br />
exclusivo de países como<br />
el nuestro, se da en<br />
todas partes. Un informe<br />
de las Naciones Unidas<br />
de noviembre de 2<strong>02</strong>2 da<br />
cuenta de que 5 mujeres<br />
mueren cada hora en el<br />
mundo, por alguien de su<br />
propia familia.<br />
Donde menos casos se<br />
dan, en el Caribe; Anguila,<br />
Islas Virgenes británicas,<br />
en Europa; Mónaco, Malta,<br />
Liechtenstein, Islandia<br />
y Andorra, habrá que<br />
ver qué se come en esos<br />
lugares.<br />
Desde hace tiempo se<br />
hacen esfuerzos para parar<br />
estos hechos, desde la<br />
perspectiva punitiva, el rol<br />
de fiscales y policías, desde<br />
el comportamiento, en<br />
procura de cambiar patrones<br />
patriarcales y, en menor<br />
medida, en lograr aumento<br />
de la autoestima de<br />
las personas y el uso de la<br />
sabiduría popular, aquella<br />
que dice: “más pa’ alante<br />
vive gente”.<br />
Pero ¿qué más necesitamos<br />
aprender, para entender<br />
casos como el reciente<br />
de Luperón de un<br />
hombre que intenta matar<br />
a puñaladas a su ex<br />
mujer y madre de su hija,<br />
separados hace 10 años,<br />
ella residiendo en España<br />
y ya casada con otra persona?<br />
Que no se piense en los<br />
hijos, que se mate también<br />
a los hijos, a la madre o los<br />
hermanos de quien ya dejo<br />
de quererte, como en otros<br />
casos, es fracaso evidente<br />
de la razón, es estar en el<br />
reino de la sinrazón.<br />
¿Acaso no es el fracaso<br />
manifesto de la razón, pretender,<br />
10 años después,<br />
cuando ya esa persona ha<br />
reconstruido su vida, recuperar<br />
un amor que, ya<br />
es de otro, “como antes de<br />
mis besos”?<br />
Señor presidente, cásese con la gloria<br />
EMERSON SORIANO<br />
Para comunicarse con el autor<br />
emersonsoriano@hotmail.com<br />
se diga. Sin embargo, a pesar de<br />
las trabas que les pone ese sector<br />
a los políticos, cabe esperar que<br />
el gobierno intervenga a favor<br />
del pueblo.<br />
El momento político que vive<br />
el país favorece no una ruptura<br />
del poder político con el<br />
poder económico -eso sería<br />
delirar-, pero sí que, para el caso,<br />
el gobierno asuma la cláusula<br />
de “Estado Social” establecida<br />
en el artículo 7 de<br />
nuestra Constitución, propiciando<br />
una verdadera reforma<br />
de la indicada ley 87-01<br />
que, sin impedir ganancias a<br />
las A.R.S. y las A.F.P. -ganancias<br />
justas, claro-, amplie la<br />
oferta de los servicios y beneficios<br />
a los afiliados del sistema,<br />
honrando así el principal<br />
fundamento de nuestro Estado,<br />
que lo constituye “la dignidad<br />
humana”.<br />
La banca tiene que ceder<br />
en su afán de lucro desmedido<br />
y no obstaculizar el paso<br />
de una reforma real de la<br />
indicada ley. No vaya a ser<br />
que la ambición rompa el saco<br />
y haya que conformarse<br />
con cantar “Quisqueya” desde<br />
Miami, para remembrar<br />
años felices. Presidente Abinader,<br />
ningún plan de repostulación<br />
ni aspiración de ser<br />
reelecto tendría mejor soporte.<br />
Cásese con la gloria, someta<br />
ya ese proyecto con las<br />
modificaciones que le son<br />
imprescindibles.<br />
Milton Ray y el reto<br />
del TC (¿)<br />
El reconocimiento del Senado<br />
de la Republica a la trayectoria<br />
jurídica y grandes<br />
aportes institucionales del<br />
doctor Milton Ray Guevara,<br />
presidente fundador del Tribunal Constitucional,<br />
con experiencia como servidor<br />
público de primera línea en los tres poderes<br />
del Estado, no pudo ser más emotivo,<br />
concurrido y merecido. Lo más gradado<br />
de la sociedad dominicana, con el presidente<br />
Luis Abinader a la cabeza, dijo presente<br />
en ambiente solemne en el salón de<br />
la Asamblea Nacional, para ser testigo de<br />
la entrega de un pergamino al mérito a<br />
un dominicano ilustre, con amigos, afectos<br />
y respetos ganados en todos los sectores<br />
nacionales. Esos factores, sumados<br />
a su capacidad gerencial y un manejo<br />
equilibrado y prudente frente a temas e<br />
intereses muy complejos, le permitieron<br />
al magistrado Ray Guevara y a un pleno<br />
que le toco arrancar de cero como Alta<br />
Corte, incluso sin un local propio y funcional,<br />
salir a flote y afincarse como garante<br />
del cumplimiento y correcta aplicación<br />
de la Constitucion de la República.<br />
Lo del local, que debió ser en un lugar<br />
próximo al Congreso y a la Suprema, en<br />
el Centro de los Héroes, esta a medio talle,<br />
así como el alcanzar la cultura constitucional<br />
y de respeto por la ley deseados<br />
por el magistrado, y que esto, de una vez<br />
y por todas, se incluya como materia en<br />
escuelas y universidades. ¿Qué es lo que<br />
se espera? La misión de la cabeza del TC,<br />
y el resto del equipo inicial, está próximo<br />
a concluir, pero ya hay una impronta<br />
y buena siembra que quedan, y que debe<br />
continuar y fortalecerse en el tiempo.<br />
Calzarse las botas del magistrado Milton<br />
es un gran reto. Pero el desafío y el reto<br />
mayor al termino de su ciclo, es que el<br />
TC, con los jueces que queden y con los<br />
que lleguen, no deje caer el sitial ya ganado<br />
en la sociedad; que mantenga el equilibrio<br />
y no permita que el poder político,<br />
ni ningún intruso extra nacional, le trace<br />
pautas, le doble el brazo o desnaturalice<br />
su trabajo institucional como vigilante y<br />
garante de la Constitución, la soberanía<br />
y la dominicanidad. Que quien llegue al<br />
TC, sin importar la palanca, aplique la<br />
equidistancia, y haga causa común sólo<br />
con el deber, la responsabilidad y la institucionalidad.<br />
El TC hay que preservarlo<br />
(¿). Por cierto, ya hay varios aprestos y<br />
se filtran nombres… Se tiro al aire a Cristóbal<br />
Rodríguez, que apoyaría sociedad<br />
civil, pero un sector de poder apostaría<br />
a un juez de la Suprema o al magistrado<br />
Vargas, del propio TC, muy equilibrado y<br />
firme, en carácter y decisiones, pero cuya<br />
mayor experiencia no ha sido en la materia<br />
constitucional. A otros tres buenos<br />
constitucionalistas citados: Eduardo, Flavio<br />
y Olivo le afectaría sus servicios al gobierno<br />
de Danilo.