Revista influenSER Marzo 2024
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DÍA INTERNACIONAL DE LA<br />
F E L I C I D A D<br />
Por Ivelisse Rubin<br />
¿Sabías que el 20 de marzo se celebra el Día<br />
Internacional de la Felicidad? ¡Cierto! Según data la<br />
historia, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en su<br />
Resolución 66/281 de 2012 decretó el Día Internacional de<br />
la Felicidad como reconocimiento a la felicidad y el<br />
bienestar como aspiraciones universales de los seres<br />
humanos y la importancia de su inclusión en las políticas<br />
de gobierno. Por lo tanto, esta celebración da comienzo a<br />
partir del año 2013. (www.un.org)<br />
Del concepto felicidad podemos reflexionar y considerarla<br />
como una emoción subjetiva porque va a depender de las<br />
percepciones de cada individuo. Es decir, lo que hace feliz a<br />
una persona puede que no sea lo mismo para la otra<br />
persona. Ahora bien, ¿qué es la felicidad para ti? o ¿qué te<br />
hace sentir feliz?<br />
A lo largo de nuestras vidas nos encontramos en la búsqueda<br />
eterna de la felicidad. Pasan horas, días, semanas y hasta años<br />
esperando aquello que nos haga sentir feliz. He escuchado<br />
frases y oraciones como… seré feliz ‘cuando tenga el auto de<br />
mis sueños’, ‘cuando tenga dinero suficiente para viajar por el<br />
mundo’, ‘cuando tenga la casa de mis sueños’ o ‘cuándo me<br />
case y tenga una familia’. Cuántas veces lo hemos escuchado,<br />
¿te resulta familiar? No obstante, es necesario aclarar que, no<br />
podemos confundirnos o pensar que el tener sueños sea<br />
erróneo, ¡no! al contrario, los sueños son ese motor que te<br />
inspira, son el principio de aquella meta que visualizas y<br />
que te propones alcanzar. Sin embargo, lo que sí debemos<br />
reflexionar es, ¿cuánto tiempo tienes que esperar para ser<br />
realmente feliz? Que tal si cambiamos el mindset diciendo,<br />
“tengo mis sueños y metas, que estoy trabajando en ellas, pero<br />
vivo mi presente en el aquí y en el ahora, celebro cada paso,<br />
me amo, me valoro y disfruto los momentos que llenan mi ser<br />
y me permito ser feliz conmigo mismo”.<br />
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Entonces, ¿cómo se podría definir la felicidad? Todos pueden<br />
tener diferentes ideas y definición de aquellas cosas que les<br />
hacen sentir bien y que les producen felicidad. Sin embargo,<br />
me gustaría puntualizar en algunas frases poderosas del<br />
filósofo Aristóteles que leen: “La Felicidad depende de<br />
nosotros mismos”, “la felicidad es el significado y el propósito<br />
de vida, el fin de la existencia humana”. Si tomamos la frase<br />
‘que depende de nosotros mismos’, podemos pensar que<br />
está de nuestra parte y de la actitud que tengamos a lo largo<br />
de nuestra vida. Lo que deriva la importancia de mantenernos<br />
positivos ante los diversos escenarios que acontecen en<br />
nuestra vida, que ello no significa ignorar las cosas que<br />
suceden que no son tan positivas, sino que nos hace<br />
reflexionar de que a pesar de cada circunstancia podemos<br />
buscar la manera de verla positivamente, porque de ella nace<br />
la experiencia que nos lleva al aprendizaje. Por lo que<br />
debemos darnos el permiso de ser humanos, según Ben-<br />
Shahar, experto en psicología positiva.<br />
Al mencionar psicología positiva es importante traer a la<br />
atención al Dr. Martín Seligman, psicólogo y precursor de la<br />
psicología positiva, que plantea que existen tres elementos<br />
para experimentar una vida plena:<br />
(saludablementepsicologia.es, - Seligman, 2002)<br />
La vida placentera que consiste en aumentar las emociones<br />
positivas en el pasado, en el presente y en el futuro. En el<br />
presente se enfoca en disfrutar de las cosas, ampliar los<br />
sentidos practicando la atención plena, lo que se conoce<br />
como el ‘mindfulness’. En el pasado focalizando en cultivar la<br />
gratitud y perdón, y proyectando en el futuro con esperanza y<br />
optimismo.<br />
La vida comprometida que se relaciona en poner en práctica<br />
nuestras fortalezas personales y compromiso. Disfrutar lo que<br />
se hace hasta lograr lo que se conoce como ‘flow’, que es<br />
cuando realizamos una actividad favorita que nos motiva y<br />
hasta el tiempo se nos pasa porque lo disfrutamos.