Chava : grave, pero estable - Diario Imagen On Line

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Tan pronto como el gobierno
de México supo que el ex
presidente de Honduras,
Manuel Zelaya, abandonó
la embajada de Brasil en
su país, de inmediato emitió
un comunicado para aclarar
que no ha recibido ninguna
solicitud del ex mandatario
para residir en México.
Y es que el pasado 23
de del mes en curso,
el depuesto presidente
hondureño había expresado
su deseo de establecer
su residencia temporal
en nuestro país, según
el político izquierdista
César Ham.
Ante esta situación, la Secretaría de Relaciones Exteriores
se apresuró a señalar que hasta el momento
no se ha presentado una solicitud de salvoconducto
para que el ex mandatario venga a México, y aclaró
que no se ha tenido petición de nuestro país hacia
Honduras ni del ex mandatario al gobierno del presidente
Felipe Calderón.
Se sabe que Zelaya viajó el 27 de este mes a República
Dominicana gracias a un salvoconducto que
prometió firmar, tras su investidura ese mismo día,
el presidente electo, Porfirio Lobo.
En Dominicana permanecería un par de semanas
y luego se irá a vivir una temporada a México. Se ha
dicho que Zelaya pretende incorporarse al Parlamento
Centroamericano (Parlacen), pero hasta el momento
no ha sido confirmada esa versión.
En nuestro país la sola mención de que Zelaya pudiera
establecerse aquí, fue tomada con reserva por
la clase política que considera que bastantes problemas
tenemos como para meternos en otro.
La Unión Cívica Democrática (UCD) de Honduras,
que aglutina a diversas organizaciones, advirtió
que Lobo carece de atribuciones para emitir un salvoconducto
de ese tipo. En un comunicado, se quejó
de que el pacto logrado hace unos días en Dominicana
“no llena los requisitos necesarios para ser un acuerdo
entre gobiernos, por no haber seguido los procedimientos
legales y formales establecidos”.
Lobo enfrenta un panorama difícil, tanto por la
crisis interna que se desató con el golpe que expulsó
a Zelaya el 28 de junio como por el escenario internacional,
incluyendo el creciente poder del narco
Óscar Álvarez, futuro ministro de Seguridad de Honduras,
se refirió a este asunto y aseguró que la nueva
administración hondureña lanzará una guerra contra
los cárteles de la droga mexicanos y colombianos me-
SEGUNDA VUELTA
POR LUIS MUÑOZ
Zelaya, el errante
Notas periodísticas indicaron que el ex presidente hondureño Manuel Zelaya llegó la tarde del miércoles
desde Honduras a una base aérea en las afueras de la capital dominicana Santo Domingo.
diante fuerzas especiales integradas por policías y soldados.
“El narcotráfico en el país es el peor problema
de seguridad, es una situación terrible”, dijo. Por eso,
subrayó, “vamos a impulsar una guerra sin cuartel”.
La presencia de narcotraficantes en Honduras, especialmente
del poderoso cártel mexicano de Sinaloa,
que ha extendido a otras naciones sus ilícitos negocios,
disparó en los últimos años la cifra de muertes violentas
en la nación.
Lobo también se enfrenta al hecho de que muchos
países no reconocen las elecciones en las que triunfó
ni, por tanto, a su gobierno. Sin embargo, ayer expresó
su confianza en que eso cambiaría una vez que asumiera
el poder.
Notas periodísticas indicaron que el ex presidente
hondureño Manuel Zelaya llegó la tarde del miércoles
desde Honduras a una base aérea en las afueras de la
capital dominicana Santo Domingo. El avión aterrizó
en la base aérea de San Isidro a las 6:00 GMT en medio
de fuertes medidas de seguridad.
Zelaya llegó acompañado de su esposa Xiomara
Castro, sus dos hijos menores, su asesor Rasel Tomé
y del propio presidente dominicano Leonel Fernández,
quien viajó a Tegucigalpa para asistir el miércoles a
la toma de posesión del nuevo presidente de Honduras,
Porfirio Lobo.
“En nombre de mi familia quiero agradecer los
gestos de solidaridad y de gran altura de este país y
este pueblo que honra hoy a la familia de Centroamérica”,
declaró Zelaya a la prensa, asegurando que
había cumplido “129 días de estar prisionero” dentro
de su país.
Zelaya pudo salir de su país después que hace
una semana Fernández y Lobo firmaron un acuerdo
en Santo Domingo en el que éste se comprometió
a otorgarle un salvoconducto cuando asumiera
la presidencia.
De esta manera, el psado miércoles pudo salir de
su refugio en la embajada de Brasil en Tegucigalpa,
donde permanecía luego de volver sorpresivamente
al país tras ser derrocado el 28 de junio de 2009.
“Es motivo de gran honra y satisfacción poder
brindarle la más cordial bienvenida al ex presidente
Zelaya”, declaró por su parte Fernández.
“El presidente Zelaya es un símbolo de la democracia
latinoamericana”, añadió Fernández, quien aseguró
que desde su país “condenamos siempre el golpe
de Estado”.
Minutos antes Zelaya había abandonado la
embajada de Brasil en Tegucigalpa y comentó
que su idea es regresar un día, no sé cuanto tiempo
pasará, pero sí regresaré. Yo soy un hondureño
de verdad.
Mientras tanto, miles de manifestantes marcharon
hasta el aeropuerto ubicado en Tegucigalpa, capital
de Honduras, para despedir a Zelaya con banderas y
consignas de apoyo al mandatario expulsado del país
por varios jefes militares.
Las concentraciones populares fueron convocadas
por el Frente de la Resistencia contra el Golpe de Estado,
que agrupa a varias organizaciones sindicales,
campesinas, indígenas y a políticos progresistas que
desde el inicio de la crisis han mostrado su apoyo a
quien, a partir de este miércoles, pasa a ser ex presidente
de Honduras.
MÉXICO v Vierne