Todo acerca de su recién nacido - Providence - Providence Health ...

Todo acerca de su
recién nacido

Tabla de contenido
2
Introducción
Números de Tel. importantes ............3
Cuándo llamar al proveedor que
atiende a su bebé ...........................3
Cosas que va usted a necesitar ..........4
Conociendo a su bebé
Su criatura es única ............................5
Comportamiento normal del recién
nacido ..............................................5
Lloriqueo y desosiego ........................5
Duerme y duerme ..............................6
El cuidado de su bebé
Sostener, cargar, y colocar al bebé ....7
Alimentación:
Amamantamiento ...........................7
Biberón ............................................7
Eructar (repetir) ..............................8
Baños ...................................................8
Cuidado del ombligo .........................9
Cuidado del pene ...............................9
Pañales ..............................................10
Cuidado de la piel ............................11
Cuidado de las uñas .........................11
Acogiendo, envolviendo y
vistiendo al bebé ...........................11
Ojos y nariz .......................................12
Estimulación sensorial ......................12
Salir al aire libre ...............................12
NOTA:
A través del presente folleto
hemos usado el término
“proveedor” para referirnos
al profesional que estará
atendiendo y cuidando la
salud de su bebé. Según elija
usted, dicha persona puede
ser un médico que practique
medicina familiar, un pediatra
o bien, una enfermera
especialista
El cuerpo de su bebé
Pérdida de peso ................................13
La cabeza del recién nacido .............13
Ojitos bizcos o hinchados ................13
Cuero cabelludo escamoso ..............13
Infección de boca, algodoncillo ......13
Escupir saliva; el vómito ...................14
Cólico ................................................14
Los órganos genitales ......................15
Defecación ........................................15
Problemas de la piel .........................16
Vello (lanugo) ...................................16
Piecitos y manitas azules ..................16
Ictericia ..............................................16
Resfriados, tos ..................................17
Infecciones del oído .........................17
Calentura (fiebre) .............................17
La seguridad de su bebé
Viajando en auto ..............................18
Ahogamiento, prevención ...............18
Caídas, prevención ...........................18
Quemaduras, prevención .................18
Atragantamiento, prevención .........19
Reduzca el riesgo del síndrome de
muerte infantil súbita (SMIS) .......19
Fumar, tabaquismo ..........................19
Guardería de niños ...........................19
Primeros auxilios (cuadro de –):
atragantamiento ...........................20
Para que su bebé goce de salud
La elección del proveedor
para su bebé ..................................21
Pruebas selectivas metabólicas
(es decir, de la sangre) para el
recién nacido .................................21
Prueba del oído ................................21
Vacunas y medicamentos para
el recién nacido .............................21
Plan y programa de vacunas ............22

Introducción a ‘Todo acerca de su recién nacido’
Cuándo hay que llamar a su proveedor
• Cualquier momento que crea que algo no anda bien
con su bebé –nadie conoce mejor a su bebé que
usted.
• Cuando la temperatura sea menor de 97˚ ó mayor
de 100˚ F* o que sienta que el bebé tenga fiebre.
• Cuando rehúse comer después de cinco a seis horas.
• Cuando no ha mojado pañales después de 12 horas
o bien, menos de cuatro pañales en un día.
• Defeca heces oscuras después del quinto día de vida.
• Hay sangre en las heces.
• Constipación o diarrea.
• Vómito persistente (no nada más escupir o salivar):
vómito fuerte, verde, estómago hinchado.
• Síntoma de apatía, depresión o indiferencia
*.– Menor de 36˚ ó mayor de 38˚ centígrados.
¡Felicidades por el arribo de su nuevo bebé!
Es emocionante cuando llega el día de llevar a su recién nacido a casa
–y quizá también sea motivo de un poco de inquietud. Durante los
días y meses venideros se le van a ocurrir muchas preguntas. Este
librito contiene mucha información pero su preparación no se ofrece
para sustituir la atención médica profesional. Si le surge alguna
pregunta o inquietud, consulte a su proveedor.
Números de teléfono importantes:
Centros de amamantamiento
Hospital Providence Hood River Memorial 541-387-6344
Centro Médico Providence Newberg 503-537-1400
Centro Médico Providence Portland 503-215-6255
Centro Médico Providence St. Vincent 503-216-4033
Clases Providence para padres de familia 503-574-6595 ó
800-562-8964
Demás información
March of Dimes para defectos de nacimiento 503-222-9434
Contacto de Baby Blues Connection 866-616-3752
Centro de control de venenos de Oregon 800-222-1222
Proveedor pediátrico: _________________________________________
• Irritabilidad o apariencia de dolor.
• Dificultad para respirar, respiración ruidosa o
silbante.
• Cordón umbilical hinchado, enrojecido, goteante o
de mal olor.
• Ictericia (piel u ojos amarillentos).
• Tos persistente.
• Piel azulada.
• Señas de infección de oído: calentura, irritabilidad,
se jala las orejas.
• Manchas blancas en la boca (algodoncillo).
• Irritación a causa del pañal que presenta color muy
rojizo, piel abierta o con manchas blancas.
• Ojos hinchados, lagrimeo o supuración excesivos.
• Cualquier lesion o caída
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Introducción
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Cosas a necesitarse
A continuación vemos algunos artículos que ayudarán que su bebé se sienta a gusto y seguro al llegar a casa:
Silla de seguridad, aprobada para autos (para menores de 6 años de edad).
Cobijitas, frazadas (para cuna o para envolver al niño).
Cuna, Moisés o pesebre que reúna los estándares de seguridad.
Pañales –ya sea desechables o de tela. Si son de tela, también conviene tener
pantaloncitos de plástico o envoltorios de pañales.
Ropita de infante:
• Camisetas o camisetas largas con cierre en la ingle.
• Mamelucos o cobijas de brazo (en inglés: “sleepers”).
• Botitas de tela o estambre y calcetines.
• Frazadas para recibir al bebé luego del parto.
• Suéteres.
Artículos para baño:
• Toallas suaves para lavar, para secar y de capuchón.
• Jabón suave sin perfumes o loción comercial para baño.
• Cepillo para cabello de bebé.
• Tina de plástico chica o fregadero limpio.
• Termómetro para el agua de la tina.
Artículos y medicamentos para el botiquín:
• Termómetro infantil.
• Analgésico líquido sin aspirina (según lo indique el proveedor).
• Ungüento para irritación de panales.
• Succionador de bombilla para nariz (que proporciona
el hospital).
Se recomienda además (mas no como necesarios):
• Banco o mesa para cambiar pañales.
• Intercomunicador para bebés.

Conociendo a su bebé
Su criatura es única
Los infantes nacen con sus cuerpitos tan únicos…y muy pronto empiezan
a dar muestras de su propia personalidad. Es importante conocer las
características físicas de su bebé, lo que le agrada, lo que no le agrada. Goce
conociendo a su bebé; disfrute el hecho de que él o ella le está conociendo
tanto a usted como al resto de la familia. Tóquelo, sosténgalo y acurrúquelo
cuantas veces pueda. Su hijito o hijita se encantará con tanto cariño y
atención.
Comportamiento normal del recién nacido
Los bebés hacen muchos ruidos: estornudan, tosen, pasan gas, les da hipo y
de vez en cuando escupen –todo ello un comportamiento muy normal. A
menudo el recién nacido respira y hace ruido, luego lo hace entre respiración
rápida y lenta. Se asusta con facilidad; un ruido repentino de teléfono o
de sirena lo pone a llorar. Cuando así suceda, antes de levantarlo háblele y
acarícielo suavemente para que primero sienta su presencia.
El infante nace con una serie de reflejos involuntarios. Si se les toca la palma
de las manos la agarran con firmeza. Cuando se asustan, estiran todas las
extremidades y luego se acurrucan en sí mismos. Cuando se les acaricia el
labio inferior vuelven la cabeza, luego abren la boca (el instinto de mamar).
El instinto y el deseo de mamar son fuertes, quieren pecho con o sin hambre.
Casi todos estos reflejos desaparecen pocos meses después del nacimiento.
Lloriqueo y desosiego
El llanto es la única forma de comunicación que tienen los recién nacidos.
La mayoría de los bebés lloran de dos a tres horas diarias y algunos hasta
más. Nunca sería un error levantar al niño para consolarlo pero cuando llore,
busque la causa del desosiego, como por ejemplo:
• Hambre.
• Pañal sucio.
• Sarpullido por pañal.
• Gas (necesita eructar –es decir, repetir).
• Cólico.
• Necesita mamar (ofrézcale el dedo suyo o el pulgar del niño, o también un
chupón).
• Mucho calor, mucho frio.
Si ninguno de estos es el problema, trate de mecerlo, de cantarle o de tocarle
alguna musiquita relajante o de llevarlo a caminar o de paseo en el auto.
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Conociendo a su bebé
Es normal sentir fastidio cuando no logra calmar a su bebé. Una vez que
haya revisado lo que sería causa evidente de desosiego, está bien si lo pone
en su cuna y lo deja llorar mientras sale usted del cuarto por unos cuantos
minutos –sobre todo si se siente exhausta o frustrada. Si necesita un poco
más de descanso, pídale a alguien que le ayude a cuidar al niño un rato o bien,
túrnese “la guardia” con su esposo o alguna otra compañía.
Si le llega a preocupar la frecuencia con la que llora el bebé, comuníquese con
su proveedor.
Duerme y duerme
Es posible que durante las primeras cuantas semanas parezca que el recién
nacido duerme constantemente y que sólo despierta cuando le da hambre.
Pero con el paso de las semanas, gradualmente, se pasara más tiempo
despierto.
Los recién nacidos no tienen hora determinada para dormir, ésta se llega a
saber a medida que crecen. Es algo natural –no es necesario que lo obligue
a ajustarse a cierto horario aunque sí ayuda que usted vaya estableciendo
una rutina para la hora de acostarse.
Alimente a su niñito(a), cántele una canción de cuna y léale la misma
historia que lo aquieta hasta dormir. Cuando le toque al bebé su hora de
comer en la noche, aliméntelo sin ruidos y con una luz tenue; así le ayudara
a distinguir mejor entre el día y la noche.
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El cuidado de su bebé
Sostener, cargar y colocar al bebé
El recién nacido se encuentra relajado y feliz cuando siente que su alrededor
es seguro. Los ruidos o movimientos repentinos o la sensación de no hallarse
sostenido, todo ello puede fácilmente asustar al bebé.
Para evitar dichos sustos, háblele por un par de segundos antes de levantarlo.
Para apoyar el débil cuello y la pesada cabecita del recién nacido, coloque la
palma de su mano por debajo del cuello y de la espalda del bebé. Forme una
concha con los dedos para cargar ahí la cabeza. Soporte el cuerpo con su
antebrazo –el cual debe estar firmemente junto al cuerpo suyo. O también,
puede llevar seguro a su bebé recargándolo contra el hombro mientras le sujeta
la cabeza con la mano. Así le queda una mano libre para abrir o cerrar puertas,
para agarrarse del pasamano, etc.
Coloque siempre al niño de espalda, no sobre el estomaguito. Este método ha
permitido disminuir el número de incidentes conocidos como “síndrome de
muerte infantil súbita” o SMIS (en inglés es ‘Sudden Infant Death Syndrome’
o bien, “SIDS”).
Alimentación
La hora de la alimentación es importante tanto para usted como para su hijito
o hijita. Es una de las experiencias más gratas para el recién nacido y ofrece la
oportunidad de hacer más intima la querencia entre ambos.
Amamantamiento
Véase el folleto sobre amamantamiento de la Academia Americana de Pediatría,
mismo que se le entregó junto con su paquete de servicios de maternidad al
dársele de alta.
Biberón
Si le va a dar de comer con biberón, consulte con su proveedor sobre las
alternativas de formula comercial. Estas formulas vienen ya listas para servir
en líquido o en polvo que se mezcla con agua. Siga cuidadosamente las
instrucciones del paquete.
No es necesario calentar la formula –aunque tal vez así la prefiera su bebé. Para
calentar la botella, colóquela en una olla de agua sobre la estufa. Jamás ponga
la botella en el microondas porque el calentamiento puede ser disparejo y quizá
queme la boca de la criatura. Deseche siempre cualquier sobrante de fórmula
que haya quedado al terminar de comer. Nunca vuelva a usar la formula que
haya sobrado.
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El cuidado de su bebé
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Al igual que con la lactancia (o sea el amamantamiento), lo mejor es tener un
horario flexible en base a las necesidades de su bebito. Pasados los primeros
días –cuando la mayoría de los bebés comen muy poquito– el recién nacido
usualmente toman de dos a tres onzas de fórmula cada tres a cuatro horas.
Lave las botellas, chupones y todo artículo que se utilice para preparar fórmula
en agua jabonosa y caliente. Revise el chupón y asegúrese que el flujo no sea
demasiado lento ni muy rápido. Mantenga el chupón lleno de fórmula cuando
el bebé la esté tomando.
Jamás fije el biberón en lugar alguno para que de ahí coma el bebé; no lo deje
nunca en la cuna con su botella. Es arriesgado; además, el niño necesita de la
seguridad y la alegría de estar en brazos a la hora de comer.
Eructar (repetir)
Después de que haya comido, siempre haga que el bebé eructe para ayudarle a
sacar el aire que haya tragado. Sostenga al infante en vertical sobre el hombro
o boca abajo sobre el regazo. Sóbele o golpee la espaldita con suavidad. No se
alarme si acaso escupe una pequeña cantidad de comida al repetir ni se preocupe
si a veces no logra repetir nada.
Baño
La hora del baño es otra oportunidad para que pueda cargar y tratar con cariño
a su bebé, una oportunidad de conocerlo mejor. No obstante, unas cuantas
palabras de precaución:
• JAMÁS deje a su bebé desatendido en o cerca del baño, ni siquiera por unos
cuantos segundos.
• Baje la temperatura del calentador del agua a 120˚ Fahrenheit (ó sean 48˚
Centígrados) para no escaldar / quemar accidentalmente al infante.
• Junte todo lo necesario antes de empezar el baño; así no tendrá que andar
cargando con el niño mojado buscando cosas.
El recién nacido no requiere de baño diario; basta un baño cada tercer o cuarto
día. Al bañarlo, cerciórese que tanto la habitación como el agua estén ni muy
fríos ni muy calientes, sino templados.
Use una pequeña tina de plástico o un fregadero recubierto con toalla o con
esponja. Vierta en la tina unos doce centímetros (unas cinco pulgadas) de agua
calientita, suficiente para cubrir los hombros del bebé.
Pruebe la temperatura del agua con el codo antes de meter al niño. Limpie
suavemente la cara del bebé sin jabón, luego lave el cuerpo con una toallita
jabonosa. Deje al último el área del pañal y luego enjuague al niño con agua
limpia.

El cuidado de su bebé
Para lavar el cabello del infante, póngale un poco de jabón suave y de agua
calientita. Incline un poco la cabecita hacia atrás para evitar que escurra jabón
a la cara o en los ojos. Eche lentamente agua sobre el cabello. Puede lavarle el
cabello ya sea a la hora del baño o cuando el niño ande vestido para qua así se
conserve calientito.
Envuelva al niño en una toalla y séquelo. Para evitar irritaciones, asegúrese de
secar entre los dobleces de la piel.
Cuidado del ombligo
Pasadas unas tres o cuatro semanas, cae el muñoncito o vástago del ombligo
del bebé. Doble el frente del pañal más abajo del ombligo para que no
cause irritación.
Cuando bañe al niño use una toalla suave para limpiar alrededor del cordón
y, según lo requiera, al cambiarle el pañal. No se requiere atención especial
para ello.
Si se ve enrojecida el área que rodea al cordón, si produce pus o si nota ahí un
fuerte o mal olor, llame a su proveedor. Al caérsele el cordón umbilical quizá
vea un poquito de sangre o de supuración que sale del ombligo. Nada serio,
no se preocupe.
Cuidado del pene
Ya sea que el pene de su niño haya sido o no circuncidado, lo mejor es no
usar alcohol, talcos, lociones o toallitas prehumedecidas ya que pueden causar
irritación en el miembro. Si su niñito no ha sido circuncidado, no es necesario
atenderle en forma especial el pene. Sencillamente lave el pene con agua tibia
y jabón. No trate de retraerle el prepucio; esto ocurre naturalmente en unos
cuantos años.
Si el bebé fue circuncidado, puede ser que la punta del miembro aparezca
inflamada, amarillenta o hinchada. Durante las primeras 24 hrs. de la
operación, el pene debe ser cubierto con vestidura de gasa con vaselina a fin de
prevenir que la gasa se pegue. Cambie la gasa cada vez que cambie de pañal.
Pasadas las primeras 24 hrs., se puede usar la vaselina sola para prevenir que el
pañal se pegue al pene.
Si se usó el método de circuncisión PlastiBell, se le dejará un anillo de plástico
sobre la punta del pene en vez de la vestidura de gasa con vaselina. La
enfermera le proporcionará a usted las indicaciones específicas para el cuidado
a seguir con el PlastiBell.
Si se le aplicó Surgicel a la circuncisión del bebé para controlar el sangrado, no
se lo quite a fuerza. El Surgicel se cae luego por sí mismo. Si se retira a fuerza,
pudiera sangrar de nuevo la zona de la circuncisión.
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El cuidado de su bebé
10
Una vez bajada la hinchazón (unas 24 hrs. después de la circuncisión), empuje
suavemente la piel del pene hacia el cuerpo del bebé y limpie el área donde la
piel se une a la cabeza del miembro. Esto evita que se formen adhesiones donde
no deben. Es importante continuar el procedimiento siete a 14 días o hasta que
el recién nacido sea atendido por su proveedor.
Es normal tener un poco de supuración o de capa amarillenta alrededor de la
cabeza del pene; algo que no dura más de una semana. En casa, limpie suavemente
el pene con pura agua hasta que sane. Generalmente toma de siete a 10
días para que el miembro sane por completo después de haber sido circuncidado.
Los problemas después de la circuncisión ocurren rara vez. No obstante, llame a
su proveedor si…
• Su bebé no orina en el transcurso de 24 hrs. pasada la circuncisión.
• Hay sangrado persistente.
• El enrojecimiento alrededor de la cabeza del pene empeora después de tres a
cinco días.
Pañales
Su recién nacido va a usar unos 70 pañales por semana. Si usa de tela, va a
necesitar también cubre pañal o pantaloncito de plástico. Siempre que sea
posible, seque al bebé al aire, sin pañal. No se recomiendan los talcos porque
pueden irritar los pulmones del bebé.
Para prevenir la irritación o rozadura causada por pañal, cámbielos con frecuencia
–siempre que estén mojados o sucios o bien, cada una o dos horas durante el
día. Limpie el área del pañal con toallitas desechables pre-mojadas o con agua
y jabón suave (el jabón puede irritar así que no lo use cada vez). A las bebitas
limpie de frente hacia atrás para prevenir infección.
A la primera seña de enrojecimiento, aplique una capa gruesa de ungüento de
tipo comercial. Algunos bebitos suelen tener infección por levadura en el área
del pañal.
Dicha infección puede aparecer como una rozadura o irritación al rojo vivo o
como una película cremosa y blanquecina. Casi siempre puede ser tratada con
crema anti-hongos. Consulte con su proveedor o con el farmacéutico.
Cuidado de la piel
A menudo se despelleja la piel de los infantes, sobre todo en los piecitos y manitas.
La mayoría de los niños no requieren de cuidado especial para ello salvo en
el área del pañal.

El cuidado de su bebé
Cuidado de las uñas
Para evitar que se rasguñe, mantenga cortas las unas de los pies y de las manos
del bebé. Use una lima de cartoncillo suave para uñas o bien, cúbrale las manitas.
Tenga cuidado: las uñitas son muy blandas y puede ser difícil distinguirlas
de la punta del dedo, ya sea de la mano o del pie. A veces es más fácil atenderle
las uñas cuando esté dormido.
Envolviendo y vistiendo al bebé
Envolver debidamente al bebito recién nacido puede hacer que él o ella se sienta
relajado y seguro. Además, así, envuelto, es más fácil levantar y cargar a un
niño. Para cobijarlo, coloque el cuerpo sobre una cobijita suave con la orilla de
arriba doblada en plano; envuélvalo firmemente –pero sin apretar.
No lo abrume con ropa. Coloque la ropita de modo que se pueda quitar o
añadir en partes, por capas mientras cambia la temperatura de la habitación o
de las afueras.
Los bebés pierden bastante de su calor corporal a través de su cabeza, la cual es
desproporcionadamente grande, pero poniéndole un gorrito en clima frío se le
ayuda a mantener su temperatura corporal normal.
Figura 1 Figura 2 Figura 3
Figura 4 Figura 5
11

El cuidado de su bebé
12
Ojos y nariz
Durante las primeras semanas es común que el niño tenga secreción de ojos.
Límpielos con una tela limpia y húmeda: empiece siempre de la esquina de
adentro hacia fuera usando cada vez un área limpia de la tela. Si la secreción es
anormal (por espesa), si tiene párpados hinchados o rojos, llame al proveedor.
Limpie suavemente la nariz y partes exteriores de la oreja con una telita limpia y
húmeda, o con un pequeño hisopo de algodón limpio. Jamás meta el hisopo o
cosa alguna en la nariz o en el oído.
Estímulo sensorial
El bebé requiere de muchas oportunidades para ver, oír y aprender. La cuna de
rejitas abiertas permite al niño ver a su alrededor. Dele bastantes cosas para que
mire, retratos, objetos movibles, animalitos de peluche o espejos no rompibles.
La criatura también se divertirá contemplando los rostros de los familiares.
Lo que el recién nacido escucha también es de mucha importancia. Cántele,
léale y háblele seguido. Toque música agradable e introduzca otros sonidos
agradables. Para estimularle el tacto, acurrúquelo, mésalo, sóbele y ejercítele su
cuerpecito.
Salir al aire libre
El aire fresco, el ejercicio y la luz del sol son buenos para usted y para su
bebé. De ser posible, salga a caminar todos los días pero cerciórese que el
bebé va protegido contra el sol y el aire. Hable con su proveedor acerca de los
bloqueadores de sol.

El cuerpo de su bebé
Pérdida de peso
A menudo, pasados unos días el recién nacido pierde entre un 7 y 10 por ciento
de su peso natal. Pero para cuando cumple dos semanas de edad y mediante
una alimentación frecuente, casi siempre recupera el peso perdido.
La cabeza del recién nacido
A raíz del procedimiento del parto, puede ser que la cabeza de su bebé tenga
forma algo rara pero en cuestión de semanas recupera su forma regular y
suave. Los bebés nacen con dos aéreas blandas en la cabeza, una arriba y otra
por detrás. Son blandas porque no se han juntado aún los huesos craneales; se
unen cuando cumpla 12 o 18 meses de edad. No hay peligro por tocar o lavar
suavemente con champú esas partes, ni por cepillarle el cabello.
Es posible que la parte posterior de la cabeza del bebé gradualmente se aplane
dado a que duerme de espalda. Es algo normal y luego vuelve a su forma más
redondeada una vez que la criatura tenga la edad suficiente de cambiar de
posición cuando duerme.
Ojos hinchados o bizcos
El proceso del nacimiento más el medicamento aplicado en los ojitos del infante
para combatir la infección de éstos a veces hace que se vean hinchados. No
obstante, mejoran en cuestión de unos días. El bebé puede aparentar ser bizco
a causa de los músculos oculares que aún no se desarrollan; a medida que se
fortalecen tales músculos los ojos adquieren su posición normal.
Cuero cabelludo escamoso
Es posible que el cuero cabelludo del niño se torne escamoso. Se pueden
quitar las escamas mediante un lavado y tallado suave del cabello con champú
para bebé y un suave cepillado cada tercer o cuarto día. Repítase hasta que
desaparezcan las escamas.
Infección de la boca (algodoncillo)
Si en la boca de su niño hay pequeñas manchas blancas, parecidas al requesón
(caseosas), probablemente se deba al ‘algodoncillo,’ una infección por levadura.
A veces es dolorosa así que llame en cuanto antes al proveedor. Si está dando de
pecho, es probable que usted también tenga que ser tratada.
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El cuerpo de su bebé
14
Escupir saliva; el vómito…
Echar saliva es muy común en los infantes y no es cosa de cuidado salvo el
caso cuando escupa una gran cantidad. El vómito de chorro o vómito verde o
amarillo no es normal. Llame al proveedor si tiene alguna inquietud al respecto.
De vez en cuando los bebés se atragantan y hasta parece que se ahogan en su
mucosidad o algún otro líquido. Si esto ocurre, use la bombilla de succión
para sacar la materia de la boca del niño(a). Para ello, coloque la punta de la
bombilla contra el cachete del bebé hacia la parte trasera de la boca. Succione la
nariz del bebito únicamente cuando se pueda ver mucosidad, o de lo contrario
le puede causar hinchazón dentro de la nariz.
Cólico
Se le llama cólico al llanto intenso y casi inconsolable del bebé que de hecho
parece estar sano y bien alimentado. El cólico afecta aproximadamente entre
un 10 a 15 por ciento de todos los bebés. Los estallidos de llanto suelen durar
de una a dos horas o aún más. Casi siempre surge entre la segunda y tercera
semana de vida y a menudo desaparece a los tres meses de edad. El llanto y
desosiego en sí de los bebés no son dañinos.
Se desconoce la causa del cólico. Normalmente no es debido a dolor abdominal
o exceso de gas. Un bebé con cólico a veces se calma meciéndolo un poco
(por ejemplo, poniéndolo en un columpio infantil o saliendo en auto o en
una carriola); teniéndolo en un sitio calientito, sosteniéndolo afectuosamente,
dándoles un chupón, un masajito o un baño tibio.
Si el bebé ya comió y se le cambió de pañal y lo ha tratado de consolar mediante
los métodos mencionados, tal vez convenga ponerlo en su cuna y dejar que llore
por unos 15 minutos.
Si el llanto persiste después de 15 minutos, levántelo y pruebe de nuevo los
métodos para consolarlo. Es probable que tome varias tandas de 15 minutos
para que se quede dormido.
Avise al proveedor del cuidado de la salud del bebé si…
• El llanto parece ser a causa de un dolor.
• El llanto dura más de tres horas.
• El cólico empieza desde que el bebé cumple un mes de edad.
• Hay diarrea, vómito o constipación.
• El bebé está inconsolable.
• Usted o la persona que cuida al bebé está exhausta o frustrada.

El cuerpo de su bebé
Los órganos genitales
Las hormonas de la madre pueden causar condiciones en el bebé que son
normales y que desaparecen sin necesidad de tratamiento. Tanto bebitas como
bebitos pueden nacer con los pezones hinchados, los cuales pueden a veces
secretar pequeñas cantidades de líquido blanco. Asimismo, tal vez los órganos
genitales estén hinchados. En el pañal mojado a veces se ve una mancha de
color naranja rojizo, como de ladrillo. Si es niño, quizá tenga hinchado el
escroto pero le vuelve a la normalidad en unos cuantos días.
Si es niñita, puede que tenga una capa blanca sobre sus genitales; es normal, no
es necesario lavarla. Asimismo, puede que tenga una secreción mucosa clara,
resultado también de las hormonas maternales. Al bañarla y cambiarle de pañal,
limpie el área vaginal abriendo cuidadosa y suavemente los labios, limpiando de
enfrente hacia atrás.
Si siguen presentes cualquiera de estas condiciones o si hay algo que le inquieta,
consulte a su proveedor.
Defecación
Durante los primeros días el bebé defeca una sustancia oscura, pegajosa
llamada ‘meconio.’ Gradualmente las heces se tornan amarillentas o verdosas,
medias cafés. Los niños que toman pecho normalmente defecan heces sueltas,
semillosas (hasta 10 veces al día); los que toman biberón casi siempre defecan
menos y con apariencia pastosa.
A medida que va creciendo el bebé sus defecaciones van siendo menos
frecuentes (incluso una vez cada varios días) lo cual es normal siempre y cuando
las heces sean blandas y el bebé no se esfuerza demasiado. Es común que los
infantes gruñan y se pongan colorados de cara al defecar.
Es raro que los bebés estén estreñidos pero sí es común en los que se alimentan
con biberón. Entre las señas de estreñimiento están: heces duras y en bolitas,
dolor abdominal.
La diarrea consiste en defecación aguada que suele ser mal oliente.
Si su bebé tiene diarrea o está estreñido, avísele al proveedor.
15

El cuerpo de su bebé
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Problemas de la piel
Las anormalidades en la piel son común en los recién nacidos. En su mayoría,
no son de cuidado, no requieren tratamiento especial y por lo general
desaparecen por sí solas. Se tienen, entre otras:
• Milia, pequeñas manchas blancas en la cara debido a glándulas tapadas de
sudor y de aceite.
• Piel ligeramente transparente y con manchitas medias moradas (más en los
bebés de piel clara).
• Manchitas “de mongol:” manchas de color verde-azul sobre la parte baja de la
espalda (más común en los infantes de piel oscura).
• Acné de bebé: irritación rojiza, con granitos.
• “Piquetes de cigüeña”: se les dice así a los vasos sanguíneos visibles por estar
muy cerca de la piel detrás del cuello, en los párpados o en la frente.
• Vernix: sustancia blanca, caseosa (como queso), que protege la piel antes de
nacer y permanece en los dobleces de la misma aún después del baño.
• Sarpullido de recién nacido: pequeñas manchas amarillentas rodeadas por
parches rojizos; es más frecuente en la cara, el torso o las extremidades;
aparecen y desaparecen en varias partes del cuerpo por varios días.
Algunos problemas de la piel que tal vez requieran mayor atención:
• Ronchas por el calor –diminutos brotes rojizos en los hombros y en el cuello–
salen cuando hace mucho calor o cuando el niño está muy caliente. Mantenga
al niño(a) calientito(a) y seco pero evite vestirlo(a) con mucha ropa.
• Cualquier otra condición cutánea no encontrada aquí y que le inquiete, llame
a su proveedor.
Vello (lanugo)
Puede ser que nazca su bebé con un vello finito y ligero que le cubre los
hombros o la espalda, la frente, orejas y cara, condición que se presenta más
seguido en los nacidos prematuramente. El lanugo desaparece a las cuantas
semanas.
Piecitos y manitas azules
Es común que el recién nacido tenga sus piecitos y manitas azules debido a una
circulación inmadura. Es una condición normal mientras el resto del cuerpo
esté calientito y de color rosa.
Ictericia
Véase la hoja de datos de la Academia Americana de Pediatría (o ‘AAP’
por sus siglas en inglés) titulada, “Tratamiento de ictericia en los recién
nacidos saludables”, hoja que viene con el paquete facilitado por Servicios de
maternidad cuando se le da de alta.

El cuerpo de su bebé
Resfriados y tos
Síntomas de un resfriado leve: nariz suelta, estornudos y congestión nasal; se le
dificulta al recién nacido respirar y comer. Para ayudarle a respirar, ponga unas
cuantas gotas de solución salina en la naricita, espere un minuto, luego use un
succionador de bombilla para sacar la mucosidad. Puede también poner un
vaporizador de agua fresca en el cuarto del bebé. Eleve la cabeza del niño con
una almohada debajo del colchón donde duerme, pero no directamente debajo
de la cabeza. Asegúrese de mantener calientito al bebé; llame al proveedor en
caso de fiebre, tos o dificultad al respirar.
La tos también puede tratarse con un vaporizador. Si la respiración del bebé se
torna pesada o difícil o si se pone azul o babea, sostenga el cuerpo en vertical y
llame de inmediato al proveedor o marque 9-1-1.
Infecciones de oído
Los oídos de los niñitos son altamente susceptibles a la infección, misma
que viene de alguna bacteria o de un virus. Los síntomas acusan una ligera
calentura, fastidio y llanto y pérdida de apetito. Llame de inmediato al
proveedor si cree que su niño(a) tenga infección de oído.
Calentura (fiebre)
Tome la temperatura del bebé en la axila a menos que su proveedor indique lo
contrario. En el recién nacido, una temperatura menor de 97˚ o mayor de
100˚ F (36˚ / 37.8˚ C), es de preocuparse –llame de inmediato al proveedor.
Con calenturas más moderadas, esté al pendiente de infecciones de oído u
otras enfermedades serias. Llame al proveedor y siga sus indicaciones para
administrar un analgésico líquido que no contenga aspirina.
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La seguridad de su bebé
Viajando en auto
La causa más común de fallecimientos de bebés: accidentes de automóvil.
La mayoría de estas fatalidades pueden evitarse mediante el uso correcto
de sillas de seguridad para auto. Ponga siempre a su bebé en una silla de
seguridad que sea aprobada para su auto y al instalarla, siga con cuidado las
instrucciones del fabricante. Cerciórese que el bebé esté bien sujeto a este
asiento antes de ponerle cobijas. Nunca sostenga en brazos al bebé cuando
esté en movimiento el carro, no importa lo corto o breve del viaje.
Para mayores informes, visite el sitio Internet del Centro de Recursos de los
Asientos de Seguridad para Niños (‘Child Safety Seat Resource Center’) en
www.childsafetyseat.org, o llame al 1-877-793-2608.
Ahogamiento –prevención
Segunda causa más común entre las muertes accidentales de infantes: ahogo.
El recién nacido puede ahogarse en menos de 2.5 cm (menos de 1 pulgada) de
agua, en cuestión de minutos. Nunca deje solo al niño en la tina, no importa
el tamaño de ésta. Si es necesario alejarse para ir por algo, llévese al bebé.
Apague el teléfono, deje que conteste la grabadora mientras esté bañando al
niño. No vale la pena correr el riesgo dejándolo en la tina por contestar el
teléfono.
Caídas –prevención
Al poco tiempo de nacer, los bebitos empiezan a menearse y a empujar con
los pies las cosas que los rodean. Incluso estos, los primeros movimientos
simples, pueden resultar en caídas. Nunca deje solo al bebé sobre la mesa
donde lo cambia, ni en la cama, el sofá o en silla alguna. Si necesita dejarlo
solo –aun por un segundo– póngalo en un lugar seguro como la cuna o el
corralito de juego.
Quemaduras –prevención
Jamás cargue al bebé mientras lleve al mismo tiempo comida o líquidos
calientes. Protéjalo contra escaldaduras o quemaduras del agua de la llave:
baje la temperatura del calentador de agua a 120˚ F (48˚ C).
Si llega a quemarse la criatura, meta de inmediato en agua fría el área
lastimada y manténgala ahí hasta que deje de llorar; cubra luego la quemadura
con una venda holgada o un trapo limpio y llame al proveedor.

La seguridad de su bebé
Atragantamiento –prevención
Nunca coloque a su bebé en camas de agua o sobre almohadas o cosa alguna
tan suave que le cubra la cara, nariz o boca. No deje almohadas o animales de
peluche en la cuna.
Reduzca el riesgo de síndrome de muerte
infantil súbita o SMIS
Para dormir, coloque siempre al bebé de espalda, no sobre el estómago ni
de lado. Esta práctica, de “darle la espalda al sueño”, ayuda a disminuir la
incidencia del síndrome de muerte infantil súbita: ‘SMIS’ (en inglés, SIDS).
La Academia Americana de Pediatría recomienda lo siguiente:
• Que la superficie para dormir sea firme, sin materiales suaves u objetos como
almohadas, cobijas rellenas, cobertores o badanas debajo del recién nacido.
No deje objetos suaves o sábanas sueltas en la cuna.
• Evitar exponer al bebé al humo.
• De ser posible, proporcione al bebé un lugar para dormir separado pero cerca.
Cuando el bebé duerme en la misma habitación que la madre, se reduce el
riesgo de SMIS. Use cunas o cunetas que reúnan los requisitos de seguridad.
• Evítese calentar demasiado al recién nacido.
• Procure que la hora de “pancita” sea cuando el bebé esté despierto y pueda
observarlo.
Fumar / tabaquismo
Mantenga siempre al bebé en un ámbito sin humo. El humo ambiental
conduce a infecciones de oído, resfriados, enfermedades respiratorias y
aumenta la probabilidad de contraer asma o síndrome de muerte infantil
súbita (SMIS). Si hay adultos en su hogar que fuman, insístales que fumen
afuera. Si usted fuma y necesita ayuda para dejar el cigarrillo, llame a:
Línea de Recursos de Providence, 503 574-6595 ó al 800-562-8964.
Guarderías infantiles
Sea muy selectiva(o) en cuanto a quienes confiará el cuidado de su bebé.
La gente descuidada, que se enoja o se frustra con facilidad en ciertas
situaciones, puede reaccionar igualmente ante la presencia de un niñito
llorando.
Nunca debe sacudirse al bebé; esto puede causar serios daños al cerebro o aun
la muerte. Si usted o cualquier otra persona que atiende al bebé se enoja o se
exaspera con facilidad, pida ayuda profesional.
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La seguridad de su bebé
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Atragantamiento del bebé: qué hacer…
1. Trate de determinar si el bebé puede respirar, llorar
o toser. Si puede toser con fuerza, quiere decir que,
o hay poco bloqueo o no hay bloqueo alguno, y si
lo hay, el bebé lo podrá despejar.
2. NO EMPIECE A DAR PRIMEROS AUXILIOS
si el niño está tosiendo con fuerza o si hay un
pequeño bloqueo o no hay bloqueo alguno. Si se
suministran primeros auxilios en este caso se puede
empeorar un bloqueo parcial o total. Si el bebé
está tosiendo o llorando, entonces NO HAGA
LO SIGUIENTE sino hasta después de haberse
comunicado con su proveedor para que éste le
aconseje qué hacer…
3. Empiece los primeros auxilios sólo en caso de que el
bebé:
• No puede respirar nada en lo absoluto o bien,
• La vía respiratoria esté tan bloqueada que la
criatura apenas tiene una tos débil y se ve pálido.
4. Si determina usted que existe un bloqueo,
pida auxilio a gritos, marque 9-1-1 y empiece
las técnicas de primeros auxilio como se ven a
continuación:
Para bebés menores de un año de edad:
1. Coloque sobre el antebrazo la cabeza y cara del niño
boca abajo, con la cabecita más abajo que el resto
del cuerpo; apoye la cabeza y el cuello en la mano
suya. Descanse el brazo suyo sobre la pierna para
apoyar ahí, sobre el regazo, al niño.
2. Use el talón de la mano para darle hasta cinco
golpes fuertes al bebé entre las paletas de los
hombros (omóplatos). Véase la Fig. 1.
3. Si no se desaloja el bloqueo, coloque su mano libre
en la espalda del niño sosteniéndole la cabeza.
Voltéelo mientras le apoya la cabeza y el cuello con la
mano, quedando el niño boca arriba en el antebrazo.
Con los dedos medio y anular dé hasta cinco golpes
rápidos en el pecho, por el centro del esternón, con
movimientos de empujón hacia abajo.
NOTA: si le bebé es grande quizá convenga que se lo
ponga atravesado sobre el regazo. Apóyele firmemente
la cabeza, quedando ésta más baja que el cuerpo y
repita los pasos número 1 al 3. Véase Fig. 2. →
4. Repita los pasos 1, 2 y 3 hasta que tosa el objeto o
hasta que el bebé pueda respirar.
Si el bebé no responde o lo encontró ya así,
inconsciente:
1. Colóquelo boca arriba. Álcele la quijada y la
lengua: es lo se llama “alce de quijada” pues retira
la lengua del fondo de la boca y ayuda a abrir
la vía de respiración. Si logra ver ahí un objeto
extraño, retírelo con el dedo. Nunca meta el dedo
directamente en la garganta del bebé. Trate de
alcanzar el objeto solamente cuando lo pueda ver, de
otra manera podría empeorarse el bloqueo mismo.
2. Si el niño no empieza a respirar luego-luego,
inclínele la cabecita hacia atrás y ponga su boca
sobre la boca y la nariz del bebé. Intente soplar
lentamente dos veces y vea si se infla el pecho. Si
se infla el pecho quiere decir que se logró despejar
el bloqueo.
3. Si no se infla el pecho, inclínele de nuevo la cabeza
hacia atrás y repita los dos soplos de rescate. Si aún
así no se infla el pecho, es que todavía hay bloqueo.
4. Golpee la espalda y efectúe los empujones de pecho
hasta cinco veces como se indica en los pasos 1 a 3.
5. Repita los pasos 5 a 8 hasta que la criatura tosa el
objeto o hasta que se logre la respiración de rescate.
6. Luego de efectuar estos pasos durante un minuto,
podrá parar y llamar a la ambulancia. Cargue
al bebé a donde tenga el teléfono y continúe la
respiración de rescate mientras llama y espera el
socorro.
Figura 1 Figura 2

Para que su bebé goce de salud
La elección del proveedor para su bebé
Es importante seleccionar a un proveedor del cuidado de la salud para su
bebé. Si todavía no tiene a uno, puede llamar a nuestro servicio de referencias
de médicos de Providence al 503 574-6595 ó también 800-562-8964. El
personal de este servicio le ayudará a escoger un proveedor que se ubique
a conveniencia suya, que acepte su seguro medico y que respete su filosofía
tocante a los asuntos de familia.
Pruebas metabólicas de selección para los recién nacidos
(es decir, de la sangre)
Poco después del nacimiento de su hijo(a), viene una enfermera y le saca unas
gotitas de sangre como parte de una prueba que exige la ley estatal para todo
recién nacido. Es una toma de sangre sencilla y segura para su bebé con la
que se busca varias enfermedades raras que pueden ocasionar daños al cerebro
u otras complicaciones serias si no se tratan al poco tiempo de haber nacido.
Cuando se descubren a tiempo y se atienden rápidamente tales enfermedades,
se logra prevenir la mayoría de los problemas.
Prueba del oído
El estado de Oregon exige que se le haga una prueba de oído a todo recién
nacido (poco después de nacer). Se le hace hasta dos pruebas selectivas antes
de dar el resultado de “pasó” o de “remítase a”. En ciertos hospitales, su bebé
podrá ir a casa antes de hacer la segunda prueba de selección; en tal caso, se
le haría una cita antes de darle a usted el alta. Si el bebé no pasa la prueba de
selección dos veces, se le remitirá a una clínica de diagnóstico auditivo para
mayores estudios.
Vacunas y medicamentos para recién nacidos
Estando aún en el hospital se le administraran a su bebé algunas medicinas
y vacunas esenciales. Son de rutina pero sería bueno cerciorarse que el niño
reciba las siguientes:
• Vacuna para Hepatitis B –La hepatitis B puede causar serios trastornos al
hígado. En el hospital se le administrara a su bebé la primera de tres vacunas
para hepatitis B.
• Vacuna Tdap y de gripe –Los bebés corren mayor riesgo de tener que ser
hospitalizados o incluso de morir por influenza o de tos ferina (pertussis),
puesto que son muy jovencitos para ser totalmente inmunizados contra tales
infecciones. Cada familia debe cerciorarse que toda persona que tome parte en
la atención del niño debe ser vacunada contra la gripe así como de tos ferina.
• Inyecciones de Vitamina K –La ley estatal exige que todo recién nacido reciba
su dosis de vitamina K, esencial para la coagulación de la sangre. En ciertos
bebitos no existe suficiente vitamina K y si no se les da al nacer, pueden, como
resultado, llegar a tener hemorragias anormales.
• Ungüento oftálmico de eritromicina –Para evitar la posibilidad de una seria
infección de ojos debido a múltiples tipos de bacteria, se le unta eritromicina
en los ojitos de su recién nacido a las pocas horas después del nacimiento.
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Para que su bebé goce de salud
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Plan y programa de vacunas
Las vacunas le ayudan a su bebé a formar defensas que a su vez previenen serias
enfermedades. La mayoría de los bebés e infantes sólo pasan por una leve
reacción a las vacunas –una ligera calentura o un poco de dolor.
Las recomendaciones de su proveedor pueden variar según lo que él o ella
considere ser lo mejor para su hijito(a). Sería también bueno informarse con la
compañía de su seguro para ver qué es lo que cubre.
Atención continua de Providence para niños
A medida que su bebé crece, Providence mantiene mancuerna con usted para
brindarle una amplia gama de servicios del cuidado de la salud con servicios
especiales para los niños. Son servicios que van desde urgencias (en inglés se
les dice ‘Emergency’) y de neurodesarrollo, hasta cirugía pediátrica así como
servicios pediátricos generales. Providence brinda una atención excelente y
compasiva a los pequeños pacientes y a sus familias que tanto los quieren.

NUESTRA MISION
Como personas de providencia
revelamos el amor de Dios a todos,
especialmente a los pobres y vulnerables,
por medio de un servicio compasivo.
NUESTROS VALORES CENTRALES
Respeto. Compasión. Justicia.
Excelencia. Buena administración de recursos.
www.providence.org/pregnancy
Providence Health & Services, un sistema de servicios médicos sin fines
de lucro, es una organización de oportunidad equitativa en la provisión
de servicios del cuidado de la salud y de oportunidades de empleo.
110776 SK 5-11 POST-142 C